otros, soy de parecer que semejante idea, evidentemente

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otros, soy de parecer que semejante idea, evidentemente inaplicable
á muchas castas, podrá ensayarse en alguna con utilidad si efectivamente las h a y en que el algodón haya llegado al punto de madurez
perfecta cuando hace los últimos esfuerzos para romper la caja; p
nadie duda que la impresión del sol, y mas la del rocío, lo malean
demasiado por ligeras que sean. Lo mejor de todo es colectar los
copos diariamente sobre su misma rama conforme va insinuado.
Otro abuso m u y general y pernicioso es mezclar todo el producto de la cosecha sin distinción de capullos sanos y dañados, ni
de tempranos y tardíos; siendo bien sabido que el de la primera cogida es el superior, y que el de invierno, especialmente el último
que se recoge todavía aprisionado en sus celdillas, es m u y inferior
al de otoño en candidez, fuerza y finura, y a por no haberse sazonado á causa de los frios, y a por la humedad de la estación que
juele empaparlo y desteñir la cápsula.
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Despepitado,
almazenage y embalage.
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La operación de separar al algodón de su pepita es una de las
mas sencillas. Proporciona á los cultivadores en la grana que resulta
un alimento abundante m u y sustancioso y grato, no solo para las
aves, el vacuno, cabrío y demás animales caseros, escepto el cerdo
que sin embargo de apetecerlo mucho aseguran los motrileños muere
con é l , sino aun para el hombre sabiéndolo preparar como hacen en
el Brasil, donde es usual bajo la forma de puches y el nombre de
mangau. Sácase igualmente de la semilla mucho aceite bueno para
las artes, el alumbrado y demás objetos domésticos menos la comida. Liberta ademas el despepitado al producto principal de las ratas
y ratones que lo destrozan increíblemente acudiendo en bandadas
de la vecindad á devorar el grano, y aumenta no poco su valor por
la cantidad de trabajo que le añade, y el menor volumen y peso á
que lo reduce. Pertenece de consiguiente á la economía rural como
la trilla y el aventado de las cereales, y debe mirarse rigorosamente
como complemento de la cosecha.
En las castas cuya simiente está aforrada de borra m u y tupida
suele aderir á ella el algodón tan firmemente, que no pudiendo pasar por la máquina sin romperse los hilos ó despachurrarse las pepitas , se hace preciso desprenderlo á fuerza de dedos; maniobra en
estremo dispendiosa y entretenida, que si no lo destroza también
y lo degrada en la estimación del comercio, según dicen algunos , absorve ciertamente las ganancias que su cultivo es capaz de
producir.
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