PARAGUAY Declaración de repudio contra la condena a los campesinos y campesinas de Curuguaty El juicio al que fueron sometidos campesinos y campesinas juzgados por los hechos de la “Masacre de Curuguaty”, del 15 de junio de 2012, tuvo un desenlace injusto y vergonzoso: los once acusados fueron condenados, en un proceso colmado de irregularidades, a duras penas privativas de libertad sin haberse arrimado una sola prueba que amerite tan siquiera la imputación penal de dichas personas. De los procesados, cuatro de ellos recibieron condenas de entre 18 y 35 años de cárcel mientras que los demás recibieron penas de entre 4 y 6 años. El proceso judicial en cuestión presentó faltas aberrantes e inaceptables, que ameritaron desde un inicio la desestimación de la causa de haberse contado con un tribunal ecuánime e imparcial. La acusación de la fiscalía, carente de elementos probatorios para sustentar las acusaciones, la negligencia en la protección del lugar de los hechos y de las personas concernidas, así como las groseras actuaciones en el proceso de investigación tales como la omisión de autopsias o la pérdida de evidencias claves, desnudaron el uso arbitrario y discrecional de los aparatos del Estado para socavar derechos. Además de toda la irregularidad en torno a este proceso, un hecho inusitado y grave lo constituyó desde un inicio la omisión de la investigación sobre la muerte de los campesinos durante el desarrollo de los hechos, de los cuales se presume cinco fueron ejecutados extrajudicialmente posteriormente a los tiroteos. El juicio trató solamente la muerte de los seis policías, lo que pone de manifiesto su propósito de desatar una persecución política. En efecto, los hechos de la “Masacre de Curuguaty” sirvieron como excusa espuria para la destitución ilegal e ilegítima, el 22 de junio del 2012, de un gobierno democráticamente electo. Con este veredicto el poder judicial paraguayo demuestra de forma contundente su complicidad con los poderes fácticos de este país y su connivencia con un sistema corrupto que promueve la desigualdad, la exclusión y la pobreza, en detrimento de la vigencia de los Derechos Humanos y de la existencia de un Estado social de Derecho. La vigilia de la ciudadanía democrática paraguaya continuará frente a la sede del Poder Judicial en apoyo a los familiares de los campesinos y campesinas así como a los abogados de la causa. Éstos últimos comunicaron que apelarán el veredicto y se sostendrá la lucha legal así como las movilizaciones ciudadanas hasta lograr el esclarecimiento de los hechos y la libertad de los condenados. Los centros de investigación abajo firmantes declaran su repudio a la condena de la que fueron víctimas injustamente los acusados en esta causa y exhortan a anular el veredicto a las autoridades competentes. Asimismo, nos solidarizamos con las campesinas y campesinos de Curuguaty y con toda la ciudadanía paraguaya que apuesta por una sociedad más justa y democrática. Base Investigaciones Sociales (Base IS) Instituto de Ciencias Sociales (ICSO) Centro de Estudios y Educación Popular Germinal (CEEPG) Centro de Estudios Rurales Interdisciplinarios (CERI) Centro de Documentación y Estudios (CDE) Centro de Análisis y Difusión de la Economía Paraguaya (CADEP) Investigación para el Desarrollo (ID) Instituto de Trabajo Social-Universidad Nacional de Asunción (ITS-UNA) Departamento de Ciencias Sociales-Universidad Católica (DCS-UC)