Mario Fumero La Adoración y los carismas en el culto Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas Estimado Lector: Este material que pongo en sus manos, lo escribí durante los años 1973 al 1975, mientras trabajaba en mi ministerio en Honduras, lo amplié durante los 12 años de trabajo en España (1982-1995), en donde también lo puse por obra. Lo establecí como principio en las iglesias que levanté, y con los discípulos que preparé. Todas las verdades expresadas aquí representan treinta años de experiencia como evangelista y misionero en toda América. Ha sido el producto de mi reflexión frente a las realidades que he vivido dentro de muchas denominaciones, con variados sistemas de gobierno. Quiero participarle que he revisado todo el material que en su tiempo escribí, casi todo se mantiene firme, pero he ampliado algunos aspectos y añadido nuevos enfoques que complementan los anteriores, junto a una bibliografía muy interesante sobre diversos temas que toco de refilón. Estas enseñanzas se comenzaron a impartir dentro del Discipulado, esto es, en células pequeñas de cristianos formados en relación íntima, por un maestro al cual se sujetan todos los discípulos para crecer y aprender en Cristo, es imposible aplicarlo fuera de esta esfera de células de discipulado y para obtener resultados positivos tendremos que ubicarnos en el cuerpo de Cristo bajo un discipulado y entender que éste es un principio apostólico. No estamos discutiendo, imponiendo ni cambiando nada, solo queremos entender las verdades que edifiquen el cuerpo en Cristo Jesús. Libre Dios a cualquiera que tome este material como patrón o método en una Iglesia sin previa renovación del Espíritu, no obtendrá resultado alguno, más bien profundizará las divisiones que tristemente separan al pueblo de Dios. Léalo, medítelo y después opine sobre lo aquí expuesto. Con todo el amor Cristiano. Mario Fumero La adoracion y los carismas en los cultos Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas CONTENIDO Lección No.1: Como debe ser un verdadero culto de oración y alabanza A. Espontaneidad, control o desorden B. La oración y la alabanza 4 5 Lección No.2: La adoración y la edificación A. La actitud de adoración B. El testimonio como medio de edificación C. La palabra de Dios en la edificación D. El mensaje de Dios en el culto 8 10 10 11 Lección No. 3: Los dones carismáticos en el culto “Dones para la iglesia” A. Las operaciones del Espíritu B. Los dones para edificar a la iglesia 12 12 Lección No.4 Los dones carismáticos en el culto “Dones para todos” A. Los dones que nos capacitan B. Los dones que nos ayudan a actuar con poder C. El control del Espíritu 16 17 18 @ 1987 por Brigadas de Amor Cristiano. Prohibida la reproducción total o parcial de este folleto, por cualquier medio visual o electrónico, sin permiso escrito. Impreso en Honduras. La adoracion y los carismas en los cultos Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas LECCION 1 Como debe ser un verdadero culto de oración y alabanza Objetivo: Describir la forma bíblica y experiencias mayores, por el temor de que acabe tarde espontánea de un culto, donde haya la reunión, no haya transporte, etc. Esto impone libertad en el Espíritu, pero con el tiempo límite al culto y requiere un programa. orden y entendimiento divinos. 3. Sin embargo, aunque el culto programado a veces Proposición: Cuando un grupo se une para adorar es necesario, principalmente cuando hay incrédulos a Dios, lo primero que trata de darle o falta espontaneidad, creo que en sí mismo, es al Señor es su lugar preeminente en la insuficiente para satisfacer las necesidades espirituales reunión y luego compartir unos con y para dejar al Espíritu obrar en forma libre en medio otros para edificarse en la palabra y de su pueblo. Hemos hecho del culto programado un en el amor de Jesús. sistema, en vez de un medio circunstancial; por eso, en cualquier tipo de reunión, el programa es indispensable y fuera del mismo, no ocurre mas nada. A. Espontaneidad, control o desorden Aclaro, la programación a veces es necesaria; es una 1. Lo esencial en un culto a Dios o en cualquier parte, pero no deber ser todo tipo de reunión de adoración y alabanza es la espontaneidad: expresar lo que se siente, dar lo que 4. La espontaneidad en la reunión de edificación y se tiene y compartir las pruebas y bendiciones. Este adoración es de vital importancia para recibir, crecer ambiente debe ser normal en un culto. No debe estar y fortalecer un cuerpo bajo la dirección del Espíritu. regido por ordenes ni por la programación sino por Claro, al tener un culto donde todo viene del Espíritu, el sentir y la convicción de cada cual. Estoy seguro espontáneamente y en orden, se requiere que los que en la iglesia del Nuevo Testamento, que era en las ancianos, pastores o líderes de los grupos, velen para casas, se hablaba, cantaba, oraba, edificaba, etc., en que no se introduzcan cosas contrarias y todo venga en una forma espontánea. Cada uno daba lo que tenía de el orden establecido por la Palabra y el entendimiento. Dios: dones, profecía, sanidades, ciencia, etc. Es por eso que veremos a continuación como y que cosas son necesarias en un culto espontáneo y en 2. El culto ordenado o programado nació por la falta que forma cada cosa debe impartirse al grupo para de espontaneidad. Cuando no existe la motivación del mantener el orden del Espíritu. Espíritu, es necesario que uno dirija y ordene a los que intervienen. Aunque no es lo ideal, resulta mejor 5. La última aclaración es que todo debe venir como que nada. Ante el abuso de los que hablan mucho y el las aguas, que corren con fuerza cuando hay una control de dos o tres, que son los únicos que siempre creciente. Cada uno debe sentir el deseo, la necesidad toman la palabra y carecen de buen testimonio, se y el deber de “dar de gracia, lo que por gracia hemos hace necesario el culto programado. En resumen, recibido” (Mt. 10:8). Mas claro: en caso de faltar la un culto programado o en orden es consecuencia de espontaneidad (que es lo más importante), o haber varios factores, primero: falta de espontaneidad en desorden, se necesitará la dirección como una salida al todos, segundo: falta del Espíritu Santo para conocer problema. Entonces el líder, anciano o pastor tomará la realidad de los asistentes, ya que existe el peligro el control de la reunión. de que los de mala vida sean siempre los que estén dispuestos a hablar, tercero: La vida cristiana, con las limitaciones de tiempo no da lugar a que ocurran La adoracion y los carismas en los cultos Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas B. La oración y la alabanza 4. Pero, ¿Qué pasa hoy en día con la oración? Es solo para pedir, empezamos pidiendo y terminamos 1. La oración y la alabanza son parte esencial de toda pidiendo y aun peor, pedimos cosas tan absurdas: reunión donde Cristo se reconozca como Señor y “Señor, dame una casa, dame una novia, dame dinero, centro. Notemos que orar y alabar están separados; dame este u otro ministerio, etc.” Nuestra posición no obstante, una oración debe llevar alabanza, aunque delante de Dios en oración debe ser, primero: alabar puede ser solo una expresión de la oración. reconocer lo que él es. Aclaremos que es orar y que es alabar. Ambas cosas se Segundo: reconocer lo que soy yo. Luego, pedirle lo complementan y siempre debemos hacer una u otra, necesario para los demás y para poder servirle. No o las dos juntas, porque de ellas depende el éxito en la debe haber oración egoísta o egocéntrica porque esa vida de cada cristiano. oración no es bíblica. 