176 MANUAL DE EDIFICACIÓN: MECÁNICA DE LOS TERRENOS Y CIMIENTOS 3.5 USO Y ELECCIÓN DE LOS ENSAYOS DEL TERRENO 3.5.1 Ensayos "in situ" 3.5.1.1 Elección del tipo de ensayo La elección del tipo de ensayo "in situ" se realiza en función de los siguientes factores: • Datos necesarios para el proyecto. • Naturaleza del terreno. • Tipo de edificio. • Costo económico. En algunos casos la elección está influida por las características de los instrumentos con que cuentan los laboratorios encargados de la realización del estudio. Generalmente suelen establecerse equivalencias entre distintos tipos de reconocimiento para poder tener una medida homogénea del costo de los ensayos. En términos económicos, se estima que un sondeo con extracción de muestras es equivalente a 1,8 penetrómetros y 2,5 catas. Así mismo se considera que, en función del tipo de terreno, puede plantearse la sustitución de los sondeos con toma de muestras por ensayos con penetrómetro en la proporción expresada en la figura 3.130. Por sondeos con toma de muestras en %. Para la elección del tipo de penetrómetro a utilizar, se recomienda analizar las ventajas e inconvenientes de cada uno de ellos (figura 3.131 en página siguiente), el uso del penetrómetro según su potencia y la naturaleza del terreno (figura 3.132) y el uso del penetrómetro atendiendo a la naturaleza del terreno (figura 3.133). De un modo más general, la elección del tipo de sondeo debe tener en cuenta lo especificado en la figura 3.134. 3.5.1.2 Número mínimo y distancia estimada entre reconocimientos No resulta fácil determinar el número mínimo de reconocimientos necesarios para realizar el proyecto y la ejecución de la edificación con la calidad óptima. Los factores que deben considerarse son: costo mínimo de ejecución, costo mínimo de la “no calidad”, seguridad máxima y adaptación al plazo previsto. Este apartado analiza la influencia que el reconocimiento del terreno tiene en el proyecto y en la construcción del edificio. A continuación, se realiza un análisis de los costes del reconocimiento del terreno, encaminado a la máxima optimización del mismo. El coste total se resume en las siguientes expresiones: CRT = CDP + CR Siendo: CRT: Coste total del reconocimiento. CDP:Coste de los datos previos. Nunca es nulo, pero tiene poca incidencia. CR: Coste del reconocimiento del terreno; comprende ensayos “in situ”, ensayos de laboratorios e informes. Tipo de terreno % Homogéneo 70 Variabilidad baja a media 50 CCE = CTS x NT Erráticos 30 Siendo: CCE: Coste del cimiento del edificio. CTS: Coste de la tonelada soportada. En edificios normales, equivale aproximadamente al coste por m2 construido. Figura 3.130 Sustitución de penetrómetros por sondeos con toma de muestras RECONOCIMIENTO DEL TERRENO 177 Ventajas Penetrómetros Desventajas Estáticos Registran con gran precisión la resistencia de punta Rp y el rozamiento por fuste RF Su manejo es laborioso. La profundidad de penetración depende de los contrapesos y anclajes necesarios para alcanzar la fuerza precisa Dinámico (S.P.T.) Standar Penetration Test Es el ensayo dinámico de mayor fiabilidad; y es un sustituto satisfactorio del estático. Puede llegar a gran profundidad y trabajar bajo el agua. Proporciona muestras inalteradas Es imprescindible el sondeo previo Dinámicos sin entubamiento1 Determinan con facilidad la secuencia de estratos. El número de golpes da una idea de la compacidad o consistencia del suelo. En terrenos cohesivos no se deben emplear Pueden llegar hasta unos 20 m. Son fáciles de operar Llegan a menos de 15 m en terrenos de resistencia media. Son fáciles de operar Llegan a unos 10 m como mínimo. Permiten una gran rapidez de utilización Se pierde el cono o puede resultar laborioso recuperarlo Igual que los pesados. Son de gran fiabilidad