España, es uno de los países con más escenografitas de varios personajes en las calles presentando imágenes con la rueda del afilador durante largo tiempos, así como el pintor, grabador, dibujantes, escultores, y otros cultivadores de artes y de las letras que se desenvolvían por las calles del mundo, desde el siglo XVII; cuadros representado la imagen del afilador. así nace la rueda tradicional un instrumento de restauración con un fin de colección puede llegar a 150 años de existencia de cada rueda, muchas variaciones, y modificaciones a este modelo móvil del afilador ; bicicletas con esmeriles y pulidores utensilios que se incorporan al oficio, el nuevo vehiculo de afilar, se adquiere al gusto y uso de la persona, estos modelos son considerados de gran importancia singular de la historia, motocicletas sufren una verdadera competencia, de una máquina mas actual para afilar; ahí, el reconocimiento de la profesión en el tiempo y su mantención, que és; la tradición , son las raíces del verdadero trabajo en donde hay una comunicación cultural, un desenvolviéndose en un proceso efectivo en la sociedad, a continuar la actividad ambulante, en donde se aparenta a una traducción del ejercicio de la especialidad que se trata de un coche taller en movimiento, el afilador es un automóvil, son vehículos transportantes en las calles, ellos están en restaurantes, en los supermercados, en los hoteles, mercados, en todos los colectivos o ventas ambulantes en donde ellos pueden prestar su servicio a la comunidad. En cambio nos dirigimos a la ciudad de Barcelona, en el distrito de la Barceloneta de tierra catalanes otra visión de los afiladores, o el oficio de los afiladores independientes. Los afiladores eran vistos por los espaderos, herreros de cortes, o dagueros, el cual les sacaba trabajo, se pone de manifiesto que la tensión que fue generando los varios oficios nuestros de cortes, dagueros, cuchilleros, etc., relacionados con herramientas cortantes, de hecho con el advenimiento de los afiladores todas estas especialidades se vio en disminución. Su trabajo, a pesar de la no aceptación de este oficio. Y las adversidades que contaba por la calle. Los afiladores proliferaron y pasaron a ser unos personajes singulares, muy apreciados por la vecindad, hechos patentes una vez más, por la importancia en su existencia. Que catalán no sacaba la cabeza cuando sentía el grito agudo y el sonido estridente de la firinga o flauta de pan, el afilador anunciaba al vencindad, su venida con el rerric de la lata que sonaba con la piedra de afilar, si hubiese encontrando mas sonidos mas había danzado para pregonar, que supiese que esperaba los cuchillos de las amas de casa que guardaban en los cajones, deseando que pasara el afilador para afilar el corte liso y reluciente. Este personaje ambulante casi desaparecido en la actualidad, lo vemos en nuestra casa desde las historietas del sol y la luna siglo XVII, llevaban un delantal de cuero que les colgaba desde el pecho hasta media pierna para protegerlos de aguas que escupía la piedra de afilar. La piedra de afilar que la llevaban en el cuello desde un principio, la llevaban en un carretón que facilitaba el transporte, se veía que el carácter de este personaje popular venia marcada por su vida viajera e inestable, la cual le daba una personalidad picaresca, murria, muy propio de gente inadaptada. Solteras o casada mirada sin discriminadamente se habrían las ventanas y al verlo pasar, empezaban a hablar con ellos un rato, era un hombre muy informado de la guílla, y a su manera giraban los acontecimientos rebajados a un tercio se aproximaban a la realidad. Sin miedo a equivocarnos podemos decir que la gente le quería. Este oficio importado desde Francia o bien es de origen francés, también, en Italia, Pakistán, Rusia y en otros lugares habría enraizado muy fuerte en Galicia, España, concretamente en la regio de Ourense, estos ambulantes invirtieron en tierras y ganados, de esta manera aumentaron