Propuestas de trabajo para docentes sobre El pianista sin rostro de Christian Grenier a cargo de la Prof. María Inés Indart Las novelas para las cuales fueron ideadas estas propuestas narran una misma historia, pero desde dos perspectivas diferentes: la de “ella” y la de “él”. Esta particularidad permite que el grupo de alumnos las aborde en forma simultánea: mientras un grupo (supongamos, las chicas) lee “El pianista sin rostro, el otro grupo (los varones) lee “La chica de 2º B”. Luego pueden intercambiarse los textos. Surgirán lecturas diferentes pero complementarias, enriquecedoras en todo aspecto. Esperamos que las disfruten tanto como nosotros. Puerto de Palos - Casa de ediciones. Av. Honorio Pueyrredón 571 (1405). Buenos Aires. Argentina. Tel./Fax (011) 4902-1093 Líneas rotativas. e-mail: info@puertodepalos.com Los caminos de Jeanne La protagonista de la novela, Jeanne, una joven parisina de quince años, está, como todo adolescente, “buscando su destino”. Por su inquieta cabecita rondan las preguntas típicas de su edad: ¿de dónde vengo?, ¿quién soy?, ¿qué quiero ser? Jeanne es valiente, obstinada y perseverante. Por lo tanto, su búsqueda culminará con algunas respuestas que darán un giro importante a su vida y permitirán a nuestros alumnos identificarse con un modelo positivo de adolescente, vivir una agradable experiencia de lectura y ampliar los horizontes de su competencia cultural. En este texto (se trata de una “novela de iniciación o aprendizaje”) la protagonista se inicia en el conocimiento del universo del arte musical, en la difícil experiencia del autoconocimiento y en el descubrimiento del amor. Al leerlo, nuestros alumnos pueden seguir a Jeanne en estos tres caminos y recorrer con ella aquel que más les interese. 1. El camino de la música Este es, en principio, el primer camino. Jeanne se inicia en él por una invitación casual a un concierto de piano y este acontecimiento cambia su vida para siempre. “Entendí que acababa de entreabrir la puerta de un club privado. Una casta. La música clásica no sólo tenía sus compositores y sus intérpretes, sino también sus finos iniciados. Me estaba aventurando en un mundo desconocido”. (pág. 20) Si indagamos en los conocimientos previos de nuestros alumnos acerca de la música, lo más probable es descubramos que son expertos en música popular y que puedan enunciar, con los ojos 2 cerrados, el “ranking” de los temas más escuchados en las radios de moda. Pero también es probable que desconozcan (al igual que Jeanne) a los grandes maestros de la música de todos los tiempos. Es posible que también manifiesten algunos conocimientos acerca de compositores o tendencias musicales, adquiridos en su medio familiar o en la clase de Música, pero que tengan el prejuicio de que la música clásica es “aburrida” o “para los grandes”. Para revertir este prejuicio o superar el desconocimiento de los chicos, he aquí algunas propuestas: Para alumnos curiosos. Actividades de investigación: • Asistir a un concierto y observar las características de la sala (escenario, platea, palcos), del programa (información sobre compositores, obras y ejecutantes), actitudes de los ejecutantes, actitudes del público, saberes de los melómanos, etc. • Si no es posible la experiencia del concierto, se puede sustituir por un programa radial o, si se dispone de una videocassetera, por la proyección un concierto grabado en video. • Realizar una encuesta familiar o callejera: preguntar a padres y abuelos, o peatones, por sus gustos musicales e indagar qué tanto saben de compositores como Mozart, Beethoven, Schubert, o cualquiera de los nombrados en la novela. • Realizar una encuesta escolar: música preferida vs. música detestada. • Realizar una encuesta en el curso. ¿Quiénes tocan algún instrumento? ¿Qué tipo de música hacen? ¿Hay alguna “banda” formada? ¿Alguien canta o forma parte de un coro? ¿Cómo se sienten cuando tocan o cantan? 