MI CAMPAÑA JUNTO AL «CHE» Guido «Inti» Peredo __________________________________ Selección de pasajes del libro del mismo título y traducción al francés de los mismos, por Michel Gladu. Fotografías: Michel Gladu Fotografía del Che Guevara: Alberto Korda Imagen Inti-Che: Pedro Sánchez Sánchez Diseño: Michel Gladu y Pedro M. Martínez __________________________________ Cuarenta años desde su muerte (1967-2007) Revista Almiar -2- Índice Capítulos _______________________________________ Página __________ Nota del editor.................................................. 3 Note de L’Editeur.............................................. 4 Comienza la guerrilla........................................ 5 La guerilla commence....................................... 5 Bolivia: País de vanguardia............................... 6 La Bolivie : Pays d’avant-garde………...…….... 8 Hacia un nuevo Vietnam.................................... 9 Vers un noveau Vietnam.................................... 10 La deserción del P.C.......................................... 10 La desertion du PC............................................. 13 El monte: Escuela para el hombre nuevo........... 15 Le maquis, une école pour l’homme nouveau…. 17 El Yuro……………………………………………... 39 Le Yuro (Le Churo)……………………………….. 47 Revista Almiar -3- Nota del editor Es para el editor motivo de justo orgullo, presentar el libro del combatiente guerrillero comandante Guido «Inti» Peredo: Mi campaña junto al «Che». La presentación tiene el sello de agradecimiento a los jóvenes dirigentes de la Federación Universitaria de la Universidad de San Simón-Cochabamba, por haber brindado la oportunidad de efectuar la presente edición a fin de que se complete la difusión de un documento considerado importante. Sabrán ahora, y por siempre, las generaciones presentes y futuras, por el relato del mismo INTI que fuera el discípulo más querido del «Che», lo que fue la guerrilla de Ñanchahuasú. Ya no se puede negar que la historia de nuestra patria, la que se está escribiendo, está íntimamente ligada a este trascendental hecho histórico. Este libro resulta fundamental para completar el cuadro de la guerrilla, que fuera iniciado con la publicación del Diario del Comandante Guevara y que es bien conocido por todos. El editor señala que como tal, cumple al entregar un libro llamado a hacer historia y espera sea comprendida en su justo alcance. La Paz, Diciembre 1970. El Editor. Revista Almiar -4- NOTE DE L’ÉDITEUR Présenter le livre du Commandant guérillero Guido INTI Peredo “MA CAMPAGNE AUX CÔTÉS DU CHE” est pour l’éditeur un juste motif de grande fierté. Cette présentation porte une marque de reconnaissance envers les jeunes dirigeants de la Fédération Universitaire de l’Université San Simón (Cochabamba), pour lui avoir offert l’opportunité d’en effectuer la première édition afin que se réalise la diffusion d’un document considéré comme important. Les générations présentes et futures connaîtront désormais et pour toujours, grâce au récit de ce même INTI qui fut le disciple préféré du Che, ce que fut vraiment la guérilla de Ñanchaguazú. On ne peut plus nier que l’histoire de notre patrie, celle qui s’écrit, ne soit intimement liée à ce fait historique transcendantal. Revista Almiar -5- Ce livre s’avère être fondamental pour compléter le tableau de la guérilla qui fut ébauche grâce à la publication du “Journal du Commandant Guevara” et qui est bien connu de tous. L’éditeur signale que comme tel, en livrant ainsi un écrit appelé à marquer l’histoire, il fait son devoir et espère que la portée de celui-ci en soit comprise avec justesse. La Paz, décembre 1970. L’Éditeur. I. COMIENZA LA GUERRILLA El Che estaba sentado en un tronco. Fumaba deleitándose con la fragancia del humo. Tenía la gorra puesta. Cuando nuestro grupo llegó, sus ojos relampaguearon de alegría. El hombre más buscado por el imperialismo, el guerrillero legendario, estratega y teórico de proyecciones mundiales, bandera de lucha y esperanza, estaba allí, metido tranquilamente en el corazón de uno de los países más oprimidos y explotados del continente. Era la noche del 27 de noviembre de 1966. Su viaje a Bolivia había sido uno de los secretos más fascinantes de la historia. I. LA GUÉRILLA COMMENCE Le Che était assis sur un tronc. Il fumait en se délectant du parfum du tabac. Il portait sa casquette. Quand notre groupe arriva, ses yeux étincelèrent de joie. L’homme le plus recherche par l’impérialisme, le guérillero légendaire, le stratège et théoricien de projections d’envergure internationale, l’étendard de la Revista Almiar -6lutte et de l’espoir, il était là bien en chair et en os, tranquillement au coeur de l’un des pays les plus opprimés et les plus exploités du continent. C’était le soir du 27 novembre 1966. Son voyage en Bolivie avait été l’un des secrets les plus fascinants de l’histoire. 01 - En la carretera de Vallegrande hacia La Higuera se ve este montículo que parece la boina del Che. Justo en medio de la boina han pintado la estrella roja. 01 - Sur le chemin de Vallegrande à La Higuera, on aperçoit ce monticule qui ressemble au béret du Che. On y a peint en rouge l’étoile à cinq pointes bien connue. II. BOLIVIA: PAÍS DE VANGUARDIA El último día que estuve en La Paz fue el 25 de noviembre de 1966. Cerca de la medianoche salimos en un jeep con Joaquín, Braulio y Ricardo. En otro vehículo más adelante iban Urbano, Miguel, Maimura y Coco. Doce horas después estábamos en Cochabamba. Allí me despedí de mi compañera, que estaba viviendo en casa de mi suegro. La conversación fue tranquila, Revista Almiar -7- desprovista de dramatismo. Ella ya estaba informada de que partía definitivamente al monte. Antes de salir besé a mis hijos. Mi decisión de ingresar en el proceso de la lucha armada fue producto de una serie de consideraciones que estaban madurando desde hacía tiempo. Militante del Partido Comunista de Bolivia junto con Coco desde 1951, conocí la estrategia, táctica y mecánica de este partido. __________ 02 - El Palacio Quemado (dado que fue incendiado), edificio gubernamental en la Plaza Murillo de La Paz, en diciembre de 2003, apenas unas cuantas de semanas antes del enfrentamiento entre la policía y el ejercito boliviano. Este acontecimiento produjo una centena de muertos y de él se dedujo la salida de Goni Sanchez de Lozada (el Blanco). Aquí también actuaron los dictadores Barrientos y Banzer... 02 - L’édifice gouvernemental «El Palacio Quemado» (le «palais brûlé» puisqu’il a déjà été incendié) sur la Plaza Murillo à La Paz en décembre 2003, quelques semaines à peine avant l’affrontement entre les policiers et l’armée bolivienne qui fit une centaine de morts et qui fut le chant du cygne de Goni Sanchez de Lozada (el Blanco). Ce fut aussi le Palais des dictateurs Barrientos et Banzer… Revista Almiar -8- II. LA BOLIVIE : PAYS D’AVANT-GARDE Le dernier jour que j’ai passé à La Paz fut le 25 novembre 1966. Vers le milieu de la nuit, nous partîmes en jeep avec Joaquín, Braulio et Ricardo. Plus en avant, Urbano, Miguel, Maimura et Coco allaient dans un autre véhicule. Douze heures plus tard, nous étions à Cochabamba. Là, je dis au revoir à ma compagne qui vivait chez mon beau-père. La conversation fut calme et dépourvue de dramatisation. Elle était déjà informée que je partais définitivement en montagne. Avant de sortir j’embrassai mes enfants. Ma décision de m’intégrer dans le processus de la lutte fut le produit d’une série de considérations qui mûrissaient depuis longtemps. Militant du Parti Communiste de Bolivie avec Coco depuis 1951, je connaissais bien la stratégie tactique et la mécanique de ce parti. __________ 04- El Cristo de Cochabamba. Esta gran estatua tiene cuatro metros más que la de Río. 04- La statue du Christ de Cochabamba. Cette statue est plus grande de quatre mètres que celle de Rio. Revista Almiar -9III. HACIA UN NUEVO VIETNAM (...) Muchas de las frases previstas por el Che se cumplieron. (...) Por otra parte la CIA instaló su cuartel general en el Palacio Quemado en forma grosera, mostrando a Barrientos como lo que es: una simple figura decorativa; luego ordenó a los gobiernos limítrofes que cerraran sus fronteras a los revolucionarios, e impidieran cualquier tipo de colaboración. Las huellas digitales del imperialismo aparecían grotescas cuando después de cada batalla capturábamos fusiles SIG (una variación del FAL belga), granadas norteamericanas con inscripciones de la ÑATO o latas de alimentos enviadas como «fraternal» contribución por los ejércitos de Argentina, Brasil, Paraguay o Perú, transportadas impunemente por territorios de esos países. __________ 03 - En aquellos tiempos difíciles, parecía que el Cristo do Corcovado (Río de Janeiro) no quería fraternizar con los de Cochabamba o de Santa Cruz que veremos más tarde. Quizá se sentía celoso porque la estatua de Cochabamba es varios metros más grande aunque menos alta. La imagen del Che, que gusta asociarse con la del Cristo, reflejaba ciertamente más de unidad continental que todas las estatuas de estos paises que jamás lograron confraternizar realmente... El regionalismo, por no decir el racismo, se encuentra por todas partes de América del Sur. ¿Che lo habia olvidado...? 03- En ces temps difficiles, le Cristo de Corcovado à Rio de Janeiro semblait bien ne plus du tout fraterniser avec ceux de Cochabamba ou de Santa Cruz que nous verrons Revista Almiar - 10 - plus loin. Peut-être était-il jaloux du fait que la statue de Cochabamba elle-même soit plus grande de quatre mètres bien que moins élevée en altitude. L’image du Che qu’on se plaît à associer à celle du Christ reflétait certes davantage d’unité continentale que toutes les statues de ces pays qui ne parviennent jamais, eux non plus à fraterniser vraiment... Le régionalisme pour ne pas dire le racisme se rencontre partout en Amérique du Sud. Che l’avait-il oublié ? III. VERS UN NOUVEAU VIÊTNAM (…) Plusieurs des énoncés prévus par le Che s’accomplirent. (…) D’autre part, la C.I.A. installa ses quartiers généraux de façon grossière dans le Palacio Quemado en faisant paraître le Président Barrientos tel qu’il était, c’est-à-dire : une simple figure décorative. Après, elle ordonna aux gouvernements limitrophes qu’ils ferment leurs frontières aux révolutionnaires et qu’ils empêchent quelque forme de collaboration que ce soit. Les empreintes digitales des impérialistes apparaissaient grotesques lorsque après chaque bataille nous ramassions des fusils SIG (une variante des FAL belges, des grenades nord-américaines avec des inscriptions de l’OTAN ou bien des conserves alimentaires envoyées en tant que contribution “fraternelle” de la part des armées d’Argentine, du Brésil, du Paraguay ou du Pérou transitées par des territoires de ces pays. IV. LA DESERCIÓN DEL P.C. (...) «Me da esa impresión, afirmó, porque el Partido es nuevo, sus dirigentes son jóvenes y, especialmente, por el inmenso peso moral de los compromisos que han adquirido, desde hace bastante tiempo, con la revolución continental». Este planteamiento refleja la pureza moral del Che, su acendrada lealtad y firmeza para respetar los compromisos. Pero el Partido y sus dirigentes, especialmente Monje, cuyo nombre clandestino era Estanislao, no tenían esa escala depurada de valores morales. Revista Almiar - 11 - Acostumbrados a pactar con partidos corrompidos, con dirigentes traidores y oportunistas, con políticos venales que comerciaban sus principios, habían adquirido esas mismas taras. Por eso le dije a Ramón que estaba seguro que el Partido no se alzaría y mucho menos lo haría Monje, a quien ya consideraba un cobarde. Este juicio no era arbitrario. Monje había recibido entrenamiento militar junto con otros compañeros que más tarde murieron con el Che. En esa oportunidad, por propia iniciativa, propuso un «pacto de sangre» que los ataba, defendiendo la lucha armada hasta la muerte. Esta conducta había impresionado a muchos. Pero tal imagen se borraría pronto. Monje estaba informado de la preparación del foco, y nueve meses antes del primer combate, en julio de 1966, ya estaba en contacto directo en La Paz con Ricardo y Pombo. En esa época se había comprometido a designar a veinte hombres del PCB para que se incorporaran a la lucha armada. Un mes más tarde, cuando los compañeros le preguntaron por esos veinte guerrilleros en potencia, contestó: —¿Qué veinte hombres? Días después Monje amenazó con retirar a los cuatro compañeros bolivianos que trabajaban con los compañeros cubanos en la preparación del foco desde hacía meses. Tal conducta era no sólo la de un hombre vacilante, sino también la de un político extorsionador que quiere sacar el mejor provecho posible a situaciones conflictivas