H istoria Univer sal MENÚ La Prehistoria 508 Las Primeras Civilizaciones 510 La Civilización Griega 518 La Civilización Romana 522 La Alta Edad Media 526 La Baja Edad Media 530 América Precolombina 534 La Europa del Renacimiento 536 El Nuevo Mundo y el Imperio Español 538 La Reforma y la Contrarreforma 540 Las Monarquías Autoritarias en Europa 542 El Siglo XVIII 544 La Era de las Revoluciones 546 La Independencia de las Colonias Americanas 550 La Segunda Mitad del Siglo XIX 552 El Siglo XX 554 AUTOEVALUACIONES SALIR historia universal • Prehistoria Las Culturas Prehistóricas Homo sapiens sapiens 40.000 años Homo sapiens neanderthalensis 100.000 - 40.000 años la Hace más de 5 millones de años, en el África oriental, la evolución de los primates dio origen a los homínidos. El género Homo surgió hace 2,5 millones de años. El Homo habilis fabricó las primeras herramientas. El Homo erectus pasó a Eurasia y, antes de su extinción (hace 100.000 años), llegó a dominar el fuego. El Homo sapiens surgió hace 300.000 años. El hombre de Neanderthal (Homo sapiens neanderthalensis), parecido a nosotros en altura y capacidad craneal (1.400-1.500 cm3), pero más robusto y primitivo, vivió entre hace 100.000 y 40.000 años. El Homo sapiens sapiens, la especie actual, surgió hace 40.000 años. Antepasado de ambos sería el Homo antecessor (hace unos 800.000 años). Homo erectus 1,6 millones de años 100.000 años Homo antecessor 800.000 años EL PALEOLÍTICO El hombre vivía en abrigos y cuevas, de la caza y la recolección, para lo cual fabricó las primeras herramientas (hachas de mano, raspadores, cuchillas). En los inicios del paleolítico inferior (Homo habilis y Homo erectus) utilizaba simples guijarros con una arista cortante. En el paleolítico medio (100.000-30.000 años), la cultura musteriense de los neandertales perfeccionó la industria de lascas. En el paleolítico superior (40.00010.000 años), el Homo sapiens sapiens realizó útiles de piedra, hueso y asta (arpones, espátulas). Creó las primeras manifestaciones artísticas: obras escultóricas, como las «venus», figurillas femeninas de piedra (diosas de la Homo habilis 2,5 millones de años fecundidad), y pinturas rupestres (animales y escenas de caza) de gran realismo. EL NEOLÍTICO Y LA EDAD DE LOS METALES La Revolución Neolítica, se inició hace unos 10.000 años en el Próximo Oriente, con el pulimento de la piedra, la cestería, la cerámica y el tejido, y la sustitución de la economía depredadora paleolítica por la agricultura (cultivo de cereales silvestres) y la domesticación de animales (ovejas y cabras). Del nomadismo se pasó al asentamiento en poblados (sedentarización), donde los excedentes eran almacenados o interAustralopithecus cambiados, dando origen a la aparición del comercio y a una nueva organización social. El uso de la piedra llevó al descubrimiento de los minerales metálicos. Al principio se utilizaron el oro, la Árbol de la evolución humana a partir plata y el cobre para fabricar adornos. La metalurgia del de los hallazgos cobre dio origen al calcolítico (hace 6.000 años). El desmás recientes. cubrimiento del estaño, hace 4.600 años, dio lugar a la Edad del Bronce (aleación de cobre y estaño). La Edad del Divinidad femenina, Hierro se inició en el II milenio a.C. Más abundansímbolo de la fertilidad, te que el bronce y el estaño, rompió la hegemonía procedente de los pueblos dedicados al trueque de minerales. de Catal Hüyük. 508 historia universal • las Culturas Prehistóricas y A mérica Poblamiento y Prehistoria de América Las últimas glaciaciones dejaron al descubierto las tierras del estrecho de Bering. Por este corredor, hace más de 30.000 años, pasaron al continente americano grupos de cazadores siberianos siguiendo las manadas de grandes herbívoros. Avanzando de norte a sur, llegaron a Tierra del Fuego. Con el tiempo, desarrollarían culturas muy diferenciadas entre sí. Representación de la llegada al continente americano de cazadores siberianos, a través del estrecho de Bering. INDUSTRIAS LÍTICAS AMERICANAS Al período lítico corresponden guijarros con arista cortante y puntas de lanza, bifaces, raspadores, etc. El período arcaico (paleolítico superior), más evolucionado, está representado en Norteamérica por las industrias de la cueva de Sandia (14000 años a.C.) y las de Clovis y Folsom (12000-10000 a.C.). Las puntas Clovis y Folsom presentan una acanaladura central en ambas caras, que en América del Sur no aparece en las del yacimiento de El Gobo (16000 años a.C.), en Venezuela, pero sí en las de Inga (Ecuador) y la cueva Fell, en el extremo austral, ambos de unos 10.000 años de antigüedad. Al 8000 o 9000 a.C. corresponden las puntas de perfil triangular. Muy posteriores (4000 a.C.) fueron las puntas con aletas o pedúnculo. Punta de flecha Folsom, cultura de Nuevo México de la que se conservan restos de industria lítica. NEOLITIZACIÓN Entre el 5000 y el 4000 a.C., en la llamada América nuclear (México, Centroamérica, Andes), se inició la sedentarización. Hacia el 3000 a.C. aparece un neolítico asimilable al eurasiático (pulimento de la piedra, agricultura, tejido, cerámica), del que surgirían las grandes civilizaciones precolombinas. Sin embargo, a diferencia del Viejo Mundo, la ganadería tuvo un desarrollo limitado, y no apareció la metalurgia del hierro. En América del Norte, la economía basada en la caza y la recolección persistió hasta la llegada de los españoles: iroqueses y algonquinos en la región de los Grandes Lagos, y apaches, navajos, comanches, pueblo, etc., en las Grandes Praderas. Composición idealizada de un poblado en América del Norte. 509 historia universal • las Primeras C ivilizaciones Civilizaciones del Próximo Oriente Fruto de la Revolución Neolítica, en la llanura formada por los aluviones de los ríos Tigris y Éufrates, llamada Mesopotamia («tierra entre ríos»), surgieron a finales del IV milenio a.C. las primeras civilizaciones históricas. El intendente Ebih-il, estatua de alabastro procedente de Mari (h. 2400 a.C.). SUMERIOS Hacia el 3300 a.C., los sumerios, de origen desconocido, se habían establecido en la Baja Mesopotamia. Estos poblados dieron origen a las primeras ciudades Estado (Lagash, Kish, Ur, Uruk, etc.), gobernadas por un rey llamado en o lugal, soberano absoluto y vicario del dios local. La vida económica giraba en torno al templo. Por necesidades de la administración, crearon un sistema de numeración y un sistema de escritura con punzones sobre tablillas de arcilla (escritura cuneiforme). Ruinas de Uruk, ciudad-estado sumeria que floreció durante el período protodinástico, entre los años 2500 y 2000 a.C. Cabeza de bronce procedente de Nínive. Representa a Sargón I, fundador del primer imperio mesopotámico. ACADIOS Los acadios eran semitas llegados a Mesopotamia en sucesivas oleadas desde Siria y Arabia. Hacia el 2340 a.C., un funcionario semita de Kish, el futuro Sargón I, logró apoderarse del trono y, tras derrotar a Lugalzagisi, unificó Mesopotamia, creando el primer Estado centralizado de la historia, con capital en Akkad. Durante el reinado de su nieto Naram-Sin (h. 22602234 a.C.), el Imperio acadio vivió su ultima etapa de esplendor. Varias ciudades sumerias se independizaron, y la invasión de los guti, semitas nómadas de las montañas atraídos por los fértiles valles, puso fin al dominio de Akkad (2150 a.C.). La estela de Naram-Sin narra la victoria del rey de Akkad, investido de atributos divinos, sobre los Lullubi, un pueblo del Zagros. 510 historia universal • C ivilizaciones del Próximo Oriente III DINASTÍA DE UR El rey Utu-Hegal de Uruk expulsó a los guti y restableció la hegemonía sumeria. La ciudad de Lagash vivió un período de prosperidad bajo el reinado de Gudea (h. 2141-2122). Posteriormente, Urnammu, fundador de la III dinastía de Ur (h. 2100 a.C.), logró imponer su dominio sobre la Baja Mesopotamia y se proclamó rey de Sumer y Akkad. Su sucesor, Shulgi (h. 2093-2046 a.C.), convirtió los reyes locales en simples gobernadores y detuvo varias invasiones. Se creó una red de canales y comunicaciones, incluso un rudimentario sistema bancario, y se reconstruyó el imperio de Sargón I. Finalmente, las guerras contra los pueblos vecinos fueron debilitando el poderío de Ur. Representación en actitud orante de Gudea, rey de Lagash en el siglo XXII a.C. y una de las figuras destacadas del renacimiento sumerio. Astrolabio babilónico. Juego de mesa procedente de Ur, en la Baja Mesopotamia. PRIMER IMPERIO BABILÓNICO El auge de las ciudades Estado (Isin, Larsa, Eshnunna, Mari, Assur) abrió una nueva etapa de luchas hegemónicas. Larsa, imponiéndose a Isin y otras ciudades, conoció el último florecimiento de la tradición sumeria. A principios del s. XIX a.C. había llegado al trono de Babilonia, antigua ciudad acadia situada en los confines de la Baja Mesopotamia, la dinastía casita o amorrea. Su creciente pujanza le llevó, bajo el reinado de Hammurabi (h. 1792-1750 a.C.), a imponer su dominio a las ciudades vecinas y extenderlo a la Alta Mesopotamia. Hammurabi promulgó el famoso Código de leyes, grabado en una estela de diorita, y dio al país una sólida estructura política y social. A la muerte de Hammurabi el poderío babilónico fue decayendo. Mesopotamia fue saqueada por los hititas (1513 a.C.), pueblo indoeuropeo del Asia Menor, y conquistada por los casitas (h. 1530-1160). LOS HITITAS Una de las esfinges que flanqueaban la entrada de Alaca Hoyuk, centro hitita de los siglos XIV-XIII a.C. A finales del III milenio a.C. llegaron al Asia Menor los hititas, pueblo indoeuropeo que se fusionó con la población autóctona. Un rey legendario, de nombre Labarna, organizó el Estado hitita como una monarquía feudal (h. 1700 a.C.). En el siglo XVI a.C., Hattusil I inició la expansión por Anatolia, y Mursil I llegó hasta la actual Siria, y Babilonia. El reino hitita se debilitó después por las luchas intestinas y la presión del Estado hurrita de Mitanni, que tuvo su apogeo entre 1450 y 1350 a.C. El resurgimiento se produjo bajo el reinado de Subiluliuma (h. 1385-1346 a.C.), verdadero forjador del Imperio hitita, que ocupó Mitanni y Siria. Su hijo Mursil II heredó un Estado fortalecido y una gran potencia militar gracias a los carros de guerra tirados por caballos. Finalmente, las divisiones internas aceleraron su decadencia y fueron invadidos por los pueblos del mar (h. 1200 a.C.). 511 historia universal • las Primeras C ivilizaciones Toro alado con cabeza de hombre procedente del palacio del rey Sargón II en Jorsabad. Relieve del rey Assurbanipal, presidiendo una parada militar desde su carro de guerra, hallado en Nínive. ASIRIA Los asirios, pueblo seminómada de pastores y cazadores, muy belicoso, se hallaban establecidos desde el 2500 a.C. en el valle alto del Tigris. En el siglo XVIII a.C. se entronizó en Assur, su capital, una dinastía amorrita, a la que puso fin Shamshi-Adad I (h. 1749-1717 a.C.). Más tarde el territorio asirio fue sometido por el babilonio Hammurabi y, desde el siglo XV a.C., por Mitanni. Tras una etapa oscura, bajo el reinado de Asur-Ubalit I (h. 1365-1330 a.C.), con el apoyo de los hititas y el faraón Amenofis IV, Assur recobró la independencia. A partir del siglo X a.C. resurgió como una gran potencia militar (Imperio Nuevo), que recurrió al terror y la crueldad para doblegar a sus enemigos. La expansión territorial prosiguió con Sargón II (722-755 a.C.), Senaquerib (705-681 a.C.), que asedió Jerusalén, arrasó Babilonia y estableció la capital en Nínive, y Assurbanipal (668-626 a.C.). Tras las guerras civiles y la alianza de los medos con Babilonia, Nínive fue arrasada por Nabopolasar (612 a.C.) y Asiria quedó incorporada al Imperio babilonio. EL IMPERIO NEOBABILÓNICO El resurgimiento de Babilonia se inició durante el reinado de Nabopolasar (h. 625-605 a.C.), general caldeo que se alió con los medos. Bajo su reinado, Babilonia logró dominar la región siriopalestina, llegando al delta del Nilo. Restos del templo de Ninak, en Babilonia, testimonio de la grandiosidad de las construcciones mesopotámicas. Su sucesor, Nabucodonosor II (604-562 a.C.), reconstruyó la capital con fastuosos monumentos, derrotó a los egipcios y destruyó Jerusalén. En cambio, no pudo evitar las luchas intestinas, que no menguaron durante el reinado de Nabónido (556-539 a.C.), quien sucumbió ante la política expansionista del persa Ciro el Grande. Fragmento de uno de los plafones de la Puerta de Ishtar de Babilonia en ladrillo policromado. 512 historia universal • Civilizaciones del Próximo Oriente EL IMPERIO PERSA Hacia el 1500 a.C. llegaron a la meseta irania varios grupos indoeuropeos, principalmente medos y persas. En 550 a.C., el persa Ciro II el Grande, hijo de Cambises, de la dinastía de los Aqueménidas, derrotó al ejército medo e impuso su hegemonía en todo el Irán. Conquistó Babilonia, avanzando hasta el Mediterráneo, y por el este llegó hasta el valle del Indo. Su hijo Cambises (529-521 a.C.) prosiguió la expansión persa con la conquista de Egipto (525 a.C.). Darío I (521-486 a.C.), verdadero organizador del imperio, conquistó Tracia y Macedonia, al norte de Grecia. Restos del palacio, en Pasargada, de Ciro II el Grande, fundador del Imperio persa e impulsor de una política expansionista. Estableció la capital en Susa, que embelleció con grandes construcciones, y reformó la administración y las leyes. Sin embargo, se enfrentó a la rebelión de las ciudades griegas de la costa occidental del Asia Menor que inició las guerras médicas (494-479 a.C.). En 492 a.C., el ejército persa de Mardonio inició la invasión de Grecia, pero su flota fue destruida por una tormenta. Una nueva expedición persa fue derrotada por los griegos en la batalla de Maratón (490 a.C.). Bajorrelieve de Darío I decorando una de las columnas del palacio de Persépolis. Decadencia del Imperio persa Jerjes I (496-464 a.C.), sucesor de Darío, reanudó la campaña contra las ciudades griegas. Tras la victoria en la batalla de las Termópilas (480 a.C.) saqueó Atenas, pero poco después sus naves fueron derrotadas en la batalla naval de Salamina. En pleno esplendor del Imperio persa, Jerjes construyó una fastuosa capital en Persépolis. Fue asesinado en una conjura, y su hijo Artajerjes II luchó en el interior contra las sublevaciones de los sátrapas (gobernadores). Con la batalla de Arbelas o Gaugamela (331 a.C.) Alejandro Magno completó la conquista del Imperio persa aqueménida. La civilización persa había llevado a su esplendor la tradición cultural y artística de Mesopotamia. Tras la dominación macedonia, los nómadas partos crearon un nuevo imperio en las tierras iranias (h. 247 a. C.). Casi un siglo después, Ardacher, príncipe de origen persa, fundó la dinastía sasánida, que regentó el Imperio hasta la invasión árabe, en el siglo VII d.C. Toros alados de tradición mesopotámica en la Puerta de Jerjes I en Persépolis. 