2. Para muchos orar es pedir, pedir y pedir... y estas demandas son solo una parte secundaria de la oración. Orar es hablar con Dios, entrar en relación con él por medio de su hijo Jesucristo (Jn. 14:13, 15:16). En la oración tiene que haber alabanza o reconocimiento del Señorío de Cristo y la honra debida al Dios eterno. Fíjese como inicio Jesús la oración modelo: “Padre nuestro que estas en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra...” Notemos que la primera parte es reconocimiento de que él es para uno... Después, la oración entra al plano de lo que es mas necesario para la vida: “El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy”. Después la oración sigue buscando el perdón y el reconocimiento de nuestras debilidades y errores “Perdónanos nuestras deudas...”, etc. En una oración se debe pedir lo que sea mas importante para sus hijos (Mr. 11:24, Stg. 4:3). 3. Analicemos otra oración, congregacional, con la participación de todos los creyentes, que se encuentra en Hechos 4:24-31. Notemos que los versos 24 al 28 exaltan, a través de la Palabra, la grandeza del Señor y su poder; ésta sí es alabanza o reconocimiento de su Señorío. En el verso 29 aparece la petición clave de esta oración. ¿Qué piden? Observe que piden libertad del Espíritu para proclamar su Palabra en medio de un pueblo “violento y ciego por las tradiciones”; y la parte de sanidades y señales queda como expresión de la soberanía de Dios. Para escribir una carta se necesita lo mas importante: “el papel”; después se escribe. De modo que el papel de la oración es la proclamación de lo que Dios significa para nuestras vidas, el resto es lo que va a ir en el papel. 5. ¿Qué posición debemos adoptar para orar? Esto es un problema para muchos que están acostumbrados a un molde. La posición no es tan importante como la oración misma. Debemos ser conscientes de que la posición es consecuente con la oración y no lo contrario. Por ejemplo, empiezo a orar de pie; de pronto, Dios me toca... me siento quebrantado y me arrodillo. Después experimento una sensación de humillación y me postro en tierra... etc. Lo importante es la espontaneidad: orar como estemos. La oración misma nos hará adoptar la posición según sintamos la presencia de Dios. El siempre esta presente, de modo que cambiar de posición movido por órdenes da la impresión que es una comedia... Algunos pensaran que el arrodillarse es porque Cristo entra al salón... Pero dice la palabra que: “Estará con nosotros todos los días hasta el fin de los siglos”. 6. A veces limitamos la oración por asuntos de posición. Algunos discriminan a otros porque oran sentados o se quedan de pie o se arrodillan, se inclinan rostro a tierra o se acuestan. ¿Qué es esto?, no es nada comparado en sí con la oración misma. Podemos ponernos con el rostro a tierra y con eso no decimos nada, porque a lo mejor la oración no llega ni al techo, por estar llenos de orgullo. Recordemos, cualquiera que sea la posición en que nos encontremos siempre estamos delante de la presencia de Dios. Una vez iba en el carro manejando y, al ir orando, sentí la presencia de Dios. Detuve el auto, salí y me arrodillé. Cuando lo hice era porque desde horas antes sentía la presencia de Dios. La adoracion y los carismas en los cultos Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas Así que debemos empezar orando y dejar que Dios nos ponga en la posición según el quebrantamiento o la experiencia espiritual de cada cual; esto, claro está, en cultos espontáneos. 7. Otro problema: ¿En qué forma orar? ¿Uno solo, en grupo, en voz fuerte, en voz baja, en silencio? Algunos acostumbran gritar tanto en la oración que los incrédulos dicen: “Aquel cree que Dios está sordo”; otros lo hacen tan “disimuladamente” que parecen estar haciendo cualquier cosa, menos orando. 8. La oración privada es la más importante porque la vida cristiana es algo muy íntimo. Además, es mas el tiempo que me encuentro distante que unido a los hermanos (Mt. 6:5-8). Al estar solo en oración puedo tener más libertad de expresarme, y aun de hablar en lenguas, que en ningún otro lugar y mucho más que en el culto de la Iglesia (1Co.14), así pues, la vida de oración privada es más importante para el cristiano que ninguna otra forma de oración. Si vamos a la Biblia notaremos que mientras Pedro oraba solo en una azotea tuvo un éxtasis y una visión (Hch. 10:9-10). Y que Pablo, también en oración privada, experimentó revelaciones tremendas (2 Co. 12:1-4). Aun el mismo Jesús se iba a lugares solitarios a orar (Mr. 14:32; 1:35). Esta era la forma mas frecuente de orar. 9. La oración pública en la iglesia debe basarse en el amor. Nos compromete a respetar siempre al hermano de al lado y no sobresalir por caprichos o costumbres. Hay conceptos erróneos: “El culto esta bueno cuando hay mucho ruido y alboroto”. Es cierto que al venir el Espíritu por primera vez, hubo exaltación de ánimo y algunos pensaron que los discípulos estaban locos o ebrios, pero note que es al principio; después tenemos que ir entrando en la vida de profundidad espiritual para recibir cosas mayores. Me he dado cuenta que en los cultos, cuando una persona ora por algo específico no es posible escucharla debido a que otros oran tan fuerte que parece una competencia de “quien grita mas fuerte”. Esto sucede por la falta de educación y doctrina. Cuando siempre ocurre lo mismo en un culto y son las mismas personas las que gritan, se vuelve mas “costumbre que espíritu”. Cuando oramos en el culto La adoracion y los carismas en los cultos debemos hacerlo con el espíritu y también con el entendimiento (1 Co. 14:15). Si uno siente que debe orar solo, los demás deben respaldarlo con alabanzas suaves pero se debe poder escuchar al que está orando. Si se pide a todos que oren, cada uno debe hacerlo como sienta en su corazón pero sin sobresalir en el grupo. Cuando todos oran unánimes y con fervor, se formará un ambiente saturado de amor en el que habrá gran bendición. En la oración de grupo nadie debe sobresalir a menos que el Espíritu toque a alguno en particular, pero no siempre ocurre lo mismo. Lo que se repite siempre es costumbre y rutina. Orar todos juntos es algo así como hacerlo en armonía; es como un coro, en el que todos cantan juntos, y se siente el aroma de la unidad, el amor y la sencillez. 10.La oración espontánea, que nace en el culto, es la más bella de todas las oraciones. Por eso no debemos cerrarnos a orar por ordenes, sino que debemos dejar a cada cual que dé lo que tenga: si canto, canto; si profecía, profecía; si oración, oración. Además, nuestras oraciones deben ser con sencillez de palabra y en forma amistosa con Dios. Orar unos por otros debe ser una parte importante en el culto de las células. 11.orar unos por otros debe ser una parte importante en el culto de las células. Este tipo de oración se ha olvidado, pero es un ministerio importante del sacerdote, intercesor y restaurador (Stg. 5:14-16, He. 13:18, Ro. 15:30, 2 Tes.1:11). 12.Después de aclarar lo que es la oración y como debemos orar, quisiera enfocar la alabanza, no como parte de la oración, sino en su propio sentido. En la Biblia, la palabra alabanza significa “reconocer virtudes de alguien y cosas buenas de algo” (2 Co. 10:18). Cuando decimos: “iQue bien predicas! o “iQue lindo cantas!”, no actuamos bien como iglesia al alabarnos a nosotros mismos o a hombre alguno (2 Co. 10:12). Solo debemos alabar a Dios y esto no es orar, ni pedir, sino reconocer sus favores y misericordias para nuestras vidas. Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas Cuando yo siento el amor de Dios, exclamo: iTe amo, mi Jesús! Cuando veo su paciencia: iGrande es tu misericordia! Cuando veo sus bondades: iQue bueno eres, Jesús! Cuando siento su presencia: iQue dulce eres! Esto es alabanza. Jesús enseñó con su ejemplo la alabanza (Lc. 10:21). Los apóstoles ordenaron alabar a Dios (Ro.15:11, Ap.19:5, Ef. 5:19, Stg. 5:13). Esto no es orar, es expresar mi gratitud al Señor siempre, en todo y por todo (Sal. 119:164, 150:6). 13.La alabanza es más rendición que petición y se constituye en la llave para una verdadera adoración. Cuando estoy delante del rey, reconozco lo que él es, para darle honra y gloria. La alabanza expresa el sentir de aquel que es el amor pleno. Pero puedo alabar a Dios con palabras rutinarias (esto es, como costumbre, como si fuera una grabadora que siempre repite lo mismo, que hace de las alabanzas una muletilla en lugar de una expresión sincera). Por el contrario, la alabanza varía de la misma manera como las experiencias y la revelación de Jesús son progresivas. Hoy digo: Eres maravilloso. Porque hoy lo ví ayudarme en forma maravillosa. Mañana, a lo mejor digo: Jesús, eres encantador. Hay palabras que las consideramos alabanzas pero dejan de serlo cuando las tomamos como costumbre, por ejemplo: amén, amén, amén. Cuando decimos amén se trata de una afirmación que significa “así sea”. Pero a veces creemos que se trata de una alabanza que se usa para poner punto final. “Aleluya”, es una expresión de alegria que cabe cuando sentimos algo especial. Se podría traducir como “alegria”. Es apropiada como manifestación de júbilo pero no necesariamente como alabanza. Evitemos la rutina y busquemos la alabanza y las exclamaciones de acuerdo al sincero sentir y no a la mera costumbre. para que toque mi vida de la misma manera en que lo hizo con mi hermano y así podamos cantar sintiendo lo mismo. Es posible orar cantando y cantar orando. Es parte de un sin número de cosas que podemos sentir y expresar en un culto de adoración a Dios. Conclusión AI finalizar esta lección podemos tener un tiempo para orar y alabar a Dios libremente, pero con orden. Al hacerlo, nuestras vidas saldrán del estancamiento y la sequedad, entraremos a una nueva dimensión: La del Espíritu. Luego continuaremos con las otras partes del culto pero, por ahora, oremos y alabemos a Dios en toda forma, aun cantando. No se trata de cantar por cantar, no es decir algo por impulso, sino de sentir lo que expresamos en forma vívida, de todo corazón. 14.Para muchos la alabanza esta ligada únicamente al canto, pero también se puede alabar en la oración y aun mas, cuando solo hablamos. Alabar a Dios cantando, es una forma de expresión espiritual producto de un sentir (Stg. 5:13). A veces cantamos muchos coros pero no alabamos. No se trata de cantar por cantar, no es decir algo por impulso, sino de sentir lo que expresamos en forma vívida, de todo corazón. De modo que si un hermano canta una alabanza y yo no siento nada, debo alabar a Dios con todo mi corazón La adoracion y los carismas en los cultos Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas LECCION 2 La adoración y la edificación Objetivo: Definir otras secciones del culto que son parte de la edificación del cuerpo de Cristo, esto es la iglesia. Observar ciertas reglas que deben regular la espontaneidad en la adoración pública para evitar el desorden y la falta de entendimiento. Después de haber analizado bien la lección anterior, queremos estudiar ahora sobre la edificación en el culto: conceptos que, unidos a lo que ya hemos visto, formarán la esencia de una verdadera adoración y devoción colectivas, Sabiendo como orar y alabar a Jesús y reconociendo que él es el Señor de todos, veamos la actitud de adoración y edificación. A. La actitud de adoración 1. Cuando estamos delante de Dios en oración y alabanza, tenemos que hacerlo en una actitud de total entrega e intimidad, porque lo importante en el culto no es la posición sino la adoración. La palabra de Dios nos muestra la necesidad de adorar al Señor “en espíritu y en verdad” (Jn. 4:24). Esta disposición de adorar, que equivale a una entrega total, es de vital importancia en la relación de una vida íntima entre un discípulo y su Señor. 2. Notemos que al comenzar a adorar a Dios, en oración y alabanza, a veces es difícil sentirse libre o hacer real la presencia de Dios en nuestros templos. Para sentir a Dios hay que concentrarse en adoración y olvidarse de todos esos afanes diarios que a veces cortan la comunicación con Dios y no dejan sentir su realidad latente en nuestras vidas. En la adoración, ocurre lo mismo que con los sonidos quedos, como el del corazón. Es imposible en una vida activa y llena de ruidos sentir jamás los latidos del corazón; sin embargo, si nos concentramos y guardamos silencio absoluto... esperamos un rato, afinando nuestros oídos a esos sonidos imperceptibles, al cabo del tiempo podremos La adoracion y los carismas en los cultos oír los latidos del corazón y aun más, hasta sonidos jamás imaginados. Así es la comunión con Dios mediante la adoración: empezamos pesadamente, sin mucho, a veces nada; pero, según avanzamos hacia adentro del espíritu este comienza a fluir hacia afuera y sentir el Espíritu de Dios. De pronto, después de cantar con la mente me encuentro que estoy cantando con el espíritu. 3. ¿Donde comienza la adoración? Primeramente empieza en la mente o intelecto. Adoro a Dios con mis facultades, canto con la boca la letra que aprendí de memoria. El culto se inicia en mi mente o conocimiento, de allí salen las primeras oraciones, ideas y cánticos. Es como si marcara los números que me conectan a la línea de Dios para recibir después la comunicación con el Espíritu de Dios, por medio de mi espíritu. Tiempo después de estar adorando a Dios con mi entendimiento, o conocimiento, penetra esa adoración en mi espíritu que empieza a reaccionar y a deleitarse en la ley de Dios. La carne no puede entender las cosas del Espíritu sino nuestro espíritu, ya que para el hombre natural son locura y no las acepta (Ro. 7:2223, 1 Co.2:14). De pronto, ya mi mente esta liberada de las cosas de afuera y se encuentra bajo el dominio de mi espíritu. Mi entendimiento esta sojuzgado; mis expresiones y mi sentir no son producto del esfuerzo humano sino de mi propio espíritu que expresa, por medio de mis facultades, lo que viene de Dios. Ahora canto, no con la mente, sino con el espíritu; ahora oro, no con la mente sino con el espíritu; ahora busco la posición, no con la mente, sino con el espíritu. Cuando nuestra adoración penetra al espíritu, este fluye hacia afuera, ejerciendo dominio sobre el cuerpo pero sin privar al entendimiento, por eso San Pablo dice: Oraré con el espíritu, pero oraré también con el entendimiento; cantaré con el espíritu, pero cantaré también con el entendimiento (1 Co. 14:15). Es por ello que toda adoración, por más en el espíritu que sea, no priva nunca al hombre de su conocimiento Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas o entendimiento, mas bien este se deleita en tal experiencia. Si ocurriera lo contrario, o sea que la persona excluye a su conocimiento en la adoración y no sabe lo que hace, se puede decir que no es una experiencia buena y que necesita liberación pues tales cosas ocurren por manifestación de demonios. 6. Sin embargo, muchos tienen miedo de expresar la emoción en el culto a Dios; pero esta idea es absurda y contraria a la vida normal cristiana. No podemos cohibir las bendiciones del espíritu en su expresión, aunque si debemos mantener el orden y el control del culto. 