creadas por él mismo. El 28 de septiembre en una reunión que tuvo con Ricardo y con Pombo en La Paz sugirió que se asignaran tareas a diversos núcleos del Partido para garantizar una «mejor organización» de la lucha. En esa oportunidad fue desleal incluso con su organización, porque planteó «despistar al Secretariado del PCB» ya que hablan mucho. Incluso informó de que en el Congreso del Partido Comunista del Uruguay, Kolle había dado cuenta de los planes que existían sobre Bolivia, y Arismendi exigía que todos los Secretarios Generales de PC conocieran el problema. Según Monje el Secretario General del PC uruguayo había amenazado con informar personalmente si los bolivianos no se decidían a hacerlo. A principios de octubre Monje se reunió nuevamente con los compañeros anunciando que el CC del PCB «había dado un paso positivo al aceptar unánimemente la línea de la lucha armada como la vía correcta para llegar al poder». Agregó despectivamente: «Muchos apoyan la lucha armada sólo verbalmente porque son físicamente Revista Almiar - 12 incapaces de participar en ella». Pero días más tarde volvió a crear problemas exigiendo incluso dinero para financiar los sueldos de los funcionarios del partido, cuestión a la que los compañeros accedieron. En esas condiciones llegamos al monte. Mi desconfianza en la dirección del PCB se había ahondado por otra serie de conversaciones que había sostenido con él. Sin vacilaciones saltaba de un extremo al otro. Sus dudas políticas las justificaba con el amor a la familia. Querer a la familia es un acto natural de un guerrillero porque la lucha, si bien es cierto, es dura, está motivada por un profundo sentimiento de amor. Por eso le dije en alguna oportunidad: —Creo que amo a mi familia tanto o más que tú. Pero mi mundo no es sólo mi familia: es todo el pueblo. Porque yo no quiero que mis hijos vivan en una sociedad canibalesca, donde el más fuerte devora al más débil, y el más débil es siempre el hijo del pueblo. Debemos mejorar esta sociedad y ella no se mejora si tenemos actitudes escapistas o cobardes. Es necesario combatir. De allí que en la primera conversación que tuve con el Che le manifesté con franqueza mi desconfianza en la acción del partido y en la conducta de Monje. Incluso le propuse que, dado el cargo que aún ocupaba en el Comité Regional de La Paz, podía reclutar a la mejor gente para ingresarla a nuestro núcleo guerrillero. __________ 05 - Irma Rosado, dos de sus hijos y yo. Esta mujer de La Higuera me llevó a visitar la Revista Almiar - 13 - escuelita donde murió el Che. Tenía 21 años en 1967 y fue testigo de la noche de los soldados borrachos por todo el pueblo; se terminó aquella noche varias horas más tarde con el asesinato del Che. Se acordaba muy bien de todo, como si fuera ayer. En 2003, cuando fue tomada esta fotografía, tenía 57 años. 05 - Irma Rosado, deux de ses fils et moi. Cette femme de La Higuera m’a fait visiter la petite école où mourut le Che. En 1967, elle avait 21 ans et fut témoin de cette soirée de beuverie des soldats boliviens dans tout le village; soirée qui se termina quelques heures plus tard par l’assassinat du Che. Elle se souvient de tout comme si c’était hier. En 2003, quand cette photo fut prise, elle avait donc environ 57 ans. __________ IV. LA DÉSERTION DU PC (…) “J’ai cette impression, affirma-t-il, parce que le Parti est neuf, que ses dirigeants sont jeunes et spécialement aussi à cause de l’immense poids moral des promesses qu’ils ont acquises depuis suffisamment de temps face à la révolutions continentale”. Cet exposé reflète la pureté morale du Che, sa pure loyauté et sa fermeté face au respect d’engagements. Mais le Parti et ses dirigeants, spécialement Monje dont le nom de code était Estanislao, n’affichaient pas cette échelle épurée de valeurs morales. Habitués de négocier avec des partis corrompus, avec des dirigeants traîtres et opportunistes, avec des hommes politiques vénaux qui commerçaient leurs principes, ils avaient acquis ces mêmes tares. C’est pour cela que je dis à Ramón (nom de code de Che) que j’étais certain que le Parti ne se soulèverait pas et qu’encore moins Monje, que je considérais déjà comme un lâche, ne le ferait. Ce jugement n’était pas arbitraire. Monje avait reçu un entraînement militaire aux côtés de quelques autres des compagnons qui plus tard moururent avec le Che. En cette occasion et de propre initiative, il proposa un “pacte de sang” qui devait les lier dans la défense de la lutte armée, jusqu’à la mort. Cette conduite en avait impressionné plusieurs. Mais une telle image allait bientôt s’estomper. Monje était au courant de la préparation de la cellule dormante et neuf mois avant le premier combat, en juillet 1966, il était déjà en contact avec Ricardo et Pombo à La Paz. À cette époque, il s’était engagé à désigner vingt hommes du PCB pour qu’ils s’incorporent à la lutte armée. Un mois plus tard, quand les camarades lui demandèrent ces vingt guerriers potentiels, il répondit : “Quels vingt hommes ?” Revista Almiar - 14 - Les jours suivants, Monje menaça de retirer les quatre camarades boliviens qui travaillaient avec les camarades cubains à la préparation de la cellule de lutte depuis des mois. Un tel comportement était non seulement celui d’un homme chancelant, mais encore celui d’un politicien escroc qui voulait soutirer le meilleur profit possible des situations conflictuelles qu’il avait lui-même créées. Le 28 septembre, lors d’une réunion qu’il eut avec Ricardo et Pombo à La Paz, il suggéra qu’ils soient assignés à diverses tâches administratives du Parti pour assurer une “meilleure organisation” de la lutte. En cette occasion, il fut déloyal même face à son organisation parce qu’il envisageait de “désorienter le Secrétariat du PCB” qui déjà “parlait beaucoup”. Même qu’il les informa que lors du Congrès du Parti Communiste d’Uruguay, Kolle s’était rendu compte des plans qui se tramaient en Bolivie; et Arismendi exigeait que tous les Secrétaires Généraux du PC connaissent le problème. Selon Monje, le Secrétaire Général du PC uruguayen avait menacé de l’informer personnellement si les boliviens ne se décidaient pas à le faire. Au début d’octobre Monje se réunit de nouveau avec les camarades en leur annonçant que la direction du PCB “avait fait un pas positif en acceptant unanimement la ligne de la lutte armée comme voie correcte pour arriver au pouvoir”. Il ajouta avec mépris : “Plusieurs appuient la lutte armée seulement verbalement parce qu’ils sont physiquement incapables d’y participer”. Mais quelques jours plus tard, il revint créer des problèmes en exigeant même de l’argent pour financer les salaires des fonctionnaires du Parti; question à laquelle les camarades acquiescèrent. C’est dans ces conditions que nous arrivons dans le maquis. Ma confiance dans la direction du PCB (Parti Communiste Bolivien) s’était détériorée aussi par une autre série de conversations que j’avais eues avec lui. Sans hésitation, il sautait d’un extrême à l’autre. Ses doutes politiques, il les justifiait par l’amour de la famille. Aimer la famille est un geste naturel de guérillero, parce que la lutte si dure soit-elle, c’est certain, est motivée par un profond sentiment d’amour. C’est pourquoi je lui dis en quelques occasions : “Je crois que j’aime ma famille autant sinon plus que toi. Mais mon monde n’est pas seulement ma famille; c’est tout le peuple. Parce que je ne veux pas que mes enfants vivent dans une société cannibale, où le plus fort dévore le plus faible; et le plus faible, c’est toujours Revista Almiar - 15 - l’enfant du peuple. Nous devons améliorer cette société et celle-ci ne s’améliorera pas si nous avons des attitudes fuyantes ou lâches. Il est nécessaire de combattre.” À partir de là, à la première conversation que j’ai eue avec le Che, je lui manifestai avec franchise ma méfiance dans l’action du Parti et dans la conduite de Monje. Je lui proposai même qu’étant donnée la place qu’il occupait sur le Comité Régional de La Paz, il pouvait recruter les meilleures personnes pour grossir notre noyau de guérilleros. V. EL MONTE: ESCUELA PARA EL HOMBRE NUEVO Los problemas provocados por la deserción del Partido en el instante que más precisábamos de él no fue obstáculo para que nuestro grupo guerrillero elevara su moral y realizara trabajos preparatorios que tenían carácter educativo. El Che estimaba que el hombre, cuando esta metido en el monte, proscribe los hábitos de la ciudad, no sólo por la dureza con que se desarrolla la lucha y falta de contacto con algunas formas culturales o de «civilización». La vestimenta andrajosa, la falta de higiene personal, la comida escasa y a veces primitiva, muchas veces la carencia de utensilios domésticos, obliga al guerrillero a adoptar ciertas actitudes semi-salvajes. Che combatía con energía esta conducta y orientaba el trabajo para estimular un espíritu constructivo y creador del guerrillero, la preocupación por la ropa, las mochilas, los libros y todo lo que constituía nuestros «bienes materiales». Por eso dirigió con cariño las «obras públicas» del segundo campamento, ubicado a unos ocho kilómetros de la Casa de Calamina. Rápidamente se construyeron bancos, un horno para el pan, que estaba a cargo de Apolinar, y otro tipo de «comodidades». Regularmente ordenaba lo que él bautizó como «guardia vieja»: una limpieza a fondo de todo el campamento. Algunos periodistas y críticos de nuestra guerra han considerado que ese campamento era la base de operaciones estables. Es una apreciación falsa. Ramón nunca pensó quedarse ahí definitivamente. Todo el trabajo realizado, con excepción de las cuevas estratégicas, tuvo el carácter ya descrito: para que Revista Almiar - 16 - el hombre estuviera en permanente actividad y no perdiera sus costumbres adquiridas. Primera escuela de «cuadros» Allí surgió también lo que podría denominarse la primera «escuela de cuadros». Todos los días de 4 a 6 de la tarde los compañeros más instruidos, encabezados por el Che, daban clases de gramática y aritmética, en tres niveles, historia y geografía de Bolivia y temas de cultura general, además de clases de lengua quechua. En la noche, a los que deseaban asistir voluntariamente (las clases de la tarde eran obligatorias), Che les enseñaba francés. Otro tema al que le daba primerísima importancia era el estudio de la Economía Política. __________ 06 - Vista de perfil de la fachada de la escuelita de La Higuera. Curiosamente, cuando quería que el monte fuera una escuela para el «nuevo hombre», el Che va a morir justamente entre las paredes de una escuela... Al fondo de la fotografía vemos el monte hacia la Quebrada del Churo (entre Pucara, La Higuera y Alto Seco) donde fue capturado. 06 - Vue de profil de la façade de la petite école de La Higuera. Curieusement, le Che qui souhaitait que le maquis soit pour les guérilleros une école de « l’homme nouveau », allait lui, justement mourir entre les murs d’une école... La prise de vue est dirigée (au fond) en direction de la faille du Churo (entre Pucara, La Higuera et Alto Seco) où il fut capturé. __________ Revista Almiar - 17 - 07 –La escuelita fue reformada después de los tristes acontecimientos. Aquí vemos la puerta por la cual entró el asesino del Che, a la izquierda de la puerta está la placa de conmemoración que puso el hijo menor del Che (Ernesto Guevara-March, viniendo de Cuba) en octubre 2002, para el 35º aniversario de la muerte de su padre 07- La petite école de La Higuera fut bien sûr rénovée depuis les tristes événements. On voit ici la porte par laquelle est entré l’assassin du Che et juste à gauche, la plaque commémorative que le fils cadet du Che (Ernesto Guevara-March), est venu de Cuba y apposer en octobre 2002 pour le trente-cinquième anniversaire de la mort de son père. V. LE MAQUIS, UNE ÉCOLE POUR L’HOMME NOUVEAU Les problèmes provoqués par la désertion du Parti d’alors furent davantage que nous le précisions, un obstacle à ce que notre groupe guérillero élevât son moral et réalisât des travaux préparatoires ayant un caractère éducatif. Le Che savait que l’homme, lorsqu’il est confronté au maquis, abandonne ses habitudes de la ville, et ce, non seulement par la force avec laquelle la guerre se développe mais encore par le manque de contact avec quelque forme de culture ou de “civilisation”. La tenue vestimentaire déguenillée, le manque d’hygiène personnelle, la nourriture déficiente, parfois primitive et très souvent, la carence d’ustensiles domestiques, toutes ces choses obligent le guérillero à adopter certaines attitudes à demi sauvages. Le Che combattait avec énergie cette conduite et orientait le travail de manière à stimuler l’esprit constructif et créateur du guérillero : le soin porté à la Revista Almiar - 18 - tenue vestimentaire, au sac à dos, aux livres et à tout ce qui constituait les “biens matériels”. Pour se faire, il dirigea avec soin les “travaux publics” du second campement situé à quelques huit kilomètres de la Maison de Calamina. Rapidement on construisit des bancs, un four à pain dont Apolinar se chargeait ainsi que d’autres types de “commodités”. Régulièrement, il ordonnait à ce qu’il appela la “vieille garde”, un nettoyage à fond du campement. Certains journalistes et critiques de notre guerre ont considéré que ce campement était la base permanente des opérations stables. C’est une fausse appréciation. Ramón (Che) n’a jamais songé à rester là définitivement. Tout le travail réalisé, à l’exception des grottes stratégiques, n’eut que le rôle déjà décrit, soit : que l’homme reste toujours en permanente activité et qu’il ne perde jamais ses habitudes acquises. C’est là aussi que fut mise sur pieds ce que l’on pourrait appeler la “première école des cadres”. Tous les jours, de 16h00 à 18h00, les camarades les plus instruits, dirigés par le Che, donnaient des cours de grammaire et d’arithmétique en trois niveaux; aussi, des cours d’histoire et de géographie de la Bolivie et des sujets de culture générale. En outre il se donnait des classes en langage quechua. Le soir, à tous ceux qui désiraient y assister volontairement (les cours de l’après-midi étant obligatoires), Che leur enseignait le français. Un autre thème auquel il donnait une importance primordiale, c’était l’étude d’économie politique. .......... (...) Después de estos incidentes en que Marcos fue sustituido de la vanguardia, mantuvo una conducta de absoluta disciplina, y se empeñó por ser el mejor de todos. Incluso se destacaba por cargar, en condiciones cada vez más difíciles, la mochila más pesada, y además de su fusil Garand, una ametralladora 30. Marcos y Pacho murieron combatiendo heroicamente, convirtiéndose en hombres ejemplares y queridos. El otro hecho penoso fue la muerte de Benjamín, un joven boliviano de físico muy débil; sin embargo tenía un carácter fuerte, una posición ideológica muy desarrollada, y una decisión inquebrantable de defender con su vida nuestros ideales. Che quería mucho a Benjamín, y en los meses que permaneció con nosotros, siempre lo estimuló a seguir adelante. En el Río Grande Benjamín caminaba muy agotado y tenía Revista Almiar - 19 - dificultades con su mochila. Cuando marchábamos por una faralla hizo un movimiento brusco y cayó al río que iba muy crecido, y con fuerte corriente. No tuvo fuerzas para dar unas cuantas brazadas. Corrimos a salvarlo e incluso Rolando se tiró al agua y buceó tratando de rescatarlo. No lo pudimos ubicar. Estos problemas hicieron impacto en nosotros. Fue allí cuando afloró nuevamente el genio del Che quien nos dio lecciones de solidaridad, disciplina y moral. __________ 08 - Este puente que pasa por encima del Rio Grande fue un «regalo» (¿envenenado?) por parte del imperialismo de los Estados Unidos. Vemos todavía el eslogan electoral «CON BANZER SÍ», quien fue responsable de la masacre de San Juan en el año 1976; el mismo Banzer que después del otro dictador, Barrientos, mató a decenas de mineros de las minas de Potosi y Siglo XX cuando se sublevaron contra el gobierno por sus condiciones de vida. 08 - Ce pont qui enjambe le Rio Grande fut un « cadeau » (empoisonné…?) de l’impérialisme américain… On y voit encore aujourd’hui le slogan de campagne électorale « Con Banzer sí ». Ce même Banzer qui à l’instar de l’autre dictateur Barrientos fut le responsable du massacre des mines de Potosi et Siglo XX : la fameuse nuit de la San Juan où moururent des dizaines de mineurs en révolte contre le gouvernement et leurs conditions de vie en 1976. Revista Almiar - 20 ……….. (…) Après les incidents à cause desquels Marcos fut destitué de l’avantgarde, il maintint une conduite d’absolue discipline et il s’évertua à devenir le meilleur de tous. Entre autres, il se distinguait en se chargeant, dans des conditions chaque fois plus difficiles, du sac à dos le plus lourd et en plus de son fusil Garand, d’une mitraillette 30. Marcos et Pacho moururent en combattant héroïquement, se transformant en hommes exemplaires et adulés. L’autre événement pénible fut la mort de Benjamin, un jeune bolivien de constitution très Chetive; cependant, il possédait un caractère fort, une position idéologique très développée et un entêtement inébranlable à défendre au prix de sa vie, nos idéaux. Che aimait beaucoup Benjamin et durant les mois que ce dernier se tint parmi nous, Che le stimulait à aller de l’avant. Près du Rio Grande, Benjamin très épuisé marchait et avait de la difficulté avec son sac à dos. Alors que nous marchions sur une falaise, il fit un mouvement brusque et tomba dans la rivière qui gonflait beaucoup avec un courant très fort. Il n’eut pas la force de donner plus que quelques brasses. Nous courûmes pour le sauver et même Rolando se lança à l’eau et plongea en essayant de le rescaper. Nous ne pûmes le localiser. Ces problèmes eurent un impact sur nous. Ce fut en ces moments que ressurgit de nouveau le génie d’un Che qui nous donna des leçons de solidarité, de discipline et de moral. ………. (...) El 22 tuvimos un breve choque con el ejército. En la mañana habíamos sorprendido al chofer de una camioneta de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) que estaban examinando nuestras huellas acompañado por un campesino que habla delatado nuestra presencia. Los apresamos. Enseguida nos emboscamos para detener otros vehículos y golpear al ejército si se acercaba hasta nuestras posiciones. Sólo logramos conseguir alguna mercancía y plátano de un camión que cayó más tarde. A las 8 de la noche, cuando estábamos listos para partir, se sintió un breve tiroteo. Era Ricardo que sorprendió a un grupo de soldados y a un guía que llegaban a un firme para enseguida caer sobre nosotros. No supimos si habíamos ocasionado bajas al enemigo. En esa oportunidad se nos perdió el Loro Vázquez. Revista Almiar - 21 - Nuestros hombres estaban emboscados y Rolando había dado orden de abandonar las posiciones a las 18.30 horas. Después de ese plazo, le esperaron un largo rato pero no apareció. Días más tarde la radio anunció que había sido capturado herido. Luego difundió su «fuga» del hospital de Camiri. Algunos periodistas han divulgado la idea de que el Che lo envió en una misión solitaria. Esto es absolutamente falso. Nunca supimos qué había pasado con él. El mismo Ramón explica en su Diario que el saldo es «negativo» entre otros factores, por la «pérdida (aunque espero que transitoria) de un hombre...». Antecedentes que hemos recogido con el tiempo nos permiten conocer, sin embargo, que Loro murió como un valiente. Herido, fue bestialmente torturado por los esbirros del presidente Barrientos. Como no le pudieron sacar ni una sola confesión que nos delatara, se lo llevaron en un helicóptero y lo tiraron vivo, en medio de la selva. Lorito fue un hombre valiente, audaz, leal. Fue uno de los cuatro que trabajó incansablemente en la preparación previa al foco. __________ 09 - Este río desemboca en Las Cuevas, cerca de Samaipata. Probablemente en un paisaje similar fue tirado vivo el Lorito desde un helicóptero en vuelo, por órdenes de Barrientos. 09 - Cette rivière se déverse à Las Cuevas près de Samaipata. C’est probablement dans un paysage semblable que fut largué Lorito vivant, du haut d’un hélicoptère, sous les ordres de Barrientos. Revista Almiar - 22 - 10 - Paisaje de Las Cuevas cerca de Samaipata. 10 - Un autre paysage de Las Cuevas près de Samaipata. 11 - Aquí está la catarata de Las Cuevas cerca de Samaipata. 11 - Voici la chute de cette rivière de Las Cuevas près de Samaipata. __________ (…) Le 22 avril, nous eûmes une brève altercation avec l’armée. Le matin, nous avions surpris le chauffeur d’une camionnette de la YPFB (Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos) qui examinait nos traces, en compagnie d’un Revista Almiar - 23 paysan qui avait mouchardé notre présence. Nous les capturâmes. Tout de suite, nous nous embusquâmes pour arrêter d’autres véhicules et attaquer l’armée si elle s’approchait de nos positions. Nous réussîmes seulement à obtenir quelques marchandises et quelques bananes d’un camion qui arriva plus tard. À huit heures du soir, alors que nous étions prêts à partir, en entendit une brève fusillade. C’était Ricardo qui avait surpris un groupe de soldats avec un guide qui arrivait dans une ferme pour aussitôt tomber sur nous. Nous n’avons pas su si nous avions occasionné des pertes à l’ennemi. En cette occasion, nous perdîmes Loro Vásquez. Nos hommes étaient embusqués et Rolando avait donné l’ordre d’abandonner nos positions à 18h30. Après ce délai on l’attendit un bon moment, mais il n’apparut point. Des jours plus tard, la radio annonça qu’il avait été capturé, blessé. Plus tard, on diffusa son “évasion” de l’hôpital de Camiri. Quelques journalistes ont diffusé l’idée que Che l’avait envoyé en mission solitaire. C’est absolument faux. Nous ne sûmes jamais ce qu’il était advenu de lui. Même Ramón explique dans son Journal que le bilan est “négatif” entre autres facteurs, par la “perte (bien qu’il l’espère temporaire) d’un homme...”. Des données que nous avons colligées avec le temps nous permettent de savoir cependant, que Loro mourut comme un brave. Blessé, il fut torturé comme une bête par les sbires du président Barrientos. Comme ils ne purent soutirer de lui une seule confession qui nous dénoncerait, ils le transportèrent dans un hélicoptère et le jetèrent vivant dans le vide au milieu de la forêt. Lorito fut un homme courageux, audacieux et loyal. Il fut l’un des quatre qui travailla inlassablement à la préparation initiale de la cellule révolutionnaire. ………. (...) El subteniente Laredo tenía un diario de campaña y una carta de su mujer que nos causó tremenda sorpresa. En el diario en la fecha mercada de 1º de mayo se refería a los trabajadores como holgazanes y otros adjetivos despectivos. En cuanto a su tropa hablaba de la falta de moral combativa, mencionando a soldados que lloraban cuando se enteraban de la presencia cercana de los guerrilleros. La carta de la esposa se refería a la preocupación que ella tenía por Laredo. Pero luego hacía un agregado en el que más o menos decía lo siguiente: «Nuestra amiga te pide que nos traigas una cabellera de - 24 guerrillero y yo te pido lo mismo para adornar el living de la casa». Revista Almiar Este episodio nos hace recordar los tristes y siniestros días del nazismo y la profunda brecha que existía entre la conducta o el ánimo del ejército respecto a los guerrilleros, que contrastaba con el trato digno y humano que nosotros dimos a los prisioneros. La carta y el diario causaron conmoción y repudio entre nosotros. El respeto del Che por la persona humana, independientemente de la conducta que ésta observara, se puso de manifiesto una vez más al decidir esperar una oportunidad adecuada para devolver el diario del teniente Laredo a la madre de éste, puesto que el oficial enemigo así lo hacía constar, como un deseo expreso, si llegaba a morir en combate o era capturado por nosotros. El diario de Laredo permaneció en la mochila del Che hasta la emboscada de Yuro el 8 de octubre. El segundo combate del mes de mayo fue el día 30. Habíamos llegado hasta la línea del ferrocarril a Santa Cruz buscando el Michuri, siempre con el pensamiento puesto sobre Joaquín que, al parecer, se había movido hacia el norte. En un camino petrolero Che dejó una emboscada mientras se realizaba una exploración en un jeep que se había requisado a YPFB. A las tres de la tarde se produjo el choque. .......... (…) Le sous-lieutenant Laredo avait une lettre de son épouse et un journal de campagne qui nous causa une terrible surprise. Dans ce journal, en date du premier (1er) mai, il faisait référence aux travailleurs comme étant des fainéants ainsi que d’autres épithètes méprisantes. Quant à ses troupes, il en parlait comme manquant de moral combatif en mentionnant que les soldats pleurnichaient quand on les informait de la présence proche de guérilleros. La lettre de son épouse parlait de la préoccupation de Laredo à son égard, mais plus loin il y avait un ajout qui disait plus ou moins ceci : “Notre amie te demande que tu nous envoies un scalp de guérillero et je te demande la même chose pour décorer le salon de la maison”. Cet épisode nous fit nous remémorer les tristes et sinistres jours du nazisme et la profonde faille qui existait dans la conduite et l’esprit de l’armée face aux guérilleros; ce qui contrastait avec le traitement humain et digne que nous donnions aux prisonniers. La lettre et le journal provoquèrent rejet et bouleversement parmi nous. Revista Almiar - 25 - Le respect de Che pour la personne humaine, indépendamment de la conduite qu’il constate, se remarqua manifestement davantage par sa décision d’attendre une occasion adéquate pour remettre le journal du lieutenant Laredo à sa mère, étant donné que l’officier ennemi l’avait noté ainsi, comme un souhait exprès, s’il venait à mourir au combat ou à être fait prisonnier par nous. Le journal de Laredo resta dans le sac à dos de Che jusqu’à l’embuscade du Yuro (Churo), le 8 octobre. Le deuxième combat de ce mois de mai eut lieu le trente (30). Nous étions arrivés à la ligne du chemin de fer de Santa Cruz en recherchant le Michuri, toujours en ayant en tête, nos pensées tournées vers Joaquín qui, semblait-il s’était déplacé vers le Nord. Sur un chemin pétrolifère, Che installa une embuscade pendant qu’il réalisait une reconnaissance dans une jeep qu’il avait réquisitionnée à la YPFB. À 15h00 se produisit l’affrontement. __________ 12 - La fachada del Palacio de la Justicia ofrece a la frase siguiente: «Dios ilumine al hombre para que en este Templo se haga Justicia»... Al frente del edificio está la maravillosa escultura de La Mujer Cruceña. Son notables en ciertos aspectos las mujeres de Santa Cruz, salvo cuando hacen como la esposa del subteniente Laredo... 