Estudio de caso clı́nico Clinical Chemistry 60:9 1153–1157 (2014) Bloqueo auriculoventricular fetal Michael A. DiMaio1* y James D. Faix1 DESCRIPCIÓN DEL CASO Como parte de la asistencia prenatal habitual, el obstetra de una mujer primigesta nulı́para de 25 años realizó un control de la frecuencia cardı́aca fetal a las 22 semanas de edad gestacional. La frecuencia cardı́aca fetal fue de 90 l.p.m., por debajo del rango esperado de 120 –160 l.p.m. Estos datos requirieron una posterior ecografı́a fetal y ecocardiograma. La ecografı́a no demostró evidencia de edema. La anatomı́a cardiaca fue normal, con cámaras de tamaño adecuado, sin defectos valvulares y sin comunicaciones irregulares entre las circulaciones izquierda y derecha. Sin embargo, el electrocardiograma demostró un bloqueo auriculoventricular de 2:1 (1 latido ventricular cada 2 latidos auriculares). Anteriormente, los resultados de una revisión realizada en el primer trimestre para detectar la aneuploidı́a fetal fueron normales. Los resultados de las pruebas serológicas de los virus de la hepatitis B, varicela y rubéola coincidieron con la inmunidad materna. Los resultados de las pruebas de anticuerpos contra el VIH y sı́filis también fueron negativos. La embarazada no presentó antecedentes médicos considerables, no tomaba medicamentos y no tenı́a antecedentes ni sı́ntomas de enfermedad autoinmunitaria. ANÁLISIS DEL CASO La bradicardia fetal está definida como la frecuencia cardı́aca ⬍110 l.p.m. El diagnóstico diferencial de la bradicardia fetal incluye la bradicardia sinusal, el bigeminismo auricular no conducido y bloqueo auriculoventricular congénito. La bradicardia sinusal con frecuencia es el resultado de afecciones que causan la hipoxia fetal, tal como la hipotensión materna, el prolapso del cordón umbilical y el desprendimiento placentario. El bigeminismo auricular no conducido hace referencia a la presencia de señales eléctricas que se originan en los focos auriculares fuera del nódulo si- 1 Department of Pathology, Stanford University Medical Center (Departamento de Patologı́a, Centro Médico Universitario de Stanford), Stanford, CA. * Dirigir correspondencia para estos autores a: Department of Pathology, Stanford University Medical Center, 300 Pasteur Drive, Lane 235 MC 5324, Stanford, CA 94305-5324. Fax 650-725-6902; correo electrónico: madimaio@stanford.edu. Recibido para la publicación el 15 de julio de 2013; aceptado para la publicación el 11 de diciembre de 2013. DOI: 10.1373/clinchem.2013.212035 © 2013 American Association for Clinical Chemistry PREGUNTAS PARA CONSIDERAR 1. ¿Qué afecciones puede causar una frecuencia cardı́aca fetal irregularmente lenta? 2. ¿Qué afecciones puede causar el bloqueo auriculoventricular congénito? 3. ¿Qué pruebas adicionales deberı́an realizarse? nusal, que no se transmiten al ventrı́culo. El bloqueo auriculoventricular congénito (CHB)2 hace referencia a la disociación completa o incompleta de las contracciones auriculares y ventriculares debido a alteraciones en la conducción. El CHB tiene una incidencia aproximada de 1 en 20 000 recién nacidos vivos. Si se detecta la bradicardia fetal, debe realizarse una ecografı́a y un ecocardiograma fetal para detectar posibles defectos cardiacos estructurales en el feto, tales como la transposición de los grandes vasos o comunicación interauricular. Asimismo, la ecografı́a puede detectar alteraciones en la placenta o el cordón umbilical. Si se excluye la malformación congénita, se debe examinar la sangre materna para detectar la presencia de autoanticuerpos, especialmente aquellos anti-Ro, que se relacionan frecuentemente con el CHB (1 ). El antı́geno Ro se describió por primera vez como un objetivo de autoinmunidad en 1962 y se identificó en pacientes con lupus eritematoso diseminado. También se lo encontró en pacientes con sı́ndrome de Sjögren (SS) y fue