4. Así pues, la adoración comienza en la mente, pasa al espíritu y este repercute en la mente que expresa el sentir o las experiencias del espíritu. Puede llegar un momento en la adoración en que el espíritu nuestro, por medio de mis facultades que expresan el sentir del Espíritu de Dios, manifieste hasta gemidos e inclusive reacciones en la adoración incompatibles con la mente carnal (Ro. 8:15,26), y estas cosas, claro está, son manifestaciones físicas de experiencias espirituales, o si queremos llamarle científicamente, “experiencias síquicas” ya que para muchos psique es el equivalente al alma con su espíritu. Las emociones deben expresarse en la adoración, con entendimiento, considerando siempre a los demás y sin histeria o carnalidad emotiva, que no son normales. Debemos clasificar las reacciones espirituales emotivas de la adoración en tres clases: 5. Es absurdo, por lo tanto, que en la adoración que comienza en la mente, pasa al espíritu y repercute de nuevo en la mente, excluyamos la participación de la emoción. La emoción es la realidad inseparable de todo sentimiento psíquico o del alma. Es imposible expresar un estado del alma independientemente de la emoción, pues un ser humano sin emociones es algo así como un androide (figura humana electrónica). Algunos dicen: “Eso es emocionalismo”, al ver las manifestaciones del Espíritu, “Eso pasará”, y aunque puede haber adoración emocionalista, no siempre podemos afirmar lo mismo. Por ejemplo, si usted está mucho tiempo alejado de su hogar y ama a su familia, ¿Cómo actuaría cuando regresa? ¿Llegaría como si fuera a un negocio o donde un amigo cualquiera? ¡Verdad que no! Cuando vemos a nuestro equipo deportivo triunfar en un estadio, ¿acaso nos quedamos quedos, sin reaccionar? Si recibo una noticia funesta, ¿actúo como siempre? ¿No son la risa, las lágrimas, el grito o las manifestaciones de amor, parte normal de las emociones humanas? Solo podrá un hombre sentirse sin emoción bajo el efecto de la droga o la enfermedad mental que lo priva de su capacidad de razonar y entender las cosas; de lo contrario, en todos los aspectos de la vida, el factor emocional interviene y mas aun en la adoración. 1) Emoción carnal: la que se origina en nuestra mente y no en nuestro espíritu... no se profundiza. Es rápida y sugestiva. Cuando la mente acepta algo y lo expresa, sin canalizarlo al espíritu, ni probarlo en la vida, se trata de un sentimiento natural o pasajero. 2) Emoción histérica: es aquella que entra a la mente, pasa al espíritu y se queda en nuestra mente pero priva a la persona del control o dominio propio, dando rienda suelta a manifestaciones sin entendimiento. También puede ser algo carnal y pasajero producido por fuertes impresiones psicológicas en la mente, pero que nunca pasan al espíritu. También ocurre en un espíritu sin educación cristiana o dominio propio (experiencia común en la comunicación persuasiva que produce histeria colectiva). Siempre deja un rastro de emocionalismo evaporable y en muchos casos causa daño. 3) Emoción normal: la que produce en el ser humano una reacción adecuada y con entendimiento frente a las experiencias de la vida espiritual. En el caso de la adoración, se da cuando nuestra mente expresa lo que el espíritu manifiesta sin anular el control del cuerpo. Es cuando el espíritu de Dios viene a nuestro espíritu, y este a su vez toma nuestra mente y entendimiento para expresar las emociones de acuerdo al marco que nos rodea. Toda emoción, por fuerte que sea, se puede dominar o controlar siempre que estemos dispuestos, usemos entendimiento y tengamos formación cristiana. Por eso, Dios puso en el cuerpo “ministerios” para que, mientras sirven, ejerzan los dones del espíritu, La adoracion y los carismas en los cultos Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas que eviten los abusos emotivos o de expresión. Y en relación a los ministerios de la Iglesia, aclaro que estos han sido puestos, no para frenar, sino para cuidar del orden del culto. De modo que si tomamos en cuenta nuestra posición en la oración, si aceptamos las emociones solo como medio de expresión del espíritu, entonces podemos concluir afirmando que la verdadera adoración envuelve el uso del cuerpo (manifestación), del alma (emoción) y del espíritu (experiencia). B. El testimonio como medio de edificación: En un culto no todo es adoración (aunque esto es lo más importante): debemos esperar otras manifestaciones que edifiquen el cuerpo de Cristo. De ello hablaremos en este tópico ya que implica nuestra comunión con Dios y con los hermanos. Las otras partes que edifican la vida dentro del culto son: las palabras de testimonio, las lecturas bíblicas y salmos, las profecías e interpretaciones, la operación de los dones y el mensaje de Dios a través de sus siervos. 1. Trataremos ahora del testimonio en el culto. Podemos esperar de Dios palabras de aliento o estímulo y testimonios dados a cualquiera de los presentes, en el momento menos esperado. Cuando hay espontaneidad, el Espíritu Santo se encarga de poner las palabras en la boca de cualquiera de sus hijos, según la necesidad especifica de todos los reunidos. Esa es la parte que llamamos testimonios, la cual se ha vuelto rutina programada; e incluso a veces caemos en la simpleza de la repetición, con expresiones como: “Doy gracias a Dios por la salvación de mi alma y el perdón de mis muchos pecados”, siempre decimos lo mismo y a veces hasta proclamamos cosas que no edifican. Evitemos hablar por órdenes o por decir algo, sino porque tengo algo de Dios que será de bendición para todos. Un testimonio no es mera repetición sino una participación en el culto para compartir experiencias recientes, revelaciones, necesidades y palabras de aliento. 10 La adoracion y los carismas en los cultos 2. Un testimonio no es mera repetición sino, una participación en el culto para compartir experiencias recientes, revelaciones, o necesidades, expresar palabras de aliento o estímulo, etc. Pero estos testimonios deben brotar de la persona como ríos de agua viva, como reacción impulsada por el Espíritu, en el momento que siente expresarlo. El que da la palabra en tales casos, es Dios para el bien de la iglesia. Claro está, en un sistema donde se impone hablar lo mismo, por los mismos y todo esta programado, aunque el espíritu quiera mover algo nuevo, no puede. 3. Un culto es una manifestación de Dios en varias formas, gobernado por el Espíritu y la espontaneidad. En cualquier momento, al inicio, en el medio o al final, pueden aparecer los testimonios, a lo que llamaremos edificación. Quisiera enfocar la palabra edificación ya que hemos degenerado la palabra testimonio; por edificación entendemos que es la forma de compartir una experiencia para el bien común (1 Co. 14:26, 2 Co. 12:19, 1 Tes. 5:12, Jud. 20). Al hablar, tomaremos en cuenta la importancia de la edificación y evitaremos hablar palabras torpes. 