1037 96. Rondeau vrs. Paredes SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las catorce horas y treinta minutos del día veintinueve de abril de mil novecientos noventa y seis. Vistos en casación de la sentencia definitiva pronunciada por la Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro, a las quince horas del día tres de octubre de mil novecientos noventa y cuatro, que resuelve el recurso de apelación interpuesto de la sentencia definitiva pronunciada por el señor Juez Tercero de lo Civil de este municipio, en el juicio civil ordinario de divorcio promovido por el señor Jean Philippe Claude Rondeau contra la señora Carmen Elizabeth Paredes Platero. El Tribunal de Segunda Instancia, en la sentencia de mérito resolvió: """"Por tanto: De acuerdo a las razones dadas, disposiciones citadas y Arts. 1091 Pr. C., 338, 340, 341 C., a nombre de la República de El Salvador esta Cámara falla: Confírmase la sentencia apelada. Modifícase en el sentido de que la cuota alimenticia con que deberá contribuir el señor Jean Philippe Claude Rondeau, es con tres mil setecientos colones mensuales, la que surtirá efecto al quedar ejecutoriada ésta, debiendo cumplirse con esta obligación el día primero de cada mes, hasta que el menor Jean Philippe Rondeau cumpla veintiún años.""" En virtud de recurso de explicación y reforma interpuesto ante la misma Cámara, dicha sentencia fue explicada y reformada así: """ El juicio del cual esta Cámara conoció en apelación es el juicio civil ordinario de divorcio, que promovió el señor Jean Philippe Claude Rondeau, en su carácter personal contra su cónyuge señora Carmen Elizabeth Paredes Platero, invocando para ello la causal décima del Art. 145 del Código Civil. El recurrente pide se le haga saber las razones para las cuales se dictó dentro del fallo de la sentencia recurrida con respecto a fijar la cantidad de TRES MIL SETECIENTOS COLONES con la que el señor Jean Phillippe Claude Rondeau debe contribuir para el sostenimiento de su menor hijo Jean Phillippe Rondeau Paredes, ya que la considera muy elevada y pide a esta Cámara que se tome en cuenta solamente la cantidad ofrecida voluntariamente por su patrocinado; y, en caso de no ser posible esto, que se le eleve la cantidad asignada hasta los tres mil colones, aduciendo que dicho señor tiene otras obligaciones que cumplir con otros hijos que tiene de su anterior matrimonio; conforme a lo preceptuado por el Art. 436 Pr. C. pronunciada una sentencia definitiva, no se revocará ni enmendará por ningún motivo, pero sí puede explicar algún concepto oscuro, por lo que en lo esencial del mencionado recurso lo explicamos así: La cantidad impuesta al señor Jean Philippe Claude Rondeau para que contribuya al sostenimiento de su mejor hijo fue asignada tomando en cuenta el Art. 234 civil que obliga al Juez a fijar una cuota a favor del hijo menor cuando los padres no se ponen de acuerdo, lo cual significa que este artículo no está con el mismo fundamento que se rige la acción alimentaria; como puede apreciarse en el juicio, la parte actora hizo la oferta de dos mil cuatrocientos colones para contribuir con los gastos de su hijo y la parte demandada en representación de este, no aceptó la oferta sino que contrapuso la propia de cinco mil colones; como sobre esto no hubo acuerdo entre las partes, conforme a la disposición citada, el juez tenía que decidir esta cuestión y es el caso que ambas proposiciones de las partes son las que pueden servir de elemento de juicio para establecer el monto de la contribución y la Cámara consideró muy equitativo que se fijara una cantidad media proveniente de la suma de las dos partes. Respecto al recurso de reforma interpuesto por el licenciado Trabanino Llobell, este es improcedente de conformidad al Art. 436 Pr., por considerar que no está bien utilizado por el abogado del actor el recurso que plantea. Sin embargo la disposición permite que hayan algunas reformas en lo accesorio y pone algunos ejemplos que a juicio de esta Cámara no son taxativos; y por consiguiente tomando en cuenta que se ha resuelto sobre lo principal en relación al cuidado personal del menor, quedó sin regular lo accesorio y procedente de ese cuidado personal otorgado a la madre, como sería la visita que el padre podía hacer al menor; considera esta Cámara que el padre tiene derecho de visitarlo y sacarlo a pasear los días sábados