sarasvati - svAbhinava

Anuncio
-
SARASVATI ESTUDIOS DE ORIENTE-OCCIDENTE PARA IMPULSAR UN RENACER HUMANISTA NUMER05
DlRECCION
Patronato de la fundaci6n Purusa
DIRECTORA DELEGADA
Orduiia Ferrero
}vf" Anunciaci6n
ED ITA
Fundaci6n Purusa
Transcripcion SUSCRIPCIONES
Fundaci6n Purusa
(rAgustin Durem, 19, 4° B
28028 - Madrid
WlAv'W:!undacionpurusa.org
e-mail:
injo@jimdacionpurusa.org
revista@jimdacionpurusa.org
EI fuego y la ( Calier-Visu\'al
EI drama COlT
Fernandez, Ro
Cualidades fe
Jiiger, Willigis
ConsideraciOl
Pujol, Oscar
Tiempo e Inte
Satyananda. S
ISSN: 1138-5235
Deposito Legal: M-40.006-1997
La autorealb
Vassiliades. [
No-dualidad
Vigne, Jacqul
La Concepci
Visuvalingar
Sumarios ....
SUMARIO '
°t0
TranscnpclOn y pronuncIaclOn d eIsanscn
OO'
•
•
,
..................................... .. 7
EI fuego y la muerte en el Hinduismo ................................................... 9 Calier-Visuvalingam, Elizabeth EI drama como paradigma cosmoestetico en la tradicion india ...... 21 Fernandez, Rosa
Cualidades femeninas en la evoluci6n ................................................ 29 Jager, Willigis Consideraciones basicas sobre el vedanta de Sa.J1lkara ....................... 37 Pujol, Oscar
Tiempo e Intemporalidad. La Tradicion hindu en el proximo siglo ......... 83 Satyananda, Swami La autorealizaci6n en la tradici6n brahmanica ............................... 109 Vassiliades, Demetrios Th.
No-dualidad y Mistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo ................ 119 Vigne, Jacques La Concepcion del Humor en Abhinavagupta ................................ 173 Visuvalingam, Sunthar Sumarios ..................................... ......................................................... 197 <}II ell fa
tradiciol1 brahmimica
: la mente y finalmente la
despertar a la conciencia
la vida, constituyen las
tanga) del yoga de Pata­
los filosofos indios enfa­
la de todas las facultades
telecto, la mente y el
m que ser seguidos con
stematico (abhyasa) y
~ya) por todos los que
fin a las cinco modifica­
de la mente e intelecto
t ininterrumpida brillan­
ra naturaleza del ser.
No-dualidad y Mistica Cristiana:
Vedanta y Hesicasmo*
por Jacques Vigne**
Traducido por Montserrat Vilarrasa
Resumen
Este texto es un estudio sobre cristianismo e
hinduismo, en particular sobre el hesi­
casmo, la mistica de los Padres del desierto,
y el Vedanta. Muestra como los misticos
cristianos tienden a la no-dualidad y practi­
can como en el yoga parar la mente y el
silencio. Habla de la psicologia de la asce­
sis, del porque de sus cxcesos, dellazo entre
la soledad, la austeridad y los poderes psi-
quicos. Aborda asimismo la sublimaci6n de
la sexualidad en la espiritualidad. Tras un
resumen de la historia de la no-dualidad en
Occidente, muestra como csta se promete
como un gran porvenir, en cI quc hace evo­
lucionar los conceptos cristianos sobre la
gracia, la creacion, la evoluci6n, el persona­
Jismo y Ja nocion de la disoluci6n del ego
en esta vida, es decir, la liberaci6n en vida.
Parte I. Sobre parar la mente
Caminar, aparte de su repeticion ritmica,
favorece un control del curso de los pensa­
mientos. Si se asocia a la repeticion de una
formula sagrada, puede llevar a parar la
mente y a un estado superior de eonscien­
cia. Es muy comun entre los peregrinos de
todos los paises la pnictica de la oraci6n
repetitiva. En el cristianismo, los Relatas
de un peregrina nlSO (1) son celebres por
eso, as! como en India los Apuntes de pere­
grinaje de Swami Ramdas. (2) Me senti
tan fascinado por el poder de la repeticion
sobre el espiritu ~ sea repeticion del paso 0
repetici6n de una f6rmula sagrada que la
* Publieado en Questions n° 99 y 100
(1995).
** Diplomado en Psiquiatria por la Univer­
sidad de Paris. Desde haee diez anos vive en
India dedieado al estudio (Vedanta, estudios
comparados Oriente/Oceidente) y la meditaei6n.
convert! en tema de mi tesis de medic ina.
(3) Lo que presentia en el momento de
redactar esc trabajo era que las tccnicas
repetitivas, asociadas generalmente en eI
alma de las personas a la plcgaria y al pen­
samiento positivo, podian igualmente con­
tribuir de manera muy importante al
desarrollo de la psicoterapia. Una de las
limitaciones de esta es que se dedica casi
exclusivamente al estudio de la mente, al
menos en su fonna c\asica inspirada por el
psicoanalisis, pero esta observaci6n no
representa mas que la mitad de las posibili­
dades de aproximacion a los caminos espi­
rituales. La segunda mitad esta fonnada
por las tecnicas de concentracion, consis­
tentes en un movimiento repetitivo de la
atenci6n, que regresa una y otra vez al
objeto en el cual ha decidido fijarse.
Jacques Vigne
120
No-dualidad y Mistica Crisliana: Vedanta y Hesicasmo
A menudo se ha comparado la oraci6n de
Jesus al mantra y el hesicasmo al yoga. (4)
Tratare este ultimo tema al final de este
articulo; me interesa, en primer lugar, el
resultado de estas tecnicas, la paz, la
hesica, que ha sido descrita como la
columna vertebral de la mistica de la Igle­
sia ortodoxa de Oriente, y parar la mente,
citta vritti nirodha, que Patanjali consi­
dera como la definici6n misma del Yoga
al principio de sus aforismos (1,2). (5)
Un silencio vasto como el cielo
Me hace muy feliz escribir sobre este tema en India, a orillas del Ganges, justo antes dc entrar en retiro por al menos cinco meses. Puede parecer parad6jico hablar del silencio, pero muchos otros 10 han loado antes que yo (6); can la espe­
. ranza de que este silencio se convierta en cl objeto de nuestra experiencia, (,que mas bello objeto de reflexi6n puede haber para nuestra mente?
La psicologia no es del todo ajena a las vir­
tudes del silencio; la abstenci6n del psi­
quiatra tiene en sl misma una eficacia, ya
que constituye una aceptaci6n implicita y
no culpabilizadora de la mente de su
paciente y de su existencia en tanto que tal;
sin embargo, hay que optar por las practi­
cas de meditaci6n para que el sujeto por sf
mismo intente acercarse al silencio. Los
terapeutas se sienten demasiado atraidos
por los ruidos del intelecto, las falsas notas
de la psicopatologia y los gruJiidos sordos
de las pulsaciones estremeciendo el incons­
ciente sin pensar jamas en escuchar la gran
calma que hay detras, 0 encima de todD
ello. En este sentido, puede decirse que el
silencio es el gran rechazado de nuestra
psicologia modema. Tengamos en cuenta.
ademas, que la filosofia y la teologia ya
habian aliviado pasablemente sus preocu­
paciones. Sin embargo, el hombre corriente
tiene una intuici6n justa del silencio
cuando Ie apetece estar en plena naturaleza.
Ahi las imagenes no son portadoras de
mensajes calculados como en las ciudades
Henas de ensenas y publicidad. La natura­
leza no tiene nada en especial que decir.
puede que sea por eso que Ie guste tanto su
compania.
Para entrar de lIeno en el tema que nos
ocupa, algunas reflexiones sobre el voca­
bulario: en sanscrito, silencio es mauna,
y a la persona que ha hecho un voto de
silencio se Ja llama mauni. A veces este
voto puede durar hasta doce anos, como
es el caso actual de Chandra Swami del
linaje Udasin cerca de Dehra-Dun, a los
pies de los Himalayas (cf"L'art de la rea­
lisation", Albin Mitchel). En cuanto a la
paz, se la considera como el noveno sen­
timiento (rasa), de alguna manera la base
de la que surgen todos los demas. En
griego, el termino hesica se utiliza para
designar a la vez la paz y cl estilo de vida
de los solitarios. Nosotros estamos inte­
resados directamente en esta experiencia
de la hesica sin detallar la historia del
movimiento al cual dio lugar, el hesi­
casmo, que impregno con su perfume
toda la mistica de la Iglesia de Oriente.
Otro termino que significa tranquilidad
es apatheia, la ausencia de pasiones. No
se trata en absoluto de la apatia, estado
de pereza, sino de un estado de pureza
donde los movimientos de la mente se
paran. Es un estado de supraconsciencia,
una analogia muy profunda con el sama­
dhi hindu. Para los Padres el amerimnia
-ausencia completa de
se revela practicamel1t~
una virtud. En este senti
mujer sabia de nuestro
damayi, decia en palabl
no-preocupaci6n, he aq
suprema". Otra palabr
tranquilidad es en3mia, r
mente, obviando los ace:
desierto. En am bas p
nociones se asocian. En
pax, y tlene una import
en el desarrollo del m
dental que se ha con vcr
del orden benedictino.
En este texto, permanec
timonio directo de los
Janzare a especulacione~
damente marcadas por h
camiento de los pensar
que la idea de una met
las misticas no es un Sl
piadoso. Me he dejado g
cion al escoger las palat
y sabios de India, basan
riencia interior de Vijay
cual estoy viviendo de
madamente cinco anos:
frances convertido en
Anandamayi, vive y pr
cion en India segun c
hace mas de cuarenta 2
Padre del desierto, se m
haber vivido diccisiete
tano en los Himalaya
"Padre de la montana".
En estos tiempos en que (
nuevas corrientes religio:
silencio interior pennite
cultades de dialogo, puc
el deposito comun de
Jacques Viglle
121
ialla: Vedanta y Hesicasmo
Tengamos en cuenta,
)sofia y la teologia ya
;ablemente sus preocu­
:go, el hombre corriente
>n justa del silencio
5tar en plena naturaleza.
no son portadoras de
s como en las ciudades
. publicidad. La naturaen especial quc decir,
:so que Ie guste tanto su
I.
en cl tern a que nos
lexiones sobre el voea­
to, sileneio es mauna,
~ ha heeho un voto de
a mauni. A veces este
1asta doce afios, como
Ie Chandra Swami del
a de Dehra-Dun, a los
yas (ef"L'art de la rca­
itchel). En cuanto a la
a como el noveno sen­
alguna manera la base
todos los demas. En
hesica se utiliza para
1 paz y el estilo de vida
\losotros estamos inte­
[lte en esta experiencia
1etallar la historia del
lal dio lugar, el hesi­
~gn6 con su perfume
la Iglesia de Oriente.
10
significa tranquilidad
5encia de pasiones. No
to de la apatia, estado
~ un estado de pureza
ientos de la mente se
o de supraconsciencia,
profunda con el sama­
s Padres el amerimnia
-ausencia completa de preocupacioncs­
se revela practicamente siempre como
una virtud. En este sentido tambien, una
mujer sabia de nuestro siglo, Ma Anan­
damayi, decia en palabras simples: "La
no-preocupaci6n, he aqu! la meditaci6n
suprema". Otra palabra que significa
tranquilidad es erernia, parecida enorme­
mente, obviando los acentos, a eremia, el
desierto. En ambas palabras las dos
nociones sc asocian. En latin, paz se dice
pax, y tiene una importancia tan grande
en el desarrollo del monaquismo occi­
dental que se ha convertido en la divisa
del orden benedictino.
En este tcxto, pel111aneCerc cerca del tes­
timonio dirccto de los monjes y no me
lanzarc a cspeculaciones teologicas pes a­
damente marcadas por la cultura. EI acer­
camiento de los pensamientos mostrara
que la idea de una meta comun a todas
las misticas no es un sefiuelo 0 un voto
piadoso. Me he dejado guiar por mi intui­
cion al escoger las palabras de los Padres
y sabios de India, bas{mdome en la expe­
rieneia interior de Vijayananda, ccrca del
cual estoy viviendo desde hace aproxi­
madamente cinco afios: anciano medico
frances convertido en discipulo de Ma
Anandamayi, vive y praetiea la medita­
cion en India segun el vedanta desde
hace mas de cuarenta afios. Si no es un
Padre del desierto, se merece, despues de
haber vivido diecisiete afios como enni­
tanG en los Himalayas, el nombre de
"Padre de la montana".
En estos tiempos en que Occidente se abre a
nuevas corrientes religiosas, esta nocion de
silencio interior pennite trascender las difi.­
cultades de dialogo, puesto que representa
el deposito comun de todas las palabras
sagradas. Es vasto como el cielo y no esta
entorpecido por las voces de los di ferentes
grupos que participan del pluralismo espiri­
tual de nuestros dias. EI silencio permite
resolver muy bien los problemas de traduc­
ci6n... Es el signo de la renuncia; para ilus­
trar este ultimo comentario, citaremos con
pem1iso una frase del "Sannyas Hindu", un
texto que puede ser considerado eomo el
testamento espiritual de Swami Abhishikta­
nanda, partidario convcncido de la coinci­
dencia de vedanta y cristianismo: "La
Ilamada a la renuncia completa desborda la
frontera de las religiones ... y cs mediante
esta lIamada que surge de las profundidades
del corazon humano que los diferentes
dharmas (religiones) efectivamente se
encuentran, en este pulso que las lleva mas
alia de si mismas." (7)
Ramana Maharshi expresaba la misma
idea mediante una imagen tradicional. "EI
silencio es el oceano en el cual todos los
rios van a lanzarse." (8) Despucs de haber
hablado sobre parar la mente en el ven­
danta y el cristianismo, vislumbrarcmos cl
metoda que pennite llegar a ello, es decir,
la ascesis, elaborando un estudio critico
del sentido del sufrimiento del cuerpo en
los Padres con relaci6n a la tradicion
hindu. Por Ultimo, y antes de conc1uir,
reflexionaremos sobre la tecnica del hesi­
casmo en comparacion con la del yoga.
Parar la mente en el Vedanta
Existen tres estados al parar la mente:
•
el silencio de la actividad verbal
interior
el borrado de las imagenes
parar las sensaeiones provenientes
delcuerpo
122
No-dualidad y Aiistiea Cristiana: Vedanta y Hesieasmo
Cuando se ha llegado a este ultimo estado,
el Ser se revela, es el samadhi. Cuando el
lago esta en calma, se puede ver el fondo.
Eslo no significa que el silencio sea un
est ado de entorpectmtento. Ramana
Maharshi decia que las gentes creen al
sabio perezoso porque este puede perm a­
necer mucho tiempo inm6vil, pero de
hecho el sabio es como una peonza que
gira tan rapidamente que su movimiento
apenas se percibe. EI silencio del verda­
dero guru es la ensenanza mas fuerte; es
mediante este que Daksinamurti, el sabio
adolescente, transmiti6 el Conocimiento
del Ser a los cuatro rishis que eran ya
ancianos. Las masas que venian a visitar a
Ma Anandamayi, 0 que ahora vicnen aver
a Ma Amritanandamayi, pueden estarse
horas simplemente obscrvando cl guru sin
tener necesidad de discursos 0 predicas.
Un dia, alguien pregunt6 a Ma Ananda­
mayi: "Cuentanos tu experiencia". Ma
rcspondio: "Hacer eso supondria asumir
que siempre debe haber alguien para
experimentar, y no cs el caso aqui (es la
fonna que tenia Ma de hablar). Todo 10
que puede ser expresado eon palabras 0
mediante cualquier lcnguaje cs una crea­
ci6n de la mente." (9)
Se cree que el silencio es inactivo, pero de
hecho es una creacion que no cesa nun ca.
Se puede comparar a la libre circulaci6n
de la corriente eICctrica en un hilo conduc­
tor. A veces llegara a algun que otro ins­
trumenlo y 10 hara funcionar, si no seguira
su curso desapareciendo. EI encuentro con
un guru puede proporcionar la cxperiencia
del silencio. Nisargadatta Maharaj deda:
"Antes del momenta en que encontre a mi
guru, yo sabia muchas cosas: Ahora no se
nada... Me conozco a mi mismo y no
encuentro ni vida ni muerte en mi, sola­
mente al puro Ser." (10) Junto con el "Yo
soy el que soy" divino, la frase de la
Biblia que atraia mas a Ramana Maharshi
era: "Pennaneced silenciosos... y sabed
que yo soy Dios". (Ps 46, 11)
Uno de los numerosos metodos de medi­
taci6n posibles consiste en observar la
mente en medio de los numerosos pens a­
mientos, percibiendo asi el silencio. Esta
tecnica es igualmente utilizada en Occi­
dente, particularmente por los cartujos. Es
preciso comprender que, si bien todas las
tecnicas espirituales se encaminan hacia el
silencio, no 10 crean de por si, puesto que
sicmpre est a ahi, no es otro que el scr.
"Aquel que ha perdido su bolsa en un
momenta de distracci6n, puedc cncon­
trarla calmando su mente y haciendo
memoria de donde ha podido extraviarla.
Cuando encuentra la bolsa perdida, no
puede decirse que el hecho de calmar su
mente haya creado esa bolsa. De la misma
manera, el control de vuestra mente no es
la causa de la Realizaci6n del Ser; aunque
cste siempre ahi, no 10 reconoceis, atm
con una mente bajo control, puesto que no
cstais acostumbrados." (11)
En el Vedanta, es muy comun tomar como
analogia del samadhi el suefio profundo:
siendo un estado desprovisto de imagenes
oniricas, representa el silencio de las for­
mas. Ademas, la distincic)!1 entre el obser­
vador, 10 que es observado y la observaci6n
misma desaparccc como fund ida en una
sola masa de consciencia (prajila-ghal1a,
termino empleado en las Upanishads). El
samadhi posee la misma fuerza centripeta
considerable que el suefio profundo, pero
en lugar de estar inconsciente, el est ado es
de supraconsciencia.
Jacques Vigne
Si queremos orientam05
de experiencias espiritu
que es mas importante CI
distinguir entre mano/a)'i
respeetivamente, la diso
trucci6n de la mente. I
define como un fen6n
mientras que la destruec
Los gennenes de los sa
cion antes pasados) han 1
el agua lIevada a ebullici
tostadas en la cazuela.
hablaba a menudo de 12
la vida, shunya, y la gt
hunya, que corresponde
diferencia que acabam(
Los autores cristianos h
y la verdadera hesica
saber esto con el fin de
banal ~aunque util a su r
de relajaci6n profunda
Gran Silencio que corre
mas elevado, el de los \'
En el Advaita-Vedanta,
no-dualidad pura, la pn
un pensamiento sabre
poner limites a un sil
mente estable. En efect(
sonas cstan juntas (la i
la divinidad y yo), aunq
calladas durante algun
ran por desgracia a
momenta dado... Esta i:
mental que se da al sil
monio exclusivo dcl n,
encontramos la misma
como muestra, 10 que
Dogen: "Es neeesario
no surge ningun pen
cepto vida-y-muertc s(
no hay coyuntura ni dil
los fen6menos se escla
Cristialla: Vedanta y Hesicasmo
Jacques Viglle
Ser." (10) Junto con el "Yo
y" divino, la frase de la
la mas a Ramana Maharshi
ced silenciosos ... y sabed
s". (Ps 46, 11)
Si queremos orientamos en la jerarquia
de experiencias espirituales y saber 10
que es mas importante cumplir, debemos
distinguir entre manolaya y manonasha ­
respectivamente, la disoluci6n y la des­
trucci6n de la mente. La disoluci6n se
define como un fenomeno reversible,
mientras que la destrucci6n es definitiva.
Los gennenes de los samskaras (condi­
cionantes pasados) han muerto, como en
el agua Ilevada a ebulliei6n 0 las semillas
tostadas en la cazuela. Ma Anandamayi
habJaba a mcnudo dc la distincion entrc
la vida, shullya, y la gran vida, mahas­
hUllya, que corresponde mas 0 menos a la
diferencia que acabamos de estab\ccer.
Los autores cristianos hablan de la falsa
y la verdadera hesica. Es importante
saber esto con el fin de no confundir una
banal-aunque uti I a su nivel- experiencia
de relajacion profunda y el verdadero
Gran Sileneio que corresponde a un nivel
mas elevado, el de los verdaderos sabios.
nerosos metodos de medi­
consiste en observar fa
o de los numerosos pensa­
)iendo asi cl silencio. Esta
llmente utilizada en Occl­
nnente por los cartujos. Es
nder que, si bien todas las
mles se encaminan hacia el
:rean de por si, puesto que
hi, no es otro que el ser.
l perdido su bolsa en un
1istraccion, puede encon­
o su mente y haciendo
nde ha podido extraviarla.
1tra la bolsa perdida, no
jue el hecho de calmar su
ido esa bolsa. De la misma
rol de vuestra mente no es
ealizacion del Ser; aunque
1i, no 10 reconoceis, aim
)ajo control, puesto que no
rados." ( II )
i
's muy comun tomar como
nadhi el suefio profundo:
) desprovlsto de imagene~
:nta el silencio de las for­
i distinci6n entre el obser­
)bservado y la observacion
ce como fundida en una
:msciencia (prajiia-ghana.
10 en las Upanishads). EI
a misma fuerza centripeta
: el sueno profundo, pero
. inconsciente, el estado es
Icia.
En el Advaita-Vedanta, la doctrina de la
no-dualidad pura, la presencia misma de
un pensamiento sobre la divinidad es
poner limites a un silencio verdadera­
mente estable. En efecto, cuando dos per­
sonas estan juntas (la idea que tengo de
la di vinidad y yo), aunque puedan estarse
calladas durante algun tiempo, empeza­
ran por desgracia a hablar en algun
momento dado ... Esta importancia funda­
mental que se da al silencio no es patri­
monio exclusivo del no-dualismo hindu,
encontramos la misma noci6n en el zen ­
como muestra, 10 que decia el maestro
Dogen: "Es necesario saber que cuando
no surge ningun pensamiento, el con­
cepto vida-y-muerte se quiebra y que, si
no hay coyuntura ni diferenciacion, todos
los fenomenos se esclarecen". (12) Pode­
123
mos aun extraer de nuevo este concepto
de otro maestro zen, Taido (siglo XV):
"Salvo esta pacificacion, no existe
buddha. Este buddha no tiene una luz
especial, no vuela por el aire. Nuestro ser
es tal que, despues de nuestro nacimiento
hasta hoy, es el de un buddha innato y
sereno. iNo 10 dudeis!". (13)
En Occidente, Plotino fue la inspiraei6n
de aqueUos que querian orientarse hacia
una via de Conocimiento puro, cs decir,
la realizaei6n del Uno mas alia de toda
cuesti6n personal, como en el Vedanta.
Influencio a distancia al Maestro
Eckhart. Este evoca el est ado superior de
la experiencia espiritual de la siguiente
manera: "EI alma deja de actuar; no con­
tinua esforzandosc, esta plena; posee su
contemplaci6n interior... asi, la unidad se
introduce en ella. A mas unidad, mas
tranquilidad. Es entonces cuando la parte
del ser que conoce sc hace uno con el
conocedor (hen toi·gnosihenti)". (14)
El cristianismo y la hesica
Dios preferia manifestarse en la hesica
"Ia voz de un silencio sutil" como hizo
comprender a Elias (I R, XIX, 12) en el
monte Horeb. Este acababa de hacer
degollar a cuatrocientos cincuenta profe­
tas de Baal en el Monte Carmelo. (l R,
XVIII, 40) Sin mostrarse en el terremoto,
el huracan 0 el fuego, Dios hizo sentir
claramente a su profeta que no estaba por
la utilizacion de metodos violentos.
Igualmente, el Cristo, dejando a sus dis­
cipulos, les dijo: "Os dejo mi paz." Para
saber en que consiste esta paz, podemos
interrogar a los Padres del desierto. Sus
consejos directamente orientados hacia la
manera de sacar provecho del retiro y de
124
No-dualidad y Mistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo
la obtencion del silencio de la mente, tie­
nen finalmente una predisposicion mas
universal que las especulaciones teologi­
cas 0 las elaboraciones cristologicas, 0
incluso las eciesiasticas. Evidentemente,
las definiciones que intentan evocar la
hesica tienen una utilidad limitada: son
como el batiente de la puerta de una casa:
lIamamos, pero no sabemos si' la puerta
va a abrirse, ni qui en estara detnis.
Isaac el Sirio (tambien lIamado "de
Ninivc") evoca la hesica cuando "to do 10
que es plegaria cesa, y el alma ora mas
alia de la plegaria ... El santo olvida enton­
ces completamcnte, dejando todo 10 que
es de estc mundo, no habiendo en SI nin­
gun movimiento hacia cualquier cosa que
sea". (I5) Existen trcs grados de silencio:
el ciaustro, donde cl novicio prueba la paz
del modo de vida monastico que descubre,
"la arena" que correspondc al periodo en
que la cnergia intcrior despierta y donde
hace falta aprcnder a controlarla para
oricntarla hacia 10 divino y el tercer grado
cs Hel puerto", donde cl monjc disfruta dc
la union de todos los bienes, de la fuente
de luz, donde clmismo cs llamado dios y
hermano de Cristo." (16)
Jean Climaque, que paso su vida en el
monasterio de Santa Catalina al pie del
Monte Sinai y que inspiro con su obra La
Santa Escalera todo el monaquismo poste­
rior, no escatimaba elogios sobre el silencio
consciente: HEI silencio, con el conoci­
miento, es la madre de la plegatia, la libera­
cion de la cautividad, la preservacion del
fuego... el compafiero de la hesica, el
adversario del deseo de ensefiar... el arte­
sana de la contemplacion, un progreso
invisible y una ascension secreta." (17) Es
muy interesante notar que los dos ptimeros
estadios del progreso espiritual segun Jean
Climaque son la apatheia (la ausencia de
movimientos mentales) y la catidad. Es ahi
donde se reencuentran la vacuidad y la
com pasion, dos cualidades supremas e
inseparables del budismo mahayana. "La
apatheia es la naturaleza misma del alma.
las pasiones son un sobreaiiadido". (18) Lo
que viene a decir que el fin de la practica es
el reencuentro de la verdadera naturaleza
expresion que recuerda la enseiianza del
zen que afirma que cada ser tiene la natura­
leza de Buddha. (19)
La h6sica nace de la muerte de la plegatia en
el sentido habitual del terminG; Isaac el Sitio
dice: "Todo 10 que esta hecho de oracion 0
puede ser objeto de oraeion, esta dcllado de
la espititualidad. Y 10 que es cspititual es de
un orden que excluye todo movimiento y
toda plegaria". (20) EI pseudo-Dionisio es
aun mucho mas laconico al habJar de cste
tipo de expeticncias: HEI 6xtasis mas alia de
si mismo y de todo. (21) Para el ser ordina­
rio, el siJencio es una hetida, para el monje
una union. Se debe buscar estc estado con
intensidad, puesto que es cn 5i mismo deifi­
cante". "Tener sed de hesica es deificante",
dice uno de los Padres. Por ello, un senti­
miento de irrealidad del mundo, como en el
Vedanta, es una fase necesatia. Otra analogi a
chocante con cl no-dualismo hindu:
mediante la putificacion de la mente, el
monje se transforma en pura consciencia; el
abad Bessation hacia esta reflexion: HEI
monje debe ser como los querubines y los
serafines, unicamente ojo". (22)
La hcsica es un proceso de muerte y resu­
rreccion. EI ego debe realmente desapare­
eer. EI abad Poemen, euando era un
simple monje, fue a quejarse a su maestro
Ammonas del ruido que hacia un veeino.
Jacques Viglle
Este respondio: "Poeme
Ve, sientate en tu celda y
zon que desde hace ya u
tu sepu!cro". (23) Este (
corresponde a la liber.
"Con este saber y esta hu
nan de ello, cesan todas I
las tentaciones, ya que I
pueden luehar contra el q
SI mismo como nada". (
miento superior viene de
accion. (25) Nos encontn:
del Vedanta, donde la con
no puede ser coaccionad
acciones, ni tam poco a 1
una separacion entre los
accion orientada a purific.
de la gran experiencia y
compasion libre y gratuitc
Es una idea muy comun
amor superior (parabha
conocimiento (jiiana); un
Montc Athos, que sin (
mueho de la enseiianza r
llega a vivir la misma (
apatheia es el fin; as! pUi
como Dios. Ya no hay c
mientos impuros, ya no e
pasiones, se ha eonverti(
emocion, sin deseo; 61 e5
silcncioso es vasto com
nubes y sin viento: "Una
formarse sin un soplo d
misma manera, una pasior
sin un movimiento del per
Los que empiezan a inten
espiritual tienen a men
nocion de la ascesis. Exi
cia a tomar como prete)
istiana: Vedanta y Hesicasl1lo
'eso espiritual segun Jean
apathba (la ausencia de
tales) y la caridad. Es ahi
;ntran la vacuidad y la
cuaJidades supremas e
budismo mahayana. "La
:uraleza misma del alma,
n sobreafiadido". (I8) Lo
lue el fin de la pnietica es
la verdadera naturaleza
:uerda la ensefianza del
e cada ser tiene la natura­
.9)
a muerte de la plegaria en
del tennino; Isaac el Sirio
: esm hecho de oraci6n 0
! oraci6n, esta dellado de
. 10 que es espiritual es de
luye todo movimiento y
I) EI pseudo-Dionisio es
Ic6nico al hablar de este
s: "EI extasis mas alla de
'. (21) Para el ser ordina­
na herida, para el monje
~ buscar este estado con
lue es en Sl mismo deifi­
de hesica es deificante",
dres. Por clio, un senti­
I del mundo, como en el
necesaria. Otra analogia
no-dualismo hindu:
aci6n de 1a mente, el
. en pura consciencia; el
;la esta reflexion: HEI
10 los querubines y los
e ojo". (22)
:eso de muerte y resu­
.e realmente desapare­
nen, cuando era un
quejarse a su maestro
que hacia un vecino.