3 La clase “especial” sobre Schubert. • Nuestra protagonista conoce a Daniel cuando éste da una clase especial para los chicos de su división. Podemos usar el mismo disparador e invitar a alguno de los chicos a hacerlo (como ejercicio de exposición oral con registro absolutamente formal) sobre la música que sea de su agrado. • También podemos proponerles a los alumnos escuchar la Wanderer Fantasie de Schubert y releer las sensaciones de Jeanne en el primer capítulo para ver si se asemejan a las nuestras. De la música tonal del siglo XVI a la música atonal del siglo XX. • Los alumnos pueden realizar un rastreo en el texto del “viaje musical” que realiza nuestra protagonista, según los autores y los estilos que va descubriendo. Luego de buscar la información necesaria, pueden elaborar un texto informativo-expositivo: una “historia de la música según Jeanne”. • Con la ayuda de algunos manuales o libros de textos de “Cultura musical”, se podrá ubicar en una línea de tiempo a los clásicos, los románticos, los post-románticos, los impresionistas hasta llegar a las tendencias predominantes en el siglo xx: el dodecafonismo, la música concreta, la música electrónica. Esta última información permitiría comprender mejor la música compuesta por Oscar Lefleix, el compositor fallecido y padre de Jeanne. • Sería muy interesante que los alumnos consiguieran música perteneciente a aquellos autores que ubicaron dentro de la línea de tiempo como pertenecientes al siglo xx, y que la pudieran traer a la clase para ser escuchada, de manera que tengan un panorama completo de este tipo de música. 4 Para alumnos discutidores Los niños “prodigio”. En el capítulo Un concierto de Paul Niemand, Daniel, celoso, le dice a Jeanne: “Ese tipo no es Mozart” refiriéndose al misterioso y joven ejecutante que ha cautivado a la joven. Allí se instala un eje posible para el debate: la problemática del “niño prodigio”. • Sugerimos algunas preguntas para generar el intercambio: • ¿Qué se considera un niño prodigio? • ¿Cuáles son las ventajas y las desventajas de tener un talento excepcional? • ¿La fama y el dinero compensan la soledad, las horas de dedi- cación y ensayo que exige una disciplina artística o un deporte competitivo? ¿Hay otras compensaciones? • ¿Es necesario que un chico deje de lado las actividades propias de su edad (deportes, fiestas, salidas con amigos) para dedicarse a las exigencias del mundo adulto (horarios, viajes, stress)? • ¿Es real esta división entre un mundo y el otro? ¿Hay cosas propias de adultos y de jóvenes? • ¿El talento genera invariablemente celos, envidia y soledad? • Pueden proponerles a los chicos un cine-debate acerca de esta problemática después de ver la película Amadeus basada la polémica relación entre Mozart y Salieri o el reciente film sobre la vida del precoz pianista David Helfgott: Claroscuro. • Otra sugerencia para el debate o la producción de textos argumentativos sería ver la película de Gérad Corbieau, El maestro de música, para que confronten sus opiniones acerca de la expresión de Daniel en el capítulo iv: “La música es como el deporte. Si quieres competir, tienes que entrenarte sin parar.” ¿La música es para competir o para disfrutar? Los protagonistas de este film son jóvenes excepcionalmente dotados para el canto y se encuentran 5 sometidos a las exigencias de su maestro y expuestos a una competencia feroz. Música culta y música popular. • Otro eje de discusión interesante para el debate podría darse entre la música popular “pasatista” o “de supermercado” que hace “famoso” al padre de Daniel Dhérault y la música “seria” o “de élite”, que hace del padre de Jeanne Lefleix un artista sólo reconocido como tal por minorías iniciadas en el mundo musical. Sugerimos algunas preguntas para generar la discusión: • ¿La música que le gusta a la mayoría de la gente es la mejor? • ¿La música apreciada por un grupo minoritario es siempre buena? • ¿La popularidad es un índice de qué? • ¿La música popular también es