el bien estar, la ventaja de este oficio sin duda era la movilidad, de manera que se extendió a los fines mas allá de Galicia, a la piedra de afilar donde se le incorporo eventualmente un cajón posteriormente, donde el artesano metió sus instrumentos personales, de ésta manera los afiladores gallegos consiguieron no tal solo trabajaren el campo sino que conquistaron las ciudades, con el paso de la rueda para afilar y los negocios establecidos, como profesión se fue convirtiendo en una profesión sedentaria, efectivamente se anunciaban cerca de los mercados, poco a poco fueron incorporados al lugar que iban a visitarlos. Condiciones del trabajo del afilador, son duras, había que trabajar mucho para tener beneficios era pues importante, crear en los clientes, como los pescaderos, unas herramientas bien afiladas, por esta razón, el afilador ha avanzado en el tiempo, ha ido siempre ha llamar la puerta, los cuchilleros te afilaban cada día, en el caso de los afiladores ambulante de esta manera para obtener trabajo puede ser mas dura. El afilador paseaba tranquilamente por las calles con el caballete y las piedras de afilar acopladas, haciendo sonar tijeras, cuchillos y toda herramienta de corte, no encontrareis a un orador tan amplio y unos contactos tan variados. Tenían las rutas bien estudiadas por la mañana y la tarde, en verano e invierno. Tenían encargos para arreglar cuchillos, tijeras y otras navajas de afilar, además de arreglar paraguas y objetos de la casa, peines, tijeras, corta plumas, etc., Era común entre los afiladores y de origen gallegos, el afilador reparaba todo tipo de instrumentos cortantes y punzantes, los más corrientes eran las navajas, los bisturís, los cuchillos, los alicates, tijeras etc.,.. Y con el tacto de la uña comprobaba si estaba bien afilada, el afilador es un oficio muy complicado, entre la profesión hay varios estilos o especialidades conocedores de muchos oficios, para apreciar este arte es realmente el que hace el oficio el que se trasmite de padre a hijo. L`adobafogons o el componedor de fogones, los fogones hechos en obras de la construcción son relativamente modernos, los viejos fogones eran portátiles de barro, se usaron para quemar leñas, les llamaban fogones de copas, por que se parecían un poco, el compone fogones, componía fogones de barro en aquellos tiempos se aprovechaban los objetos al máximo y cuando un fogón se agrietaba, la musa popular así habla de este baladrer, o gritador Ne veurás un home Que va pels racons, Tot el dia crida: “Adobar Fogons”. N`és qualsevol pasta El seu material I de sou en sou I de ral en ral Quan arriba el vespre Ja ha fet son jornal. Pastoret, d`on vèns? De la muntanya de veure el temps. Vaja un temps que fa, Plou i neva i nevará. Adobar fogons Tot el dia pels racons. Un home tot geperut Va cridant per els cantons Amb les mans brutes I llefres Dient: Adobeu fogons. -Dones, adobar fogons, pocs diners I ben gastats, porteu ferros rovellats, que els dolents tornaran bons. Este baladrer relata el sentido al ahorro del pueblo catalán que eran objetos de tan poco valor dentro de la economía doméstica. Este oficio había tenido una gran importancia el cual es grabado en varias tiendas de artes y oficios, en cerámicas en historietas antiguas. El L`estanyapaelles, llamado también estañero y perolero, este personaje se encuentra por todas partes y nuestra imaginaria nos representa a los tiempos de los poquísimos pregoneros que salen figurados en las cerámicas siete centista., llevaban un martillo y además de los gritos picaban continuamente el mango de la paella que llevaban al cuello, como reclamo del oficio, casi todos eran italianos, casi siempre sepia montescos, iban muy destartalados, estropeados y era típico que llevasen un sombrero de copa todo agoñado y sucio era gente mal hablada y busca razones en su presencia y su grito eran considerado mal agüeros, la gente decía que este pregonero llevaba peleas y desventuras, también eran indicio de