denominado SS-A en forma independiente por un segundo grupo de investigadores. Ambos grupos también describieron un antı́geno estrechamente relacionado con Ro/SS-A, denominado La por un grupo y SS-B por otro. Actualmente, conocemos que el Ro constituye en realidad 2 proteı́nas con diferentes masas moleculares, codificadas por diferentes genes. Ro60 (60 kD) es una proteı́na de unión al ARN que actúa como punto de control de calidad para el ARN mal plegado y Ro52 (52 kD) es una ubicuitina ligasa que interactúa con varios tipos diferentes de moléculas (2 ). La es una proteı́na más pequeña (48 kD) que protege al ARN de la digestión enzimática no 2 Abreviaturas no estándar: CHB, bloqueo auriculoventricular congénito; SS, sı́ndrome de Sjögren; ANA, anticuerpo antinuclear; IIF, inmunofluorescencia indirecta. 1153 Estudio de caso clı́nico especı́fica (3 ). Los anticuerpos de los 3 se han implicado en el CHB (4 ). Un estudio reciente ha sugerido que la presencia de anticuerpos de La puede ser más importante de lo que se consideró anteriormente (5 ). Sin embargo, debe tenerse en cuenta que solo el 1%–2% de las madres con anticuerpos de Ro o La serán susceptibles de afecciones en el embarazo. Si bien los anticuerpos pueden transferirse en cualquier momento durante la gestación, el perı́odo de sensibilidad del CHB con frecuencia se informa a las 18 –24 semanas y mas del 80% de los casos se detectan antes de las 30 semanas de gestación (4 ). El espectro patológico de las irregularidades en la conducción auriculoventricular comprende desde el bloqueo auriculoventricular de primer grado (alargamiento estático del intervalo PR más allá de 0.2 s) hasta el bloqueo auriculoventricular de tercer grado (incapacidad de la señal del nódulo sinoauricular para conducirse hasta los ventrı́culos). De aquellos niños con irregularidades de conducción nacidos de madres con anticuerpos de Ro/La, la mayorı́a presentarán bloqueo auriculoventricular de primer grado. Sin embargo, la evolución al bloqueo auriculoventricular de segundo grado y al irreversible bloqueo auriculoventricular de tercer grado en el puerperio se ha documentado ampliamente (4 ). El mecanismo patológico exacto del bloqueo auriculoventricular fetal sigue siendo ambiguo. Las 2 principales teorı́as incluyen la apoptosis (muerte celular programada) y la reacción cruzada (6 ). De acuerdo con la teorı́a de la apoptosis, los anticuerpo anti-Ro maternos se unen a las células cardı́acas fetales apoptósicas que expresan el antı́geno Ro. Al realizarse la unión, se activa una cascada inflamatoria celular y humoral que conduce a la proliferación de fibroblastos, con la posterior cicatrización y disfunción de las vı́as de conducción cardı́acas. La teorı́a de la reacción cruzada propone que los anticuerpos anti-Ro presentan una reacción cruzada con una proteı́na involucrada en la regulación de canales de calcio en el sistema de conducción cardiaca. La mortalidad fetal/infantil del CHB causado por autoanticuerpos maternos se aproxima al 30% y la muerte ocurre predominantemente en el útero o en los primeros meses de vida. Los estudios de tratamientos efectivos han sido controvertidos y han demostrado diversos resultados. La mayorı́a de los tratamientos propuestos en las publicaciones se han centrado en los fármacos esteroides, tales como los compuestos fluorados dexametasona y betametasona, que no se metabolizan por medio de la placenta y se transfieren al feto en formas activas. Un estudio no demostró diferencia en la reversibilidad entre los casos de bloqueo auriculoventricular de tercer grado tratados con esteroides y aquellos que no se trataron con esteroides; sin embargo, un subgrupo de fetos con diagnóstico de bloqueo auriculoventricular de segundo grado mejoró al bloqueo auriculoventricular de primer grado en el 1154 Clinical Chemistry 60:9 (2014) nacimiento (4 ). Asimismo, el tratamiento con esteroides demostró mejores respuestas en relación con los derrames pleurales y pericárdicos por causas cardı́acas. Otro estudio demostró que el tratamiento con dexametasona en fetos con bloqueo auriculoventricular congénito en ausencia de cardiopatı́as estructurales dio como resultado un 90% de supervivencia infantil al año, en comparación con el 46% en aquellos que no recibieron tratamiento. En fetos que recibieron tratamiento con una combinación de dexametasona y agentes -adrenérgicos, la supervivencia infantil al año fue del 95% (7 ). Otros tratamientos propuestos incluyeron hidroxicloroquina, gammaglobulina intravenosa y plasmaféresis. En una revisión reciente de la documentación se concluyó que, si bien no se cuenta con suficiente evidencia concluyente para recomendar cualquier tratamiento especı́fico, la gammaglobulina intravenosa puede ser la mejor opción (8 ). No se recomiendan las pruebas de laboratorio para la detección de rutina de autoanticuerpos maternos con anticuerpos antinucleares (ANA) durante el embarazo. Si bien varios estudios han demostrado mayores ı́ndices de abortos espontáneos, mortinatalidad y preeclampsia en madres con un resultado de detección de ANA positivo, un estudio de más 400 pacientes obstétricas a quienes se les realizó la detección de ANA no demostraron ninguna diferencia en la respuesta del feto (9 ). Por lo tanto, las directrices del American Congress of Obstetricians and Gynecologists (Congreso Americano de Ginecologı́a y Obstetricia) para la asistencia prenatal no incluyen recomendaciones para la realización de la detección de ANA. En su lugar, el control de la frecuencia cardı́aca fetal realizado en las visitas prenatales puede desempeñar una función de detección del CHB y cualquier irregularidad que requiera evaluaciones diagnósticas adicionales. No obstante, se debe llevar a cabo un control ecocardiográfico fetal exhaustivo a las embarazadas con enfermedad reumática autoinmunitaria o CHB anterior y mayores concentraciones de anticuerpos anti-Ro o anti-La en el segundo trimestre. Es importante destacar que las pruebas de ANA que utilizan la inmunofluorescencia indirecta (IIF) pueden ser poco confiables para la detección de anticuerpos anti-Ro y anti-La. Varias estirpes celulares usadas como sustrato de las pruebas de ANA mediante IIF pueden carecer de suficientes cantidades de proteı́nas Ro y La, y también existe evidencia de que ambos antı́genos pueden reubicarse del núcleo al citoplasma. La falta de estandarización de los materiales IIF y el requisito de personal de laboratorio experimentado para interpretar los análisis de IIF contribuyen aún más a la falta de precisión en las pruebas. El American College of Rheumatology (Colegio Estadounidense de Reumatologı́a) ha publicado directrices que recomiendan conservar la IIF como el método de referencia para Estudio de caso clı́nico las pruebas de ANA dado que el uso de los inmunoanálisis que emplean fases sólidas con múltiples antı́genos puede ser menos sensible (10 ). Sin embargo, las sensibilidades relativas de los 2 enfoques pueden depender de los análisis especı́ficos usados. De hecho, algunos sustratos de IIF comercialmente disponibles pueden fallar en la detección de anticuerpos anti-Ro a menos que se realicen modificaciones especiales del cultivo de células (11 ). No obstante, en algunos casos de CHB, los autoanticuerpos pueden no detectarse por causa de los valores maternos muy bajos. SEGUIMIENTO DEL CASO Debido a la alta sospecha de bloqueo auriculoventricular congénito, se realizó un examen de detección de ANA en el suero materno mediante inmunoanálisis ELISA (BioRad ANA) con resultados altamente positivos, con un ı́ndice relativo de 10.171 (intervalo de referencia, ⬍1). La inmunofluorescencia indirecta de confirmación fue negativa. Teniendo en cuenta los resultados en