Entretenimiento para el hogar 101: Cómo elegir el televisor y el control remoto más convenientes Lo más difícil de evaluar al comprar un televisor es la buena calidad de la imagen. ―Bueno‖ es un término subjetivo, por lo que confiar en la opinión de los críticos no necesariamente le garantiza que obtendrá exactamente lo que desea. La mayoría de las tiendas de artículos electrónicos exhiben sus televisores en una gran pared, alimentados por la misma señal de video dividida cientos de veces. Si bien las luces brillantes, los vendedores sospechosos y la ausencia de controles remotos probablemente nos impidan evaluar correctamente la calidad de la imagen, a continuación incluimos una serie de detalles a tener en cuenta: No se deje engañar por la luminosidad. En prácticamente todos los televisores de los salones de venta la luminosidad está configurada al máximo. Por eso, pídale al vendedor que reduzca el nivel de luminosidad de los televisores entre los que tiene pensado elegir. Trate de lograr que las imágenes —no necesariamente la configuración— se vean más o menos similares en términos de luminosidad, contraste y color. Aléjese de la luz. Pocas salas de estar tienen tanta iluminación como los salones de ventas; por lo tanto, pídale al vendedor que reduzca la cantidad de luz que alumbra la pantalla. O bien, al menos intente cubrir la pantalla para evitar que le llegue luz directa. Lleve su propio DVD o Blu-ray. Si tiene algún disco que esté acostumbrado a ver, fíjese si puede usarlo en lugar de la señal de televisión que se utiliza normalmente. El Blu-ray ofrece la mejor imagen que un televisor puede mostrar, por lo que es un excelente punto de referencia para evaluar la calidad de la imagen. Y, si está acostumbrado a la imagen de algún DVD en particular, también puede usarlo. Pruebe todos los modos de imagen. Muchos televisores vienen con varios modos de imagen predeterminados, como Películas y Deportes, que afectan radicalmente la visualización de la imagen. Después de examinar la configuración manual de las imágenes, pruebe los diferentes modos y configuraciones predeterminadas para ver con cuáles se ve mejor. Televisores: tamaño versus distancia a la pantalla Después de definir su presupuesto, tiene que decidir qué tamaño de pantalla desea. Por lo general, los televisores con pantallas más grandes cuestan más; sin embargo, el tamaño de la imagen del televisor debe ser acorde a la distancia a la que usted se encuentra de la pantalla. Si se sienta más cerca de un televisor más pequeño, no tendrá que gastar tanto dinero en una gran pantalla. Pero si se sienta demasiado cerca, la calidad de la imagen se verá afectada. La tabla a continuación se aplica únicamente a los televisores de pantalla ancha de alta definición (HDTV), ya que prácticamente todos los televisores que se venden actualmente son de este tipo. Si tiene un televisor normal que no sea de pantalla ancha, la regla general es que no debe sentarse a una distancia menor a dos veces su medida diagonal en pulgadas. En los televisores de pantalla ancha, los DVD y la televisión de alta definición se ven mejor que en los televisores normales, lo que le permite sentarse más cerca y disfrutar de una imagen más envolvente, similar a la del cine. Al ver un DVD o televisión de alta definición en un televisor de pantalla ancha, puede sentarse a una distancia de tan sólo 1.5 veces la medida diagonal de la pantalla sin percibir una pérdida de calidad importante, mientras que si se sienta a una distancia de más de tres veces el tamaño de la pantalla es posible que no pueda disfrutar de la sensación de sumergirse en la pantalla. A continuación incluimos las distancias mínimas y máximas a la pantalla recomendadas para televisores de pantalla ancha: Tamaño diagonal de la pantalla del televisor 16:9 26 30 34 42 47 50 55 60 65 Distancia mínima a la pantalla 3.3 pies (1 m) 3.8 pies (1.15 m) 4.3 pies (1.30 m) 5.3 pies (1.60 m) 5.9 pies (1.80 m) 6.3 pies (1.90 m) 6.9 pies (2.10 m) 7.5 pies (2.30 m) 8.1 pies (2.50 m) Distancia máxima a la pantalla 6.5 pies (2 m) 7.6 pies (2.30 m) 8.5 pies (2.60 m) 10.5 pies (3.20 m) 11.8 pies (3.60 m) 12.5 pies (3.80 m) 12.8 pies (3.90 m) 15 pies (4.60 m) 16.2 pies (4.90 m) En general, los televisores de 30 pulgadas o menos son ideales para dormitorios o habitaciones de huéspedes pero son demasiado pequeños para una sala de estar principal. Los televisores con pantallas más grandes tienen un tamaño que permite que