125
Jacques Vigne
Este respondio: "Poemen, tu aIm vives.
Ve, sientate en tu celda y graba en tu cora­
zon que desde hace ya un ai'lo reposas en
tu sepulcro". (23) Este estado de muerte
corresponde a la liberacion definitiva:
"Con este saber y esta humildad que ema­
nan de clio, cesan todas las luchas y todas
las tentaciones, ya que los dcmonios no
pueden luchar contra el que se considera a
si mismo como nada". (24) Este conoci­
miento supcrior viene de la fe y excluye la
aeci6n. (25) Nos encontramos en la optica
del Vedanta, donde la consciencia superior
no puede ser coaccionada a derivarse de
acciones, ni tampoco a producirlas. Hay
una separacion entre los dos niveles, la
acci6n orientada a purificar la mente antes
de la gran experiencia y a expresar una
compasi6n libre y gratuita despues.
Es una idea muy comun en India que el
amor superior (parabhakti) conduce al
conocimiento (jiiana); un monje actual del
Monte Athos, que sin duda no conoce
mueho de la ensefianza no-dual de India,
lIega a vivir la misma experiencia: "La
apatheia es el tin; asi pues, el hombre es
como Dios. Ya no hay en 1':1 mas pensa­
mientos impuros, ya no es esclavo de las
pasiones, se ha convertido en amor, sin
emocion, sin deseo; 61 es". (26) Este ser
silencioso es vasto como un eielo sin
nubes y sin viento: "Una nube no puede
forrnarse sin un soplo de viento; de la
misma manera, una pasion no puede nacer
sin un movimiento del pensamiento". (27)
Para tener este espacio de libertad y de
sileneio, el monje puede tambien viajar al
extranjero (xbliteia). Ahi no sera pertur­
bado por el medio que ha abandonado, y
no comprendera las habladurias que haya
a su alrededor. De todas maneras, parece
ser que no todos los Ancianos han conse­
guido este estado de hesica. Uno de ellos
confesaba: "En verdad, hace ya setenta
anos que llevo estos habitos, y en ningun
momento he encontrado reposo ... ". (28)
i,Es a causa de esta dificultad 0 sc debe a
otras razones el que el monaquismo poste­
rior parezca haber puesto menos clara­
mente la atenci6n sobre la hesica que los
antiguos Padres? No se dejaron invadir
por eI ritual de la recitacion de textos,
ciertamente adecuada para calmar las
mentes de los novicios, pero mas discuti­
ble para los misticos que habian a1canzado
la madurez. En este sentido, en Occidente,
la condena del quietismo, ligada frecuen­
temente a intrigas de la corte, (,no fue tam­
bien perjudicial? La mistica de los
monjes, i,debe ser obligatoriamente del
tipo de la de los feligreses, salvo si son
investidos a tiempo completo? i,No cedie­
ron acaso al pietismo ambiente temiendo
perder por la via directa de la h6sica el
consuela que les suponia la imagen que se
habian hecho de Jesus? Parece que un
monjc actual del Monte Athos encucntre
sentido al afinnar: "Algunos entendieron
las palabras de Jesus, I11UY pocos enten­
dieron su silencio". (29)
Parte II. Psicologia de la ascesis
Los que empiezan a interesarse por la via
espiritual tienen a menudo una falsa
nocion de la ascesis. Existe una tenden­
cia a tomar como pretexto los excesos
ascetieos de la historia monastica para
abandonar todo esfuerzo y no hacer nada.
Entre estos dos extremos existe un punto
medio que hay que encontrar, por ello
126
No-dualidad y Afistica Cristiana: Vedanta y Hesicaslllo
exploraremos con detenimiento la ascesis
excesiva, definiremos en que consiste la
ascesis justa -como desidentificarse del
cuerpo sin causarle dana alguno-, y bus­
caremos cuales son las causas que, en la
tradicion cristiana, favorecieron particu­
larmente la ascesis violenta.
Los monjes no son gente ordinaria. Desa­
ITollan por su practica una concentracion
de espiritu y una intensidad poco comu­
nes. Para comprender las dificultades con
que se encuentran, las teorias elaboradas
por psic610gos sin ningun tipo dc expe­
riencia en el rctiro y la mcditacion cons­
tante carecen de interes. Por el contrario,
una psicologia cspiritual comparada
puede proporcionar referentes solidos de
otras tradiciones. Hablaremos pucs dc
nociones de ascesis justa y de desidenti­
ficaci6n del cuerpo tanto en India como
en el Cristianismo. En India, la asccsis
excesiva estaba muy cxtendida en tiem­
pos de Buddha. £:1 mismo 10 habia practi­
cado antcs de definir la regIa de Ia justa
mcdida. La cuerda del instrumento musi­
cal no debe estar ni muy tensa ni muy
floja, para poder dar el tono justo. Las
antologias dc las palabras dc los Padres
del desierto evitan las declaraeiones
aseetieas a ultranza. Por mi parte, senti la
curiosidad de leer algunas de sus obras
completas y eneontre ideas de un asee­
tismo pavoroso mezcladas dc vez en
cuando con palabras sublimes. lntentare­
mos esclarcecr csto (litimo.
La ascesis excesiva: los hechos
La esealada de la ascesis era un hecho
muy cOITicntc en el Cristianismo. La
referencia a la Cruz de Cristo cra la justi­
ficacion oficial de estos excesos. Ni el
mismo San Pablo dudaba en decir "Dis­
ciplino mi cuerpo y 10 esclavizo". (Cor 9.
27) Rabla tambien de todas las pruebas
que tuvo que soportar, el hambre, el frio.
las persecuciones, etc ... Estas se convir­
tieron en una especie de referencia para
los monjes, si bien su ausencia de voca­
cion mlSlOnera les exponia mucho
menos, a priori, a los imprevistos de una
vida activa e itinerante. Macario, uno dc
los primeros anaeoretas despues de San
Antonio, dio una definici6n del monje.
sin ningun tipo de ambigiledad: "EI
monje es aquel que practica siempre la
violeneia". (1) Esto parece a todas luces
del todo eontrario a la dulzura de la
hesiea ...
Empcecmos por un cjcmplo caricatu­
rcsco dc la asccsis violenta: "San" Eusc­
bio se habia atado una cadcna alrededor
del cuello ligada a su vez a los rinones; al
scr demasiado eorta, estaba obligado a
mantencrsc constantemente curvado.
Conservc) este artilugio consigo pcrma­
nentemente durante euarenta an os, basta
su muertc. (2) Este ejemplo ilustra de
manera fisica, si puede decirse asi, cl
ricsgo evidentc de desviaeion patol6gica
que se eseonde tras la necesidad dc
humillaci6n voluntaria. Otro monjc sc
mantuvo durante veinte anos sin levantar
la vista ... (3) Otro ejemplo: tras Simc6n cl
Estilita, sc hizo habitual subir a una
columna a modo de cclda. Sin embargo,
como era muy difieil pennanceer solo,
los estilitas se reagrupaban cn comunida­
des. Una de elias, en Gcthsemani, eI
lugar de la agonia y los grandes sufri­
mientos de Cristo, como por casualidad,
contaba con un eentenar de miembros.
Algunas veees no se eomprendian, sobre
todo cuando eran de tendcneias teol6gi­
Jacques Vigne
cas distintas y se in(
columna a otra. (4)
En otros lugares existia
que habian hecho voto
mas que a cuatro patas :
o cualquier otra cos
encontrar por el suelo.
virse de las manos. (5
rion, pcnnaneci6 dun:
eon los brazos en alto
ria. (6) Una ascesis n
monaquismo oriental e
mas. Llorar disminuye I
la tendeneia a la c6lera
esc sentido, la compun
presenta como el anna
monje. Aun aSl, los ex
rosos y el limite de una
carada muy vago. EI A
tanto que perdio las pe
monje que 110r6 inil
durantc dos anos, dia
principia, esas lagrima:
las de un nino pequeno
y alcgria; pcro cl des Ii
dcpresion franca era m1
mas son un mensaje de
la atcnei6n de la madr
rcec, es muy posible q1
rcacci6n de desespero.
bras de un cierto nl!
expresaban el miedo a
a pecar durante las (jlti
quedaban de vida. Est
alguno un signa dc eX!!
En el gencro ascetico. J(
easo excelente para su
en el monasterio a la
anos, se puso bajo la tut
tyriyus - iya de por SI .
Mas tarde, escribib "La
'ana: Vedanta y Hesicasmo
dudaba en decir "Dis­
110 esclavizo". (Cor 9,
I de todas las pruebas
rtar, el hambre, el frio,
etc ... Estas se eonvir­
:cie de referencia para
1 su ausencia de voca­
Ics exponia mucho
los imprevistos de una
rante. Macario, uno dc
oretas despucs de San
definicion del monje.
de ambigiiedad: "E!
ue practica siempre 1a
to parece a todas luces
o a la dulzura de la
un ejcmplo caricatu­
; violenta: "San" Euse­
) una cadena alrededor
su vez a los rinones; al
Irta, estaba obligado a
stantemente curvado.
:ilugio consigo pemla­
te cuarenta anos, basta
ste ejemplo ilustra de
puede decirsc asi, el
! desviacion patologica
tras la necesidad de
ntaria. Otro monje se
veinte anos sin levantar
;jemplo: tras Simeon el
habitual subir a una
de celda. Sin embargo,
ificil pennanecer solo,
srupaban en comunida­
IS, en Gethsemani, el
a y los grandes sufri­
, como por casualidad,
:entenar de miembros.
se comprendian, sobre
de tendencias teol6gi­
Jacques Vigne
cas distintas y se increpaban de una
columna a otra. (4)
En otros lugares existian los "pacientes",
que habian hecho voto de no desplazarse
mas que a cuatro patas y de comer hierba
o cualquier otra cosa que pudieran
encontrar por el suelo, todo ello sin ser­
virse de las manos. (5) E! abate Bessa­
rion, pennaneci6 durante catorce dias
con los brazos en alto a modo de plega­
ria. (6) Una ascesis muy comun en el
monaquismo oriental era el de las lagri­
mas. L10rar disminuye el sentido del ego,
la tendencia a la c61cra y a los deseos. En
esc sentido, la compunci6n (penthos) se
presenta como el anna a escoger por el
monje. Aun asi, los excesos eran nume­
rosos y ellimite de una depresi6n en mas­
carada muy vago. El Abate Arsene 1I0r6
tanto que perdi6 las pestanas, y hubo un
monje que llor6 ininterrumpidamente
durante dos anos, dia y noche. (7) En
principio, esas lagrimas debian ser como
las de un nino pequeno, mezcla de dulzor
y alegria; pero el deslizamiento hacia la
depresi6n franca era muy faciL Las lagri­
mas son un mensaje del nino para llamar
la atenci6n de la madre. Si esta no apa­
rece, es muy posible que se presente una
reacci6n de desespero. Las ultimas pala­
bras de un cierto numero de monjes
expresaban el miedo a la condenaci6n, 0
a pecar durante las ultimas horas que Ies
quedaban de vida. Este no es en modo
alguno un signo de exito.
En el genero ascetico, Jean Climaque es un
caso excelente para su estudio. Ingresado
en el monasterio a la edad de dieciseis
anos, se puso bajo la tutela del Abate Mar­
tyriyus - iya de por si todo un programa!
Mas tarde, escribi6 "La Escalera Santa", el
127
libro de cabecera del Abate de Rance, eJ
refonnador ascetico de la Gran Trampa en
el siglo diecisiete. Entre los muchos sabios
consejos sobre la plegaria y las eta pas de la
vida, encontramos "perJas" de este genero:
"Las personas mas avanzadas que he
encontrado en el desierto cran monjes sin­
ceramente convencidos de ser indignos y
de haber fracasado en su vocaci6n". (8) 0
tambien: "Los malos espiritus, ftagelados
por tu plegaria, se desvaneceran como ante
fuego". (9) Las ganas de beber (jagua!)
deben ser combatidas con el pensamiento
de las llamas del infierno, la sed de los
oprimidos es un signo de perfecci6n.
Aconseja a los monjes el ser "como prisio­
neros de minas golpeados a todas horas
por sus carceleros". (10) No estamos muy
lejos en este punto de un campo de con­
centraci6n espiritual... EI vencno del
pecado contamina tambien los medios de
salvaci6n: "Con cada comuni6n, ruega
para que esta no sea tu condena".
La autoftagelaci6n psicol6gica es tan
absurda como la autot1agelaci6n fisica.
En la ultima linea de una obra, por otro
lade intercsante, sobre la vida monastica
cristiana, encontramos la palabra "dia­
blo". Esto es 10 que es lamentable cuando
es sabido que siempre se acaba por regre­
sar a 10 que enfoca la mente a largo
plazo. Hay que esperar praeticamente
hasta el final del volumen de las "PaJa­
bras de los Ancianos" para encontrar 10
que podria evocar un consejo de visual i­
zaci6n positiva: "Que tu pensamiento sea
siempre eJ Reino de los Cielos, y muy
pronto 10 recibiras en herencia". (II)
Antes de sumergimos de Ilene en la psi­
cologia de los excesos de la ascesis,
intentemos ya comprender 10 que es la
128
No-dualidad y Afistiea Cristialla: Vedanra y Hesicasmo
ascesis justa y la relacion equilibrada del
meditador con su cuerpo. Segun mi opi­
nion, la ascesis justa consiste en aceptar
los sufrimientos generados por la prlk­
tica de esta disciplina; la ascesis excesiva
en la provocacion de estos. Un Padre
decia: "No es suficiente renunciar a la
propia vida, hay que odiarla". (12) Este
proposito podria constituir una buena
definicion de la ascesis excesiva. Por el
contrario, la ascesis justa me parece evo­
cad a por Simone Weil en su definicion de
la humildad: "Lo que sc acerca mas a la
verdadera humildad es la inteligencia. EI
epasceta ya ha sido suficientemente criti­
cado en el interior mismo de la comuni­
dad cristiana". EI Abate Poemen decia:
"Todo 10 que sobrepasa la mesura pro­
viene del demonio". (13)
Sin embargo, Poemen, queriendo suavizar
su posicion, no puedc cvitar hacer apare­
ccr de nuevo en cscena a los demonios y
cae de nuevo en un conflicto de contrarios
sin fin. Par el eontrario, la Bhagavad-Gita,
gran texto espiritual hindu, toma mueho
cuidado en precisar simplemcnte que el
yoga no es para los que comen mucho 0
muy poco, 0 los que duennen demasiado
o demasiado poco. Ninguna mencion a los
diablos. La via del Centro se revelo tan
importante en el Budismo, que dio su
nombre a una de sus eseuelas principales,
el Madhyamika. Es interesante hacer men­
cion que la palabra "centro" no se utiliza
cn su aceptaeion mas comun; el "centro"
entre el frio y el calor no es 10 templado,
sino que existe un tercer tennino que
sobrepasa la dualidad frio-calor.
Segun el pensamiento indio, el sufri­
miento viene de la ignorancia; es pues por
medio de la comprension que podemos
encontrar el remedio. Esta nocion parece
estar de acuerdo con la psicologia
modema. De una comprension (viveka)
que no es tan solo intelectual, sino vivida
profundamente en meditacion, proviene el
desapego (vairagya). En este camino, la
experiencia de la felicidad interior es un
motor muy potente. Una vez se pregunto a
un Anciano porque el alma regresaba una
y otra vez a las cosas transitorias e impu­
ras. "Es porque aun no ha probado el dul­
zor de los bienes celestiales. Quien 10 ha
probado busca a Dios con todo su cora­
zon; quien no 10 ha probado vuelve rapi­
damente a las cosas impuras". (14) No
hace falta creer que la mezcla de sufri­
miento y felicidad sea patrimonio de los
ascetas. Los que se sienten invadidos por
una pasion amorosa viven ese estado ta111­
bien de fonna intensa. Igualmente, los que
practican deportes de competicion sufren
mucho por su cuerpo, pero encuentran
placentero cl hecho de sobrcpasar cons­
tantemente sus propios Iimites. Tambien
podemos de manera razonable defender la
tesis de que el menospreeio patologico del
euerpo cs mas grave en el caso de un alpi­
nista que arriesga su vida para conquistar
una cumbre que ya ha sido vencida 36
veccs, que en el de un monje del desierto
que ayuna porque eree que ello Ie propor­
dona un espiritu mas ligero. EI alpinista
eorre verdaderamente riesgo de muerte,
mientras que el monje puede bencticiarse
de su ascesis para obtener una santidad
meJor.
La violeneia en la ascesis viene del des­
eonocimiento de una ley fundamental
del psiquismo: el miedo al deseo
aumenta el deseo en sf, y la colera contra
la propia colera no haee mas que incre­
mentarla. A eorto plazo podemos opo-
Jacques Vigne
nernos violentamen
ganar, pero a largo r
como un nino malt
tomara su rcvancha '
todas las maneras p(
funciona por alten
opuestos. Buscando
la fuerza, no haeemc
a nosotros mismo:
teniendo un ego y (
un fondo de maniqU(
dad dc rebasar los (
ejemplo en el caso
Monte Athos que d
tiene otros enemigo.
rogar par ell os cs ir
dualismo esta en la n
logicamente a la d
realmente el deseo Sl
la perla de la castida
libre del miedo a qu
(por los dcmonios),
alcanzado el santua:
deeir, cl pais del repc
Sin embargo, scria i
Padres no ten ian un,
sobrepasar los pares
rio el Teologo deci<
gran pecador es agr,
eonsiderarse eomo s
verse tal eual uno cs
bajo, parecc medioe
contra las pasiones. s
de principiantc, debe
Sirio aeonscjaba: "Val
pasiones con eI rCI
mayores, que intenla
San Nilo decia igualn
inicia con 1I0ros y cc
necesario que este an
nes se eonvicrta cn
pasion". (18) Otro in
'W: Vedanta y Hesicasmo
Jacques Viglle
Esta nocion pareee
con la psicologia
omprensi6n (viveka)
ltelectual, sino vivida
editaci6n, proviene el
'. En este camino, la
Iicidad interior es un
Jna vez se pregunt6 a
~I alma regresaba una
,s transitorias e impu­
no ha probado el dul­
lestiales. Quien 10 ha
os con todo su eora­
probado vuelve nipi­
.s impuras". (14) No
~ la mezcla de sufri­
,ea patrimonio de los
sienten invadidos por
viven ese estado ta111­
,a. Igualmente, los que
Ie competicion sufren
rpo, pero encuentran
, de sobrepasar eons­
pios limites. Tambien
razonable defender la
oSpreeio patologico del
: en el caso de un alpi­
u vida para eonquistar
a ha sido vencida 36
un monje del desierto
ree que ello Ie propor­
laS Iigero. EI alpinista
lte riesgo de I1merte,
nje puede beneticiarse
obtener una santidad
nemos violentamente a nuestra mente y
ganar, pero a largo plazo esta se vengara,
como un nino maltratado por su padre
tomara su revancha en la adoleseencia de
todas las maneras posiblcs. El psiquismo
funeiona por altemaneia de pares de
opuestos. Buseando humillar el ego por
la fuerza, no hacemos mas que probamos
a nosotros mismos que continuamos
teniendo un ego y que es fuerte. Existe
un fondo de maniqueismo en la incapaci­
dad de rebasar los contrarios, como por
ejemplo en cl caso de este monje del
Monte Athos que decia: "EI monje no
tiene otros enemigos que los demonios:
rogar por ellos es imposiblc". (I5) Este
dualismo esta en la mayo ria ligado psieo­
16gicamente a la diticultad de superar
realmente el deseo sexual: HEI que posee
la perla de la castidad no puede sentirse
libre del miedo a que esta Ie sea robada
(por los demonios), mientras no haya
alcanzado el santuario de la lumba, es
decir, el pais del reposo". (16)
I.
ascesis viene del des­
ma ley fundamental
~I miedo al deseo
n si, y la c61era contra
) hace mas que incre­
plazo podemos opo-
Sin embargo. seria injusto decir que los
Padres no tenian una intuiei6n de como
sobrepasar los pares de opuestos. Grego­
rio el Teologo decia: "Tomarse por un
gran pecador es agradablc, al igual que
considerarse como santo 0 genio. Pero,
verse tal eual uno es, ni mas alto ni mas
bajo, pareee mediocre". (17) La eolera
contra las pasiones, senal de un dualismo
de prineipiante, debe evitarse, e Isaac el
Sirio aconsejaba: "Vale mas adonneeer las
pasiones con el recuerdo de virtudes
mayores, que intentar resistirse a estas".
San Nilo decia igualmente: "Ia plegaria se
inicia con 1I0ros y contrici6n, pero no es
necesario que este anna contra las pasto­
nes se convierta en Sl misma en una
pasion". (18) Otro indicio de superacion
129
de las dualidades se manitiesta en la capa­
cidad de ciertos monjes de aceptar las ten­
taciones con reconoeimiento: a menos que
no fuese un gusto desmedido por los sufri­
mientos auto-inf1ingidos. En cl eontcxto
devocional, la gracia es 10 que puede sal­
vamos de la triste dualidad del combate
infinito entre cl Bien y el Mal, pero aim es
necesario que estc presente. En caso con­
trario, caeremos en otra dualidad, la de
ausencia 0 presencia de gracia, la dualidad
provoea gran eantidad de sufrimiento en
la evoluci6n espiritual dcl cristiano. Rara­
mente se encuentra en los Padrcs la expre­
sion de una via de meditaci6n que uti lice
la observacion de la mente tal como es.
No obstante, una aproximaeion a est a
pnictica podria ser este consejo de San
Nilo: "Un hombre ora verdaderamente
cuando ofrece todos sus primeros pensa­
mientos aDios".
Respeto y desidentificacion del cuerpo
Segun cI Vedanta, existen tres tactores de
igual importancia: la desidentiticacion res­
pecto al cuerpo, respecto al ego y con rcla­
cion al Dios personal. Cuando conseguimos
desapegamos del cuerpo, el resto sigue. En
el fondo existe una intima relaci6n entre
idolatria, autolatria y somalatria. Todas las
tradiciones se encuentran con la necesidad
de moditicar la consciencia habitual que
tenemos del cuerpo, incluidos el tantrismo y
el chamanismo. i\eurotisiologicamente, el
uso de drogas alucinogenas esta unido a una
modificaci6n de la consciencia del esquema
corporal. Guiados de la fonna correcta, 10
que es bastante raro en este campo, po de­
mos servimos de esta expenencia para tra­
bajar estructuras demasiado rigidas de
personalidad neurotica y ampliar nuestra
visi6n del mundo.
130
l'io-dualidad y Afistica Cristialla: Vedanta y Hesicasmo
De los muchos autores cristianos, perte­
nece muy probablemente a Maximo el
Confesor el merito de haber puesto mejor
en relieve la relacion entre el apego al
cuerpo y el apego al ego, que el llama
"philautie". Irenee Hausherr, gran espe­
cialista en los Padres griegos, ha consa­
grado su obra a este tema, anadiendo al
mismo esta definicion de Maximo sobre
la philautie: "Es la amistad apasionada e
irracional por el cuerpo (19) ... La phi­
fautie, siendo como ya he dicho el princi­
pio la madre de todos los vicios, una vcz
destruida, sc \lcva consigo toda su poste­
ridad y sus retonos. Desaparece, y no
puede subsistir en parte alguna ningllTI
rastro de malicia". (20) Detnis del len­
guaje ascetico de su epoca, M ..l ximo va
I1lUY lejos: de hecho, sostiene, como el
vedanta, que el desapego complcto del
cuerpo y el ego lleva a la perfeccion, al
estado de liberacion en vida (jivall­
lJ1ukta). (,Significa esto que debemos
danar cI cuerpo? No, el verdadero pro­
ceso es un proceso de consciencia: "No
sc trata de suprimir los sentidos 0 los
objetos de los sentidos, sino la inclina­
cion del alma hacia ellos". (21)
Nisargadatta Maharaj no era ningun
ascela que viviese en cl desierto. Estaba
casado, lenia varios hijos y una pequcna
tienda en Bombay; lodo clio no Ie impe­
dia insistir persistentementc en la neccsi­
dad del desapego: "Una vez el desapego
del cuerpo-mente ha tenido lugar,
Brahma (el Absoluto) vendra con sus
manos unidas a vuestros pies ... " (22) En
el pensamiento tradicional el euerpo
corresponderia a 10 que Winnicot lIama­
ria un objeto transieional. Seria como ese
trozo de tela de escaso valor, pero al que
un bebe se siente alado con todo su eora­
zon y del cual no quiere separarse bajo
ningun concepto.
La consciencia del cuerpo
La nueva consciencia que desarrolla la
persona que ha lIegado a un estado de
meditacion avanzado es un estado para­
dojieo, asoeiado a un despertar. Podemos
ver una evocacion de este estado cuando
San Pablo habla de una experiencia que
fue decisiva para el y Ie pennitio funda­
mentar su autoridad espiritual en 10 que
el mismo vio y experimcnto directa­
mente. Decia, hablando de sl mismo:
"Conozco un hombre en Cristo, que
catorce anos ha -si en el cuerpo 0 fuera
del cuerpo no 10 se, Dios 10 sabe-, fue
arrebatado hasta el tercer cicio ... , y oyo
palabras inefables que el hombre no
puede expresar". (II Cor 12, 2-4). Gre­
goire Palamas lucho en el siglo XIV para
que se reconociese la importancia del
cuerpo en la plegaria, oponiendose a
Balaam, un brillante profesor de filosofla
en la corte de Constantinopla, de una
manera mas 0 menos intelectual. Gre­
goire afirmaba 10 siguiente: "Decimos
que es un mal estar pensando en el
cuerpo; pero estar en el cuerpo no es un
mal, puesto que tam poco es malo".
La paradoja de la consciencia del cuerpo
es esta: es neccsario que la cOl1sciencia
descienda al cuerpo para vcr como est a
ligada al mismo; solo despues podra pen­
sar seriamente en cortar esas ataduras. En
ese momenta el desapego no sera un
debilitamiento, pero si una renuncia que
perrnitira identificarse con el Ser, su ver­
dadera naturaleza; es en ese sentido que
en el Zen se repite: "Ir mas alia del
cuerpo y de la mente" 0 que Vivekananda
Jacques Vigne
decia: "Son las p'
que se identit1can c
piadosamente "de
les!"". (23) Hay ql
medio entre el cuid
cuerpo. Si s610 tene
cuidado, nos decan
zaeion pura y la rep
nemos e) cui dado
decantamos por la
especie de pansexm
progreso 10 que pre
desde el punto de v
riamos a centramos
con un egoismo pi
observa muchas ve
\levan afios de psic
tos con correr tras
deseos cOl1scientes
las personas, persigl
sin \ograr nUl1ca su '
Lo interesante de vi
los pensamientos pr
disminuyen bastant,
podemos observar
base corporal. p·~ro.
que esta toma de co
pafiada de cicrto de~
da vueltas sobre el
Asccta reconocia,
especic de estatus (
en quien consegui:
ctlerpo: "Aquel qw
10 Divino, ha lIegac
cion del alma haci
de todo limite, au
ctlerpo ... Para el c
natural no sera nin
vida en Dios, cuy.
alia de toda comp
indios como Ramd
hablaban de su Cl
I.
Vedanta y HesicaslIlo
iere separarse bajo
lerpo
que desarrolla la
do a un estado de
es un cstado para­
dcspertar. Podemos
este estado euando
na expcnencla que
. Ie permitio funda­
!spiritual en 10 que
perimcnto directa­
ndo de si mismo:
re en Cristo, que
11 el euerpo 0 fuera
Dios 10 sabe-, fue
~rcer cielo. .. , y oyo
lue el hombre no
Cor 12, 2-4). Gre­
:n el siglo XIV para
la importaneia del
'ia, oponiendose a
)[ofesor de filosofia
;tantinopla, de una
)s intelectual. Grc­
guiente: "Decimos
Ir pensando en el
el cuerpo no es un
:Jco es malo".
1
scicncia del cuerpo
que la consciencia
para ver como esta
despues podra pen­
ar esas ataduras. En
.apego no sera un
.1 una renuncia que
: con el Ser, su veren ese sentido que
: "Ir mas alia del
o que Vivekananda
Jacques Vigne
decia: "Son las personas estupidas las
que se identifican con el cuerpo y gimen
piadosamente "debiles, somos debi­
les!"". (23) Hay que encontrar el punto
medio entre el cuidado y el dominio del
euerpo. Si solo tenemos el dominio sin e\
euidado, nos decantamos por la morali­
zaeion pura y la represion. Si solo mante­
nemos el euidado sin e\ dominio, nos
dccantamos por la hipocondria 0 una
especic de pansexualidad que mas que un
progreso 10 que provoca es una recesi6n
desde el punto de vista espiritual. Volve­
riamos a centrarnos en nosotros mismos,
con un egoismo puro, como el que se
observa muchas veces en personas que
!levan arios de psieoanalisis: no conten­
tos con COITer tras la satisfaccion de los
deseos conscientcs como la mayoria de
las personas, persiguen los inconscientes,
sin lograr nunca su objetivo.