arte? • ¿Por qué la música culta no es popular? • La música actual, ¿es un arte o un entretenimiento? • ¿Cuáles son los criterios que permiten reconocer a un gran compositor? Para alumnos sensibles El novelista Grenier describe con especial vuelo lírico las sensaciones y emociones de Jeanne en sus experiencias musicales. Como por ejemplo, frente al impacto del primer concierto. “Era como una puerta que se abría. O como una ola que me transportaba. (…) Aquí la música vibraba, desnuda, plena, auténtica (…) Un cocktail mágico de temblores.” (pp. 14-15) O bien, en el concierto final: “…parecía una caricia, un viento tímido y ligero que penetraba hasta el alma.” (pág.125) • Siguiendo esta línea podemos proponer a nuestros alumnos que, mientras escuchan alguna clase de música que ellos elijan, des6 criban, en forma escrita, por medio de recursos expresivos (a la manera de Jeanne) sus imágenes internas. Podemos guiarlos con disparadores como: • ¿Qué color tienen los sonidos? ¿Qué sabor? ¿Qué perfume? • ¿Con qué sonidos de la naturaleza los puedo asociar? • Si cierro los ojos y me dejo invadir por la música, ¿qué imáge- nes vienen a mi mente? • Luego, con los textos resultantes, se puede elaborar una “Antología Textomusical o Musicotextual”. Con ayuda de los profesores de Tecnología pueden darle un diseño apropiado y atractivo. Si se cuenta con proyector de diapositivas, equipo de audio, videocassetera o un equipo de multimedia, se puede preparar una presentación audiovisual, una especie de videoclip acerca de esas sensaciones que experimentaron. Para alumnos tecnológicos Actividades de investigación. Ingeniería en sonido. • Investigar acerca de la profesión de Ingeniero de sonido: qué es, para qué sirve, si se estudia en nuestro país. Buscar cuáles son los ingenieros de sonido de los discos preferidos por los alumnos. Entrevistar a un ingeniero de sonido. De los discos de pasta al Cd. • Buscar información acerca de los modos de reproducción dis- cográfica y su evolución hasta la actualidad. Realizar una pequeña muestra de objetos relacionados con éstos modos de reproducción en la que los alumnos expongan objetos antiguos y modernos y expliquen las características distintivas de cada uno, en forma oral o escrita (como si se tratara de un museo). 7 De las cuerdas y los bronces al sintetizador. • Elaborar una historia ilustrada de la evolución de los instru- mentos musicales. • Visitar el Laboratorio de Música Electroacústica dependiente del Centro Cultural Recoleta de la Ciudad de Buenos Aires. • Visitar un estudio de grabación. Para alumnos lectores Si en el curso tenemos algunos chicos más maduros como lectores, podemos sugerirles que lean otros textos literarios relacionados con la música como los cuentos “El concierto” y “Sinfonía concluída”, de Augusto Monterroso, u otros que vinculan la música con la literatura, como la “Sinfonía en gris mayor”, de Rubén Darío, y que realicen trabajos comparativos. 2. El camino de la búsqueda de los orígenes El camino de la música lleva a Jeanne a iniciar un segundo viaje: el del autoconocimiento. Un recorrido que, gracias a la música y a Daniel, se le hace menos doloroso. La adolescencia pone a girar la rueda del ¿quién soy?, ¿cómo me ven los demás?, ¿cómo me gustaría ser? Pero, ¿a partir de dónde empezar a construir la identidad cuando se desconocen las raíces? Jeanne es huérfana. Jeanne, la detective. En general, nuestros alumnos tienen conocimientos previos sobre los códigos del género policial, aunque no lo hayan frecuentado, porque los adquieren por medio del cine y la televisión. Sería posible, entonces que, a partir de la investigación que realiza Jeanne sobre la trágica muerte de su padre y las “misteriosas” cintas magnetofónicas, nuestros alumnos elaboraran un relato policial. 