y Domingos de cada semana. De esta forma se resuelve lo referente a la explicación solicitada por el licenciado Trabanino Llobell. """" El Tribunal de Primera Instancia, en su fallo expresa: """"POR TANTO: En base a los considerandos anteriores y Arts. 145 No. 10 C., 417, 419, 421, 422, 427, 429, 432 y 439 Pr. C., a nombre de la República, FALLO: A) Decrétase el divorcio entre JEAN PHILIPPE CLAUDE RONDEAU y CARMEN ELIZABETH PAREDES PLATERO por la Causal de Separación Absoluta y declárase disuelto el vínculo matrimonial que los une y que contrajeron en esta ciudad el dos de junio de mil novecientos ochenta y ocho, B) Confiérese la guarda y cuidado personal del menor JEAN PHILIPPE a la madre, ejerciendo la patria potestad de consuno ambos padres e impónese al padre la obligación de contribuir con la cantidad de TRES MIL COLONES mensuales en concepto de cuota alimenticia en beneficio del menor; C) En su oportunidad, al quedar ejecutoriado este fallo, ordénase la cancelación de la respectiva Partida de Matrimonio y el asiento, por separado, de la de divorcio; D) Por no haberse probado lo contrario, repútase inocentes ambos cónyuges, quienes podrán contraer nuevas nupcias al quedar firme esta sentencia y E) Hágase las modificaciones que la ley ordena en las Cédulas de Identidad Personal a cada uno de los divorciados.- No hay costas."""" Han intervenido como partes: en primera instancia los señores Jean Phillippe Claude Rondeau y Carmen Elizabeth Paredes Platero; los licenciados Jaime Benjamín Trabanino Llobell y Pedro Acosta Ayala Saso, como apoderados de dichos señores, respectivamente; en segunda instancia y en este recurso la señora Paredes Platero y el licenciado Trabanino Llobell en el carácter antes indicado; todos son mayores de edad, de este domicilio, Ejecutivo el primero, Secretaria Comercial la segunda y Abogados los demás. LEIDOS LOS AUTOS; Y, CONSIDERANDO: Que en el escrito de demanda presentado al Juez Tercero de lo Civil de este municipio, la parte actora expresó: """"El día dos de junio de mil novecientos ochenta y ocho contraje matrimonio civil con CARMEN ELIZABETH PAREDES PLATERO, mayor de edad, Secretaria Comercial, de este domicilio y con residencia en calle "Las Bugambilias" pasaje "Los Eucaliptos" número siete de la Colonia San Francisco, de esta ciudad; con quien y como fruto de nuestros actos procreamos a JEAN PHILIPPE RONDEAU, quien naciera el veintiuno de marzo de mil novecientos ochenta y ocho, estado civil y nacimiento, que compruebo con las certificaciones que presento. Que con mi aludida esposa hicimos vida en común hasta el día dieciocho de enero de mil novecientos noventa y dos, fecha desde la cual nos separamos de una manera absoluta e ininterrumpida de lecho, techo y mesa, no habiendo habido desde entonces entre nosotros ninguna comunicación oral, escrita o por interpósita personas, viviendo en casas separadas y económicamente en forma independiente, sin que haya habido alguna muestra afectiva o actitud orientada a continuar con la vida de casados y como no existe razón para que el vínculo matrimonial subsista; vengo a demandar a mi expresada cónyuge en JUICIO ORDINARIO DE DIVORCIO por la causal de SEPARACION ABSOLUTA, de conformidad a los Arts. 144, 145 causal 10ª, 149 del Código Civil y 576 y sig. Pr. C.; por lo que a Ud. con el respeto que se merece PIDO: Admitirme la presente demanda, se me tenga por parte, se agreguen en su oportunidad las certificaciones presentadas, se emplace a mi demandada y en sentencia definitiva mediante la prueba aportada, se decrete el divorcio, declarándose en consecuencia disuelto el vínculo matrimonial, se oficie al Señor Jefe del Registro Civil de esta ciudad a efecto de que cancele la partida número cuatrocientos cincuenta del Libro siete del año de mil novecientos ochenta y nueve y anote por separado la de divorcio y se modifique mi respectiva cédula de identidad. Asimismo pido que en tal sentencia definitiva, se le conceda a mi demandada la guarda y cuidado de nuestro menor hijo, a ambos la representación legal y se me fije la cantidad de dos mil cuatrocientos colones mensuales para contribuir a los gastos de crianza y establecimiento de mi menor hijo ya mencionado.""""" Seguidos los trámites de ley, se pronunció la sentencia de primera instancia; de esta apeló la parte demandada, habiendo el tribunal superior, pronunciado el