Por el Oscar, Hollywood se pone serio

Espectáculos
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Miércoles 23 de enero de 2008
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CINE
La meca del cine se prepara para una fiesta atípica
Javier Bardem, un firme candidato a la estatuilla de mejor actor de reparto
Cate Blanchett, candidata por partida doble
Los hermanos Coen, reconocidos por su labor multifacética
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Por el Oscar, Hollywood se pone serio
Opinión
Petróleo sangriento y Sin lugar para los débiles, con ocho nominaciones, se convirtieron en las favoritas
Nominados
con acento
de autor
Por Natalia Trzenko
De la Redacción de LA NACION
Todavía no había salido el sol en
Los Angeles cuando el presidente
de la Academia de Ciencias y Artes
de Hollywood, Sid Ganis, y la actriz
ganadora del Oscar Kathy Bates se
subieron al escenario armado en la
sede de la Academia para leer la lista de nominados a los premios que
figuran en el centro de la agenda de
la industria del cine, especialmente
este año, en que la fiesta celebrará
sus ochenta años de vida y corre peligro de no realizarse. Es que lo que
parecía imposible finalmente pasó:
la ceremonia de los Globos de Oro se
suspendió como consecuencia de la
huelga de guionistas que hace tres
meses azota todas las producciones
de televisión y cine en Hollywood.
Así, nada garantiza hoy que el glamoroso evento del próximo 24 de
febrero vaya a realizarse. Pero más
allá de lo que pueda suceder ese día,
lo cierto es que los votantes ya distinguieron a dos films por encima del
resto: Sin lugar para los débiles, de
los hermanos Ethan y Joel Coen, y
Petróleo sangriento, de Paul Thomas
Anderson, que recibieron ocho menciones cada una y se transformaron
en las favoritas. En el rubro actoral
la más querida es, sin duda, Cate
Blanchett, que compite como mejor
actriz por su papel en Elizabeth: la
edad dorada y como mejor actriz de
reparto por I’m Not There.
Si los productores de la ceremonia
quieren evitar la suerte que corrió la
Asociación de Prensa Extranjera de
Hollywood, dueños de los Globo de
Oro, deberán negociar un acuerdo
individual con el gremio de escritores. Y tendrán que hacerlo rápido.
Aunque Gil Cates, productor del
programa –que para la Argentina
emitirá en directo la señal de cable
TNT– aseguró a la revista especializada Variety que mucho puede suceder en un mes y que aunque en ese
tiempo no se solucione la pelea igual
“tendremos un montón de clips que
mostrar, tenemos una historia de 80
años por explorar”.
Claro que esta vez, esas imágenes
de películas le saldrán caro a la Academia, porque a diferencia de otros
años los derechos no les serán cedidos
por gentileza de los estudios y los sindicatos sino que deberán pagar alrede-
dor de 200 mil dólares por cada una de
ellas; otra consecuencia de tener una
industria atravesada por los conflictos
sindicales. Aunque por estos días las
partes podrían retomar las conversaciones estancadas desde diciembre,
es posible que para los Oscar sea demasiado tarde. Pero si, en el peor de
los casos, la huelga no se soluciona,
los organizadores de los premios de
la Academia no repetirán el error de
los responsables de los Globo de Oro.
Sin guionistas y sin estrellas –que no
atravesarán los piquetes–, igual se las
ingeniarán para hacer algo más que
una conferencia de prensa.
Dorado pero sin brillo
No es tiempo de películas livianas.
Ese parece ser el mensaje que enviaron ayer los votantes de la Academia
al elegir a sus nominados. Entre los
candidatos a mejor película se cuentan, además de las mencionadas Sin
lugar... y Petróleo sangriento, Michael
Clayton, Expiación, deseo y pecado y
La joven vida de Juno. Sólo esta última es una comedia, aunque su trama
gira en torno del muy serio tema del
embarazo adolescente.