Lo interesante de vivir en soledad es que
los pensamientos provinentes del exterior
disminuyen bastante, la mente se frena y
podemos observar mas claramente la
base corporal. Pero, tambien es necesario
que esta toma de consciencia vaya acom­
pafiada de cierto desapego, si no la mente
da vueltas sobre ella misma. Marcos el
Asceta reconocia, como Maximo, una
especie de estatus de "liberado viviente"
en quien conseguia desidentificarse del
cuerpo: "Aquel que, gracias al deseo de
10 Divino, ha llegado a superar la inclina­
cion del alma hacia el cuerpo, se libera
de todo limite, aun estando dentro del
cuerpo ... Para el que hace eso, la vida
natural no sera ningun obstaculo para su
vida en Dios, cuya naturaleza esta mas
alia de toda comprension". (24) Sabios
indios como Ramdas y Ma Anandamayi
hablaban de su cuerpo en tercera per­
131
sona. Maximo el Confesor expresa el
mismo estado de espiritu en la primera
pagina de las Cuatro Centurias sobre el
amor: "Un hombre que se ata aDios con­
sidera las cos as visibles como no existen­
tes, inc1uido el propio cuerpo, como si no
les perteneciese".
La eomprension profunda de la paradoja
del cuerpo pennite reconciliar dos inten­
clones aparentemente contradictorias de
Nietzsche y Francisco de Asis. EI pri­
mero decia mas 0 menos en Zaratustra:
"Existe mas sabiduria en vuestro cuerpo
que en vuestra razon". Y el segundo con­
sideraba que era necesario tratar al pro­
pio cuerpo como "hennano del Asno".
La sabidurla que proviene del cuerpo no
puede existir sino por el hecho de que el
cuerpo es consciente. Dc la misma
manera, cuando el asno es bien condll­
cido, Sli energia se orienta por una eons­
ciencia. En ambos easos, la meta
perseguida es esta consciencia-sabidu­
ria, y no por el cuerpo como una especie
de objeto de consumacion seg(m 10 que
desearia un cierto espiritu de la epoea
actual. A veces, es necesario saber esco­
ger entre el espiritu de la cpoca y el espi­
ritu a secas.
El sabio, como el nino, tiene el pensa­
miento muy Jigado al cuerpo. Mediante
la meditacion, ha encontrado las vias
directas que Ie permiten ir a la base de la
cumbre. Ha despertado la kundalini, la
energia interior, a la cllal volveremos en
la parte consagrada al "hesicasmo y
yoga", a las evocaciones indirectas de
este despertar que realizan algunos
Padres. Lo que crea la verdadera separa­
cion entre el cuerpo y el espiritu es la
mente vital, como una especie de capa de
132
No-dualidad y A1istica Cristiana: Vedal1ta y Hesicasmo
nubes entre la tierra y el cicIo. La cons­
ciencia de la persona con un nivel avan­
zado de practica de meditacion atraviesa
esta capa como un rayo. La mente vital
se debate sin cesar entre el miedo y el
deseo; no es una cuestion de "pecado",
sino de su naturaleza de oscilar entre
estos dos extremos, como cl tic-tac del
reJoj; pero cuando este tic-tac se para,
gracias a las practicas espirituales, esta
oscilacion acaba, deteniendose en su
linea de cquilibrio -10 que corresponde en
el caso del meditador a la conccntracion
de energia en la columna vertebral, la
sllshunJna- en esc momenta se unen
CicIo y Tierra, el Espacio entra en fusion
y el Tiempo es destruido.
La psicologia de la ascesis excesiva y
de la angustia en el cristianismo
Hemos dado ya brevemcnte ciertos ele­
mentos de comprension de las causas de
la ascesis cxccsiva. Ahora intentarcmos
profundizar y extcndernos un poco mas
en la problematica del sentido del sufri­
miento, euestion que se presenta en toda
tradici6n espiritual, pero que en cierta
manera ha sido resuelta en el eristia­
nismo. Sus respuestas han impregnado
nuestro fondo cultural. Una prim era
causa de la ascesis excesiva, y mas gene­
ralmente del sufrimiento auto-int1ingido,
es la c6lera redirigida contra uno misl11o.
Dcsde el punto de vista psieol6gico. la
pulsion de suieidio y la pulsion de
muerte cstan en general intimamente
Jigadas. Tambicn en India, los ascetas
(tapasvi-s) eran eonoeidos por su e6lera.
Sus vietimas pod ian estar entre las ninfas
(apsara-s) ilusorias que venian a tentar­
les y a las cuales habian sucumbido con
anterioridad . .M ientras permanecian suje­
tos al deseo, 0 a su inverso que es la
colera, no podian alcanzar la realizacion.
EI placer que se encuentra en el sufri­
mien to es una causa mas que evidente de
la ascesis excesiva, pero aplicar a ella la
etiqueta de "masoquismo" no es una
explicaci6n en si misma. Parece ser que
una de las leyes de la medicina popular
"cuanto mas amarga es la medicina,
mejores son sus efectos" podemos
encontrarla tambien camuflada en el
plano psicoespiritual: "Cuanto mas dano
hace, mejor es su beneficio",
pro­
blema es que, en general, las cosas no
funcionan de esta manera: esta especie de
psicologia popular esta a menudo tan
equivocada como su hom610ga en medi­
ema.
Jacques Vigne
tismo. Un experim
mal, como ejemp
vista: un pobre pel
descargas electrica
desata y recibe las
un recinto del qu
tando, pero curi(
dado una vue\ta ra
fiere quedarse den
electrocutado: es
cierto modo qued,
propio infiemo. SI:
experimento 10 l1al
abandono condici
helplessness). (25)
La costumbre a un
sufrimiento ha sid
mente estudiada. \
historia tradieional
estaban peseando (
una tempcstad que
junto con sus cestr
reeogidas por un
permiti6 dormir en
vez acostadas, no
reposo; Ics faltaba
sintieron obligadas
tas de pescado qtH
orilla, para poder d
euenta el mismo ti
que sea neeesario r,
interpretar estas Cll
monje: "Cuando r
me siento abandon<
La propension al sufrimiento puede
tomar proporciones de delirio dc conde­
naei6n eterna, como en el caso de Jean­
Joseph Surin, el capellan de las hermanas
de Loudun antes de la Revoluei6n. Es un
hccho ciasico en psieopatologia, sobre­
todo en fucrtes deprcsiones (mclaneo­
lias), pero se prescnta en formas
atenuadas: aun sin sentirse eompleta­
mente eondenado, uno tiene la impresion
de estar constantemente en el infiemo y
de estar obligado a pcrmaneeer en 61. EI
monje toma entonces 10 que era un
pasaje difieil de su practica por una
nonna. Esta complaeencia de algunos en
sentirse en el infiemo podria ser califi­
cada como anti-cxtasis.
La voluntad de aSI
Una explicaciQn simple de esta propen­
sion a apegarse al sufrimiento como tal
podria ser la inercia, 10 que se eonoce
como tamas en psicologia india, 0 el
"eondicionamiento simple" en conduc-
La palabra "aseetis
"askesis", que sigl
sentido de un ejerc
estar que se siente
intensiva de eual
I'cdal1ta y Hesicasmo
inverso que es la
1zar la realizaci6n.
Jentra en el sufri­
las que evidente de
:ro aplicar a ella la
ismo" no es una
na. Pareee ser que
I medicina popular
es la medicina,
:fectos" podemos
camuflada en el
"Cuanto mas dana
eneficio". El pro­
leral, las cosas no
era: esta especie de
,ta a menu do tan
IOm610ga en mcdi­
;ufrimiento puede
:: delirio de conde­
:n el caso de Jean­
.an de las hcrmanas
Revoluci6n. Es un
:opatologia, sobre­
'esiones (melanco­
senta en fonnas
sentirse completa­
) tiene la imprcsi6n
He en el infiemo y
:nnanecer en el. EI
:s 10 que era un
practica por una
:ncia de algunos en
) podria ser califi­
s.
)Ie de esta propen­
frimiento como tal
10 que se conoce
ologia india, 0 el
mple" en conduc-
133
Jacques Vigl1e
tismo. Un experimento de psicologia ani­
mal, como ejemplo de este punto de
vista: un pobre perro esta atado y recibe
deseargas elcetricas. Seguidamente, se Ie
desata y recibe las mismas descargas en
un recinto del que puede escapar sal­
tando, pero curiosamente, tras haber
dado una vuelta nipida por la jaula, pre­
fiere quedarse dentro gimiendo que ser
electrocutado: es mas "c6modo" en
cierto modo quedarse d6cilmente en el
propio infiemo. Seligman, autor de este
experimento 10 llama el "sentimiento de
abandono condicionado" (conditioned
helplesslless). (25)
La costumbre a un estado agradable 0 al
sufrimiento ha sido una cucdti6n larga­
mente cstudiada. Vivekananda cuenta la
historia tradicional de unas l11ujeres que
estaban pescando cuando les sorprendi6
una tempestad que les arroj6 a la costa
junto con sus cestas de pescado. Fueron
recogidas por un hombre rico que les
permiti6 dormir en su rosaleda. Pero una
vez acostadas, no conseguian encontrar
reposo; les faltaba algo. Finalmente, se
sintieron obligadas a ir a buscar sus ces­
tas de pescado que habian dejado en la
orilla, para poder dormirse al fin ... Rumi
cuenta el mismo tipo de historia. Puede
que sea necesario recordar todo esto para
interpretar estas curiosas palabras de un
monje: "Cuando no tengo tentaciones,
me siento abandonado por Dios".
La voluntad de ascetismo
La palabra "ascetismo" viene del griego
"askesis'·. que significa ejercicio. en el
sentido de un ejerciciLl atktlc() [I >,;c::­
esrar que ~e :,Icnte JU~J:~:c ~;:~.: :'~.:':::':.:
intcn:'l\ a Jc :~h:':"':~4'''-' -.:;,.':-'
momentos siguientes, esta relacionado
con la producci6n de endorfinas, que
intervienen tambien en ciertos tipos de
cxtasis. En cuanto al joven, favorece la
producei6n de la adrenal ina destinada a
compensar la bajada de azucar en la san­
gre. Esta adrenal ina aumenta tambien en
cl caso de personas que escuchan la radio
o musica; ella explica el porque se sien­
ten deprimidos 0 tristes cuando se
encuentran extraordinariamente en un
ambiente silencioso. La adrenalina es
uno de los factores que explican tambien
el dinamismo parad6jico de las adoles­
centes que sufren anorexia nerviosa, 10
cual es peligroso, ya que encubre el debi­
litamiento del cuerpo.
La privaclOn de agua (nazareat) que
parecia tan importante en los Padres es
posible que fuese originada por la volun­
tad de enrarecer las micciones, teniendo
el deseo de orinar bastante cn comun con
el deseo sexual. Podia estar relacionada
igualmente, en los habitantes del
desierto, con una especie de entrena­
miento de supervivencia, ana logo a las
practicas de tou-mo -practicas y6guicas
de recalentamiento del cuerpo de los
Tibetanos que viven todo el inviemo con
un frio riguroso. La privaci6n de sueno
provoca una afluencia de imagenes oniri­
cas durante la vigilia, favoreciendo
entonces 10 que podria llamarse "visiones
baratas". Aun asi, para cualquiera que
sepa meditar, esta afluencia de imagenes
puede acelerar el proceso de purificaci6n
del inconsciente, naturalmente si no se
duenne durante la practica... Por otra
parte. las erecciones reflejas que se pro­
Je.:cn fisiol6gicamente durante el sueno
::C'~'::: :C:1Jcn(l:1 :1 r~l'JU(l~~C :.!r:lr10:'
..
..
...:. ~2:-.~.
134
No-dualidad y Mistiea Cristialla: Vedanta y Hesicasmo
de visiones, 10 que supone un problema
para el monje, Dentro de un contexto
cristiano, puede facilmente interpretar
estas visiones como ataques demoniacos.
Todos estos hechos deben llevamos a
considerar con prudencia las propuestas
de retiros intensivos con privaciones
importantes de sueno y que proliferan
actualmente, al menos para personas fra­
giles psiquicamente. Estan totalmente
contraindicadas para aquellas personas
con antecedentes de alucinaciones. (26)
Otro factor que favorece la ascesis exce­
siva es la emulaci6n. Aun cuando los
monjes vivian relativamente aislados, oian
hablar a los visitantes sobre las proezas
asceticas de algunos frailes, y querian imi­
tarles con el fin de obtener ell os tambien
su cop a en los grandes tomeos de la morti­
ficaci6n ... Si la imitaci6n era un estimulo
potente, mas aun en los Padres. Los mon­
jes tenian una especie de "complejo del
deseendiente" con relaeion a sus predeee­
sores 0 fundadores del monaquismo, pre­
suntamente mueho mejores que ellos. Era
en ciertu manera una espeeie de nostalgia
de los origenes. En euanto a los primeros
Padres, estos sufrian visiblemente del
mismo complejo eon relaei6n a los marti­
res que les habian preeedido hacia poco
(el inicio del monaquismo eorresponde al
fin de las grandes persecueiones), con
relaeion a los apostoles tam bien martiri­
zados y sobretodo con relaci6n al mismo
Jesus muerto en la cruz. Esta crucifixion
representa un trauma de nacimiento inelu­
dible. San Pablo eomplieo las eosas
dieiendo que el martirio de Cristo no
debia ser en vano. Sin embargo, el riesgo
que se presenta al querer justificar dema­
siado 0 valorar un sufrimiento pasado, es
el de penetrar alll1 mas en e1.
Los martires, asi como sus sepulcros,
eran investidos por el pueblo de poderes
milagrosos. Habiendose sacrificado, se
habian convertido en sagrados. Los mon­
jes que partian hacia el desierto no esta­
ban exentos de esta voluntad de poder
ligado a un estatus sagrado. Y se conver­
tian en una especie de chivo expiatorio
enviado al desierto cargado con los peca­
dos del pueblo, y eminentemente en por­
tadores de poder. Los lugares desolados
estan habitados por demonios (Lev 16,8)
asociados por los Padres a los dioses
paganos. EI Padre de los monjes, San
Antonio, es descrito por San Atanasio
como envuelto durante sus vigilias noc­
tumas por las bestias feroces del desierto.
£1 les decia: ""Si habeis recibido poder
contra mi (de Dios), estoy preparado para
dejarme devorar; si habeis sido enviados
por los demonios, no espercis mas, ireti­
raros!", Ante estas palabras de Antonio,
las fieras hUlan, como perseguidas por el
latigo de su discurso"(27). La critiea
espiritual que se puede expresar en eon­
tra del saerificio, es que representa una
aeci6n interesada, realizada para ganar
eualquier eosa -el merito, 0, en otro
plano, el poder- mientras que el verda­
dero amor, 0 el verdadero conoeimiento,
son gratuitos. A prop6sito de la relaei6n
entre sagrado y sacrifieio, podemos
releer los textos de Rene Girard, asi
eomo de Nietzsche, quien hace una eri­
tiea feroz de la noci6n eristiana de saeri­
fieio, y por fin de Eugen Drc\vennan
quien ha dado un analisis conciso desde
el punta de vista psicoI6gieo(28).
Austeridades y poderes
En India, la relaci6n entre austeridades
(tapas) y poderes (siddhis) es clara, pero
Jacques Vigne
estos ultimos se des
los a la liberaciOn. I
pero buscaban sin el
numero de ellos for
Isaac el Sirio decia:
negada la grandeza
sido tambien neg,
carisma. En ningu
gran carisma por pe
Las ascesis extraorc
de curiosos, como I
Simeon, que pen
sobre su columna.
funciona aun en
durante las Kumbh.
nes de peregrinos CI
del Ganges para en
de miles de monje:
variados, siendo al
dos por el curios(
ascetismos. Las aU!
jes cristianos Ies co
cos capacitandoles
ascetas paganos. p(
relaei6n a este tem,
los monjes del dcs
pues de haberse d
haber matado a UI
nas, este sinti6 un
de sus pee ados, e
madamente asceti,
Marpa. Desarroll6
tian expulsar los e~
la antigua religi61
por el Tibet en es,
sabiduria del nue\';
La evoeaei6n de I,
los monjes del des
Ienta; aunque Anti
su vida a desarrolla
al pr6jimo, manto
euenta de que alg
I
ra: Vedanta y Hesicasmo
Jacques Viglle
Jmo sus sepulcros,
I pueblo de poderes
lose sacrificado, se
sagrados. Los mon­
el desierto no esta­
voluntad de poder
grado. Y se conver­
de chivo expiatorio
lrgado con los peca­
inentemente en por­
s lugares desolados
emonios (Lev 16,8)
adres a los dioses
e los monjes, San
por San Atanasio
te sus vigilias noc­
feroces del desierto.
jeis recibido poder
stoy preparado para
lbeis sido enviados
espercis mas, ireti­
llabras de Antonio,
. perseguidas por el
0"(27). La critica
e expresar en con­
i ue representa una
llizada para ganar
1crito, 0, en otro
ltras que el verda­
iero conocimiento,
)sito de la relaci6n
crificio, podemos
Rene Girard, as)
uien hace una cricristiana de sacri­
:ugen Drewerman
isis conciso desde
16gico(28).
estos ultimos se describen como obstacu­
los a la liberaci6n. Los monjes 10 sabian,
pero bus caban sin embargo para un cierto
numero de ellos fonnas sutiles de poder.
Isaac el Sirlo decia: "As! como Ie ha sido
negada la grandcza de la tentaci6n, Ie ha
sido tambi6n ncgada la grandeza del
carisma. En ningun caso Dios otorga
gran carisma por pequena tentaci6n"(29).
Las ascesis extraordinarias atraian hordas
de curiosos, como por ejemplo la de San
Sime6n, que permanecia en silencio
sobre su columna. Es una maxima que
funciona aun en India, en particular
durante las KlII1!bha-Mela, donde l11illo­
nes de peregrinos confluyen en las orillas
del Ganges para encontrarse con dccenas
de miles de monjes y aseetas diversos y
variados, siendo automaticamcntc atrai­
dos por cl curioso espectaeulo de sus
ascetismos. Las austeridades dc los mon­
jes cristianos les conferian podcres magi­
cos capacitandolcs para luchar contra los
ascetas paganos. Podria estableeerse, con
relaci6n a este tema, un paralelismo entre
los monjes del desierto y Milarepa: des­
pues de haberse dedieado a la magia y
haber matado a una treintena de perso­
nas, este sinti6 un dia vivamente el peso
de sus pecados, e inicio una vida extre­
madamente ascctica, bajo la tutela de
Marpa. Desarrollo poderes que Ie pem1i­
tian expulsar los espiritus y los magos de
la antigua religion Bon que pululaban
por el Tibet en esa 6poca, y propagar la
sabiduria del nuevo budismo.
es
entre austeridadcs
'his) es clara, pero
La evocacion de los herejes producia en
los monjes del desierto una reaccion vio­
lenta; aunque Antonio habia consagrado
su vida a desarrollar la humildad y el amor
al projimo, mont6 en colera cuando se dio
euenta de que algunos de sus visitantes
135
eran partidarios de Arius: "Habiendo juz­
gado y conocido su impiedad, los expuls6
de la montana, dicicndoles que sus discur­
sos eran peor que el veneno de las serpien­
tes"(30). Atanasio, biografo de Antonio y
obispo de Alejandria guerreando contra
los pagan os y los herejes, finaliza la vida
del santo anacoreta recomcndando su lec­
tura a los Helenos para "probarles que sus
dioses no son dioses, sino demonios, y
que tienen persiguicndoles los tal ones a
los cristianos que creen en Dios piadosa­
mente, para expulsarles por tramposos y
conuptorcs de los hombres"(3 I). Aun
teniendo en cuenta el espiritu de la epoca,
esta perorata final es como minimo
curiosa, teniendo en cuenta que se trata de
la conclusion de la vida de un santo que
paso su tiempo dedicado a predicar el
amor y la humildad. Este ambiente de
lucha casi maniqueista entre la ortodoxia
por un lado y los paganos, judios y herejes
por el otro es de gran relevancia en el uni­
verso de sufrimientos de los Padres.
Repercute en su mente bajo la fonna de
combate ineludible con los demonios del
tipo "yo 0 ellos", y de dualidad insupera­
ble entre el Bien y el Mal.
Para ellos est a situacion era 10 natural:
"Los Padres vinieron un dia a Alejandria
lIamados por Teofilo el Arzobispo con el
fin de orar y destruir los templos paga­
nos"(32). En decto, consiguieron elimi­
nar a los pagan os por la persuasion 0 por
la fuerza, pero pagaron el precio de su
maniqueismo en su cuerpo y en su espi­
ritu bajo la fonna de divisiones, sufri­
mientos sin soluci6n. EI mismo San
Pablo, consumido por el celo misionero,
se quejaba de los sufrimientos que tuvo
que soportar, de la astilla clavada en sus
cames y del angel de Satin encargado de
136
No-dualidady Misliea Crislial1a: Vedanta y Hesieasmo
mantenerla (2 Cor XII 7). Por el contra­
rio, San Juan gozo de un retiro apacible
en la isla de Patmos, y no habla de
manera especial en sus epistolas del
sufrimiento que vivio por Cristo. Su
experiencia parece mas cercana a la de
los sabios de la India que no parten con
una mision con creta, sino que esperan
pacientemente a que los buscadores espi­
rituales los encuentren. Segun palabras
de los Vedas: "Cuando la flor de loto se
abre, las abejas acuden por si mismas",
Ascesis y soledad
La vida solitaria intensitica los fenomenos
mentales; actUa como una "caja de reso­
nancia", tal y como me decia el maestro de
novicios de la Gran C31iuja que habia ido a
visitar. AI cabo de cielio tiempo sobreviene
un verdadero despertar de 10 que en la tra­
dieion hindu es Hamado "Ia kundalini". EI
cspiritu del monje que hasta ese momento
habia pennanecido en un estado mas 0
menos apacible, puede atravesar toda
suerte de deseos e impulsos violcntos. Den­
tro de un eontexto dualista, este despertar
sc interpreta generalmente eomo un ataque
de los demonios. De heeho, podemos
aprender a canalizar estas energias, y a esto
es a 10 que ayudan el yoga y Ja meditaeion.
agostamiento de la aseesis del desierto
es en si mismo un reflejo de la aridez del
clima. En este sentido, pod ria estableeerse
la misma relaeion eausa-efecto para Rusia
que, mareada tambien por un clima rudo,
posee uno de los escenarios de explosion
de exeesos ascetieos mas importantes de la
eristiandad.
crea ejercicios asceticos cada vez mas
extranos, que consisten entre otras cosas en
imaginarse todo 10 que los demonios van a
poder inventar 0 calcular en contra suya...
Para los que tienen ya de por sl una tenden­
cia obsesiva, el tiempo Iibre intensifica los
sintomas. La ascesis se convierte en un fin
en si misma, 10 que se llama "una obse­
sion" en ellenguaje psicologico, 0 "idolo"
en el religioso. La lucha contra los demo­
nios proporciona cada vez mas una excita­
cion que pennite contrarrestar la depresion
de los monjes; cuando observamos a ninos
solos y ociosos, los vemos a menudo jugar
a pelearse contra enemigos imaginarios y
parccen encontrar en ello una gran diver­
sion. No digo que este paralelismo expli­
que lodos los fenomenos de los demonios,
pero va mucho mas lejos de 10 que parece a
simple vista.
No cs muy COml\l1 que un Padre sugiera
que los conflictos interiores sean del
orden psicologico; mas bien parecen en
su mayoria partidarios de la interpreta­
cion demonologica. Este "maniqueismo
mitigado" que ya habiamos tratado ante­
riormente esta muy lejos del coneepto de
India. Incluso el dualismo entre 10 divino
y 10 humane esta tan atenuado, que la
misma palabra "atman" significa a la vez
el alma individual y el alma universal,
siendo el primer sentido reflexivo "sl
mismo". Ademas, el Yoga no ve en los
pensamientos mas que torbelIinos (vrit­
tis) en esta agua que es el Absoluto:
cuando el torbellino cesa, no queda mas
que el Absoluto.
La angustia y Ia gracia
Otra de las eausas del epaseesis del solita­
rio es simplemente el vacio que llena su
tiempo. Para ocupar su mente, el monje
Si vamos a la raiz de las cosas, la noei6n
misma de dualidad implica angustia. La
Jacques Vigne
Taittiriya Upanishad
dad, esta csencia
Cuando nos estable
10 invisible, desprov
nido, sin base, ento
realmente alcanzar I
pero si hacemos la
cia, empezamos a
concepcion biblica
"cavidad" en cI Un
precipicio entre SUS1
tancia divina; flanq1
puente levadizo de
en cuando bajado, (
elevado. Esta dual
especie de proyecc
metafisica de la s
pecado original.
La creencia en 10 su
de la persona humar
que hace la ascesis (
que la oriental. En e
encuentra ante un n
una especie de dol
ansiedad: en eI fon(
en 10 substancial dl
eliminar completmr
10 Divino. La graci,
mente bueno pw
empresa, pero acorr
la ausencia de gra
cual se nos escapan
deeirse que la SOIT
absurdo, 10 que (
angustia en los misl
La no creeneia en
eipa de fonna imI
del cristiano. Debl
a que existe un 11l
Pascal, sino lambi
alIa particular SCI
1CI:
Vedanta y Hesicasmo
icos cada vez mas
n entre otras eosas en
e los demonios van a
uJar en contra suya...
de por SI lIna tend en­
o libre intensifica los
e convierte en un fin
se llama "una obse­
sicologico, 0 "idolo"
'ha contra los demo­
vez mas una excita­
'arrestar la depresion
observamos a ninos
mos a menudo jugar
nigos imaginalios y
clio lIna gran diver­
e paralelismo expli­
os de los demonios,
)S de 10 que parece a
e un Padre sugiera
oteriores sean del
is bien parecen en
s de la interpreta­
~ste "maniqueismo
amos tratado ante­
os del concepto de
;mo entre 10 divino
atenuado, que la
" significa a la vez
el alma universal,
tido reflexivo "si
{oga no ve en los
~ torbellinos (vrit­
: es el Absoluto:
:sa, no queda mas
a
s cosas, la noci6n
)lica angustia. La
Jacques Vigue
Taittiriya Upanishad dice (2-7): "En ver­
dad, est a esencia causa la felicidad.
Cuando nos establecemos sin miedo en
10 invisible, desprovisto de fom1a, indefi­
nido, sin base, entonces hemos logrado
real mente alcanzar la ausencia de miedo;
pero si haeemos la mas minima diferen­
cia, empezamos a tcner miedo". En la
concepci6n biblica no existe s6lo una
"cavidad" en el Uno, sino una falla, un
precipicio entre sustancia humana y sus­
tancia divina; flanqueado tan solo por el
puente levadizo de la gracia, de cuando
en cuando bajado, de cuando en cuando
elevado. Esta duaJidad representa una
especie de proyecci6n, de consagraci6n
metaflsica de la separacion debida al
pecado original.
La creencia en 10 substancial del cuerpo y
de la persona humana posiblemente sea 10
que hace la ascesis cristiana mas laboriosa
que la oriental. En efecto, el practicante se
cncuentra ante un mensaje contradictorio,
una especie de doble lazo generador de
ansiedad: en cI fondo, se Ie pide que crea
en 10 substancial de un ego que hay que
eliminar completamentc para dejar lugar a
10 Divino. La gracia de un Dios completa­
mente bueno puede ayudar en esta
empresa, pero acompanada de su sombra ­
la ausencia de gracia, los motivos de la
cual se nos escapan. En este sentido, puede
decirse que la sombra de la gracia es el
absurdo, 10 que origina este fonda de
angustia en los misticos dualistas.
La 110 creencia en la reencamaci6n parti­
cipa de fonna importante en la angustia
del cristiano. Debe apostar no solamente
a que existe un mas alla a la manera de
Pascal, sin6 tambien a creer que su mas
alla particular sera el paraiso y no el
137
infiemo. Si algun pequeno picaro se
entretuviese en hacer un cideulo de pro­
babilidades, encontraria que tan s610
existe un 25% de posibilidades de que
este sistema funcione ... Un viejo obispo
decia sonriendo a una de mis amistades:
"Comprendo mejor la reencamaci6n de
los Orientales a mi edad: es cierto que
una sola vida para alcanzar la perfecci6n
es bien poco". Los eremitas taoistas y
budistas tal y como los describe por
ejemplo Michel Jourdan en La vida del
eremita (32) pareeian practicar un asce­
tismo mas integrado en la naturalcza.
Buscaban la am10nia con la ley natural y
la conjunci6n de los contrarios. Este
ultimo punto parecia ausente cruelmente
en los ascetas del desierto. He leido la
Transmision de fa pequeiia lampara, el
texto de base del budismo ch'an. No
habla para nada de lagrimas ni de arre­
pentimiento. Los maestros son rudos,
pero las historias que encontramos en
este libro estan llenas de humor y sobre­
pasan mas a menudo que en Occidente la
simple moralizaci6n para dar una ense­
nanza esencial de manera imaginativa.