toda la familia disfrute pero probablemente sean demasiado grandes para la mayoría de los dormitorios pequeños. Si tiene pensado colocar el televisor en un mueble para centro de entretenimiento, asegúrese de que las dimensiones coincidan; además, deje un par de pulgadas en cada uno de los costados para permitir la correcta ventilación del televisor. Si está por comprar un televisor más grande, posiblemente le convenga colocarlo en un mueble dedicado a dicho televisor. Muchos de estos muebles tienen un espacio para colocar los componentes relacionados con el televisor, como cajas decodificadoras de cable y reproductores de DVD. Fuente: CNET.com Controles remotos universales: Cómo usar un único control remoto para manejar el sistema de audio/video de su hogar ¿Los cinco o seis controles remotos que ocupan su mesa ratona no le dejan lugar para su taza de café? Aunque no exaspere con el desorden, tal vez la logística podría llegar a exasperarlo. Algo tan simple como bajar o subir el volumen puede implicar que usted recuerde si el sonido proviene del televisor o del receptor del equipo de entretenimiento para el hogar y, una vez que haya logrado determinarlo, tendrá que encontrar y usar el control remoto correcto. O tal vez usted no tenga inconvenientes, pero ¿qué hay del resto de la familia o de los invitados? La solución podría ser un control remoto universal. Con un control remoto universal, usted puede controlar fácilmente todos sus componentes con un solo dispositivo. Y, además de estar diseñados para reemplazar a los diferentes controladores, los controles remotos universales ofrecen diversas características para satisfacer sus diferentes necesidades. Analice todas las opciones antes de comprar un control remoto universal y así se asegurará de elegir el más adecuado para su sistema. Controles remotos para marcas múltiples: tome el control de su sistema. Los controles remotos para marcas múltiples, que son un tipo de control remoto universal, muchas veces se incluyen sin cargo con ciertos equipos, como televisores, receptores y reproductores de discos. Generalmente vienen preprogramados con códigos infrarrojos para las marcas de equipos más populares, para que pueda controlar más que un solo componente de su sistema. Normalmente, estos controles remotos le permiten controlar las funciones básicas de una variedad de componentes estándar de audio/video, como receptores, reproductores de Blu-ray, televisores de alta definición (HDTV) y cajas decodificadoras de cable. Si bien los controles remotos para marcas múltiples por lo general controlan las funciones básicas de la mayoría de los componentes, es posible que no puedan controlar absolutamente todas las funciones de cada uno de sus equipos. Por ejemplo, con un control remoto preprogramado con el código operativo para su reproductor de Blu-ray, normalmente podrá encender el reproductor, ajustar el volumen, seleccionar una opción del menú y reproducir su disco. Sin embargo, es posible que no pueda controlar las funciones más específicas, como habilitar o deshabilitar los comentarios del director o acceder a las tomas entre bambalinas. Controles remotos inteligentes: más allá de las funciones básicas. Los controles remotos inteligentes o ―programables" (learning remotes) pueden configurarse para controlar prácticamente cualquier marca de equipo y para admitir prácticamente cualquier función que usted desee clonar. Los controles remotos universales inteligentes pueden usarse para simplificar la ejecución de diferentes funciones. A continuación se incluyen tan sólo algunas de ellas: Pilas recargables para un funcionamiento ininterrumpido. Algunos controles remotos inteligentes le permiten prescindir del cambio de las pilas, ya que se pueden recargar enchufándolos a su tomacorriente de CA con el cable que viene incluido. Algunos controles remotos le ofrecen la ventaja extra de una base de recarga. Además de garantizar que las pilas del control remoto estén siempre cargadas, la base tiene un espacio especialmente diseñado para colocar el control remoto cuando no está en uso. Si alguna vez removió cielo y tierra buscando su control remoto, sabrá apreciar lo útil que puede resultar una base donde colocarlo. Programación mediante una computadora personal para una configuración más fácil. Algunos controles remotos inteligentes pueden programarse por computadora. Para ciertos modelos, basta con visitar el sitio Web del fabricante e ingresar cierta