INFORMACION PARA PACIENTES Definición y síntomas de hemorragia Las hemorragias no revisten en un principio un problema de grave importancia, pero es necesario conocer la definición y los síntomas de hemorragia, porque pueden acarrear grandes problemas si no se actúa debidamente en el momento justo. Descubre cuales son los síntomas de hemorragia y como actuar ante ellos. Los síntomas de hemorragia pueden ser muy variados de acuerdo a de acuerdo a la velocidad con que se pierde la sangre, el volumen y la condición previa del paciente (edad, medicamentos que utiliza, enfermedades recurrentes, etc.). Pero también serán diferentes si se trata de una hemorragia interna o una hemorragia externa. A continuación alistamos los diferentes síntomas de hemorragia: Síntomas de hemorragia externa (por herida abierta) y hematomas El shock de estos dos tipos de hemorragia puede causar los siguientes síntomas: • confusión o pérdida de la lucidez mental • piel fría y humedecida • vértigo o mareo luego de sufrir la lesión • descenso de la presión arterial • palidez • aceleración del pulso y su consiguiente aumento de la frecuencia cardiaca • debilidad Hemorragia externa Síntomas de hemorragia interna (sangrado interno) • Dolor abdominal • Hinchazón abdominal • Dolor de pecho Síntomas de hemorragia externa a través de orificio natural del cuerpo Los síntomas de este tipo de hemorragia estarán marcados por la presencia de sangre en: • las heces (color negro, marrón o rojo rutilante) • la orina (roja, rosa o de color té) • el vómito (rojo o marrón oscuro) • el sangrado vaginal más profuso de lo normal o luego de la menopausia Definición de hemorragia Las hemorragias son pérdidas de sangre que pueden acontecer interna o externamente. La hemorragia interna se refiere a sangre que gotea desde los vasos sanguíneos hacia el interior del cuerpo; mientras que como hemorragia externa podemos diferenciar dos tipos: por orificio natural del cuerpo (recto, vagina o boca), o externa simplemente (producida por la ruptura de la piel). Resumiendo podríamos decir que una hemorragia es la salida de sangre de los vasos sanguíneos a causa de su ruptura. Como detener una hemoragia Si se divisan síntomas de hemorragia externa la primera actitud preventiva que se debe tomar es la de realizar una presión directa sobre la herida. Con una gasa se presiona sobre la herida y se la deja allí cuando se empape en sangre, lo cual facilitará la coagulación. Nunca coloque hilo directamente sobre una hemorragia, ya sea interna o externa; envuélvalo en una toalla u otro medio y aplíquelo luego. Las hemorragias pueden acontecer por lesiones o de forma espontánea. Las hemorragias espontáneas pueden deberse a problemas en el tracto gastrointestinal o urogenital. Dijimos pues que las hemorragias pueden clasificarse por su naturaleza en: Internas – Externas – Externas por orificios naturales del cuerpo. Según de donde proceda la hemorragia se las puede clasificar en otros tres subgrupos: Arteriales Sangre de color rojo vivo y brillante. Flujo intermitente Mucha presión Venosas Sangre de color rojo oscuro. Flujo continuo. Capilares Su flujo se produce a partir de pequeños puntos. Poco flujo. Los síntomas de hemorragia serán diferentes de acuerdo a la velocidad con que se pierde la sangre, el volumen y la condición previa del paciente (edad, medicamentos que utiliza, enfermedades recurrentes, etc.). Definición de qué es hemofilia Qué es hemofilia, es una enfermedad que se manifiesta por la dificultad en la coagulación de la sangre. Esta enfermedad provoca una deficiencia que impide la coagulación correcta y rápida de la sangre. Los sangrados no son pueden ocasionarse por factores externos o se espontáneos. Que es la Hemostasia Saltar a: navegación, búsqueda Vasos sanguíneos por los que circula la sangre. Hemostasia o hemostasis es el conjunto de mecanismos aptos para detener los procesos hemorrágicos; en otras palabras, es la capacidad que tiene un organismo de hacer que la sangre en estado líquido permanezca en los vasos sanguíneos. La hemostasia permite que la sangre circule libremente por los vasos y cuando una de estas estructuras se ve dañada, permite la formación de coágulos para detener la hemorragia, posteriormente reparar el daño y finalmente disolver el coágulo.(Fibrinólisis) En condiciones normales, los vasos sanos están recubiertos internamente por una capa de células endoteliales, que forman el endotelio. Este tejido es antitrombogénico, es decir: protege de la activación de las plaquetas, sintetizando prostaciclina (PGI2) y monóxido de nitrógeno (NO); estos dos mediadores son potentes vasodilatadores, e inhibidores de la agregación plaquetaria, cuya síntesis se estimula durante el proceso de coagulación por mediadores como la trombina y citoquinas; regula negativamente la coagulación, sintetizando trombomodulina, heparina e inhibidores de la vía del factor tisular entre otras moléculas, cuya función es inactivar la trombina y los factores de coagulación; regula la fibrinólisis, sintetizando moléculas del sistema fibrinolítico, como t-PA, una proteasa que corta el plasminógeno para producir plasmina, que a su vez corta la fibrina, disolviendo así el trombo o coágulo. Externamente al endotelio se encuentra el subendotelio (el tejido conectivosubendotelial), que es un tejido trombogénico: es el lugar de adhesión de las plaquetas y de activación de la coagulación. Ello se debe a que este tejido está compuesto de macromoléculas (sobre todo colágeno y miofibrillas) que pueden desencadenar la activación del proceso de hemostasis. En tejidos sanos, el subendotelio está recubierto por el endotelio, y por tanto fuera del alcance de las plaquetas. Sin embargo, cuando se produce daño tisular, los vasos se rompen y el subendotelio entra en contacto con la sangre: las plaquetas entran en contacto con el colágeno de la matriz extracelular, lo que provoca su activación y el inicio del proceso de hemostasis; el factor tisular entra en contacto con el factor de coagulación VII, activándolo, lo que desencadena la vía extrínseca de la coagulación. El actor principal de la hemostasis son las plaquetas, los elementos más pequeños que circulan en la sangre (2 a 5 μm), de forma discoide, anucleados, con una vida media de 10 días y en una concentración plasmática de 150 a 400x10^9/L. Las plaquetas se originan a partir del citoplasma de los megacariocitos y presentan todos los orgánulos de una célula normal (retículo endoplásmico, lisosomas, mitocondrias, microtúbulos, etc) a excepción del núcleo celular. En su membrana plasmática presentan varios tipos de glicoproteínas, como por ejemplo GPIa-IIa, GPIbα, GPIIb-IIIa, GPIb-IX-V, CD9, etc. Otra característica importante de las plaquetas es la presencia de dos tipos de gránulos en su citoplasma: gránulos α, que contienen: factor 4 plaquetario (una quimioquina que se une al heparan), factor von Willebrand, fibrinógeno, fibronectina, factor V, factor VIII, PDGF y TGF-beta; granulos densos o δ: contienen calcio, ADP, ATP, serotonina, histamina y adrenalina.