sobre todo en suelos en que cabe esperar cierta resistencia al deslizamiento del varillaje Para su utilización se necesita más tiempo que en el caso de los dinámicos sin entubamiento Pesados Medios Ligeros Dinámicos con entubamiento1 NT: Peso en toneladas del edificio (peso propio y sobrecarga de uso). Otros conceptos relacionados son: CC: Coste del cimiento por m2 construido. CNC: Coste de la “no calidad”. Es el que se origina por la falta de calidad, en este caso, del cimiento. La incidencia de éste en este costo de “no calidad” suele ser grande, pudiendo en ocasiones adquirir un carácter catastrófico. El coste de “no calidad” debido al terreno puede estimarse como valor medio superior a las 4.000 Pts./m 2 construido, lo que en la mayoría de los casos se traduce en un valor superior al coste de ejecución del propio cimiento. La suma del coste del cimiento (CC) más el coste de la no calidad (CNC) tiende a un valor óptimo, casi constante a partir de un cierto coste total de reconocimiento (CTR), a partir del cual el Sólo sirven como prueba rápida para reconocer las capas superficiales. En suelos gravosos y arenosos suelen bloquearse produciendo “falsos rechazos” aumento de éste no trae consigo necesariamente la reducción de aquellos. Para valores insuficientes de coste de reconocimiento del terreno (CR), el coste del cimiento (CC) más el coste de la no calidad (CNC) puede dar lugar a un cimiento con un coste (CC) muy alto para minimizar el coste de la no calidad (CNC), o por desconocimiento del terreno se construye el cimiento de coste mínimo en el que el coste de la no calidad (CNC) puede ser equivalente a la ruina del edificio. De acuerdo con lo anterior, las curvas son las representadas en función del coste de reconocimiento en la figura 3.135, en las que se representan u (= CC + CNC), v (= CR + CDP) y u + v. El punto B correspondería a un valor óptimo; a partir de él apenas disminuye el coste del cimiento más el de la no calidad (CC+CNC) en comparación con lo que aumenta el coste del reconocimiento al que se le suman los costes de los datos previos (CR+CDP). Figura 3.131 Penetrómetros: ventajas e inconvenientes 178 MANUAL DE EDIFICACIÓN: MECÁNICA DE LOS TERRENOS Y CIMIENTOS Tipo de penetrómetro1 Estático Dinámico Figura 3.132 Uso del penetrómetro en función de su potencia y de la naturaleza del terreno Principio de funcionamiento Medición de la resistencia a la penetración de una punta y un vástago mediante presión Medición de la resistencia a la penetración de una puntaza mediante golpeo con energía normalizada (E) Tipo de suelo Tipo de penetrómetro Gravas Estático Arenas Suelo más idóneo Ligero 2,5 - 5 Mkp Arcillas y limos muy blandos Arenas finas sueltas. Medio 6 - 10 Mkp Arcillas y limos blandos o medios, arenas finas y medias sueltas a medianamente compactas Pesado > 10 Mkp Arcillas y limos medios a duros Arenas medias a gruesas compactas Terrenos cementados. Suelos muy preconsolidados Ligero E=6a 10 Mkp Arenas sueltas a medias. Limos arenosos flojos a medios Rocas, bolos, gravas. Terrenos cementados. Terrenos muy preconsolidados Terrenos cohesivos, limo y pulverulentos muy sueltos Pesado E = 30 a 50 Mkp Arenas medias a muy compactas Arcillas preconsolidadas sobre el N.F. Gravas arcillosas y arenas Rocas, bolos, gravas compactas Terrenos muy cementados. Terrenos cohesivos, limos y pulverulentos muy sueltos Rocas, bolos, gravas, suelos cementados Arcillas duras. Arenas muy compactas. Terrenos muy preconsolidados Rocas, bolos, gravas compactas Utilización Necesita un gran contrapeso y construcción muy robusta. Dinámico La resistencia del varillaje es muy baja. No existe para los dinámicos con entubado. Sólo debiera utilizarse el entubado. Estáticos Igual que las gravas. Dinámicos Figura 3.133 Uso del penetrómetro según