TOROS PLANES | EN EL 2005 LA PLAZA MÉXICO Mario Mora sueña con la alternativa Quiere ser matador de toros El sueño de todo novillero, es algún día tomar la alternativa, y convertirse en matador de toros. Mora no es la excepción. Ya se siente convertido en matador de toros. Sueña con ese día, pero tampoco desconoce que para llegar a ese momento, se tiene que seguir preparando, matando toros y toreando novilladas. Por eso cuanta oportunidad se le presenta, misma que aprovecha. No importa si es plaza de primera o de segunda. Lo que vale es sumar corridas, no perderle la cara al toro para llegar bien preparado el “Día de la Verdad”. Por fortuna, dijo el futuro “Torero de la Tierra”, en los festejos que he toreado, me ha ido muy bien, cortando orejas. Esto, por supuesto, son motivos de aliento, para mí en lo personal, como para la gente que me está apoyando, principalmente Don Fernando Abusaid Quinard. Reconoce Mario, que uno de sus principales defectos, es a la hora de matar, por que ha pinchado mucho, lo que ha originado la pérdida de infinidad de orejas. Pero esos detalles, afirmó, se irán corrigiendo conforme transcurra el tiempo y vaya matando más toros. EN LA ANTESALA El sábado, con bastante éxito, Mario Mora se presentó en la Plaza Arroyo de la capital mexicana, considerada como la antesala de la Plaza México, a donde piensa llegar convertido en un novillero triunfador. Mario Mora el torero de la tierra, ya piensa en la alternativa. Con 46 novilladas toreadas, 14 orejas y tres rabos cortados, cumple con los requisitos para ser matador de toros POR RAÚL ZUGASTI REYES OLA DEPORTIVA TORREÓN, COAH.- Cargando con un morral lleno de ilusiones, con la esperanza de con el tiempo se le cumplirán sus sueños, así anda “recorriendo la legua” el novillero de Torreón, Mario Mora. El sabe y reconoce que el camino no es nada fácil. El ambiente de los toros, se complica más. Porque nadie quiere arriesgarse patrocinando las aspiraciones de los novilleros. En lo personal, gracias a mi Padre Dios que me puso en el camino a ese gran aficionado Fernando Abusaid Quinard, he tenido la oportunidad de torear en diferentes plazas de la República, además de estar en muchas ganaderías tentando vaquillas, que me ha servido en mi preparación para las novilladas que he toreado. Cumple con requisitos para tomar al alternativa Mario Mora, de 26 años de edad, ha toreado desde que se inició en el ambiente taurino 46 novilladas, ya cumple con los requisitos que exige la Asociación de Matadores y Novilleros de Toros para otorgar el permiso de la alternativa. “La Asociación exige en un lapso de un año torear 12 novilladas con un mínimo de 5 festejos en Plazas de primera categoría en tercia, matando dos toros”. Gracias a Dios, dijo Mario Mora, ese O L A requisito está cumplido. Por que en mi primera etapa de novillero, alcancé a torear 23 novilladas. Hubo un receso de 5 años. Tiempo que me retiré un tanto desilusionado del ambiente taurino. Porque nadie me apoyaba y por falta de oportunidades, entonces me olvidé un poco del toro y me puse a trabajar. Regreso con mucho más ímpetu en el 2002 y a la fecha he toreado 24 novilladas. En mis dos etapas, he cortado un promedio de 14 orejas y tres rabos. Además de haber toreado en plazas importantes como la de Pachuca, la “Monumental” de Mérida, Yucatán; “La Concordia” de Orizaba, Veracruz; la de Torreón; la de Ixmilquipan, Hidalgo, así como en la “Salvador Barrera” de Ciudad Lerdo, Saltillo, Monterrey, San Pedro Garza García, Nuevo León entre otros. D E P O R T I V A ■ ¿Listo para actuar en la Plaza México? “Claro que sí. Ojalá y se pueda en esta Temporada Chica, la cual empieza en este septiembre, pero como vienen menos novilladas, veo muy difícil que se me pueda programar. Sin embargo no pierdo la esperanza y mi presentación se puede dar el próximo año”. ■ ¿Cómo define su toreo? “Antes del receso de los 5 años, mi toreo lo puedo calificar de tremendista, temerario, arriesgando, siempre recibiendo al toro rodillas en tierra. Ahora, en mi retorno, ya es otro panorama, por que practico el toreo más de muleta, el toreo bueno, con arte, olvidándome de lo anterior que me dejó muchos revolcones”. 13