513 historia universal • las Primeras C ivilizaciones El Antiguo Egipto Durante tres milenios floreció en el valle del Nilo una de las más brillantes civilizaciones que ha conocido la humanidad. El río Nilo, el más largo del mundo, desciende por el desierto de sur a norte, a través de un valle estrecho y alargado, hasta desaguar en el Mediterráneo ramificado en varios brazos, formando un delta. Cada año, con las lluvias tropicales caídas en el África Central, de julio a octubre el río se desborda y deja una fértil capa de limo que proporciona excelentes cosechas. A mediados del V milenio a.C se asentaron definitivamente en este valle grupos neolíticos camitas y semitas. La agricultura obligó a realizar grandes obras de canalización y drenaje, lo que requería una organización política y administrativa fuerte y centralizada. En la Época Arcaica surgieron dos reinos, el Alto Egipto, en el valle, y el Bajo Egipto, en el delta. Según la tradición, un rey legendario llamado Narmer o Menes unificó el país (h. 3000 a.C.) y estableció la capital en Menfis, situada en la zona de contacto entre el valle y el delta. Mar Mediterráneo Cuatro estatuas sedentes de tamaño colosal flanquean la entrada del templo de Abu Simbel, dedicado por Ramsés II al dios Amón-Ra, durante la XIX dinastía. Gaza Sais Buto Pelusium Busiris Bubastis Tanis (Avaris) Heliópolis Gizeh Saqqarah Menfis Pen. de Meidum L. Moerís Sinaí Heracleópolis Sinaí Hermópolis a Coptos Tebas Hierakompolis Ombos Hermontis r o Edfu Elefantina R Gran oasis M Siena (Assuán) Primera catarata jo 514 Asyut Tinis Abidos ilo Tras la reunificación, los faraones de las dinastías I y II tuvieron su capital en Tinis (época Tinita). Expulsaron a los beduinos del Sinaí e iniciaron la expansión por el sur hacia la Baja Nubia. En esta época se construyeron las primeras tumbas reales, las mastabas, en forma de banco o pirámide truncada. La II dinastía trasladó la capital a Menfis. A la III dinastía (h. 2778 a.C.) perteneció el faraón Djoser, que hizo construir la pirámide escalonada de Saqqarah. Formada por seis mastabas superpuestas, precedió a las grandes pirámides de Gizeh, que construyeron Keops, Kefrén y Micerinos, de la IV dinastía (2700-2580 a.C.). El poder de los faraones fue debilitándose a partir de la VI dinastía (2350-2200 a.C.), y en el Primer Período Intermedio (h. 2190-2052 a.C.), los nomarcas (gobernadores de las provincias o nomos) se habían convertido en señores feudales que gobernaban como monarcas absolutos. Tell el Amarna N IMPERIO ANTIGUO ARABIA Límite del Imperio Antiguo Abu Simbel Buhen Segunda catarata NUBIA Límite del Imperio Medio KUSH Tercera catarata Kerma Cuarta catarata Quinta catarata Límite del Imperio Nuevo Napata Meroe lo Ni Jartum Egipto faraónico. historia universal • el Antiguo Egipto IMPERIO MEDIO El país quedó dividido en dos reinos, que el faraón tebano Mentuhotep II (XI dinastía) reunió de nuevo, iniciando el Imperio Medio. Con Sesostris III, de la XII dinastía, Egipto llegó a uno de los momentos de máxima expansión. Se construyeron los grandes templos de Karnak en honor de Amón, nuevo dios oficial. Las dinastías XIII y XIV abrieron el Segundo Período Intermedio, en el que las luchas sucesorias y la decadencia económica favorecieron la invasión de los hicsos (h. 1720), nómadas de la región siriopalestina que fundaron sus propias dinastías (XV-XVI). Fresco de la tumba del faraón Horembeb, de la XVIII dinastía. Detalle del templo de Karnak. Consta de una serie de edificaciones erigidas por diversos faraones en distintas épocas. IMPERIO NUEVO El príncipe tebano Ahmasis expulsó a los hicsos, fundando la XVIII dinastía. Se iniciaba la etapa de mayor esplendor en el valle del Nilo. Amenofis I y Tutmés I avanzaron hasta Nubia y, por el este, hasta Mesopotamia. La reina Hatshepsut impulsó las expediciones comerciales y construyó el templo funerario de Deir el-Bahari. Bajo Tutmés III (h. 1483-1450) el Imperio impuso su dominio en el Próximo Oriente. La prosperidad culminó durante el reinado de Amenofis III (1405-1367 a.C.), tras el cual estalló la crisis amarniana. Ante el poder de los sacerdotes de Amón, dios de Tebas, Amenofis IV (h. 1367-1350) impuso el culto al dios Atón, tomó el nombre de Akhenaton o Ajnaton y trasladó la capital a Tell el Amarna. A su muerte, el clero de Amón encabezó la restauración tradicionalista. Tutankhamon retornó la capital a Tebas. La XVIII dinastía se cerró con el reinado de Horemheb, que luchó contra los hititas. La decadencia definitiva del Imperio egipcio se inició con las dinastías XIX y XX. Bajo la dinastía XXIII se dividió en pequeños reinos y principados, que cayeron en poder de los etíopes. Al dominio etíope (dinastía XXV) puso fin Assurbanipal II (h. 662 a.C.), quien convirtió Egipto en una provincia asiria, hasta que Nekao II fundó la XXVI dinastía (renacimiento saíta). La invasión persa (525 a.C.) acabó definitivamente con la independencia de Egipto, conquistado más tarde por Alejandro Magno (333 a.C.) y luego provincia romana (30 a.C.). Los Colosos de Memnón, figuras en piedra que representan a Amenofis III. Son los únicos vestigios del templo funerario del faraón. 515 historia universal • las Primeras C ivilizaciones LA CIVILIZACIÓN EGIPCIA La estructura social, religiosa y cultural del Antiguo Egipto se mantuvo invariable a lo largo de tres milenios. El faraón era venerado como encarnación de Horus, el dios halcón (a partir de la IV dinastía, fue venerado como hijo de Ra). Le pertenecían todas las tierras y tenía pleno dominio sobre sus súbditos, agricultores y artesanos. Los nomarcas gobernaban las provincias. La administración estaba a cargo de los altos funcionarios y los escribas. Los sacerdotes tuvieron un papel preponderante, reunieron grandes riquezas y ostentaron importantes cargos públicos. Escena del Libro de los Muertos. En su destino póstumo, el difunto rinde homenaje, en el friso superior, a varios dioses dispuestos en fila y, abajo, a la derecha, Horus le presenta a Osiris entronizado como faraón. Conjunto de figurillas en madera pintada que representa a un grupo de artesanos, hombres y mujeres, dedicados a la elaboración del pan. Los campesinos cultivaban trigo, cebada, lino, mijo y hortalizas, actividades que se complementaban con la caza, la pesca y la ganadería, y estaban obligados a participar en los trabajos públicos. Los esclavos, en su mayoría nubios, pertenecían al faraón. No existía el dinero y para las transacciones internas se practicaba el trueque. Tampoco surgió una clase de mercaderes o comerciantes, pues los intercambios con el exterior eran monopolio estatal. Los funcionarios adscritos a las diversas administraciones y a los templos representaban un gran número de puestos de trabajo. Por su parte, la gran actividad constructora también requirió una mano de obra numerosa. En los últimos siglos, la sociedad se tornó rígida y se estructuró en auténticas capas sociales: nobles, campesinos, ganaderos, pescadores, etc. No hubo ejército permanente hasta el Imperio Nuevo, cuando se instauró el servicio militar obligatorio. La religión fue un elemento decisivo en el Antiguo Egipto. Escriba sentado, figura en piedra policromada. Los escribas eran una parte esencial de la compleja administración egipcia. 516 historia universal • el Antiguo Egipto Osiris, dios civilizador y rey de Egipto, su esposa Isis, diosa madre y del universo, y su hijo Horus, dios del cielo, eran las divinidades principales. En el Imperio Antiguo pasó a un lugar preponderante el dios Ra, divinidad solar de Heliópolis, que en el Imperio Nuevo se fusionó con el dios tebano Amón (Amón-Ra). Otras divinidades importantes eran Anubis, el chacal, señor de los muertos, Tot, dios de la sabiduría, y Hathor, diosa del amor. Las creencias relacionadas con una nueva vida más allá de la muerte dieron lugar a la momificación de los cadáveres y la construcción de grandes tumbas, las pirámides, para los faraones. Horus, representado con cabeza de halcón, Osiris y su hermana y esposa Isis. CRONOLOGÍA Milenio IV a.C. Existencia de dos reinos en el Alto y el Bajo Egipto. Primera unificación. Hacia 3400 a.C. Primer faraón (seguramente el llamado Escorpión). 3000-2778 a.C. Dinastías tinitas. Inicios de la centralización y la burocracia. 2778-2723 a.C. Monarquía centralizada. Capital en Menfis. III dinastía. 2723-2423 a.C. Monarquía absoluta. IV dinastía (los constructores de pirámides). A partir de la VI dinastía, disgregación y feudalización. 2200-2130 a.C. Primer período intermedio. Tras una etapa de decadencia y descomposición, se produce una reacción con la IX dinastía (2040 a.C.). 2130-2065 a.C. Comienza la reconstrucción del poder faraónico. Unidad política y regreso a la monarquía centralizada. 2065-1786 a.C. Imperio medio. Poder faraónico reconstruido (dinastía XI). Centralización (dinastía XII). 1730-1580 a.C. El proceso anterior queda interrumpido por la invasión de los hicsos (hacia 1720 a.C.). Segundo período intermedio, que concluye con la expulsión de los hicsos por la dinastía XVII, al comienzo (desde 1650 a.C.) vasalla de aquéllos. 1580-1344 a.C. Dinastía XVIII. Ahmasis y Tutmosis I, grandes constructores y restauradores del Imperio. La reina Hatshepsut es la primera mujer a la que se reconoce carácter divino. Con Tutmosis III se alcanza la mayor actividad conquistadora (Asia, Nubia). 1372 a.C. Sube al trono Akhenaton, que fracasa en su propósito de relegar al poderoso clero de Amón implantando el monoteísmo (época de Amarna). 1344-1085 a.C. Dinastías XIX y XX. A la primera pertenecen Ramsés I y Ramsés II, éste vencido por los hititas en Kadesh. A la segunda, Ramsés III, promotor de una reforma administrativa y gran constructor. 1085 a.C. Fin del período imperial. 1085-332 a.C. Dinastías XXI a XXX. Tras un período de desmembración feudal, Psamético I (664-610 a.C.), de la dinastía XXVI, inicia la época saíta (capital, Sais). 525 a.C. Los persas invaden Egipto, que en lo sucesivo quedará sometido a poderes extranjeros. 517 historia universal • la Civilización Griega Grecia La civilización de la antigua Grecia fue el germen de la cultura occidental. Durante la Edad del Bronce, habían surgido en la región del Egeo dos importantes civilizaciones, creadas por pueblos de lengua griega. En la isla de Creta, la civilización minoica (2700-1250 a.C.), cuyos vestigios son las ruinas de sus grandes palacios (Cnossos). En la Grecia continental, la cultura micénica (27001100 a.C.), a la que a partir del 1950 a.C. se sobrepusieron los aqueos, vanguardia de las futuras oleadas indoeuropeas, que crearon las primeras ciudades fortificadas (Micenas, Tirinto). Aqueos y jonios se extendieron al área cretense y el Asia Menor. Hacia 1200 a.C., con las grandes migraciones de pueblos indoeuropeos (los denominados pueblos del mar), llegaron a Grecia los dorios, portadores de la metalurgia del hierro. Esta invasión arruinó las culturas del Egeo y sumió la región en una etapa de decadencia (Edad Oscura), que sin embargo daría origen a la cultura de la Grecia clásica. Las monarquías hereditarias fueron sustituidas por monarquías electivas dominadas por una casta guerrera y terrateniente, y la fragmentación del mundo micénico convirtió las ciudades en pequeños centros políticos y religiosos. Las primeras polis (ciudades-Estado) griegas aparecieron en las costas del Asia Menor. Pasadizo de la muralla de Tirinto, enclave micénico. Restos de la sala hipóstila en el palacio cretense de Cnossos. El mundo Egeo. Iliria Mar Ponto Euxino Magna Tracia Adriático Cumas Grecia Tarento Paestum Metaponto Pella Epiro Corcira Tesalia Lemnos Troya Lesbos Bitinia Cízico Tróade r Eólida Eubea Pérgamo Quios Lidia Beocia Orcomenos Ática Cefalenia Teos Eutresis Acaya Éfeso o Elide Corinto Atenas Magnesia Samos Zacintos Peloponeso Micenas Arcadia Naxos Caria Olimpia Tirinto Mileto Laconia Halicarnaso Licia Islas Pilos Esparta Cos Mesenia Xanthos Melos Kameiros Yalisos Mar Mediterráneo Cícladas Thera Rodas Lindos Mar Jónico E g Agrigento Gela e Milai Sicilia Catania La máscara de Agamenón, hallada en Micenas. 518 Frigia Misia a Dodona Thasos Samotracia Imbros M Mar Tirreno Bizancio Macedonia Mallia Gurniá Cnossos Dreros Haghia Tríada Creta Zakro Praisos Festos historia universal • Grecia PERÍODO ARCAICO La invasión doria provocó las migraciones de los primitivos griegos a las islas del Egeo y el Asia Menor, donde fundaron las primeras colonias. Entre los siglos VIII y VII a.C., el exceso de población y la expansión del comercio fueron la causa de una más extensa colonización que llegó hasta el norte de África, el sur de Italia (Magna Grecia) y el Mediterráneo occidental. Las monarquías del período oscuro evolucionaron hasta regímenes aristocráticos, con un Consejo (bulé o gerusía) como máximo órgano ejecutivo y una Asamblea (ecclesia o ágora) formada por todos los ciudadanos, cuyas atribuciones eran muy limitadas. El régimen aristocrático dio paso a las oligarquías (gobierno de unos pocos). A partir del siglo VII a.C., el apoyo popular fue la base de las tiranías. En Atenas sobresalió el tirano Pisístrato (s. VI a.C.). En esta ciudad, símbolo de la Grecia clásica, el gobierno de las tiranías concluyó con las reformas de Clístenes (508-507 a.C.), que extendieron los derechos civiles a amplias capas de población, abriendo el camino a la democracia. Sólo los esclavos quedaron excluidos. En el Peloponeso, Esparta, ciudad de población doria, mantuvo su aristocracia militar. Otras polis griegas importantes fueron Templo dórico del siglo VI a.C, en Paestum (Magna Grecia), dedicado a la diosa Hera. Megara, Samos, Corinto y Egina. LA GRECIA CLÁSICA El período clásico de Grecia, durante el cual el arte y la cultura alcanzaron su mayor esplendor, abarca los siglos V y IV a.C. La expansión del Imperio persa alcanzó a las ciudades jonias del Asia Menor, que encabezadas por Mileto habían recibido el apoyo militar de Atenas. Las guerras médicas (494-479 a.C.) frenaron el avance de los persas hacia Europa y consagraron la hegemonía de Atenas. En la primera guerra médica, los persas fueron derrotados por los atenienses de Milcíades en la batalla de Maratón (490 a.C.). En la segunda, cuando las ciudades griegas se habían confederado en la liga de Corinto (481 a.C.), Jerjes incendió Atenas, pero la flota persa fue destruida en Salamina (480 a.C.) y sus ejércitos derrotados en Platea (479 a.C.). Tras la victoria, Atenas impuso su hegemonía en el mundo griego al frente de la liga marítima de Delos (h. 477 a.C.). Los atenienses reconstruyeron su ciudad y su flota comercial. Atenas alcanzó la cumbre de su prosperidad económica y el máximo florecimiento cultural bajo el gobierno de Pericles (443429 a.C.), quien reformó el sistema político y embelleció la ciudad con hermosos monumentos (Partenón). Al poderío ateniense se enfren- El Partenón, templo de Palas Atenea, que corona la Acrópolis ateniense. tarían a Esparta y Corinto, dirigidas por una poderosa aristocracia recelosa de los regímenes democráticos. Un conflicto entre Corinto y Atenas fue el detonante de la guerra del Peloponeso (431-404 a.C.), en la que Esparta y Corinto se beneficiaron de la alianza con Tebas y la ayuda de los persas. Atenas quedó sometida a Esparta, que impuso el gobierno de los Treinta Tiranos. En el año 394 a.C., una alianza de Atenas, Argos, Corinto y Tebas fue derrotada de nuevo por los espartanos en la batalla de Coronea, pero la creciente expansión de Tebas forzó luego una alianza entre Atenas y Esparta, derrotadas en la batalla de Mantinea (362 a.C.). 519 historia universal • la Civilización Griega ALEJANDRO MAGNO Y EL HELENISMO Tras un breve período de dominación tebana, la monarquía macedonia sometió y unificó toda Grecia. Macedonia era un Monumento país periférico de población griega, con una economía agraconmemorativo de ria, considerado semibárbaro por los griegos «helenizados». la batalla Estaba gobernado por una monarquía militar, cuyo trono de Queronea, ocupaba desde 359 a.C. Filipo II. Aprovechando la debilillanura situada en el centro de Grecia. dad de las ciudades griegas, Filipo derrotó a Tebas y Atenas en la batalla de Queronea (338 a.C.). En esta batalla, que consagró la hegemonía militar de Macedonia sobre los griegos, tuvo un papel destacado el futuro Alejandro Magno (356-323 a.C.), hijo de Filipo, al que sucedió en 336 a.C. Ambicioso, inteligente y culto (había tenido por preceptor a Aristóteles), Alejandro liquidó el Imperio persa (334-331 a.C.) y avanzó a través de Asia hasta el valle del Indo, donde su fatigado ejército le obligó a emprender la retirada. En el camino de regreso, murió en la ciudad de Susa a causa de unas fiebres, cuando aún no había cumplido 33 años. Tras su muerte, las prolongadas luchas entre sus generales (diádocos) desembocaron en la formación de varios reinos helenísticos, que perdurarían durante dos siglos hasta caer bajo la dominación romana. Los reyes macedonios, que no alcanzaron a unificar plenamente Grecia, se enzarzaron en luchas internas y descuidaron la consolidación económica. Los centros económicos se desplazaron a oriente y acabaron desmoronándose los emporios mercantiles de Atenas y Corinto, debido a la competencia de las ciudades emergentes como Alejandría, Antioquía, Pérgamo, Rodas o Delos. Al producirse la decadencia del comercio, la riqueza se identificó con la posesión de tierras, y desarrolló el latifundio, siendo el Estado el propietario por excelencia y los griegos los más favorecidos. Todo ello propició, a lo largo del período helenístico, el estallido constante de revueltas de campesinos indígenas. En algunos lugares, como en Egipto, estas revueltas también tuvieron un significado de rechazo al extranjero. El período helenístico (ss. III-I a.C.) logró la proyección universal de la cultura griega, fundida con elementos de la tradición oriental. El arte helenístico se apartó del equilibrio clásico incorporando el gusto oriental por la ornamentación y una mayor expresividad. Una vez organizada Macedonia y aseguradas las fronteras, Filipo II, se lanzó a dominar Grecia. Mosaico del siglo IV a. C. en el que aparece Alejandro Magno cazando leones junto a Crátero. 