desacuerdo, se realizaron inmunoanálisis especı́ficos para anticuerpos anti-Ro y anti-La que dieron como resultado concentraciones de 145 y 80 U/ml, respectivamente (intervalo de referencia ⬍20 U/ml). A las 23 semanas de gestación, la embarazada recibió tratamiento con 2 mg de dexametasona dos veces por dı́a para evitar la evolución. Se le realizaron ecocardiogramas fetales semanales de allı́ en adelante y el examen a las 26 semanas identificó un bloqueo auriculoventricular de tercer grado. Debido a la preocupación por la muerte súbita del feto y edemas, se programó un parto por cesárea que se realizó a las 31 semanas de gestación. Una semana antes del parto, se le suministró tratamiento con betametasona de 2 dı́as para mejorar la maduración pulmonar del feto. Al momento del parto, la recién nacida pesó 1.7 kg y presentó una frecuencia cardı́aca de aproximadamente 45 l.p.m. A las 2 horas de vida, se implantó quirúrgicamente un marcapasos de dos cámaras. La evolución postoperatoria inmediata fue normal y su frecuencia cardı́aca se estableció en 140 l.p.m. La bebé no presentó erupción cutánea ni trombocitopenia que indicarı́an lupus neonatal. Se realizaron inmunoanálisis especı́ficos de anticuerpos anti-Ro y anti-La en suero neonatal y fueron ⬎100 U/ml y 63 U/ml, respectivamente (intervalo de referencia, ⬍20 U/ml). El ecocardiograma y el electrocardiograma demostraron una anatomı́a cardiaca normal sin regurgitación valvular considerable y funcionamiento normal del marcapasos. Además del bloqueo auriculoventricular de tercer grado persistente, la estadı́a de la bebé en el hospital fue significativa solo por dificultades menores en la alimentación, y fue dada de alta a los 52 dı́as de edad con el marcapasos implantado quirúrgicamente. Debe tenerse en cuenta que no se recomendó a la madre no amamantar a la bebé. Si bien en la leche materna se detectan anticuer- PUNTOS PARA RECORDAR • El bloqueo auriculoventricular congénito es un trastorno poco frecuente, habitualmente relacionado con la transferencia materna de anticuerpos antinucleares, especialmente aquellos anti-Ro. • El tratamiento es controvertido con efectos variables. Los corticoesteroides pueden ayudar a solucionar la inflamación relacionada con el desarrollo del CHB por autoanticuerpos ası́ como mejorar la maduración pulmonar del feto antes del parto prematuro por cesárea. • El examen de detección prenatal de anticuerpos antinucleares maternos no deberı́a realizarse en forma habitual en la mayorı́a de los embarazos. Asimismo, el examen de detección de ANA generalizado no está indicado, mientras que en estas situaciones deben realizarse las pruebas dirigidas para anticuerpos anti-Ro. • Los inmunoanálisis ELISA o múltiples son más sensibles para la detección de anticuerpos anti-Ro que la inmunofluorescencia indirecta habitual para anticuerpos antinucleares. En caso de obtener resultados positivos, debe realizarse la inmunofluorescencia indirecta de confirmación por parte del personal de laboratorio experimentado para determinar el patrón y valor de los autoanticuerpos. pos anti-Ro y anti-La, no se ha comprobado la relación entre el bloqueo auriculoventricular congénito y el amamantamiento. PREGUNTAS PARA ESTIMULAR EL ANÁLISIS 1. Durante una visita prenatal habitual, una embarazada sin antecedentes médicos considerables presentaba un feto con frecuencia cardı́aca irregularmente lenta. ¿Cuál es el diagnóstico diferencial y qué pruebas adicionales deberı́an realizarse? 2. ¿Cuál es el presunto mecanismo del bloqueo auriculoventricular congénito causado por anticuerpos antiRo? 