la naturaleza del terreno Terreno en que es impracticable o no válido Potencia Si se sobrepasa el nivel freático es preferible emplearlos con entubado para evitar hundimientos. Es preferible el penotrómetro estándar. Siempre es aconsejable el entubado. Limos Pueden emplearse todos, pudiéndose eliminar la resistencia del varillaje con un cono de mayor diámetro que éste. Arcillas Pueden emplearse el estático, el estándar y el dinámico entubado. No se deben emplear los dinámicos sin tubería a causa de la resistencia del varillaje. Es preferible el estático si lo permite la reacción. RECONOCIMIENTO DEL TERRENO 179 Dispositivo de avance Diámetro de perforación Ø (mm) Tipo de terreno en que es practicable Tipo de suelo en que no es practicable Sondeo manual Barrena espiral, gusanillo, cuchara cerrada o abierta. 80 -200 Terrenos flojos por encima del nivel freático Terrenos cohesivos por debajo del nivel freático Suelos duros o compactos, piedras o bolos mayores que Ø/80 mm. Arenas sueltas No Barrenado mecánico Hélice maciza o hueca, cuchara, etc. 85 - 2000 Todo tipo por encima del nivel freático (salvo exclusiones) Terrenos cohesivos por debajo del nivel freático Suelos duros o cementados Piedras o bolos mayores que Ø/80 mm Rotación No Rotación convencional en seco Tubo simple 65 - 150 Arcillas, limos y arenas arcillosas saturadas o húmedas Gravas y gravillas arcillosas Ø< 80 mm Terrenos duros o ce mentados Arenas sueltas. Gravas y bolos mayores que Ø/80 mm Rotación No Rotación con tubo simple Tubo simple 65 - 150 Terrenos cohesivos muy consolidados. Rocas competentes y bloques. Terrenos cementados Terrenos granulares Terrenos cohesivos blandos. Gravas y bolos >Ø/80 mm Rocas deleznables Rotación Sí Rotación con tubo doble Tubo doble 65 - 150 Terrenos con cohesión compactos, incluso con arena y gravilla Terrenos cementados. Rocas de cualquier tipo Terrenos granulares sueltos o medios Limos flojos. Gravas y bolos sueltos Rotación Sí Rotación con tubo doble Tubo doble con retenedor 65 - 150 Arcillas y limos de cual quier consistencia. Arenas con algunos finos Gravas medias a gruesas Bloques Percusión o golpeo No Avance por percusión Cable con dispositivo de percusión (cucharas) 150 - 400 Arenas, arenas arcillosas y terrenos de transición (< Ø/80 mm) Gravas y bolos gruesos. Terrenos cementados y arcillas consolidadas Percusión o golpeo No Avance por percusión Tubo con borde cortante interior 60 - 300 Terrenos con tamaño máximo Ø/120 mm Gravas con tamaño >Ø/50 mm y terrenos muy compactos o cementados Percusión o golpeo No Avance por percusión Tubo con borde cortante exterior 60 - 300 Terrenos con tamaño máximo Ø/80 mm Gravas con tamaño > Ø/50 mm y terrenos muy compactos o cementados Presión Sí Avance por presión hidráulica Tubo con borde cortante interior 50 - 150 Arcillas y limos blandos Arenas finas Arenas gruesas, gravas. Mezclas granulares con pocos finos. Arcillas medias a duras Método de avance Inyección de agua Rotación, percusión o presión No Rotación Descripción Figura 3.134 Utilización de los distintos tipos de sondeo. Tabla extraida del Curso de Cimentaciones. C.O.A.M. 180 MANUAL DE EDIFICACIÓN: MECÁNICA DE LOS TERRENOS Y CIMIENTOS Para superficies mayores, y dependiendo de las características generales del terreno y del número de plantas del edificio, un programa de reconocimiento puede hacerse tomando como base los datos de la figura 3.136. Coste u+v B v Figura 3 135 En cualquier caso, el número de reconocimientos será función del tipo de terreno: homogéneo, heterogéneo o errático. El número de reconocimientos será tres veces mayor en el errático que en el homogéneo, y 1,5 veces mayor en el heterogéneo que en el homogéneo. También, evidentemente, dependerán de la superficie relativa sobre la que se va a edificar. u Número