En cuanto a los hindues, S1l falta de dua­
Iismo cultural supuso un gran problema
para los misioneros cristianos: estos no
sabian a que carta jugar para provocar el
"arrepentimiento" y el "retorno al Dios
verdadero". Los hindues simplemente no
percibian haber sido separado de este. La
dureza de la ascesis del desierto se suavi­
zaba por una relaci6n profunda con un
Anciano. Sin embargo, la vida en comu­
nidad provoc6 la perdida de prioridad de
esta relacion. Los monjes aprendian de
uno y de otro, 10 que suponia un factor de
dispersion en su practica. El concepto de
obediencia a un maestro espiritual des­
No-dt/alidad)' lvIistica Cristiana: Vedanta), Hesicasl110
138
provisto de ego fue reemplazado por la
noci6n de disciplina bajo la fentla de una
administraci6n mucho mas pesada puesto
que se suponia de derecho divino. Una de
dos, 0 abandonar el ego en manos de
alguien sin la suficiente eficiencia espiri­
tual, 0 abandonarlo en manos de una ins­
tituci6n que, en tanto que tal, no puede
mas que poseer un fuerte ego, 10 cual no
es solo mucho menos eficaz, sino mucho
mas arriesgado. (33)
Un ultimo factor pudo eontribuir a eon­
vertir en laborioso el ascetismo de los
monjes del desierto: la cnsefianza cris­
tiana segun la eual debian buscar la per­
feeci6n estaba basada en cl amor, pero
estaban bien lejos de cualquier presencia
femenina, can una vida en comunidad
muy redueida si seguian la hesiea, a una
relaci6n mas bien diluida can el maestro
espiritual si vivian en una gran comuni­
dad. Ademas, el culto a la Madre de
Dios, que suavizb la austeridad del
monaquismo posterior, no estaba aun
desarrollado. Habia, pues, no pocos limi­
tes a sus posibilidades de expresar el
amor, y aun en esa epoea no tenian los
reeursos de la practica de la via del cono­
cimiento que, por ejemplo en India,
corresponde al cenit de la devoci6n: de
ahi la contradicci6n y muy a menudo el
sufrimiento. Para un Padre como Evagre
Ie Pontique estaba muy claro que la
devoci6n culmina en el conocimiento,
pero no parece que el conjunto de monjes
siguiera su ejemplo.
Como conclusi6n a est a parte, aun sin ver
claramente la transici6n del amor al
eonoellmento, espero que hayamos
aprendido la necesidad de pasar del
miedo -motivo principal dc los cxcesos
asceticos- al amor. (,No dijo San Juan, el
discipulo amado de Jesus: "No hay
miedo en el amor, al contrario, el pcr­
fecto amor alcja el miedo". (I In IV, 18)?
Parte Ill. Una ascesis para nuestros dias
Sufrimiento, sexualidad, espiritualidad
EI Buddha decia: "Existe un camino mas
alia del sufrimiento". Habia dado en el
clavo: la finalidad de una disciplina espi­
ritual no es afiadir sufrimiento, sino "res­
catamos" de eJ. Cada via tiene su
especificidad: en la devoci6n, se busca
debilitar 10 maximo posible el ego ante 10
Divino; en la via del conocimiento, la
identificaci6n directa con El. EI riesgo de
la devoci6n es la dependencia y el debili­
tamicnto; el de la via del conoeimiento,
la arroganeia. En ambos easos, nos con­
vertimos en 10 que meditamos: en este
sentido, el reeordar una y otra vez los
pee ados del pasado no puede haeer mas
que provocar una recaida. Es necesario
percatarse que la culpabilidad es a
menu do soportada por cl goee que pro­
voea el hecho de pensar una y otra vez en
10 bien que se ha pasado cometiendo tal 0
eual des liz. En cuanto a los demonios, se
trata de fonnas sutiles que no tienen ni
mas ni men os realidad que nuestra propia
mente. Si se les llama bajo el pretexto de
combatirlos, aeudiran de veras. Sin
embargo, es verdad que esta pnietiea
podra estimular la energia de los monjes
de temperamento mas bien eombativo.
La meditaei6n en el sufrimiento no tiene
demasiado interes. Un jesuita como el
Jacques Vigne
Padre Kadowaki que
Zen y la Biblia, 10 rec(
Una cuesti6n candenl
existido es la de la rei
sexual y la evoluei6n t
aquellos que tienen i
espiritual pueden se
golpe (nitya brahmacl.
partir de cierta edad a
e irse lejos con su eSI
para realizar praetiea
intensas. Parece ser
rabinos del Judaismo
Los oecidentales a m
sueno de que existen
dades en las que la se:
pletamente Jibre, per,
sociedad de estas ca
existir de manera (
durante algitn tiempo
en un pais musulman
noce en absoluto el v.
razones religiosas. A
cotidianos cstan satu
pureza y control de
religi6n se apoya pi
para penctrar profun,
ritu de los fieles. H(
un antrop610go que \
del ano en pueblos d
dad, tambien alli, e
por la soeiedad; los
por sus Padres, come
Ademas de la neces
de una cierta discipl
el nexo entre relig:
toma de conseieneia
esta ultima se encuel
mente. De modo es
decir que un domir
sexualidad, mediant
I'edanta y Hesicasmo
r, no estaba a1m
les, no pocos limi­
;:s de expresar el
)oca no ten ian los
de la via del cono­
jemplo en India,
Ie la devoei6n: de
muy a menudo el
adre como Evagre
auy claro quc la
el eonocimiento,
onjunto de monjes
a parte, mIn sin ver
i6n del amor a1
) que hayamos
ad de pasar del
,al de los exeesos
) dijo San Juan, cl
Jesus: "No hay
contrario, el per­
do". (I In IV, 18)?
puede hacer mas
tida. Es necesario
ulpabilidad es a
el goce que pro­
r una y otra vez en
:-J cometiendo tal 0
1 los demonios, se
que no tienen ni
iue nuestra propia
lajo el pretexto de
de veras, Sin
lue esta practica
gia de los monjes
bien combativo.
frimiento no tiene
jesuita como eJ
Jacques Vigne
Padre Kadowaki que ha escrito sobre el
Zen y la Biblia, 10 reconoce. (1)
Una cuesti6n candente que siempre ha
existido es la de la relaci6n entre la vida
sexual y la evoluci6n espiritual. En India,
aquellos que tienen intercs por la vida
espiritual pueden ser renunciantes de
golpe (nitya brahmacharis), 0 easarse y a
partir de cierta edad aIcjarse de sus hijos
e irse lejos eon su esposa (vanaprashta)
para realizar pnicticas espirituaIcs mas
intensas. Parece ser que los antiguos
rabinos del Judaismo hacian 10 mismo.
Los occidentales a menudo viven con el
sueno de que existen en otra parte socic­
dadcs en las que la sexualidad seria com­
pletamente librc, pero no creo que una
sociedad de estas caracteristicas pueda
cxistir de mancra estabIc. He vivido
durante algun tiempo con un grupo sufi
en un pais musuhmln, dondc no se reco­
noce cn absoluto el valor del celibato por
razoncs religiosas. Aun aS1, los rituales
cotidianos estan saturados de la idea de
pureza y control de la sexualidad, y la
religion se apoya pesadamente en ella
para penetrar profundamente en el espi­
ritu de los fieles, He podido hablar con
un antrop610go que vive una bucna parte
del ano en pueblos de China. La sexuali­
dad, tambien alli, esta muy controlada
por la sociedad; los ninos son casados
por sus Padrcs, como en India,
Ademas de la necesidad social evidente
de una cierta disciplina sexual, existe en
el nexo entre religion y sexualidad la
toma de consciencia de que las ralces de
est a ultima se encuentran en la base de la
mente. De modo esquematico se puede
decir que un dominio consciente de la
sexualidad, mediante la meditacion y no
139
por el rechazo, es proporcional a la capa­
cidad de interiorizacion. Evidentemente,
algunos como Drewermann decian sus­
taneialmente que la castidad a largo
plazo no es posible actualmente en Occi­
dente. (2) Pienso que tiene razon en su
analisis de las multiples maneras por las
que cl sistema eclesiastieo recupera la
nocion de castidad para auto-consoli­
darse. Estimo, tambien como el, que los
saeerdotes deberian tener la posibilidad
de casarse, como en el protestantismo, la
ortodoxia y otras rcligiones. Como con­
trapartida, pienso, contrariamente a
Drewennan, que algunos seres -en gene­
ral monjes- pueden real mente transmutar
la energia sexual en energia espiritual y
realizar la union de 10 masculino y 10
femooino en si mismos. Si lIcgamos a
conoccr un bienestar interior dcsprovisto
de toda connotacion erotica, significa
que estamos muy proximos a una felici­
dad completamente independiente y por
10 tanto perfectamente estable. No digo
que esta via sea facil, pero puede apren­
derse viviendo cerca de un maestro espi­
ritual que haya logrado cl exito en esta
via, mejor que por los libros, Los hindues
otorgan una gran importancia a la casti­
dad para obtener una subida estable de la
kundalini (ojhas). Es interesante resaltar
que el nombre que la tradicion griega da
a la continencia sexual es enkrateeia, es
decir, la "fuerza interior" -un termina
finalmente muy pr6ximo a las palabras
"energia" 0 "entusiasmo", siendo el sig­
nificado de este ultimo Dios en el inte­
rior.
Comprendo la actitud de terapeuta de
Drewermann quien, viendo a los pacientes
acorralados en un celibato que no les
corresponde en absoluto, les dice:
140
No-dualidad y Mistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo
"Olsese". Pero a veces, la fascinacion del
cambio representa tambien una hulda.
Cuando yo era terapeuta, un gran numero
de mis pacientes se encontraban centrados
en sus problemas de pareja. Es verdad que
mi primera reaccion interior era la de que­
rer decirles. "Deje correr esta relacion y
viva solo: vera usted como no va a
morirse... ". Sin embargo, la mejor solu­
cion es, en la mayo ria de los casos, la de
intentar verdaderamente plantar cara a los
problemas alii donde se este y segun la
vocacion que cada uno/a haya escogido.
Por otro lado, Drewennann pone por las
nubes la aproximacion psicoanalitica; es
evidcnte por ello quc no ha vivido como he
hecho yo en un medio "psico", donde las
batallas por cl poder y las "capillitas" no tie­
nen nada que el1vidiar al sistema eclesias­
tico. Sin embargo, parcce en tcoria abicrto a
Oriente: no habla mucho de las diversas tcc­
nicas psicosomaticas de meditaci6n como
medio de exp]orar la mente en la practica.
Aun asi, no parece que para aquellos c1eri­
gos que no csten perturbados, el retorno a
estas tccnicas sea mas indicado que el
mismo psicoanalisis. Este ultimo estil, en
general, saturado de prejuicios materialistas
mientras que la meditacion tradicional
comparte 10 esencial con el cristianismo, es
decir, el eentrarse cn la busqueda de 10
Absoluto. Drewennann, eomo a menudo
hacen los terapeutas, ve las cosas a traves de
las "gafas" de sus clientes, es decir, curas y
religiosas que tienen problemas. Los mon­
jes que tienen exito en su vida espiritual no
tienen ningun motivo para consultarle.
Sobre la polucion mental
i',Que puede decirse de la ascesis en nues­
tro mundo actual? No soy ningun maes­
tro espiritual, por 10 que reenvio a cada
uno a la via y al maestro que sigan. EI
unico apunte que me gustaria hacer en
este punto, habiendo hablado de la espiri­
tualidad en el desierto, es de orden psico­
logico. Antes de sonar en partir a un
verdadero desierto en busca de esta clase
de experiencias, estaria bien aprender a
filtrar el ruido que nos viene del exterior,
en particular el de las infom1aciones sen­
sacionalistas de los medios, donde existe
una polucion mental considerable; espero
que esta nocion de polucion mental
emerja muy proximamente en cl publico,
de la mi sma manera que han aparccido
noticias sobre la polucion sonora 0 la
destruccion de la capa de ozono. Tam­
poco creo que sea muy oportuno hacer de
nuestro interior un dcsierto. Como revan­
clm, podemos convertirlo en un "parque
natural" don de nuestra verdadera natura­
leza pueda estar protegida y desarrollarse
a sl misma al abrigo del desorden de los
elementos extemos.
No hay que creer que la tentacion de la
excesiva ascesis sea algo pertencciente al
pasado. Aquellos que hayan pas ado por el
cstadio de la "mistica hippie" -haz el
amor y no la guerra- y que han compren­
dido que era necesaria mas intensidad en
la vida espiritual, pueden sentirse tenta­
dos: para unos, sera como una repeticion
de ayunos prolongados en base ajuslifica­
ciones dieteticas; para otros, sera una
praetica extrema de hath a-yoga, camu­
flando un deseo ineonsciente de castigar
el cuerpo por ser 10 que es. En cuanto a los
monjes ortodoxos, la tentacion de la
espascesis esta aun presente. Pude danne
cuenta, en un Paterikoll (recopilacion de
pensamientos 0 acciones de Padres falle­
cidos en una epoca relativamente reciente)
Jacques Viglle
de 1985 en el Mon
este genero: un r
ocho dias de pie si
otro fue encontrad
pues de un ayuno d
cero fue altament{
pasado su vida hac]
mente mas alia de
naturaleza"(4} Y fi]
de otro viejo monj
paso cincuenta y se
recinto de su mona!
EI monte santo d
estado exento de
su historia reeien
siglo XX, cierto nu
ron la intuicion ml
Nombre formaban
una idea muy con
Nombre) y Ilomi I
Dios) son solo une
monjes Ilamados 0
a las autoridades
ortodoxa, que inn
ron al Zar, el cual
guerra para dar ca
cos de Athos. (5) :
la pelea de los OJ
"integrodoxos" y (
dad de la artilleria
logia mistica ...
El principal prol
ascesis es que pu
de la vida espirit
Recientementc l11i
burgo, donde pud
el monasterio de
la ciudad. En cier
vcr renacer una \'J
setenta anos
embargo, podem
>'edallta y Hesicasmo
Jacques Viglle
e reenvio a cada
tro que sigan, EI
~ustaria hacer en
)Iado de la espiri­
:s de orden psico­
r en partir a un
lsca de est a cJasc
bien aprender a
iiene del exterior,
.formaciones sen­
lios, donde existe
lsiderabJe; espero
polueion mental
:nte en el publico,
ue han aparecido
:ion sonora 0 Ja
de ozono. Tam­
;>portuno hacer de
~rto. Como rev an­
'10 en un "parque
verdadera natura­
da y desarrollarse
:1 desorden de los
de 1985 en el Monte Athos, de hechos de
este genero: un monje estuvo rezando
ocho dias de pic sin dormir ni comer (3);
otro fue encontrado medio muerto des­
pues de un ayuno de seis semanas; un ter­
cero fue altamente elogiado por "haber
pasado su vida haeiendose dano continua­
mente m<is alia de las posibilidades de la
naturalcza"( 4) Y finalmente pudo deeirse
de otro viejo monje, tras su muel1e, que
paso eincuenta y seis anos sin franquear el
recinto de su monasterio.
la tentacion de la
:0 perteneciente al
lyan pasado por el
hippie" -haz el
que han compren­
mas intensidad en
len sentirse tenta­
mo una repetici6n
en base a justifica­
l otros, sera una
tatha-yoga, camu­
;ciente de castigar
es. En cuanto a los
tentacion de la
sente. Pude darme
II (recopilacion de
;s de Padres falle­
ivamente reciente)
EI monte santo de Athos tampoco ha
estado exento de pasiones religiosas en
su historia rcciente. A prineipios del
siglo XX, cierto numero de monjes tuvie­
ron la intuieion mistiea de que Jesus y su
Nombre formaban una unidad. Esta es
una idea muy eomun en India: nan! (el
Nombre) y I1Qmi (EI que es nombrado,
Dios) son solo uno. La doetrina de estos
monjcs lIamados onomatodoxos disgusto
a las autoridades eentrales de la [glesia
ortodoxa, que inmediatamente infonna­
ron al Zar, el eual envi6 a Ia marina de
guerra para dar caza a los nuevos misti­
cos de Athos. (5) Se podria Hamar a esto
la pelea de los onomatodoxos y de los
"integrodoxos" y elucubrar sobre la utili­
dad de la artilleria de marina para la teo­
logia mistiea ...
EI principal problema de la excesiva
ascesis es que puede asquear a la gente
de la vida espiritual demasiado pronto.
Recientemente me traslade a San Peters­
burgo, donde pude asistir a un oficio en
el monasterio de mujeres mas grande de
la ciudad. En cierto sentido, era hermoso
ver renacer una vida religiosa despues de
setenta anos de persecuci6n. Sin
embargo, podemos preguntamos si el
141
aseetismo severo que emanaba de esas
mujeres de negro hara mucho por reto­
mar el interes de las masas rusas por la
vida espiritual. A propos ito de la fonna
en que los excesos de la ascesis pucden
descalificar la vida monastiea, podriamos
retroeeder en el tiempo para trasladarnos
a principios del siglo V en el monasterio
de Santa Catalina del Sinai. Esta institu­
cion pudo subsistir en un medio musul­
man gracias a una carta del profeta
Mohamed en persona agradeciendo a los
monjes c\ haberle alojado cuando fue
perseguido. Si esta carta no es un bulo,
podemos imaginamos eI encuentro del
futuro fundador del Islam con su antl­
trion, que I11UY bien podia haber sido
Jean Climaque 0 su maestro Martyrius.
Habiendo visto aqui la austeridad de sus
ensenanzas, uno puede preguntarsc si
una vida tan severa no intluyo en Moha­
med en su prohibicion global de la vida
monastica para sus discipulos, y por COI1­
siguiente para to do c\ Islam.
El fin de 1a pnictica espiritual es la felici­
dad; esta debe ser tambien su motor. Los
Padres hacen referencia a una alquimia
de las emociones analoga a la practicada
por los tibetanos que busca transformar
los venenos en medicinas. Segun los
Padres, debemos intentar transformar 1a
eolera en caridad y el placer en felicidad.
Isaac eI Sirio afirmaba: "La humildad
puede provenir del miedo a Dios, de su
amor 0 de la felicidad". (6) Esta felicidad
es sin duda 10 que Ie valia a San Serafin
de Sarov la devoeion del pueblo ruso.
Hemos mencionado en otro texto, el
"Maestro y Discipulo en el Cristia­
nismo", que saludaba a las personas 11a­
mandoles "mi felicidad". A veces, les
mostraba un icono de Cristo diciendoles
142
No-dualidad y l'vfistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo
"he aqui mi felicidad", despues les mos­
traba un icono de la Virgen anadiendo
con temura "he aqui la felicidad de mi
felicidad". Afinnaba que el que habia lIe­
gado a la paz podia convertir a mil perso­
nas, pero el que habia conseguido la
felicidad podia convertir a diez mil. EI
unico problema de estas experiencias de
felicidad es que, como con todas las
demas experiencias, estas no son verda­
deramente pennanentes, pero, aun asi,
son un signo de progreso en el camino.
Los Padres dicen: "Cuando sientes la
felicidad por encima de cualquier otra
alegria, debes saber que esttls en la ver­
dadera plegaria".
Hesicasmo y Yoga
En la Historia ha habido grandcs conflic­
tos en tomo al hesicasmo y al uso del
cuerpo en la plegaria. Estos conflictos
culminaron en el siglo XIV con la dis­
puta entre Gregoire Palamas y Barlaam.
EI Palamita estaba a favor del uso del
cuerpo y de la respiraci6n en la plegaria
de Jesus y veia en ello no un obstaculo,
sino una ayuda para la finalidad ultima
de la interiorizaci6n, es decir, un estado
estable de union con Dios, mas alia de las
vicisitudes y variaciones constantes del
estado corporal. Ya hemos visto en el
apartado "Respeto y desidentificaci6n
del cuerpo" que el descenso al cuerpo y
Ia liberaci6n del espiritu son fases sucesi­
vas de un mismo proceso, y por 10 tanto
no deben considerarse opuestas.
"Hesychia" significa descanso y el hesi­
casto es, segun Jean Climaque, aquel que
dice: "Duenno, pero mi corazon esta en
vela". (Cant 5, 2) En la tradici6n hindu
del shaktismo (centrada en el culto a la
Madre divina), el descanso yoguico
(yoga-nidra) es el estado supremo, la pri­
mera manifestacion del poder de la
Diosa. EI Dev! Bhagavatam (7) cuenta
que s610 cuando fue capaz de salir de su
yoga-nidra, de su sueno, pudo Vishnu
crear el mundo. Asi pues, este estado es
superior a las funciones de creaci6n, pre­
servaci6n y destruccion del universo. La
concentracion en el coraz6n aconsejada
en el hesicasmo se practica tambien en el
yoga (el chakra del corazon tiene por
nombre "al/ahata"). La retencion de la
respiracion y la inclinacion forzada de la
cabeza hacia delante aconsejada por Gre­
gorio el Sinaita recuerda las practicas de
pranayama y de jalandhara mudra en el
yoga. (8) Para PatanjaIi, la "concentra­
cion en el corazon nos hace percibir toda
la profundidad de la mente (citta)"
(Yoga-sutra, III;35), practica que pennite
acceder al conocimiento completo del si­
mlsmo.
Existe una tecnica hindu muy antigua (9)
que aun no ha sido desarrollada en el hesi­
casmo, pero que 10 sera muy probable­
mente en un futuro no muy lejano, puesto
que es poderosa: se trata de, al recitar el
mantra, no solo pennanecer centrado en el
coraz6n, sino de situar la atencion en todo
el cuerpo, parte a parte, para instalar en 61
aDios (nyasa). La plegaria del corazon se
convierte asi en plegaria del cuerpo y
favorece la transparencia de todo el ser.
Desde el pun to de vista psicol6gico, la
asociacion de una palabra 0 de una ima­
gen a cada parte del cuerpo favorece su
integracion en la memoria profunda.
Desde el punto de vista espiritual, si se
escoge un punto de concentracion unico a
largo plazo, es preferible escoger el cora­
zon 0 uno de los chakras superiores; por el
Jacques Vigne
contrario, para una
mentada no import:
sea el punto de pari
que nos llevani de t
del cuerpo.
Una de las fonn
ensei'ianza de los
Dios mas a menu<
Climaque nos deci
Jesus sea uno con
ces comprenderas
(10) Esta ultima p
India a la observa
asociada a la recil
esta muy extendid:
respiraeion corre~
anapana-satti de
que, por si sola, pl
I
Vamos aver ahora
Padres las referen<
pertar de la kundal
senta la energia i
diosa interior. En l­
es de hecho femen
Padres se enfoca i
interior. Jean Clil
muy bien, a pesal
que su energia ir
cuerpo, 10 que r
cierta moderaci6n
decisivo (al cuel
fuerza necesaria p
tudes". (II) Des
ascension de "alg(
finne voluntad c
como el agua b2
hacia 10 alto, asi e
peligro se eleva a
la penitencia, hall
Anterionnente ha
e10giaba el silenc
· Vedanta y Hesicasmo
jescanso y6guico
do supremo, la pri­
del poder de la
avatam (7) euenta
apaz de salir de su
:::no, pudo Vishnu
ues, este estado es
s de creaci6n, pre­
n del universo. La
Jraz6n aconsejada
;tica tambien en el
:oraz6n tiene por
.a rctenci6n de la
,cion forzada de la
:onsejada por Gre­
ja las pnicticas de
!ham mudra en el
Iii, la "concentra­
hace percibir toda
a mente (citta)"
itctica que pennite
o completo del si-
u muy antigua (9)
rrollada en el hesi­
nl muy probable­
nuy lejano, puesto
ta de, al recitar el
!cer centrado en el
a atencion en todo
para instalar en el
Iria del eorazon se
ria del cuerpo y
ia de todo el ser.
ta psicoJ6gico, la
)ra 0 de una ima­
lerpo favorece su
~moria profunda.
a espiritual, si se
:entraci6n unico a
::: escoger el cora­
superiores; por el
Jacques Viglle
contrario, para una persona mas experi­
mentada no importa que punto del euerpo
sea el punto de partida de la meditaci6n ­
que nos lIevara de todas maneras mas alia
del cuerpo.
Una de las f6rmulas eorrientes de la
ensenanza de los Padres es: "Piensa en
Dios mas a menudo que respires". Jean
CJimaque nos decia: "Que el nombre de
Jesus sea uno con tu respiraci6n: enton­
ees comprenderas el valor de la soledad".
(10) Esta ultima practica eorresponde en
India a la observaci6n de la respiraci6n
asoeiada a la recitaei6n de un mantra y
esta muy extendida. La observaci6n de Ja
rcspiraci6n corresponde tambien a la
anapanCl-satli de los budistas, tecnica
que, por si sola, puede Ilevar al Nirvana.
Vamos aver ahora en c\ testimonio de los
Padrcs las refereneias indircctas a un des­
pertar de la kundafini. La kundalini repre­
senta 1a energia interior fundamental, la
diosa interior. En hebreo, ruah, el espiritu,
es de hecho fcmenino, y la practica de los
Padres se enioea en despertar esta fucrza
interior. Jean Climaque se dab a euenta
muy bien, a pesar de su gran austeridad,
que su energia interior se basaba en el
cuerpo, 10 que provoeaba aun as! una
cierta moderaci6n: "Si Ie diese un golpe
decisivo (al cuerpo), ya no tendria la
fuerza necesaria para la pnictica de las vir­
tudes". (11) Describe bastante bien la
ascensi6n de "algo" bajo la presi6n de una
finne voluntad de interiorizaci6n: "Asi
como el agua bajo presi6n se precipita
hacia 10 alto, asi el alma aprisionada por el
peligro se eleva a menudo hacia Dios por
la penitencia, hallando as! consuelo", (12)
Anteriorrnente habiamos mencionado que
elogiaba el silencio describiendolo como
143
una "ascensi6n secreta". EI nombre
mismo de su libro "La Santa Escalera" Ie
vali6 el apelativo de "Climaque" (un tipo
de escalera), evoeando probablemente con
sus treinta escalones, las treinta vel1ebras
de la columna vertebral (los antiguos s610
eontaban treinta vertebras) -dicho sea de
paso para aquellos que esten intcresados
en cl simbolismo del cuerpo humano. La
columna se asocia al arbol: el abate Jean
Colobos dice: "Cuando me asedian eual
serpientes y fieras los pensamientos, me
protejo trepando al arbol de Dios". (13)
Encontramos igualmente en Macario esta
idea de alzamiento reforzada por la anti­
gua postura de oraci6n, de pic y con los
brazos aJzados hacia 10 alto: "Si surge cn
ti un pensamiento extrano, nunca mires
hacia abajo, sin6 hacia 10 alto, y el Senor
acudini en tu ayuda al momento". (14)
Esta noci6n de elevaci6n sentida por todo
el cuerpo parece tan elemental a Jean Cli­
maquc que la coloca al principio de la
exhortaci6n final de "La Santa Escalera":
"Subid, subid, hennanos mios, disponed
con ardor de elevaci6n en vuestros cora­
zones (Ps 83, 6) ... Prestad oidos a aquel
que os dice: "Venid, vayamos a la mon­
tana del Senor, a la casa de nuestro Dios".
(Is 2;3) ... que hace que nuestros pies sean
como los de los eiervos y nos mantiene
erguidos en las alturas" (Ps 17, 34) ... con
el fIn de que con su eantieo consigamos la
victoria (Hab 3,19)". (15)
EI retorno a la accion despues de la
ascesis y el silencio
No creo que este trabajo de comparar
hesicasmo y vedanta sea muy uti I para
aquellos avanzados ya en el camino.
Como dice un proverbio japones: "Si tu
sabes y yo se, no tenemos nada mas de
144
No-dllalidad y Mfslica CriSliana: Veda ilia y Hesicasmo
que hablar". Por eI contrario, para aque­
1I0s que buscan comprender las convergen­
cias y diferencias entre vias espirituales,
que tienen cierta dificultad en aceptar que
cstas Bevan todas al mismo fin, este tra­
bajo sera util.
Existen varias fonnas de afrontar el
retorno a la acci6n para aquel que ha
estado retirado del mundo a fin de expe­
rimentar el gran silencio. La fonna
"pura", si se me pennite decirlo, consiste
en quc el practicante llegue a la cumbre,
10 que se conoce como "sahaja samadhi"
en el vedanta 0 uni6n del "samsara" y el
"nirvana" en el buddhismo mahayana.
En ese momento, la acci6n del sabio es
espontanea y motivada unicamente por la
compasi6n. Sin embargo, un maestro
espiritual como el Buddha cnviaba a sus
discipulos en parejas para ensenar a la
gente que existia un camino mas alia del
sufrimiento. Ciertamente, no se puede
afirmar que cada uno de esos monjes
hubicse conseguido Ilegar a ese cst ado
supremo. Vivekananda habia sido
influenciado por el Buddha y no buscaba
mas que el ideal de la uni6n eompleta de
la meditaci6n y la acci6n: "El hombre
ideal es aquel que encuentra, en medio
del silencio y de la soledad mas comple­
tos, la acci6n mas intensa y en medio de
la actividad encuentra el silencio y la
soledad del desierto. Ha descubierto el
secreta del dominio del ser, esta contro­
lado". (16)
EI trabajo fundamental del monje es
seguir el consejo que el angel da a Anto­
nio al principio de los Apophtegmes:
"Antonio, ocupate de ti mismo". (17) No
obstante, Ammonas, un discipulo directo
de Antonio, consideraba el retorno al
mundo, 0 mas bien el servicio al mundo,
como una evolucion natural: 'Tras una
larga purificacion en soledad, el hesicasto,
curado de todos sus males, es enviado por
Dios cerca de los hombres". (18)
En la tradici6n hindu, esta claro que el
renunciante (sannyasi) abandona la accion
ritual; su meditacion en el Uno esta mas alla
de todo rito. Es interesante observar que
reencontramos esta idea en la libertad de los
inicios del monaquismo del desierto. Cas­
sien nos dice que los solitarios de Egipto no
tenian oficio ni ocupaci6n alguna, ya que
practicaban la oraci6n continuamente (lnsti­
tuciones cenobitas 111-2). A menudo aban­
donaron tambien la participacion regular en
los sacramentos. (19) Esta noci6n de sobrc­
pasar tOOo ritual se debilit6 por 10 siguiente:
cl monaquismo se volvi6 mas "escolar", se
desarrollaron grandes monasterios donde
hubo que disciplinar importantes grupos de
novicios, las autoridades cclesiasticas cen­
trales tendian a alinear sus costumbres unas
con otras. En Occidente, la regIa de San
Benito se impuso, consagrando al Oficio y
al trabajo 10 mas claro del dia, limitando
como consecuencia las posibilidadcs de un
monaquismo no-ritualista y de una oraci6n
pura, directamentc orientada hacia la hesiea.