520 historia universal Grecia • Dos detalles sobre la batalla de Issos, en la que Alejandro Magno derrotó a los persas. Abajo, el rey macedonio montado sobre Bucéfalo. Derecha, sarcófago hallado en Sidón. Un elefante de guerra decora este plato cerámico griego del siglo III a.C. Itinerario de Alejandro Magno (334-324 a.C.) Extensión del Imperio macedonio a la Yaxde arteAlejandro Magno (323 a.C.) muerte s M a SO C H GETAS r O CA BITINA M MISIA r CAPADOCIA LIDIA Halicarnaso a Mileto LICIA Tarso RODAS CHIPRE CRETA CIRENAICA Sidón Tiro Gaza Alejandría Arbelas Damasco Babilonia Taxila PUNJAB ARACOSIA DRANGIANA INDIA Susa CARMANIA GEDROSIA SUSIANA Persépolis PERSIA G o Á R A B E S o Pé Harmozia Kokala rsico OCÉANO M ÍNDICO a N r ilo O Patala Menfis Tebas IS PARTIA Jerusalén E G I P T O Bactra BACTRIANA AM OP PAR MEDIA lf Ammonium A Hecatómpilos IA IRCAN Ecbatana OP OT A IA e d i t e Cirene r r á n e o MES SIRIA Maracanda AN ARIANA H Issos Issos (333 a.C.) us SM IOS E M M Gaugamela (331 a.C.) Gordium Sardes Egeo ARM FRIGIA IA Tebas Atenas Gránico (334 a.C.) Mar A DI Alejandría Margiana Alejandrópolis N GRECIA R G Ox Indo Pella EPIRO SO o pi AC MACEDONIA IA Bizancio as S CÁU C IO IR IL N e g r o r M a TR GETAS SA Batallas MA Mar de Aral T A S C I E S j o R o Conquistas y expediciones de Alejandro Magno (334-324 a.C.). Sarcófago de Alejandro con escenas de lucha entre griegos y persas. 521 historia universal • la Civilización R omana El Mundo Romano Rómulo y Remo, fundadores míticos de Roma, son amamantados por la loba Capitolina. En el centro de la península Itálica, desde el siglo VIII a.C., los etruscos estaban organizados en una confederación de doce pueblos. Habían desarrollado una brillante civilización influida por las culturas orientales y grecomicénicas. Según la leyenda, Roma fue fundada hacia 750 a.C. por Rómulo y Remo, hijos de Rea Silva y del dios Marte, abandonados junto al río Tíber y amamantados por una loba. La arqueología sitúa el origen de la ciudad en una pequeña aldea existente desde el siglo IX a.C. Formaba parte de una confederación de poblados latinos, gobernados por una monarquía latino-sabina (750-617 a.C.), a la que sucedió una dinastía de reyes etruscos, los Tarquinos (616-509 a.C.). La sociedad romana estaba a la sazón organizada en familias o gens, unidas por un antepasado común, que daba nombre al grupo, y por los cultos religiosos. Las gens se agrupaban en curias, según el lugar de origen de sus componentes, distribuidas a su vez en tres tribus. La escala social distinguía tan sólo dos clases de hombres libres, los patricios, nobles y guerreros con linaje, que detentaban el poder político y económico, y la plebe, formada por los artesanos, los campesinos y los comerciantes. Los esclavos se consideraban bienes patrimoniales. LA REPÚBLICA ROMANA Hacia 510 a.C., los patricios romanos se levantaron contra el último rey etrusco, Tarquino el Soberbio, e instauraron la República, que perduraría durante cinco siglos. El gobierno lo ejercían magistrados electos con mandatos limitados. Los pretores se encargaban de la justicia y la milicia. Más tarde fueron sustituidos por dos cónsules, que en las épocas de crisis designaban temporalmente a un dictador con plenos poderes. A los cuestores correspondía la administración de la hacienda pública. Para poner fin a las luchas entre patricios y plebeyos, a estos últimos se les permitió elegir como representantes a los tribunos de la plebe y, en época muy posterior, acceder a las altas magistraturas del Estado. Cuando la igualdad jurídica hubo acabado con la lucha de clases, la República romana pudo afrontar la amenaza del exterior. Las luchas contra otros pueblos le proporcionaron, a mediados del siglo III a.C., el dominio sobre toda la península Itálica, donde fundaron numerosas ciudades. Tras esta expansión, cuando Roma quiso ampliar su área de influencia, entró en competencia con Cartago, primera potencia naval y mercantil del Mediterráneo occidental, fundada por fenicios de Tiro en el norte de África, cerca de la ciudad de Túnez (h. 814 a.C.). Roma y Cartago se enfrentaron en las guerras púnicas por la hegemonía en el Mediterráneo (ss. III-II a.C.), resultando vencedora la primera. Una vez obtenido el dominio del Mediterráneo occidental, los romanos se extendieron hasta Grecia, el Oriente Medio y Egipto. Grupo escultórico que representa a un patricio romano sosteniendo los bustos de sus antepasados. 522 historia universal • el Mundo Romano LA CRISIS REPUBLICANA Los nuevos territorios conquistados se convirtieron en la fuente de materias primas para Roma, que a partir de entonces, a través del mundo helenístico, fue asimilando la influencia de la antigua cultura griega. Los cambios socioeconómicos surgidos de esta expansión imperialista desembocaron en la crisis de la República. Después de la fracasada reforma agraria de los hermanos Tiberio y Cayo Graco, tribunos de la plebe que combatieron los privilegios de la aristocracia, el general Cayo Mario (107 a.C.), al llegar al consulado, abogó de nuevo por una política favorable a los intereses populares. Su reforma del ejército abrió las puertas de la milicia a las clases menos favorecidas. La reacción de la oligarquía estuvo encabezada por otro general, Lucio Cornelio Sila, que atacó Roma con sus tropas e instauró la dictadura (82-79 a.C.). Años después de la muerte de Sila, Pompeyo, Craso y César formaron el primer triunvirato (59 a.C.). Julio César conquistó y pacificó las Galias, pasando luego a Britania, y más tarde, muerto Craso, se enfrentó a Pompeyo por el consulado. Julio César, hábil político y reformador, llegó a concentrar casi todo el poder en sus manos. Efigie de Marco Emilio Lépido en un denario. Leal a César, formó parte del segundo triunvirato hasta su disolución y conservó la dignidad de sumo pontífice hasta su muerte. César se adueñó de Roma (49 a.C.) e instauró la dictadura perpetua. Con todo el poder en sus manos, acometió un ambicioso plan de reformas, hasta que en 44 a.C. fue asesinado en una conjura tramada por los partidarios de la República, temerosos de que se propusiera instaurar una monarquía. No obstante, los miembros que constituyeron el segundo triunvirato (43 a.C.) pertenecían también al círculo de César: Octavio, Marco Antonio y Lépido. Marco Antonio se alió en Egipto con la reina Cleopatra, que aspiraba a crear un imperio oriental. Octavio, que había logrado apartar a Lépido, le derrotó en la batalla naval de Actium (31 a.C.). Egipto se convirtió en provincia romana, y Octavio regresó a Roma para asumir en solitario el gobierno. Estas columnas son casi los únicos vestigios del templo de Venus Genitrix (Madre) en el foro de César (46 a.C.), en Roma. 523 historia universal • la Civilización R omana EL IMPERIO ROMANO Aparentando respetar la legalidad republicana, Octavio Augusto fue acumulando poder y títulos (imperator, augustus, princeps) y se convirtió en el primer emperador romano (27 a.C.-14 d.C.). Reorganizó el Senado, consolidó las fronteras del Imperio e introdujo el culto imperial. La cultura latina vivió entonces su siglo de oro. Aunque al fallecer, para distanciarse de las monarquías hereditarias, no había designado sucesor, le sucedieron cuatro emperadores de su misma familia (dinastía Claudia-Julia), a la que pertenecieron los déspotas Calígula y Nerón. A la muerte de este último (68 d.C.), Tito Flavio Vespasiano, proclamado emperador por las legiones de Oriente, fundó la dinastía Flavia (69 d.C.), a su vez sucedida por los Antoninos (96 a.C.). Octavio Augusto ataviado como sumo pontífice, cargo en el que sucedió a Lépido. El emperador Adriano (117-138) construyó una muralla en Britania, que separaba lo que hoy es Inglaterra de los belicosos celtas. Esta dinastía, tras una etapa de prosperidad, asistió al inicio de la decadencia romana. La dinastía de los Severo (193 a.C.) logró restaurar el orden imponiendo la preponderancia del estamento militar, hasta que sobrevino un período de anarquía (235-268 d.C.), agravado por la llegada de las primeras oleadas de tribus germánicas a la frontera danubiana. El reinado de Diocleciano (284-305) supuso un período de estabilidad, que se mantuvo también bajo Constantino el Grande (306-337). Éste promulgó el edicto de Milán (313), otorgando la libertad religiosa a sus súbditos, que benefició a los cristianos. Miniatura Para centralizar la administración del Imperio, y también por su proximidad a la de Constantino en la víspera de la amenazada frontera del Danubio, trasladó batalla de Puente la capital a Constantinopla (330). Un Milvio en la que general hispano llegado a la dignidad derrotó a imperial, Teodosio (379-395), convirtió el Majencio. cristianismo en religión oficial. Al morir dividió el Imperio entre sus dos hijos. Occidente recayó en Honorio, con capital en Milán y posteriormente en Rávena, y Oriente en Arcadio, con capital en Constantinopla. Italia fue invadida por los visigodos de Alarico (408-410). Años más tarde, las legiones romanas, apoyadas por los godos, obtuvieron su último triunfo militar al vencer a Atila en la batalla de los Campos Cataláunicos (451). Pero los emperadores estuvieron en manos de los jefes germanos, que detentaban verdaderamente el poder, y el año 476 el hérulo Odoacro depuso al último emperador de Occidente, Rómulo Augústulo, creando el reino de Italia. 524 historia universal el • Mundo Romano EL IMPERIO BIZANTINO El Imperio romano de oriente, también llamado Imperio bizantino por el antiguo nombre de Constantinopla (Bizancio, colonia griega fundada en el siglo VII a.C.), vivió su período de máximo florecimiento bajo el emperador Justiniano I (527-565), que volvió a dominar parte de la península Itálica y la costa levantina de la península Ibérica. Mandó compilar el Corpus Iuris Civilis, recogiendo la antigua tradición jurídica de Roma, y construyó la gran basílica de Santa Sofía de Constantinopla y los templos de Rávena. La dinastía macedónica (867-1057) consolidó definitivamente la presencia bizantina en Rusia, Macedonia, Basílica de Santa Sofía, siglo VI. Vista exterior Serbia y Bulgaria. Sin embargo, los conflictos religiosos en la que se aprecia la monumentalidad de la cúpula central. debilitaron el Imperio, que en 1054 rompió la unidad religiosa con Roma (Cisma de Oriente). Quedó dividido cuando los cruzados tomaron Constantinopla (1204) y sucumbió, finalmente, ante la invasión de los otomanos (1453). En el ámbito artístico y cultural, había fundido la herencia grecorromana con las influencias orientales y occidentales. Provincias del Imperio romano. Fronteras del Imperio romano en el siglo I ál tico Mar del Norte Eburacum HIBERNIA Ma BRITANIA rB Límites provinciales E S L A V O S Londinium GERMANIA INFERIOR OCÉANO GERMANOS EI H ER M U a Mar C Colonia S RO BÉLGICA DU L U Lutecia MARCOMANOS N Augusta Augusta AT L Á N T I C O GD RO Vindelicum U N E N S Treverorum SFO E BÓ YÁZIGOS EL D Avaricum Carnumtum O BASTARNOS NÓRICO N Lugdunum RETIA Virunum Savaria AQUITANIA R sp E S io Burdigala Milán EN PA TA DACIA NARBON NO R Narbona Viminacium N Rávena IA Génova Massalia M Salona r N e g r o Caesaraugusta LUSITANIA ar ILIRIA M a MESIA Ad Emérita O ARMENIA Tarraco Narona NT riá CÓRCEGA Toletum PO tic ROMA Bizancio EL TRACIA o REINO DE BÉTICA Y E A RE S A Ancira Apolonia BAL BITINI Brindisi CERDEÑA Nápoles Córduba D MACEDONIA PA Gades ENE Pérgamo M a CA Cartago Nova AG ACAYA Mar M L O S PA RT O S Accio (31 a.C.) Tingis ASIA r CO M Cesarea Patras Atenas Tarso ESOP Éfeso Volubilis OTA Mar SICILIA Cirta CILICIA MAURETANIA MI PAMFILIA M Egeo Antioquía Jónico A Ctesifonte MAURETANIA CESARIANA Catania e Cartago TINGITANIA SIRIA NUMIDIA RODAS CHIPRE d CRETA Emesa I R T A A CO G A LA TI A A E O C I NS IA L NE ÁFRICA i t e r r á n e o Damasco Cesarea Cirene Jerusalén Alejandría PALESTINA Á R A B E S CIRENAICA Menfis EGIPTO Ruinas helenísticas de la biblioteca de Pérgamo, en Asia Menor. 525 historia universal • la Alta Edad Media Feudalismo e Islam Los orígenes del feudalismo medieval europeo pueden hallarse, en algunos de sus aspectos, en las sociedades romana y germánica anteriores a las invasiones. Sin embargo, fue en la Europa germánica –ss. V al VIII– donde empezaron a desarrollarse, llegando a su punto más álgido en la segunda oleada de invasiones –ss. VIII al X. Fíbula visigoda en forma de águila. Mausoleo de Teodorico el Grande en Rávena. LOS REINOS GERMÁNICOS A finales del siglo V, tras la desaparición del Imperio romano de occidente, fueron surgiendo en Europa diversos reinos germánicos. Los francos se establecieron en la Galia y Europa central, donde se fundieron con la población galorromana. Los visigodos, de religión arriana, en el sur de la Galia y la península Ibérica. Los ostrogodos dominaron la península Itálica, y aunque intentaron crear un federación de pueblos germánicos, en el siglo VI sucumbieron ante los bizantinos. Por último, los anglos, sajones y jutos se establecieron en las tierras llanas del sureste de Gran Bretaña, donde a finales del siglo VII estaban agrupados en siete reinos (Heptarquía anglosajona). Estos pueblos, organizados en tribus, dominaban la metalurgia del hierro y complementaban una agricultura rudimentaria con la ganadería. En los nuevos territorios, más extensos y poblados, intentaron implantar sus costumbres y su organización social, basada en una monarquía electiva. Sin embargo, siendo minoritarios frente a la población romanizada, se adaptaron a las costumbres e instituciones latinas, en particular la lengua, la religión (católica o arriana) y la monarquía hereditaria. EL PAPEL UNIFICADOR DEL CRISTIANISMO En la última etapa del Imperio romano, la Iglesia había desempeñado un importante papel. Cuando el primero fue sustituido por los reinos germánicos, era la única institución que mantenía una organización administrativa (diócesis, obispados) y la que pudo preservar los restos de la civilización latino-cristiana. En especial, el papa san Gregorio I Magno (590-604) realizó un gran esfuerzo para la evangelización de los pueblos germánicos y la erradicación de las herejías surgidas en los primeros siglos de la Edad Media (arrianismo, monofisismo, nestorianismo). Favoreció además el desarrollo de la vida monástica, cuyas primeras manifestaciones tuvieron lugar en Egipto desde el siglo III, primero con los anacoretas, y más tarde con la primera comunidad religiosa fundada por san Pacomio (s. IV). Estas comunidades se difundieron luego por occidente, donde la orden benedictina extendió por Europa sus monasterios, que preservaron la cultura latino-cristiana durante cerca de mil años. El Triunfo de la cruz. Detalle de un tapiz copto, siglo VI. 526 historia universal • Feudalismo e Islam EL IMPERIO CAROLINGIO El primer reino germano que logró consolidar una monarquía estable fue el de los francos. Clodoveo I, reconocido por el emperador bizantino y convertido al catolicismo, impuso su dominio en toda la Galia y fundó la dinastía merovingia. A su muerte, el reino quedó dividido entre sus hijos, hasta que de nuevo fue unificado por Clotario II (584-629), quien en 613 se proclamó rey de todos los francos. Desde principios del siglo VII, los monarcas merovingios dejaron el gobierno en manos de los denominados «mayordomos de palaCoronación de Carlomagno por el papa León III, cio». Uno de estos dignatarios, Pipino el Breve según una miniatura medieval. (714-768) destronó al último merovingio y entronizó la dinastía carolingia (751) con el apoyo de la Iglesia. También Pipino, al morir, repartió el reino entre sus hijos, Carlos el Grande y Carlomán. Al fallecer este último (771), todo el legado carolingio se concentró en manos de Carlos el Grande (768-814), que pasaría a la historia como Carlomagno. Castillo-fortaleza de Cardona (España), construido en la segunda mitad del siglo IX. Con numerosas campañas militares, Carlomagno conquistó el reino lombardo de Italia, donde reconoció y consolidó el Estado Pontificio, sometió a los sajones del nordeste del Rin, a los bávaros de la actual Alemania y a los ávaros del centro de Europa. Como barrera contra los árabes, creó