L’OPINIÓ 4 L’HOSPITALET 18 DE NOVEMBRE DE 1996 EDITORIAL DERECHOS Y DEBERES Cada vez más, los ciudadanos son conscientes de sus derechos y deberes. Su derecho como usuarios, ‘clientes’ de una administración pública a la que demanda servicios, y su deber como beneficiario de estos mismos servicios, contribuir a sufragarlos siempre bajo el principio de la solidaridad que permite la distribución de recursos en función de las necesidades más urgentes. Esta es la filosofía que inspira las Ordenanzas Fiscales de L’Hospitalet para 1997. En el próximo ejercicio, los impuestos y tasas municipales congelarán la presión fiscal sobre la población, es decir, se mantendrá su incidencia en las economías familiares con un aumento moderado, que oscila entre el 0 y el 3,5 por ciento, que corresponde al Índice de Precios al Consumo (IPC) interanual –el registrado entre un año y el siguiente–. La reducción prevista en 1997 de los ingresos que llegan a las administraciones locales a través del Gobierno central y la mínima aportación de la Generalitat obligan a aplicar el IPC interanual para poder garantizar el nivel de servicios que se viene ofreciendo hasta ahora y que demanda la población. Este coste, sin embargo, no puede repercu- tir en todos por igual. Las familias numerosas con rentas bajas, los colectivos de jubilados y pensionistas y personas con poca capacidad económica podrán beneficiarse de ayudas que concede el Ayuntamiento para pagar el Impuesto de Bienes Inmuebles, el IBI, que grava las viviendas. Por lo que respecta a la actividad económica del municipio, las ordenanzas fiscales también son sensibles con aquellos establecimientos que vean interrumpida su actividad tanto por reparaciones o reformas en su interior como por obras en la vía pública que les afecten de forma directa durante un periodo superior a tres meses. En este caso se aplicará una reducción en el Impuestos de Actividades Económicas, el IAE, de hasta un 40 por ciento. Las necesidades de la ciudad no deben dejar de lado el espíritu solidario que siempre ha acompañado a L’Hospitalet y que permite que el esfuerzo de todos sirva, no sólo para garantizar la continuidad de los servicios comunes, mantener la ciudad y hacer que siga avanzando, sino también para contribuir a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos con menos recursos o que necesiten de alguna ayuda en un momento determinado. La contribución del conjunto de la ciudadanía hace posible, en este caso, que se beneficien de ventajas fiscales. Y ese también es un deber. BUSCANDO EL EQUILIBRIO Durante años, L’Hospitalet ha sido ejemplo de ciudad masificada, con una densidad de población desmasiado alta para su término municipal urbano. El pocos años, la ciudad registró un crecimiento desmesurado, sin orden ni concierto, que repercutió negativamente en el nivel de calidad de vida de sus habitantes. Sin embargo, en 1981 la realidad empezó a ser otra. De forma paulatina y natural, la densidad de población ha ido disminuyendo. El número de habitantes ha ido descendiendo poco a poco hasta que el último Padrón de habitantes empieza a dejar ver que se ralentiza la disminución de residentes y se tiende al equilibrio. Sin embargo, hay que actuar para que ese equilibrio se estabilice, es decir, que el número de bajas sea similar al de altas en el municipio y evitar que continúe el descenso de población. Para ello se ha puesto en marcha el Plan municipal de Vivienda que ha impulsado de nuevo la construcción de pisos de protección oficial en el municipio. Este plan permitirá que los ciudadanos que quieran formar un nuevo hogar no necesiten buscar fuera del municipio una vivienda en condiciones y a precio asequible para poder hacerlo. CIUTADANS L’HOSPITALET publica a cada número l’opinió d’alguns dels nostres conciutadans a l’entorn dels temes més diversos. Els entrevistats, als quals agraïm la seva col·laboració, són triats a l’atzar. Què en pensa, de la programació de TV? Ramón Ramírez Esther Aranda Rubén Sánchez Montse Sanz jubilat administrativa aturat mestressa de casa La veritat és que veig poc la televisió, perquè no trobo el que m’agrada. Busco programes d’entreteniment, però amb una mica de contingut, informatius i documentals. Les pel·lícules és el que menys veig. Crec que en general són dolentes. Massa violència al meu gust. Ara bé, amb sinceritat, opino que ja n’hi ha prou de canals. Ara com ara, crec que especialment se’ns està oferint massa futbol. Considero que estaria bé disposar d’una oferta temàtica com en d’altres països, amb programació especialitzada en esports, música, informatius... La competència entre els diferents canals, a més, porta a què hi hagi poques diferències entre la programació. A mi m’agrada la programació que la ‘tele’ ens dóna. El canal que més m’agrada és Antena 3 TV, encara que penso que és el que fa més anuncis. Jo intento seleccionar els programes que veig. No crec que la TV sigui una ‘caixa tonta’. M’agraden els esports i les pel·lícules, però haurien de ser més bones i no tan repetides. Opto preferentment per la televisió pública, més que per la privada, malgrat que reconec que no tinc massa temps per dedicar-li. Em sembla que les guerres d’audiència repercuteixen negativament en els telespectadors que acaben veient programes similars en tots els canals. No crec que necessitem més canals televisius. ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ Diari Informatiu de la Ciutat Edita: Ajuntament de L’Hospitalet c/ Barcelona, 2 Tel. 261 52 00 Fax 338 43 97 Direcció: Cristina Sánchez Redacció: Rosa Salguero, Pilar Gonzalo, Jordi Mèlich, Lluís Izquierdo i Enric Gil Disseny i maquetació: E. Ortiz Fotografia: Imacna S.C.P. Infografia: Grup Inèdit Disseny Disseny capçalera: Gabinet de Comunicació i Imatge Direcció departament publicitat: Marga Solé. Tel. 261 52 00 Imprimeix: C. G. Canigó S.L. Tiratge: 100.000 exemplars D.L. 36444-94