En Oriente, el Monte Athos acogio durante
la Edad Media hasta cuarenta mil monjes
(actualmente son alrededor de mil trescien­
tos). La pnictica de la misa se hizo coti­
diana, a las misas basicas se afiadieron las
gran des misas y el oficio de la Virgen muy a
menudo se volvio regular, como en las Car­
tujas. Se comprende que cierto numero de
monjes actualcs observen con anoranza la
libertad de los origenes, cuando los ascetas
maduros podian consagrarse a tiempo com­
pleto a la hesica.
Jacques Vigne
Puede ser que la aparic
monjes no-cristianos (
favorezca una especie (
cristianos y un retorne
cierta ocasi6n un mae~
guntaba a uno de su
aventajados, experto
sagrados, se embarc6
I
Parte IV. I
En esta epoca de car
ciertos conceptos meta
tales como la no-dualic
tan a su area de origen.
echa ralces con bastan
nosotros, muy probabl
del interior mismo de
dental del cristianismo.
La no-dualidad corres
espirituales que no dis!
cia de Dios, 0 del abso
cia creada, y que afirr
Los sistemas dualistas r
un Dios personal; los si
tas un absoluto impers;
tido, el dualismo se asol
la via de la devoci6n. )
la via del conocimient
buddhismo anti guo y (
son tipicamente no-dua
lidad tiene gran infiuer
gia modema. Existen
entre, por ejemplo, el .
modo mas general, se p
fondo no-dualista en Ull
nuevas emergencias, (
espiritual hasta la nocia
cado en fisica, pasand
del ser de Heidegger. E
rable para realizar un b
'('danla y Hesicasmo
~rvicio
al mundo,
ltural: "Tras una
~dad, el hesicasto,
:s, es enviado por
:s". (IS)
:sta claro que el
)andona la acei6n
Uno esta mas alla
Inte observar que
n la libertad de los
del desierto. Cas­
arios de Egipto no
m alguna, ya que
ltinuamente (InstiA menudo aban­
ipaci6n regular en
1 noci6n de sobre­
o por 10 siguiente:
mas "escolar", se
lonasterios donde
)rtantes grupos de
eelesiasticas cen­
s costumbres unas
, la regIa dc San
~rando al Oficio y
jeI dia, Iimitando
osibilidades de un
I y de una oraei6n
Ida hacia la hesica.
lOS acogi6 durante
lrenta mil monjes
)r de mil trescien­
nisa se hizo coti­
s se anadieron las
je la Virgen muy a
,como en las
cierto numero de
1 con anoranza la
;uando los ascetas
.rse a tiempo com-
Jacques Vigne
145
Puede ser que la apariei6n en Francia de
monjes no-eristianos (tibetanos, zen ... ),
favorezca una espeeie de reflexi6n en los
eristianos y un retorno a la esencia. En
eierta oeasi6n un maestro zen, que pre­
guntaba a uno de sus discipulos mas
aventajados, experto en ciertos textos
sagrados, se embarco en dar una gran
explieacion. EI maestro Ie interrumpi6
dicitimdo: "jHay demasiado buddhismo
en tu respuesta!" Si pudiesen surgir de
entre los monjes 0 los laicos hombres 0
mujeres de 10 esencial, capaces de ofre­
cemos sustaneia espiritual sin demasia­
dos "ismos" ... , realmente harlan un buen
servlelO.
Parte IV. La no-dualidad: una necesidad para Occidente
En esta epoea de cambio de milenio,
ciertos coneeptos metafisieos fundamen­
tales como la no-dualidad ya no se limi­
tan a su area de origen. Sin embargo, esta
echa ralces con bastante facilidad entre
nosotros, muy probablemente por parte
del interior mismo de la tradicion occi­
dental del cristianismo.
La no-dualidad corresponde a las vias
espirituales que no distinguen la sustan­
cia de Dios, 0 del absoluto, de la sustan­
cia ereada, y que afirman que son una.
Los sistemas dualistas ponen en la eima a
un Dios personal; los sistemas no-dualis­
tas un absoluto impersonal. En este sen­
tido, el dualismo se asocia comunmente a
la via de la devoei6n, y la no-dualidad a
la via del conocimiento. EI vedanta, el
buddhismo antiguo y el buddhismo zen
son tipicamente no-dualistas. La no-dua­
Iidad tiene gran influencia en la psicolo­
gia modema. Existen lazos importantes
entre, por ejemplo, el Zen y gestalt. De
modo mas general, se puede distinguir un
fondo no-dualista en un cierto numero de
nuevas emergencias, desde la ecologia
espiritual hasta la noci6n de campo unifi­
cado en fisica, pasando por la filosofia
del ser de Heidegger. El periodo es favo­
rable para realizar un balance en profun­
didad del pasado y del futuro de la no­
dualidad en Occidente, asi como de su
relaci6n con el cristianismo.
Elementos de la historia de la no-dua­
Iidad en Occidente
No pocos aeontecimientos han tenido
lugar desde que Vivekananda vino a
Occidente, hacia finales del siglo XIX, a
hablar sobre la no-dualidad como posible
base de una espiritualidad universal. El
hatha-yoga se convirti6 en una practica
comun en los paises occidentales, incluso
en algunas zonas rurales profundas.
Algunos movimientos de inspiraci6n no­
dualista como la meditaci6n trascenden­
tal tomaron la importancia de una nueva
religi6n con seis millones de adeptos en
todo el mundo. Francia cuenta con alre­
dedor de seiscientos mil budistas, mitad
inmigrantes y mitad franceses (v. Actua­
lite Religieuse "Le Buddha va-t-il rem­
placer l'Evangile?", Otono 97). Jacques
Brosse evoca en una obra reciente la rela­
ci6n entre el zen y Occidente. (1) El Dr.
Jean-Marc Mantel, fundador de la Aso­
ciaci6n Intemacional de Psiquiatria Espi­
ritual y discipulo de Jean Klein, un
profesor no-dualista, organiza encllentros
de meditaci6n en la misma Jerusalen.
146
No-dualidad y Afistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo
Pone el aeento en las posibilidades de
realizaeion
no-dual
del
Absoluto
mediante la traseendeneia de las barreras
religiosas con ayuda de la simplicidad de
una experiencia interior elevada. Rafael,
otro profesor no-dualista, ha estado
activo durante mucho tiempo en Roma.
En India, las ideas del Padre Lc Saux
(Swami Abhishikananda) siguen su
curso. He visitado en Poona (Maharash­
tra) un ashram cristiano la superiora del
cual, Sarah Grant, ha escrito un pequcno
libro: Hacia aIm teolagia - con(esiones
de una cristiana l1o-dualisla . (2) Su com­
pleta formacion de tcologia en Oxford no
Ie impide definirse ahora como no-dua­
lista. Una discipula del Padre Lc Saux,
Vandana Malaji, que tuvo una formacion
rcligiosa en la Orden del Sagrado Cora­
z6n, pudo deeir sustancialmentc en el
Parlamento de Religioncs en Calcuta cn
1993: "Para mi. No es demasiado csen­
cial sabcr si soy una cristiana hindu 0 una
hindu cristiana", 10 que Ie valio la ova­
cion de cerca de cinco mil oycntes. En
estos momentos acaba de publiear un
libro de cicn paginas sobre el encuentro
hindu-cristiano Shabda Shakti Sangay
(Sadhana Kutir, Tapovan Sarai, Laxman
laula 249192 Rishikesh UP India), y ha
sido invitada a Roma para presentar
junto con otras personas el punto de vista
de los cristianos de India.
Este articulo no ha sido escrito para
aquellos que aim se eneuentran en la
"guarderia" de la espiritualidad.: esta
redaetado para aquellos que saben
reflexionar pausadamente y que han
podido distanciarse en su interior, para su
evoluei6n, en relaei6n a los reflejos emo­
cionales ligados a un eondieionamiento
dcvoeional e insti tuciona!. Estos tres
dominios -emoeional, devoeional e insti­
tueional- van en general ligados los unos
a los otros, 10 que representa un obsta­
eulo para la meditaei6n seria sobre temas
profundos.
Yo mismo. despues de vivir durante mas
de ocho anos la mayor parte del tiempo en
India, sigo una via vedantina. Mi fonna­
ci6n de base es cristiana y crco que hc
cstudiado mas la mistica de esta via que
muchos cristianos comprometidos. Lo que
voy a dar en este estudio son impresiones,
intuiciones. No creo que pueda escribirse
sobre estos temas con el rigor de un mate­
matico. Los que dan la impresi6n de cllo
me parecen poco creiblcs, ya que tingen la
vitalidad de la experiencia interior. Ade­
mas, su obra puede ser utilizada facil­
mente por un poder religioso centralizado
como una especie de "codigo penal" para
detcnninar que c1ase de ideas son Icgales
y cuales no. Dicho esto, no es en absoluto
vital para mi deeir "10 que yo pienso", ya
que la fin ali dad del yoga que yo practieo
reside en no pensar y atenuar este yo que
no es mas que una pequena mancha negra
en el sol del Ser.
Elementos de mistica comparada
Situemonos ahora en la historia de la no­
dualidad en Oeeidente. Se mantuvo en la
sombra desde el momento en que se
impuso el eristianismo e impuso la devo­
cion eomo unica via de salvaei6n. A
pesar de ello, esta no-dualidad pudo
sobrevivir discretamente gracias a la
ensenanza de la filosofia plat6niea y neo­
plat6nica. Digo sobrevivir, pues la apolo­
getiea cristiana ha heeho constantes
esfuerzos para haeer creer que la bus-
Jacques Vigne
queda del Uno se redu
mente intelectual, rese
si misma el dereeho
espiritual completa. D
conoeimiento es una v
misma, capaz de tran­
tual tanto como la dev
una intensidad interior
con Cristo. La experil
vedantinos de India 11
en la actualidad.
Por otra parte es po
desviaci6n intelectual
devoci6n -no es recit,
la gracia eorrectament
ensenado, que nos se
amor divino.
Sin embargo, una ens!
piamente no-dual pm
cristianismo con astw
latin de un texto I
influenciado por el m
Las Jerarquias Celestt
de atribuirlo al prime
Pablo en Atenas, Dio
(3), 10 que vali6 ser I
pureza dogmMica iITe
lcido y mcditado por I
cos medievales, inclui
rechazo de todas las
uno pueda haeerse de I
esencial de la via del
mismo tiempo ha infl
mente la mistica de I,
Otro autor de tendenl
dual, Evagre el P6n
"fraudulentamente" pi
tiana, al menos alguno
el nombre de Nil el SI
atribuci6n fue identif
Ireneo Hausherr. Se [I
'a: Vedal/ta y Hesicasmo
lcional. Estos tres
I, devocional e insti­
~ral ligados los unos
'epresenta un obsta­
on seria sobre temas
:Ie vivir durante mas
lr parte del tiempo en
'edantina. Mi fonna­
tiana y creo quc he
stica de esta via que
mprometidos. Lo que
Idio son impresiones,
que pueda escribirse
1 el rigor de un matc­
la impresion de ello
bles, ya que fingen la
riencia interior. Ade­
: ser utilizada facil­
religioso centralizado
: "codigo penal" para
~ de ideas son legales
sto, no es en absoluto
10 que yo pienso", ya
yoga que yo practico
y atenuar este yo que
equef\a mancha negra
ca comparada
n la historia de la no­
1te. Se mantuvo en la
nomento en que se
110 e impuso la devo­
via de salvacion. A
a no-dualidad pudo
mente gracias a la
sofia platonica y neo­
~evivir, pues la apolo­
a hecho constantes
er creer que la bus-
Jacques Vigne
queda del Uno se reducia a un paro pura­
mente intelectual, reservandose solo para
sl misma el derecho a la experiencia
espiritual completa. De hecho, la via del
conocimiento es una via que se basta a si
misma, capaz de transcender 10 intelcc­
tual tanto como la devocion y de llegar a
una intensidad interior analoga a la union
con Cristo. La experiencia de los sabios
vedantinos de India nos 10 muestra aun
en la actualidad.
Por otra parte es posible tambien una
desviacion intelectual en la via de la
devocion -no es recitando la doctrina de
la gracia correctamente, tal como nos han
ensenado, que nos sentiremos !Ienos de
amor divino.
Sin embargo, una ensenanza mistica pro­
piamente no-dual pudo integrarse en el
cristianismo con astucia: el traductor al
latin de un texto griego fuertemente
influenciado por el neoplatonico Proclus
Las Jerarquias Celestes tuvo la feliz idea
de atribuirlo al primer discipulo de San
Pablo en Atenas, Dionisio el Aeropagita
(3), 10 que valio ser considerado de una
pureza dogmatica irreprochable, y el ser
leido y meditado por la mayo ria de misti­
cos medievales, incluido Santo Tomas. EI
rechazo de todas las concepciones que
uno pueda hacerse de Dios es un elemento
esencial de la via del conocimiento y al
mismo tiempo ha influenciado profunda­
mente la mistica de la iglesia de Oriente.
Otro autor de tendencia fuertemente no­
dual, Evagre el Ponti co, tambien paso
"fraudulentamente" por la tradicion cris­
tiana, al menos algunos de sus textos, bajo
el nombre de Nil el Sinalta. EI cambio de
atribucion fue identificado por el padre
Ireneo Hausherr. Se reprochaba a Evagre
147
su relacion con el pensamiento de Orige­
nes, e igualmente haber podido escribir un
libro entero sobre los grados de interiori­
dad, donde habia olvidado hablar de
Jesus. (4)
En cuanto al Maestro Eckhart, los espe­
cial istas realizan en general grandes
esfuerzos para tratar de llevarlo al lado
de la doctrina oficial, bajo el pretexto de
colocar de nuevo sus ideas en su con­
texto. Sin embargo, 10 que me parcce evi­
dente es 10 contrario: si detHro del
ambiente pesadamente dualista de la
cpoca, Eckhart se arriesgaba a confinnar
experiencias no-duales, cs que para el
eran fundamentales. Es necesario enton­
ces interpretar sus escritos en un senti do
no menos sino mas no-dual de 10 quc el
mismo se pennitio escribir. Lo mismo
para otras misticos cristianos que dejaron
traslucir en sus textos experiencias de
este genera. Si existen pocos misticos
quc sigan esta via de conocimiento en
Occidente, no es por que no tengan nece­
sidad de ello, sino porque se han senti do
descorazonados por la pesadez y el
monolitismo de un monoteismo de tipo
vetero-testamentario. La intuici6n no­
dual fundamental corresponde de hecho a
un metateisma, entendiendo como theas
el Dios personal, que est:'! mas alia.
En Occidente ha habido experiencias
"atipicas" del Ser, en el sentido que han
surgido de manera espontanea en algunos
poetas 0 fil6sofos. Louis Gardet consa­
gro un buen centenar de paginas a este
respecto. (5) Heidegger, por ejemplo,
reconocia puntos en comun con el zen al
descubrir: "Si comprendo bien el zen, he
aqui 10 que he intentado explicar en
todos mis escritos." (6) Enuncia clara­
148
No-dualidad y l'v1islica Cristiano: Vedanla y Hesicasmo
mente e1 fundamento de 1a via de 1a discri­
minacion cuando escribe: "Es necesario
separar la autenticidad del ScI' del canicter
ficticio de la existencia". (7) No obstante,
hace falta tener algo mas que intuiciones
metafisicas para as ental' una practica y
transmitir una via espiritual completa.
Otro ejemplo de intuicion no-dual puede
discemirse en la reflexion de Camus en
La Peste: "l,Se puede ser santo sin Dios?
Es el unico problema concreto que yo
conozco hoy en dia". (8)
En India, la unidad sustancial entre el
hombre y el Absoluto es tan natural que a
veces se utiliza la misma palabra para
nombrar a ambos: en efecto atman (en
sanscrito no existen mayuscuJas) signi­
fica indistintamente "sl-mis1110" y "el
SCI'''. EI hilo conductor dc la via del
conocimiento es la antigua pregunta de
las Upanishads: "l,CuaI es cl conod­
miento mcdiantc cI que todo puede SCI'
conocido'?". En otras palabras, esto vicnc
a afirmar que existe una cxpericneia pOI'
la que e\ homo sapiens pucdc convertirse
en "totalmente sapiens", la eulminacion
de la eonseieneia individual, al fundirse
cn la conscicneia universal. En India, se
aeepta faeilmente que la devocion que
llcga a su cenit (parabhakti), cs una con
el conocimicnto (ji/ana); esta idea debe­
ria servir de inspiraci6n tambien para los
no-dualistas cristianos.
Este estudio es un eco de la obra de Rai­
mon Pannikar: "EI Cristo desconocido
del hinduisnlo". (9) Retomando la idea
de Justin el MartiI' acerca del Cristo dise­
minado en el seno de las religiones paga­
nas, ha intentado mostrar la presencia de
un Cristo "inconsciente" en el hindui­
smo. Sin embargo, tengo la impresion de
que mi tare a es mas facil que la suya. En
efecto, el no-dualismo se refiere a una
experiencia individual pero no condicio­
nada, ya que proviniendo de un reehazo
de los condicionamientos de la palabra
"Cristo", hace referenda obligatoria­
mente a Jesus, personaje que vivi6 en un
eontexto bastante distinto de India. A mi
parecer, la verdadera utilidad de la mis­
tica eomparada es el poder haeer sentiI' el
peso de los a priori eulturales, casi
imposibles de vcr directamcntc: tene­
mos necesidad de un espejo para obser­
val' nuestra propia cara. Para ello, es
nccesaria una simpatia fundamental,
quc es la de un aut6ntico buscador de la
verdad: "Non elltratllr in veritatem nisi
per charitatem". (No sc penetra en la
vcrdad si no es porIa caridad), decia
San Agustin. (10) Cuantos mas grupos
cspirituales serios haya, mas gente habra
con la suertc dc encontrar la via que efec­
tivamente Ies convcnga y su interaccion
sera estimulante, del roce de las ideas
salta la chispa dc la consciencia. Es vcr­
dad quc un monopolio religioso pucde
aportar una cierta paz aparente, pero cs la
paz del cementerio.
Seguidamente vamos a considerar los
lazos de la no-dualidad con el cristia­
nismo. Primeramente, trataremos un
buen numero de divergencias presenta­
das como esenciales, pcro que tras ciertas
reflcxiones se nos muestran superficia­
les. A continuaci6n, examinarcmos algu­
nas diferencias que nos parecen mas
profundas. Un celebre koan zen dice:
"i,Cmll es el sentido de la venida del
Patriarca (Bodhidharma) del Oeste?".
Seguramente encontraremos con este
articulo los elementos para responder al
posible nuevo koan en esta union de
Jacques Vigne
milenios: (,Cual es el ~
de la no-dualidad de (
No-dualidad y Cris
gencias paralelas"
Con la definicion pal
gencias paralelas", n
puntos donde las dil
dualidad y cristianism
deben mas a malente
rencias irreconciliabl
proporcionara tambier
dejar de lado ciertos 2
tcs avanzados pOl' alg
tianos quc pareecn il
teoria y la pnictica de
necesario darsc cuenta
inmensa mayoria reali
otra practicas reI igios
por 10 tanto dualistas:
rio, la interaceion ya "
cepcion no-dualista ha
los sabios pascn faciln
Esto contribuye a la
vitalidad del pensa
hindu. Pasemos pues
puntos en discordia y a
podemos avanzar.
La no-dualidad es IIna
Es 10 que a mcnudo (
entre otras, la base prefl
para interpretar sus ex'
ten varias respuestas a
primer lugar, 10 "vago'
plemente en la mente
cristianos que no tienen
cimiento superficial de
dualistas, la mayoria de
de escritos de otros cris
mente no han tenido ni
a: Vedanta y Hesicasmo
Jacques Viglle
'acil que la suya. En
10 se refiere a una
iI pero no condicio­
endo de un rechazo
entos de ]a paJabra
:rencia obligatoria­
1aje que vivio en un
litHO de India. A mi
l utilidad de la mis­
poder hacer sentir el
Jri culturales, casi
directamente: tenc­
1 espejo para obser­
cara. Para clIo, cs
patla fundamental,
ntico buscador de la
milenios: l.Cmil es el senti do de la venida
de la no-dualidad de Oriente?
'ur ill veritatem nisi
Jo se penctra en Ia
r la earidad), decia
:uantos mas grupos
iya, mas gente habra
ntrar la via que cfec­
19a y su interacci6n
~I roce dc las ideas
consciencia. Es ver­
)Jio reJigioso puede
~ aparente, pero es la
,s a considerar los
idad con el cristia­
te, trataremos un
'ergencias presenta­
pero que tras ciertas
1uestran superficia­
!xaminaremos algu­
nos parecen mas
)re koan zen dice:
) de la venida del
"ma) del Oeste?".
raremos con este
s para responder al
en esta union de
No-dualidad y Cristianismo: "diver­
gencias paralelas"
Con la definicion paradojica de "diver­
gencias paralelas", reagrupo aqui doce
puntos donde las diferencias entre no­
dualidad y cristianismo me parece que se
deben mas a malentendidos que a dife­
rencias irreconciliables. Todo ello me
proporcionara tambien la oportunidad de
dejar de lado ciertos argumentos aparen­
tes avanzados por algunos teo logos cris­
tianos que parecen ignorar a la vez la
teoria y la practica de la no-dualidad. Es
necesario darse cuenta de que en India Ia
inmensa mayoria realiza de una fonna u
otra pnicticas religiosas devocionales y
por 10 tanto dualistas; pero por el contra­
rio, la interaccion ya antigua con la con­
cepcion no-dualista hace que los santos y
los sabios pasen facilmente de una a otra.
Esto contribuye a la fecundidad y a la
vitalidad del pensamiento religioso
hindu. Pasemos pues a los diferentes
puntos en discordia y a las respuestas que
podemos avanzar.
La no-dualidad es una doctrilla vaga,
Es 10 que a menudo oimos decir. Seria,
entre otras, la base preferida de las drogas,
para interpretar sus experienciasl. .. Exis­
ten varias respuestas a esta cuestion: en
primer lugar, 10 "vago" esta pura y sim­
plemente en la mente de esos teologos
cristianos que no tienen mas que un cono­
cimiento superficial de algunas ideas no­
dualistas, 1a mayoria de las veces a traves
de escritos de otros cristianos que segura­
mente no han tenido ninguna experiencia
149
en las practicas meditativas que corres­
ponden a esta via de conocimiento. Cier­
tos no-dualistas como Shankaracharya en
e1 Advaita Vedanta, 0 Nagarjuna en el
Buddhismo Madhyamika han establecido
sistemas filosoficos cuya coherencia no
tiene nada que envidiar a la de un Santo
Tomas de Aquino. Es verdad que a la
mayoria de los misticos no les gusta ence­
rrar sus experiencias en sistemas filosoti­
cos rigidos y detaIl ados al extremo. Ni
Jesus ni Buddha elaboraron filosofias
complejas con supuestas respuestas a
todas las preguntas en detalle. Los Padres
del Desierto tam poco escribieron dema­
siado sobre teologia, pero el resplandor de
sus consejos practicos sobre la vida inte­
rior nos ilumina aun en nuestros dias.
La noci6n de cmtasis no es mas vaga quc
la de extasis. AI contrario, podemos
rcmarcar que la nocion de extasis
supone la union con Dios, la presencia
del cual ha sido siempre dificil de pro­
bar, mientras que el entasis necesita
solamente un retorno a la vida interior
cuya existencia no puede poncrse en
tela de juicio. Enstasis, palabra utilizada
por Mircea E1iade al hablar del Yoga, no
es mas que una aproximacion; el medi­
tador no-dualista busca una experiencia
del Todo para abolir la diferencia entre
10 interior y 10 exterior, entre entasis y
extasis, y que mas bien podriamos Ha­
mar "Holostasis",
La experiencia no-dual del nirvana es un
estado de sopor que no implica ningun
cambio real en el individuo.
Hay dos distinciones importantes que
debemos hacer: primero, entre la expe­
riencia del vacio somnoliento (Hamada
150
No-dualidad y AIistiea Cristiana: Vedanta y Hesieasmo
shunya por Ma Anandamayi) y la verda­
dera experiencia de vacuidad (mahas­
hunya); segundo entre la disoluci6n
temporal de la mente y por consiguiente
del ego (mano-laya), y su disoluci6n
definitiva (mallo-nasha). La primera
implica efectos lmls 0 menos pronuncia­
dos segun su nivel, pero la segunda
corresponde a la gran y definitiva expc­
riencia en cuanto a los beneficios que
aporta. Tampoco se puede hablar de
transformaci6n del ego, puesto que exis­
tia un ego antes y no existe ninguno des­
pues. Tambien en la via de la devoci6n
no todas las experiencias de amor son
transformadoras. Ello depende de su
autenticidad y profundidad.
El l1()-dualismo ensei'ia una verdad para
un reducido Ill/mero. mientras que el
dualismo es ulla ensenanza para las
masas.
Es verdad que en e\ vedanta la distinci6n
se hace entre verdad empirica (l~vavaha­
rika) y verdad absoluta (paramartha). De
la misma manera, en el Buddhismo japo­
nes se habla de la "ley provisional" en
rclaci6n a la "ley definitiva". Creo que es
una actitud de buen sentido comun que
respeta las difercncias de nivel entre las
personas y que permite integrar diversas
vias cspirituales sin escoger una en detri­
mento de otra, sino simplemente jerar­
quizandolas. No es una euesti6n de
discriminaci6n soeiol6gica: cada uno
tiene el derecho a priori de experimentar
la verdad absoluta, pero con 1a neeesidad
de un esfuerzo que muy pocos estan pre­
parados para hacer. No hay no-dualidad
posible en esta distinci6n praetiea entre
ambas verdades. El Cristo tambien respe­
taba esta distinei6n: si no, (,por que no
organiz6 la ultima cena en la plaza del
Templo 0 se aparecio a las masas despues
de la resurrecci6n?
El concepto de unidad racional entre
todos los niveles de desarrollo interior es
un idolo, seria mucho mejor dejar de
hacerle sacrificios. Es una tentativa de
uniformizaci6n, quc puede perjudicar,
por ejemplo, a los principiantes que
desearian utilizar el trance violento para
progresar 0 simplemente ponerse en
camino hacia Dios, 0 a los misticos avan­
zados que insisten en e\ conocimiento y
el cese espontaneo de la acci6n. El verda­
dero problema es que la jerarquia terne
no poder comprender la "ley definitiva"
y no conseguir controlar a aquellos que
la siguen de manera natura!. EI Buddha
contaba la siguiente historia: "Dos her­
manos fueron a la montana para cortar
lena y volvian muy cargados. EI mas
joven vio de golpe una gran cantidad de
monedas de cobre y dej6 caer su lena
para recoger tantas como pudiese. EI
mayor pens6: "Mc he matado tanto por
esta lena, que no pienso dejarmela per­
der; vendre mas tardc a por ella." Oes­
pues, el mas joven encontr6 monedas de
plata que tom6 en lugar de las de cobre,
mientras el mayor permanecia atado a la
lena que habia recogido con el sud~r de
su frente. Mas tarde, sucedi6 10 mismo
con monedas de oro. Al volver el mayor
desde 1a casa para recoger las monedas,
estas habian desaparecido". (11)
La no-dualidad es una doctrina fria y
desprovista de amOl; ya que no reconoce
el valor supremo de la persona humana.
Se trata de una cuesti6n clave que desarro­
llaremos mas en detalle. Fue posiblemente
Jacques Vigne
en los aiios treinta cua
a\canzo sus cotas m
judaismo, surgi6 la ob
el "Yo y el Tu", y en e
daci6n de la revista .
Mounier y Beriaev er
texto de la epoca serf<
Las democracias haci,
el auge de los totalit.
mente era urgente hac
la idea de que el ser I
ble. Escuchando 0 ley
dentales, se tiene la i
indio medio seria esq
texto de que no tenia I
etema. Para los que I
esta idea parece del
hindu comun tiene ur
ego como todo el mu
en conjunto una prco(
en estar en armonia c
amplio sentido que k
en su alma es un sign
l6gica. Sc ve al que·
dientc", cs decir, vivi
como una especie de
cia!. En hindi, udas
"solitario" y"triste".
el que qui ere comprol
en la via espiritual ex
renunciu, en la que
familiares. En este s(
fuerte proceso de inc
no se para aqu!, sino I
nueva liberaci6n, la •
consciencia universa
podria llamarse un
si6n".