4. Para concluir, nos preguntaremos: ¿Cuánto tiempo debe durar un testimonio o palabra de edificación y cuando se debe hablar en tal sentido? Respecto a cuanto tiempo debe hablar, depende del número de personas: mientras mas grande sea el grupo, mas corta será la participación; en realidad no es la mucha palabrería sino la convicción del que habla. Lo ideal: pensamientos claros y concretos. ¿Cuándo se debe hablar?, cuando se sienta la dirección del Espíritu y haya oportunidad. Debemos evitar el abuso y el desorden, porque cuando el Espíritu usa a una persona para dar una bendición lo hace en orden. No es adecuado, por ejemplo, que una misma persona dé varios testimonios, en una sola reunión, mientras los otros no hacen nada. Recordemos que en el culto todos son necesarios, y Dios puede hablar a una vida a través de cualquier persona. C. La palabra de Dios en la edificación: 1. Otra parte del culto que se debe considerar necesaria es la lectura de la palabra de Dios, pues la Biblia dice que debemos edificarnos en la palabra y con Salmos (Ef. 5:19, 2 Ti. 3:16). ¿Cómo leer la Biblia Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas o edificarse en la palabra? Toda buena obra debe nacer, como hemos dicho, en un ambiente que responda a la necesidad y no a la mera rutina. D. El mensaje de Dios en el culto 1. Una vez que se Ie haya dado a Dios la adoración que merece, y una vez que el Espíritu Santo haya 2. Según el principio apostólico parece que varios repartido palabras de estímulo y edificación, debemos leían diferentes partes del Antiguo Testamento durante esperar y recibir el mensaje de Dios que puede venir el culto, principalmente los salmos. También leían las por medio de la predicación, la interpretación o la cartas o epístolas de los apóstoles, ya que no tenían el profecía. Nuevo Testamento en un solo libro, como nosotros. Dejaremos los aspectos de la interpretación y la profecía Quizás algunos hacían alusión a las palabras de Jesús, para considerarlos en otro capítulo y hablaremos de la que guardaban en sus corazones y que llenaban de predicación. gozo a los presentes. Lo que ocurre hoy día con las Escrituras es que cuando algo abunda se desprecia 2. El mensaje dentro del culto y de la renovación del y no se le da la importancia debida; pero en la era espíritu debe dirigirse a las necesidades inmediatas del apostólica, como no había Biblia, ni imprenta, las pueblo de Dios para la edificación del cuerpo. (Dentro verdades transmitidas de boca en boca tenían un valor del esquema del discipulado, el evangelismo opera fuera de la Iglesia local, al igual que la capacitación de tremendo para los cristianos. los nuevos convertidos; al unirse estos dos esfuerzos 3. Al ministrar la palabra de Dios en el culto actual forman un fundamento en la Iglesia). Así que, cuando debe hacerse con la misma sencillez y devoción que la iglesia se reúne no es para evangelizar sino para crecer y edificarse, renovarse, trazar pautas y esparcirse. antes, tomando en cuenta lo siguiente: En estas reuniones el mensaje traerá vida, conceptos, principios y metas para todos los discípulos a fin de a)La necesidad del grupo de acuerdo al Espíritu. b)La exposición no debe ser muy larga y debe que unidos alcancen la estatura de Cristo. concentrarse en metas fijas, determinadas por el grado 3. Dentro del esquema de la iglesia renovada por de crecimiento de la iglesia. el Espíritu, el discipulado opera en armonía con los ministerios, los dones carismáticos y la adoración. El La exposición de la palabra de Dios no mensajero debe transmitir pautas acordes a las metas debe ser muy larga y debe concentrarse en y necesidades de esta renovación. Podemos concluir afirmando que la proclamación del mensaje de Dios metas fijas determinadas por el grado de será la pauta, al integrarse la iglesia en grupos pequeños crecimiento de la iglesia. de discípulos. Dios nos ayude en esto. Amén. Jn. 9:35 -38; Mr. 14:3-9, Mt. 26:6-13; Lc. 18:9-14; c) Se pueden combinar varios textos o porciones en 10:38-42 relación con los temas que se expongan; y no solo deben limitarse a su lectura sino que también la Dentro del esquema de la iglesia renovada meditación hará que el Espíritu confirme su enseñanza por el Espíritu, el discipulado opera en en los corazones. d) Debe evitarse el monologo: cualquiera que sienta armonía con los ministerios, los dones puede dar palabras o salmos bíblicos en un culto normal. carismáticos y la adoración. El momento mas adecuado para la lectura depende del Espíritu, que da lugar a la espontaneidad. Vale la pena aclarar, antes de concluir, que en el caso de los cultos dirigidos (vea la lección 1:A), todo tendría que ser programado de acuerdo a las necesidades o circunstancias. Recuerde: el control es aceptable, pero lo ideal es que el Espíritu Santo dirija todo. La adoracion y los carismas en los cultos 11 Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas LECCION 3 Los dones carismáticos en el culto “Dones para la iglesia” Objetivo: Determinar cuando y cuales son los dones del Espíritu Santo que deben operar en la iglesia y hasta que punto mantener el orden sin apagar el Espíritu y su obra carismática. pero todos de acuerdo con un plan para llenar las necesidades del cuerpo. Los dones son para cualquiera, tenga o no ministerio o talento... son para todos los que habiendo estado lejos de Dios, se acerquen a él y busquen su plenitud (Hch. 2:39). Después de haber aclarado y definido, en las lecciones 3. Según parece, en 1 Corintios 12:4-11 se mencionan anteriores, que vamos a dar nosotros al Señor y a los nueve dones y operaciones del Espíritu, aunque demás, veremos a continuación las dádivas de Dios podemos decir que hay más. Analizaremos estos para todos los que forman la iglesia; las llamaremos nueve dones y su importancia, tanto en el culto como dones del Espíritu o carismas: provisión de vital en nuestro trabajo evangelístico de discipulado. importancia para entrar a una vida profunda y llena Mencionaremos los dones que sirven para la edificación de la iglesia, que son: lenguas, interpretación y profecía. del Espíritu Santo. Estos tres son más que todo para edificar al cuerpo de Cristo y rara vez sirven para los incrédulos, a no ser A.Las operaciones del espíritu(1Co.12:311) en cosas muy especiales, ya que un indocto o natural 1. Una de las formas maravillosas en que opera el no entiende las cosas del Espíritu. Le siguen los dones Espíritu Santo al llenar una vida de su presencia (Ef. para todo el pueblo que son: discernimiento, ciencia, 5:18), por medio del bautismo del Espíritu (Mt.3:11), sabiduría, fe, milagros y sanidades. es a través de la repartición de dones. Capacita en la vida cristiana para sus diferentes proyecciones dentro 4. Podemos también clasificar los dones en tres tipos, de la obra del Señor. Podemos decir que los dones son según su proyección: semejantes a la caja de herramientas de un mecánico; a. Dones que nos capacitan para saber: ciencia y herramientas que le permiten hacer eficientemente su sabiduría. trabajo de reparación. El Espíritu Santo, en la vida de b. Dones que nos capacitan para actuar: fe, milagros la iglesia, imparte diferentes dones para que podamos y sanidades. edificar para Dios, sin perder el mas mínimo detalle c. Dones que nos capacitan para hablar: profecía, (Ef. 2:21, 1 Co. 3:10). Estos dones son necesarios para interpretación y lenguas. tener mayor capacidad en el trabajo del Señor, trabajo que no es humano sino espiritual. B. Los dones para edificar la iglesia 2. Cada persona posee talentos (capacidades innatas) o dones propios como cantar, hablar, escribir poemas, componer música, etc... Pero estas habilidades son atributos de la persona o del hombre exterior. Sin embargo, los dones del Espíritu son habilidades de la divinidad y los reparte como él quiere (1 Co. 12:11). Se les puede llamar capacidades del Espíritu. También existen los ministerios, que son dados por Cristo, 12 La adoracion y los carismas en los cultos 1. Hay tres dones importantes para la iglesia y la vida del cristiano y son los primeros que analizaremos, estos son profecía, lenguas e interpretación. Además de ser dones para edificar la iglesia, se clasifican como dones para hablar, o sea, se manifiestan a través de la boca. Si vemos la realidad de las iglesias pentecostales notaremos que estos dones se han hecho Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas muy comunes y hasta se ha abusado de ellos, junto al de sanidades, pues los demás casi no se practican. 