mínimo de reconocimientos en función de CC y de CNC De todos modos, como en la curva u = CCT + CNC de la figura 3.135, con los datos obtenidos correctamente para una planta se está ya sensiblemente en la parte asintótica horizontal, bastará con incrementar ligeramente el coste de los reconocimientos haciéndolos más completos, pero nunca invertir “n” veces más. Figura 3.136 Número de reconocimientos en función del tipo de terreno y del número de plantas del edificio Terrenos De esta manera y de acuerdo con lo expresado anteriormente, un programa de reconocimiento debe incluir como mínimo un sondeo con toma de muestras y un penetrómetro estático o dinámico para solares de hasta 300 m 2 de superficie aunque algunos especialistas fijan este límite en solares de 500 m2. Distancia aproximada entre reconocimientos m(1) Número total de reconocimientos (N) (S : Superficie del solar en m2) Si sobre una superficie determinada se construye un edificio de una planta, el coste del reconocimiento del terreno por m 2 construido, obteniendo análogos datos, será “n” veces mayor que para un edificio de “n” plantas. A su vez, el edificio de “n” plantas tendrá un coste de no calidad (CNC) “n” veces mayor. En función del tipo de edificio y de la heterogeneidad del terreno, la distancia entre sondeos puede variar entre 20 y 60 m. En el caso de terrenos muy erráticos, en ocasiones es necesario hacer una penetración por cada una de las zapatas de cimiento. Con toma de muestra Sondeo Número de penetrómetros N mínimo Nº m mínimo Nº p mínimo Erráticos 10 - 15 S S a 225 100 3 N 3 1 2N 3 2 Heterogéneos 15 - 20 S S a 400 225 2 N 3 1 2N 3 1 Homogéneos 20 - 25 S S a 625 400 2 N 3 1 2N 3 1 (1) Para edificios de hasta tres plantas pueden utilizarse las distancias máximas. A partir de las nueve plantas, distancias mínimas. Para los intermedios, interpolar linealmente. RECONOCIMIENTO DEL TERRENO 181 En grandes obras de ingeniería civil la distancia entre sondeos puede encontrarse entre 30 y 80 metros. Tipo de cimiento Otro criterio práctico para establecer el número mínimo de sondeos es el siguiente: • Solares pequeños, menores de 500 m 2: dos sondeos; uno con toma de muestras en cada estrato diferente para obtener un corte geotécnico; el segundo puede ser un penetrómetro estático, o un S.P.T. Macizo o zapata aislada Las características del terreno: – Mejoran con la profundidad – Empeoran con la profundidad Distancia entre zapatas o losas próximas Profundidad del sondeo a partir de la superficie del cimiento D1 3b No se superponen efectos entre zapatas o losas mínimo 6 m b 2b - 3b • Solares mayores: tres sondeos: uno con toma de muestras, análogo al anterior, y dos penetrómetros. • Solares con superficie superior a 10.000 m 2 : el número aproximado de sondeos que se utiliza oscila entre uno cada 400 m 2 y uno cada 3.500 m 2 en función del tipo de edificio y de la variabilidad que se prevé para el terreno. 3.5.1.3 Profundidad aconsejable de las prospecciones de reconocimiento La profundidad de catas y pozos no suele fijarse, puesto que queda determinada por condicionantes constructivos; en cualquier caso, nunca suele sobrepasar los cinco metros. Sin embargo, el resto de las prospecciones por penetración deben hacerse a profundidad tal que alcancen todas las capas de terreno que puedan quedar influenciadas por los esfuerzos que transmite la edificación. Costet y Sanglerat proporcionan valores para esta profundidad en el caso de que se prevea el empleo de cimientos superficiales. Estos valores se reflejan en la figura 3.137. En las figuras 3.138 y 3.139 se presentan valores orientativos de la profundidad del reconocimiento en función del tipo de edificio, el tipo de terreno y la situación. Losas o zapatas cuyos efectos se superponen en las capas profundas ayb: c: D1 : D: c<2b 2b < c < 4b c ≥ 4b 4,5b 3b 1,5b Dimensiones en planta del cimiento (a > b) Distancia entre los dos cimientos más próximos. Profundidad del reconocimiento por debajo de la base del cimiento. Profundidad de la base del cimiento. Figura 3.137 Profundidades orientativas de los reconocimientos 3.5.1.4 Situación de los sondeos La ubicación de los sondeos debe ser tal que con un número mínimo se pueda dar la mayor cantidad de información o que ésta sea lo más representativa posible de la realidad del terreno. Uno de los métodos más sencillos y prácticos consiste en realizar los sondeos al tresbolillo comenzando desde las zonas más próximas a los bordes. En la figura 3.140 (páginas siguientes) se exponen diversas disposiciones posibles, entre las que se incluye un caso real efectuado en Benalmádena, en el que se aprecia la importancia de la ubicación y los errores que pueden cometerse. 182 MANUAL DE EDIFICACIÓN: MECÁNICA DE LOS TERRENOS Y CIMIENTOS Tipo de edificio Profundidad (m) Laderas de montañas suaves Zonas altas de ríos Zonas urbanas con cimiento superficial E1 E2 E3 E4 10 12 14 16 Llanuras Valles de ríos importantes Zonas urbanas nuevas E1 E2 E3 E4 12 15 18 20 Deltas, marismas y albuferas Tramos finales de ríos importantes Zonas urbanas nuevas Industrias antiguas Zonas tradicionalmente de cimentación profunda E1 E2 E3 E4 15 20 25 30 30 Situación Figura 3.138 Profundidad de reconocimientos en función del tipo de edificio y de la situación geográfica. Tipo de edificio Profundidad Kxb Valores de K Función de Ph Valor de np npráctico = n x Ph Muy baja N < 10 qu < 0,08 N/mm2 E1 E2 E3 E4 1,3 1,4 1,5 1,6 0,7 Baja 10 < N < 20 0,8 < qu < 0,15 N/mm2 E1 E2 E3 E4 1,1 1,2 1,3 1,4 0,6 Media N > 20 qu > 0,15 N/mm2 E1 E2 E3 E4 1,0 1,0 1,1 1,2 0,5 Resistencia del terreno n: Número de plantas sin contar sótanos. npráctico: Número de plantas ficticio para determinar el tipo de edificio. Figura 3.139 Número de reconocimientos en función del tipo de edificio, número de plantas corregido, resistencia media del terreno y anchura del edificio En la figura 3.141 (página siguiente), tomada de una publicación sobre cimientos realizada por el C.O.A.M., se indica la situación de sondeos en solares rectangulares o cuadrados; en L; y de planta irregular. 3.5.2 Elección de ensayos de laboratorio Al igual que en el caso anterior, los ensayos de laboratorio deben ser escogidos atendiendo a necesidades de diseño, información y economía. La diferencia fundamental entre un ensayo de laboratorio y un ensayo "in situ" radica en la gran especificidad de los primeros, que hace que se utilicen para determinar propiedades específicas y sea difícil el encontrar dos ensayos alternativos para la medida de la misma propiedad. Dentro de los ensayos de laboratorio puede distinguirse entre ensayos de clasificación y ensayos de estado. Los primeros son aquellos que, por medio de relaciones empíricas y límites cuantitativos, sitúan un terreno dentro de algún orden cualitativo con propiedades específicas. Así, el tamaño de los granos determinado por medio del ensayo de granulometría permite clasificar un terreno como arena, arcilla con limos o grava arcillosa mientras que el ensayo de límites de Atterberg indica si un suelo es más o menos plástico y éste se clasifica atendiendo a esta propiedad. Los ensayos de estado indican la situación concreta del terreno en lo que se refiere a propiedades físicas concretas, que pueden utilizarse para su clasificación. Así, por ejemplo, existen tablas que atienden a la resistencia a la compresión como criterio de clasificación y otras al peso específico del terreno. Así, si se clasifica un terreno como "de consistencia media", en tal caracterización queda implícito que se trata de arcillas de baja o media plasticidad con