Cuando se observa
cristiana de "person:
renciar en la practic;
pues es mas bien va:
'W: Vedanla y Hesicasmo
:ena en la plaza del
) a las masas despues
idad racional entre
desarrollo interior es
:ho mejor dejar de
Es una tentativa de
: puede perjudicar,
, prineipiantes que
trance violento para
:mente ponerse en
~ a los misticos avan­
n el conocimiento y
~ la acci6n. EI verda­
le la jerarquia teme
:r la "Icy definitiva"
rolar a aquellos quc
natural. EI Buddha
historia: "Dos her­
nontana para cortar
I cargados. EI mas
ma gran cantidad de
y dej6 caer su lena
como pudiese. EI
le matado tanto por
enso dejarmela per­
le a por ella." Des­
ncontr6 monedas de
gar de las de cobre,
:rmanecia atado a la
:ido con el sud~r de
, sucedi6 10 mismo
Al volver el mayor
!coger las monedas,
:cido". (II)
ma doctrina fda y
ya que no reconoce
'1 persona humana.
m clave que desarro­
Ie. Fue posiblemente
Jacques Viglle
en los anos treinta cuando el personalismo
aleanz6 sus cotas mas elevadas; en el
judaismo, surgi6 la obra de Martin Buber,
el "Yo y el Tu", y en el catolicismo la fun­
daci6n de la revista "Espiritu" con Jean
Mounier y Beriaev en particular. El con­
texto de la epoca seria mas bien sombrio.
Las democracias hacian oidos sordos ante
el auge de los totalitarismos, y efectiva­
mente era urgente hacer llegar a las masas
la idea de que el ser humano es inaliena­
ble. Escuchando 0 leyendo a ciertos occi­
dentales, se tiene la impresion de que el
indio medio seria esquizoide bajo el pre­
texto de que no tenia la noeion de persona
etema. Para los que han vivido en India .
esta idea parece del todo fantastiea. EI
hindu comun tiene una personalidad y un
ego como todo el mundo. Sin duda, tiene
en conjunto una preocupaci6n mas grandc
en cstar en annonia con la familia en mas
amplio sentido que los occidentales, pero
en su alma es un signa de madurez psico­
logica. Se ve al que quiere ser "indepen­
diente", es decir, vivir Icjos de la familia,
como una especie de fracas ado ser antiso­
cial. En hindi, udas significa a la vez
"solitario" y "triste". Por el contrario, para
el que quiere compro111eterse en un avance
en la via espiritual existe la posibilidad de
renuncia, en la que se eortan los lazos
familiares. En este sentido, se trata de un
fuerte proceso de individualizaci6n, pero
no se para aqui, sino que continua con una
nueva liberaci6n, la apertura a una nueva
consciencia universal e indivisa, 10 que
podria llamarse un proceso "de indivi­
sion".
Cuando se observa de cerca la nocion
cristiana de "persona" es dificil de dife­
renciar en la pnictica de la de individuo,
pues es mas bien vaga. Esta mas alia del
151
yo habitual, es "pura presencia" y es
"rigurosamente inefable del 111 is1110 modo
que la persona divina" (12): en el fondo
uno se pregunta 10 que Ie queda de pcrso­
nal, si no es el resuItado de una especie
de acto de fe puro afirmando que es
necesario que la persona continue exis­
tiendo, cueste 10 que cueste. Lossky dice:
"Renunciando a su propio contenido,
entregandolo libremente, dejando de
existir por sl-mis111a, la persona se
expresa plenamente en la naturaleza
lillica de todos". (13) Este p{mafo des­
cribe con exactitud la disolucion del ego
en el Vedanta y el proceso no tiene dema­
siada razon en guardar la persona tal y
como es. Evidente111cnte, la creencia en
el Juicio Final obliga a conservar una
especie de s0111bra de individuo obligado
a responder "presente" en la Ilamada
final. Dc la misma mancra, en el hindui­
smo existc algo de ego quc pas a de una
vida a otra para guiar el karma indivi­
dual, pero reconoce tambien que mas alla
de eso es posible una liberacion com­
pleta. En esc momento se disuelven en el
Ser, a la vez, kanna y persona. La luz de
la vela se disuelve en el Sol; el proceso
sigue su 16gica hasta el final. Las teolo­
gias personalistas estan tan atadas a su
idea que incluso corrigen a los mismos
Padres. Es divertido resaltar que uno de
ellos, citando a Gregorio de Nisa: "Los
conceptos crean imagenes de Dios, tan
solo el sobrecogimiento presiente algo",
se siente obligado a incluir esta correc­
ci6n: "Mas bien alguien". (14) Gregorio
de Nisa, en tanto que mistico confir­
mado, tenia la intuici6n del caracter
final111ente impersonal del Absoluto. Por
clio decia "algo" a la manera de tat (eso)
de las Upanishads cuando estas evocan 10
Supremo, 10 que molest6 a te610gos de
152
No-dualidady Mistica Cristiano: Vedanta y HesicaslII'
experiencias menos elevadas que corrian
tras la persona como uno puede correr
tras su sombra esperando atraparla un
dia.
Si el Cristo se aniquil6 a si mismo
cf Phil II, 7), se vaci6 de si
mismo, (,por que la persona humana no
podria hacer 10 mismo? <',No seria Ia
menor de las cosas? i,No esta escrito: "Si
el grano de maiz que ha caido al suelo
muere, traera muchos frutos?" <',Puede
decirse en verdad 10 que queda del grano
una vez muerto? La ciencia misma,
siguiendo los recientes descubrimientos
en neuro-psicologia, cuestiona nueva­
mente la noci6n de persona y regresa a
una concepci6n de tipo mas bien budista
que habla de "agregados". (15) Esto
ultimo no debe lie vamos a un nihilismo 0
a un debilitamiento. HEI hombre que
niega su propia individualidad no se
amedrenta, al contrario, se engrandece
con las dimcnsiones de la realidad uni­
versal", dijo Plotino. Mas cercano a
nosotros, otro gran representante de la
via del conoclmlento, Nisargadatta
Maharaj, afinna: "La caridad mas grande
es dar la propia conciencia de "yo soy"".
(kt~nose,
Una idea que sostiene el apego a la
noci6n de persona es que "no existe feli­
cidad mas alia de la reIaci6n". Esto se
basa en la experiencia afectiva habitual.
Los dualistas hindues toman la com para­
ci6n del terron de azucar que debe cam­
biar para que podamos percibir su sabor;
pero no es muy respetuoso para con el
Absoluto el considerarlo como un terron
de azucar y el querer hacerlo objeto de
degustacion, 10 que nos lIeva a hablar de
la cuestion del antropomorfismo en el
dualismo.
Las descripciones de la union con Dio~
bajo el nombre de esponsales 0 de relacio­
nes entre amante y amado ya no son satis­
factorias a partir de cierto nivel de
evolucion. Recuerdan demasiado a Ia pro­
yeccion de un deseo, y los psiquiatras
hacen no tar precisamente que se delira en
el sentido del propio deseo. La indefinici6n
de la idea de los dualistas segun la cual
vivimos cada vez mas el amor de Dios, mc
parece tambien muy antropomorfica. Es el
deseo de los amantes, pero la realidad
parece mas bien otra. Al leer cada vez mis
Iibros se sabe cada vez mas cosas; en ton­
ces, por ana]ogia, al realizar cad a vez un
mayor numero de practicas espirituales sc
deberia obtener tambien un mayor numero
de resultados; pero wodemos reducir la via
espiritual a una especie de progresion
geometrica?; es mas inesperado y mas inte­
resante tambien. i,No existe un intercs real
en la noci6n oriental de ruptura de niveles
(nirvikalpa samadhi, Salori)? (,No es una
necesidad a partir de un cicrto estado, al
igual que el paso de la fisica newtonian a a
la relativista se ha hecho necesario para
intcgrar nuevas experiencias? Curiosa­
mente, al superar la noci6n antropomorfica
de persona, se vuelve uno mas cercano al
hombre y a su experiencia directa. "No
existe otro Dios que el sentido de la presen­
cia", dice Nisargadatta Maharaj. (16). EI
maestro Eckhart, por su parte, afinnaba en
una celebre frase: "Si yo no existiese, Dios
tampoco existiria". (17)
La verdadera cuestion no es la proyeccion
de los propios deseos, cual rayos laser, a
las brumas celestes, sino el dejarlos ir des­
apegandose de ellos completamente con el
tin de que "Eso" pueda manifestarse. No
es facil y por esta raz6n se han creado tan­
tas disciplinas espirituales. Una critica de
Jacques Vigne
la no-dualidad tambie
tion de la pcrsona es I,
dualidad emplea tecni(
solo se basa en el amo
reflex ion que me vienl
el amor es tambien un;
si la palabra tecnica nc
sigue la via de la devo
poco a poco a jugar COl
convertirse en un jug!
poder dirigirlas ente
divino. Por su parte,
contra el Yoga en tant
purificacion de la \TIl
repetitivamente que ..
manera espontimea. I
Ser esta mas alia de 13
buscan unirse a una
(upasana).
El dualismo tiene ten(
espesar, el ego confiri
cia propia distinta de
preguntarnos, desde e
la psicologia de 10 pre
relaci6n cntre el dw
tismo de la circuncisi,
cia afirmada violentat
y del Islam (cf el Q
"Dios es 10 mas Elev
musulmana cotidiam
mienlo agresivo, au
cpocas difercntes en
i,no rcprescnta um
momento de decirlo,
unidad primordial?
tiene un impacto tar
sobre la fuerza sexual
un cierto despertar d,
rior que en India llarr
puede ser un tema de
ner de paso a aquellos
dos.
'I:
Vedanta y Hesicasmo
la union con Dios
onsales 0 de relacio­
!ado ya no son satis­
Ie cierto nivel de
demasiado a la pro­
), y los psiquiatras
~nte que se del ira en
eseo, La indefinicion
liistas segun la cual
el amor de Dios, me
lntropomorfica. Es el
~s, pero la realidad
AI leer cada vez mas
;z mas eosas; enton­
realizar eada vez un
lcticas espirituales se
en un mayor numero
odemos reducir la via
)ecie de progresion
:1esperado y mas inte­
existe un interes real
de ruptura de niveles
safori)? (,No es una
, un cierto estado, al
a fisica newtonian a a
lecho necesario para
)eriencias? Curiosa­
ocion antropomorfica
: uno mas cercano al
:riencia directa. "No
I sentido de la presen­
1a Maharaj. (16). El
su parte, afinnaba en
yo no existiese, Dios
7)
n no es la proyeccion
s, cual rayos laser, a
ino el dejarlos ir des­
:ompletamente con el
:da manifestarse. No
on se han creado tan­
llales. Una critica de
Jacques Viglle
la no-dualidad tambien Jigada a la cues­
tion de la persona es la siguiente: "La no­
dualidad emplea teenieas, el dualismo tan
solo se basa en el amor". (18) La primera
reflex ion que me viene a la mente es que
el amor es tambien una tecnica, 0 un arte,
si la palabra tecniea nos da miedo. El que
sigue la via de la devoeion debe aprender
poco a poco a jugar con sus emociones sin
convertirse en un juguete, con el fin de
poder dirigirlas enteramente hacia 10
divino. Por su parte, cl Vedanta no esta
contra cl Yoga en tanto que tcenica de la
purificaeion de la mente, pero subraya
repetitivamente que "Eso" se revela de
manera espontanea. La Rcalizacion del
Ser esta mas alia de las meditaciones que
busean unirse a una fonna divina dada
(upasunu).
EI dualismo tiene tendencia a endureeer,
espesar, el ego confiriendole una sus tan­
cia propia distinta de la divina. Podemos
preguntamos, desde el punto de vista de
la psicologia de 10 profundo, si no existe
relacion entre cl dualismo, cl trauma­
tismo de la circuncision y la trascenden­
cia afinnada violentamente del judaismo
y del Islam (cf el Qui Allahu Akbar ..
"Dios es 10 mas Elevado" en la plegaria
musulmana cotidiana). Este aconteei­
miento agresivo, aun apareciendo en
epocas diferentes en ambas religiones,
(,no representa una ruptura, es el
momento de decirlo, en el mundo de la
unidad primordial? Esta ruptura, (,no
tiene un impacto tan fuerte que actua
sobre la fuerza sexual y puede ocasionar
un cierto despertar de est a energia inte­
rior que en India Haman kUlldalini? Este
puede ser un tema de reflexion a propo­
ner de paso a aquellos que esten interesa­
dos.
153
No se puede hablar justamente del mas alia
de la persona si no se distingue claramente
entre el escape del ego por arriba y por
abajo. Esto ultimo pod ria corresponder a Ja
esquizofrenia, Ja otra cara del ego, 0 de
manera mas atenuada, a un tipo dc pensa­
miento modemo reduecionista, lease nihi­
lismo, que Jean Wahl habia apodado la
"trans-descendencia". Por esta razon pre­
fiero hablar de "transpersonalizaeion" mas
que de "despersonalizacion", palabra esta
ultima que tiene connotaciones peyorati­
vas de orden patologieo. Dc la misma
manera, me pareee mas eonveniente hablar
de la "via Jiberadora de la persona trans­
personal" a proposito de la via del conoei­
miento, mas que de vias "impersonaJes",
palabra que se asocia autOln<iticamente cn
la mente de la persona a la friaJdad y al
rechazo. Hay que haeer hincapie, a este
respecto, en la siguiente paradoja: la trans­
misien de las vias "impersonaJes" como el
Vedanta 0 el Zen se haec de manera muy
personal, de maestro a discipulo, gracias a
una relacion vital que se extiende durante
anos. (19) En este sentido, esta relacion es
menos impersonal que la transmisi6n insti­
tucional, que es la mas comun en el Cris­
tianismo. Un verdadero practicante de la
via del eonocimiento tiene una devocion
intensa por el Ser. Se ejercita en ese sen­
tido. Nisargadatta habla del "fulgor explo­
sivo del "Yo soy"". (20)
Jacques Maritain, tomista estricto, intenta
establecer una oposicion entre la via de la
devocion y la via del conoeimiento: la pri­
mera corresponderia a la mistica del fuego
y la segunda a la del espejo. La com para­
cion esta evidentemente cargada de sobre­
entendidos apologeticos, insinuando que
la via del conocimiento es glacial y que no
nos lleva mas que a nuestra faz, es decir,
154
No-dualidad y Mistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo
al aspecto mas exterior del ego. Debemos
resaltar que el fuego no cumple su voca­
cion hasta que el combustible ha sido
completamente quemado, es decir, cuando
la dualidad se ha consumido y solo queda
la unidad. Ademas, cuando es intensa, la
mistica del conocimiento es mas que un
fuego, es como un rayo l<iser que separa 10
real de 10 irreal. Por el contrario, aquellos
que sienten la necesidad de refugiarse en
un Dios con rostro humano -que se les
parcce extrafiamente, pues- , (,no estan
mas en la mistica del cspejo que aquellos
que saltan directamente en el Absoluto sin
forma? El otro que tiene el mismo aspecto
quc nosotros (,es realmente "otro"? i,Que
imagenes despierta el celebre Dells inti­
mior mea "Dios mas intimo para mi que
yo mismo" de San Agustin? Podriamos
entrevcr una especie de ccntro ultimo bajo
las diversas capas de la personalidad y los
condicionamientos, 0 un fondo del scr
humano que sc cxpande cada vez mas,
abri6ndose al Ser. Las dos imagenes -cl
grana de conscieneia 0 el espacio sin Iimi­
tes- son utilizadas regulannentc en cl
vedanta para evocar el Absoluto. (21)
Una ultima objecion al no-dualismo es
que cI que no cree en Ja persona tampoeo
puede respetarla. Me parece al contrario
que la respeta tanto mejor al no ser
molestado por la propia personalidad
para poder apreciar al otro objetiva­
mente, tal y como es. Es cuando dos per­
sonas, es decir en la practica dos egos, se
relaeionan que existe manipulacion y
cont1icto.
La nocion de persona, bajo el aspecto
concreto de personalidad, es util a buen
segura en la educacion para que los nifios
y los adolescentes puedan afirmarse en
tanto que ellos mismos. Ello es utilizado
igualmente desde el punto de vista social
y juridico, para que el individuo no sea
sepultado por la masa 0 la maquinaria
estatica. Mas profundamente, esta nocion
va a la par con el amor basado en 10
fisico, los minimos detalles personales
estan fuertemente investidos de carga
emocional por los am antes, el problema
es que esta carga emocional puede inver­
tirse subitamente y, de positivo, pasar a
negativo. Para un mistico maduro esta
nocion de persona, que al principio habia
sido de ayuda, se convierte ahora en un
obstaculo.
Como conclusion se desgaja la idea de
"nivel personalista": la pcrsona humana
cs el tipo mismo dc verdad provisional,
de practica comun (vyavaharika) que
desaparece al aproximarse al Absoluto,
al igual de efimera quc la llama de una
candela. Mientras se crec cn ello, se esta
somctido a ello. Al cuestionarlo, empieza
a ponerse el sol de la Liberaci6n. EI no­
dualismo no eontradice ninguna doctrina,
mas bien les otorga lugar y las integra en
su visi6n del mundo. Aquellos que guar­
dan aun en si mismos, como un resabio,
que 10 personal es la vida y que 10 imper­
sonal es la muerte, harian bien en meditar
en el siguiente koan zen: "E/ vivo entra
ell e/ atmid, y el mllerlo 10 tran"porta ".
La 11O-dualidad es una tecllica ,li-ia.
tiene 110ciim de gratuidad ya qlle
posee el concepto de gracia.
I/O
110
Alm en el Yoga, que es la parte mas tec­
nica de la espiritualidad hindu, la noci6n
de gracia esta presente. Los Yoga-Sutras
de Pataiijali hablan del "abandono al
Senor" (Ishwara Pranidh,lna 1-23) como
Jacques Viglle
una posible via para
luto. EI Vedanta, en I
no-dualisla, no tiene
pero insiste fuertemen
EI conocimiento se re
sin ser la recompensa
tros esfuerzos espirit
punto es cierto que el '
cia de la escuela que I
camente, el Purva-l
Buddhismo Mahayan;
"realizaci6n espontani
muy importanle.
A la inversa, en la pl(
acepta hasta un cierta
automatica de la petic
mcja al Yoga: "L1amE
Esta cficacia no solam
la buena vol un tad d
cxislc tambien a pcsa
como indica la pan~
importunado que acab;
pcdigiiefio para consc!
paz. Los propios ort(
contrariamcnte a los
gracia fue dada enter;
prineipio al hombre. E
d6jica, como bien di(
erifa de San 19naci
actuar como si todo d,
brc y no de Dios, h2
Dios como si to do dCf
del hombre". (22) Sc I
proposicion de la tcole
deificado par la graci
leza", entendiendo el
leza" como ego. Esta
ser su propia naturale
ordinario: "yo soy yo
En estc momenta est:
muy diferente de 10 q
es decir, que la fuerz,
'a: Vedanta y Hesicasmo
Jacques Vigne
os. Ello es utilizado
Junto de vista social
el individuo no sea
lsa 0 la maquinaria
lamente, esta noci6n
amor basado en 10
detalles personales
nvestidos de carga
mantes, el problema
ocional puede inver­
de positivo, pasar a
nistico maduro esta
ue al principio habia
mvierte ahora en un
una posible via para alcanzar el Abso­
luto. EI Vedanta, en tanto que doctrina
no-dualista, no tiene noci6n de gracia
pero insiste fuertemente en la gratuidad.
EI conocimiento se revela por si mismo
sin ser la recompensa obligada de nues­
tros esfuerzos espirituales. Sobre este
punto es cierto que el Vedanta se diferen­
cia de la eseuela que Ie precedi6 hist6ri­
camente, el Purva-Mimansa. En el
Buddhismo Mahayana el concepto de
"realizaei6n espontanea" es igualmente
muy importante.
~
desgaja la idea de
la persona humana
. verdad provisional,
(vyavaharika) que
:imarse al A bso luto,
que la llama de una
: cree en ello, se esta
:uestionarlo, empieza
la Liberaei6n. EI no­
ice ninguna doetrina,
lugar y las integra en
I. Aquellos que guar­
os, como un resabio,
I vida y que 10 imper­
arian bien en meditar
1 zen: "£1 vivo entra
~,.to 10 transporta".
ulla tecnica fda, 110
"atuidad ya que no
? gracia.
e es la parte mas tec­
idad hindu, la noci6n
·nte. Los Yoga-Sutras
n del "abandono al
anidhana 1-23) como
A la inversa, en la plegaria cristiana, se
acepta hasta un cierto punto la eficacia
automatica de la petici6n, 10 que se ase­
meja al Yoga: "Llamad y se os abrira".
Esta eficaeia no solamente no depende de
la buena voluntad de Dios, sino que
existe tambien a pesar de su reticeneia,
como indica la parabola del hombre
importunado que acaba por ceder ante un
pedigiiefio para eonseguir que Ie deje en
paz. Los propios ortodoxos reeonoeen,
contrariamente a los cat6licos, que la
gracia fue dada enteramente y desde el
principio al hombre. Esta gracia es para­
d6jica, como bien dice la palabra ap6­
crifa de San Ignacio: "Es necesario
actuar como si todo dependiese del hom­
bre y no de Dios, hay que eonfiarse a
Dios como si todo dependiese de EI y no
del hombre". (22) Se puede interpretar la
proposici6n de la teologia: "EI hombre es
deificado por la gracia y no por natura­
leza", entendiendo el tennino "natura­
leza" como ego. Esta, en efecto, parece
ser su propia naturaleza para el hombre
ordinario: "yo soy yo, iY esto es todo!"
En este momenta esta afinnaci6n no es
muy diferente de 10 que dice el Vedanta,
es decir, que la fuerza que transfonna el
155
ego surge mas alia del mismo ego, del
Ser en un lenguaje no-dual.
La dependencia del cristiano de una gra­
cia de Dios de la que no comprende ni el
c6mo ni el porque, da facilmente una
dimensi6n tragica a su vida espiritual.
Filarete de Moscu dice por ejemplo: "EI
hombre esta suspendido entre dos preci­
pieios como sobre un puente de diaman­
tes que es la voluntad de Dios; por
debajo de el, cl precipicio de las Tinie­
bias divinas hacia el eual es lIamado, y
debajo de este el preeipicio de la inexis­
teneia de donde ha sido sacado y al que
no puede sino caer si renuncia a su voca­
ci6n -pero sin podcr regresar jamas a la
inexistencia". (23) Desde el punto de
vista de la psicologia espiritual, el sen­
tido de 10 absurdo y de la angustia exis­
tencial, (,no serian al reves, la sombra de
la creencia en la graeia de un dios eom­
pletamente bueno?
La cuesti6n de la gracia va ligada a la de
la trascendeneia y la inmanencia. A
menudo se reprocha al no-dualismo el
caer en el completo inmanentismo, el pan­
teismo al afinnar que el Absoluto, el
mundo y el hombre son uno s6lo. Es ver­
dad, el no-dualismo no tiene dificultad
alguna en integrar el panteismo como
nivel de desarrollo espiritual posible. No
se siente obligado a rechazarlo violenta­
mente como hace el monoteismo. Dicho
esto, el propio movimiento del no-dua­
lismo es trascendente y apofatico: es el
neti, neti de las Upanishads. Es interesante
sefialar que la intenci6n con la que se
habla del "no-dualismo" y no de monismo
es para poder conservar para el Absoluto
su caracter de inefabilidad, mas alla de los
contrarios, mas alla incluso del ser y del
156
No-dualidad y ;v/iSfica Cristiana: Vedanta y Hesicasl/1o
no-ser. En el cristianismo, aparte de cier­
tos misticos, se teme mas cuestionar que
el ir mas alia de la entidad misma de Dios.
En ese sentido, el no-dualismo es mas
trascendente que el dualismo.
Los no-dualistas 110 son capaces de
actual' en el mundo ni poseell mentalidad
cientifica.
Esta es otra de las objeciones mas comu­
nes a los no-dualistas, seguramente
debida a su tendencia a considerar el
cuerpo y el mundo en general como una
ilusi6n. Empeeemos por hablar del
euerpo. Los cristianos repiten que la
Encar'1acion solamente puede dar al
eue e~' su dignidad ultima, otorgandole
su vocacion divina de templo del espi­
ritu. Antes que nada, hay que mencionar
que para el no-dualista el cuerpo no es
solamente el templo del espiritu, sino el
espiritu en si mismo, ya que en la base de
todo no existe mas que una sola sustan­
cia-espiritu. En el no-dualismo, se reco­
nocc que la mente se basa en el cuerpo y
se repite que es una suerte el haberse
beneficiado de un renaeimicnto en un
cuerpo humano, y que por 10 tanto hay
que hacer un buen uso de eL EI Vcdanta,
10 hemos visto antes, acepta las practicas
y6guicas como medio de puriticacion del
espiritu, Es interesante notar que en el
ambiente no-dualista de India las tccni­
cas corporales con intencion espiritual,
reagrupadas bajo el termino de Yoga, son
las mas desarrolladas: puede ser porque
un eierto numero de hindues sentian los
Iimites de la explicacion uniea del pro­
greso espiritual por la graeia divina.
En el fondo, afim1ar la realidad del
cuerpo representa un lugar eOmlll1: el
hombre ordinario esta eonveneido de esta
realidad, y yo mismo estoy seguro de que
si pudiesemos hablar de metafisiea con
los animales estos estarian igualmente a
favor de este punto de vista. La duda
sobre esta evidencia proviene de la habi­
lidad de la consciencia humana en exa­
minarse ella misma: el desequilibrio de
la duda es eJ paso del pensamiento. Este
desapego del euerpo no es una cuesti6n
de una ascesis fisica, sino mas bien de
comprension. En ese sentido, los ascetas
cristianos con sus maeeraciones parecen
haber tenido menos respeto por el euerpo
que los neoplatonicos, que sin embargo
decian que este no tenia demasiada
importancia en relacion al fin que es la
eonsciencia, pero al menos no 10 tortura­
ban.
Enfoqucmonos ahora en el segundo
punto de la objeeion -Ia irrealidad del
mundo segun el no-dualismo. Ha habido,
eso cs eierto, algunas eseuelas budistas
que han mantenido una irrealidad com­
pleta de los fenomenos, los vijiiallavadis.
Sin embargo, en el Vedanta, el mundo
manifestado (maya) se describe como "ni
real, ni irreal", desafiando a la praetica
toda descripcion (al1irvGllcGniya). Ade­
mas, el mundo cs irreal en relacion al
Absoluto (paramartha), pero posee una
realidad relativa (vyavaharika) como
hem os visto anteriormente al hablar de
las dos verdades. En cuanto a la capaei­
dad de evaluaci6n de las capacidades de
accion de los vendatinos, podemos men­
cionar que la Mision Ramakrishna, inspi­
rada en el ideal del "Vedanta practico"
de Vivekananda, parece ser la organiza­
cion humanitaria mas grande del mundo.
Sobre todo, se encuentra presente en
India, pero tengamos en cuenta que India
Jacques Vigne
representa unos mil m
tes. Los hechos l11U
Vedanta y accion no
incompatibles.
Por otro lado, pareee (
dental no se dcsarrollo
sia, sino contra ella,
sobre la evolucion qw
nuestros dias, no pan
demasiado el pensamil
del Ser impersonal es 1
milable a la noeion d·
que desarrolla la fisil
que la del Dios person:
ex machina de las d
Los cientiticos han d
concepcion de Dios
Todo hombre verdadl
considera que Dios e:
que ineluso es mucho
si no, es un material
rituales. "Feliz el m
cada hombre en tanto
Dios" (24), dijo Nito
monje es aquel que, n
los hombres, sigue uni
si mismo cn eada uno
No se trata de abando
la vision del mundo r
a Dios, para desafiar
ortodoxos asi como a
de la Isha Upanishad:
envuclto por cl Senor
se mueve en este 111un
Habiendo renuneiado
provecho ... ". iEI abo
esta intuiei6n no-dual
cion de nuestra conce
mundo al parar la me
no dice cn su coraze
mas en el mundo ql
w: Vedama y Hesicasmo
Jacques Vigne
a conveneido de esta
estoy seguro de que
Ir dc mctafisica con
starian igualmente a
I de vista. La duda
proviene de la habi­
cia humana en exa­
el desequilibrio de
el pensamicnto. Este
) no es una euestion
a, sino mas bien de
~ sentido, los ascetas
laccraelOnes pareeen
respeto por el cuerpo
)S, que sin embargo
to tenia demasiada
:ion al fin que es la
menos no 10 tortura­
representa unos mil millones de habitan­
tes. Los hechos muestran, pues, que
Vedanta y aecion no son en absoluto
incompatibles.
I
lra en el segundo
m -Ia irrealidad del
iualismo. Ha habido,
,as eseuelas budistas
una irrealidad com­
lOS, los vijiianavadis.
Vedanta, el mundo
se describe como "ni
~fiando a la praetica
nirvancaniya). Ade­
irreal en relacion al
'ha), pero posee una
\ravaharika) como
mncnte al hablar de
n cuanto a la capac i­
Ie las eapaeidades de
tinos, podemos men­
1 Ramakrishna, inspi­
~I "Vedanta practico"
crece ser la organiza­
is grandc del mundo.
cuentra presente en
s en euenta que India
Por otro lado, parece que la ciencia occi­
dental no se desarrollo a causa de la Igle­
sia, sino contra clla. Las controversias
sobre la cvoluei6n que aun continuan en
nuestros dias, no parecen haber agitado
demasiado el pensamiento hindu. La idea
dcl Ser impersonal cs m{ls facilmente asi­
milable a la noci6n de campo unificado
que desarrolla la fisica contemporanea.
quc la del Dios personal, creador, el DCIIS
cx macliina de las doctrinas dualistas.