3. ¿Qué métodos de laboratorio están disponibles para la detección de anticuerpos antinucleares y cuáles son las ventajas y desventajas de estos métodos? Contribuciones de los autores: Todos los autores confirmaron que han contribuido al contenido intelectual de este documento y han cumplido con los siguientes 3 requerimientos: (a) contribuciones significativas a la concepción y el diseño, la adquisición de datos o el análisis e interpretación de estos; (b) redacción o revisión del artı́culo en relación con su contenido intelectual; y (c) aprobación final del artı́culo publicado. Declaración de los autores o posibles conflictos de interés: Ningún autor declaró ningún conflicto de interés posible. Clinical Chemistry 60:9 (2014) 1155 Estudio de caso clı́nico Referencias 1. Costedoat-Chalumeau N, Georgin-Lavialle S, Amoura Z, Piette JC. AntiSSA/Ro and anti-SSB/La antibody-mediated congenital heart block. (Bloqueo auriculoventricular congénito mediado por anticuerpos anti-SSA/Ro y antiSSB/La). Lupus 2005;14:660 – 4. 2. Schulte-Pelkum J, Fritzler M, Mahler M. Latest update on the Ro/SS-A autoantibody system. (Actualización más reciente del sistema de autoanticuerpos Ro/SS-A). Autoimmun Rev 2009;8:632–7. 3. Wolin SL, Cedervall T. The La protein. (La proteı́na La). Ann Rev Biochem 2002;71:375– 403. 4. Friedman DM, Rupel A, Buyon JP. Epidemiology, etiology, detection, and treatment of autoantibody-associated congenital heart block in neonatal lupus. (Epidemiologı́a, causas, detección y tratamiento del bloqueo auriculoventricular congénito causado por autoanticuerpos en el lupus neonatal). Curr Rheumatol Rep 2007;9:101– 8. 5. Tunks RD, Clowse ME, Miller SG, Brancazio LR, Barker PC. Maternal autoantibody levels in congenital heart block and potential prophylaxis with antiinflammatory agents. (Niveles de autoanticuerpos maternos en el bloqueo auriculoventricular congénito y posible profilaxis con agentes antinflamatorios). Am J Obstet Gynecol 2013;208:64.e1–7. 6. Ambrosi A, Wahren-Herlenius M. Congenital heart block: evidence for a pathogenic role of maternal autoantibodies. (Bloqueo auriculoventricular congénito: evidencia de una función patógena de los autoanticuerpos ma- ternos). Arthritis Res Ther 2012;14:208. 7. Jaeggi ET, Fouron JC, Silverman ED, Ryan G, Smallhorn J, Hornberger LK. Transplacental fetal treatment improves the outcome of prenatally diagnosed complete atrioventricular block without structural heart disease. (El tratamiento transplacentario fetal mejora la respuesta del bloqueo auriculoventricular completo diagnosticado en forma previa al nacimiento sin cardiopatı́a estructural). Circulation 2004;110:1542– 8. 8. Gleicher N, Elkayam U. Preventing congenital neonatal heart block in offspring of mothers with anti-SSA/Ro and SSB/La antibodies: a review of published literature and registered clinical trials. (Prevención del bloqueo auriculoventricular congénito en los hijos de madres con anticuerpos antiSSA/Ro y SSB/La: una revisión de publicaciones existentes y ensayos clı́nicos registrados). Autoimmun Rev 2013;12:1039 – 45. 9. Afman IE, Cronjé HS, Joubert G, Badenhorst PN, Schoon MG. Antinuclear antibody testing in obstetric patients. (Pruebas de anticuerpos antinucleares en pacientes obstétricas). S Afr Med J 2003;93:932–7. 10. Meroni PL, Schur PH. ANA screening: an old test with new recommendations. (Detección de ANA: una antigua prueba con nuevas recomendaciones). Ann Rheum Dis 2010;69:1420 –2. 11. Pollock W, Toh BH. Routine immunofluorescence detection of Ro/SS-A autoantibody using HEp-2 cells transfected with human 60 kDa Ro/SS-A. (Detección de autoanticuerpos de Ro/SS-A por inmunofluorescencia de rutina mediante células HEp-2 transfectadas con 60 kDa Ro/SS-A humanos). J Clin Pathol 1999;52:684 –7. Comentario Jennifer N.A. Silva1* El bloqueo auriculoventricular completo congénito (CCHB)2 es la disociación eléctrica completa entre la actividad eléctrica auricular y ventricular debido a una disfunción nodular auriculoventricular. El CCHB se relaciona con mayor frecuencia (60%–90% de los casos) con los anticuerpos maternos (anti-Ro y anti-La) que atraviesan la