12 - Sur la façade du Palais de Justice de Santa Cruz, nous lisons la phrase suivante : «Que Dieu éclaire l’homme pour que dans ce temple s’accomplisse la Justice »… À côté de cet édifice se trouve la magnifique sculpture de La Femme Cruceña. Les Revista Almiar - 26 - femmes de Santa Cruz sont remarquables à bien des égards, sauf quand elles agissent comme l’épouse du sous-lieutenant Laredo… __________ (...) Al día siguiente se produjo un acontecimiento espectacular. Paulino nos informó que los tres «comerciantes» no eran tales, sino espías que enviaba el ejército para realizar labores de inteligencia. La valiosa información de Paulino, que a su vez la había recibido de su novia, otra muchacha del poblado, nos permitió detenerlos. Fue una colaboración sumamente importante que nos mostraba las ricas perspectivas que existen cuando el contacto con los campesinos es prolongado. Paulino continuó posteriormente con nosotros y fue enviado a Cochabamba llevando algunos mensajes, los que no llegaron a su destino porque el ejército detuvo al muchacho. En ese mismo lugar Che trabajó como dentista y se sacó el cariñoso apodo de Fernando Sacamuelas. Nuevamente empezamos a buscar Río Grande y posteriormente la desembocadura del Rosita para llegar a Samaipata, donde pudiera estar Joaquín, ya que Che le había comunicado que ésta era una zona probable de operaciones. Sorpresivamente el día 10 una escuadra nuestra compuesta por Coco, Ñato, Pacho y Aniceto tuvo un choque con el ejército. El acontecimiento se desarrolló así: los cuatro compañeros llevaban la misión de llegar a la casa de un campesino para buscar alimentos e información, cuando se encontraron inesperadamente con los soldados que avanzaban por las márgenes contrarias del río. Inmediatamente se intercambió un tiroteo nutrido con un inmenso gasto de parque por parte de los nuestros. Posteriormente se retiraron Ñato y Aniceto y luego lo hicieron Coco y Pacho. No tuvimos noticias de bajas en las filas enemigas hasta que dos días después los noticiarios radiales anunciaban que habíamos muerto a un soldado y herido a otro. Aunque no habíamos sufrido ninguna baja, el ejército, en sus partes oficiales, anunciaba mi muerte y la de otros dos compañeros no identificados. Ésta era una simple maniobra de carácter sicológico para disminuir en parte el impacto de nuestros golpes, el efecto desastroso para ellos que estaba causando en la opinión pública. Por eso, mientras nosotros llegamos de nuevo al Río Grande y luego al Rosita en busca de nuestra retaguardia con la cual Revista Almiar - 27 - habíamos perdido contacto desde hacía casi tres meses, el ejército desviaba una parte de sus recursos a las tareas represivas en las minas. Aunque no nos informamos por las emisoras bolivianas, que estaban censuradas, una radio argentina dio la noticia de la masacre de San Juan en las minas de Siglo XX, con un saldo de 87 víctimas. En esta forma, el gobierno lacayo del gorila Barrientos pretendía acallar el clamor de las peticiones obreras y los signos evidentes de apoyo de este sector hacia nuestra lucha. Esta acción demostraba, indudablemente, la debilidad del régimen. Nosotros adquiríamos más conciencia de que un grupo pequeño de hombres de vanguardia es capaz de destruir los cimientos de una sociedad corrompida en un tiempo infinitamente menor que todo el esfuerzo que emplean los politiqueros en conciliaciones, componendas y reformas sin importancia que frustran finalmente al pueblo. En esta ocasión el Che hizo un llamado a los mineros (el comunicado Nº 5) instándoles a unirse a la lucha guerrillera y explicando las verdaderas tácticas de lucha que debe adoptar el pueblo; ese manifiesto fue conocido sólo después de su muerte. __________ 13 - En la fachada de la sobria escuelita de La Higuera hay una inscripción menos pomposa que la del Palacio de la Justicia para un edificio menos suntuoso... Aquí está la placa puesta por el hijo menor de Guevara en octubre de 2002. 13 - Sur la façade de la sobre et petite école de La Higuera, une inscription moins pompeuse que celle du Palais de Justice pour un édifice moins prestigieux… C’est la plaque commémorative apposée par le fils cadet de Guevara en octobre 2002. - 28 - Revista Almiar 14 - Irma Rosado dentro de la escuelita de La Higuera, al lado de sus recuerdos de la visita de Ernesto Guevara-March en octubre 2002. 14 - À l’intérieur de la petite école de La Higuera, Irma Rosado pose à côté de ses photographies de la visite de Ernesto Guevara-March en octobre 2002. 15 - Las fotografías de la visita de Ernesto Guevara-March puestas sobriamente sobre un cartón que fotografié de nuevo para guardar como recuerdo. 15 - Les photos de la visite de Ernesto Guevara-March posées sobrement sur un carton que j’ai re-photographié comme souvenir. - 29 - Revista Almiar 16 - Un magnífico paisaje tomado a partir de la carretera de Santa Cruz hacia Samaipata. 16 - Un paysage magnifique photographié à partir du chemin de Santa Cruz vers Samaipata. 17 - La placita del pueblo de Samaipata por donde ciertamente pasaron Guevara y sus compañeros. 17 - La Place centrale du village de Samaipata par laquelle est certainement passé Guevara avec ses hommes. Revista Almiar - 30 18 - Una casita del pueblo de Samaipata. 18 - Une maisonnette du village de Samaipata. __________ (…) Le lendemain, il se produisit un événement spectaculaire. Paulino nous informa à savoir que les trois “commerçants” n’en étaient pas, mais bien qu’ils étaient des espions que l’armée envoyait pour effectuer des missions de services secrets. La précieuse information de Paulino qui cette fois l’avait reçue de sa nièce, une autre jeune fille du village, nous permit de les arrêter. Ce fut une collaboration extrêmement importante qui nous démontrait les riches perspectives qui existent quand le contact avec les paysans est prolongé. Paulino continua par la suite avec nous et fut envoyé à Cochabamba en portant quelques messages qui n’arrivèrent jamais à destination parce que l’armée arrêta le jeune homme. Dans ce même village, Che travailla comme dentiste et se servit du surnom affectueux de Fernando Sacamuelas. À nouveau, nous commençâmes à avancer vers le Rio Grande et par la suite vers l’embouchure de la rivière Rosita pour arriver à Samaipata où pouvait se trouver Joaquín, déjà que Che lui avait communiqué auparavant que ce lieu était une zone probable d’opérations éventuelles. De façon inattendue, le 10, une de nos escouades composée de Coco, Ñato, Pacho et Aniceto eut une escarmouche avec l’armée. L’événement se déroula ainsi : les quatre camarades Revista Almiar - 31 - avaient pour mission d’arriver à la maison d’un paysan pour chercher de la nourriture et des informations lorsqu’ils rencontrèrent par inadvertance des soldats qui avançaient en sens inverse sur la rive opposée. Immédiatement, il y eut un échange de tirs nourris occasionnant de lourdes dépenses de munitions de notre part. Par la suite, Ñato et Aniceto se retirèrent et après Coco et Pacho le firent. Nous n’eûmes point de nouvelle de perte dans les rangs ennemis jusqu’à ce que deux jours plus tard, les nouvelles radiophoniques annoncent que nous avions tué un soldat et blessé un autre. Bien que nous n’ayons subi aucune perte, l’armée annonçait ma mort dans son rapport officiel, ainsi que celles de deux autres camarades non identifiés. C’était une simple manoeuvre psychologique pour diminuer en partie l’impact de nos coups ainsi que l’effet désastreux que cela causait pour eux dans l’opinion publique. C’est pour cela que, pendant que nous arrivions de nouveau au Rio Grande et ensuite à Rosita à la recherche de notre arrière-garde avec laquelle nous avions perdu contact depuis presque trois mois, l’armée détournait une partie de ses ressources vers des tâches répressives dans les mines de “Siglo XX” avec un bilan de 87 victimes. De cette manière, le gouvernement laquais du gorille Barrientos prétendait faire taire la clameur des pétitions ouvrières et les signes évidents de l’appui de ce secteur envers notre guérilla. Cette action démontrait indubitablement la faiblesse du régime. Nous prîmes davantage conscience du fait qu’un petit groupe d’hommes d’avant-garde est capable de détruire le ciment d’une société corrompue dans un temps infiniment moindre que celui que les politiciens utilisent en efforts de conciliations, de manoeuvres et de réformes sans importance qui finalement frustrent la population. En cette occasion, Che lança un appel aux mineurs (le communiqué Numéro 5) en les priant instamment de s’unir à la guérilla et en expliquant les véritables tactiques de guérilla que la population devait adopter; ce manifeste fut connu seulement après sa mort. ………. (...) Pombo, que estaba herido, sintió la muerte de Tuma como si fuera el familiar más querido. Se habían prácticamente criado juntos, combatiendo juntos en la guerra de liberación de Cuba, habían participado juntos en el Congo y Revista Almiar - 32 ahora la muerte los separaba en Piray. Esa misma tarde se tomaron prisioneros a dos nuevos espías, uno de ellos oficial de carabineros; luego de advertirles cuáles eran las normas de la guerra y de amenazarlos con una sanción severa si se les volvía a sorprender en esa actitud, fueron dejados en libertad, pero en calzoncillos. Por una mala interpretación de una orden del Che en el sentido de que fueran despojados de todo lo que servía, se les quitó la ropa. Cuando el Che conoció esta acción se indignó, llamó a los compañeros que la habían realizado y les dijo que a los seres humanos había que tratarlos con dignidad, que no se les debía ocasionar humillaciones ni vejaciones gratuitas. A su lado el cadáver de Tuma. Un mes plagado de acontecimientos El mes de julio estuvo jalonado de acontecimientos guerreros, mientras la crisis del gobierno del gorila Barrientos era aguda. Al mismo tiempo teníamos las primeras noticias de Joaquín a través de distintas informaciones radiales que anunciaban combates entre fuerzas guerrilleras y el ejército, lejos del lugar en que estábamos situados nosotros. Por esa razón decidimos dirigirnos a Sarnaipata. Lugar que, como habíamos anticipado, estaba acordonado como zona de operaciones con Joaquín. Nuestro plan inmediato era tomar el pueblo incluido eI cuartel de policía, comprar alimentos y medicinas, especialmente las que hacían falta al Che para eI asma. Primero pasamos por Peña Colorada, una zona muy poblada que nos recibió con poco entusiasmo y luego nos reagrupamos en AÍto de Palermo. Para llegar a Samaipata decidimos apoderarnos de un vehículo adecuado. Paramos varios, pero uno intentó fugarse por lo que nos vimos obligados a dispararle en las gomas. Posteriormente partieron en un camión a cumplir esta misión, Pacho, Coco, Ricardo Julio, Aniceto y Chino. Nuestra escuadra llegó primero a una pequeña fuente de soda donde tomaron unos refrescos. Dos carabineros que entraron a ver lo que sucedía fueron tomados presos y desarmados. __________ Revista Almiar - 33 19 - Otro paisaje de la carretera de Santa Cruz hacia Samaipata. 19 - Un autre paysage de la route de Santa Cruz vers Samaipata. 