Los cientificos han debido olvidar esta
concepcion de Dios para evolucionar.
Todo hombre vcrdaderamentc religioso
considera que Dios esta en el mundo y
que incluso es mucho mas real quc cste,
si no, es un materialista que asistira a
rituales. "Feliz el monje que observa
cada hombre en tanto que Dios detras de
Dios" (24), dijo Nilo el Sinaita, y HEI
monje es aque! que, retirandose de entre
los hombres, sigue lI11ido a estos y se ve a
sf mismo en cada uno de ellos". (25)
No se trata de abandonar el mundo, sino
la vision dcl mundo para ver claramente
a Dios, para desafiarlo como dicen los
ortodoxos asi como a su manera el iniclo
de la Isha Upanishad: "Que todo esto sea
envueIto por el Senor (l'iha), todo 10 que
se mueve en este mundo en movimiento.
Habiendo renunciado a ello, puedes sacar
provecho ... ". JEI abate Antonios tenia
esta intuicion no-dualista de la desapari­
cion de nuestra concepcion ordinaria del
mundo al parar la mente! "Si el hombre
no dice en su corazon "no existe nadie
mas en el mundo que Dios y yo", no
157
obtendnl descanso". (26) Isaac el Sirio
llego igualmente por experiencia direeta
a una concepcion proxima a la ercaeion
por la mirada (drishti shristi) del pens a­
miento hindu: HEl mundo muere en el
momento en que el curso de los pens a­
mientos sc detiene". (27)
Santo Tomas reconocia que podia ser que
el mundo no existiese al cscribir: "Pucde
ser que todo 10 que no sea Dios no
cxista". (28) Grcgorio de N isa prcsentaba
la paradoja del mundo, a la vez rcal c
irrcal al dceir: "La paradoja del mundo cs
tener su existencia en la no-cxistencia".
(29) EI Maestro Eckhart no duda cn afir­
mar como evidencia la irrealidad ultima
de la crcaci6n: "Todas las eriaturas son
una pura nulidad. No digo que sean mfni­
mas 0 que sean algo, son puro nada. Lo
que no tiene ser es nada. Todas las criatu­
ras 110 tienen ser, ya que SlI scr depende
de Dios". (30) La unica diferencia entre
la teologia cristiana clasica y el Vedanta
cs que la prim era dice que el hombrc ha
perdido su estado de deit1cacion y que
hay que reencontrarlo, mientras que el
segundo dice que el hombre solamente
cree haberlo perdido.
Se puede criticar la nocion vedantina del
mundo manifestado como an irvacaniya ,
mas alia de toda descripcion. (,No es una
solucion demasiado facil; una escapato­
ria que deja el problema sin resolver? Es
verdad, pero todas las metaf1sieas y las
teologias dejan los problemas sin resol­
ver. Los mismos cristianos reconocen
que la creaci6n ex nihilo es inexplicable.
(,C6mo pudo Dios descender de 10 intcm­
poral a 10 temporal para cumplir el acto
de la creaci6n? (,Como cscogio el
momento de haeerlo? Si es todopodc­
158
No-dualidad y llyffstica Cristiana: Vedanta y HesicaslIIo
roso, (,como explicar la libertad del hom­
bre? Mediante su amor, se dice. Pero si
Dios es real mente completo, l.en que
tiene necesidad de amor? Y si el hombre
era perfecto antes de su falta, no es total­
mente i1ogico que escogiese el mal? En
conjunto, el problema del mal es mas
dificil de resolver en un sistema dualista,
donde se sup one que el universo fue
creado por un Dios bueno. Para los no­
dualistas, el mal viene no del pecado,
sino de la ignorancia, de maya, que no
tiene principio pero si un fin cn el ins­
tante en que el aspirante espiritual
alcanza la libcracion. Esta concepcion
del mal como ignoraneia concuerda !mis
con el espiritu de la psicologia modema
que la del mal como pecado.
La noei6n de "pueblo elegido", que
parece evidente vista desde el interior del
cristianismo y del judaisl11o, es mas bien
chocante vista desde el exterior. Ese Oios
que ha eseogido a un pequeno porcentaje
de la humanidad para hacer un "pueblo
eseogido" y ha rechazado a los demas, si
no es un infiemo al menos de rango
menor, parece mas un demonio que un
Oios a ojos de esos "otros". En ese sen­
tido, un metatlsico que se ahorra la idea
de "pueblo elegido" y de Oios personal,
representa eiertamente un progreso hacia
una posibilidad de toleraneia reall11ente
universal. En India, se intento aliar el no­
dualisl110 puro (Advaita- Vedanta) con el
dualismo visl1l1uita. Buseando conciliar
creencias de este ultimo grupo con el no­
dualismo, Ramanuja claboro un no-dua­
Iismo mitigado. Segun la confesion
misma de algunos fil6sofos, su tentativa
es eompletamente banal, no porque hay a
sido un mal pensador, sino porque su
proyecto de partida era una especie de
cuadratura del circulo. (31) Al igual que
los misticos cristianos a los que no les
gustan demasiado las reglas mom'lsticas
suaves, los misticos de la India contem­
poninea no se refieren demasiado al no­
dualismo mitigado cuando hablan del
vedanta: directamente se enfocan en el
Advaita.
La lIo-dualidad no se beneficia de una
palabra revelada.
Una ultima objecion hecha a menudo por
los teologos a prop6sito de la no-duali­
dad cs que no se beneficia de otra Pala­
bra revelada, por el hecho mismo dc que
no reconoee ningun Dios personal. EI no­
dualismo no tendria tampoco posibilidad
alguna de revelaci6n progresiva de Oios
cn la historia. Hay que decir que en el
hinduismo las grandes palabras de las
Upanishads ("Tu eres Eso", etc ... ) se
eonsideran como reveladas a los antiguos
sabios (rishis): no las han oido de un
Oios personal como los profetas de la
Biblia, sino que las han "visto" dir.ceta­
mente. Es mas, el sentido mismo de la
palabra rishi es "aquel que ve".
EI no-dualismo no tiene ninguna dificul­
tad en particular en aceptar la noci6n de
evoluci6n. Esta evoluci6n se situa en el
seno de la verdad empiriea (vyavaha­
rika), y no cambia en nada 10 Absoluto.
Por el contrario, el no-dualismo no cree
que nuestro mundo vaya haeia un paraiso
en la tierra, 0 que Dios se manitleste en
este mundo cada vez mas, ni en todo cste
eontinuismo. Es cierto que existen mejo­
ras netas en ciertos campos, pero tambien
existen regresiones en otros. EI espiritu
de las gentes es mas refinado, pero al
mismo tiempo mas susceptible de sufrir
Jacques Vigne
por motivos mas su
misma de un Dios er
hace mas evidente aur
mal. La creencia en que
la tierra seguira una cur
continuo a la manera C
industrial de un pais en
tiene mas bien el aire c
de la revoluci6n indus
lista no tiene necesidad
var su trabajo sobre Sl 1
demas.
La creencia en elliber
entre dualidad y no-d
La cuesti6n del jival1-1
en vida, permite rest
proximidad y cI desac
cepciones dualistas y
Vedanta dice que el s
liberarse eomplctamen
que su consciencia se
con el Absoluto, propu
los dualistas.
Para situar la cuestit),
vida.
Podemos deeir que cl
noce un caso de libcrac
del mismo Jesus. (32)
India existcn ciertas es
les, como la de Madl
categorieamente csta P(
resante notar que la 16g
les conduce a poner la
sustancias separadas en
mente de Dios, el alme
creer tambien en el pa
etemos (los sectarios d
unicos que crecn en ell
de los lainistas). (33) E
'a: Vedanta y Hesicasmo
o. (31) Al igual que
ClS a los que no les
s reglas monasticas
de la India contem­
;n demasiado al no­
cuando hablan del
te se enfocan en el
se beneficia de una
hecha a mcnudo por
)sito de la no-dual i­
neficia de otra Pala­
heeho mismo de que
Dios personal. EI no­
tam poco posibilidad
1 progresiva de Dios
que decir quc en el
des palabras de las
'res Eso", etc ... ) se
'eladas a los antiguos
las han oido de un
~ los profetas de la
han "v isto" d i r.ccta­
5entido mismo de la
lei que ve".
iene ninguna dificul­
aceptar la nocion de
lucion se situa en el
empirica (.yavaha­
;n nada 10 Absoluto.
no-dualismo no cree
iaya hacia un paraiso
)ios se manifieste en
~ mas, ni en todo este
10 que existen mejo­
ampos, pero tambien
en otros. El espiritu
as refinado, pero al
susceptible de sufrir
Jacques Vigne
por motivos mas sutiles, La noclOn
misma de un Dios enteramente bueno
hace mas evidente aun e\ escandalo del
mal. La creencia en que la felicidad sobre
la tierra seguira una curva de crecimiento
continuo a la manera de una produccion
industrial de un pais en optimo desarrollo
tiene mas bien el aire de una "metafisica
de la revolucion industrial". El no-dua­
lista no tiene necesidad de ello para moti­
var su trabajo sobre SI mismo y sobre los
demas.
La creencia en el liberado en vida nexo
entre dualidad y no-dualidad
La cuestion del jivan-milkta, el liberado
en vida, permite resumir a la vez la
proximidad y el desacuerdo de las con­
cepeiones dualistas y no-dualistas. EI
Vedanta dice que el ser humano puede
liberarse completamente en esta vida y
que su conseiencia se convierte en tina
con el Absoluto, propuesta que rechazan
los dualistas,
Para situar la cuestion del Iiberado en
vida.
Podemos decir que el cristianismo reco­
noce un caso de liberado en vida; se trata
del mismo Jesus. (32) Por otro lado, en
India existen ciertas escuelas devociona­
les, como la de Madhva, que rechazan
categorieamente esta posibilidad. Es inte­
resante notar que la logica de este reehazo
les conduce a poner la existencia de tres
sustancias separadas en la base respectiva­
mente de Dios, el alma y el mundo, y a
creer tambien en el paraiso y el intlemo
etemos (los sectarios de Madhva son los
unicos que creen en ella en India, a parte
de los lainistas). (33) En el fondo, coinci­
159
den con la concepcion cristiana ordinaria.
Por el contrario, Vivekananda describe asi
al liberado en vida: "Todo el tiempo esta
en 61. pero et no esta en el tiempo. Todos
los paraisos estan en el, pero 61 no esta en
esos paraisos". (34) Si aceptamos el hecho
de que el sufrimiento viene de la ignoran­
cia y no del pecado, es muy logico dedr
que un conocimiento completo puede
liberar de las ataduras. No se trata de un
eonoeimiento intelectual, sino experien­
cia!. Un antiguo texto dc India dice: "Si
bien el conoeimiento no puede ser co no­
cido en tanto que objeto separado, puede
ser al menos realizado en tanto que sujeto
puro". (35)
Esto nos lleva a haecr una distincion
esencial que es constante en India, pero
que no se ha estableeido tan elaramente
en el cristianismo: la difereneia entre 10
que no puede ser dicho y 10 que no puede
ser cxpcrimentado. De heeho, podemos
hacer dos 1istas de citas escriturales
igualmente importantes: Dios se revel a
completamente, en particular a traves de
lesucristo, y podemos vcrlo cara a eara;
en el lado opuesto, Dios cs inaccesible,
cscondido en la vaguedad. Esta contra­
diccion ha hecho correr entre los pens a­
do res cristianos rios de tinta. La solucion
no-dualista es muy simple: se trata de
distinguir, en la interpretacion de "inac­
cesible", el dominio del lenguaje 0 de la
razon del de la experiencia directa. La
esencia divina, 0 el Absoluto, es inacce­
sible a los primeros, pero accesible a la
segunda. No se trata de hacer de Dios un
objeto de conocimiento, sino de conver­
timos en el Conocimiento mismo.
Encontramos ciertas ideas no-dualistas en
el Antiguo Testamento: pienso por ejem­
160
No-dualidad y Mistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo
plo en ese extrano pasaje del Oeuterono­
mio donde no se sabe quien de los dos esta
hablando, si Oios 0 Moises. (Oeut 29,1-6)
Moises empieza por afinnar: "Habeis
visto con vuestros ojos 10 que Yahve
hizo ..." (v.4) "os he hecho caminar cua­
renta anos por el desierto" 10 que puede
entenderse como dicho por Moises, por
Oios mismo, 0 por los dos a la vez " ...
con el fin de que aprendierais que yo,
Yahve, soy vuestro Oios". En general, se
traduce la frase introductoria del salmo 90
como "oracien de Moises, hombre de
Oios", pero en realidad dice "Is ha Efoi",
palabra por palabra: "EI hombre, el Oios";
es decir, el hombre que es Oios segun la
fonna habitual de la frase hebraica. Si el
autor hubiese querido decir rcalmente "El
hombre de Oios", habria escrito "Sep
E/oi". Esta expresi6n de cl "hombre­
Oios", aparece a menudo en el Libro de
los Reyes, en particular a prop6sito de Eli­
seo y los milagros que realizo (R IV 21,
por ejemplo).
Para los Padres, la deifieaci6n completa
del hombre no es posible hasta la 1l1uerte,
10 que corresponde a la liberaci6n en cl
momento de la separaeion del cuerpo (vi­
deha mukti) que acepta el vedanta (ade­
mas de la de jivan-mukti) e igualmente
las eseuelas devocionales. En el Antiguo
Testamento, la expresi6n "sereis como
dioses" es ambivalente. La utiliza la ser­
piente para tenlar a Eva (Gen Ill, 5), pero
Yahve dice tam bien a Moises "seras un
dios para Aaron". (Ex 4, 16) Los dualis­
tas rechazan la idea del conocimiento de
la eseneia de Oios por miedo a la desme­
sura. Oicho esto, los liberados en vida de
la India son en su comportamiento un
ejemplo de perfecta simplicidad. Por otro
lado, desde el pun to de vista teorico,
carecen de base alguna para el orgulJo,
puesto que carecen de ego.
Los dualistas dicen que el hombre no
puede conocer aDios, si no se convertiria
en todopoderoso, omnisciente y creador,
pero un gran sabio como Ramana Mahar­
shi rebate la objeci6n diciendo que son
nuestras proyecciones antropomorficas las
que prestan esas cualidades a Oios: "La
grandeza de alguien crece en proporcion a
su humildad. La raz6n del ser supremo de
Oios, que haee que todo el universo sc
incline ante el, es su humildad sublime
que no conoce el mas minimo ego, a1m en
los 1110mentos de desatencion". (36) Dc la
misma manera, cuando se preguntaba a
Ramana Maharshi si 61 era omnisciente,
simplemente respondia:
todo 10 que
tengo necesidad de saber". En cuanto al
poder creador, cste no es considerado en
el hinduismo como algo supremo. El dios
considerado como creador, Brahma, es
asistido por un organizador, un buen arte­
sana Hamado Ylshvakarma (el que hace el
mundo). Es el dios espeeifico de 1a casta
de los artesanos y mas reeientemente de 1a
de los ingenieros ... Ademas, el poder
creador no esta completamente exeluido
de los jivan-mukta. Las materializaciones
fonnan parte de los milagros registrados
en las vidas de los santos de India, aun en
el siglo xx. EI guru mas eonocido actual­
mente en este campo es Sathya Sai Baba,
del cual se ha intentado desenmasearar la
supercheria sin demasiado exito aparente­
mente, a pesar de easi medio siglo de
esfuerzos. Se dice que tiene cerca de ein­
cuenta millones de discipulos por todo el
mundo. Antes de decir que eI hombre no
puede realizar la esencia de Oios porque
no posee los poderes, deberiamos revisar
la concepci6n que tenemos de 6stos para
Jacques Vigne
preguntamos si nc
antropomorfica, mar
de super-hombre dot
Sigllos de fa experi
mistieo cristiano.
La experiencia no-d
alliberado en vida. ~
porciona una estabi
autores cristianos I
dos grupos: los prill
te610gos u obispos
sionales, rechazan
manera violenta, vie
del orgullo de Luci:
nlcros sintomas de i
quia, que se ha hi
ascntar una base sol
fieles para asentar s
grupo de autores, c
todo a los misticos,
piensa que es posibl
posibilidad de recha
taJgia la divinizacic
via que les es prohi!
dualista.
Podemos citar algUi
los autores del pri
creen en la posibi
completa del mal t:
corresponde a la
Jean Climaque hab
"perfeeta y nunca pe
tos... (37) Pareee s
siempre miedo d~
incluso en su !echo
manos 10 veian lion
Ie preguntaron: "En
Glu tienes miedo, p,
respondio: "En \Cf(
tengo ahora me aeol
lila: Vedanta y Hesicasmo
Jacques Vignc
suna para el orgulIo,
de ego.
pre gun tamos si no es exeesivamente
antropomorfiea, marcada por el arquetipo
de super-hombre dotado de super-ego ...
que el hombre no
)s, si no se convertiria
mnisciente y creador,
;omo Ramana Mahar­
ion diciendo que son
es antropomorficas las
lalidades a Dios: "La
crece en proporeion a
.on del ser supremo de
e to do el universo se
su humildad sublime
as minima ego, aun cn
~satencion". (36) Dc la
ando se preguntaba a
si el era omnisciente,
rldia: "Se todo 10 que
, saber". En euanto al
no es considerado en
algo supremo. EI dios
creador, Brahma, es
mizador, un buen arte­
1karma (el que hace el
especifico de la casta
uis recientemente de la
.. Ademas, el poder
mplctamente excluido
Las materializaciones
s milagros registrados
;antos de India, aun en
1 mas conoeido actual­
10 es Sal/zya Sai Baba,
.tado desenmascarar la
lasiado exito aparentecasi medio siglo de
lue tiene cerca de cin­
discipulos por todo el
eeir que el hombre no
;encia de Dios porque
es, deberiamos revisar
tenemos de estos para
1
Sigl10s de la experiencia no-dual en eI
mistico cristiano.
La experiencia no-dual es 10 que define
al liberado en vida. Su realizacion Ie pro­
poreiona una estabilidad completa. Los
autores cristianos puedcn dividirse en
dos grupos: los primcros, sobre todo los
teo logos U obispos predicadorcs pro fe­
sionales, rechazan esta posibilidad de
manera violenta, viendo en ella una sefial
del orgullo de Lucifer asi como los pri­
meros sintomas de insumision a la jerar­
quia, que se ha hecho necesaria para
asentar una base salida del pecado de los
fieles para asentar su poder. EI segundo
grupo dc autores, comprendiendo sobre
todo a los misticos, monjes y solitarios,
piensa que es posible esta perfecci6n sin
posibilidad de rcchazo y evoca con nos­
talgia la divinizaci6n compIeta de esta
via que les es prohibida por una teologia
dualista.
Podemos citar algunas reflexiones entre
los autores del primer grupo, que no
creen en la posibilidad de liberacion
completa del mal en esta vida, 10 que
corresponde a la experiencia comun.
Jean Climaque habla de la perfecci6n
"perfecta y nunca perfecta" de los perfec­
tos ... (37) Parece ser que Arsenio tuvo
siempre miedo de estar en pecado,
incluso en su lecho de muerte. Sus her­
manos 10 veian llorar en ese momenta y
Ie preguntaron: "En verdad tu tambien,
(,tu tienes miedo, Padre?", a 10 que este
respondi6: "En verdad, este miedo que
tengo ahora me acompafia desde que me
161
hice monje". , y se durmio asi. (38) La
opinion mas comun es que las pasiones
continuan existiendo; simplemente han
sido encadenadas por los santos. (39)
Aun as!, si Ieemos atentamcnte los testi­
monios de los misticos, cncontramos
numerosas alusiones a la experiencia no­
dual y a la perfeccion estable. A menudo,
intentan rccobrarse de la impresion
diciendo que su union con Dios solo
existe en los limites de la diferencia de
las naturaJezas, 10 que aparece como una
reanudacion racionalizada y secundaria
de la experiencia misma. En cl Nuevo
Testamento, hay una confesion de San
Pedro que molesta bastantc a los teolo­
gos. En su segunda epistola (II P I, 4)
dice: "... con el fin de que seamos
"comuncs" a la naturaleza divina" (lheias
koinol1oi phuseos). Koinolloi significa
"comunes": "participantes" es una tra­
ducci6n edulcorada. Simeon el Nucvo
Teologo dice: "Para los perfectos que
estan ya dentro de la luz divina, el dia
del Sefior (el Juicio Final) no llegara
nunca (40); 0 incluso: "Oh divino Amor,
el que te ha conocido 0 ha sido conocido
por ti no sabra como eoncebir duda
alguna." (41) Era el mismo Sime6n el
que afim1aba no solamente la posibili­
dad, sino tambien la necesidad del estado
de Iiberacion en vida al decir: HEI que no
ha visto a Dios en esta vida no 10 vera en
la otra". Serafin de Sarov, en su celebre
entrevista con Molotov, no va a la zaga:
"Tenemos que aspirar a la medida per­
fecta de la estatura del Cristo ... Enton­
ces, esta alegria que sentimos parcial y
breve, aparecenl en toda su plenitud col­
mando nuestro ser de delicias inefables
que nadie podra arrebatamos". (42)
Babla visiblemente de una experiencia
162
;"io-dualidad y klistiea Cristiana: Vedanta y Hesicasmo
que sohrepasa esta vida. Ciertos Padres
reconocian que la guerra entre el vieio y
la virtud toca a su fin, que todo se eon­
vierte en Iuz, y que la gracia aetua sin
cesar. (43) En ese momento, la vela del
inteIecto se eonvierte toda ella en luz
divina.
Jean Bar Kaldoun, de la tradieion monas­
tiea siria, describe el progreso espiritual
de una manera que recuerda mucho a las
Upanishads: HEI cuerpo se vuelve misti­
camente sutil y sustituye al alma; el alma
sustituye a la inteligencia, la inteligeneia
al espiritu, y este se convierte en Dios, es
Dios verdadero, y el euerpo, el alma y la
inteligencia Ie sirven. Dejame, hermano,
y no me fuerees a hablar demasiado de
cste estado ... El que se ha vuelto digno
de el no tiene necesidad de ser instruido
desde el exterior: es su propio maestro".
(44) Encontramos entrelazadas muy a
menu do las nociones de union completa
con 10 divino y de liberacion no menos
completa de la dependencia de est a vida.
En la Kat!w-Upanishad, encontramos la
progresion siguiente: "Por eneima de los
objetos de los sentidos se encuentran los
sentidos, por encima de estos se eneuen­
tra la mente, por encima de la mente el
inteleeto... el gran Ser (alman)... 10
inmanifestado ... la Persona; por encima
de la Persona, no existe nada en absoluto.
Es el fin. Es la via suprema. Aunque estii
escondido en todas las cosas, el Ser no
brilla. Sin embargo, es visto por los rishis
sutiles, dotados de un inteleeto superior y
sutil". (3 6 10-12)
Una imagen que aparece l11uy a menudo
en los misticos dualistas es la del alma en
tanto que puro espejo de 10 divino:
eneontramos la misma comparaeion en
los no-dualistas, que consideran el ego en
si-mismo como un reflejo del Ser. Si
reflexionamos a prop6sito de esto ultimo,
(,c6mo podria un espejo reflejar verdade­
ramente el infinito sin forma sin ser as i­
mismo infinito y sin fonna, es decir, a la
par eseneia con este? No hay lugar para
el velo de la distinci6n en la transparen­
cia completa a la cual haec alusion un
mistico reciente del Monte Athos:
"Cuando estemos completamente desnu­
dos, esa mirada de Dios sobre nosotros se
convert ira para nosotros en visi6n de
Dios". (45) Si no existe mas que una
unica mirada, podemos decir que existe
una unica Consciencia sin ohjetivo parti­
cular del cual tomar consciencia; es la
definici6n misma de la experiencia no­
dual.
Existe una Consciencia que esta mas a11fl
de la dualidad de las substancias humana
y divina; no es a esta Consciencia a la
que aludia San Nilo del Sinai cllando
decia: "La plegaria es el preludio del
conocimiento transustancial". (46) Jean
Climaque cita el verseto del salmo 46
apreciado por Ramana Maharshi: "Per­
maneced en silencio y sahed que yo soy
Dios", afladiendo simplemente "y Yo soy
la impasihilidad (apatMia)". No dice
"me reflejo en la impasihilidad"; dice,
haciendo hahlar a Dios, "yo soy la impa­
sibilidad". Lo que significa que esta
parada de la mente que es la impasihiJi­
dad es en si la union compJeta y sin dife­
rencia con 10 Divino: encontramos
exactamente la definicion del Yoga al
principio de los aforismos de Patafljali.
"EI yoga (uni6n), es el cese de los movi­
mientos de la mente". Tras este cese de
todo movimiento, el ego desaparece y
nos convertimos en uno con el mundo,
Jacques Vigne
segun la bella pal
Optino: "Haz de ti
Dios haga de ti el
Las intenciones r
tro Eckhart son (
por eso. No pued
al profundo estw
sobre el Maestro I
rya, que muestra
mentales entre 10:
en la misma din:
articulo. (48) A
intluenciado por I
se preocupa much
las sustancias in
HEI amor es la p
transmuta en Dio:
la identidad comp
de reputacion CI
Raehner no pucdi
cubrir una compa
dualista del tipo
oceano al intenta'
cia fundamental:
profundidad, 10
mejor es que su ~
mente designamo
es mas que una pc
infinito que no pi
la cuesti6n existc
al que pueda cc
(,prefiere su prele
misterio infinito?
he encontrado cr
tan provocadores
vedantinos, cOlm
datta Maharaj. q
es fiel", 0 como
alguien que quer:
ritual en un lel11
debo ir a los di,
deben venir a mi'
. Vedanta y Hesicasmo
onsideran el ego en
'eflejo del Ser. Si
'sito de esto ultimo,
jo reflejar verdade­
I forma sin ser asi­
anna, es decir, a la
No hay lugar para
n en la transparen­
:ll haee alusion un
:l Monte Athos:
lpletamcnte desnu­
)s sobre nosotros sc
tros en vision de
liste mas que una
)s deeir que existe
I sin objetivo particonsciencia; es la
Ia experiencia no-
a que esta mas alia
ubstancias humana
a Consciencia a la
del Sinai cuando
es el preludio del
tancial". (46) Jean
seto del salmo 46
la Maharshi: "Per­
f sabed que yo soy
)Iemente "y Yo soy
atluHa)". No dice
Ipasibilidad"; dice,
s. "yo soy la impa­
;ignifica que esta
Je es la impasibili­
ompleta y sin dife­
ino: encontramos
icion del Yoga al
smos de Patafijali.
I cese de los movi­
. Tras este cese de
ego desaparece y
mo con el mundo,
163
Jacqlles Vigne
segun la bella parabola de Ambrosio de
Optino: "Haz de ti nada, con el fin de que
Dios haga de ti el universo". (47)
Las intenciones no-dualistas del Maes­
tro Eckhart son evidentes: es conocido
por eso. No puedo hacer sino remitirme
al profundo estudio de Bernard Bazel
sobre el Maestro Eckhart y Shankaracha­
rya, que muestra las similitudes fund a­
mentales entre los dos misticos y que va
en la misma direccion que cl presente
articulo. (48) Angelus Silesius, muy
intlucnciado pOl' el Maestro Eckhart, no
se preocupa mucho de las distinciones de
las sustancias infranqueables al decir:
"EI amor es la piedra filosofal que me
transmuta en Dios". (49) EI resultado es
la identidad completa. IncIuso un te610go
de reputaci6n confirmada como Kart
Raehner no pucde hacer mas que redes­
cubrir una comparacion tipicamente no­
dualista del tipo gota de agua en el
oceano al intentar evocar esta experien­
cia fundamental: "AI lIegar a la ultima
profundidad, 10 que el hombre sabe
mejor es que su saber (0 10 que comun­
mente designamos con este tennino), no
es mas que una pequena isla en el oceano
infinito que no puede ser cruzado y que
la cuestion existencial que se Ie plantea
al que pueda conocer es la siguiente:
l,Prefiere su pretendido saber a la mar del
misterio infinito?" (50) Sin embargo, no
he encontrado cristianos que osaran ser
tan provocadores como ciertos maestros
vedantinos, como por ejemplo Nisarga­
datta Maharaj, que decIaraba "Dios me
es fiel", 0 como Plotino respondiendo a
alguien que queria llevarlo a asistir a un
ritual en un templo "No soy yo quien
debo ir a los dioses. son ellos los que
deben \enir a l11i ..•• (5] ).
La ese/Kia de Dios.
i,Puede la esencia de Dios ser revelada al
mistico? Los no-dualistas responden si a
esta pregunta, los dualistas no. Es intere­
sante retomar los argumentos avanzados
por Juan Crisostomo a favor de la incom­
prensibilidad de Dios y de hacer una cri­
tica desde el punto de vista no-dualista.
