CASTELLANO Cabeza de la diosa Artemisa del tipo “Colonna” Original romano Mármol Núm. Inv. 133 Cabeza ideal con diadema, de tamaño algo menor que el natural. Esta pieza se inserta en el marco de la escultura ideal, como prueban los rasgos fisonómicos del rostro y el peinado, propio de representaciones de musas o divinidades. La escultura, realizada en mármol, muestra la nariz y el mentón mutilados, además de desperfectos en la parte superior derecha y ligeras marcas de oxidación en el perfil diestro. La zona nasal y la barbilla fueron retocadas en una posible restauración moderna. No obstante, actualmente se ha desprovisto de los añadidos y se expone en su estado original. En lo que atañe al peinado, la ondulación del cabello y el tocado reflejan cierta influencia praxiteliana deudora de las esculturas de los siglos V y IV a.C. La disposición del peinado junto a otros detalles como el nacimiento del cabello en la frente, las orejas tapadas y la inclinación de la cabeza nos remiten a la iconografía de la diosa Artemisa, ajustándose al tipo “Colonna”. 1 La identificación de la cabeza conservada en el Castillo de Bellver como una representación de la diosa Artemisa quedaría, además, reforzada por una posible vinculación con el santuario dedicado a la diosa en Ariccia y la zona colindante. Despuig efectuó diversas campañas arqueológicas en esta zona del Lazio entre 1787 y 1792. Entre las diversas catas abiertas, cabe retomar la descripción que nos ofrece el canónigo Lucidi en su Memoria Histórica de Ariccia refiriéndose a la perpetrada en el viñedo de Giuseppe Morelli y Paolo Ragaglia, en la que bajo una capa de ruinas se halló una ingente cantidad de mármoles con evidentes signos de quemaduras así como restos de metal licuado que habrían correspondido a un nivel de incendio. Sería en este estrato donde Despuig obtuviera los resultados más fructíferos de sus excavaciones. Éstos fueron, según Lucidi, una inscripción en honor de Plotina y muchas estatuas de singular maestría, sacando la conclusión de hallarse ante los restos de una suntuosa villa. De tal manera, la profesora Moltesen apuntó cómo la mayoría de esculturas pertenecientes a esta cata podían ser identificadas por las trazas de metal observadas en la superficie marmórea. El ejemplar que aquí nos ocupa muestra restos de este tipo en la zona del cabello y en el cuello en el perfil izquierdo. Estas señales podrían relacionarlo con el grupo mencionado por Lucidi. BIBLIOGRAFIA: BOVER, J.M., 1845, Noticia Histórico-Artística de los museos del eminentísimo señor Cardenal Despuig existentes en Mallorca, Palma. DOMÍNGUEZ, M., “Cabezas femeninas romanas de la Colección Despuig en Palma de Mallorca”, Escultura Romana en Hispania, VI, Juan Manuel Abascal - Rosario Cebrián, Editores científicos, Murcia, 2010. 2