20 - Una vista del Rio Piray cerca de Santa Cruz. 20 - Une vue de la rivière Piray près de Santa Cruz. __________ (…) Pombo qui était blessé, ressentit la mort de Tuma comme si c’était celle d’un parent des plus aimés. Ils avaient pratiquement été allaités ensemble; ils avaient combattu ensemble durant le guerre de libération de Cuba; ils avaient participé tous les deux au Congo et maintenant la mort les séparait à Piray. Revista Almiar - 34 - Ce même après-midi, deux nouveaux espions furent faits prisonniers dont l’un d’eux était officier des carabiniers. Après les avoir prévenus de quelles étaient les règles de la guerre et de les avoir menacés de sanctions plus sévères si on venait à les reprendre dans cette situation, ils furent remis en liberté, mais en caleçons seulement. À cause d’une malencontreuse et mauvaise interprétation des ordres de Che, en ce sens qu’ils devaient être dépouillés de tout ce qui pouvait servir, on leur enleva leurs vêtements. Lorsque Che apprit cette façon de faire, il s’indigna; il appela les camarades qui avaient fait cela et leur dit que les êtres humains, il fallait les traiter avec dignité, qu’on ne devait pas leur occasionner des humiliations et des manques de respect gratuits. À ses côtés, il y avait le cadavre de Tuma. Le mois de juillet fut jalonné d’événements guerriers, alors que la crise du gouvernement du gorille Barrientos était aigue. En même temps, nous avions les premières nouvelles de Joaquín à travers les différentes informations radiophoniques qui annonçaient des combats entre les forces des guérilleros et l’armée, et ce, très loin de l’endroit où nous étions situés. Pour cette raison, nous décidâmes de nous diriger vers Samaipata, lieu que nous avions anticipé et décidé comme étant une zone d’opérations avec Joaquín. Notre plan immédiat était de prendre le village, incluant le poste de police, d’acheter de la nourriture et des médicaments, spécialement ceux dont Che manquait pour son asthme. En premier, nous passâmes par Peña Colorada, une zone très peuplée qui nous reçut avec peu d’enthousiasme et après nous nous regroupâmes à Alto de Palerme. Pour arriver à Samaipata, nous décidâmes de nous munir d’un véhicule adéquat. Nous en arrêtâmes quelques-uns, mais l’un d’eux tenta de fuir de sorte que nous nous vîmes obligés de tirer dans les pneus. Après, Pacho, Coco, Ricardo, Julio, Aniceto et Chino partirent en camion pour accomplir cette mission. Notre escouade arriva d’abord à une petite fontaine de liqueurs douces gazéifiées où l’on prit quelques rafraîchissements. Deux carabiniers entrèrent pour voir ce qui s’y passait; ils furent faits prisonniers et désarmés. ………. (...) Nuestro botín fue 9 soldados capturados, uno muerto, una ametralladora BZ-30 y cinco máusers. La acción se realizó en presencia de todo el pueblo y una cantidad de viajeros que se encontraban allí de manera que tuvo una repercusión enorme. Los presos fueron dejados en la carretera a un Revista Almiar - 35 - kilómetro del pueblo. Además se compró alimentos y se obtuvieron medicinas, aunque ninguna servía para el asma. Entre el material que requisamos estaba un mapa con toda nuestra ruta trazada y se preveía una posible salida hacia la carretera. Después de esta operación relámpago nos retiramos. Los días siguientes caminamos en dirección a Florida. En el transcurso de la marcha escuchamos por radio la noticia de dos acciones guerreras: una en el Dorado, entre Samaipata y Río Grande y otra en Iquirá. En ambas se anunciaban que por parte nuestra habían ocurrido bajas. Inmediatamente nos dimos cuenta de que el grupo que estaba combatiendo era el de Joaquín. Paralelamente las emisoras anunciaban una crisis que afectaba la base de sustentación política del gobierno, con el retiro del PRA y del PSD del llamado «Frente de la Revolución» que sostenía al gorila Barrientos. Al mismo tiempo se escucharon unas lastimeras declaraciones de éste rogando que lo dejaran terminar su periodo presidencial. Fue en ese momento cuando Che dijo, conversando con un grupo de nosotros, que era una lástima que no hubiese cien hombres más en la guerrilla, para acelerar la descomposición del régimen. Al terminar el mes escuchamos noticias de otras dos acciones militares de Joaquín, y al mismo tiempo chocamos dos veces con el ejército. El 27 estábamos preparándonos para buscar un camino que eludiera Moroco donde, según las informaciones que nos habían dado campesinos, había una gran cantidad de soldados cuando Willy anunció que un grupo de soldados estaba entrando en la emboscada que teníamos tendida. En el lugar se situaron Chapaco Willy. León, Arturo, Ricardo, Chino, Eustaquio Aniceto y yo. Los soldados caminaban lentamente y casi con descuido. Hicieron algunas señales y luego dispararon tres tiros de mortero. Como no hubo respuesta siguieron avanzando. Eran solamente ocho porque el resto se había quedado rezagado. Cuando estuvieron cerca disparamos matando a cuatro de ellos El resto huyó por el monte. Inmediatamente organizamos nuestra retirada sin quitarles las armas ni el equipo porque esto significaba arriesgar innecesariamente a hombres nuestros y seguimos. Dos días más tarde volvimos a chocar, pero en condiciones diferentes. Estábamos en las márgenes del Rosita, a una hora de camino de la desembocadura del Suspiro Eran aproximadamente las 4:30 de la mañana (Che no había dormido en toda la noche afectado por el asma). Miguel estaba despierto para hacer el cambio de posta y Moro calentaba café cuando éste último vio la luz de una linterna en la orilla del río. Moro preguntó: Revista Almiar - 36 —Oiga, ¿quién es? —desde la orilla le contestaron: —Destacamento Trinidad. Che oyó todo el diálogo, pues estaba en la improvisada cocina. Inmediatamente nuestros compañeros dispararon. A Moro se le encasquilló el M2 pero Miguel lo protegió con su Garand. Che ordenó entonces la formación de una línea de defensa. Los soldados estaban ocultos en un pequeño barranco. Benigno les tiró una granada que cayó en el agua. El ruido de la explosión los asustó de tal manera que corrieron despavoridos. Esto permitió que les disparáramos con facilidad. Miguel, que era hombre audaz, llegó hasta donde estaba uno de los soldados heridos, le quitó su M-1, su canana y lo interrogó logrando obtener valiosa información de que eran 21 hombres que se dirigían hacia Abapó y que en Moroco, el lugar que estábamos eludiendo estaban apostados 50 soldados. En esta emboscada cometimos varios errores. Los caballos que teníamos con nosotros se cargaron con mucha lentitud. Más todo fue un exceso de confianza en nuestra capacidad y en un desprecio por el poder del enemigo. __________ 21 - El mapa de la ruta del Che. 21 - La carte de la route du Che. Revista Almiar - 37 - 22 - Otro Cristo, el de Santa Cruz de la Sierra con los dos ladrones a su izquierda y derecha: la mujer provocadora de la cerveza Paceña y el Banco Ganadero... El sexo, el alcohol y el dinero... 22 - Un autre Christ latino, celui-là de Santa Cruz de la Sierra, avec les deux larrons à sa gauche et à sa droite : la femme provocante de la bière Paceña et la Banque Ganadero... Le sexe, l’alcool et l’argent… 23 - El mapa de la Quebrada del Churo. 23 - La carte de la Faille du Churo. __________ Revista Almiar - 38 - (…) Notre butin fut de neuf (9) soldats capturés, un (1) mort, une mitraillette BZ-30, cinq (5) Mausers. L’action se passa en présence de tout le village et une quantité de voyageurs qui se trouvaient là, de sorte que cela eut une répercussion énorme. Les prisonniers furent laissés sur la route à un kilomètre du village. Aussi, on acheta de la nourriture et on obtint des médicaments bien qu’aucun ne puisse soulager l’asthme. Parmi le matériel réquisitionné, il y avait une carte sur laquelle tout notre itinéraire était tracé; on y prévoyait notre sortie possible vers la route. Après cette opération éclair, nous nous retirâmes. Les jours suivants, nous marchâmes vers Florida. Au cours de la marche, nous entendîmes à la radio des nouvelles de deux actions guerrières : l’une à Dorado, entre Samaipata et Rio Grande et une autre à Iquirá. Dans les deux cas, on annonçait des pertes subies de notre part. Immédiatement, nous nous rendîmes compte que le groupe qui combattait était celui de Joaquín. Parallèlement, les émissions annonçaient une crise qui affectait la base de soutien politique du gouvernement, avec le retrait du PRA et celui du PSD appelé “Le Front de la Révolution” qui soutenait le gorille Barrientos. En même temps on entendait quelques déclarations lamentables de celui-ci, les priant qu’on le laisse terminer sa période présidentielle. Ce fut à ce moment que Che dit à un groupe parmi nous, que c’était triste qu’il n’y ait pas cent hommes de plus dans la guérilla, pour accélérer la destruction de ce régime. À la fin du mois, nous entendîmes des nouvelles de d’autres actions militaires de Joaquín et en même temps, nous confrontions l’armée à deux reprises. Le 27 nous nous préparâmes à trouver un chemin qui éviterait Moroco où, selon les informations que nous avaient fournies des paysans, se trouvait une grande quantité de soldats alors que Willy nous annonçait qu’un groupe de soldats était entré dans l’embuscade que nous avions tendue. Il y avait à cet endroit, Chapaco, Willy, León, Arturo, Ricardo, Chino, Eustaquio, Anecito et moi. Les soldats marchaient lentement et presque nonchalamment. Ils lancèrent quelques signaux d’alarme et après tirèrent trois coups de mortiers. Comme il n’y eut aucune réponse, ils continuèrent à avancer. Ils étaient seulement huit (8) parce que les autres étaient encore à la traîne. Lorsqu’ils furent tout près, nous tirâmes en en tuant quatre (4) parmi eux. Les autres ont fui dans le maquis. Immédiatement, nous organisâmes notre retraite sans leur enlever les armes ni les équipements parce que cela aurait été de faire prendre des risques inutiles à nos hommes; puis, nous continuâmes. Deux jours plus tard, nous retournâmes Revista Almiar - 39 - nous battre, mais dans des conditions différentes. Nous étions sur les rives de la rivière Rosita à une heure de route de la rivière Suspiro. Il était environ 4h30 du matin. Che n’avait pas dormi de toute la nuit, incommodé qu’il était par l’asthme. Miguel était réveillé pour changer la garde et Moro faisait du café lorsque ce dernier vit la lumière d’une lanterne sur le rivage de la rivière. Moro demanda: —Écoute, qui est-ce ? Depuis la rive, on répondit : —Le détachement de Trinidad. Che entendit tout le dialogue et se trouvait dans la cuisine improvisée. Immédiatement nos camarades tirèrent. La M-2 de Moro s’enraya, mais Miguel le couvrit avec son fusil Garand. Che ordonna alors la formation d’une ligne de défense. Les soldats étaient caChes dans un petit ravin. Benigno leur lança une grenade qui tomba à l’eau. Le bruit de l’explosion leur fit peur de telle sorte qu’ils se mirent à courir, effrayés. Cela nous permit de les tirer avec facilité. Miguel qui était un homme audacieux, arriva où se trouvait un des soldats blessés, lui enleva sa M-1 et sa cartouchière; puis, il l’interrogea en réussissant à lui soutirer l’information cruciale à savoir qu’ils étaient vingt et un (21) hommes, qu’ils se dirigeaient vers Abapó et qu’à Moroco, endroit que nous avions évité, il y avait cinquante (50) soldats de postés là. Dans cette embuscade, nous avons commis quelques erreurs. Les chevaux que nous avions prenaient trop de temps à charger. Mais plus que tout, nous avions un excès de confiance en notre capacité et un mépris certain pour la puissance de l’ennemi. X. EL YURO La emboscada de La Higuera marcó una nueva etapa, angustiosa y difícil para nosotros. Habíamos perdido tres hombres y, prácticamente, no teníamos vanguardia. El médico seguía mal y la columna estaba reducida a sólo 17 guerrilleros desnutridos por la prolongada carencia de proteínas, lo que naturalmente influía en la capacidad combativa. Definido ya el problema de Joaquín, los próximos pasos del Che se orientaban a buscar otra zona de operaciones donde el terreno nos fuera más favorable. Teníamos necesidad inmediata de contactamos con la ciudad, para solucionar problemas logísticos y Revista Almiar - 40 - recibir refuerzos humanos, puesto que nuestras fuerzas se habían desgastado, sin que hubiésemos podido reemplazar a los hombres que habían caído. Sin embargo era previo romper dos cercos, uno que estaba rondando casi en nuestras propias narices y el otro que había dispuesto el ejército y que habíamos conocido a través de filtraciones periodísticas dadas a conocer por emisoras argentinas y chilenas. Para nadie era un misterio que nuestra presencia estaba claramente detectada y así lo anunciaban también las informaciones de carácter internacional, aunque las emisoras locales, silenciadas por el régimen, daban solamente una información muy general. Entre el 27 de setiembre y el 1º de octubre permanecimos ocultos, aunque algunos compañeros realizaban