2. EI don de profecía. Tenemos que distinguir entre el ministerio del profeta (1 Co. 12:28) y el don de profecía; aunque parecen lo mismo, son diferentes. El profeta es separado por Dios para buscar revelaciones y conocimientos de las cosas profundas de la Biblia y las necesidades del pueblo de Dios; es el que intercede y advierte de los juicios de Dios en medio del pecado reinante. Es el que prepara al pueblo para grandes eventos o peligros, sea dentro o fuera de la iglesia. 3. Una profecía no es decir “Mi siervo viene”; “Lobos vienen”; “Hay pecado”, etc. La profecía no es para satisfacer a un individuo, sino para edificar a la iglesia (conjunto). La profecía no reparte cosas materiales como: bienes, esposa, lotería, etc., ni es algo lógico como decir: “vienen problemas”, ya que sin estas declaraciones podremos saber, por el sentido común, que hay problemas, y que en un grupo grande crecen juntos el trigo y la cizaña. La profecía en la iglesia trae palabras de estímulo, aviso o anuncio de eventos futuros acordes con la palabra, y su revelación es precisa y no vaga. Este don es seguro y opera no para bien de intereses personales, sino para el bien común. Si estudiamos las profecías del Antiguo Testamento notaremos que siempre que Dios daba profecías aludía a un grupo y no a los intereses de una persona. Cuando se refería a una persona, como en el caso del Rey Belsasar (Daniel 5) era porque este individuo involucraba a un grupo, su reino y así anunciaba el juicio para todo el pueblo de Babilonia. 4. La profecía debe ser concreta, clara. Se debe ministrar en el cuerpo o iglesia (1 Co. 14:5, 23,24) y no en privado, o en grupitos pequeños, como si se tratara de un consultorio. Fuera de la unidad de la iglesia, no fomenta la edificación sino la división del cuerpo y satisface fines egoístas y humanos; es profecía carnal. Una vez conocí el caso de una hermana con don de profecía que tenia consultorio en su casa, algunos le iban a preguntar: “Quiero saber quien será mi esposa”, “Dígame si voy a tal sitio o no”, etc. Experiencia errónea que destruye el propósito de los dones. Repito y subrayo: toda profecía es para bien de todo el cuerpo y no es por capricho humano ni para fines particulares (Ro. 12:5-6; 2 Pd. 1:19-20). Toda profecía es para bien de todo el cuerpo y no es por capricho humano ni para fines particulares. El don no opera por mi deseo, ni cuando quiera, ni los días que quiera, porque está controlado por el que los da: el Espíritu Santo “reparte a cada uno en particular como él quiere” (1 Co. 12:11). La expresión “como él quiere” significa que el Espíritu controla, da y quita según le place. De modo que los dones no son permanentes, sino temporales y latentes. Imagínese que los dones operaran por mi deseo, todo el tiempo que quisiera, entonces pondría un consultorio y haría dinero, lo explotaría. Si fuera don de sanidad iría a un hospital y no quedaría un solo enfermo. Si se tratara del don de hablar en otros idiomas, hablaría una lengua cuando yo quisiera, etc. No es asunto ni capricho humano, sino operación del Espíritu de acuerdo a la necesidad y a la voluntad de Dios. 5. Como conclusión, el don de profecía es traído por el Espíritu al conocimiento y de ahí expresado por nuestras palabras (2 Pd. 1:19-21); es necesario examinarlo y probarlo antes de aceptarlo, pues dice la Biblia: “Probad los espíritus” (1 Jn. 4:1) y ninguna profecía es de interpretación privada, sino colectiva. No debemos aceptarla de improviso, sin examinarla y probarla en nuestro espíritu, hasta que reciba la confirmación de Dios. 6. Ahora hablaremos de el don de lenguas, que figura en la Biblia como una señal de la experiencia carismática (Hch. 10:46). Pero aquí nos referiremos a las lenguas como don, o sea, como manifestación subsiguiente al bautismo; por lo tanto, todos podemos ser llenos del Espíritu, pero no todos tendremos el don de lenguas. El don de lenguas es, al parecer, el más común en nosotros; podemos ver su énfasis en las Iglesias pentecostales, pero existe mucho abuso y hasta contradicciones en su manifestación en el culto. El don de lenguas es la manifestación del Espíritu Santo, por medio de nuestro espíritu, a través de nuestro entendimiento, nuestra mente y nuestra La adoracion y los carismas en los cultos 13 Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas boca, en palabras ininteligibles que se expresan sin pensarse, ni gestarse en la mente, fluyen del Espíritu. Dice San Pablo que no se habla a los hombres sino a Dios pues nadie entiende, aunque por el Espíritu habla misterios (1 Co. 14:2). Luego afirma que aun nuestro entendimiento, cuando las lenguas brotan del Espíritu, “queda sin fruto” o mejor dicho, no las entiende (1 Co. 14:14). Es por eso que es necesario estudiar bien la primera lección de este material (tópico A) para captar mejor esto de entendimiento y emociones expresadas en el espíritu. es mas bien para edificación individual que colectiva (versos 6,12,13,19). Después Pablo analiza las lenguas como señal a los creyentes, del dominio del Espíritu, pero advierte sobre el desorden que se observa cuando todos, a la vez y fuertemente, hablan en lenguas en la reunión de la iglesia; pone el ejemplo de que si entra un incrédulo, ¿Qué pensará?, ¿no dirá que están locos? (versos 22,24). No es lo mismo que demos testimonio a un incrédulo de las lenguas y la obra del Espíritu, en particular, a que entre y vea a todos hablando en lenguas en desorden. 7. Y si no las entiendo, entonces ¿por que las hablo? Las lenguas son expresión interna de nuestro espíritu controlado por Dios. ¿Por qué tan solo la lengua?, porque es nuestro miembro mas difícil de domar y el mas destructivo, según Santiago 3:1-7; si el Espíritu logra dominarla es porque ya tiene controladas todas las demás facultades humanas. Las lenguas, como don, desempeñan dos funciones en la vida cristiana: 9. ¿Para que se reúne la iglesia?, no es para hacer ruido o alboroto solamente, sino para la edificación. “Cuando os reunís, cada uno de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua, tiene revelación, tiene interpretación. “Hágase todo para edificación” (vs. 26). “Cuando os reunís, cada uno de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua, tiene revelación, tiene interpretación. Hágase todo para edificación” Primera: para la edificación propia, ya que orar en lenguas por el espíritu que fluye; además, indica comunicación entre el hombre interior (espíritu) y el hombre exterior (mente-cuerpo) (1 Co. 14:1415). Por lo tanto, las lenguas en el culto privado no tienen ninguna restricción, ni tampoco como señal Para aprovechar el tiempo del culto y edificarnos al del derramamiento del Espíritu Santo. máximo, es necesario entender el lugar y el uso de Segunda: el don de lenguas en la iglesia debe ser cada don, según el orden del Espíritu (v. 40). Si alguno seguido por la debida interpretación, para que no solo en el culto habla lenguas, fuertemente, que callen el que la expresa se edifique sino también los demás. los demás; deben esperar la interpretación y después adorar a Dios; no deben hablar mas de tres personas 8. Ahora viene lo sólido: el don de lenguas dentro en lengua extraña, por turno y en cada caso, se dará de un culto tiene muchas limitaciones, ya que se interpretación (vs. 27,28); de lo contrario, sería causa condiciona su uso a la debida interpretación. En todo de desorden y demostraría falta de entendimiento. el capitulo 14 