placenta. Se han realizado progresos considerables en el diagnóstico y tratamiento de pacientes con CCHB. El diagnóstico de CCHB en un feto puede ser difı́cil y requiere un cuidadoso análisis ecocardiográfico (habitualmente realizado a las 20 semanas de gestación aproximadamente). Existen métodos más precisos de obtención de electrocardiogramas fetales pero no están ampliamente disponibles. La magnetocardiografı́a fetal (fMCG) es una prueba no invasiva que adquiere la actividad eléctrica de la frecuen- 1 Division of Pediatric Cardiology, Washington University School of Medicine (División de Cardiologı́a Pediátrica, Facultad de Medicina de la Universidad de Washington), St. Louis, MO. * Dirigir correspondencia para este autor a: Division of Pediatric Cardiology, Washington University School of Medicine, CB 8116-NWT, 1 Children’s Place, St. Louis, MO 63110. Fax 314-454-2561; correo electrónico: silva_j@kids. wustl.edu. Recibido para la publicación el 29 de abril de 2014; aceptado para la publicación el 05 de mayo de 2014. DOI: 10.1373/clinchem.2014.226241 © 2014 American Association for Clinical Chemistry 2 Abreviaturas no estándar: CCHB, bloqueo auriculoventricular completo congénito; fMCG, magnetocardiografı́a fetal. 1156 Clinical Chemistry 60:9 (2014) cia cardı́aca por el abdomen materno (1 ). La fMCG se ha usado para diagnosticar diferentes taquicardias, bradicardias y canalopatı́as fetales, como el sı́ndrome de QT largo. El uso de la fMCG está limitado por la disponibilidad de las máquinas y el número reducido de centros y expertos capaces de realizar la prueba. Una vez que se ha realizado el diagnóstico, es importante determinar las causas del CCHB. En el caso de las mujeres con anticuerpos anti-Ro y antiLa, existe un riesgo del 2% de bloqueo auriculoventricular fetal durante el embarazo. Sin embargo, una vez que una mujer ha dado a luz un bebé con CCHB autoinmunitario, el ı́ndice de recurrencia del CCHB en los embarazos posteriores aumenta al 15%. El asesoramiento prenatal para estas pacientes es crucial en estos casos. El mecanismo del CCHB en pacientes expuestas a los anticuerpos maternos es la lesión transplacentaria autoinmunitaria en el nódulo auriculoventricular fetal, donde abundan los antı́genos Ro y La. Si bien se observa un daño preferente en el tejido de conducción, el tejido circundante también puede verse dañado. Luego del nacimiento, hasta un 10% de los pacientes presentan insuficiencia cardiaca, a pesar del tratamiento con marcapasos temprano al nacer. El seguimiento prenatal, posnatal y de largo plazo en pacientes con CCHB causado por autoanticuerpos maternos continúa siendo un trabajo en progreso. Estudio de caso clı́nico Declaración de los autores o posibles conflictos de interés: Ningún autor declaró ningún conflicto de interés posible. Contribuciones de los autores: Todos los autores confirmaron que han contribuido al contenido intelectual de este documento y han cumplido con los siguientes 3 requerimientos: (a) contribuciones significativas a la concepción y el diseño, la adquisición de datos o el análisis e interpretación de estos; (b) redacción o revisión del artı́culo en relación con su contenido intelectual; y (c) aprobación final del artı́culo publicado. Referencia 1. Menéndez T, Achenbach S, Beinder E, Hofbeck M, Klinghammer L, Singer H y cols. Usefulness of magnetocardiography for the investigation of fetal arrhythmias. (Utilidad de la magnetocardiografı́a en la investigación de las arritmias fetales). Am J Cardiol 2001;88:334 – 6. Comentario Mark H. Wener1,2* Los autoanticuerpos son claramente patógenos en ciertos trastornos, tales como la anemia hemolı́tica autoinmunitaria. En otras, tales como la diabetes de tipo 1A, los autoanticuerpos proporcionan un indicio de la autoinmunidad celular. Por el contrario, la función patógena de los ANA y los autoanticuerpos