exploraciones para buscar una salida adecuada por los «firmes», que nos permitiera eludir las fuerzas enemigas. Nuestra ración se redujo considerablemente y sólo consistía en tres cuartos de una pequeña lata de sardinas, y una cantimplora de agua para todo el día. Para peor el agua era amarga. Pero no había más y la mandábamos a buscar en la noche o cuando aún estaba oscuro en la madrugada. Dos compañeros cargaban todas las cantimploras, bajaban tomando toda clase de precauciones y borraban los rastros. Hasta el día 30 los soldados, en gran cantidad y perfectamente equipados, pasaban frente a nosotros sin detectarnos. El 1º de octubre empezamos a movernos con un poco más de rapidez y después de varios días de privaciones comimos unas frituras que cocinó Chapaco y Che ordenó que se repartiera un poco de charqui frito. Para que el fuego no fuera detectado por los soldados lo protegimos con frazadas. Las emisoras por otra parte empezaron a dar mayores informaciones, entre las cuales resaltaban las delaciones de Camba y León, que habían desertado el 26, y los cambios de los puestos de avanzada del Estado Mayor del Ejército. Nuestras caminatas se realizaban extremando las precauciones, aunque a veces pasábamos por lugares algo poblados a plena luz del día. Así llegamos al 8 de octubre. La tarde anterior habíamos cumplido 11 meses desde que el Che ingresó al monte en Bolivia y hasta ese momento el balance no era precisamente desfavorable a nosotros. El ejército sólo había dado un golpe grave, el de La Higuera, que por otra parte fue casual. Todo lo demás era un saldo positivo puesto que, a pesar de lo reducido de nuestras fuerzas, habíamos capturado Revista Almiar - 41 - cerca de un centenar de soldados, incluyendo oficiales de alta graduación, habíamos puesto fuera de combate a otra gran cantidad de enemigos y nos habíamos incautado de diversas armas y mucho parque. Era imprescindible, como nueva fase táctica, romper el cerco para llegar a la nueva zona de operaciones, donde podríamos dar combate imponiendo nuestras condiciones al enemigo, y al mismo tiempo contactarnos con la ciudad, cuestión importante en este período para reforzar nuestra columna. Cualquiera que lea el Diario del Che, aunque éstos sólo son apuntes de tipo personal donde se reflejan más los problemas negativos (aspectos negativos) con el objeto de analizarlos para corregirlos más tarde, se podrá dar cuenta de que en ningún momento se denotaba desesperación o pérdida de fe, a pesar de los muchos momentos angustiosos por los que pasamos. Por eso, al resumir los 11 meses de operaciones Che sintetiza su pensamiento diciendo que han pasado «sin complicaciones, bucólicamente». La madrugada del 8 de octubre fue fría. Los que teníamos chamarra nos la colocamos. Nuestra marcha era lenta porque el Chino caminaba muy mal de noche y porque la enfermedad de Moro se acentuaba. A las dos de la mañana paramos a descansar y reanudamos nuestra caminata a las cuatro. Eramos 17 figuras silenciosas que avanzábamos mimetizándonos en la oscuridad por un cañón angosto llamado el Yuro. La mañana se descargó con un sol hermoso que nos permitió observar cuidadosamente el terreno. Buscábamos una cresta para dirigimos luego al río San Lorenzo. Las medidas de seguridad se extremaron, especialmente porque la garganta y los cerros eran semipelados, con arbustos muy bajos, lo que hacía casi imposible ocultarse. Che decidió entonces enviar tres parejas de exploradores: una por el cerro hacia la derecha, integrada por Benigno y Pacho; otra por el cerro hacia la izquierda, integrada por Urbano y otro compañero, y la tercera hacia adelante, a cargo de Aniceto y Darío. Pronto regresaron Benigno y Pacho, la información no resistía duda: los soldados estaban cerrando el paso. El problema era saber si nos habían detectado o no. ¿Qué perspectiva nos quedaba? No podíamos volver atrás; el camino que habíamos hecho, muy descubierto, nos convertía en presas fáciles de los soldados. Tampoco podíamos avanzar, porque eso significaba caminar derecho a las posiciones de Revista Almiar - 42 - los soldados. Che tomó la única resolución que cabía en ese momento. Dio orden de ocultarse en un pequeño cañón lateral y organizó la toma de posiciones. Eran aproximadamente las 8 y 30 de la mañana. Los 17 hombres estábamos sentados al centro a ambos lados del cañón, esperando. El gran dilema del Che y de nosotros era saber si el ejército había descubierto nuestra presencia o si sus posiciones eran simplemente una maniobra táctica que correspondía al cerco que nos estaba tendiendo desde hacía varios días. Che hizo un análisis rápido: si los soldados nos atacaban entre las 10 de la mañana y la 1 de la tarde estábamos en profunda desventaja y nuestras posibilidades eran mínimas, puesto que era muy difícil resistir un tiempo prolongado. Si nos atacaban entre la 1 y las 3 de la tarde teníamos más posibilidades de neutralizarlo. Si el combate se producía de las 3 de la tarde hacia adelante las mayores posibilidades eran nuestras, puesto que la noche caería pronto y la noche es la compañera y aliada del guerrillero. __________ 24 - Por este paisaje magnífico caminaron el Che y sus compañeros. 24 - C’est dans ce paysage à couper le souffle qu’ont évolué le Che et ses camarades. Revista Almiar - 43 25 - La Plaza central de Vallegrande. 25 - La Plaza centrale de Vallegrande. 26 - La Policía Nacional de Vallegrande. 26 - Le poste de la Policía Nacional de Vallegrande. - 44 - Revista Almiar 27 - Desayuné en este restaurante de Vallegrande antes de tomar la carretera hacia La Higuera. Entre Vallegrande y La Higuera hay como 50 kilómetros pero necesité muchas horas de ida y vuelta el viaje por la carretera muy mala y peligrosa. Al final todo el día. 27 - J’ai déjeuné dans ce restaurant de Vallegrande juste avant de prendre la route pour me rendre à La Higuera. Entre Vallegrande et La Higuera, il y a une cinquantaine de kilomètres, mais cela nous a pris plusieurs heures pour aller et plusieurs heures pour revenir, tellement la route est mauvaise et périlleuse. Ce petit voyage dura une journée complète. - 45 - Revista Almiar 28 - La calle de Vallegrande que va hasta el hospital donde fue llevado el cuerpo del Che. 28 - La rue de Vallegrande qui mène à l’hôpital où a été transporté la dépouille du Che. 29 - El hospital «Señor de Malta», de Vallegrande, donde está la pequeña lavandería. 29 - L’hôpital « Señor de Malta » de Vallegrande où a été amené le corps sans vie du Che. Revista Almiar - 46 - 30 - Acercándome a la lavandería del hospital. 30 - De plus en plus près de la buanderie. 31 - Más cerca de la lavandería mi corazón comenzó a palpitar de emoción. 31 - On approche de la buanderie; mon cœur est chargé d’émotion et bat très vite. Revista Almiar - 47 - 32 - La lavandería con la fachada abierta donde pusieron el cuerpo sin vida del Che sobre un lavadero. 32 - La buanderie (avec la façade ouverte) où a été déposé le corps du Che sur le lavoir intérieur. __________ X. LE YURO (le Churo) L’embuscade de La Higuera marqua une nouvelle étape angoissante et difficile pour nous. Nous avions perdu trois hommes et nous n’avions pratiquement plus d’avant-garde. Le médecin allait mal et la colonne en était réduite à seulement dix-sept (17) guérilleros sous-alimentés de par la carence prolongée de protéines, ce qui naturellement influait sur la capacité combative. La question de Joaquín maintenant résolue, les pas suivants de Che s’orientaient vers la recherche d’une zone d’opérations où le terrain nous serait plus favorable. Nous avions un besoin urgent de prendre contact avec la ville pour solutionner des problèmes logistiques et recevoir des ressources humaines puisque notre force était tombée. Cependant, il nous fallait briser deux groupuscules au préalable : l’un qui nous rôdait presque sous le nez et l’autre que l’armée avait disposé et dont nous avions entendu parler au travers d’indices journalistiques rendus publiques par des émissions radiophoniques argentines et chiliennes. Ce n’était plus un mystère pour personne à savoir que notre présence était clairement détectée et les informations à caractère international Revista Almiar - 48 - l’annonçaient tel quel; alors que les émissions locales, bâillonnées par le régime donnaient seulement une information plus générale. Entre le 27 septembre et le premier octobre, nous restâmes caChes bien que certains camarades eussent réalisé des reconnaissances pour trouver une sortie adéquate par des “fermes”, ce qui nous aurait permis d’éviter les forces ennemies. Nos vivres diminuaient considérablement et se réduisaient à seulement trois quarts d’une petite boîte de sardines et à une gourde d’eau pour toute la journée. Pis encore, l’eau était amère. Mais il n’y en avait pas plus et on nous ordonnait d’aller en chercher durant la nuit ou quand il faisait encore sombre le matin. Deux camarades prenaient toutes les gourdes, descendaient en prenant toutes sortes de précautions et effaçaient leurs traces. Jusqu’au 30 septembre, des soldats très nombreux et parfaitement équipés passaient en face de nous sans nous détecter. Le premier octobre, nous commençâmes à nous déplacer lentement et après quelques jours, nous mangeâmes des fritures que Chapaco cuisina; Che ordonna que l’on partage un peu de fricassée. Pour que le feu ne puisse pas être détecté par les soldats, nous le protégions avec des couvertures. D’autre part, les émissions radio commençaient à donner de plus amples informations parmi lesquelles les déclarations de Camba et León qui avaient déserté le 26, ressortaient; aussi on parlait des changements de positions de l’avant-garde de l’État Major de l’Armée. Nos déplacements étaient réalisés avec d’extrêmes précautions, bien que parfois nous passions par des endroits assez peuplés en pleine lumière de jour. Nous arrivons donc au 8 octobre. L’après-midi d’avant, il s’était donc écoulé onze (11) mois depuis que Che avait pris le maquis en Bolivie et jusqu’à ce moment, le bilan n’était pas précisément défavorable pour nous. L’armée ne nous avait porté seulement qu’un coup grave : celui de La Higuera qui d’autre part avait été fortuit. Tous les autres s’étaient soldés positivement puisque, malgré nos forces réduites, nous avions capturé près d’une centaine de soldats incluant des officiers de haut grade; nous avions mis hors de combat une autre grande quantité d’ennemis et nous avions pris possession de diverses armes ainsi que de divers équipements militaires. Il était indispensable, comme nouvelle phase tactique, de briser le siège pour atteindre la nouvelle zone des opérations où nous pourrions livrer combat Revista Almiar - 49 - tout en imposant nos conditions à l’ennemi et en même temps, prendre contact avec la ville, une chose importante en cette période, pour renforcer notre colonne. Quiconque lit le Journal de Che pourra se rendre compte qu’en aucun temps on y dénote du désespoir ou une perte de foi, malgré les nombreux moments angoissants par lesquels nous sommes passés. Et ce, même si ces faits sont relatés en tant que notes personnelles reflétant davantage des problèmes négatifs (d’aspect négatif); l’objectif étant bien sûr de les analyser pour les corriger plus tard. C’est pourquoi en résumant ces onze (11) mois d’opérations, Che synthétise sa pensée en disant qu’on les a passés “sans complications, d’une manière bucolique”. Le matin du 8 octobre [1967] fut froid. Le blouson que nous avions, nous le portions. Notre marche était lente parce que le Chinois avançait mal la nuit et parce que la maladie de Moro s’accentuait. À deux (2) heures du matin, nous arrêtâmes nous reposer pour reprendre la route à quatre (4) heures. Nous étions dix-sept (17) silhouettes silencieuses qui avancions en nous confondant dans l’obscurité par la canyon étroit appelé le Yuro (le Churo). Le matin arriva avec un magnifique soleil qui nous permit d’observer attentivement le terrain. Nous recherchions une crête pour nous diriger par la suite à la rivière San Lorenzo. Les mesures de sécurité devinrent extrêmes spécialement parce que la gorge et les collines étaient à moitié chauves, avec des arbustes très bas qui nous empêchaient presque de nous cacher. Che décida alors d’envoyer trois couples en exploration : un par la colline vers la droite, formé de Benigno et Pacho; un autre par la colline de gauche formé d’un autre camarade et de Urbano; et le troisième vers l’avant, à la charge de Dario et d’Aniceto. Benigno et Pacho revinrent rapidement. Aucun doute : les soldats bloquaient le passage. Le problème était de savoir s’ils nous avaient repérés ou pas. Quel choix nous restait-il ? Nous ne pouvions rebrousser chemin; la route que nous avions faite, très à