información básica sobre sus componentes de audio/video y cómo están conectados. Luego se descarga toda la programación necesaria directamente de la computadora al control remoto a través de un cable de USB. Es mucho más fácil que ingresar manualmente los códigos en el control remoto o que colocar el nuevo control remoto a la par del viejo y ―memorizar‖ sus funciones. Macros: asigne diferentes comandos a un solo botón. Muchos controles remotos inteligentes vienen con ―macros‖, una serie de comandos que usted puede programar en una única actividad. Por ejemplo, si para ver una película tiene que encender el televisor, el reproductor de DVD y el receptor, puede combinar todos esos diferentes pasos en una única actividad o macro. Esto le permite encender los tres componentes con sólo apretar un botón. Memoria flash: programe su control remoto una sola vez. Con los controles remotos simples y de bajo precio, quedarse sin pilas puede ser un verdadero dolor de cabeza. Después de cambiar la pila, por lo general debe volver a programar el control remoto, una y otra vez. Muchos controles remotos universales le evitan este problema mediante el uso de una memoria flash que almacena los comandos programados. Al igual que las populares unidades de memoria portátiles USB, esta memoria electrónica no necesita energía para guardar datos. Incluso si se agotan las pilas, todos los comandos almacenados en la memoria flash del control remoto se mantienen sin cambios. Tan sólo cambie o recargue las pilas y el control remoto volverá a funcionar, sin necesidad de reprogramarlo. Pantallas LCD que muestran más opciones. Muchos controles remotos universales de avanzada vienen con pantallas LCD (de cristal líquido) –además de los botones tradicionales– que muestran información del sistema y le brindan un control aún mayor. Generalmente, le permiten acceder a los controles más especializados de sus componentes, como habilitar o deshabilitar los comentarios del director mientras mira una película en Blu-ray. La mayoría de estas pantallas LCD también tienen una retroiluminación que le permite manejarlo fácilmente cuando hay poca luz. Pantallas táctiles para una mayor flexibilidad. Algunos de los controles remotos más sofisticados incluyen una pantalla LCD táctil para ofrecerle máxima flexibilidad en el control de su sistema desde la comodidad de su sofá. La pantalla táctil generalmente es amplia, lo que le permite mostrar una serie de ―botones‖ de control específicos para cualquier componente que desee operar. Algunos controles remotos con pantalla táctil incluso ofrecen diferentes opciones de distribución de botones totalmente personalizables: deshágase de esos botones que nunca se usan y agrupe los que más necesita en el orden que desee. Sin embargo, más allá del alto nivel de control personalizable que ofrecen, no a todo el mundo le convence la sensación de los ―botones virtuales‖ de una pantalla táctil. Si está buscando un control remoto ultrasofisticado pero prefiere la sensación de los botones tradicionales, su opción ideal es un control remoto con pantalla LCD. Función de radiofrecuencia para un control más allá de la línea visual. La mayoría de los controles remotos envían órdenes a los componentes a través de rayos infrarrojos (IR). Para que el componente pueda recibir la orden, debe haber una línea visual ininterrumpida entre el control remoto y el componente. Esta es la razón por la cual a veces no puede cambiar de canal cuando alguien se interpone entre usted y el televisor. Algunos controles remotos también utilizan ondas de radiofrecuencia (RF) para ampliar el control más allá de esa línea visual. Al igual que las ondas de radio AM y FM, las señales de RF pueden atravesar paredes y techos, lo que convierte a este tipo de control remoto en una excelente opción si su sistema de audio/video está en el interior de un mueble o si gran parte de su sistema se encuentra en otra habitación. Si su control remoto no tiene un dispositivo de RF integrado, o si necesita instalar un sistema de RF en una habitación particularmente grande, un amplificador de RF puede resultarle útil. Como su nombre lo indica, los amplificadores de RF amplifican el alcance de su control remoto. Utilizan una estación base y un indicador IR con extremos autoadhesivos que puede anexar a sus componentes. Son bastante fáciles de instalar y son extremadamente útiles al instalar un sistema en varias habitaciones. Fuente: Crutchfield.com