la Marca Hispánica en el norte de la península Ibérica. Erigido en defensor de la Cristiandad, fue coronado emperador en Roma por el papa León III el día de Navidad del año 800. Su meta era emular al antiguo Imperio romano de occidente, y prestó especial atención al desarrollo cultural y artístico. Aunque su hijo y sucesor, Luis el Piadoso (814-840), mantuvo la unidad del Imperio, los condados en que Carlomagno había dividido sus dominios se hicieron hereditarios, iniciándose la etapa conocida como feudalismo. En Alemania, la casa ducal de Sajonia había afianzado su hegemonía entre los señoríos germánicos. En el año 962, Otón I (936-973), rey de Germania e Italia, fue coronado emperador en Aquisgrán con el mismo ceremonial que Carlomagno. Nacía el Sacro Imperio Romano Germánico, que nominalmente perduraría hasta el siglo XIX. El emperador Otón I coronado por la Virgen María. Miniatura del siglo X. 527 historia universal • la Alta Edad Media Miniatura medieval que representa un acto de donación del señor feudal a su siervo. EL FEUDALISMO El feudalismo nació de la confluencia de diversas instituciones romanas y germánicas, fomentado por la autarquía y el aislamiento. Sus raíces se remontan a los últimos tiempos del Imperio romano, cuando se extendió el latifundismo. De los pueblos germánicos heredó las relaciones de fidelidad que unían a los nobles con su rey, y a los guerreros o vasallos con sus señores. Estos últimos ofrecían su fidelidad y sus servicios a su señor a cambio de su protección, en un pacto que obligaba a ambas partes mediante juramento. Este pacto se establecía mediante el ritual del homenaje que un vasallo prestaba a su rey o su señor. En la ceremonia, el vasallo se arrodillaba ante el señor y juntaba las manos, que aquél tomaCristo crucificado, ba entre las suyas (a veces, recibía del vasallo un beso de fidelidad, el óscucon la túnica lo). Luego, con la mano puesta cubriendo su cuerpo sobre la Biblia o sobre los hasta las rodillas, 1150. Evangelios, prestaba el juramento de fidelidad. Acto seguido se procedía a la investidura, en la que el señor hacía la cesión del beneficio o feudo de forma simbólica (mediante la entrega de una espada a un guerrero, un báculo episcopal a un obispo, un puñado de tierra a un campesino, etc.). Los reyes, los nobles y los señores ejercían sobre sus territorios y vasallos un dominio autónomo, que les facultaba para administrar justicia y recaudar impuestos. La base económica de los feudos era la explotación del campesinado, unido a la propiedad de la tierra (siervos de la gleba). Durante la época feudal surgieron en Europa las lenguas romances (castellano, francés, italiano, etc.) y el arte románico, que se manifestó principalmente en la arquitectura, la escultura y la pintura. Estructura jerárquica de la sociedad medieval representada en un árbol genealógico, según una miniatura de la época. 528 historia universal • Feudalismo e Islam NACIMIENTO Y EXPANSIÓN DEL ISLAM La península Arábiga, cuna de los pueblos semitas, estaba poblada por tribus de pastores nómadas (beduinos). En las inmediaciones de la costa del mar Rojo habían surgido dos ciudades dedicadas al comercio, La Meca y Yatrib. Mahoma (571-632), el fundador del Islam, nació en La Meca. Profundamente religioso, había viajado por Siria y Palestina, donde pudo conocer el judaísmo y el cristianismo. Consagrado al estudio y a la meditación, vio en la religión el elemento aglutinador de las tribus beduinas. Según sus seguidores, cuando contaba 40 años se le apareció el arcángel san Gabriel para anunciarle que había sido elegido por Dios. Ascensión del profeta Mahoma al cielo, acompañado del arcángel Gabriel. Miniatura del siglo XIII. Mahoma predicó una fe sencilla, basada en la sumisión o islam de los creyentes a Alá, dios único y todopoderoso. Su doctrina está contenida en el Corán, el libro sagrado de los musulmanes, donde se hallan los cinco preceptos o pilares de la fe: la profesión de fe en Alá, la oración cinco veces al día mirando hacia La Meca, el ayuno diurno durante el mes del Ramadán (noveno del año lunar de los árabes), la limosna y la peregrinación a La Meca. Páginas de un Corán, el libro sagrado de los musulmanes. Enfrentado a los comerciantes de La Meca, Mahoma emigró con sus primeros fieles a Yatrib, la actual Medina, el año 622 (inicio de la Hégira o era musulmana). Allí encontró mejor acogida, y en 624 tenía el mando de la ciudad, que fue rebautizada como Madinat al-Nabí (la ciudad del Profeta). En 630 tomó La Meca. Cuando murió había unificado todas las tribus de Arabia. Sus sucesores, los califas, extendieron la fe islámica desde el Próximo Oriente al Asia central. Muhawiya, gobernador de Siria, fundó el califato omeya de Damasco (661-750), al que sucedió el califato abasí de Bagdad (754-1055), fundado por Al-Mansur. Bajo los omeyas se llevó a cabo la invasión de la península Ibérica (711). La decadencia de los abasíes condujo a la disgregación de su califato de manos de los emires, que acabaron independizándose. El arte islámico heredó la influencia de Persia y Bizancio. A través de los autores musulmanes recibió la Europa medieval el saber de la Antigüedad. Pabellón del tesoro en el patio de la gran mezquita de los Omeya, en Damasco (Siria). Dinar de oro del califa cordobés Al Hakam II, procedente de Medina Azahara (España). 529 historia universal • la Baja Edad Media Ciudades y Catedrales En la Baja Edad Media occidental, que abarca el período comprendido entre los siglos XII y XV, las ciudades volvieron a ser el centro de gravedad económico, social y cultural, y en ellas se levantaron imponentes catedrales, erigidas como signo de ostentación por la rica burguesía. Ilustración miniada con san Luis, rey de Francia, y sus caballeros en un combate durante la octava cruzada. LAS CRUZADAS En el siglo XI, Europa fue recuperándose de la crisis provocada por la desmembración del Imperio carolingio y las invasiones normandas. Al mismo tiempo, en el Próximo Oriente, los turcos selyúcidas, que habían destruido el califato de Bagdad, ocupaban Jerusalén (1078). Los reinos cristianos europeos, a lo largo del siglo XII, enviaron varias expediciones militares a Tierra Santa, las cruzadas, para recuperar los Santos Lugares. La primera cruzada (1096-1099) logró conquistar la ciudad santa, donde los cruzados fundaron un reino feudal (1009-1187), que la segunda cruzada (1147-1149) tenía que defender de la amenaza musulmana, fracasando por el enfrentamiento entre sus jefes. Caballeros cristianos recibiendo instrucciones de Godofredo de Bouillon en la primera cruzada, según una miniatura medieval. 530 Miniatura que representa el saqueo de la ciudad santa de Jerusalén en 1099, durante la primera cruzada. La tercera (1188-1192) y la cuarta (12021204) cruzadas tenían como objetivo Egipto, pero la cuarta fue desviada por Venecia, por intereses comerciales, hacia Constantinopla, donde los cruzados fundaron un Imperio latino que pervivió hasta 1261. La quinta cruzada (12171221) se dirigió también contra Egipto. La sexta (1228-1229) conquistó una vez más los Santos Lugares. La séptima (1248-1254) y la octava cruzadas (1272) fueron organizadas por san Luis (Luis IX), rey de Francia, quien en la primera fue apresado, y en la última murió de peste en Túnez. historia universal • Ciudades y Catedrales LA EUROPA GÓTICA Clase de derecho notarial en la Universidad de Bolonia. Miniatura del siglo XV. A lo largo de la Baja Edad Media, se produjo en Europa una serie de transformaciones que conducirían al surgimiento de una nueva clase social, la burguesía, y el desarrollo de la economía monetaria. El incremento de la actividad agraria, fruto de la aparición de nuevos métodos de cultivo y la colonización y roturación de nuevos territorios, favoreció el crecimiento demográfico, que duplicó la población europea. Se multiplicaron los intercambios entre el campo y la ciudad, y en las viejas ciudades medievales fueron apareciendo los barrios de los artesanos y los comerciantes, los burgos, cuyos habitantes (burgueses) crearon gobiernos comunales para emanciparse de los señores feudales. Las rutas comerciales abarcaron cada vez mayor amplitud geográfica. El comercio bajomedieval tuvo dos focos marítimos fundamentales, el Mediterráneo (Venecia, Génova, Pisa, Marsella), para las rutas de oriente (especias, seda), y los puertos del Báltico y el mar del Norte (Brujas, Lübeck, Riga, Hamburgo), para el comercio de la Europa atlántica (maderas, cereales, pieles, lana). Para proteger el tráfico comercial, se crearon asociaciones como la liga Hanseática de las ciudades bálticas. Fruto de la intensa actividad mercantil, surgieron los banqueros y nuevas técnicas financieras (letras de cambio). Aparecieron las universidades (Bolonia, París) y, con el desarrollo de nuevas técnicas constructivas (arco apuntado, bóveda de crucería), en las grandes catedrales europeas se manifestó en todo su esplendor el estilo gótico. Entrada del emperador germánico Federico I Barbarroja en Milán, en 1158. DECADENCIA DEL SACRO IMPERIO El Sacro Imperio Romano Germánico fundado por Otón I comprendía los reinos de Germania e Italia, con los Estados Pontificios, Borgoña, Provenza y Polonia. Los primeros emperadores germánicos, para cimentar su dominio, utilizaron al papado como un simple feudatario, imponiendo pontífices y dirigiendo los asuntos de la cristiandad. Cuando los papas reivindicaron la independencia de la Iglesia, se produjo el enfrentamiento en la llamada querella de las Investiduras (1073-1122), en la que los emperadores germánicos perdieron el privilegio de designar los altos cargos eclesiásticos. Este hecho marcó el inicio de su decadencia, en beneficio de los grandes señores feudales alemanes y las ciudades italianas, que se unieron en la Liga Lombarda. El emperador Federico I Barbarroja (1152-1189), que intentó restaurar la autoridad imperial, fue derrotado en la batalla de Legnano (1176), teniendo que reconocer la independencia de la Santa Sede y los privilegios de las ciudades de la Liga. En el norte de Italia, sin embargo, continuaron los enfrentamientos y rivalidades entre güelfos (partidarios del papa) y gibelinos (partidarios del emperador). A partir del siglo XIII, el Imperio quedó reducido al antiguo reino germánico, fragmentado en un mosaico de principados casi independientes. 531 historia universal • la Baja Edad Media LA GUERRA DE LOS CIEN AÑOS En el siglo IX, los normandos habían puesto fin en Inglaterra a la heptarquía anglosajona y se habían instalado asimismo en el oeste de Francia (Normandía). Sin embargo, Inglaterra no tardó en recuperar su monarquía, hasta que Guillermo el Conquistador, duque de Normandía, se adueñó nuevamente del reino inglés (1066). Uno de sus sucesores, Enrique II Plantagenet (1154-1189), por su boda con Leonor de Aquitania amplió con estos dominios los que ya poseía en suelo francés. En Francia, dividida en pequeños Estados feudales desde la desaparición del Imperio carolingio, los sucesores de Carlos el Calvo, hijo de Luis el Piadoso, dieron paso a la dinastía fundada por Hugo Capeto (987-996). El rey de Inglaterra, por sus posesiones francesas, era vasallo del rey de Francia, pero más poderoso que éste por la extensión de sus territorios. El rey francés Felipe II Augusto (1180-1223) arrebató Normandía a los ingleses, que aún conservaban el ducado de Detalle del tapiz de Bayeux con la batalla de Hastings, que enfrentó Aquitania. a daneses y normandos en 1066. Muerto sin descendencia masculina Carlos VI de Francia, último Capeto, cuya hermana había casado con Eduardo II de Inglaterra, subió al trono Felipe VI (1328-1350), primer monarca de la casa de Valois. El futuro Eduardo III de Inglaterra (1327-1377), hijo de Eduardo II, reclamó sus derechos al trono francés. Además del conflicto dinástico y por el vasallaje de los reyes ingleses, existían intereses económicos (el dominio marítimo). En 1339, Erique III inició una guerra que, con algunos intervalos, se prolongaría hasta 1453. Tras la victoria inglesa en la batalla de Crécy (1346) y la toma del puerto de Calais (1347), en el canal de la Mancha, la guerra se detuvo a causa de la aparición de la peste negra. En 1355 se reanudaron los combates. El rey francés Juan II el Bueno cayó prisionero de los ingleses, y Francia se hundió en el caos. Hasta que Carlos VI el Bienamado (13801422) restableció el orden y fue recuperando terreno a los ingleses. En 1380 la guerra se interrumpió durante 35 años por conflictos internos de los dos países. En 1415, Enrique V de Inglaterra derrotó a los franceses en la batalla de Azincourt. Esta victoria parecía decisiva, cuando en el bando francés, una joven campesina que tenía visiones místicas, Juana de Arco, al mando del ejército de Carlos VII de Francia liberó el sitio de Orléans (1429). En 1441, los ingleses firmaron una tregua de nueve años, pero rompieron la tregua y fueron vencidos en varias batallas, perdiendo todas sus posesiones en suelo francés salvo la plaza de Calais. Ningún tratado puso fin a la guerra. La batalla de Crécy en 1346, que significó la victoria para los ingleses durante la guerra de los Cien Años. 532 historia universal • Ciudades y Catedrales LA CRISIS DEL SIGLO XIV Las guerras, el hambre y las epidemias hicieron del siglo XIV una etapa particularmente crítica y difícil. Las malas cosechas y las bajas en el campo de batalla diezmaron la población campesina, y la hambruna se abatió sobre parte de Europa entre 1315 y 1317. Pero la mortandad sería aún mucho mayor a causa de las epidemias, especialmente la peste negra. Miniatura alusiva a la peste negra que asoló Europa a mediados del siglo XIV. También la Iglesia viviría una etapa de declive con el Cisma de Occidente (1378-1417). Felipe IV el Hermoso logró imponer un papa francés, Clemente V (1305-1314), que trasladó la corte papal a Aviñón. Sus sucesores, también franceses, fueron marionetas al servicio de los reyes de Francia. Palacio de los papas de Aviñón (Francia), desde donde los pontífices rigieron la cristiandad desde el año 1309 hasta 1377. A la muerte del papa Gregorio XI (1370-1378), los cardenales italianos eligieron un papa italiano, Urbano VI (1378-1389), y los cardenales franceses designaron a Clemente VII (1378-1394). La cristiandad quedó dividida entre dos pontífices. En 1409 ocupaban el solio pontificio el español Benedicto XIII (el papa Luna), en Aviñón, y Gregorio XII en Roma. Para poner fin al cisma, los cardenales eligieron en Pisa un nuevo papa, Alejandro V, sin tener la renuncia de los otros dos. Finalmente, el concilio de Constanza (1414-1418) logró las renuncias de Alejandro V y el papa romano (no la de Benedicto XIII, que se retiró al castillo valenciano de Peñíscola) y eligió el nuevo papa Martín V (14171431). Elección del papa Martín V en 1417 durante el concilio de Constanza. 533 historia universal • América Precolombina Culturas Mesoamericanas y Andinas Las culturas que florecieron en América fueron muy diversas, con predominio de las estructuras tribales, constituyendo sólo grandes imperios en las áreas mesoamericana y andina. PERÍODOS PRECLÁSICO Y CLÁSICO En la costa de Tabasco y Veracruz (La Venta, Tres Zapotes), los olmecas (h. 1200 a.C.-300 a.C.), dejaron las primeras pirámides y unas cabezas de piedra de proporciones colosales. En el sur de México y Guatemala vivían los primeros grupos de lengua maya. En Colombia florecieron la cultura de San Agustín (ss. VIII a.C.-III d.C.) y los chibchas. En los Andes del Perú, las culturas de Chavín (1200-200 a.C.) y Paracas. Al período clásico pertenecen las culturas de Teotihuacán (ss. II-VII d.C.), junto al lago Texcoco (México), la zapoteca (ss. XX-IX d.C.), la mixteca (s. X) y la tolteca (ss. IX-XII a.C.). En el área andina surgieron las culturas mochica (ss. I-IX d.C.), nazca (tributaria de Paracas), de Tiahuanaco (h. 200-800 d.C.) y Chimú (ss. XI-XV). A la llegada de los españoles prevalecían tres grandes imperios. LOS MAYAS La civilización maya, en el sur de México (Chiapas, Yucatán), Guatemala, Honduras y El Salvador, fue la más avanzada de la América precolombina. Bajo la influencia olmeca, los primeros mayas desarrollaron la alfarería y la escultura. Su evolución histórica abarca el Imperio Antiguo (317 a.C.