Consecuencias de la recogida de cadáveres en la ganadería extensiva Jose Luis Iranzo COAG 26 Abril 2012 E-mail: jliranzo@coag.org Problemática Actual En el año 2002 la Comisión Europea aprueba el Reglamento (CE)1774/2002 por el que se establecen las normas sanitarias aplicables a los subproductos animales no destinados al consumo humano lo que supone entre otras cosas, la restricción del depósito de cadáveres en el campo. Ante la certeza de que estas medidas suponen un perjuicio para la población de aves necrófagas en Europa se publicaron decisiones que permitían en determinados países de la Unión Europea crear puntos de alimentación para las aves carroñeras, siempre bajo condiciones muy estrictas desde el punto de vista sanitario El estricto cumplimiento de estas medidas ha llevado al cierre de numerosos muladares y a la prohibición del abandono de animales muertos en el campo, lo que en la realidad ha supuesto una considerable reducción del número de piezas de ganado accesibles para las aves y otras especies carroñeras. La nueva normativa vigente prohíbe el abandono de ganado muerto en el campo, así como en los muladares que no cumplen las normas específicas, lo que ha supuesto importantes problemas para las especies necrófagas que explotaban este recurso como fuente de alimento, llegando a una situación en la que ni se está gestionando correctamente el ganado muerto tanto en producciones extensivas como intensivas, ni se está teniendo en cuenta a las poblaciones carroñeras. En la península Ibérica el mantenimiento de las poblaciones de necrófagas tan solo mediante puntos de alimentación no resulta suficiente debido a las siguientes circunstancias: disminución de la disponibilidad de alimento y el aumento del riesgo de otras amenazas Ataque buitres Video Ataque de Buitres Posibles Soluciones • Volver a permitir el abandono de animales en la naturaleza • El mantenimiento de los muladares tradicionales que funcionaban hasta ahora, sobre todo cuando hablemos de las cabañas ganaderas ovina y caprina en la que se ha demostrado la ausencia de EEB y por tanto no entrañan peligro de contagio a otros animales o los seres humanos. • Además podría permitirse el abandono en el campo o muladares de las cabezas de bovino menores de 24 meses (libres de MER). • Las administraciones públicas, además podrían revisar todos los lugares adecuados para el depósito de animales, permitir la creación de nuevos comederos y apoyar la creación de una nueva legislación que permita el aporte de ganado ovino a los comederos, y el abandono de animales muertos, al menos en países como España y Portugal donde los casos de EEB son mínimos y las poblaciones de especies necrófagas muy elevadas y las más importantes de Europa Gracias por su atención Jose Luis Iranzo COAG 26 Abril 2012 E-mail: jliranzo@coag.org