fallo, explicación y reforma del mismo, transcritos en el preámbulo de esta sentencia, fallo del cual se ha recurrido en casación. CONSIDERANDO: que el recurrente en su escrito de interposición del recurso de casación expresó: """ Que he sido debidamente notificado de la resolución que pronunciasteis en el Recurso de Explicación de la Sentencia Definitiva y de Reforma de lo Accesorios, que oportunamente promoví, respecto de la Sentencia definitiva de grado que oportunamente promovió esta Honorable Cámara, que confirma la pronunciada a su vez, por el señor Juez tercero de lo Civil de este Distrito, y que consecuentemente decreta el divorcio entre el señor don Jean Philippe Claude Rondeau y doña Carmen Elizabeth Paredes. Que no obstante que la sentencia definitiva de grado es favorable a las pretensiones de mi mandante; este no está de acuerdo con la cuota alimenticia que arbitrariamente le fue fijada en dicha sentencia y que promovió el recurso de explicación antes aludido, así como tampoco con el Régimen de Visitas que también le fue fijado, no en la sentencia definitiva de grado sino a raíz del Recurso de Reforma de lo Accesorio, intentado en contra de la misma. En virtud de tales circunstancias, a nombre de mi mandante, señor JEAN PHILLIPPE CLAUDE RONDEAU, vengo a ante esta Honorable Cámara a interponer el Recurso Extraordinario de Casación que establece la ley respectiva, para lo cual, de conformidad con lo dispuesto en el Art. 10 de la ley de Casación, manifiesto lo siguiente: A) MOTIVO EN QUE SE FUNDA EL RECURSO DE CASACION. El motivo específico en que se funda el recurso de Casación que planteo es de INFRACCION DE LEY, establecido en el Art. 2 literal de la ley de Casación, contra la sentencia definitiva pronunciada por esta Honorable Cámara, Art. 1 No. 1º. de la ley de Casación, en el Juicio Civil de divorcio que por la causal 10ª del Art. 145 C., promovió el señor Jean Phillippe Claude Rondeau, contra la señora Carmen Elizabeth Paredes Platero, en el Juzgado Tercero de lo Civil de este Distrito; y porque considero que ha habido INTERPRETACION ERRONEA DE LA LEY, Art. 3 No. 2º ley de Casación, tal como lo explicaré a continuación. B) PRECEPTO QUE SE CONSIDERA INFRINGIDO. El precepto legal que considero infringido es el Art. 234 del código Civil, en cuanto establece una cuota especial de alimentos que debe suministrar a los hijos habidos en el matrimonio anterior y no establece regulación alguna en cuanto al régimen de visitas a dichos hijos. C) CONCEPTO EN QUE HA INFRINGIDO EL ARTICULO 234 C. Considero que se ha INTERPRETADO ERRONEAMENTE el Art. 234, vigente a la época en que se dictaron las sentencias de primera y segundas instancia, por las siguientes circunstancias: 1) FIJACION DE ALIMENTOS. El Art. 234 C., señala que cuando todos los hijos o la mayor parte de ellos queden bajo el cuidado personal de uno de los padres, el Juez fijará la cuantía con que el otro deberá contribuir económicamente para su crianza y educación, tomando en cuenta la cuantía de los respectivos patrimonios. En el caso sub judice, el señor Juez Tercero de lo Civil de este Distrito, al pronunciar sentencia definitiva decretado el divorcio entre el señor Jean Phillippe Claude Rondeau doña Carmen Elizabeth Paredes Platero, estableció lo siguiente: B) Confiérase la guarda y cuidado personal del menor Jean Phillippe a la madre, ejerciendo la patria potestad de consuno ambos padres, e imponese al padre la obligación de contribuir con la cantidad de tres mil colones mensuales en concepto de cuota alimenticia en beneficio del menor. Como ya se dijo, la sentencia definitiva pronunciada por la Honorable Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro, confirmó la pronunciada por el señor a quo pero en el punto relacionado con los alimentos y con base supuestamente en el Art. 234 C., modifico tal sentencia en lo relacionado con la cuota alimenticia, manifestando la sentencia de grado en este sentido, lo siguiente: Modificase (Sentencia) en el sentido de que la cuota alimenticia con que deberá contribuir el señor Jean Phillippe Claude Rondeau, es de tres mil setecientos colones mensuales, la que deberá surtir efecto al quedar ejecutoriada esta, debiendo cumplirse con esta obligación el día primero de cada mes, hasta que el menor Jean Phillippe Rondeau, cumpla veintiún años. Al resolver el recurso de Explicación que el suscrito Promovió