-987 d.C.) y el Imperio Nuevo (988-1697). En el primero, los mayas ocuparon toda la península del Yucatán (Palenque, Copán, Piedras Negras, Uxmal). Después quedaron reducidos al norte del Yucatán (ss. IX-X), donde florecieron las ciudades de Chichén Itzá y Mayapán. El Imperio Nuevo estuvo marcado por las guerras internas. Los últimos mayas se trasladaron a la zona del lago Petén. Los mayas utilizaron una escritura jeroglífica y un calendario muy avanzado. Construyeron grandes templos piramidales decorados con bellos relieves. La sociedad estaba organizada en ciudades-Estado gobernadas por un rey sacerdote. Su religión, muy compleja, tenía como divinidades principales Ah Puch, dios de la muerte, y Chac, dios de la lluvia. 534 Celadores de un templete funerario del centro ceremonial de San Agustín (Colombia). historia universal • Culturas Mesoamericanas y Andinas LOS AZTECAS Abanico azteca hecho con plumas multicolores de aves exóticas, siglo Tras el hundimiento de los toltecas (ss. XII d.C.), en el valle de México irrumpieron diversos pueblos. Los aztecas o mexicas, cazadores nómadas de lengua náhuatl procedentes del norte, fundaron su capital, Tenochtitlán (h. 1325), en una isla del lago Texcoco. Crearon un vasto imperio que cayó ante los españoles de Hernán Cortés. La sociedad azteca estaba sometida al emperador o tlatoani. XV. Los miembros de una familia o clan formaban un calpulli. La base económica era la agricultura (maíz). Construyeron grandes conjuntos arquitectónicos y descollaron en la escultura, la pintura mural, la orfebrería y el arte plumaria. Utilizaban una escritura pictográfica y un calendario solar de 365 días. Ofrecían sacrificios humanos a sus dioses (Quetzalcóatl, Huitzilopochtli, Coatlicue). Escena de sacrificio humano y ofrenda de la sangre a los dioses aztecas, según una ilustración del códice Maglia Becchiano. EL IMPERIO INCA Tuvo sus raíces en la región del lago Titicaca. De allí los fundadores se desplazaron a la región de Cuzco (h. 1100 d.C.), habitada por una tribu de lengua quechua, que adoptó el inca Pachacutec Inca Yupanqui (1438-1471) en su expansión imperial, continuada por Túpac Yupanqui (1471-1493) y Huayna Cápac (1493-1525). Cuando llegaron los españoles, el Estado incaico se extendía desde el nudo de Pasto (Colombia) hasta el río Maule (Chile). La guerra civil entre los hijos de Huayna Cápac facilitó su conquista. En la cúspide de la sociedad incaica se hallaban el inca o emperador, considerado descendiente de la divinidad, y una aristocracia militar. La estructura territorial se basaba en unidades productivas autosuficientes, los ayllu. Una red de calzadas cubría todo el Imperio, y se levantaron grandes fortalezas en piedra en el corazón de los Andes (Machu-Picchu, Sacsahuamán). Los incas poseyeron conocimientos astronómicos y utilizaron un calendario de doce meses. Alcanzaron gran maestría en la cerámica, la orfebrería y el tejido. Viracocha era el dios supremo de su religión. El Palacio, construido sobre una plataforma trapezoidal, que domina el centro ceremonial maya de Palenque. 535 historia universal • la Europa del Renacimiento Renacimiento y Humanismo Se conoce con el nombre de Renacimiento el período de grandes cambios económicos, políticos y culturales habidos en los países europeos en los siglos XV y XVI. Superada la crisis del siglo XIV con la recuperación de la agricultura y el desarrollo de las ciudades, al imponerse la autoridad de los soberanos sobre la aristocracia surgió el Estado absolutista unificado. La crisis del mundo feudal se extendió al pensamiento y la cultura, transformando las sociedades europeas. El espíritu renacentista estuvo marcado por la recuperación (renacimiento) del rico legado de la cultura clásica grecolatina. Persiguiendo la belleza ideal, los artistas renacentistas italianos (Bramante, Botticelli, Leonardo, Miguel Ángel) crearon obras imperecederas. Del mismo modo, frente al peso de la religión en el mundo medieval, la cultura renacentista, con el humanismo, consagró al hombre como centro del universo. El puerto de Nápoles en una pintura del siglo XIV. ESPAÑA BAJO LOS REYES CATÓLICOS En la península Ibérica, el espectacular avance de los musulmanes desde su llegada (711) había sido contrarrestado por sus propias luchas internas, facilitando el avance de la Reconquista emprendida por los reinos cristianos del norte. Las monarquías hispanas surgidas en este largo período se habían refundido en dos grandes reinos peninsulares, el reino de Castilla y el de Aragón y Cataluña. Ambas monarquías se unieron con el matrimonio de Isabel I de Castilla (1475-1504) y Fernando II de Aragón (1479-1516), llamados los Reyes Católicos. Al margen quedaban Portugal y Navarra, más el reino nazarí de Granada, último reducto musulmán. Los Reyes Católicos culminaron la Reconquista con la toma de Granada (1492), y su política interior se encaminó a someter a la nobleza, forjando un Estado moderno según la idea renacentista. Además del apoyo de Isabel la Católica a la empresa ultramarina de Colón, su monarquía se unió por vínculos matrimoniales con el emperador germánico, lo que situaría a sus descendientes a la cabeza de un gran imperio. Los Reyes Católicos en la rendición de Granada ante las tropas castellanas en 1492. 536 historia universal • Renacimiento y Humanismo LA AVENTURA OCEÁNICA DE PORTUGAL La batalla de Aljubarrota puso fin a las pretensiones anexionistas de Castilla y entronizó en Portugal la dinastía de Avís con Juan I (13831433). Este rey y sus sucesores, además de fortalecer su monarquía, basaron la expansión portuguesa en la apertura de nuevas rutas marítimas. En el Mediterráneo, tras la conquista de Bizancio (1453), los turcos otomanos amenazaban el comercio marítimo con oriente. Los portugueses buscaron rutas alternativas costeando África. Enrique el Navegante de Portugal, impulsor del descubrimiento de tierras africanas. El infante Enrique el Navegante, hijo de Juan I, jugó un papel decisivo reuniendo en la escuela de Sagres a marinos y cartógrafos. En 1488, sus navíos llegaron al cabo de Buena Esperanza, extremo meridional de África, dejando abierta la ruta del Índico, que llevaría a Vasco de Gama hasta la India (1498). Conquista de Constantinopla por las tropas otomanas. Fresco del monasterio de Moldovita (Rumania). FRANCIA, INGLATERRA Y EL IMPERIO La guerra de los Cien Años dejó Francia sumida en una profunda crisis, que Carlos VII (1422-1461) aprovechó para liquidar el feudalismo con el apoyo de la burguesía y la pequeña nobleza. Su sucesor, Luis XI (1461-1483), evitó un nuevo conflicto con los ingleses. Luis XII (1498-1514) reforzó el absolutismo e intentó extenderse por Italia, siendo expulsado por la Santa Liga. En Inglaterra, el fracaso en aquella guerra había debilitado la monarquía de los Lancaster, representada por Enrique VI, a la que se enfrentó la casa de York en la llamada guerra de las Dos Rosas (1455-1485). La victoria de Ricardo de York situó en el trono a Eduardo IV de York (1471-1483). Al morir éste usurpó la corona Ricardo III (14831484), rechazado por sus crímenes. La nobleza apoyó a Enrique Tudor, que venció a Ricardo (1485) e instauró una nueva dinastía. En el fragmentado Imperio germánico hubo algunos intentos de restauración de la dignidad imperial, en especial con Carlos IV (1347-1378), al dictar la Bula de Oro (1356) estableciendo las jerarquías de los príncipes electores. En 1437 el trono pasó a los Habsburgo, que con Felipe El rey Luis XII de Francia el Hermoso unirían la casa de Austria y la marcha contra Génova en monarquía castellana. las guerras de Italia, según una miniatura del siglo XVI. 537 historia universal • el Nuevo Mundo y el Imperio Español El Descubrimiento de América y el Imperio Español Tras la toma de Granada (1492), los Reyes Católicos decidieron orientar sus conquistas hacia otras tierras, emulando las expediciones de Portugal que buscaban nuevas rutas ultramarinas para llegar a Extremo Oriente. Cristóbal Colón, descubridor de América. LAS EXPEDICIONES COLOMBINAS Lanzados los portugueses a la aventura oceánica, un marino llamado Cristóbal Colón propuso a Juan II llegar a las Indias a través del Atlántico. Colón, basándose en la esfericidad de la Tierra, pensaba llegar a Asia navegando hacia el oeste, ignorando que se interponía otro continente. Rechazado en Portugal, hacia 1485 se trasladó a España para interesar a los Reyes Católicos en su proyecto, que éstos, en plena guerra de Granada, sometieron a un comité de expertos. Finalmente, en abril de 1492, Isabel la Católica aceptó apoyar la idea colombina. Desembarco de Cristóbal Colón en la isla de Guanahaní, el 12 de octubre de 1492. Las condiciones quedaron fijadas en el documento conocido como las capitulaciones de Santa Fe. El 3 de agosto de 1492, una nao y dos carabelas, la Pinta, la Niña y la Santa María, partieron del puerto de Palos de Moguer (Huelva). El día 12 de octubre los navegantes llegaron a la isla de Guanahaní (hoy Watling, en las Bermudas), que Colón llamó San Salvador, y pasaron por otras islas menores hasta llegar a Cuba y La Española. Colón dio cuenta de su primer viaje a los Reyes Católicos en Barcelona (1493), y hasta 1502 realizó otros tres, que le llevaron, sucesivamente, a las Pequeñas Antillas, la costa venezolana y el istmo centroamericano. El nombre de América fue acuñado en 1507 por un impresor alemán, en honor del navegante florentino Américo Vespucio, el primero que pudo aseverar que aquellas tierras pertenecían a un continente hasta entonces desconocido. Recepción de los Reyes Católicos a Colón en Barcelona, al regresar de su primer viaje. 538 historia universal • el Descubrimiento de América LA CONQUISTA DEL NUEVO MUNDO Hernán Cortés, rodeado de indígenas, en Oaxaca (México). A principios del siglo XVI, en los viajes de exploración, los españoles fueron descubriendo el istmo de Panamá, el océano Pacífico, la península de Florida, el estuario del río de la Plata y el estrecho de Magallanes. Al mismo tiempo, emprendieron la conquista de aquellos vastos territorios, en los que contaban obtener grandes riquezas. Hernán Cortés partió de Cuba a la conquista de México (1519-1521). Se atrajo a los pueblos dominados por los aztecas y llegó a Tenochtitlán, que sometió definitivamente tras una rebelión popular que acabó con la vida de Moctezuma II. La de Centroamérica se llevó a cabo desde Panamá, de donde también partió Francisco Pizarro para conquistar el fabuloso Imperio incaico (15311533), sacando provecho de la guerra civil entre Atahualpa y Huáscar. La conquista de Chile se prolongó de 1536 a 1560 por la tenaz resistencia de los araucanos. Retrato ecuestre de Carlos V. EL IMPERIO ESPAÑOL Carlos de Habsburgo (1500-1558), hijo de Felipe el Hermoso y de Juana la Loca, era por tanto nieto y heredero de Maximiliano de Austria y de los Reyes Católicos. Recibió en herencia los reinos de España, con las posesiones americanas e italianas, de su abuela materna las de la casa de Borgoña, con Luxemburgo y los Países Bajos, y Austria del emperador Maximiliano, junto con los derechos a la corona del Sacro Imperio. Elegido emperador por los príncipes alemanes (1519), se convirtió en el monarca más poderoso de Europa. A lo largo de su reinado, se enfrentó a Francisco I de Francia, rodeado por las posesiones de los Austria, y a la expansión del Imperio otomano. Captura de Francisco I, rey de Francia, en la batalla de Pavía por las tropas de Carlos V. Las guerras de Italia habían comenzado en el reinado de los Reyes Católicos. Tras varios vaivenes, Francisco I de Francia se había hecho dueño del Milanesado (1515), que Carlos V necesitaba para asegurar las comunicaciones entre Alemania e Italia. Lo conquistó tras derrotar a Francisco I (1526), y lo retuvo tras enfrentarse a la liga de Cognac (Francia, los Estados italianos y el papado), derrotada en 1529. La hegemonía española parecía asegurada. Ante la amenaza turca, agravada por la alianza de los franceses con los berberiscos y los otomanos, el emperador respondió con la toma de Túnez (1535), pero perdió el Piamonte ante Francisco I (1544). En 1556 firmó la paz con Francia, abdicó en su hermano Fernando la corona imperial, en su hijo Felipe la corona española y el ducado de Borgoña, y se retiró hasta su muerte en el monasterio español de Yuste, en Cáceres. 539 historia universal • la Reforma y la Contrarreforma El Protestantismo y el Concilio de Trento Algunos de los antecedentes que favorecieron el desarrollo de la Reforma hay que buscarlos en el rigor intelectual del humanismo cristiano y los avances de la mentalidad laica y tradicional. Estos postulados concluían en la proclamación de la libertad de conciencia del individuo, que en Trento se contrarrestó limitando el acceso a las Escrituras. LA REFORMA DE LUTERO La corrupción del clero, el lujo y el relajamiento en que vivían los altos dignatarios eclesiásticos, así como el papel de los papas actuando en el plano político como jefes de Estado, habían hecho surgir muchas voces en la cristiandad que reclamaban el retorno de la Iglesia católica a la estricta doctrina evangélica. También los hombres del Renacimiento abundaban en el mismo sentido. Cuando el papa León X emitió unas bulas concediendo indulgencias a los fieles que contribuyeran con sus donativos a la construcción de la basílica de San Pedro, un fraile agustino alemán, Martín Lutero Sermón de Martín Lutero a notables de Sajonia y Pomerania, según (1483-1546), prestigioso predicador, hizo un dibujo de Lucas Cranach. públicas sus 95 tesis contra las indulgencias. Lutero defendía la doctrina de «la justificación por la fe» (el hombre se relaciona con Dios por la fe, no por medio de la Iglesia) y la interpretación individual de la Biblia, donde se encuentra la palabra de Dios. Rechazaba el culto a la Virgen y a los santos, reducía los sacramentos al bautismo y la eucaristía, con carácter simbólico, negaba la autoridad papal y defendía el matrimonio de los clérigos. Fue excomulgado por León X en 1520, y el emperador Carlos V le convocó ante la dieta de Worms para que explicara su doctrina (1521), siendo desterrado por negarse a retractarse. La Reforma se extendió rápidamente por Alemania, Suiza, Inglaterra y el norte de Europa. La unidad religiosa se había roto. Interior de una iglesia luterana en Dinamarca. 540 historia universal • el Protestantismo y el Concilio de Trento LA LIGA DE ESMALCALDA Lutero tuvo el apoyo de muchos humanistas y la adhesión de los príncipes alemanes, enfrentados tanto a Roma como al emperador. Retenido por las guerras de Italia, Carlos V confiaba en que un concilio restablecería la unidad entre los cristianos. La paz de Cambrai (1529) le permitió dedicarse al problema religioso. Aquel mismo año reunió la dieta de Spira, que al pronunciarse a favor de los católicos desató las protestas de los príncipes luteranos («protestantes»), y al año siguiente, la dieta Los seguidores de Lutero protestan contra el edicto de Augsburgo (1530), en la que pidió a los reforde Worms ante el emperador Carlos V, mados el retorno al seno de la Iglesia. Los príncien la dieta de Spira. pes protestantes respondieron formando la liga de Esmalcalda (1531), apoyada por Francia e Inglaterra, que fue derrotada por el emperador, quien en 1532 propuso la paz de Augsburgo. En 1546, después de un largo paréntesis impuesto por las luchas contra los franceses y los turcos, Carlos V propuso un acuerdo en la dieta de Ratisbona, a la que los príncipes protestantes respondieron con las armas, siendo vencidos en la batalla de Mühlberg (1547). En el esperado concilio (1545), el emperador hizo algunas concesiones en la dieta de Augsburgo de 1548, pero los príncipes alemanes aspiraban a independizarse del Imperio, y Mauricio de Sajonia encabezó la rebelión. Se alió con el nuevo rey francés, Enrique II (1547-1559), y las tropas imperiales fueron derrotadas en Innsbruck. Carlos V tuvo que firmar el armisticio en la dieta de Passau (1552), a la que siguió la paz religiosa de Augsburgo (1555), que consagraba la plena libertad religiosa. La Reforma había triunfado en Alemania. San Ignacio de Loyola entrega al papa Paulo III el libro de la reglas de la Compañía de Jesús, 1540. EL CONCILIO DE TRENTO Y LA CONTRARREFORMA Se da el nombre de Contrarreforma al movimiento que la Iglesia católica opuso a la Reforma protestante. Su instrumento fundamental fue el concilio que el emperador, y hasta el mismo Lutero, habían reclamado. Convocado por el papa Paulo III (1542), se celebró en Trento, en el Tirol italiano, entre 1545 y 1563. Aunque había surgido como reacción al avance de los reformados, el concilio de Trento obedecía también a la necesidad de afrontar la crisis del catolicismo. Uno de sus puntales fue la Compañía de Jesús, fundada años antes por san Ignacio de Loyola. Sesión del concilio de Trento. Pintura de la época. 