Comentario al evangelio del jueves, 25 de agosto de 2016 A la paz de Dios: No sé si Antonio Machado entendió el mensaje del evangelio. O quizás lo comprendió fenomenal cuando escribió: “¿Cuál fue, Jesús, tu palabra? ¿Amor? ¿Perdón? ¿Caridad? Todas tus palabras fueron una palabra: velad”. Leyendo el evangelio de hoy intuyo que comprendió muy bien su significado. Conviene estar en guardia. El amor, el perdón, la caridad, sin estar vigilantes se nos pueden escapar. O se nos puede llenar la boca con estas palabras pero hacer poquito. VELAD. No sabemos la hora. Por eso es mejor estar preparados. Preparados, listos, ya. Como los atletas: a sus puestos. Esperando el pistoletazo de salida: sin adelantarse, porque nos pueden descalificar; sin retrasarse, porque podemos perder nuestra oportunidad. Tenemos la posibilidad de ser criados fieles y cuidadosos (me gustan mucho estas dos invitaciones de Jesús: fidelidad y cuidado. Hoy voy a dedicar un tiempo largo a pensar en ellas) o convertirnos en criados canallas. El canalla solo piensa en sí mismo: en su disfrute y en su fuerza. Cuando uno piensa mucho en sí mismo, acaba mal: llanto y rechinar de dientes. Gracias, Jesús, por tu evangelio. Gracias, Machado, por tu toque de atención. Vuestro hermano y amigo Óscar Romano @scarRomano Óscar Romano, cmf Publicado en Ciudad Redonda www.ciudadredonda.org