ante la Honorable Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro, en cuanto a la cuantía de alimentos a que se condenó a mi mandante; esta Honorable Cámara resolvió lo siguiente: El recurrente pide se le haga saber las razones para las cuales se dictó dentro del fallo de la sentencia recurrida con respecto a fijar la cantidad de TRES MIL SETECIENTOS COLONES con la que el señor Jean Phillippe Claude Rondeau, debe contribuir para el sostenimiento de su menor hijo Jean Phillippe Rondeau Paredes, ya que considera muy elevada y pide a esta Cámara que se tome en cuenta solamente la cantidad ofrecida voluntariamente por su patrocinado; y en todo caso de no ser posible esto, que se le eleve la cantidad asignada hasta los tres mil colones (a que había condenado el señor Juez de Primera Instancia) aduciendo que dicho señor tiene otras obligaciones que cumplir con otros hijos que tiene de su anterior matrimonio; conforme a lo preceptuado por el Art. 436 Pr. C. pronunciada una sentencia definitiva, no se revocará ni enmendará por ningún motivo, pero si puede explicar algún concepto oscuro, por lo que en lo esencial del mencionado recurso lo explicaremos así: La cantidad impuesta al señor Jean Phillippe Claude Rondeau, para que contribuya al sostenimiento de su menor hijo, fue asignado tomando en cuenta el Art. 234 Civil que obliga al Juez a fijar una cuota a favor del hijo menor cuando los padres no se ponen de acuerdo, lo cual significa que este artículo no está con el mismo fundamento que se rige la acción alimentaria; como puede apreciarse en el juicio, la parte actora hizo la oferta de dos mil cuatrocientos colones para contribuir con los gastos de su hijo y la parte demandada en representación de este, no acepto la oferta sino que contrapuso la propia de cinco mil colones; como sobre esto no hubo acuerdo entre las partes, conforme a la disposición citada, el Juez tenía que decidir esta cuestión y es el caso que ambas proposiciones de las partes son las que pueden servir de elemento de juicio para establecer el monto de la contribución y la Cámara consideró muy equitativo que se fijará una cantidad de media proveniente de la suma de las dos partes. Como se nota de las resoluciones transcritas, la Honorable Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro, ha INTERPRETADO ERRONEAMENTE el Art. 234 C., que le manda establecer la cuota de alimentos prevista en la disposición, tomada en cuenta la cuantía de los respectivos patrimonios. Efectivamente en el caso de autos, en ningún momento se ha establecido la cuantía de los respectivos patrimonios, para fijar la cuota alimenticia; el sentido de la ley es clara y siendo así, no hay porque recurrir a su espíritu o intención, Art. 19 C.; y no extiendo valúo de los respectivos patrimonios, como claramente ordena la disposición, debió estarse a la manifestación voluntaria de la parte actora, que claramente solicitó se estableciese una cuota en concepto de alimentos, a favor del menor Jean Phillippe Rondeau Paredes, de dos mil cuatrocientos colones, ya que no siendo un juicio sumario de alimentos autónomos, sino que una fijación especial de alimentos en caso de divorcio, debió estarse a falta de la determinación de la cuantía de los respectivos patrimonios, a la voluntad de uno de los padres, que de esa manera, voluntariamente, había señalado su intención de cumplir con la obligación alimentaria, a favor de su hijo.- La misma está consciente de su interpretación errónea, cuando en el recurso de Explicación de la sentencia manifiesta claramente: como sobre esto no hubo acuerdo entre las partes sobre la cuota alimenticia conforme a la disposición citada, el Juez tenía que decidir esta cuestión y es el caso que ambas proposiciones de las partes son las que pueden servir de juicio para establecer el monto de la contribución y la Cámara considero muy equitativo sin tomar en cuenta la cuantía de los patrimonios, como el Art. 234 C. que se fijará una cantidad media proveniente de la suma de las dos partes, sumas de las partes que nunca se estableció legalmente en juicio como lo ordena la disposición transgredida, sino que se basó en simple manifestaciones de la voluntad, por parte del mandante y sin ninguna prueba por la parte demandada, sino que su sola contraposición como lo reconoce la Cámara. 