Resulta fácil relacionar estas elec-
ciones con el sombrío clima que sobrevuela a la economía de Los Angeles y a la de los Estados Unidos en
general. Claro que Hollywood sigue
siendo Hollywood, la meca de las alfombras rojas, las grandes galas y las
listas de las peor y las mejor vestidas.
Por eso, muchos de los especialistas
concluyeron que muchos se dejaron
convencer por “el poder de estrella”
que irradia George Clooney.
Aunque no le restaron méritos a Michael Clayton, más de uno comentaba
que el afán de tener un auditorio lleno
de celebridades puede influenciar las
decisiones. Es cierto que en un año en
el que los directores nominados son
considerados más autores que personalidades (ver columna), el atractivo
que logre que el público acepte pasar
más de tres horas frente a su televisor
debe llegar de los actores. Sin Brad
Pitt ni Angelina Jolie, la otra gran
luminaria, George Clooney, no podía
faltar. Lo mismo que Johnny Depp,
nominado por Sweeney Todd.
Una segunda oportunidad
“Es un honor recibir esta nominación, que es sin duda el reconocimiento al trabajo y al talento de
todos aquellos creadores y profesionales de mi oficio que durante todos
estos años han inspirado y mejorado
el mío.Y muy en especial al ingenio
de los hermanos Coen, que han sabido imprimir a este personaje una
dimensión que va más allá de mi interpretación”. Esa fue la declaración
de Javier Bardem al recibir la noticia
de que figuraba en la lista de los candidatos a mejor actor de reparto por
su rol en Sin lugar para los débiles.
“Le agradezco a los miembros de la
Academia por este maravilloso regalo”, concluyó el actor español, que
en 2000 había recibido un presente
similar cuando fue nominado como
mejor actor por su trabajo en Antes
que anochezca, de Julian Schnabel,
el director cuyo film La escafandra
y la mariposa recibió tres importantes menciones.
¿Si los premios Oscar se entregan sin la pompa y la circunstancia
que acostumbran, querrá decir que
las elecciones de los votantes serán
menos significativas? Esta es la pregunta que ronda por la cabeza de todos los involucrados en el tema, interrogante que esperan no tener que
contestar.
Por Diego Batlle
Norma Aleandro
ARCHIVO
La que no fue
■ Los críticos de The New
York Times suelen analizar
las nominaciones y aportar
su propia lista de quiénes
deberían figurar en la carrera al Oscar. Así, para A.
O. Scott, en la categoría de
mejor actriz protagónica
figura Norma Aleandro por
su papel en Cama adentro, el
film de Jorge Gaggero que se
estrenó hace poco en los Estados Unidos. Este crítico había elegido a la película como
una de las mejores de 2007.
LOS PRINCIPALES NOMINADOS
Mejor película
■ Expiación, deseo y pecado
■ La joven vida de Juno
■ Michael Clayton
■ Sin lugar para los débiles
■ Petróleo sangriento
Mejor actor
■ George Clooney
(Michael Clayton)
■ Daniel Day-Lewis (Pe-
tróleo sangriento)
■ Johnny Depp (Sweeney
Todd: el barbero demoníaco de la calle Fleet)
■ Tommy Lee Jones (In
the Valley of Elah)
■ Viggo Mortensen (Promesas del Este)
Mejor actriz
■ Cate Blanchett (Elizabeth: la edad dorada)
■ Julie Christie (Lejos
de ella)
■ Marion Cotillard (La
vie en rose)
■ Laura Linney (The
Savages)
■ Ellen Page (La joven vida de Juno)
Mejor actor de reparto
■ Javier Bardem (Sin lugar para los débiles)
■ Casey Affleck (El asesinato de Jesse James por
el cobarde Robert Ford)