una resistencia a la compresión entre 0,05 y 0,1 N/mm 2 . RECONOCIMIENTO DEL TERRENO 183 Situación de sondeos Por ello, los tradicionalmente denominados "ensayos de clasificación", dan una gran idea de las propiedades de estado de muchos terrenos y viceversa. Los ensayos de laboratorio más normalmente realizados son los que se han citado y explicado en el presente Manual; entre ellos se encuentran: curvas granulométricas, límites de Atterberg, determinación de la humedad natural, pesos específicos, compacidad, índice de huecos, índice de densidad y porosidad, compresión simple, ensayos edométricos, curvas de consolidación, hinchamiento y expansividad, ensayos de corte directo y ensayo triaxial. Cada uno de ellos responde a una finalidad específica que hace necesaria su realización para la determinación de la propiedad. En la figura 3.142 se ha presentado un resumen de ensayos de laboratorio y de resultados obtenidos, así como usos de estos resultados que sirven como criterios para su elección. 600 m2 600 m2 600 m2 Caso real: en Benalmádena S-1 18 m S-2 S-1 35 m S-2 Relleno 15 m Roca Figura 3.140 Situación de sondeos Las curvas granulométricas identifican las diferentes fracciones que componen el suelo y las cuantifica dentro del total por tamaño de los granos, llegándose a una distribución granulométrica. Los resultados rara vez son de aplicación inmediata. El sistema resulta más apropiado para definir las propiedades físicas de los terrenos superficiales que de los profundos. A su vez, la curva granulométrica puede ayudar a la determinación del origen geológico de un terreno. La determinación de los pesos específicos, la humedad natural, la compacidad, el índice de huecos, el índice de densidad y la porosidad nos proporciona una serie de resultados que permiten conocer propiedades relacionadas con la estructura interna del material, así como diferentes datos tendentes a la determinación de otras propiedades. La determinación de los límites de Atterberg es una de las pruebas más realizadas en Figura 3.141 Esquemas orientativos para el emplazamiento de puntos de reconocimiento. Curso COAM 184 MANUAL DE EDIFICACIÓN: MECÁNICA DE LOS TERRENOS Y CIMIENTOS Tipo Ensayo de penetración estándar (S.P.T.) En sondeo Ensayo de corte con molinete (“Vane Test”) Ensayo presiométrico En superficie o pozo Ensayo de carga con placa Descripción Nº de golpes N para hincar 30 cm un cilindro hueco de dimensiones normalizadas Determinación Compacidad de suelos granulares Golpeo con maza de 63,5 kg cayendo desde 76 cm Resistencia de arcillas preconsolidadas, encima del nivel freático Medida del par de giro M necesario para romper el terreno haciendo girar dos cuchillas en cruz introducidas verticalmente Resistencia al corte sin drenaje de suelos cohesivos blandos Dilatación por gas a presión de una célula cilíndrica contra las paredes de un sondeo midiendo la deformación volumétrica correspondiente a cada presión hasta llegar eventualmente a la rotura del terreno Medida de los asientos S0 de una placa rígida cuadrada o circular (hab. 30x30 cm2) al ir aplicando cargas crecientes, llegando o no a la rotura del terreno Interpretación o aplicaciones <4 4 - 10 10-30 30 - 50 > 50 Muy floja Floja Media Alta Muy alta < 29 29 - 30 30 - 36 36 - 41 > 41 Sólo orientativa Cu = 2M ⎛ D⎞ πD2 ⎜ H + ⎟ ⎝ 3⎠ H = Altura de las cuchillas D = Diámetro del molinete Presión límite PL y deformabilidad Ep de suelos granulares, arcillas dura, etc. Relación presión-asiento en suelos granulares Existen varias fórmulas para calcular la capacidad portante y el asiento de cimientos a partir de PL y Ep ⎛ 2B ⎞ Δ cim = Δ1 ⎜ ⎟ ⎝ B + B0 ⎠ 2 B = Ancho del cimiento B0 = Lado o diámetro de la placa Coeficiente de balasto de cualquier terreno K placa = Capacidad portante sin drenaje de suelos