541 historia universal • las Monarquías Autoritarias en Europa Luchas por la Hegemonía Europea El futuro de Europa se dirimió en un gran conflicto bélico, en la primera mitad del siglo XVII, enfrentando a los partidarios del orden tradicional y los defensores del nuevo orden político y social. Juan Calvino, fundador del calvinismo, una rama reformista más radical y bibliocéntrica que el luteranismo. HUGONOTES Y ANGLICANOS En Francia había surgido la rama más rigurosa de la Reforma luterana, el calvinismo, fundada por el teólogo y predicador Juan Calvino (1509-1564). Catalina de Médicis, regente durante la minoridad de Carlos IX, se enfrentó a la pugna entre los católicos y los calvinistas, los llamados hugonotes (del alemán eidgenossen, confederados). El episodio más sangriento fue, reinando Carlos IX, la matanza de San Bartolomé (1572), en la que miles de hugonotes fueron asesinados. El conflicto concluyó cuando Enrique IV (1589-1610), primero de la casa de Borbón, promulgó el edicto de Nantes (1598), otorgando la libertad religiosa. La noche de San Bartolomé, en la que perecieron 20.000 hugonotes a manos de los católicos, según una pintura de la época. En Inglaterra, el rey Enrique VIII (1509-1547), distinguido por el papado con el título de «defensor de la fe», aplicándose el ejemplo de los príncipes alemanes, comprendió las ventajas de una ruptura con Roma. El pretexto fue su divorcio de Catalina de Aragón, hija de los Reyes Católicos, con la que no había tenido hijos varones. Al recibir respuesta negativa de Roma, se separó de la autoridad papal (1531) y en 1534 se proclamó jefe de la Iglesia nacional, el anglicanismo, que sería uno de los pilares de la poderosa monarquía de Isabel I (1558-1603). Enrique VIII de Inglaterra, a la vista de los acontecimientos religiosos acaecidos en Alemania, comprendió las ventajas materiales y de poder que suponía el hecho de disponer de una iglesia nacional desvinculada de Roma. 542 historia universal • Luchas por la Hegemonía Europea LA HEGEMONÍA ESPAÑOLA EN EUROPA Felipe II (1556-1598) heredó el vastísimo imperio de su padre, Carlos V, y con él los mismos problemas: la amenaza de Francia, la de los turcos en el Mediterráneo y la división de Europa surgida del protestantismo. Su mayor empeño fue impulsar el proyecto paterno de implantar en Europa un imperio cristiano. Pero el papado recelaba del poderío español, y Paulo IV se alió con Francia para expulsar a los españoles de Italia. El enfrentamiento con Francia se resolvió en Flandes con la victoria española en la batalla de San Quintín (1557). Frente al peligro otomano, Felipe II se unió a Venecia y el papado en la Liga Santa, cuya flota, al mando de Juan de Austria, derrotó a los turcos en la batalla naval de Lepanto (1571). En los Países Bajos, en cambio, no pudo evitar la creación de las Provincias Unidas (Unión de Utrecht, 1579), organizadas como un Estado protestante apoyado por Francia e Retrato ecuestre de Felipe II, por Rubens. Inglaterra. Con Felipe III (1598-1621) y Felipe IV (16211665), la monarquía española delegó el gobierno en manos de los validos. Con Felipe IV, el conde-duque de Olivares (15871645) intentó modernizar el país y recuperar el pasado esplendor, topando con la corrupción y la ineficacia administrativa. En Francia, por el contrario, el reinado de Luis XIII (1610-1643) estuvo marcado por la figura del cardenal Richelieu, presidente del Consejo real (1624-1642), que sentaría las bases de la hegemonía francesa en Europa. LA GUERRA DE LOS TREINTA AÑOS (1618-1648) La guerra estalló por las pretensiones de los checos de Bohemia de independizarse de la casa de Austria. En 1618, en Praga, los consejeros partidarios del emperador Rodolfo II (1576-1612), impulsor de la Contrarreforma, fueron arrojados por las ventanas del ayuntamiento de la ciudad (defenestración de Praga). El nuevo emperador, Fernando II (1619-1637), derrotó a los checos en la batalla de la Montaña Blanca (1620) y, por su parte, Dinamarca y Suecia intentaron apoyar a los protestantes, hasta que Richelieu optó por una intervención directa de Francia y se alió con todos los enemigos de España y del Imperio (1635). El emperador Fernando III (1637-1657) firmó la paz de Westfalia (1648), y España la paz de los Pirineos (1659), que consagraban la hegemonía francesa en el continente. En el mar, la hegemonía era de Inglaterra desde el reinado de Isabel I (1558-1603), tras la derrota de la Armada Invencible española (1588). La revolución inglesa y la república de Cromwell (1649-1655) la aumentaron. Las tropas de Oliver Cromwell en la batalla de Marston Moor, 1644. 543 historia universal • el Siglo xviii El Despotismo Ilustrado Las monarquías europeas surgidas de las guerras del siglo XVII pusieron el absolutismo real al servicio del bienestar de los ciudadanos. La Razón había transformado el pensamiento (racionalismo, empirismo) y la ciencia, consagrándose como la base del Progreso. Las monarquías absolutistas vieron en la doctrina de la Ilustración la posibilidad de mejorar la economía de sus países y satisfacer a sus súbditos. Sobre estas premisas, el Despotismo Ilustrado justificaba el poder real en el beneficio de los ciudadanos. Los gobiernos de las monarquías ilustradas ( José II de Austria, Carlos III de España, Federico II de Prusia, Catalina II de Rusia) impulsaron reformas de carácter económico y social, pero sin renunciar a la monarquía absoluta. Felipe V, primer miembro de la dinastía Borbón en España. Carlos III, rey de España. LOS BORBÓN EN FRANCIA Y ESPAÑA El cardenal Richelieu había dejado un país en auge. Luis XIV de Francia, llamado el Rey Sol por el esplendor de la corte de Versalles, reforzó el Estado y organizó un poderoso ejército. Enfrentado a España y a Holanda, su expansionismo unió a los países europeos en la liga de Augsburgo, y tras una larga guerra de desgaste se llegó a la paz de Ryswick (1697), en la que el Rey Sol devolvió todas sus conquistas. Su próximo objetivo sería situar a la casa de Borbón en el trono español, que el hijo de Felipe IV, el enfermizo Carlos II (1665-1700), al no tener descendencia, legó al delfín de Francia, nieto de Luis XIV y bisnieto de Felipe IV. Entronizado con el nombre de Felipe V (1700-1746), y con él la dinastía borbónica, las potencias europeas, ante una hegemonía francoespañola, apoyaron las pretensiones del archiduque Carlos de Austria, descendiente también de Felipe III, y estalló la guerra de Sucesión española (1701-1713). Felipe V fue reconocido en el trono a cambio de ceder todas sus posesiones en los Países Bajos e Italia (tratado de Utrecht, 1713). Luis XIV, el Rey Sol, en el asedio de Tournai durante la guerra de Devolución, 1667. 544 historia universal • el Despotismo Ilustrado AUSTRIA, PRUSIA, RUSIA La muerte del emperador José I (1678-1711) llevó al trono austríaco al archiduque Carlos, entronizado como Carlos VI (1711-1740). Además de incorporar las antiguas posesiones hispanas, Austria se había extendido por los Balcanes a costa de Turquía. A su muerte, su hija María Teresa (1740-1780) se vio envuelta en dos guerras europeas. Le sucedió José II (17801790), paradigma del monarca ilustrado. Prusia, reino tras la paz de Utrecht, con Federico I La batalla de Fontenoy, librada en 1745 y ganada por el mariscal Mauricio de Sajonia. (1701-1713), disputaba a Austria la hegemonía alemana. Con el poderoso ejército forjado por Federico Guillermo I (1713-1740), Federico II (1740-1786) pudo situarse entre las potencias europeas. La europeización de Rusia fue obra del zar Pedro el Grande (1682-1725), que aspiraba a controlar el Báltico, el mar Negro y las fronteras occidentales (Polonia). Catalina II la Grande (1762-1796) mantuvo estos objetivos, pero evitó tomar partido entre Austria y Prusia. LAS GUERRAS DEL SIGLO XVIII Carlos VI legó el trono a María Teresa mediante una Pragmática Sanción que derogaba la ley Sálica. Rechazada por las monarquías europeas, estalló la guerra de Sucesión austríaca (1740-1748). Prusia rompió las hostilidades ocupando Silesia (1741), que no abandonó al firmar la paz (1742). Luis XV de Francia pactó con los prusianos, a los que se unieron Baviera y España. Austria fue apoyada por Inglaterra y Rusia. En 1748 las potencias beligerantes firmaron la paz de Aquisgrán reconociendo la Pragmática Sanción. El otro gran conflicto europeo, la guerra de los Siete Años (1756-1763), lo inició también Federico II de Prusia al invadir Sajonia. Las anteriores alianzas se invirtieron: Francia, Rusia y España apoyaron a Austria, y Prusia tuvo el apoyo de Inglaterra, que pretendía atacar las colonias francesas y españolas. Cuando Prusia parecía condenada a la derrota, murió la zarina Isabel (1762), y el zar Pedro III tomó partido por los prusianos. La paz restableció la situación anterior al conflicto, excepto para Inglaterra, que había expulsado a los franceses de la India y el Canadá. La conquista de Quebec por el general británico Wolfe, septiembre de 1759. 545 historia universal • La Era de las Revoluciones La Revolución Francesa y el Imperio Napoleónico El absolutismo real y el despilfarro de la corte de Versalles, las exorbitantes cargas tributarias sobre las clases bajas y la burguesía (la Iglesia y la nobleza estaban exentas), las arbitrariedades de la justicia y la insostenible situación económica, precipitaron varios sucesos que desembocaron en el final del Antiguo Régimen. El Imperio napoleónico se encargó de preservar y extender las conquistas cívicas de la Revolución. Primera página de la Declaración de los derechos del hombre y del ciudadano, redactada en Francia en 1789. LA REVOLUCIÓN DEL TERCER ESTADO A finales del siglo XVIII, Francia se enfrentaba con Luis XVI en el trono a una crisis económica. En 1789, el rey convocó los Estados Generales, donde estaban representados los tres estamentos sociales: la nobleza, el clero y el «tercer estado» (la burguesía y el pueblo llano). En lugar de los tres votos únicos tradicionales, uno por cada estamento, los miembros del tercer estado reclamaban una votación nominal. Al ser expulsados, se avanzó hacia el estallido revolucionario; constituyéndose en Asamblea Nacional, juraron no disolverse hasta dotar a Francia de una Constitución (juramento del Jeu de Paume). Cuando se les unieron los representantes de la nobleza y el clero, se convirtió en Asamblea Constitucional. Mientras tanto, los desórdenes populares culminaron en la toma de la Bastilla (14 de julio), fortaleza real convertida en prisión para presos políticos. La Asamblea promulgó la Declaración de los derechos del hombre y del ciudadano. Se constituyó luego una Asamblea Legislativa (17911792), en la que fueron cuajando distintos grupos políticos. Momento del juramento del Jeu de Paume en 1789, uno de los episodios más significativos de la Revolución francesa. CONVENCIÓN Y DIRECTORIO En 1792, la Asamblea dominada por los girondinos proclamó la República y se transformó en Convención Nacional (1792-1795). En enero de 1793 la familia real fue guillotinada. Amenazada la república por las potencias absolutistas, los jacobinos (radicales) se hicieron con el control de la Convención. Con Robespierre al frente, 546 instauraron el Terror (1793-1794), una dictadura populista que multiplicó las ejecuciones. Los moderados rechazaron este radicalismo e impulsaron la Reacción Termidoriana (1794), que ejecutó al propio Robespierre. Tras promulgar una nueva Constitución, confiaron el poder a un Directorio (1795). historia universal • La Revolución Francesa y el Imperio Napoleónico DEL CONSULADO AL IMPERIO Una figura emergente en este período fue Napoleón Bonaparte (1769-1821), joven general avalado por sus éxitos en Italia. En 1799, ante una supuesta conjura jacobina, pactó con el Directorio el golpe de Estado del 18 brumario (fecha del calendario revolucionario: 10 de noviembre), que instauró la etapa del Consulado, gobernado por un triunvirato. Elegido primer cónsul, Napoleón tuvo en sus manos el control del gobierno y el ejército. Tras una campaña victoriosa contra Austria, pacificó el país y reorganizó la administración. En 1802 fue proclamado cónsul vitalicio, y en 1804 fue coronado emperador. Su objetivo era extender el espíritu revolucionario por Europa. Las potencias europeas se unieron en diversas coaliciones. En 1805 la escuadra francesa fue derrotada en la batalla naval de Trafalgar, pero después Napoleón derrotó a los austrorrusos en la batalla de Austerlitz, ocupando el Imperio alemán. En 1806 decretó el bloqueo continental contra los británicos. Napoleón, emperador de Francia. LA CAÍDA DE NAPOLEÓN Dueño de Europa occidental, Napoleón planeó la invasión de Rusia. Antes quiso castigar a Portugal por el incumplimiento del bloqueo y envió sus tropas por territorio español, invadiendo la península. El 2 de mayo de 1808, un motín en Madrid contra los ocupantes inició la guerra de la Independencia española. Napoleón logró la abdicación de los Borbón (Carlos IV y el futuro Fernando VII) y situó en el trono a su hermano José I Bonaparte. En España se crearon juntas provinciales, reunidas en una Junta Suprema Central, para preservar los derechos de la monarquía. El mismo Napoleón, ante la derrota francesa en la batalla de Bailén (verano de 1808) y la llegada de tropas inglesas a Portugal, pasó a la península con 300.000 hombres. Pero la situación europea le obligó a abandonarla. Al frente de un gran ejército (Grande Armée), emprendió la invasión de Rusia, llegando hasta Moscú (1812). Ante los problemas de abastecimiento y la llegada del temible invierno ruso, ordenó una catastrófica retirada de la que su ejército nunca se recuperaría. Una nueva coalición europea derrotó a los franceses en Leipzig (1813) y ocupó París (1814). Napoleón fue desterrado a la isla italiana de Elba, y subió al trono Luis XVIII. En España, el general Wellington acabó expulsando a los franceses (1813), y Fernando VII pudo ocupar el trono. Aprovechando la impopularidad de Luis XVIII, Napoleón regresó a Francia (1815) y ocupó de nuevo el poder durante Cien Días (marzo-junio de 1815), hasta que las potencias europeas le derrotaron definitivamente en la batalla de Waterloo, y fue confinado en la isla de Santa Elena hasta su muerte. Retirada del ejército napoleónico de Rusia, a finales de 1812. 547 historia universal • La Era de las Revoluciones Las Revoluciones Europeas del Siglo XIX El siglo XIX significó en Europa el apogeo de la burguesía liberal y el auge del capitalismo. La situación de precariedad que provocó este último en la creciente clase obrera generó una serie de movimientos revolucionarios, a los que se añadieron los de origen nacionalista. La libertad guiando al pueblo, obra alegórica de Delacroix. El Congreso de Viena puso de manifiesto el conflicto entre autoridad y libertad. LA REVOLUCIÓN DE 1830 Tras la caída de Napoleón I, las potencias reunidas en el Congreso de Viena (1814-1815) trazaron un nuevo orden europeo, privando a Francia de todas sus conquistas. Inglaterra, Austria, Rusia y Prusia pactaron la Cuádruple Alianza (1815). Al mismo tiempo, el zar Alejandro I unía a la mayoría de los países europeos en una Santa Alianza, para defender las monarquías absolutistas y la religión. Pero en Francia, el reinado de Luis XVIII (1814-1824) respetó un moderado constitucionalismo, al que quiso poner fin Carlos X (1824-1830). La reacción popular condujo a la Revolución de 1830, y subió al trono Luis Felipe de Orleans (1830), quien consolidó el régimen constitucional. El ejemplo francés se extendió por Europa, aunque sólo Bélgica se benefició independizándose de los Países Bajos (1830-1831). Polonia se sublevó en vano contra el dominio ruso, y el Imperio austríaco ahogó las revoluciones italianas. En febrero de 1848, en Francia, estallaron violentas manifestaciones antigubernamentales, que culminaron con la abdicación del rey Luis Felipe de Orleans. LA REVOLUCIÓN DE 1848 El reinado de Luis Felipe de Orleans, tras una etapa de prosperidad, cayó ante la crisis económica y la presión de los legitimistas monárquicos, los bonapartistas y los republicanos. La Revolución de 1848 condujo a la Segunda República francesa (1848). Pero en las elecciones presidenciales, el bloque conservador logró situar en el poder a Luis Napoleón Bonaparte (1848), sobrino de Napoleón, quien con un golpe de Estado (1851) instauró el Segundo Imperio (1852-1870). No obstante, la revolución francesa de 1848 tendría no pocas repercusiones en Europa. En Viena, la insurrección logró la abdicación del emperador Fernando I (1835-1848), aunque su sucesor, Francisco José I (1848-1916), pudo restablecer el absolutismo. En la Confederación Germánica, Federico Guillermo IV (1840-1861) otorgó la Constitución liberal de 1848, hasta que la Constitución de 1850 restableció la monarquía absolutista. 