LA ÉPICA O EPOPEYA ÉPICA: Manifestación literaria de carácter narrativo que surge en las culturas antiguas vinculadas con la tradición oral. Cuentan con un lenguaje solemne y majestuoso las hazañas legendarias de héroes de orígenes míticos de un pueblo. Eran transmitidas de forma oral y acompañadas de música y no tenían un autor único ni un texto fijo. Tanto las grandes epopeyas de la india como los grandes poemas homéricos pertenecen a este género. La enorme influencia que ejerce la cultura griega en toda la civilización occidental hace que a partir de “La Ilíada” y “La Odisea”, la épica se transforme en un género literario con características bien definidas. Surge de esta forma el poema épico o epopeya. La epopeya está protagonizada por un héroe que habitualmente sigue un patrón argumental aun cuando cambien los personajes, el espacio y el tiempo. El viaje del héroe se desarrolla a través de cinco etapas y se conoce como viaje mítico. Las etapas de este viaje son las siguientes: 1. Alguien encomienda una misión al héroe o éste toma conciencia de un problema y decide solucionarlo. 2. El héroe abandona su hogar o el lugar donde recibió la misión o se interna en lo desconocido (el mar, el laberinto, el bosque, etc.), donde encuentra dificultades aparentemente insuperables. 3. En su batalla en contra de las dificultades, el héroe recibe ayuda, la cual proviene de un objeto mágico que le sirva para cumplir su misión o bien de un personaje que no necesariamente le sea familiar. 4. El héroe tiene éxito en su misión, encuentra lo que busca, mata al enemigo y/o regresa a su lugar de origen. 5. El héroe crece en madurez, nobleza o fortuna, y mejora el mundo que vive o el héroe sucumbe al orgullo, muere o mata a un ser querido y/o produce alguna otra desgracia. El mito del héroe se reduce siempre a este esquema El héroe abandona su choza o castillo; es atraído, llevado, o avanza voluntariamente hacia el umbral de la aventura. Allí encuentra la presencia de un espíritu que aguarda el paso. El héroe puede derrotar o conciliar esta fuerza y entrar al reino de la oscuridad (batalla con el hermano, batalla con el dragón, encantamiento, etc.), o puede ser muerto por el oponente y descender a la muerte (desmembramiento o cremación). Detrás del umbral, después, el héroe avanza a través de un mundo de fuerzas poco familiares y sin embargo extrañamente íntimas, que lo amenazan peligrosamente (pruebas) o le dan ayuda mágica (auxiliares mágicos). Cuando llega al cenit del viaje, pasa por una prueba suprema y recibe su recompensa. El triunfo puede ser representado como la unión del héroe con la diosa madre, el reconocimiento del padre creador, su propia divinización (apoteosis) o también, si las fuerzas le han permanecido hostiles, el robo del don que ha venido a ganar. El trabajo final es el regreso. Si las fuerzas le bendicen regresa como emisario; si no huye y es perseguido. El héroe retorna. El bien que trae restaura el mundo (elixir) Algunos aspectos importantes para comprender “La Odisea” Su título proviene del nombre del personaje principal, Odiseo o Ulises, quien terminada la Guerra de Troya, comienza su viaje de regreso a Itaca, su patria. La obra tiene 24 rapsodias o cantos, que narran las aventuras de Odiseo en el viaje de regreso a su casa, después de 20 años de ausencia. El argumento se divide en tres partes: 1. Búsqueda de Odiseo por parte de su hijo Telémaco. 2. Aventuras de Odiseo antes de regresar a su patria. 3. Castigo a los pretendientes de Penélope y anagnórisis (reconocimiento) de Odiseo por parte de sus criados y su familia. La obra tiene un lenguaje cargado de figuras literarias que embellecen el relato, entre las más usadas están: 1. Epítetos que contribuyen a destacar los rasgos característicos y esenciales de algo o alguien. Al mismo tiempo, permiten dar cuenta de la concepción de mundo presente y destacar cierto rasgo fundamental del héroe. Ejemplo: “El ingenioso Odisea” 2. Símiles que consisten en poner en relación, por medio de un nexo comparativo (como, así como, cual, etc.) dos términos o dos ideas por la semejanza o analogía que existe entre ellos. este recurso podemos apreciarlo, por ejemplo, cuando el poeta nos dice que: “Así resplandecía la belleza del héroe que era mucha y que Atenea aumento haciéndole aparecer más alto y atlético y que sus cabellos, cual hermosas flores de jacinto, cayesen ensortijados sobre sus hombros”. como se puede ver, al recurrir a esta figura el poeta nos acerca un poco más a su mundo y nos comunica mayor información de éste, al mismo tiempo que nos ayuda a enfatizar y comprender mejor el pasaje que nos está relatando. Por otra parte, al emplear un símil la narración se hace más creativa y figurativa y, por lo mismo, menos monótona. Por esta razón son frecuentes en las descripciones de la épica.