8 • Sugerimos una producción narrativa creativa (cuento policial) con narrador en primera persona protagonista ( Jeanne, detective). La investigación acaso pueda conducir a develar alguna causa no accidental en la muerte del padre. Jeanne, la periodista. A partir de su iniciación en el mundo musical, Jeanne comienza a leer las revistas especializadas en las que se publican crónicas sobre los conciertos de la temporada. El género periodístico aparece en esta novela bajo la forma de la crónica de espectáculo en el capítulo titulado: Un concierto de Paul Niemand. • Para que los chicos ejerciten este tipo de discurso, podemos proponerles esta situación hipotética: el profesor de música del colegio le pide a Jeanne que redacte, para el periódico escolar, una crónica del concierto en el que se reveló que el joven y talentoso “pianista sin rostro” es el alumno de tercer año Daniel Dhérault. También es posible trabajar otra variedad del texto periodístico: el reportaje. • Puede proponerse la siguiente situación: en su deseo de obtener mayor información acerca de Paul Niemand, Jeanne, haciéndose pasar por una periodista, consigue entrevistar a Amado Riccorini. Un grupo de chicos puede imaginar las preguntas y otro, las respuestas. • Propongamos que redacten una crónica del último concierto o recital que hayan presenciado o que entrevisten a algún artista. Jeanne, la rebelde Como todos sabemos, criticar y cuestionar a los padres es una necesidad básica de los adolescencia: es necesario atravesar esta 9 etapa para fortalecer el “yo”. En la orfandad de Jeanne, es Mutti su madre adoptiva la que debe poner los límites a la joven que, como resulta obvio, se siente controlada e incomprendida. Esta temática se presta particularmente para la reflexión y el debate, ya que la familia y la relación con los padres entra en crisis en esta etapa de la primera adolescencia. Como disparadores del debate sugerimos: • A partir de la relectura del capítulo: La locura de Toulouse. • Jeanne ¿debió seguir los impulsos de su corazón y fugarse a Toulouse sola? • Daniel, ¿hizo bien en negarse a acompañar a Jeanne en su fuga? • ¿Es correcto que Jeanne deba gastar todos sus ahorros para solventar el viaje? • ¿Por qué se le impuso la compañía de su abuela si Jeanne se hacía cargo de los gastos del viaje? • El permiso de Mutti: ¿es un ejemplo de autoridad responsable o de abuso de autoritarismo? • A partir de la lectura del prólogo del texto Etica para Amador, de Fernando Savater, se puede plantear el debate acerca del rol de los padres o de las personas mayores en general: ¿“padres amigos” o “padres padres”? “…siempre me han parecido fastidiosos esos padres empeñados en ser “el mejor amigo de sus hijos”. Los chicos debéis tener amigos de vuestra edad: amigas y amigos,claro. Con padres, profesores y demás adultos es posible en el mejor de los casos llevarse razonablemente bien, lo cual ya es bastante(…) Si yo tuviera quince años, lo que ya no es posible que vuelva a pasarme, desconfiaría de todos los mayores demasiado “simpáticos”, de todos los que parece como si quisieran ser más jóvenes que yo y de todos los que me diesen por sistema la razón(…) Un padre o un profesor como es debido tienen que ser algo cargantes o no sirven para nada. Para joven ya estás tú.” 10 • A partir del análisis de dos modelos de familia propuestos por la TV (pueden tomarse otros): “La familia Ingalls” y “Los Simpsons”, por ejemplo: • ¿Son modelos de familia verosímiles? ¿Se parecen a las nues- tras? • ¿Son creíbles sus conflictos? ¿Tienen alguna semejanza con los nuestros? • ¿Qué los une y qué los separa? • ¿Cuál es lugar de los niños en esas familias? ¿Y el de los padres? Para dramatizar Otra estrategia que, además de ser divertida, resulta ser apropiada para motivar a los chicos a la reflexión y el debate sobre normas y valores es la dramatización. Algunas propuestas: -La madre de Daniel invita a Mutti a tomar el té para hablar sobre sus hijos. Sus posturas acreca de lo que debe permitirse a los jóvenes son muy distintas. -Un grupo de compañeras ven a Jeanne en la plaza, con Daniel. Al día siguiente, en