ESTRELLA RIVERA, subdirectora de Investigación y Formación Vial de la DGT “Es conveniente que los anuncios muestren los accidentes” esde su responsabilidad en la Dirección General de Tráfico, Estrella Rivera, subdirectora de Investigación y Formación Vial, ha contribuido a la difusión de campañas de seguridad vial simbólicas, informativas, emotivas, dramáticas... En su opinión, es muy conveniente que las campañas muestren los accidente, “porque es lo que llama la atención del espectador, es el enlace con la realidad que le hace pararse a pensar”, aunque reconoce que quienes han sufrido la experiencia de un accidente pueden rechazar ‘revivirlo’ con estos anuncios. “Sin embargo –añade–, en general, siempre hemos tenido apoyo de los colectivos de discapacitados y sus familias. Algunas campañas, incluso, se han basado en sus propios testimonios”. En los anuncios se apela a la responsabilidad del ‘factor humano’, causante de nueve de cada diez accidentes de circulación. Los actuales, que continúan la línea dramática de otros anteriores y cuyo argumento es similar a los del año pasado, inciden en la idea de que las víctimas del tráfico pueden evitarse. El mensaje se apoya en las impactantes imágenes de accidentes ‘reales’ sufridos por distintos tipos de usuarios –peatones, ciclistas, motoristas y conductores de turismos– cuyo dramatismo y sensación de veracidad ha desatado, como en ocasiones anteriores, las críticas de algunos sectores, que sostienen que estos anuncios sólo sirven para asustar al conductor. Para Estrella Rivera, sin embargo, “no es malo” que las campañas produzcan un cierto grado de temor, porque eso incrementa la precaución al volante: “El miedo es una estrategia defensiva de compensación de riesgo, que se enseña a los niños desde sus primeros años. Otra cosa es que se convierta en pánico, algo que creo muy poco probable por una campaña publicitaria”. Por otra parte, la línea dramática es, en su opinión, “la más eficaz” en el intento de rebajar los accidentes. De hecho, estudios realizados demuestran que es muy recordada y las personas preguntadas confiesan que obligan a reflexionar y aumentar la prudencia. D 20 ¿POR QUÉ NOS HA DEJADO? Una familia, sumida en la tristeza, despide en el cementerio a una de las mujeres que la integraban. La razón del fallecimiento podría haber sido una enfermedad degenerativa, pero la causa es bien distinta: un conductor, que circulaba bajo los efectos del alcohol, la atropelló en un paso de peatones a escasos metros de su casa. Un trágico final que siempre se podría haber evitado. ¿POR QUÉ NO TIENE CONTACTO CON LA REALIDAD? Con toda la vida por delante, la mirada de una adolescente permanece perdida en un profundo vacío. Su terrible aislamiento podría deberse a un autismo de nacimiento. Pero la razón es que sufrió un accidente de moto en el que su cabeza, sin la protección del casco, golpeó violentamente contra el asfalto. Una desgraciada situación que siempre se podría haber evitado. EN LOS ‘SPOTS’ DE LA DGT PARTICIPAN ACTORES, ESPECIALISTAS Y MANIQUÍES accidentes JUANA SÁNCHEZ. FOTOS: P.A. PUTNAM / M. GONZÁLEZ l espectador no puede evitar dar un respingo en su silla cuando contempla el cuerpo de una persona que salta por los aires, como si se tratara de un títere, tras haber sufrido el impacto del vehículo que le atropella mien- E TRÁFICO. Mayo-junio 2001 a “re les” tras cruza correctamente por un paso de peatones. Su primera sensación es la de haber sido testigo directo del accidente, aunque la escena se le haya colado a través de la pantalla de su televisor. Las imágenes parecen totalmente reales, sacadas de un programa informativo, y no parece que FERNANDO OCAÑA, ¿POR QUÉ NO PUEDE CAMINAR? Un hombre joven ve ahora la vida desde una silla de ruedas, por lo que su capacidad de movimiento se ha visto gravemente reducida. Podría tratarse de una lesión medular congénita, pero lo que le hace verse así es un vehículo, que circulaba a una velocidad