découvert, nous transformait en proies faciles pour les soldats. Nous ne pouvions pas avancer non plus car cela signifiait marcher droit vers les positions des soldats. Che prit la seule décision qui tombait sous le sens à ce moment-là. Il donna l’ordre de nous cacher dans un petit canyon latéral et organisa la prise Revista Almiar - 50 de positions. Il était à peu près 8h30 du matin. Les dix-sept (17) hommes étaient assis au centre, des deux côtés du canyon, en attendant. Le grand dilemme pour Che et nous tous, c’était de savoir si l’armée avait découvert notre présence ou si leur position était simplement une manoeuvre tactique qui correspondait au siège qui nous était tendu depuis quelques jours. Che fit une analyse rapide; si les soldats nous attaquaient entre dix heures du matin et une heure de l’après-midi, nous étions profondément désavantagés et nos possibilités étaient minimes, puisqu’il était très difficile de résister durant une longue période. S’ils nous attaquaient entre une heure et trois heures de l’après-midi, nous avions plus de possibilités de les neutraliser. Si le combat avait lieu après 15h00, les meilleures probabilités étaient pour nous, puisque la nuit tomberait rapidement et que la nuit est l’amie et la compagne du guérillero. ………. (...) ¡Jamás nos imaginamos que a tan corta distancia de nosotros aún estaba allí herido, pero con vida, nuestro querido Comandante! Con el transcurso del tiempo hemos pensado que tal vez, si lo hubiésemos sabido, habríamos tratado de hacer una acción desesperada por salvarlo, aun cuando eso nos significase morir en la empresa. Pero esa noche tensa y angustiosa, ignorábamos absolutamente lo que había sucedido, y en voz baja nos preguntábamos si quizás otro compañero, además de Aniceto, había muerto en el combate. Seguimos caminando, bordeando La Higuera sin alejarnos mucho y al amanecer, con las primeras luces del día, nos ocultamos en un lugar del monte muy poco denso. Habíamos decidido caminar solamente de noche de manera que el día era de vigilancia rigurosa. El día 9 fue tranquilo. Dos veces vimos pasar un helicóptero, eI mismo que en esos instantes llevaba el cadáver aun tibio del Che, asesinado cobardemente por orden de la CIA y de los gorilas Barrientos y Ovando, pero nosotros no sabíamos nada. No teníamos más comunicación con el exterior que un pequeño aparato de radio que era de Coco, pero ahora lo cargaba Benigno. Esa tarde Benigno escuchó una información confusa. Una emisora local anunciaba que el ejército había capturado gravemente herido a un guerrillero que, al parecer, era el Che. Desestimamos inmediatamente esta posibilidad, puesto que si lo hubiese sido, Revista Almiar - 51 - pensábamos, habrían hecho un gran escándalo, pensamos que el herido podría ser Pacho y la confusión derivaba de algún parecido que podría haber entre ambos. Esa noche caminamos por quebradas infernales, riscos filudos y empinados, que ni las cabras habían escogido. Pero Urbano y Benigno, con su sentido de orientación extraordinario y una decisión inquebrantable, nos guiaban sacándonos lentamente del cerco. Avanzamos poco. El día 10 nos sorprendió en un lugar aún cercano a La Higuera y comentamos alegremente que el agua que estábamos tomando era la misma que más abajo tomaban los soldados. Otra vez estábamos esperando la noche para alcanzar el Abra del Picacho por donde pensábamos romper el cerco. Aproximadamente a la una de la tarde, Urbano escuchó una noticia que nos dejó helados: las emisoras anunciaban la muerte del Che y daban su descripción física y su indumentaria. No había posibilidad de equivocarse, porque señalaban entre su indumentaria las abarcas que le había hecho el Ñato, una chamarra que era de Tuma y que el Che se ponía para abrigarse en las noches, y otros detalles que nosotros conocíamos perfectamente. Un dolor profundo nos enmudeció; Che, nuestro jefe, camarada y amigo, guerrillero heroico, hombre de ideas excepcionales, estaba muerto. La noticia horrenda y lacerante, nos producía angustia Permanecimos callados, con los puños apretados, como si temiéramos estallar en llanto ante la primera palabra. Miré a Pombo, por su rostro resbalaban lágrimas. Cuatro horas más tarde el silencio fue roto. Pombo y yo conversamos brevemente. La misma noche de la emboscada del Yuro los seis nos habíamos puesto de acuerdo para que él asumiera el mando de nuestro grupo hasta que encontráramos al Che y al resto de nuestros compañeros. Era preciso, en este instante tan especial, tomar una decisión que honrara la memoria de nuestro querido jefe. Intercambiamos algunas opiniones y, luego, ambos nos dirigimos a nuestros compañeros. Es difícil reflejar exactamentete, en los menores detalles, un momento saturado de tantas emociones, de sentimientos tan profundos, de dolor intenso y de deseo de gritar a los revolucionarios que todo no estaba perdido, que la muerte del Che no se convertía en panteón de sus ideas, que la guerra no había terminado. Revista Almiar -52 - ¿Cómo describir cada uno de los rostros? ¿Cómo reproducir fielmente cada una de las palabras, de los gestos, de las reacciones, en aquella soledad impresionante, bajo la amenaza siempre permanente de una fuerza militar canibalesca que nos buscaba para asesinarnos y ofrecía recompensa por nuestra captura «vivos o muertos»? Sólo recuerdo que con una sinceridad muy grande y unos deseos inmensos de sobrevivir, juramos continuar la lucha, combatir hasta la muerte o salir a la ciudad, donde nuevamente reiniciaríamos la tarea de reestructurar el Ejército del Che para regresar a las montañas a seguir combatiendo como guerrilleros. Con voces firmes pero cargadas de sentimiento, esa tarde surgió nuestro juramento, el mismo que ahora cientos de hombres de muchas partes del mundo han hecho suyo, para plasmar en la realidad el sueño del Che. Por eso en la tarde del 10 de octubre Ñato, Pombo, Darío, Benigno, Urbano y yo dijimos en la selva boliviana. «Che: TUS IDEAS NO HAN MUERTO, NOSOTROS, LOS QUE COMBATIMOS A TU LADO, JURAMOS CONTINUAR LA LUCHA HASTA LA MUERTE O LA VICTORIA FINAL. TUS BANDERAS, QUE SON LAS NUESTRAS, NO SERÁN ARRIADAS JAMÁS. ¡VICTORIA O MUERTE!». - 53 - Revista Almiar 33 - De Vallegrande hacia La Higuera, un paisaje acogedor y hostil a la vez 33 - De Vallegrande à La Higuera , un paysage accueillant et hostile à la fois. 34 - El pueblo de La Higuera en la pendiente del valle cerca de la Quebrada del Yuro. 34 - Le village de Le Higuera sur le versant d’une vallée tout près de la faille du Churo. Revista Almiar - 54 - 35 - El monumento de Guevara en el medio del pueblo, esculpido por un artista cubano. 35 - Le monument du Che au centre du village, sculpté par un artiste cubain. 36 - Dibujo del Che en la pared de una casa del pueblo. 36 - Dessin du Che sur le mur d’une maison de La Higuera. - 55 - Revista Almiar 37 - Placita de La Higuera hecha en forma de la conocida estrella con cinco puntas. En el medio de esta plazita hay un primer monumento del Che. 37 - Petite place centrale du village de La Higuera; cette place est faite en forme de l’étoile à cinq pointes bien connue. Au centre, un premier monument à la mémoire du Che y a été installé. 38 - Supuestamente la silla sobre la cual estaba sentado el Che cuando entró a matarle el soldado. 38 - La chaise sur laquelle aurait été assis le Che au moment où est entré dans l’école le soldat qui venait pour l’assassiner. - 56 - Revista Almiar 39 - La misma silla vista del otro lado mostrando mejor la puerta por la que entró el sordido Teniente Téran. 39 - La même chaise à côté de laquelle on voit mieux la porte où est entré le sordide Téran. Revista Almiar - 57 - 40 - Otra vista de La Higuera con el monte lindando con la Quebrada del Yuro. 40 - Une autre vue du village de La Higuera avec le maquis qui jouxte la faille du Churo. __________ (…) Jamais nous avons imaginé un seul instant, qu’à une si courte distance de nous-mêmes, notre cher commandant était là, blessé, mais en vie! Avec le temps, nous avons pensé que cette fois-là, si nous l’avions su, nous aurions essayé de poser un geste désespéré pour le sauver, même si cela avait signifié de mourir en le faisant. Mais en cette nuit tendue et angoissante, nous ignorions absolument ce qui s’était produit et, à voix basse, nous nous demandions si peut-être quelque autre compagnon outre Aniceto, était mort au combat. Nous avons continué à marcher, en longeant La Higuera sans nous éloigner beaucoup et au lever du jour, avec les premières lueurs de l’aube, nous nous sommes caChes dans un endroit du maquis très peu dense. Nous avions décidé de marcher seulement de nuit de sorte que le jour, nous gardions une vigilance rigoureuse. Le jour du 9 [octobre ‘67] fut tranquille. Par deux fois, nous avons vu passer un hélicoptère, celui-là même qui, en ces instants-là, emportait le cadavre Revista Almiar - 58 - encore chaud de Che, assassiné lâchement sous les ordres de la CIA et des gorilles Barrientos et Ovando; mais nous, nous n’en savions rien. Nous n’avions plus aucune communication avec l’extérieur, sinon au moyen d’un petit appareil de radio qui appartenait à Coco, mais que transportait alors Benigno. Cet après-midi-là, Benigno entendit une information confuse. Une émission locale annonçait que l’armée avait capturé un guérillero gravement blessé et qu’il semblait bien que c’était Che. Nous avons rejeté immédiatement cette possibilité, puisque si cela avait été, pensions-nous, cela aurait fait un grand esclandre. Nous avons pensé que le blessé pouvait être Pacho et la confusion déviait en ce que cela pouvait être entre les deux. Cette nuit-là, nous avons marChe par des falaises infernales, des rochers acérés et escarpés que même les chèvres n’auraient pas choisis. Encore une fois, nous attendions la nuit pour atteindre l’ouverture du pic où nous pensions briser le siège. Vers 13h00, Urbano entendit une nouvelle qui nous glaça : les émissions annonçaient la mort de Che et donnaient sa description physique ainsi que son habillement. Aucune possibilité de se tromper, parce qu’ils mentionnaient dans son habillement, les sandales que Ñato lui avait fabriquées, un blouson qui venait de Tuma et que Che portait pour se couvrir la nuit, ainsi que d’autres détails que nous connaissions parfaitement. Une douleur profonde nous laissa sans voix; Che, notre chef, camarade et ami, le guérillero héroïque, l’homme aux idées exceptionnelles, était mort. La nouvelle horrible et déchirante nous remplit d’angoisse. Nous sommes demeurés muets, les poings serrés, comme si nous craignions d’éclater en larmes au premier mot. Je regardai Pombo; les larmes déferlaient sur son visage. Quatre heures plus tard, le silence fut rompu. Pombo et moi conversions brièvement. La même nuit de l’embuscade du Yuro, les six nous nous étions mis d’accord sur celui qui assumerait le commandement de notre groupe jusqu’à ce que nous trouvions Che et le reste de nos camarades. Il était impérieux, en cet instant si spécial, de prendre une décision qui honorait la mémoire de notre chef Cheri. Nous échangeâmes quelques opinions et après, nous nous dirigeâmes tous deux vers nos camarades. Il est difficile de relater exactement, dans les moindres détails, un moment imprégné de tant d’émotions, de sentiments si profonds, de douleur intense et Revista Almiar - 59 d’une envie de crier aux révolutionnaires que tout n’était pas perdu, que la mort de Che ne se transformait pas en un panthéon de ses idées et que la guerre n’était pas terminée. Comment décrire chacun des visages ? Comment reproduire fidèlement chacune des paroles, des gestes, des réactions dans une telle solitude...? Sous la menace toujours permanente d’une force militaire cannibale qui nous recherchait pour nous assassiner et qui offrait une récompense pour notre capture “morts ou vifs” ? Je me souviens seulement qu’avec une sincérité très grande et des désirs immenses de survivre, nous avons juré de continuer la guérilla, de combattre jusqu’à la mort ou jusqu’à atteindre la ville où nous referions à nouveau la tâche de restructurer l’armée de Che pour retourner dans les montagnes et continuer à combattre comme des guérilleros. Avec nos voix fermes mais chargées d’émotions, notre serment jaillit en cet après-midi : le même que maintenant des centaines d’hommes de toutes les parties du monde on fait leur pour transformer en réalité le rêve de Che. C’est pourquoi en cet après-midi du 10 octobre, Ñato, Pombo, Dario, Benigno, Urbano et moi, nous avons dit dans la forêt bolivienne : “CHE, TES IDÉES NE SONT PAS MORTES. NOUS, CEUX QUI COMBATTIONS À TES CÔTÉS, NOUS JURONS DE CONTINUER LA GUÉRILLA JUSQU’À LA MORT OU JUSQU’À LA VICTOIRE FINALE. TES DRAPEAUX SONT LES NÔTRES; JAMAIS ILS