cohesivos qcim = qplaca P Δ0 Figura 3.142 Utilización y resultados de las pruebas “in situ” RECONOCIMIENTO DEL TERRENO 185 los laboratorios ya que, gracias a la experiencia acumulada, permiten determinar (resultados del límite líquido, límite plástico y límite de retracción) el tipo de terreno con el que se trata y sus propiedades. Los ensayos edométricos permiten determinar las denominadas “curvas edométricas presión–deformación”, presión e índice de poros, según diferentes condiciones del terreno, tomadas de muestras naturales del terreno o bien de amasados realizados en laboratorio. 3.6 COSTES 3.6.1 Costes aproximados de diversos ensayos “in situ” y de Laboratorio Se incluyen en este apartado los costes aproximados de los ensayos más usuales que pueden realizarse “in situ” y en laboratorio. Los precios, que se han expuesto en la tabla de la figura 3.143, son orientativos para la ejecución de estudios geotécnicos en el año 2.002. Coste (E) Operación 1. Ud. de implantación del equipo necesario de sonda de rotación o helicoidal en el área de trabajo y retirada de la misma junto con su equipo auxiliar (L = distancia a la sede de la empresa, en km) 600,00 + 1 L 2. Ud. de traslado de equipo de sondeo entre puntos de penetración (según dificultad) 90,00 3. m de sondeo mecánico en suelos y rellenos hasta 25 m de profundidad y φ mín 76 mm 50,00 4. Id. en roca 63,00 5. Id. en grava 75,00 6. Ud. de calicata de profundidad mínima 2 m 90,00 7. Ud. de muestra inalterada en bloque mínimo 0,20 x 0,20 x 0,20 m 39,00 8. Ud. de toma de muestra inalterada con tomamuestras tipo Shelby 39,00 9. Ud. de ensayo de penetración estándar (SPT) 33,00 10. m de tubo piezométrico de PVC ranurado (ó 65 mm) incluida colocación 9,00 11. Ud. de tapa de sondeo 30,00 12. Ud. de toma de muestra de agua 18,00 13. Ud. de caja de testigos 15,00 14. Ud. de implantación de penetrómetro dinámico o estático en el área de trabajo y retirada del mismo junto con su personal auxiliar 270,00 15. Ud. de emplazamiento de penetrómetro en cada punto a reconocer 90,00 16. m de penetración dinámica 20,00 17. Ud. de ensayo de carga con placa de 30 x 30 cm 150,00 18. Ensayo de penetración con penetrómetro de bolsillo 50,00 2 Figura 3.143 Costo aproximado de los ensayos más usuales 186 MANUAL DE EDIFICACIÓN: MECÁNICA DE LOS TERRENOS Y CIMIENTOS APÉNDICE. CÁLCULO DE LA COHESIÓN EN EL ENSAYO DE CORTE DIRECTO La recta representada en la figura C.1, que pasa por los tres puntos de coordenadas [σi, τi], forma un ángulo de valor ϕ. ϕ = 20,8o tg ϕ = 0,38 τ1 − τ2 τ−C = σ σ1 − σ 2 τ1 − C τ2 − C tg ϕ = = σ1 σ2 τ= τ1 − τ2 ×σ+C σ1 − σ 2 [C.3] De la igualdad [C.2] se deduce que: C= σ 2 τ1 − σ1τ2 σ 2 − σ1 Y sustituyendo en [C.3]: τ − τ2 σ τ − σ1τ2 τ= 1 ×σ+ 2 1 σ1 − σ 2 σ 2 − σ1 Se cumplen las siguientes igualdades: tg ϕ = Operando en la expresión [C.1]: [C.1] [C.2] Sustituyendo las variables por los valores obtenidos en los ensayos (véase la figura 3.96 en el apartado 3.4.2.5.c): τ = 0,38σ − 8,8 ⋅10 −3 C = −8,8 ⋅10 −3 N mm 2 Figura C.1 Resultados y gráfica del ensayo de corte directo Se obtiene, de este modo, un valor negativo para la cohesión. Este resultado no tiene sentido, puesto que el valor de C no debe ser mayor o igual que cero, por lo que sólo puede ser atribuido a ligeras imprecisiones en los resultados del ensayo. Para obtener un valor de C más acorde con la realidad, se toma el valor medio del ángulo de rozamiento (según los valores de la figura 3.96). ϕ = 19o τ = tg 19° ×σ + C = 0,344 σ + C [C.4] Se hace pasar a la nueva recta por el punto σ 1 = 0,16,τ 1 = 0,052. Sustituyendo ambos valores en la expresión C.4, se obtiene el resultado final, más acorde con la realidad. Figura C.2 Corrección de la gráfica para la obtención del valor C C = −0,344 × 0,16 + 0,052 = = 0,00304 N / mm 2