2) REGIMEN DE VISITAS. En lo referente a esta circunstancia, en el recurso de Reforma de lo Accesorio que se interpuso respecto de la sentencia definitiva de segunda instancia, la Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro, señaló: tomando en cuenta que se ha resuelto sobre lo principal en relación al cuidado personal del menor, quedo sin regular lo accesorio y precedente de ese cuidado personal otorgado a la madre, como sería la visita que el podría hacer al menor; considera esta Cámara que el padre tiene derecho de visitarlo y sacarlo a pasear los días Sábados y Domingos de cada semana. El cuidado personal de los menores habidos en el matrimonio, en el caso de divorcio, está regulado en el Art. 234 C., y en este sentido la Honorable Cámara Segunda de lo Civil, lo ha considerado como accesorio a dicho cuidado personal en forma errónea, disponiendo arbitrariamente el régimen de visitas al referido menor Jean Phillippe Rondeau Paredes, por parte de su padre, para los días sábados y domingos de cada semana exclusivamente; omitiendo hacer referencia al Art. 237 C. que dispone claramente del Régimen de Visitas, estableciendo al respecto, que no se puede prohibir al cónyuge que no tiene el cuidado personal, la visita de los hijos, con la frecuencia y libertad que el juez juzgue conveniente; y si bien en principio la Cámara estableció un régimen de visitas restringido, que en todo caso contraviene la disposición que habla de frecuencia y libertad, no estableció nada sobre la circunstancia especial de enfermedades o situaciones de emergencias en que pudiere verse involucrado dicho menor, en cuyo caso, a criterio de la Cámara, esto, no se pudiere dar. Por todo lo antes expuesto, por este medio Os PIDO: a) admitáis el presente escrito; b) oportunamente, lo remitáis a la sala de lo Civil de la Honorable Corte Suprema de Justicia, para su posterior trámite. Presento las copias de ley."""" Admitido que fue el recurso, se ordenó pasar los autos a la Secretaría para que las partes presentaran sus alegatos dentro del término de ley. CONSIDERANDO: que el recurrente, licenciado Jaime Benjamín Trabanino Llobell, en su carácter de apoderado de Jean Phillippe Claude Rondeau, presentó, dentro del término de ley, su alegato, en el cual expresa las mismas razones que expuso en el escrito de interposición del recurso, por lo que es inoficioso volverlas a reproducir. Por su parte, la señora Carmen Elizabeth Paredes Platero, en su alegato presentado dentro del término de ley, dice: """I) El recurso de casación ha sido impetrado por el apoderado del actor, Licenciado Jaime Benjamín Trabanino Llobell, por la causa genérica de Infracción de Ley y por el motivo específico de Interpretación Errónea de Ley. Estimo que el impetrante no ha fundamentado adecuada y legalmente su recurso, ya que la causa genérica de Infracción de ley, no puede darse, si el motivo específico de Interpretación Errónea de Ley, tampoco se produce y viceversa; o sea que para que se configuren los fundamentos de la Casación, debe existir una relación con causal entre los presupuestos del recurso, lo cual repito, no se ha producido en el caso sub-litem; y por ello considero que el auto pronunciado por Vos, a las nueve horas y doce minutos del veintiocho de febrero del año en curso, por medio del cual se admite el recurso de Casación en cuestión, no está arreglado a derecho y debe ser revocado; ya que lo procedente debió ser que se declarara inadmisible. En efecto: el motivo de Casación de Interpretación Errónea de Ley, "deriva de no dar a la norma el sentido jurídico correcto bajo el supuesto que el juzgador si reconoce su existencia; lo cual significa que éste aplica la disposición legal correctamente elegida, reconociendo su existencia, pero dándole una interpretación equivocada. El precepto que el impetrante considera infringido es el Art. 234 del Código Civil, que ha sido interpretado erróneamente por la Cámara de Segunda Instancia. "que le manda a establecer la cuota de alimentos prevista en esa disposición, tomando en cuenta la cuantía de los respectivos patrimonios", y "en el caso de autos en ningún momento se ha establecido la cuantía de los respectivos patrimonios para fijar la cuota alimenticia". Obviamente: el impetrante no ha cumplido con los requisitos de procedencia del recurso, ni con los que conforman el rigor formal del mismo, que se puntualizan en el Art. 10 de la Ley de Casación, que prescribe "que