NE SERONT ABAISSÉS. LA VICTOIRE OU LA MORT !” ………. (...) Es infantil presumir que el Che pudiese haberme entregado una lista de sus amigos. Es indudable que un revolucionario sólo considera amigos a sus camaradas de lucha. Y en este sentido el Che fue siempre categórico, para delimitar dónde empezaba y dónde terminaba la amistad. Ejemplos notorios se pueden encontrar en todos sus escritos, partiendo de los episodios guerreros de la Sierra Maestra, hasta su Diario en Bolivia. Che era un hombre capaz de emocionarse y en su vida de guerrillero y conductor de pueblos siempre tuvo un gesto sentido, una palabra cariñosa para sus amigos. Y amigo del Che fue «Patojo», el revolucionario guatemalteco que murió combatiendo por la libertad Revista Almiar - 60 - de su patria. Amigo del Che era Camilo, el legendario guerrillero de la Sierra Maestra. A otros hombres los quiso en un sentido diferente, como quiere un padre a sus hijos. Es el caso de Tuma y Rolando. Ricardo Rojo: nunca fue amigo del Che. Frente a figuras tan limpias y heroicas, ¿pudo el Che alguna vez considerar «su amigo» a un individuo de una línea política tan zigzagueante y tortuosa como Ricardo Rojo?, que es el mismo que comerció con la vida y memoria de los guerrilleros de Salta, que esperó la muerte de la madre del Che para inventar diálogos y conversaciones con ella y con su hijo. No me hubiese referido a las calumnias de Rojo contra Che y las supuestas divergencias con la Revolución Cubana, pues ellas ni siquiera son novedosas, si no fuera que alguna gente de buena fe pudiere considerar que el relato mal intencionado de Rojo estuviese escrito por un amigo y porque algunos párrafos presentados, para que aparezcan verosímiles, no pueden ser desmentidos por sus protagonistas porque ya están muertos. Afortunadamente, por la misma fuerza moral del Che, que guiaba todos sus actos, y por su conducta heroica, demostrada en muchas batallas, ninguna leyenda tortuosa urdida por la CIA o por sus agentes, algunos de los cuales con audacia y descaro se autotitulan «amigos», podrá empañar su querida figura o manchar su paso de revolucionario por Cuba, donde dejó un pueblo que lo ama. La identificación entre Che y Fidel, el respeto y cariño mutuos, eran indestructibles. No es casual que el Che, hombre que odiaba los halagos personales o para otros, haya escrito sobre Fidel: «Tiene las características de gran conductor que, sumadas a sus dotes personales de audacia, fuerza y valor, y a su extraordinario afán de auscultar siempre la voluntad del pueblo, lo han llevado al lugar de honor y de sacrificio que hoy ocupa. Pero tiene otras cualidades importantes, como son su capacidad de asimilar los conocimientos y experiencias para comprender todo e! conjunto de una situación dada, sin perder de vista los detalles y su inmensa fe en el futuro, y su amplitud de previsión para prevenir los acontecimientos y anticiparse a los hechos, viendo siempre más lejos y mejor que sus compañeros. Con estas grandes cualidades cardinales, con su capacidad de aglutinar, de unir, oponiéndose a la división que debilita; su capacidad de dirigir a la cabeza de todos la acción del pueblo; su amor infinito por él, su fe en el futuro y capacidad de preverlo, Fidel Castro hizo más que nadie en Cuba para construir de la nada Revista Almiar - 61 el aparato, hoy formidable, de la Revolución Cubana». ¡Cuánta sinceridad hay en este juicio! Para nosotros que convivimos con el Che hasta la batalla final, que aprendimos a conocerlo como ser humano integral, como soldado, comandante y camarada insuperable, las obligaciones de la Revolución Cubana —vanguardia de nuestra Patria Americana— son más grandes. Así también la identificación de Fidel con el Che, del pueblo cubano con el Che, son absolutas. Nadie mejor que Fidel para sintetizar el dolor que causó su muerte: «...Nos duele no sólo que se haya perdido como hombre de acción, nos duele lo que se ha perdido como hombre virtuoso, nos duele lo que se ha perdido como hombre de exquisita sensibilidad humana, y nos duele la inteligencia que se ha perdido. Nos duele pensar que tenía sólo 39 años en el momento de su muerte, nos duele pensar cuántos frutos de esa inteligencia y de esa experiencia que se desarrollaba cada vez más, hemos perdido la oportunidad de percibir. Desde el punto de vista revolucionario, desde el punto de vista de nuestro pueblo, ¿cómo debemos mirar nosotros el ejemplo del Che? ¿Acaso pensamos que lo hemos perdido? Cierto es que no volveremos a ver nuevos escritos, cierto es que no volveremos a escuchar de nuevo su voz. Pero el Che le ha dejado al mundo un patrimonio, un gran patrimonio; nosotros —que lo conocimos tan de cerca—, podemos ser en grado considerable herederos suyos». Nosotros, guerrilleros del E.L.N., queremos aspirar también a ese honor. Y ningún camino más puro, más honesto, que reiniciar la lucha continental en el escenario que lo dejó impreso en el sitial más alto de la historia: ¡VICTORIA O MUERTE! Bolivia, 1969. __________ - 62 - Revista Almiar 41 - Una vista de la lavandería tomada desde el mismo ángulo donde estaban los soldados y los membros de la CIA enorgulleciéndose por haber matado a este gran hombre... 41 - Une vue de la buanderie prise du même angle où étaient placés les soldats et les membres de la CIA qui se bombaient le torse d’orgueil d’avoir abattu ce grand homme… 42 - El lavadero donde yacía el cuerpo del Che, a semejanza del Cristo de la obra de Mantegna. 42 - Le lavoir où gisait le corps du Che à l’instar de celui du Christ sur la fameuse peinture de Mantegna. - 63 - Revista Almiar 43 - La foto clásica del lavadero, pero sin el cuerpo del Che... Sólo están presentes innumerables graffitis por ahora y siempre. 43 - La photo classique du lavoir, mais sans le corps du Che. Seuls d’innombrables graffitis y figurent encore et toujours. 44 - El mausoleo en construcción encima de la tumba secreta del Che descubierta al final de los años ’90 por un grupo de buscadores cubanos. Aquí está la vieja pista de aterrizaje del aeropuerto de Vallegrande donde habian sido inhumados en secreto los cuerpos del Che y sus compañeros. Los restos mortales fueron llevados en Cuba. 44 - La Mausolée en construction au-dessus de la tombe du Che découverte à la fin des années ’90 par une équipe de chercheurs cubains. Ceci est l’ancienne piste d’atterrissage de l’aéroport de Vallegrande où avaient été enterrés en secret les corps du Che et de ses compagnons. Les restes ont été rapatriés à Cuba. Revista Almiar - 64 - 45 - Dentro de la tumba. 45 - L’intérieur de la tombe gardée tellement secrète… 46 - Otra vista dentro de la tumba. 46 - Une autre vue de l’horrible trou… Revista Almiar - 65 - 47 - La gente de todas partes del mundo llevan flores, recuerdos y cosas para conmemorar la vida y la muerte de Ernesto «Che» Guevara de la Serna. 47 - Des gens de tous les coins du monde viennent déposer des fleurs, des objets et des messages à la mémoire d’Ernesto « Che » Guevara de la Serna. __________ (…) Il est enfantin de prétendre que Che ait pu remettre une liste de ses amis. Il est indubitable qu’un révolutionnaire ne considère comme amis que seulement ses camarades de lutte. Et dans ce sens, Che fut toujours catégorique, pour délimiter où commence et où finit l’amitié. Des exemples notoires peuvent être relevés dans tous ses écrits, en partant des épisodes guerriers de la Sierra Maestra, jusqu’à son journal en Bolivie. Che était un homme capable de s’émouvoir et, dans sa vie de guérillero et de meneur de populations, il eut toujours des gestes sensibles, des mots tendres pour ses amis. Et “Patojo”, le révolutionnaire guatémaltèque qui mourut en combattant pour la libération de sa patrie, fut un de ses amis. Camilo, le légendaire guérillero de la Sierra Maestra était ami de Che. Les autres hommes, il les aima d’un sentiment différent, comme un père envers ses fils. C’est le cas de Tuma et de Rolando. Devant tant de figures limpides et héroïques, Che aurait pu considérer “comme ami” un individu à la ligne politique tellement zigzagante et tortueuse comme Ricardo Rojo ? Celui-là même qui fit commerce de la vie et de la Revista Almiar - 66 - mémoire des guérilleros de Salta, qui attendit la mort de la mère de Che pour inventer des dialogues et des conversations avec elle et son fils. Que je me réfère aux calomnies de Rojo contre Che et les prétendues divergences avec la Révolution Cubaine, et même si celles-ci étaient nouvelles; il n’y aurait aucune personne de bonne foi qui puisse considérer que le récit mal intentionné de Roco ait pu être écrit par un ami. Et parce que plusieurs paragraphes présentés, pour qu’ils puissent apparaître véridiques, ne peuvent pas être démentis par les protagonistes puisqu’ils sont morts. Heureusement, grâce à la même force morale de Che, celle qui guidait tous ses gestes, et grâce à sa conduite héroïque démontrée dans plusieurs combats, aucune légende tortueuse ourdie par la CIA ou ses agents dont certains s’attribuent avec audace et effronterie le titre “d’amis”, ne pourra entacher sa figure Cherie ou souiller son passé de révolutionnaire à Cuba, où il laissa un peuple qui l’aimait. La reconnaissance entre Che et Fidel, le respect et la tendresse mutuels étaient indestructibles. Ce n’est pas par hasard que Che, un homme qui détestait les flatteries personnelles ou pour les autres, ait écrit au sujet de Fidel : “Il possède les caractéristiques des grands meneurs qui, ajoutées à ses talents personnels d’audace, de force et de valeur et à son extraordinaire ardeur pour ausculter continuellement la volonté de la population, l’ont mené dans le lieu d’honneur et de sacrifices qu’il occupe aujourd’hui. Mais il a d’autres qualités importantes, comme sa capacité à assimiler les connaissances et les expériences pour tout comprendre des conjonctures d’une situation donnée, sans perdre de vue les détails et son immense foi dans le futur; sa grande vision à prévenir les événements et anticiper les faits en allant toujours plus loin et mieux que ses compagnons. Avec ces grandes qualités, il y a aussi sa capacité de réunir, de regrouper tout en s’opposant à la division qui elle, affaiblit; son habileté à diriger à la tête de tous, l’action du peuple; son amour infini pour la population; sa foi en l’avenir et sa capacité de le prédire. Fidel Castro fit plus que personne à Cuba pour construire à partir de rien l’appareil aujourd’hui formidable de la Révolution Cubaine.” Quelle sincérité dans ce jugement! Pour nous qui avons vécu avec Che jusqu’à la bataille finale, qui avons appris à le connaître comme un être intègre, comme soldat, commandant et camarade imbattable, les obligations de la Révolution Cubaine —avant-garde de notre Patrie Américaine— sont plus Revista Almiar - 67 - grandes. De même la reconnaissance de Fidel envers Che, celle du peuple cubain envers Che est absolue. Il n’y a personne de mieux placé que Fidel pour expliquer la douleur que causa sa mort : “...Cela nous fait mal, non seulement de l’avoir perdu en tant qu’homme d’action, mais cela nous fait mal de l’avoir perdu en tant qu’homme vertueux; ça nous fait mal d’avoir perdu cet homme à la sensibilité humaine exquise; ça nous fait mal, cette intelligence qu’on a perdue. Ça nous fait mal de penser qu’il n’avait que 39 ans au moment de sa mort; ça nous fait mal de penser aux innombrables fruits de cette intelligence et de cette vaste expérience qui se développait chaque fois davantage, mais dont nous avons perdu l’opportunité de la récolte. Du point de vue révolutionnaire, du point de vue de notre peuple, comment devons-nous regarder l’exemple de Che ? Peut-être pensons-nous que nous l’avons perdu ? Certes, nous ne verrons plus d’autres écrits nouveaux; certes, nous n’entendrons à nouveau sa voix. Mais Che a laissé au monde un patrimoine, un grand héritage. Nous —qui l’avons connu de si près— pouvons être à un degré très élevé ses héritiers.” Nous, guérilleros de l’E.L.N., nous voulons aspirer aussi à cet honneur. Et il n’y a aucun autre chemin plus pur, plus honnête que celui de réinstaurer la lutte continentale dans le scénario qu’il laissa imprimé sur le siège le plus élevé de l’histoire : la Bolivie. LA VICTOIRE OU LA MORT ! Bolivie, 1969. ___________________________________ © 2006 Todos los textos y fotografías son propiedad de sus autores Otros enlaces relacionados: CHE: Número especial de la Revista «Isla Negra» l La imagen inmortal del Che - L’image immortelle du Che (Víctor Montoya) l Evita y el Che Guevara: dos mitos argentinos. Leyendas de pasión (Gabriel Cocimano) l Hasta siempre, comandante (José Miguel Jiménez) l Yo maté al Che - J’ai Tué le Che (Víctor Montoya) — VOLVER A LA PORTADA DE LA REVISTA ALMIAR —