548 historia universal • Las Revoluciones Europeas del Siglo xix LOS NACIONALISMOS EUROPEOS En las revoluciones burguesas habían aflorado los nacionalismos. En 1861, Víctor Manuel II (18491878), rey de Piamonte-Cerdeña, y su primer ministro, el conde de Cavour, proclamaron en Turín la constitución del Reino de Italia. En Alemania, al subir al trono prusiano Guillermo I (1861-1888), el canciller Bismarck, su primer ministro, fortaleció el ejército e impulsó el proceso unificador. La victoria prusiana en la batalla de Sadowa (1866) dejó a Austria al margen de este proceso, del que surgió la Confederación de Alemania del Norte. Tras vencer en la guerra franco-prusiana (1870), que en Francia dio paso a la Tercera República, Bismarck hizo coronar a Guillermo I emperador de Alemania en Versalles. Austria, obligada a ceder ante los nacionalistas húngaros, tuvo que constituir el Imperio austro-húngaro (1867). El rey Victor Manuel II de Italia y Giuseppe Garibaldi, uno de los principales artífices de la unidad italiana. ABSOLUTISTAS Y LIBERALES EN ESPAÑA Fernando VII (1814-1833) había restablecido el absolutismo, tras el paréntesis del Trienio Liberal (1820-1823), gracias a la intervención del ejército francés de los Cien Mil Hijos de San Luis, mandado por la Santa Alianza. Al morir nombró heredera a su hija Isabel, frente a la que los absolutistas, con las guerras carlistas, intentarían situar en el trono al hermano del monarca, Carlos María Isidro. El general carlista, Tomás de Zumalacárregui, malherido, es transportado por sus hombres. El reinado de Isabel II (1843-1868) fue favorable para el desarrollo económico, pero estuvo marcado por los pronunciamientos militares y la corrupción. La Revolución de 1868 logró la abdicación de la reina y decidió sustituir la dinastía borbónica. El trono fue entregado a Amadeo I de Saboya (1870-1873), hijo del rey de Italia, quien abdicó al recrudecerse las luchas carlistas y entre los mismos liberales. La Primera República española (1873-1874) acentuó la ingobernabilidad del país, y se produjo la restauración borbónica en la persona de Alfonso XII (18751885), hijo de Isabel II. La regencia de María Cristina de Habsburgo (1885-1902), conoció una etapa de estabilidad, con la alternancia de gobiernos conservadores y liberales, hasta la pérdida de las últimas colonias americanas (Cuba y Filipinas) en 1898. En 1902 alcanzó la mayoría de edad Alfonso XIII, cuyo reinado estaría marcado por la agitación social y la guerra de Marruecos. Desembarco de tropas estadounidenses en Cuba, en 1898. 549 historia universal • La Independencia de las Colonias Americanas Los Nuevos Estados Americanos Entre 1816 y 1824 diversos países de Latinoamérica se emanciparían de la metrópoli. En la segunda mitad del siglo XVIII, ya se habían producido manifestaciones de malestar, como en Chile (1753) y Perú (1780), debido al aumento de los impuestos. La situación económica, junto con la extensión de los ideales ilustrados y revolucionarios, y el ejemplo de Estados Unidos, fueron los principales elementos en la formación de la conciencia independentista americana. LA COLONIZACIÓN ESPAÑOLA Desde el siglo XVI, el sistema de explotación colonial impuesto por los españoles en América se había basado en las encomiendas de indios, que consistían en el trabajo forzado de los indígenas en beneficio de los colonos o encomenderos. A pesar de las Leyes de Indias, dictadas por los Reyes Católicos, y las Leyes Nuevas de Carlos V (1542), los abusos sobre la población indígena fueron habituales. Para su administración, los dominios de la corona castellana fueron organizados al principio en gobernaciones, regidas por militares o altos funcionarios, y Audiencias, con atribuciones para administrar justicia. En la metrópoli, el Misión de indios guatemaltecos. control del comercio ultramarino correspondía a la Casa de Contratación (1503), que más tarde pasó a depender del Consejo de Indias, órgano supremo del gobierno de las colonias. La vastedad de aquellos territorios obligó a la creación de los virreinatos, en los que el monarca delegaba su autoridad en un virrey. El primero fue el de Nueva España (1535, México), más tarde se creó el del Perú (1542) y, posteriormente, se constituyeron los de Nueva Granada (1717, Colombia, Ecuador, Panamá) y el de la Plata (1776). En las regiones fronterizas se crearon capitanías generales (Venezuela, Chile, Cuba). LA SOCIEDAD CRIOLLA Máquina de cernir tabaco, en un grabado mexicano del siglo XVIII. Hasta fines del siglo XVII, la economía colonial dependió de la minería, en especial de la explotación de las ricas minas de plata de Potosí (Virreinato de Perú y actual Bolivia). Pero en el siglo XVIII dependía de la agricultura latifundista, controlada por los criollos, los descendientes de españoles nacidos en América. Los principales cargos públicos seguían en manos de funcionarios de la Corona. La joven sociedad americana reclamaba la plena igualdad con los españoles y la supresión de monopolios y privilegios económicos. Este sentimiento se vio abonado por el precedente de la independencia estadounidense (1781-1783) y las ideas emancipadoras de la Ilustración. El momento propicio lo proporcionó la invasión de España por el ejército napoleónico. En América, se crearon Juntas locales como las constituidas en la metrópoli para asumir el gobierno. Estas Juntas, bajo el control de los criollos, emprendieron el camino a la independencia. 550 historia universal • Los Nuevos Estados Americanos EL PROCESO EMANCIPADOR El proceso de emancipación de la América española se desarrolló entre 1810 y 1824. Antes, el venezolano Francisco de Miranda (17561816), precursor de la independencia, había fracasado en sus primeras intentonas (1806). Pero a partir de 1810, interrumpido el tráfico marítimo con España, las juntas criollas proclamaron su soberanía, y en 1811 se habían generalizado los levantamientos. Hasta 1816, el ejército realista pudo aspirar a tener bajo control la situación. Ese año, el congreso de Tucumán proclamaba la independencia argentina. Se iniciaba entonces una doble ofensiva de los patriotas. Francisco de Miranda, figura destacada en la emancipación de las naciones americanas. El ejército de San Martín (1778-1850), al que se unió el chileno Bernardo O’Higgins, partió de Argentina avanzando a través de los Andes, liberó Chile tras derrotar a los realistas en Maipú (1818), y en 1821 conquistó Lima. A su vez, Simón Bolívar (1783-1830), antes expulsado de Venezuela por los realistas (1813), en su nueva y definitiva campaña logró derrotarles en Boyacá (1819) y Carabobo (1821), consolidando la independencia de Colombia y Venezuela. Los últimos reductos españoles cayeron en 1824, con las victorias de Bolívar en Junín y de Sucre en Ayacucho. América del Sur había sido liberada. Simón Bolívar, uno de los forjadores de la independencia de América del Sur. En México, el levantamiento del cura Hidalgo (grito de Dolores, 1810) y la insurrección de Morelos (1811-1815) fueron fácilmente sofocados. Hasta que en 1821, el general absolutista A. de Iturbide (17831824) lanzó el plan de Iguala, proclamando la independencia bajo una monarquía encabezada por Fernando VII. Luego instauró un efímero imperio de corte bonapartista (1822-1823), que incluía toda Centroamérica. Derrocado Iturbide, en México se proclamó la república. Al mismo tiempo, se creaba la Federación de las Provincias Unidas del Centro de América (1824). Cuba y Puerto Rico permanecieron sometidas a la metrópoli hasta 1898 (guerra hispano-estadounidense). Agustín de Iturbide y el virrey O’Donojú firman el plan de Iguala, acuerdo mediante el que se pactó la independencia de México. 551 historia universal • La Segunda Mitad del Siglo xix América, Asia y los Imperios Coloniales La emancipación del continente americano abrió una etapa, no exenta de luchas civiles, en la que irían surgiendo distintos Estados soberanos. Pero, al mismo tiempo, el imperialismo colonial europeo se apropiaba de vastos territorios en Asia y África con el exclusivo fin de explotar sus riquezas. AMÉRICA DEL NORTE Y CENTRAL En Estados Unidos, la elección del presidente Lincoln desencadenó la guerra de Secesión (1861-1865) entre los estados sudistas, con una economía agraria esclavista, y los del norte, industrializados y abolicionistas. Tras el triunfo de los nordistas, el país inició un espectacular desarrollo económico e industrial. En México, después de Iturbide y la dictadura de Santa AMÉRICA LATINA Toma de Richmond, capital de los Estados Confederados de América, por las tropas de la Unión, en abril de 1865. Anna, las reformas de B. Juárez se interrumpieron cuando Francia impuso al emperador Maximiliano (1864-1867). En 1876, Porfirio Díaz instauró una dictadura («porfiriato»). La disolución de las Provincias Unidas de Centroamérica (1823-1838) fue el origen de Honduras, Nicaragua, Guatemala, El Salvador y Costa Rica. Las rivalidades entre bandos opuestos llevaron, en Colombia, a una agotadora guerra civil. En América del Sur, la república de la Gran Colombia (1819-1830) se desmembró a la muerte de Bolívar, independizándose Colombia, Ecuador y Venezuela. Los conservadores y las dictaduras militares se impusieron en los dos primeros hasta fines de siglo. Venezuela se constituyó en Estado federal (1864). En el antiguo Virreinato de la Plata, Paraguay sufrió la larga dictadura del doctor Francia (1814-1840). En Argentina, la lucha entre federales y unionistas condujo a la dictadura de Rosas (1829-1852) y no concluyó hasta la presidencia de B. Mitre (1862-1868). Uruguay no se estabilizaría hasta 1903, con J. Batlle y Ordóñez. Perú y Bolivia, gobernados hasta 1827 por Bolívar desde la Gran Colombia, se unieron en una Confederación peruano-boliviana (1837-1839). Chile defendió su independencia derrotando a la Confederación en la batalla de Yungay (1839), y en la guerra del Pacífico (1879-1883) se enfrentó a Perú y Bolivia. Brasil se proclamó independiente en 1822. 552 historia universal • América, Asia y los Imperios Coloniales CHINA Y JAPÓN Estos países habían mantenido hasta el siglo XIX una política de aislamiento. En China, gobernada por la casta de los mandarines, ocupaba el trono desde el siglo XVIII la dinastía manchú de los Qing. A mediados del siglo XIX, la intervención británica aceleró su decadencia. Gran Bretaña cultivaba opio en la India y lo exportaba a China. Cuando el emperador prohibió la entrada de este producto, los británicos iniciaron las guerras del opio (18391842), tras las que obtuvieron la cesión de Hong Kong y otras concesiones. Las tropas europeas ocupan la ciudad china de Cantón, en 1857, para reprimir un violento levantamiento. En Japón, donde los shogunes de la familia Tokugawa ejercían el gobierno efectivo, una flota estadounidense obligó a abrir los puertos japoneses a Occidente (1853-1854). El emperador Mutsu-Hito (1867-1916), al subir al trono, consciente de la fragilidad de las estructuras feudales ante la amenaza exterior, apartó a los shogunes del poder y emprendió una vertiginosa carrera para asimilar los progresos de la civilización occidental. En poco tiempo, llevó el país del feudalismo al imperialismo. Derrotó a China (1894-1895), imponiendo su influencia en Corea, y más tarde a Rusia en Manchuria (1904-1905). LOS IMPERIOS COLONIALES El emperador Mutsu-Hito rodeado de dignatarios de su corte. Los progresos de la Revolución Industrial, la acumulación de grandes capitales y un exceso de producción, junto con la creciente necesidad de materias primas, llevaron a las grandes potencias a extender su control político y económico en todos los continentes. Consolidada su presencia en Asia, obtuvieron nuevas colonias con el reparto de África en la Conferencia de Berlín (1885). El Imperio británico añadió a la India y Canadá, sus antiguas posesiones, Malaca, Nueva Zelanda, Birmania, Egipto, Nigeria, Rhodesia, Sudán, Uganda y Kenya. Francia, presente en las Antillas y en la costa del Senegal, conquistó el Magreb (Argelia, Túnez, Marruecos), adentrándose hasta el África central, y ocupó Indochina. Rusia completó la ocupación de Siberia y conquistó la región del Cáucaso. Alemania inició una tardía expansión colonial en diversas regiones de África y Oceanía. Portugal conservaba extensos dominios en África (Angola, Mozambique) y posesiones en la India y China. España, que había perdido sus últimas colonias americanas, se estableció en el golfo de Guinea y la costa occidental del Sáhara. Batalla de Tel el Kebir, en 1882, en la que las tropas coloniales británicas se enfrentaron a los sudaneses. 553 historia universal • el S iglo xx De la «Paz Armada» a la Primera Guerra Mundial Desde finales del siglo XIX, el mundo estaba colonizado por el imperialismo europeo. Sin embargo, Europa no era un conjunto homogéneo. Entre las potencias dominantes (Gran Bretaña, Francia y Alemania) y los países periféricos existía una distancia notable, pero también entre los mismos Estados coloniales había grandes diferencias. Gran Bretaña y Francia eran muy superiores a Alemania, que por la extensión de sus dominios era equiparable a Portugal, Bélgica o los Países Bajos. Por otra parte, Estados Unidos y Japón emergían como potencias extraeuropeas. LA POLÍTICA DE ALIANZAS Representantes de Francia y Alemania establecen sobre el terreno las nuevas fronteras en el Congo, en 1913. Tras la victoria alemana en la guerra franco-prusiana (1870-1871), Europa vivió un período de paz aparente marcado por la diplomacia de Bismarck, basada en un sistema de alianzas para impedir cualquier enfrentamiento aislado. Los conflictos subyacentes (el desquite pendiente de Francia, el expansionismo germano, la rivalidad colonial) quedaron aplazados. En 1873, el Canciller de Hierro logró unir a Alemania, Austria-Hungría y Rusia en la liga de los Tres Emperadores, a la que se sumó Italia. Este pacto fracasó por la rivalidad austro-rusa en los Balcanes, y en 1882 Alemania, Austria-Hungría e Italia se unieron en la Triple Alianza. En 1890 subió al trono alemán el káiser Guillermo II, con una política imperialista y poco partidario de pactar con Rusia, entrando en conflicto con Bismarck, que se apartó del poder. En 1894, Rusia y Francia firmaron una Doble Alianza (1894), que con la Entente Cordiale (1904) entre Francia y Gran Bretaña, y el pacto británico-ruso, se convirtió en la Triple Entente (1907). Ilustración satírica sobre el predominio de los imperios centrales frente a las naciones de la Entente. ESTALLA LA «PAZ ARMADA» Estos esfuerzos diplomáticos, en los que Europa se dividió en dos grandes bloques, no excluyeron un creciente esfuerzo armamentístico. La llamada «paz armada» llegó al borde de la crisis con el enfrentamiento franco-alemán en Marruecos (1905, 1911) y el conflicto austroruso en los Balcanes, donde Austria-Hungría se anexionó Bosnia-Herzegovina. Fue en su capital, Sarajevo, donde saltó el detonante que hizo estallar la Primera Guerra Mundial: el heredero 554 del Imperio austrohúngaro, el archiduque Francisco Fernando, fue asesinado junto con su esposa por un nacionalista serbio (28 de junio de 1914). Austria declaró la guerra a Serbia, y se desplegó el sistema de alianzas. Rusia apoyó a Serbia, Francia a Rusia, y Alemania, aliada a Austria-Hungría, declaró la guerra a ambas, invadiendo Bélgica (agosto) para avanzar hacia París. Gran Bretaña, ante el avance alemán, se unió a sus aliados. historia universal • de la «Paz Armada», a la Primera Guerra Mundial PRIMERA GUERRA MUNDIAL Los alemanes querían una rápida victoria en Francia, para luego atacar a los rusos en el frente oriental. Pero la contraofensiva francesa estabilizó el frente en el Marne (septiembre). A su vez, la ofensiva rusa sobre Prusia fue detenida por los alemanes en Tannenberg (septiembre). De la guerra de movimientos se pasó a la guerra de trincheras (1915). Los dos bloques llegaron a la guerra total (aviación, blindados y gases tóxicos), buscando nuevos aliados entre los países neutrales. En 1915, Bulgaria y Turquía se unieron a los Imperios centrales, e Italia, Rumania y Portugal, a los Aliados. El ejército alemán utilizó dirigibles en los bombardeos. En 1916, los alemanes lanzaron una gran ofensiva en la batalla de Verdún (febrerojulio), rechazada por el mariscal francés Philippe Pétain. Gran Bretaña se aseguró el dominio marítimo con la batalla naval de Jutlandia, dejando la flota alemana en sus bases. Los alemanes iniciaron una guerra submarina indiscriminada, y al hundir buques estadounidenses, este país decidió en 1917 entrar en el conflicto. Ese mismo año cayó en Rusia el zar Nicolás II, triunfó luego la Revolución de Octubre, y el gobierno bolchevique de Lenin firmó la paz de BrestLitovsk (marzo de 1918), retirándose de la contienda. Uno de los violentos combates acaecidos en Petrogrado durante la Revolución de Octubre, en 1917. Despejado el frente oriental, los alemanes intentaron avanzar contra Francia, pero fueron detenidos en la segunda batalla del Marne (julio), y las tropas mandadas por el mariscal francés F. Foch les hicieron retroceder hasta sus fronteras. Los Imperios centrales se desmoronaron. La monarquía austríaca se disolvió, y Hungría se proclamó independiente. En Alemania, los levantamientos populares culminaron con la abdicación de Guillermo II y la proclamación de la República. El nuevo gobierno alemán firmó el armisticio con los Aliados el 11 de noviembre de 1918. Tras el fin de la guerra, en 1918, las tropas aliadas desfilan victoriosas en París. 