el recurso de Casación se interpondrá por escrito en que se exprese: 1) el motivo en que se funde; 2) el precepto que se considere infringido; y 3) el concepto en que lo haya sido". Y si como puede advertirse, la parte recurrente considera infringido el Art. 234 c., debió puntualizar el concepto de tal infracción; pero resulta que no lo hizo, ni pudo hacerlo, precisamente porque el Art. 234 C., no hace relación a fijación de alimentos, a la cuantía de estos en consideración a los respectivos patrimonios, etc., tal como se pretende en el escrito de interposición del recurso de que conocéis. Entonces ese precepto (Art. 234 C.), no pudo ser infringido por la Cámara en ningún concepto, con lo cual desde luego se desnaturaliza y se pierde el rigor formal con que la Casación debe impetrarse de acuerdo con el Art. 10 de la Ley de Casación. De donde lógicamente, no debió ser admitido por Vos el recurso de mérito. Debo deciros que el precepto que hace referencia a las circunstancias que se atribuyen al Art. 234 C., es el Art. 233 de ese mismo cuerpo legal, pero que no ha sido invocado como el precepto infringido; y menos se han puntualizado el o los conceptos de las infracciones de ese Art. 233 C. II) Por esas razones, sostengo que el Art. 234 Cn., en el caso que nos ocupa, no ha sido susceptible como se pretende, de ser interpretado errónea o equivocadamente por el Tribunal de alzada, por no ser la norma adecuadamente elegida para el Fallo definitivo, tanto en lo relativo a la cuota alimenticia fijada, como en lo atinente al régimen de visitas, porque repito, ese precepto no se refiere a esas cuestiones y por lo mismo, su elección y aplicación al caso controvertido, no entraña ni infracción de Ley, ni Interpretación Errónea de Ley. En consecuencia: El impetrante no ha fundamentado correctamente y en estricto derecho, el recurso de Casación interpuesto, porque el precepto que considera infringido, (Art. 234 C.) no ha sido objeto de infracción alguna; y por lo mismo el concepto de tales infracciones es absolutamente inexistente. Por todo ello, pido: tengáis por presentado de mi parte este alegato; y de acuerdo con el Art. 16 de la Ley de Casación declaréis inadmisible el recurso de mérito, por haberse admitido indebidamente; o finalmente resolváis por sentencia definitiva, que no ha lugar a Casar la sentencia que se impugna, porque está perfectamente arreglada a derecho.""""". CONSIDERANDO: Que este recurso de casación ha sido interpuesto por infracción de ley, específicamente por interpretación errónea del artículo 234 C., vigente a la fecha de pronunciarse la sentencia recurrida. Según el recurrente la disposición citada fue interpretada erróneamente por la Cámara Sentenciadora en dos aspectos: en el primero en lo referente a la fijación de la cuota alimentaria impuesta al padre del menor Jean Phillippe Rondeau Paredes, procreado dentro del matrimonio que se ha disuelto; y en el segundo, al considerar como accesorio al cuidado personal el derecho de visitas al expresado menor que tiene el padre. En lo que atañe al primer aspecto, el recurrente al expresar el concepto de la infracción manifiesta que la Cámara sentenciadora interpretó erróneamente el artículo 234 C., porque al fijar la cuota de tres mil setecientos colones mensuales con que el señor Jean Philippe Claude Rondeau está obligado a contribuir para el sostenimiento del menor mencionado, no tomó en cuenta la cuantía de los patrimonios de ambos padres, sino que la fijó mediante una operación imaginaria de carácter aritmético, y como en el caso de autos no se ha establecido la cuantía de dicho patrimonio debió estarse a la manifestación voluntaria de la parte actora, pues no se trata de un juicio autónomo de alimentos sino de una fijación especial de alimentos en caso de divorcio y cuando el sentido de la ley es claro no se debe recurrir a su intención o espíritu. Esta Sala estima que cuando en el proceso de divorcio no se ha probado la posibilidad económica de los dos padres y éstos no se han puesto de acuerdo con la cantidad que debe contribuir aquel de los padres que no tiene el cuidado personal del hijo y dicho padre ha propuesto una cantidad, para la determinación de la cuota alimentaria debe estarse en principio a esa proposición, siempre que no se atente contra el interés superior del menor, tomándose en consideración el costo de la vida, la posición