de primera de Corintios, San Pablo da más importancia a la profecía o la interpretación, que al uso exagerado de las lenguas a cada momento. En el verso 5 dice que aunque desea que todos hablemos en lenguas, el prefiere en el culto que profeticemos, esto es, hablar claro la Palabra de Dios; admite las lenguas en el culto, en voz alta y sobresaliendo, solo cuando vayan acompañadas de su interpretación, pues esto es lo que edifica a los presentes. Pablo coloca en un grado de mayor importancia el uso de otros dones que el de lenguas dentro del culto, ya que este don 14 La adoracion y los carismas en los cultos ¿Y que ocurriría si varios hablan, a la vez, fuertemente?, según la palabra de Dios, el que ministra, los ancianos, tienen autoridad para llamar la atención y decirle a los tales que sujeten sus espíritus a los profetas (vs. 32). Es decir, que se controlen, ya que nunca el Espíritu Santo priva del entendimiento o dominio propio. Además, este orden nos ayudará a crecer mas y alcanzar mayores bendiciones de Dios, porque si al recibir una pequeña porción del Espíritu nos descontrolamos, ¿cómo podrá el Espíritu darnos mas ricas bendiciones?, ¿cómo nos llevará a las profundidades de sus riquezas? Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas 10.Una vez fui a predicar a una iglesia; continuamente varios hermanos hablaban en lenguas, todos a la vez, y no se podía predicar. Finalmente, les reprendí y les dije: “Hermanos, controlen el espíritu y guarden silencio”. El pastor se molestó por lo que dije y respondió: “Hermano, no apague el Espíritu”. (como idiomas) y alguno, humanamente hablando, sepa tal idioma y lo traduzca. Cierta vez, en una iglesia que visitaba, una anciana hablo en lenguas y un judío presente, asustado, se levanto y dijo: “Esa señora habla de Cristo en hebreo antiguo y dice que Cristo viene pronto”. La anciana, aunque habló hebreo, no sabia lo que decía, para ella era un misterio; pero para el que Apagar el Espíritu no es mantener el orden, sino escuchó su idioma, resulto comprensible. impedirle operar de acuerdo a lo establecido por la Una experiencia idéntica a la anterior ocurrió en Palabra de Dios, “pues Dios no es Dios de confusión” Hechos 2. Por lo tanto, podemos establecer que (v. 33), sino de orden y edificación. Si alguno quiere existen dos tipos de lenguas: humanas y angelicales hablar fuerte en lenguas o saltar y gritar, váyase a un (1 Co. 13:1); aunque ambas son extrañas para nosotros, lugar solitario, en privado y haga todo lo que sienta; no lo son para el Espíritu, porque el puede dar, junto pero recuerde que en la iglesia no es a un individuo con las lenguas, su debida interpretación. al que hay que edificar, sino a todo un grupo unido en amor, de modo que ajustemos nuestras vidas a esta 13.Queda claro que cualquiera puede recibir unidad y mantengamos el orden del Espíritu en la estos dones en la iglesia pero, mientras no se usen unidad de la fe. Si el hablar en lenguas causa desorden, sabiamente y se alcance la madurez del Espíritu para por no haber interpretación en el culto, mejor “calle” ello, es conveniente esperar y mantener el orden hasta (v. 28) o hable en voz baja, para sí. Los ministerios que Dios opere todos los dones en su culto, como deben mantener orden y control para que el Señor debería ser siempre. pueda realizar la obra profunda y no sea un simple emocionalismo. En la iglesia no es a un individuo al que hay que edificar, sino a todo un grupo unido en amor, de modo que ajustemos nuestras vidas a esta unidad y mantengamos el orden del Espíritu en la unidad de la fe. 11.Por último, analizaremos el don de interpretación. Este complementa al de lenguas, pues para que opere uno tiene que darse el otro; ambos son inseparables en el culto. En esta forma el Espíritu puede combinar hasta tres dones en una misma operación, como las lenguas, la interpretación y la profecía. Pero no siempre la interpretación es profecía; por lo general, la segunda trae palabras de estímulo, aliento o edificación para la iglesia. Cuando una interpretación envuelve advertencia profética o revelación de algo oculto podríamos decir que trae dones diferentes operando en uno solo. 12.La interpretación puede ser: simultanea con lenguas, en secuencia, o que el mismo que habla traduzca, si tiene el don de interpretación. Puede darse el caso que por el Espíritu hable lenguas descifrables La adoracion y los carismas en los cultos 15 Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas LECCION 4 Los dones carismáticos en el culto “Dones para todos” Objetivo: Enfocar ahora los dones no solo para la edificación del Cuerpo de Cristo, sino como ayuda en nuestro trabajo evangelístico, en la vida diaria y en nuestra relación con el mundo incrédulo. Después de analizar los dones que edifican a la Iglesia y que son exclusivamente para los cristianos veremos ahora los que nos ayudan en nuestra capacitación, para actuar con el poder de Dios. A. Los dones que nos capacitan 1. Hay tres dones que nos ayudan a alcanzar profundidad en nuestras capacidades espirituales y a actuar con pleno conocimiento en un mundo lleno de mentira, engaño y manifestaciones demoníacas. Estos tres dones importantes para nuestra vida en el mundo son: sabiduría, ciencia y discernimiento. ciencia para juzgar a su pueblo. Dios se la concedió (1 Ry. 4:29) y vemos su operación en el caso de las dos mujeres que disputaban la maternidad de un niño (1 Ry. 3:16-28). 3. La sabiduría nos ayuda a detectar palabras maliciosas, escollos, a establecer juicios rectos y a dar consejo sabio. Es con ella que saldremos victoriosos en los conflictos humanos y podremos guiar al alma indecisa hacia una vida positiva que toma decisiones seguras. ¡Oh cuánto necesitamos hoy día este don! Hemos querido resolver nuestros problemas con la psicología y los esfuerzos humanos, pero continuamos en ellos. Sin embargo, si buscamos y practicamos este don veremos que, cual luz en medio de las tinieblas, Dios pondrá en nuestro entendimiento soluciones precisas que proceden del Espíritu en lugar de la mente. 4. El don de ciencia. Es semejante al de sabiduría, pero difiere en que el don de ciencia penetra en los No son producto del intelecto, ni del ego, son misterios y secretos mientras que el don de sabiduría capacidades que brotan a través de nuestro hombre se relaciona con los problemas. Ciencia, como don, interior o espíritu. La sabiduría, como don, no es no implica conocimiento intelectual de lo físico, sino humana. El conocimiento y la ciencia, como dones, conocimiento espiritual de lo oculto para la mente. no son la ciencia humana del saber. El don de ciencia revela las preocupaciones o las cosas Estas tres facultades son obra del Espíritu y no de la ocultas de otros, por ejemplo: es el que nos hace sentir carne, porque “Lo que es nacido de la carne, carne es; deseos de orar o ayudar a alguien que no hemos visto, y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es” (Jn. 3:6). porque quizás tiene problemas; es el que también me indica lo que debo o no debo hacer porque encierra 2. Analicemos ahora el don necesario para establecer un peligro. juicios correctos y poder juzgar sabiamente todas las cosas, sin cometer errores; este es el don de sabiduría, Ciencia es conocimiento profundo de las cosas ocultas, que se ocupa de entender y establecer juicios rectos y se trate de asuntos bíblicos o prácticos; si viene del consejos sabios en las dificultades de la vida diaria. No Espíritu es don de ciencia. se trata de una sabiduría producto del conocimiento acumulado por la inteligencia, sino por la operación 5. El otro