pestes, en la historieta dice el baladrero Aquí está, nimfes d`aigüera, El gran baratapaelles, Que us compondrá les graelles I els forats de la caldera. Eh!, vós, estanyapaelles, m` adobareu les graelles? EL Paragüero, este pregonero es moderno , no se encuentra representado en las historietas, a pesar que la gente distinguida gastase, su popularidad no es suficiente para dar lugar al paragüero, los primeros establecimientos oficiales en Barcelona que se dedicaron a vender y componer o arreglar paraguas fueron los afiladores, que hacían las dos industrias a la vez, el uso del paragua no se ha generalizado su uso hasta tiempos modernos, tanto es así que los primeros paragüeros no podían vivir de la industria de los paraguas solamente entregaron a los comercios de abanicos, a comercios, esta vía de exportación se genero de casa francesa , los franceses son los primeros paragüeros, salen los días que llovían y generalmente van sin paraguas,y si llevaban uno grandísimo, y color rojo. La gente decía una oración especial a Sant Pixó, para que desencadenara un buen temporal de viento y lluvia que rompiera e hiciese mal a todos los paraguas! Si llovía, posiblemente esta creencia a causado mal a presencia de paragüeros, “es agüero de viento”; el público les daba para que arreglase y componiese por las casas con miedo de que no se quedasen o se los cambiasen, dice el paragüero; “Paraigües i para-sol, d`adobar aquest, quant ne vol? L`aiguader, o el aguador aparecieron alrededor de los años 1850 por Barcelona, hacían pagar un cuarto por un cántaro, fueron acogidos por los vecinos o servicios para bajar aguas a las fuentes, iban por las casa con sus cántaros grandes de aguas por el precio de cinco céntimos bajaban a las fuentes para subir los cantaros a las casa , usando cantaros de lata , venían a las casas que no tenían corrientes o pozos, llevaban un carretón de forma especial con diez aguajeros gordos divididos en dos hileras dentro de cada agujero iba encajado un cántaro, de latas, los parroquianos consumían un cántaro al día , las ventas del agua , el alquiler, por tres reales a la semana el aguador llevaba un cántaro cada día y ponía en disposición un cántaro para conservarla, cada día dejaba lo que llevaba al vació. “Aigua fresca, minyonetes, que ara acaba d`arribar; per dos quartos,¿quí anirá? A pujar i baixar escaletes? Aigua fresca i baratet; Per un quarto un cantiret. La Castañera, antes tostaba las castañas en sus casas y salía a venderlas por las calles las historietas antiguas nos representan con un cabazo tapado bajo el brazo para que no se enfríen, gritando, “Calentes i grosses, baixeu ara que fumen”. Daban ocho por un cuarto, comenzaban aparecer o salir en el día de todos los santos, su aparición constituían una nota tradicional de este día, las primeras del siglo pasado se establecieron en la calle utilizaban fogones de barro al pie de los cuales se ponían un payes o pie derecho de madera que sostenía una lámpara grande de aceite que a la vez iluminaba el pequeño establecimiento y constituía un reclamo, a los paseantes de las paradas, protegidos por un paravientos para evitar que fuese apagado por el viento y moviera la luz , como quemaban leña , en el año 1839 fueron dictadas una ordenanzas municipales , por las cuales se prohibían que tostasen las castañas en las calle para evitar el humo. El establecimientos de las castañeras, llamaba poderosamente la atención tanto que se hizo una de las figuras mas típicas que no puede faltar en ambiente casero, que todavía hoy se hace, la utilización de carbón y las tostadoras metálicas han constituidos un notable avance para esta humilde industria, el vendedor de castañas tostadas, se encuentra en valencia, París, Nápoles la musa popular nos habla axial de las castañeras “En Senalla ben tapada amb un tros brut de llecol porten los dones castanyes dient:Calentes,qui en vol? Veniu a la castayera, Que les té ben calentones; Veniu, noies, que són bones, ara en poso a