52 Este ambicioso proyecto está conformado por un equipo de tres jóvenes que decidieron incursionar en el mundo del cine. ¿En qué consiste? La idea de estos muchachos ha sido viajar por el mundo para documentar la vida y motivaciones de los artistas callejeros alrededor del globo. El nombre The Busking Project proviene la palabra busker, una jerga inglesa utilizada para referirse a los diferentes personajes que entretienen al público en las calles. Texto: RUF Fotos: Archivo The Busking Project 52 53 E l proyecto comenzó cuando Nick Broad, de 27 años, comenzó a filmar a artistas de la calle en el metro de Nueva York. Documentó su proyecto en un sitio web llamado UnderCoverNY. Este sitio atrajo mucho la atención, incluyendo la de programas de televisión como X Factor y America’s Got Talent. Con el éxito de la web como estímulo, Nick decidió ampliar el alcance del proyecto realizando una investigación global que analizara todo fenómeno del performance callejero. Cuando Nick planteó esta expansión del proyecto, contactó a un amigo suyo, el escritor/ viajero Chris Smith, a quien le propuso participar en el programa, asumiéndolo como un esfuerzo colectivo al que dedicarían diez meses de viaje alrededor el mundo. Chris, quien ya tenía experiencia en la elaboración de itinerarios a largo plazo y en viajes a países en vías de desarrollo, accedió a acompañar a Nick en el viaje, ayudándolo a localizar, contactar, filmar, entrevistar y escribir sobre los artistas callejeros que esperaban encontrar en Europa, África, Asia y América. Belle Crawford, una escritora y artista de Carolina del Sur, quien había conocido a Chris Smith en Inglaterra mientras realizaba un máster en escritura creativa en la Universidad de Manchester, fue la última participante en unirse al proyecto que tenían en manos. Una vez que acordaron que Belle fungiría como la coordinadora artística del programa, establecieron la fecha oficial de salida: el 9 de marzo de 2011. Ese día partieron desde la estación de tren Kings Cross en Londres hacia Lisboa, primer punto de destino del equipo. 54 Los primeros lugares fueron bastante exitosos para el proyecto. Los artistas no resultaron difíciles de encontrar y mientras pasaron por Lisboa, Marrakech, Barcelona, Atenas y Roma este dedicado equipo filmó y entrevistó a bailarines de tap, titiriteros, payasos, músicos, breakdancers, magos y un hombre-orquesta que se llamaba a sí mismo The Birdman, cuyo nombre real era Claudio Montuori. Sin embargo, al viajar por el sudeste de Asia sería más difícil, ya que el calor, las diferencias culturales y las barreras idiomáticas se intensificarían generando bastantes complicaciones. La falta de tiempo libre y poco espacio personal añadió un poco de tensión en este grupo de muchachos. Fue en estos momentos cruciales del programa (el proyecto se hallaba en un punto medio de su desarrollo) que surgieron ciertos desacuerdos entre los miembros del Busking Project por la naturaleza propia de su trabajo, al igual que la forma que eventualmente cobraría la película al editarse. Sin embargo, fueron la calidad de las actuaciones y la pasión de los artistas entrevistados aquello que mantuvo a flote al proyecto todo ese tiempo de dudas y debates. Captar la esencia de un malabarista, un músico o un bailarín, así fuese solo por un periodo corto de tiempo, significaba un respiro diferente dentro de una sociedad que parece estar obsesionada consigo misma. Una vez en Asia, descubrieron que el estigma del músico callejero como mendigo parecía ser más pronunciado. En Europa los artistas son nómadas, viajan de país en país probando la receptividad del público ante sus actos. En Norteamérica el proceso de solicitud de permisos de funcionamiento es arduo y creativamente limitante. En América del Sur es recurrente ver a los artistas realizando espectáculos en semáforos, con la esperanza de apelar a la caridad de las clases trabajadoras. Los miembros de este equipo han podido documentar cientos de horas de filmación en las que muestran las diferentes situaciones y problemas que enfrentan los artistas callejeros de todo el mundo. A través de un constante tránsito durante el cual han tenido que dormir en sofás de muchos extraños al estar saltando de país en país, han logrado identificarse con los estilos de vida de los artistas que han conocido; su percepción del mundo ha logrado mutar mucho desde el inicio de su viaje. Han aprendido a vivir mucho más cada momento, a apreciar la importancia del uso responsable del espacio público, a ser sensibles ante las dificultades y los triunfos de estos artistas independientes, estando mucho más conscientes de la vida y el drama que se desarrolla en la calle. 55 Si bien durante toda la experiencia han estado presentes ciertos desacuerdos artísticos referentes a la naturaleza del proyecto, al acercarse a las dos últimas semanas de su viaje, este tema parece haber cobrado una mínima importancia. Estos tres jóvenes han descubierto algo mucho más valioso que diverso material para elaborar un documental. Han encontrado un lugar dentro de una comunidad global, generando en sí mismos un sentimiento de pertenencia hacia un importante movimiento, tanto artístico como social. Broad, Smith y Crawford esperan poder terminar la película lo antes posible una vez que su viaje haya concluido. Claramente, para este equipo The Busking Project ha sido mucho más que un trabajo documental; durante casi un año ha significado un estilo de vida. visita: www.thebuskingproject.com 55