la clase, se burlan de ella. Jeanne se defiende. -A partir de ser hija de un compositor famoso y tener un novio talentoso, Jeanne se “agranda” y sus compañeros oscilan entre la fascinación y el rechazo. Para producir. Los adolescentes, en el desarrollo de su vida afectiva, suelen oscilar entre la baja autoestima o la desvalorización y la exaltación de su ego o el narcisismo descontrolado. Como se sienten “el ombligo del mundo”, les cuesta mucho ponerse en el lugar del otro. Para favorecer una actitud de apertura y comprensión, podemos proponerles que, en forma individual, narren “viendo la historia con los ojos de otros personajes”. 11 -El viaje a Tolouse y el intento fallido de entregar las partituras al “pianista sin rostro” contado en primera persona por la abuela Oma. -El descubrimiento de los discos, las cintas y las partituras del padre contadas desde la perspectiva del pequeño hermano de Jeanne, Florent. -El conflicto emocional de la madre de Jeanne antes de revelarle a Jeanne la existencia de las cintas y las partituras de su padre. Jeanne, la marginada En el primer capítulo, podemos leer estas reflexiones de Jeanne: “No sé si mis compañeros de clase se dejan acompañar así por su madre cuando les toca salir de noche. No lo sé, tanto menos cuanto que en verdad no tengo amigas. Supongo que es el premio de los hijos de los docentes.” “Se desconfía de ellos. O entonces uno se hace muy amigo de ellos el día antes de una prueba y al final del bimestre, justo antes de la entrega del boletín. ¡Ah, si pudiera vender información, creo que haría fortunas!” (pág. 12) La relación con los pares es otro punto clave en la vida de un adolescente. Una adolescente como Jeanne, que no sale de noche y no tiene amigas, seguramente sufre una soledad difícil de sobrellevar. Jeanne atribuye esta marginación al hecho de que es vista sólo como “la hija de la Profe de Alemán”. Sin embargo, como docentes, sabemos que existen muchas otras causas que dificultan la integración de nuestros alumnos y los convierten en “marginados”, tales como la forma de vestirse, la forma de hablar, el peso, el color de la piel, la marca de las zapatillas, la marca de auto del papá, etc… Podemos tomar este eje de reflexión para vincularlo con los Contenidos Transversales, en especial, con la Educación para la No-Discriminación. 12 • Propongamos hacer campañas de propaganda acerca de la discriminación, mesas redondas, periódicos murales, jornadas de reflexión, concursos literarios sobre ésta temática. Serían formas de motivar a chicos y grandes a tomar conciencia de los prejuicios con los que convivimos dentro y fuera del colegio. 3. El camino del amor Como ya afirmamos al comienzo, la protagonista de esta novela al mismo tiempo que se inicia en el conocimiento de la música y de su historia familiar y personal, también comienza a recorrer el camino del amor. Un camino que, por supuesto, está lleno de idas y venidas, de dudas y certezas, de encuentros y desencuentros. En el marco de los productos audiovisuales que consumen nuestros alumnos, tanto Jeanne como Daniel son atípicos: son tímidos, no se destacan por su aspecto físico, son buenos alumnos, no son transgresores, no acatan los mandatos de la moda ni van a discotecas. ¿Podrán nuestros alumnos identificarse entonces con este amor entre dos chicos tímidos y “fuera de moda”? Creemos que sí, porque el novelista Chistian Grenier ha utilizado hábilmente los códigos de un género muy antiguo y siempre vigente: el del melodrama. Jeanne y la cenicienta Lo cierto es que desde La Cenicienta hasta Titanic, pasando por las telenovelas o las comedias, la fórmula del melodrama sigue emocionando y atrapando a chicos y grandes (aunque algunos jamás vayan a confesarlo). Si toda narración es una serie de transformaciones narrativas entre una situación inicial y una situación final, pensemos en la pobre Cenicienta y en nuestra Jeanne. 