555 historia universal • el S iglo xx El Período de Entreguerras (1918-1945) En enero de 1919, la Conferencia de París fijó las condiciones de la paz y creó la Sociedad de Naciones. Alemania, declarada culpable de la guerra, tuvo que firmar el tratado de Versalles (el mismo lugar donde en 1871 se había proclamado el Imperio alemán). Perdió todas sus colonias, tuvo que reducir su ejército a 100.000 hombres y asumir reparaciones de guerra por más de 130 millones de marcos oro. El Imperio austrohúngaro se desmembró, y surgieron nuevos Estados (Checoslovaquia, Yugoslavia). La humillación de los vencidos abonaría los sentimientos ultranacionalistas. Stalin, el máximo mandatario soviético desde 1927. LA REVOLUCIÓN RUSA Y LA URSS Rusia era un gigantesco imperio regido por una monarquía absoluta. La derrota en la guerra ruso-japonesa (1904-1905) había desatado un primer intento revolucionario, y la entrada en la guerra mundial agravó la crisis. En 1917, la Revolución de Febrero sustituyó la monarquía por una monarquía liberal. Meses más tarde estalló la Revolución de Octubre, en la que los soviets (consejos obreros) y los bolcheviques (fracción revolucionaria del partido Socialdemócrata), dirigidos por Lenin (1870-1924), instauraron una dictadura proletaria. Tras la retirada de la guerra mundial (1918) y la guerra civil contra los zaristas y los reformistas liberales, en 1922 se creó la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). Muerto Lenin, con su sucesor, Josef Stalin, la URSS vivió bajo una sangrienta dictadura (1924-1953). DE LOS «FELICES AÑOS VEINTE» A LA DEPRESIÓN Estados Unidos financió la reconstrucción europea con grandes inversiones. Al mismo tiempo, los elevados intereses de la banca estadounidense atrajeron los capitales europeos. La sociedad americana vivió un período de esplendor, que la europea imitaba en los aspectos más frívolos. Pero el brillo de los «felices años veinte» estaba basado en la especulación financiera. En octubre de 1929 estalló la crisis en Wall Street, y el pánico se apoderó de los inversores. El mundo entró de lleno en la Depresión de los años treinta. La esperanza de una salida se cifraba en gobiernos fuertes. En Alemania, la crisis económica fue uno de los factores de la subida de Hitler al poder. Multitud agolpándose frente a la Bolsa de Nueva York, tras el crac bursátil de 1929. 556 historia universal • el Período de Entreguerras (1918-1945) LOS REGÍMENES TOTALITARIOS En el período de entreguerras, las dificultades económicas, sociales y políticas afectaron a las democracias liberales (Gran Bretaña, Francia) y fueron la causa de su pasividad ante el ascenso de los totalitarismos. En Italia, la debilidad del gobierno favoreció el auge del fascismo, cuyo fundador, Benito Mussolini (1883-1945), llegó al poder en 1922. En Portugal, la inestabilidad de la joven república (1926) daría paso a la dictadura de Salazar. En Alemania, el presidente de la frágil República de Weimar, el mariscal Hindenburg, nombró canciller (1933) a Adolf Hitler (1889-1945), líder del partido Nacionalsocialista, apoyado por grupos de industriales y militares e inspirador de la doctrina nazi (supremacía de la «raza aria», exterminio de los judíos, anticomunismo). Multitudinario discurso de Benito Mussolini en Milán. A la muerte de Hindenburg (1934), Hitler se proclamó führer del III Reich e inició una ambiciosa política de rearme. En España, la abdicación de Alfonso XIII y la proclamación de la Segunda República (1931) condujeron a la rebelión militar de julio de 1936, que desembocó en la guerra civil (1936-1939) y, con el apoyo del fascismo y el nazismo, que pudieron probar su potencial militar, el triunfo y la dictadura del general Franco (19391975). También en otros países europeos se instauraron regímenes de corte nacional y autoritario (Austria, Hungría, Rumania y Polonia). Para ellos, el rearme y la expansión territorial podían ser la salida a la crisis económica. Pero en las potencias democráticas prevalecía una política pacifista y militarmente defensiva. Los generales Cavalcanti, Franco y Mola en Burgos, poco después de haberse iniciado la guerra civil española. Adolf Hitler, escoltado por militares, es aclamado por la multitud. Ante sus vacilaciones, decidido a crear la Gran Alemania, Hitler acabó desencadenando la Segunda Guerra Mundial. En 1936, Alemania firmó con Japón el pacto Antikomintern contra la URSS y la Internacional comunista, que la adhesión de Italia convirtió en el Eje Berlín-Roma-Tokio. En 1938 ocupó Austria, y logró el beneplácito de Francia y Gran Bretaña, que creían así preservar la paz, para anexionarse las regiones checas de habla alemana (Sudetes). En 1939 invadió Checoslovaquia, firmó el Pacto de Acero con Italia, y el pacto germano-soviético que incluía el reparto de Polonia, su próximo objetivo. 557 historia universal • el S iglo xx La Segunda Guerra Mundial Alemania invadió Polonia el 1 de septiembre de 1939. Entre abril y junio de 1940, ocupó Dinamarca, Noruega, Luxemburgo, Bélgica y Francia, que quedó dividida en una zona de ocupación y otra bajo el gobierno proalemán del mariscal Pétain en Vichy. En julio, Hitler inició en vano la batalla de Inglaterra (1940-1941) con bombardeos masivos. Entretanto, la intervención italiana trasladó la guerra al Mediterráneo y el norte de África, donde los alemanes tuvieron que acudir en su ayuda. Asegurado el frente occidental, Hitler inició la invasión de Rusia (junio de 1941). Hundimiento de la flota estadounidense en Pearl Harbor por los japoneses. LA GUERRA EN EL PACÍFICO Enfrentado a Estados Unidos, Japón había firmado con Alemania e Italia el Pacto Tripartito (1940). El 7 de diciembre de 1941, su aviación destruyó la flota estadounidense en Pearl Harbor (Hawai). Los japoneses ocuparon Malaca, Birmania, Filipinas, Indonesia y varios archipiélagos del Pacífico. En 1942, los estadounidenses frenaron su avance en las islas Salomón y desde la base de Guadalcanal pasaron a la ofensiva. Un soldado iza la bandera soviética en Stalingrado, tras la derrota nazi. HUNDIMIENTO DE ALEMANIA En el norte de África, los británicos derrotaron a Rommel en El Alamein (octubre de 1942), y el general Eisenhower desembarcó en Marruecos y Argelia. Expulsados de África los italoalemanes, los aliados ocuparon Sicilia y forzaron la caída del régimen italiano (1943). En Rusia, los alemanes capitularon en Stalingrado (enero de 1943). Mientras en el frente oriental los rusos avanzaban hacia Polonia, los aliados llevaron a cabo el desembarco Reunión de Churchill, Roosevelt y Stalin en Yalta para en Normandía (junio de 1944) y liberaron París determinar las respectivas zonas de ocupación en Europa. (agosto). Los alemanes lanzaron la última ofensiva en las Ardenas (diciembre). Próxima la victoria, Churchill, Stalin y Roosevelt acordaron en la Conferencia de Yalta (febrero 1945) la división de Alemania en zonas de ocupación. El 2 de mayo, los soviéticos entraron en Berlín. Hitler se había suicidado en su búnker, y Alemania firmó la rendición (8 de mayo). Japón, tras el lanzamiento de sendas bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki (agosto), capituló el 2 de septiembre. 558 historia universal • de la S egunda G uerra M undial a la G lobalización De la Política de Bloques a la Globalización La bipolaridad resultante del sistema Yalta-Potsdam perdió rigidez con el transcurso de los años. Europa y Japón experimentaron un espectacular crecimiento, y si bien se mantuvieron como aliados de los Estados Unidos, en el terreno económico se convirtieron en sus rivales. La URSS al no poder seguir manteniendo su estatuto de superpotencia, se desmembró, desapareciendo el bloque comunista. LA GUERRA FRÍA Terminada la Segunda Guerra Mundial, los dirigentes nazis fueron juzgados en el proceso de Nuremberg (1945-1946). En 1946 se creó la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Estados Unidos financió con el plan Marshall (1947) la reconstrucción europea, y la URSS se impuso en los países satélites de Europa oriental. El mundo se organizó en dos bloques, el occidental (Estados Unidos y Europa occidental), democrático y capitalista, y el bloque del Este (URSS y Europa oriental), comunista, separados por lo que se llamó el «telón de acero». Durante más de cuarenta años de guerra fría, los dos bloques, ambos con un arsenal nuclear de potencia devastadora, se enfrentaron en guerras locales (Corea, Vietnam). Manifestación ante la puerta de Brandemburgo el día de la caída del muro de Berlín (1 de julio de 1990). NUEVAS RELACIONES INTERNACIONALES En 1959, el encuentro del líder soviético Nikita Jruschov con el presidente Eisenhower en Estados Unidos (1959) marcó el fin de la guerra fría y el inicio de una etapa de distensión, que desembocaría en la coexistencia pacífica. Mientras tanto, frente a la hegemonía económica de EUA y Japón, los líderes europeos iniciaban la integración en un El dirigente palestino Yaser Arafat con el jefe del gobierno espacio común con el tratado de Roma (1957), oriisraelí Shimon Peres, durante el malogrado acuerdo de paz de Washington en 1992. gen de la Comunidad Económica Europea (CEE), desde 1967 Comunidad Europea (CE), y tras el tratado de Maastricht (1992), Unión Europea (UE). En la Unión Soviética, la reestructuración (perestroika) del anquilosado sistema soviético, emprendida por Mijaíl Gorbachov (1985-1991), condujo a la reunificación alemana (1990), la desaparición de la URSS (1991), sustituida por la Federación Rusa, la desmembración del bloque del Este y la independencia de los países bálticos y las repúblicas del Cáucaso y Asia central. Estados Unidos ejerció su papel de «gendarme mundial», secundado por la comunidad europea, durante la guerra del Golfo contra Irak (1991), en la guerra de Bosnia-Herzegovina (1992-1995) y para mediar en el largo conflicto árabe-israelí, iniciado con la independencia de Israel (1948). 559 historia universal • el Siglo XX América Latina a lo largo del Siglo XX A lo largo del siglo XX, la mayor parte de América Latina se ubicaría en el concierto mundial como un bloque de países en vías de desarrollo. Las dos guerras mundiales favorecieron el crecimiento económico de las jóvenes naciones americanas. Al mismo tiempo, fueron consolidando sus identidades nacionales, y surgieron nuevas fuerzas sociales y políticas. Desde los años 50 entraron en escena los movimientos guerrilleros. A partir de los años 80, ante la creciente deuda externa, el Fondo Monetario Internacional impuso un severo reajuste económico y avaló la reinstauración y consolidación de regímenes democráticos. MÉXICO Y AMÉRICA CENTRAL En México, la primera Revolución social del Pancho Villa, revolucionario mexicano, mundo contemporáneo (1910-1920) dio que inició la reforma agraria en 1913. lugar a la creación del Partido Nacional Revolucionario (1929), desde 1946 Partido Revolucionario Institucional (PRI). En los años 30, L. Cárdenas impulsó la reforma agraria y la industrialización. El Vicente Fox, PRI continuó hegemonizando el poder hasta la victoria de V. Fox Quesada presidente de México. (2000), del Partido de Acción Nacional (PAN). En América Central, las viejas oligarquías fueron sustituidas por regímenes liberales, y éstos por dictaduras de diverso signo. Posteriormente, se dotaron de regímenes democráticos Guatemala (1986), Honduras (1980), El Salvador, al desmovilizar la guerrilla y la extrema derecha (1991), y Nicaragua (1990), tras la dictadura somocista y la etapa sandinista. Cuba se libró de la dictadura de Batista con la revolución castrista (1959), pero terminó el siglo pendiente de la imprevisible sucesión de F. Castro. AMÉRICA DEL SUR En las primeras décadas del siglo, en países como Colombia, Brasil, Bolivia y Paraguay pervivieron las viejas oligarquías, y el caudillismo, en Venezuela, Ecuador y Perú. Bolivia y Paraguay se enfrentaron en la guerra del Chaco (1932-1935). Con posterioridad, en Chile, Argentina y Uruguay se instalaron regímenes liberales. Tras la Segunda Guerra Mundial, el panamericanismo emergente culminó con la creación en 1948 de la Guerrilleros de la FARC colombiana. Organización de Estados Americanos (OEA). En Brasil y Argentina se instalaron populismos autoritarios (G. Vargas, J. D. Perón). El reformismo tuvo su opción en Perú (aprismo), Colombia ( J. E. Gaitán) y Bolivia (MNR). En los años 60, el ejemplo de la revolución cubana animó las guerrillas de Perú, Bolivia, Argentina (montoneros) y Uruguay (tupamaros). Chile y Argentina sufrieron en los años 70 las dictaduras militares más opresoras del continente, que dejaron el poder en la década siguiente. 560 historia universal • A mérica L atina a lo largo del S iglo xx En Colombia, gravemente afectada por la guerrilla y el narcotráfico, el presidente A. Pastrana (elegido en 1998) negoció con la guerrilla y pactó con Estados Unidos un programa conjunto de regeneración («plan Colombia»). En Venezuela, la crisis económica y constitucional desembocó en la «revolución bolivariana» de H. Chávez (1999). Ecuador ha estado regido por gobiernos civiles desde 1978. En Perú, tras el paso de Fujimori por el poder (19902000), A. Toledo fue elegido (2001) para impulsar la restauración constitucional. En Bolivia, descartado el golpismo (1982), los sucesivos gobiernos se han enfrentado a la crisis económica. En Brasil la restauración democrática se produjo en 1985, y en Paraguay en 1989. Uruguay vivió el último paréntesis autocrático en 1981-1985. Patio colonial de la sede del poder legislativo, en Caracas. HACIA UN FUTURO ESPERANZADOR En los últimos años del siglo y del milenio, la consolidación de un marco político estable, las políticas neoliberales y la integración de los mercados americanos han marcado la incorporación de América Latina a la economía globalizada. La creación del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay), en 1991, y la firma del Tratado de Libre Comercio (Canadá, EUA, México), en 1992, tenían por objeto impulsar el desarrollo económico. En la III Cumbre de las Américas (2001), los países americanos firmaron la Declaración de la Ciudad de Quebec para crear el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), destinada a convertirse en el mayor mercado común mundial. Palacio de gobierno, en Lima. Reunión de los representantes de los países signatarios del Tratado de Libre Comercio (Canadá, EUA y México). Líderes asistentes a la X Cumbre Iberoamericana, celebrada en Panamá, 2000. 561