relacionados aún es incierta. El lupus neonatal proporciona un “experimento de la naturaleza”, que indica que los autoanticuerpos son patógenos para el CHB. El transporte a través de la placenta de IgG anti-SSA/Ro causa el CHB, sin autoinmunidad fetal. En estos casos, el ataque inmunitario se soluciona cuando se eliminan los anticuerpos a medida que el bebé crece. Si el feto o la madre pudieran recibir tratamiento durante el embarazo, el bebé crecerı́a sin la enfermedad. Desafortunadamente, no se ha comprobado el tratamiento del bloqueo auriculoventricular fetal autoinmunitario. Los fármacos que inhiben la producción de anticuerpos maternos, la eliminación de anticuerpos maternos (plasmaféresis), la reducción de la respuesta inflamatoria fetal con glucocorticoides que atraviesan la placenta o el bloqueo de la producción de anticuerpos y el transporte a través de la placenta (gammaglobulina intravenosa) deberı́an ser eficaces pero la demostración de la eficacia ha sido esquiva. El lupus puede causar otras respuestas adversas del embarazo, que incluyen la erupción cutánea neonatal pasajera, trombocitopenia neonatal, preeclampsia materna, y muerte fetal de repetición y trombosis relacio- nadas con los anticuerpos antifosfolipı́dicos. La realización de pruebas a pacientes embarazadas con lupus para detectar anticuerpos anti-SSA/Ro ayuda a predecir el riesgo del bloqueo auriculoventricular congénito. Sin embargo, las pruebas no están recomendadas en embarazos de rutina en mujeres asintomáticas, dado que la probabilidad de la evaluación preliminar del lupus o el bloqueo auriculoventricular congénito es reducida, y por lo tanto, las pruebas con resultados positivos probablemente sean resultados positivos falsos clı́nicos. Las pruebas para la detección de autoanticuerpos son complejas. Algunos anticuerpos anti-Ro se dirigen a Ro60, mientras que otros se unen a Ro52. Los epı́topos reconocidos por los autoanticuerpos varı́an y los antı́genos no se muestran de forma regular en las preparaciones de las células HEp2 ni los sistemas comerciales de diagnóstico. Los análisis de microesferas múltiples habitualmente evalúan la detección de anticuerpos anti-Ro52 y anti-Ro60 mediante microesferas independientes pero los resultados generalmente se informan como un resultado único. Asimismo, si bien los valores altamente incrementados de anticuerpos SSA/Ro son más propensos que los valores más reducidos a causar el bloqueo auriculoventricular congénito, varios análisis solo suministran resultados cualitativos. Por lo tanto, la interpretación de las pruebas de anticuerpos anti-SSA/Ro, como muchas pruebas de autoanticuerpos, continúa siendo un desafı́o. 1 Contribuciones de los autores: Todos los autores confirmaron que han contribuido al contenido intelectual de este documento y han cumplido con los siguientes 3 requerimientos: (a) contribuciones significativas a la concepción y el diseño, la adquisición de datos o el análisis e interpretación de estos; (b) redacción o revisión del artı́culo en relación con su contenido intelectual; y (c) aprobación final del artı́culo publicado. Department of Laboratory Medicine (Departamento de Medicina de Laboratorio); y 2 Rheumatology Division, Department of Medicine, University of Washington (División de Reumatologı́a, Departamento de Medicina, Universidad de Washington), Seattle, WA. * Dirigir correspondencia para este autor a: Box 357110, 1959 NE Pacific, Seattle, WA, 97195-7110. Fax 206-598-6189; correo electrónico: wener@u. washington.edu. Recibido para la publicación el 12 de junio de 2014; aceptado para la publicación el 19 de junio de 2014. DOI: 10.1373/clinchem.2014.224535 © 2014 American Association for Clinical Chemistry Declaración de los autores o posibles conflictos de interés: Ningún autor declaró ningún conflicto de interés posible. Clinical Chemistry 60:9 (2014) 1157