13 • Para analizar la estructura de la novela, podemos proponer un cuadro comparativo entre ambas. ¿Por qué no? Para empezar ambas son huérfanas y viven con sus madrastras. Cenicienta Jeanne Situación inicial Objeto deseado Enigma Ayudantes Oponentes Situación final Una vez que hayamos efectuado esta comparación, propongamos extenderla a filmes, telenovelas o series de tevé. Tres conciertos y un desconcierto La etimología griega del término melodrama (“melos + drama”) liga para siempre el misterio de las pasiones humanas a la expresión musical de las mismas. Y allí están para probarlo centenares de óperas, infinidades de películas, comedias musicales y telenovelas. En este texto todos los sucesos que hacen avanzar la acción y el amor están ligados a la música. “Creo que ese pianista te ha embrujado” le dirá Mutti a Jeanne después del primer concierto. • Propongamos efectuar una relectura de los capítulos de la novela en los que Jeanne asiste a un concierto y del capítulo final para constatar las revelaciones musicales y emocionales que en cada uno de ellos se producen. El chico de la plaza vs. el pianista sin rostro Otro elemento interesante con el que el autor trabaja, es el tema del doble (Daniel/Paul). Tomándolo como punto de partida, 14 podemos sugerir a los alumnos varias actividades de producción individual o grupal. Para los amantes del comic El tema del doble, que remite a Clark Kent/Superman, Bruno Díaz/Batman y muchos otros héroes de doble identidad, puede servir de inspiración para la elaboración de una historieta sobre el último capítulo de la novela, en el que se revela la verdadera identidad del “pianista sin rostro”. Para desdoblarnos La consigna es preguntarse quién o qué nos gustaría ser (si acaso pudiéramos elegir) y qué nos gustaría poder hacer. Los varones son todos iguales En toda relación amorosa que se precie se producen encuentros y desencuentros, muchos de los cuales tienen que ver con que las mujeres necesitan explicitar lo que sienten mucho más que los hombres. Esta necesidad genera muchos malentendidos. Jeanne se queja: “No sé muy bien qué esperaba en ese momento. Que Daniel tomara mi mano, como la semana pasada. Que me dijera algo lindo.” “ Y bueno, no. No hizo nada de eso. Los chicos, creo, poseen el arte de emprender las cosas más idiotas y más inesperadas cuando no corresponde y de no intentar nada cuando la situación es propicia. Daniel, para mi gran decepción, no escapaba a la regla.” (pág. 69) Para debatir ¿Quién debe “ponerle palabras al amor? En la época de los abuelos, los hombres “se declaraban” y las mujeres debían esperar pacientemente ese momento. Ahora, las chicas toman la iniciativa. ¿Jeanne también lo hace? ¿Qué es mejor? 15 Para la producción escrita ¿Cómo hubiera sido este encuentro si Daniel hubiera hecho todo lo que Jeanne esperaba? ¿Cómo habrá imaginado Daniel este encuentro? Un triángulo que no es tal Todo melodrama que se precie, crea un triángulo que hace sufrir a más no poder a los protagonistas y mantiene en vilo al espectador. Jeanne y Daniel no son una excepción. “–En realidad, estás enamorada de ese pianista. –¡Lo odio! –Es lo mismo. O bien amas a tu padre a través de él. Porque los dos te parecen igualmente gloriosos o inaccesibles. Es tanto más fácil amar un recuerdo, una imagen. ¡Es tanto más lindo que la realidad!” (pág. 118) • Para los amantes del cine y simpatizantes del melodrama, o para los que quieran divertirse parodiando el género y cuenten con una cámara de video, mucha creatividad y mucha paciencia, el gran desafío será filmar algunas secuencias de esta historia. Las condiciones serán la previa escritura de un guión y no olvidar que la banda de sonido es la pieza clave del éxito de toda buena historia de amor. • Para los aficionados a la fotografia, Jeanne y Daniel, sus citas en el banco de la plaza y el café, pueden ser el punto de partida de una fotonovela que tenga en cuenta los indicios espaciales y temporales y los encuentros y desencuentros de la relación. 16