social del hijo y la edad escolar del mismo. En el presente caso examinando las actuaciones de los tribunales de instancia, la Sala ha constatado que en el proceso no está probada la capacidad económica de cada uno de los pares del menor Jean Philippe Rondeau Paredes, por ello para fijar la suma de dinero con que el señor Rondeau está obligado a contribuir para la crianza de su menor hijo, se debe tomar en cuenta la suma ofrecida por el obligado, quien por medio de su apoderado, en el alegato de expresión de agravios manifestó que podía pagar hasta tres mil colones mensuales, - suma que se considera aceptable. La Cámara sentenciadora en principio ha interpretado correctamente la norma que se considera infringida, pues en uno de los considerandos de la sentencia recurrida y en la explicación de la misma dijo que no estaba probado en el juicio la posibilidad económica de cada una de las partes, pero se equivoca al fijar arbitrariamente la cuota alimentaria sacando la media aritmética de la cantidad que la parte actora probó que estaba pagando en concepto de alimentos y la solicitada por la demandada. También el recurrente se queja de la sentencia recurrida, porque la Cámara sentenciadora, interpretando erróneamente el Artículo 234 C., consideró el derecho de visitas al menor Jean Philippe Rondeau Paredes que tiene el padre, como accesorio del cuidado personal, y como consecuencia estableció un régimen de visitas restringido sólo para los sábados y domingos de cada semana, sin tomar en cuenta el Artículo 237 C. que regula específicamente el régimen de visitas en el sentido que no se puede prohibir al cónyuge que no tiene el cuidado personal, la visita de los hijos con la frecuencia y libertad que el Juez juzgue conveniente. Esta Sala estima que el derecho que tiene el padre de visitar a sus menores hijos que no están bajo su cuidado personal, es un derecho principal y no accesorio al hecho del cuidado personal que el otro padre tenga de los mismos hijos, el cual tiene en la ley su propia regulación. Para la existencia de ese derecho, desde luego, es condición necesaria que no se le confíe dicho cuidado personal, pero el mencionado derecho de visitas es un derecho principal y considerarlo accesorio del cuidado personal es interpretar erróneamente la norma reguladora de este último. También estima esta Sala que para mantener la unidad de la familia se debe propiciar el acercamiento de los padres con los hijos y por lo mismo cuando uno de los padres no tiene el cuidado personal de los mismos se debe establecer un régimen de visitas adecuado tomando en cuenta al interés superior del menor. En virtud de lo expuesto, procede casar la sentencia recurrida en lo referente a la cuota alimentaria fijada y al régimen de visitas que se estableció, y pronunciarse la legal. POR TANTO: razones expuestas, Arts. 427 y 428 Pr., 18 L.C., 234 y 237 C., a nombre de la República de El Salvador, DIJERON: a) Cásase la sentencia de que se ha hecho mérito en las partes referentes a la cuota alimenticia que fue impuesta a la parte actora y al régimen de visitas establecido; b) Impónese al señor Jean Philippe Claude Rondeau la obligación de contribuir a la crianza del menor Jean Philippe Rondeau Paredes, con la suma de TRES MIL COLONES mensuales hasta que éste alcance su mayoría de edad; c) Se establece que el señor Jean Phillippe Claude Rondeau podrá visitar a su menor hijo Jean Phillippe Rondeau Paredes tres días de la semana, después de clases y en horas que no interfiera con las tareas escolares ni descanso del menor, y a cualquier hora cuando sea necesario como en el caso de enfermedad, y podrá sacarlo a pasear los fines de semana en forma alterna, y en vacaciones tenerlo con él, hasta por tres días consecutivos en cada semana de vacación, previo acuerdo con la madre de dicho menor en el señalamiento de tales días. No hay condenación en costas. Vuelva el proceso al Juez Tercero de lo Civil de este municipio con certificación de esta sentencia y de la pronunciada en Segunda Instancia; y a la Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro el incidente de apelación con certificación de esta sentencia. Líbrese la ejecutoria de ley. Arts. 1060 y 1088 Pr.---JOSE ERNESTO CRIOLLO--CARLOS AMILCAR AMAYA---J. V. PALENCIA.---PRONUNCIADA POR LOS SEÑORES MAGISTRADOS QUE LA SUSCRIBEN.---JOSE ERNESTO ESCALANTE--RUBRICADAS. CCS1037.96