la panera. Castanyes, qui en vol comprar? Ara acabo d`abocar. El mercado de la boqueria en Barcelona, España. Es hijo de una larga historia que se remonta a la edad media. La noticia más antigua que conocemos, la encontramos en el año 1217; en aquel tiempo la Rambla era todavía una riera rodeada por una muralla, y en este lugar...,” un representante del rey, concedió a un particular, la propiedad de un mostrador para trinchar carne de “boc”, de aquí el nombre de boqueria. Hace ya, más de 160 años, que estos primeros comerciantes, se trasladaron al antiguo convento de Sant Josep, formando lo que es ahora, “EL mercado de la Boqueria” La colocación de la primera piedra tuvo lugar el día de Sant Joseph del año 1840, y fue acompañada de un ritual muy elocuente, una onza de oro, así como diferentes monedas de oro fueron depositadas bajo esta primera piedra, como símbolo de la riqueza que este futuro mercado tenía que producir. En el año 1871, los quinqués de gas remplazaron a las velas, y, a final de siglo llego la electricidad. Todavía al aire libre, en 1914, la maquinista terrestre y marítima, construyo el techo metálico que actualmente podemos admiraron una superficie de 13.631m2, la boqueria es el mercado mas grande de españa.Nuestra situación privilegiada, teniendo como vestíbulo el inmenso ramo de flores que es la rambla, nos ha convertido durantes años en el edificio mas visitado de Barcelona. Pregones típico malagueños, son cosas de otros tiempos, “Los artistas del pregón ambulante, nos trae a la memoria dos tipos auténticos representativos de tales artistas del pregón, que hicieron célebres en Málaga hace ya unos cuantos años, y que seguramente que recordarán muchos malagueños: El Colorao, vendedor de pescado, y la Arriera; vendedora de dulces. Alto y de complexión robusta, de un rubio muy próximo al rojo, EL Colorao, poseía una voz extensísima y abaritonada, á la que sabía dar cadencias insospechadas en el pregón en su mercancía, compuesta, casi preferentemente, de pescados, corvinas, japutas, calamares, besugos, lenguados, atún, salmonetes, boquerones y los tan famosos chancletas. Y con los nombres de todas estas clases de pescados entonaba un pregón tan original, tan bien combinado, con notas tan musicalmente emitidas y aplicando á cada clase un adjetivo tan propio y tan pintoresco, que casi toda su clientela, compuesta, como es consiguiente, de ala ancha ladeado picarescamente, entonó el siguiente pregón, el usual que a diario hacia así por las calles: Venid, bellas mocitas Que aquí está el Colorao, Con sus canastas bien llenas Del suculento pescao. Traigo la blanca Corvina, Más buena que la pescá, Y el salmonete dorado Que frito muy rico está, Besugos y boquerones, Calamares muy sabrosos, Muy fresquitos los Lenguados, Y los chancletes famosos. Venid , bellas mocitas, Trinitarias, goleteras, Las del bulto y del Perchel. Las de gracia sandunguera, que aquí esta el colrao, A quien rabiabas por ver. Y cuenta la historia que el alto personaje oficial quedó tan complacido del maravillosos y original pregón, que felicitó efusivamente á el colorao, haciéndole, además, un espléndido obsequio, al que gentilmente correspondió el famoso y típico pescadero dejando, muy complacida, para el alto personaje, todo el pescado que lleva en sus canastos. Otro pregón que se hizo famoso en Málaga fue el de una mujer apodada la Arriera, que vendía unas pequeñitas figuritas de dulce. De edad media, alta de cuerpo enjuta de carnes y vestida modestamente, a un cuando destacando por su esmerada limpieza, poseía una voz extensa y bastante agradable, imprimiendo á su pregón una cadencia muy expresiva y aun sentimental. Llevaba su mercancía en una batea de mimbre, muy blanca y muy reluciente, y colocadas en limpios papeles, distribuidas simétricamente, ofrecía las diferentes piececitas de dulces, figurando diminutas frutas de todas clases, grotescos muñecos, carritos, animales y chirimbolo de cocina. Y cuando los chiquillos, atraídos