don que nos capacita es el de discernimiento; del Espíritu, independiente del intelecto, aunque esto es probar los espíritus. Este don es muy importante usándolo como canal. Un ejemplo de lo anterior es el hoy día, ya que por medio del discernimiento podemos Rey Salomón (2 Cro. 1:10), quien pidió sabiduría y saber con quien tratamos y que se esconde detrás de sus palabras, si operan demonios o no. 16 La adoracion y los carismas en los cultos Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas Debido a la ausencia de este don, muchas veces creemos que toda manifestación, lengua o movimiento físico es del Espíritu, e ignoramos que también los demonios se manifiestan tratando de imitar las cosas de Dios. Un cristiano con discernimiento podrá saber cuando está operando en una vida el Espíritu de Dios o los espíritus del error. Probar los espíritus y reconocer el engaño y la mentira es obra del discernimiento. A veces muchos lobos nos engañan, porque al verlos exteriormente decimos “¡Que buenos creyentes!”, quizás porque portan Biblia y hablan lindo. Recordemos que el diablo se vuelve “angel de luz” (2 Co. 11:14) y que falsos profetas se levantarán y engañaran a muchos (1 Jn. 4:1, Mt. 24:11). De igual manera se levantarán falsos hermanos (2 Co. 11:26, Gá. 2:4) y es por ello que debemos probar siempre los espíritus. Este don en nosotros nos ayudará a evitar muchos engaños y manifestaciones contrarias a Dios; podemos conjurar mejor a los demonios que se encuentran a nuestro alrededor. B. Los dones que nos ayudan a actuar con poder 1. Una vez que entendamos la obra de los dones que capacitan, veremos los que nos ayudan a actuar con señales, prodigios y milagros entre el mundo incrédulo. Estos dones dados por el Espíritu, tienen como propósito su ejercicio en la vida diaria, fuera del culto o reunión de la iglesia; son dones que acompañan al evangelismo: fe, milagros y sanidades. 2. La fe. Es tanto un don del Espíritu como del entendimiento, pues cuando creemos, hacemos uso del don innato. Todos tenemos un grado de fe, esto es, capacidad de creer. Don innato es aquel que se encuentra en todos los seres humanos, aun sin ser cristianos. Creemos en algo, aunque sea distorsionadamente: existe fe en todos y vivimos por fe. Esta fe innata se hace mas positiva y crece, a medida que nacemos y crecemos en Cristo; es la que nos da la salvación y la vida eterna (Ro. 5:1, 2 Co. 5:7, Gá 3:12). Sería interminable el análisis de la fe salvadora o innata, pues esta fe que permanece, crece con la Palabra de Dios (Ro. 10:17); pero no es el don del Espíritu, sino la capacidad propia de nuestro espíritu. La fe como don sobrepasa las barreras de nuestro espíritu y entendimiento para darnos confianza absoluta donde terminan la razón y la lógica. El don de fe del Espíritu se encarga de la provisión y expectativa de hechos grandes, decisiones importantes y tareas imposibles para la lógica; obra maravillas llevándonos a dimensiones extraordinarias. Provee en la escasez, da seguridad en la zozobra, opera señales fuera de mí en la medida de mi fe. La fe como don me hace sentir el impulso del Espíritu en ciertos momentos, para emprender tareas que por cualquier otro medio resultarían imposibles. Un ejemplo: sin planearlo y carente de recursos el Espíritu me mueve a ir a determinado país, obedezco, totalmente desprovisto y ya en el viaje, Dios se encarga de suplir todo. La fe como don sobrepasa las barreras de nuestro espíritu y entendimiento para darnos confianza absoluta donde terminan la razón y la lógica. 3. El don de milagros. Impacta extraordinariamente al incrédulo con las señales maravillosas (Hch. 19:11). El milagro solo ocurre por la intervención sobrenatural ya que de otra forma es imposible. En algunos casos de enfermedades incurables que son sanadas milagrosamente, la intervención divina ocurre en lo físico, lo natural, y lo biológico. Todo hecho que ocurra, imposible para el hombre, porque viola las leyes establecidas, se constituye en un milagro. Por ejemplo: a) Aarón lanzó un bastón que se convirtió en serpiente (Ex. 7:9) b) Las aguas del Mar Rojo se dividieron (Ex. 14:21) c) Jesús anduvo sobre el mar (Mt. 14:25) d) Jesús resucita a Lazaro (Jn. 11:43) e) Resurrección de Dorcas (Hch. 9:36-42) La adoracion y los carismas en los cultos 17 Iglesia Brigadas de Amor Cristiano, Colonia Las palmas 4. El don de Sanidades. Note que dice sanidades, en plural, porque son varias, entre ellas la sanidad como señal (Mr. 16:18, Lc. 9:1), la sanidad como obra de fe (fe del que ora o del enfermo que cree). Ejemplos: a) Sanidad por la fe del enfermo (Mt. 14:36,15:2128) b) Sanidad por la fe de otro (Lc. 7:1-10) c) Sanidad del enfermo (Hch. 3:1-10, Lc. 6:6-11) d) Sanidad por el don En este último caso, la sanidad no depende de la fe de nadie sino de la dirección del Espíritu que nos guía a orar en determinado momento por un caso en particular. Este don, como todos los otros, no es permanente. Es decir no opera en cualquier momento sino cuando el Espíritu desea, en el momento menos pensado. 2. Puede ser que hoy Dios me de lenguas; al poco tiempo, el Espíritu provee interpretación; enseguida, me da discernimiento en determinado caso; otra vez, cuando hay necesidad de el, aparece el don de fe; un día nos bendice con ciencia; luego, con sabiduría... y así sucesivamente. En cada situación, el don se manifiesta cuando hay necesidad. Lo importante no es querer tener tal o cual don, sino mantenernos llenos del Espíritu y dejar que él opere. Si tenemos el Espíritu en su plenitud, tendremos también los dones que están en él. 3. La siguiente ilustración lo aclara más: si tengo dinero, puedo comprar de todo; si tengo automóvil y chofer, puedo viajar adonde desee; de igual manera, si tengo el Espíritu Santo, tengo todas las cosas que él mismo da. Dice la Biblia que el Espíritu reparte “a cada uno en particular como él quiere”. De modo que Cualquiera puede ejercer el don de sanidad. Aunque lo que Dios me dé es cosa de él, lo importante es que algunos lo consideran ministerio, creo que es un don esté listo para usarlo cuando y como sea necesario. que se manifiesta a través de cualquier cristiano, tenga Espero que después de todo lo expuesto, obtengamos o no ministerio. No obedece a deseos personales, en nuestra adoración y en nuestra vida diaria, plena sino a la voluntad de Dios, que lo da de acuerdo a la edificación y los carismas necesarios para llenar necesidad del momento. las necesidades de un mundo sin Dios y actuar poderosamente en Cristo. Así sea. Por supuesto que aunque aceptemos la sanidad ministrada por medio del don, no rechazaremos la Dios se manifiesta posibilidad de que la sanidad por fe y la oración de fe también obren. Dios se manifiesta de muchas maneras De muchas maneras para bendecir a la humanidad afligida, a través de su para bendecir palabra. C. El control del Espíritu 1. ¿Cuantos dones puede tener un cristiano? Todos, ya que nuestra meta es alcanzar la estatura de Cristo (Ef. 4:13) y Jesús ejerció todos los dones en su ministerio. Pero al crecer en el Espíritu, descubriremos ciertas enseñanzas maravillosas, como por ejemplo que los dones se van manifestando de acuerdo a la necesidad de cada vida y en el momento oportuno. De modo que aunque muchos creen que tienen determinado don en forma permanente, porque cierta vez Dios los usó, a medida que pasa el tiempo y crecen en el Espíritu, experimentaran y descubrirán que, poco a poco, los dones fluyen en nuestras vidas según la ocasión en que se necesiten. 18 La adoracion y los carismas en los cultos a la humanidad afligida a través de su Palabra.