■ Philip Seymour Hoffman (Juego de poder)
■ Hal Holbrook (Hacia
rutas salvajes)
■ Tom Wilkinson (Michael Clayton)
Mejor actriz de reparto
■ Cate Blanchett (I’m
■ Nancy Oliver (Lars
Not There)
Clayton)
■ Ruby Dee (Gánster
■ Joel Coen y Ethan
and the Real Girl)
americano)
■ Saóirse Ronan (Expiación, deseo y pecado)
■ Amy Ryan (Desapareció una noche)
■ Tilda Swinton (Michael
Clayton)
Coen (Sin lugar para los
débiles)
■ Paul Thomas Anderson (Petróleo sangriento)
■ Tony Gilroy (Michael
Película extranjera
■ Beaufort (Israel)
■ The Counterfeiters
(Austria)
■ Katyn (Polonia)
■ Mongol (Kazakhstán)
■ 12 (Rusia)
Mejor director
■ Julian Schnabel (La
escafandra y la mariposa)
■ Jason Reitman (La
joven vida de Juno)
■ Tony Gilroy (Michael
Daniel Day-Lewis, Johnny Depp, Tommy Lee Jones, Viggo Mortensen y George Clooney, los nominados al Oscar al mejor actor
Mejor guión adaptado
■ Christopher Hampton
(Expiación, deseo y pecado)
■ Sarah Polley (Lejos de
ella)
■ Ronald Harwood (La
escafandra y la mariposa)
■ Joel Coen y Ethan
Coen (Sin lugar para los
débiles)
■ Paul Thomas Anderson (Petróleo sangriento)
Mejor guión original
■ Diablo Cody (La joven
vida de Juno)
Clayton)
■ Brad Bird, Jan Pinkava y Jim Capobianco
(Ratatouille)
■ Tamara Jenkins (The
Savages)
Largometraje animado
■ Persépolis
■ Ratatouille
■ Los reyes de las olas
Mejor fotografía
■ El asesinato de Jesse
James por el cobarde Robert Ford
■ La escafandra y la mariposa
■ Sin lugar para los débiles
■ Petróleo sangriento
Más allá de la controversia principal (si finalmente se hará o no la ceremonia de entrega de premios), los
Oscar ya dejaron unos cuantos ganadores y perdedores.
En principio, la Academia de Hollywood bendijo a tres de los principales autores del cine norteamericano actual: los hermanos Joel y Ethan
Coen, que hasta ahora habían conseguido un Oscar por el guión de Fargo pero jamás habían sido nominados como realizadores, consiguieron
cuatro candidaturas personales por
Sin lugar para los débiles (película,
dirección, guión adaptado y edición),
mientras que Paul Thomas Anderson, sólo nominado por los guiones
de Magnolia y Boogie Nights: Juegos
de placer, ahora fue reconocido como
productor, director y guionista de Petróleo sangriento.
En cambio, fueron casi soslayados
por la Academia otros reconocidos directores, como Tim Burton (Sweeney
Todd sólo consiguió tres nominaciones), Ridley Scott (Gánster americano
obtuvo dos), Mike Nichols (Juego de poder debió conformarse con una) y Sean
Penn (Hacia rutas salvajes recibió dos).
Entre las compañías de Hollywood,
las grandes ganadoras fueron Miramax (21 nominaciones), Paramount
Vantage (19) y Warner (14). Además
de los logros de su división de arte,
el estudio Paramount se quedó con
otras tres candidaturas por Transformers, mientras que también estuvo
vinculada a la distribución de Sweeney Todd, Norbit y Cometas en el cielo
para sumar ocho.
En el terreno individual, hubo reconocimientos múltiples al músico Alan Menken (tres nominaciones
por sendas canciones de Encantada),
a la actriz Cate Blanchett por su papel protagónico en Elizabeth: la edad
de oro (ya había sido nominada hace
una década por la primera película
de la saga) y por su interpretación de
Bob Dylan en I’m Not There, y para el
talentoso fotógrafo inglés Roger Deakins, por sus trabajos en Sin lugar
para los débiles y El asesinato de Jesse
James por el cobarde Robert Ford.