por las golosinas, la rodeaban, impacientes y bulliciosos, la Arriera colocaba su batea de mimbres en el suelo, y con las manos puestas en la cintura, entonaba su insinuante pregón, que dejaba boquiabierta á la chiquillería, la cual seguía por calles y plazas, y que pronto daba fin de toda la mercancía. He aquí dos de las varias canciones que empleaba la Arriera para anunciar aquellas chucherías; Nadie se asuste ni asombre De que cante como un grillo... ¡Hoy es día de gran fiesta: dadle perras á los chiquillos! El león con ser león, Dicen que lo vence el sueño... ¡Hoy es día jolgorio: Dadle perras á los pequeños! Y la Arriera daba tal expresión de dulzura, tal cadencia y tal sentimentalismo á las letras de su pregón, que en poco tiempo se hizo famosa en los barrios y suburbios malagueños, y de esta forma podía sostener con relativa holgura á sus pobres hijillos, pues aquella vendedora eran viudos de un arriero, que al morir dejo tres huérfanos en este mundo. Muchos han sido los vendedores que con sus pregones se hicieron populares en Málaga; pero de todos ellos, el colorao, vendedor de pescados, y la Arriera, vendedora de dulces, lograron hacerse famosos por la forma tan especial de sus pregones, emitidos con cierto aire artísticos, que maravillaban á cuantos vivieron aquellos tiempos en que la ciudad malacitana sintió los rigores de un espantoso terremoto, que llevó a la consternación á sus habitantes y sumió en la miseria á muchos hogares, los que dio origen al inolvidable monarca Alfonso XII hiciera una visita á dicha población, para mitigar con su presencia y con sus consuelos tantas desdichas y tantos quebrantos. En los pregones cantados hay una serie de anuncios cantados que se han recogido en Latinoamérica por diferentes países de Venezuela por los vendedores de billetes que acostumbran allá a entonarlos con las siguientes palabras: Me voy con mi lotería, señores. Pongan cuidado, pa que mañana no digan: “el Lotero me ha robado” En la Barranquilla en Colombia se estableció un negocio de venta callejera de helados, y al recorrer nuestras avenidas, ruas, plazas, carreras y callejuelas, anunciaba su delicioso producto de esta forma: “Este refresco ideal es un refresco de flor que yo preparo especial para cuando hace calor” “Este refresco ideal es el néctar soberano que lo preparan los dioses Para el pueblo colombiano” He aquí el pregón de Rafael Lozada: Los viejos Cartageneros recuerdan diariamente las calles este pregón de su cosecha; “Vamos a ver niñitos: Aquí teresa con los fritos A ver qué quieren: Buñuelitos, arepitas, carabañolitas o empanaditas” Y cuando se inició aquí la compra de botellas vacías por parte de las Cervecerías “Bolivar” y “Barranquilla”, todas las mañanas tocaba las puertas de nuestras casas un invariable son; Botellas,.... “Hay botellas”....? Todos los costeños conocemos, y la hemos saboreado con delicia en nuestra infancia, pasta comestible compuesta principalmente de panela con pedacitos de cáscaras de limón rallada y anís, una sabrosísima melcocha que el pueblo de la costa atlántica designa con el nombre de Arropiya”, En la región Andaluza de España la llaman arropía” (Partitura) Continuamos nuestro viaje al sur de Colombia, al cerro de Montserrate, frente a las tienditas o toldas que pululan en este sitio. Una vieja regordeta, panda, carialegre y asaz panzuda a los aires los anuncios de sus artículos, de esta manera; “A ver su chocolate, café, ron y vino agua de panela, Ladrillo molido y viento raspado a su caldo peligroso.” Tantos pregones en Colombia ha inventado el pueblo para ponderar al platanero, la yuca, el ñame, el cazabe, el chicharrón, el pescado fresco y salado, el queso, los huevos, las frutas, las legumbres,, la panela, el carbón, las arepas, el bochadillo los dulces, el guarapo, la chicha, el aguardiente,, los frijoles, el peto, el masato, el café, el chocolate, y tantas cosas del reino popular y a las cuales canta gente humilde con toda la fe de su sano corazón.