excesiva y le arrolló cuando montaba en bicicleta. Un dramático suceso que siempre se podría haber evitado. ¿POR QUÉ NO PUEDE VER? Necesita de un perro lazarillo que sustituya los ojos que ha perdido. Verle con él sentado en el banco de un parque haría pensar en una degeneración ocular, pero la causa es el brutal golpe que sufrió su cara cuando su automóvil colisionó contra otro y él no llevaba abrochado el cinturón de seguridad. Su terrible ceguera siempre se podría haber evitado. formen parte de una campaña divulgativa. Esa sensación de realidad que aportan las secuencias cumple con el objetivo de impactar al espectador y hacerle reflexionar sobre la realidad de los accidentes de tráfico, más cercanos y dramáticos de lo que muchos piensan o quisieran. Una sensación ‘real’ que se repite en la visión de la fuerte colisión que sufre un motorista contra el asfalto, el brutal golpe de la cara de un conductor contra el salpicadero de su coche o la terrible voltereta de un ciclista tras el impacto de un automóvil, protagonistas de los otros tres anuncios que conforman la campaña. Pero casi todo es pura técnica: primero, un actor, luego un especialista –imprescindible en las películas de aventuras– y, por último, un maniquí –conocido entre los técnicos como “dummy”– repiten por separado los mismos movimientos, que luego se acoplarán, unos junto a otros, en una operación de montaje cinematográfico, aunque el maniquí y el especialista se golpean realmente contra los objetos. Con todas las piezas, el retoque con tecnología 3D –tres dimensiones– acaba de darle la sensación de auténtica realidad con que llega al espectador, como si de un reportaje periodístico se tratara. Como afirma Fernando Ocaña, presidente de FCBTapsa, la agencia responsable de la campaña, “las imágenes dramáticas ‘reales’ dan la vuelta al mundo”. ◆ TRÁFICO. Mayo-junio 2001 presidente de FCB-Tapsa “La campaña quiere ser una ‘bofetada’ antes del viaje” l frente de una de las agencias de publicidad más importantes del país –responsable de la actual campaña de seguridad vial de la DGT–, Fernando Ocaña, presidente de FCB-Tapsa, también está convencido de que la línea dramática es la mas adecuada para ‘vender’ seguridad vial. En su opinión, “es positivo que los anuncios muestren accidentes de tráfico, porque son la contrapartida de la seguridad vial, y ningún producto se vende sin enseñarlo. La publicidad siempre busca situaciones cotidianas, con las que se identifique el espectador, que sirvan de escenario a su mensaje”. Un mensaje que debe ser “directo, claro y sencillo”, porque quien lo ve no suele pararse a ‘traducir’ los simbolismos. Los anuncios simbólicos, según Ocaña, son muy vistosos desde el punto de vista estético, pero menos creíbles: “Son pura publicidad”. De la campaña de este año, considera que las imágenes impactan en su dureza, precisamente, por la sensación de realidad que aportan, incidiendo en el lado emocional. En su opinión, el espectador ve los anuncios como si fuera testigo de los accidentes. “Por eso, los ‘spots’ se pasan sobre todo antes de las salidas masivas de Semana Santa, verano, puentes... Quieren ser una ‘bofetada’ antes del viaje”. Por otra parte, este profesional de la publicidad asegura que el dramatismo que se ha utilizado los últimos años es “adecuado e inagotable”, porque son muchos los aspectos que se pueden tratar, sin desconectar de los sentimientos del espectador. En cuanto al supuesto miedo que producen los anuncios en los conductores, Ocaña considera que “nadie conduce asustado por una campaña publicitaria, por dura que ésta sea. Al final, o se declina en positivo y te hace reflexionar o, directamente, la ignoras, pensando que eso no va contigo”. En todo caso, su opinión se ve apoyada porque son anuncios muy recordados por el público y se acompañan de otros mensajes puramente informativos, como los que se emiten en radio o comparten espacio en los medios de comunicación escritos. A 21