Juan Crisostomo se oponia a los anome­
nicos que afirmaban que podia conocerse
a Dios. Para c1arificar el debate hay que
distinguir, como hemos heeho anterior­
mente, entre conocimiento intclcctual y
conocimiento expericncial. El primero
no permite conocer aDios -ni tampoco
intentar descubrir la "ecuaci6n de Dios"
por cl eontrario, el segundo permite iden­
tificarsc con la consciencia pura de 10
divino, si seguimos en ello al no-dua­
lis1110. Puedc ser que los anomenicos, a
pesar de las aeusaeiones de raeionalismo
hechas por Juan Crisostomo, hayan desa­
rrollado una via real de eOl1ocimiento, al
menos para algunos de ellos. De todas
maneras, discutiremos a esc nivel sola­
mente, es decir, sobre la relaci6n entre la
via del conoeimiento y la incomprcnsibi­
lidad de Dios. No podemos, a pesar de
todo, ignorar completamente el contexto:
se trataba de un ambiente muy poco
agradable de polemiea, de caza del herc­
tico, que Juan parecia interrumpir sobre
todo para luchar contra los Judios. EI
tam poco pennanecia en silencio: fue el
autor mas prolifico de la patrologia
griega, con dieciocho volumenes en su
haber. Tenia necesidad de predicar para
su equilibrio personal. Por otra parte
decia: "Mi predica me cura". (52) No es
un muy buen signo psieologico-espiri­
tual. Su estilo no parece demasiado pro­
pieio para una verdadera meditacion
164
No-dttalidad y Aflstiea Cristiana: Vedanta y Hesicasmo
sobre temas profundos. Habla asi de los
anomenicos: "Creedme, me recorrio un
escalofrio de horror en el momento de
nombrar su idea, ya que tiemblo al expre­
sar por mi boca 10 que les agita sin cesar el
espiritu y es la raiz de todos esos males.
Lo que sucede es que un hombre ha osado
decir: "Conozco a Dios como este se
conoce a si mismo." (,Es necesario refutar
una afirmacion de ese calibre? Es una
locura evidente, una demencia imperdo­
nable, una fonna total mente nueva de
impiedad; nunc a hasta ese momento nadie
habia tenido la osadia de dar cabida a nada
parecido en su espiritu 0 de expresarlo por
su boca". (53) Sin embargo, esta defini­
cion de la tesis dc base de los anomenicos
se corresponde muy bien con la via no­
dualista comun en Oriente y cs muy poco
sospcchosa de demcncia.
EI argumento de basc de Juan es mas
bien simple: sc conocc muy poco del
funcionamicnto dcl Universo, (,como
podriamos conocer la csencia de Dios'?
En parte, ya hemos dado respuesta a esta
cucstion. En realidad no sc trata de cono­
cer la escncia de Dios como objeto, sino
que ya somos esa esencia. Adcmas, (,por
que intentar eonocer eomplctamente el
funcionamiento del Universo') De hecho,
se trata de problemas de meeanica mas
bien de tipo secundario, Por el contrario,
conocer la esencia de Dios cs el fin
supremo y merece que Ie dediquemos
nuestras practicas espirituales.
Para reconciliar el "He visto aDios cara
a cara" de los profetas con el "Por el
momento no vemos a Dios sino parcial­
mente" de San Pablo, podemos avanzar
al menos dos interpretaciones: primero,
puede ser que San Pablo dijera "parcial­
mente" por humildad, para no chocar a
los lectores de su epistola; 0, segunda
interpretacion menos habitual, efectiva­
mente no conocia a Dios mas que en
parte en 1a epoca en que escribio su epis­
tola: estaba en su fase activa, ocupado en
formar comunidades en las diferentes
partes del imperio romano. Por el contra­
rio, posiblemente pudo conocer aDios
completamente antes de su martirio. La
proximidad de la muerte fisica acelcra la
muerte del ego y sus identificaciones,
hacia un papel de misionero 0 predica­
dor. No pudo 0 no quiso hablar de csta
experiencia; es una hipotesis que no
podemos probar, pero que tampoco
puedc ser rechazada. Habria tambien
otros puntos por discutir, pero vol vamos
al punto crucial: en cl fondo, Juan Cri­
sostomo, en tanto quc presbitero y res­
ponsablc de la disciplina, no es partidario
de los misticos: "Si Dios nos prohibc este
conocimiento (sobre la manera en que el
alma se encuentra en el cuerpo), es para
cerramos la boea y contenemos mas
facilmentc, con el fin de cnsenamos a
conformarnos con nuestra humildc con­
dicion, sin qucrer escrutar algo quc nos
sobrcpasa, y a renuneiar a una curiosidad
indiscreta". (54) En tcrminos mas diree­
tos, se trata de la condena de la mistiea
autcntica a favor de una espeeie de pic­
dad perczosa, reducida, de tipo parro­
quial que nos propone Juan. Es una pena
que haya sido tan escuchada y seguida,
La verdadera pregunta que debemos
hacemos es la siguientc: si Iimitamos a
priori la posibilidad de experieneias espi­
rituales, I,no las estamos asi mismo des­
echando antes de tiempo? Los que
rechazan la posibilidad del liberado en
vida deberian preguntarse si no son los
Jacques Vigne
descendientcs del
rasgo las vestidt
cuando Jesus acep
Dios", mientras q
habia preferido la
hombre". Al tene
liberado en vida. I:
otro miedo, de alg
la del retorno del
mesianica, sino
como la primera \'
teramente puesto
to'ievski al pro\'(
Cristo con el Gra
rado en vida, por
su propio maestro
tro de una institl!(
la Iglesia. Esta
model0 impcrial 1
vida debe ser neut
o de otra, y no ~
sino por razones
deeirlo, 10 que es
hinduismo, una d(
rado en vida cs la
taeion de los textc
experiencia direct
al cristianismo, 10
se debata entre 10
dores del CNRS
un segundo resp
sobre el progreso
nas permanece I
superficial.
r
La no-dualidad c
y la practica
No ten go nada qUi
las practicas de I
dente, y reenvio a
espiritual que siga
decir -y estoy cor
"edalllCl y Hesicasmo
para no chocar a
;tola; 0, scgunda
abitual, efectiva­
)ios mas quc en
~ escribi6 su cpis­
ctiva, ocupado en
~n las diferentcs
,no. Por el contra­
I conocer aDios
e Sll martlrio. La
e fisieu ueelera la
identifieaeiones,
ionero 0 prediea­
so hablar de est a
lipotesis que no
o que tam poco
Habria tambien
if. pero volvamos
fondo, Juan Cri­
presbitero y res­
a, no es partidario
s nos prohibe este
mancra en que cl
I cuerpo), es para
contenernos mas
de ensenarnos a
;tra humilde eon­
Har algo que nos
r a una euriosidad
minos mas direc­
ena de la mistica
a especie de pie­
I. de tipo parro­
uan. Es una pena
hada y seguida.
Jacques Viglle
•
descendientes del Gran Sacerdote que se
rasgo las vestiduras (Mt XXVI, 15)
cuando Jesus acept6 el titulo de "Hijo de
Dios", mientras que hasta ese momento
habia preferido la apelaeion de "hijo del
hombre". Al tener miedo de la idea de
liberado en vida, la institucion manifiesta
otro miedo, de alguna fonna arquetipica,
la del retorno del Cristo no bajo forma
mesianica, sino bajo fomla humana,
como la primcra vcz. Estc miedo fuc cer­
teramente puesto en evidencia por Dos­
tol'evski al provocar el encuentro del
Cristo con el Gran Inquisidor. Un libe­
rado en vida, por el simple hecho de sel'
su propio maestro, es un imposible den­
tro de una institucion centralizada como
la Iglesia, Esta heredo directamente el
modelo imperial romano, EI liberado en
vida debe ser neutralizado de una manera
o de otra, y no por razones de Estado,
sino por razones de Imperio, por asi
decirlo, 10 que es aim mas serio ... En el
hinduismo, una de las funciones dellibe­
rado en vida es la de refrescar la interpre­
tacion de los textos sagrados mediante su
experiencia direeta, Esto es 10 que Ie falta
al eristianisl11o, 10 que haec que la Iglesia
se debata entre los exegetas 0 los busca­
dores del CNRS para intentar encontrar
un segundo respiro, pero el resultado
sobre el progreso espiritual de las perso­
nas pennanece como algo superficial
superficial,
La no-dualidad en Occidente: la teo ria
a que debemos
~: si limitamos a
:xperiencias espi­
s as! mismo des­
:mpo? Los que
del liberado en
'se si no son los
y la pnictica
No tengo nada que decir sobre la tecnica 0
las practicas de la no-dualidad en Occi­
dente, y reenvio a cada uno a la ensenanza
espiritual que siga, Por el contrario, puedo
decir -y estoy convencido de ello-, que es
.1. 165
necesaria una practiea. En la tradici6n
india, la verdadera ensenanza de la no­
dualidad se da sobre todo de maestro a
discipulo, como tambien en el zen. Ade­
mas, ha habido personas como Viveka­
nanda que han llegado y han dcsalToliado
un "vedanta practico" uniendo a una
meditacion no-dual un compromiso en el
trabajo social, 10 que crea un equilibrio,
En efecto, los riesgos de una no-dualidad
mal comprendida son evidentes. En un
primer momento, se da el razonamiento
primario segun el eual "todo esta en todo,
luego no importa 10 que haga". Es aqui
donde [enemos que eomprender la dife­
rencia de contexto cultural: los hindues
pueden pasar con bastante facilidad de un
Dios personal que castiga, ya que conside­
ran la ley del karma como evidentc. Creen
finnemente en la responsabilidad del indi­
viduo que se prolonga hasta vidas ulterio­
res, Picnso que no puede haber enscnanza
seria de la no-dualidad, de la impenna­
neneia y de la ilTealidad del mundo sin
una educaci6n del sentido de la responsa­
bilidad al mismo tiempo. Otro ricsgo de la
ensenanza de la no-dualidad y de la reali­
zaci6n espontanea es la pereza. El pro­
blema no es nuevo. El maestro zen Myoe
se quejaba ya en el siglo Xll1: "La ley no
tiene aspecto. Apareceran pues algunos
discipulos que preferiran deseansar pere­
zosamente . .,". (55) Otro de estos riesgos
es el orgullo -no es demasiado dificil
repetir "yo soy Dios" 0 "yo experimento
el Despertar" - sin duda un loro podria
hacerlo si se Ie ensenase a hacerlo. La difi­
eliltad esta eiertamente en experimentar
un verdadero despertar. Ademas, un
minimo de buen sentido pennite com­
prender que no podemos decir demasiado
"Yo estoy despierto" pucsto que si 10 esta­
mos real mente, l.qllien sigue ahi para
166
No-dualidady J.ffstica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo
decir "yo"? Es verdad que al leer textos
no-dualistas tradicionales se tiene la
impresion de que el despertar puede
sobrevenir como por arte de magi a, pero
al mismo tiempo, en sanscrito magia se
traduce como Maya, y es justamente a
esta maya a la que hay que poner fin. Para
alguien que este aun fascinado Ja mayor
parte del tiempo por la magia del munda
multiple, (,es suficiente un simple toque de
magi a suplementaria para hacer emerger
la Realidad? Despues de los nuevos fila­
sofas y los nuevos pobres, l,Veremos a los
"nuevos sofistas" intentando justificar una
ausencia de practica personal? La no-dua­
lidad es como una especie de perdida de
soporte, como el estar suspendido en el
vacio. l,Quien osara lanzarse?
La nocion de dval1dvatita, "mas alla de los
contrarios", debe ser bien comprendida.
EI jiiani (sabio no-dualista) esta eierta­
mente mas alIa de los conceptos de bien 0
de mal, pero podemos decir que se situa
mas bien cerea del bien: en efeeto, no
existe motivo alguno para hacer el mal,
mal que de todas fonnas estaria inspirado
por un ego que ya no existe. EI jiiani esta
miiS bien por encima de las nociones de
puro 0 impuro, e igualmente ha sobrepa­
sado las obligaciones rituales. A veees,
puede poseer comportamientos critiea­
bles a ojos de sus discipulos, pero no tiene
necesidad alguna de justificarse ante ellos
con explieaeiones 0 razonamientos. La
intensidad de su amor es suficiente para
los que eomprenden que el sabio actua por
el bien de otros a largo plazo. En 10 que
eoncieme a los maestros no-dualistas, la
palabra del Evangelio mantiene todo su
valor: "Juzgad al arbol por sus fmtos". EI
que da a entender que es un liberado, {,Io
esta real mente de la dependencia del
dinero, de la fuerza sexual, de su propia
imagen de marca en tanto que maestro y
de la tendencia a manipular? Viviendo
durante cierto tiempo cerca de el con estos
cuatro criterios bien presentes en nuestro
espiritu, debemos poder damos cuenta
bastante bien y sabremos si la primera
impresian sobre el maestro era justificada
o no.
Otro tema que me parece importante tra­
tar, si deseamos el desarrollo de un no­
dualismo creiblc en Occidente, es la ley
de la oferta y la demanda; {,el "mercado"
espiritual esta regido por esta ley 0 ha
conscguido transcenderla? Sai Baba de
Shirdi, ciertamente el santo mas popular
en la India del siglo XX, bien hubiera
querido hablar a sus visitantes de la Libe­
racion, pero estos Je pedian mas a menudo
gracias materiales 0 milagros. EI se resig­
naba a hacerlos diciendo: "Les doy 10 que
me piden, esperando que me pidan 10 que
yo quiero darlcs". Muchos buscadores
buscan sobre todo oir 10 que les gusta.
Van en busca de un psicologo ~o por que
no, de un maestro espiritual, 10 que da
mas prestigio- para hacerse perdonar
todos sus pecados, en suma para eomprar
indulgencias como en la Edad Media; en
su fonna modema, pucde correspondcr a
promcsas del paraiso de la Rcalizaeion sin
fatiga, dejando el esfuerzo a los "primiti­
vos" que no conocen ni los trenes de alta
vclocidad ni los ascensores espirituales,
pero que se contentan con caminar eon
sus dos piemas y no con tar ImlS que con
sus propias fucrzas. EI proverbio indio:
"Cuando el diseipulo esta preparado, apa­
rece el gum", tiene tambien su lado nega­
tivo, su sombra: "Cuando el discipulo esta
prcparado para dejarse embaucar, los
gums afluyen".
Jacques Vigne
Un defecto de 1m
dia en relacion al
dicional, es que
facilmente a Prol
ciencia espiritual
un centro, etc ...
de proselitismo
muy a menudo
financiera. Si bie!
dad pueden desar
dad pedagogica,
corre el riesgo dt
cado por un probl
dad -Ia del mae~
privada- cohabi
cuerpo. Si desean
dualismo que sea
car una reduccior
tales provel1lcn
informacion y sor
hemos menciona
penetra en la me
En esto la psicolo
el Yoga. La eXl
tiene necesidad
inmediata, y 1m
"inmediatiea", co
una palabra la i
poner distaneia fr
de polucion. Exis
antigua China qu
cemimicnto en cl
espiritua\: "Atrac
en la mayoria de
sabiduria, sino d
sabe practica, el (
El ultimo contra]
Si queremos un
los no-dualistas y
tante saber 10 que
sobre los dualista:
I'edanta y Hesicasmo
mal, de su propia
nto que maestro y
1ipular? Viviendo
Tca de el con estos
~sentes en nuestro
er damos cuenta
nos si la primera
5tro era justificada
ce importanle tra­
,arrollo de un no­
:cidente, es la ley
da; i,el "mercado"
)or esta ley 0 ha
~la? Sai Baba de
~anto mas popular
XX, bien hubiera
itantes de la Libe­
.ian mas a menudo
agros. EI se resig­
): "Les doy 10 que
e me pidan 10 que
lchos buscadores
10 que les gusta.
:ologo -0 por que
iritual, 10 que da
hacerse perdonar
1ma para comprar
:l Edad Media; en
je eorresponder a
la Realizacion sin
"20 a los "primiti­
los trenes de alta
;ores espirituales,
con caminar con
ntar mas que con
proverbio indio:
a preparado, apa­
lien su lado nega­
J el discipulo esta
! embaucar, los
Jacques Vigne
Un defeeto de los oecidentales de hoy en
dia en relacion al modo de ensenanza tra­
dicional, es que se lanzan demasiado
facilmente a propiciar la toma de cons­
ciencia espiritual de otros, la apertura de
un centro, etc ... Existe aqui una mezela
de proselitismo de nuevo converso y,
muy a menudo tambien, de necesidad
financiera. Si bien por este tipo de activi­
dad pueden desarrollar una cierta habili­
dad pedagogica, su progreso interior
corre el riesgo de entorpecerse, compli­
eado por un problema de doble persona li­
dad -Ia del maestro y Ja de la persona
privada- cohabitando en el mismo
cuerpo. Si deseamos una practiea del no­
dualismo que sca creiblc, debemos bus­
car una reduccion de las imagenes men­
tales provenientes del exeeso de
informacion y soportes audiovisualcs. Ya
hemos mencionado esto: todo 10 que
penetra en la mente deja trazos en ella.
En esto la psieologia estil de acuerdo con
el Yoga. La experiencia espiritual no
tiene necesidad de intennediarios, es
inmediata, y me gust aria poder decir
"inmediatica", con e1 fin de condensar en
una palabra la imperiosa necesidad de
poner distancia frente a esta nueva forma
dc polucion. Existen dos provcrbios de la
antigua China que pueden aguzar el dis­
cemimiento en cl campo de la ensenanza
espirituaJ: "Atraer a mucha gente no es
en la mayoria de las veces una prueba de
sabiduria, sino de habilidad" y HEl que
sabe practica, el que no sabe ensena".
EI ultimo contrapunto del dos y del Lno
Si queremos un verdadero dialogo entre
los no-dualistas y los dualistas, es impor­
tante saber 10 que piensan los no-dualistas
sobre los dualistas. Es 10 que he intentado
167
precisar, entre otras cosas, con este estu­
dio. Habitualmente, la comparacion entre
estas dos grandes tendencias es hecha
tanto por los teologos cristianos, como por
los universitarios que se sientcn obligados
a mantenerse en una neutralidad casi asep­
tica. No es esta mi posicion: prefiero
hablar directamente desde el punto de
vista de la via que sigo desde los ocho
anos que hace que vivo en India, es decir
la no-dualidad, y expresar claramente la
fomla en que yeo las cosas. En un sentido,
visto desde la euspide, la diferencia entre
las dos vias de conocimiento y devocion
es infima. El dualismo tiende hacia su pro­
pio limite, y el no-dualismo lIega hasta el.
Sin embargo, desde eI punto de vista del
mistieo que esta progresando, esta dife­
rencia puede representar un gran precipi­
cio, una verdadera noche del espiritu .
Sobreviene cuando se da cuenta de que la
divinidad a la cual podia hablar, tener
visiones, se disuelve, y que su forma
puede que no fuese mas quc una proyec­
cion de su propia mentc. Si pasa esta
prueba, descubre la deidad mas alia de
Dios, que 10 hemos lIamado "meta­
teismo", mas alia del monoteismo.
No podemos seguir todas las vias a la vez.
Aun asi, a menudo se dice en India que en
un verdadero jiiani existe un bhakta
escondido, y viceversa. Amor y conoci­
miento van a la par. EI amor purificado
del que habla San Juan est ade hecho muy
proximo al conoeimiento. Vivekallanda
pudo decir: "El verdadero ateismo es no
creer en si mismo". Algunos maestros
espirituales de la India modema como
Ramakrishna, Ma Anandamayi y actual­
mente J\1a Amritanandamayi muestran
bien que se trata de un estado que puede ir
y venir del Amor al Conocimiento, eon
168
No-dualidady Mlstica Cristiano: Vedanta y Hesicasmo
una facilidad perfecta. Podemos encontrar
en los Evangelios, y en particular en el
discurso de la Ultima Cena en Juan,
"grandes palabras" amilogas a los Maha­
vakyas de las Upanishads, como "Til eres
Eso", etc ... Pueden servir de meditacion
para aquellos cristianos que quieran evo­
lucionar hacia el no-dualismo, tal y como
hemos dicho mas arriba: "Yo estoy en mi
Padre, vosotros estais en mi y yo estoy en
vosotros" (In XIV 10), 0 tambien "Que
todos sean Uno: como til, Pedro, til en mi
y yo en ti, que ellos sean tambien Uno en
nosotros". (In XVlI 20) Por otra parte,
cuando San Pablo dice: "Ya no soy yo el
que vive, es Cristo quien vive en mi" (Gal
II 20), podemos preguntamos, en esta afir­
macion, de que "yo" se trata. (,En que se
convierte la persona del inicio? i,A donde
va la personalidad? ..
Encontramos en otras partes f6nnulas
parecidas de unidad que resuenan en
nosotros como mantras, por ejemplo la
famosa expresi6n de Spinoza: HEI amor
con el que el alma ama aDios es una parte
del amor que Oios siente por si mismo".
(56),0 esta parabola que A1u Anulld([IIl([.vi
repetia tan a menudo: HEI Ser etemo, el
etemo peregrino, es EI, es s610 El". Eugra­
phe Kovalevsky aconseja una plegaria
cuya eficaeia experimental es, segun dice,
absoluta ~posiblemente porque es la
expresion direeta de un cristianismo no­
dualista. Esta oraci6n es muy simple:
"Amate Tu mismo en mi". (57) San Pablo
oponia la sabiduria de los filosofos a la
locura de la devoci6n a Cristo. Pero
parece que la devoci6n se volvi6 sabja y
familiar: al Padre y al Hijo se les afiadi6 la
Madre; el "loco" esta mas bien muy prote­
gido. Par el eontrario, el que sigue con
intensidad la via del conocimiento, (,no
puede ser llamado un autentico loco de
Dios? Se llega en efecto hasta un pun to,
en el que ya no existe ni loco ni Dios. EI
no-dualisl11o es particulannente intere­
sante para un monje, es bien sabido en
India, domle el Vedanta corresponde al
cuarto estadio de la vida, el del renuncia­
miento (sClnl1yas). En efecto, el 1110nje
cuyo nombre significa "solo", "uno", (,110
aspira a la Unidad? (,Por que deberia ser
condenado a perpetuidad a la dualidad
metafisica por una teologia que esta
demasiado influenciada por la experiencia
COl11lm de la dualidad en la vida ordinaria?
EI mendicante que no tiene mas que una
moneda se aferra a esta desesperada­
mente, pues no tiene nada mas. No seria
simplementc por falta de expericncia mis­
tica por 10 que un gran nluncro de te610­
gos se aferra a las diferencias, ahi donde el
que posee la plena riqueza de la experien­
cia interior ve la unidad.
Sc me podra objetar que he tomado partido
por la no-dualidad en este estudio y que no
hc prcslado la suticicnte atenci6n al con­
texto dualista en el que mis palabras han
sido pronunciadas. Pero justamente, como
he remarcado a partir de un texto del Maes­
tro Eckhart, al baber sido cstas pronuneia­
das en un contexto dualista se puede estar
seguro que han brotado dc la experiencia
mis111a, mas que de un condicionamiento 0
de un aprendizaje. Un 111istieo puede
saciarse en su juventud del dualismo, que es
una metafisiea de la dependencia, pero
cuando madura aspira a vivir una metafisica
de la independencia, del Solo y del Uno.
Jacques Vigne
siste cn deshacers
ideas prcfabricada
muy tranquilizad
momento en el qu
una politica de
pasional, un mistic
sio -que seguia la
pudo eseribir: "T
segiln esta verda
indiscutible de la '
bien, habiendo he
que ereo buena, nu
troversia con los (
tengo bastante cc
Que Ie plazca a Di
ceda". (58)
A prop6sito de I
hay un acercamie
realizar entre el (
otro Oriente qu
incrcada, tan imr
ortodoxa, correspc
I. Swami Ramilil
Vigne J. La reI
4. Monchanin J.
y el Yoga.
5. Patafijali, }bgl,
6. De Smedt, H.
7. Le SaliX H. In,
x. Talk~ Ifilil Ral.
9. MaAnandam:
10 Nisargadatta"
suis Cela'.
II. 12. Una sola )uz
14. 15. La via del conocimiento lIeva a la tole­
raneia por su meto do apofatico, que con-
Les Recils d'/II
2. 16.
17
Tripura Ra/l<L'
Semons sur Ii:'
StaaL Admita
Lossky, Elsal
Delseille PI.. I
Jean Climaqu
1
/'(,(/01110 Y HesicaSl110
autentieo loco de
o hasta un punto,
i loco ni Dios. EI
.llannente interc­
:5 bien sabido en
a correspondc al
1. el del renuncia­
efccto, el monje
'solo", "uno", (,no
lr que deberia scr
ad a la dualidad
:ologia quc esta
por la expericncia
la vida ordinaria?
Icnc mas que una
~sta dcsesperada­
da mas. No seria
: expcriencia mis­
numcro de tcolo­
leias, ahi dondc cl
za de la experien­
he tomado partido
~ cstudio y que no
: atencion al con­
mis palabras han
justamente. como
m texto del Maes­
) estas pronuncia­
sta se puede estar
de la experiencia
mdicionamiento 0
1 mistico puede
:1 dualismo, que es
lependencia, pero
ivif una metafisica
;010 y del Uno.
) lleva a la tole­
oHitico, que con-
169
Jacques Viglle
siste en deshacerse regulannente de las
ideas prefabrieadas, de los eslogans. Es
muy tranquilizador ver que en un
momento en el que el eristianismo tenia
una politica de expansion mas bien
pasional, un mistieo como Pseudo-Dioni­
sio -que seguia la via del conocimiento-,
pudo escribir: "Todo 10 que no existe
segun esta verdad desaparece ante 10
indiscutible de la verdad intrinseca; tam­
bien, habiendo hecho mia csta opinion
que creo buena, nunca he buscado la con­
troversia con los Griegos u otros, ya que
tengo bastantc con conocer la verdad.
Que Ie plazca aDios y que el me 10 con­
ceda". (58)
la luz espontanea del Ser de la que tan a
menudo habla el Vedanta. Despues de
todo, (,Porque de este Oriente donde el
sol se eleva nacerian dos luces difcren­
tes?
No existe una difereneia tan grande entre
la via de la devoei6n que dice "Yo soy
Tuyo", y la del eonocimiento que dice
"Yo soy Tu". En ambos casos se trata de
una disolucion del ego que abre las puer­
tas del Amor puro, 0 de la felicidad del
Conocimiento completo (vijiianCln(lllda).
Como conclusion a este estudio, me gus­
taria dejar la palabra a Kabir, esc sabio
que fue tejedor en la Benares del siglo
XVI:
A propos ito de la experiencia no-dual
hay un acercamiento muy interesante a
realizar entre el Oriente cristiano y esc
otro Oriente que cs India. La luz
incrcada, tan importante en la mistica
ortodoxa, corresponde a la svaprakasha)
"Si yo digo "Uno ",
110
e8 eso.
Si digo "do" ", es una wlumllia.
Kahil' fla meciilado mucho acerca de eso.
Es como es. "(59)
Notas
Parte l. Sobre parar la mente
Les Recits d'zlII pidel'il1 I1Isse, Points Sagesse SeuiL
Swami Ramdas, Les Camels de peierinage. Albin Michel, Spiritualites vivantes.
3. Vigne 1. La repetici6n. These de lIIi:decine, 1983 Pans, Saint-Antoine.
4, Monchanin J. Afysliquede {'Inde.
chretiell, Fayard 1974, con illl capitulo sobre el Hesicasmo
yel Yoga.
Patai1jali, }hga Sutra.I·, Spiritualites vivantes.
De Smedt, £loge du silence, Albin Michel.
Le Saux H, Initiation a la spirilUalite des Upani51wds (parte sobre los salmyas), Presemce 1979.
R. Talks "'itll Rail/ana Malrarshi, Ramanashram, Tiruvanamalai; pA57.
9. Ma Anandamayi, Words, p.60, SMCS Calcutta.
]0. ::\isargadatta Maharaj, 1am ThaI, Chetanya. Bombay, p.261 pubJicado en frances en DelLx Oceans 'Je
suis Cela'.
II. T,'ipura Rahas.'ra, Ramanashram, p.67.
12. Semans sur Ie zen, Spiritualites vivantes, pA8. :4. Staal, Advaita and Neoplatol1ism, Madras p.169. 15. Lossky, Essai Sill' la lheologie lIlystique de l'Egli"e d'Orient. Le Cerf; p.205. l6. Delseil1e PL.
all eMscrt, Oeuil, p.294. 17, Jean Climaque, L'eehcile, Sainte Abbaye de Bellefontaine, p.142. I. 2. Jacques Vigne
1"/o-dualidad y Mistiea Cristialla: Vedallta y Hesicasmo
170
n
Kadoublovsky & Palmer, Early Fathers jiVI11 the Phi/okalia, Faber, London, p.188. DeshimaIU, La pratique du zen, Spiritualites vivantes. Hausherr, Hes)'chasl11e et priere, Institutum Otientalium StudioIUI11 Rome, p.II. Guy Je. Paroles des Anciens, Points-Sagesse, Seuil, p.4S. 22.
ib p.45. 23
ibp.120. Delseille, op.cit., p.322.
Kadoublovsky, op.cit, p.204.
Leloup JY, Pamles du Mont Athas, p.34.
Kadoublovsky, p.84. Guy, p.64. Leloup, p.82.
18.
19
20.
24. 25. 26. 27.
2R
29. Parte II: Psicologia de la ascesis
Guy, op cit, p.6°.
Ail11e Michel, .MetanoiG, phcllomc!I1es pIJ}:,iques et p\'sticismc, Spititualites vivantes p.78. :<
Guy, p.S7. 4. Lacamcre, Les hOllll11es ivres de Dieu. Points-Sagesses.
5.
Guy, p.n (, Ib p.77. 7. Kadoublovky, p.219. Jean Climaque, p.142. 9. lb., p.299.
10. Ib., p.IIS.
II. Guy, p.169.
12. Kadoublovsky, p.213.
13. Delseillc, op.cit. p.180.
14. lb., p.170.
15. Leloup, p.33. 16 Kadoublovsky, p.220. 17. Kovalcvsky, La quete de l'espirit, Spititualites vivantes, p.194. Ix Lossky, op.cit., p.203. 19. Hausherr, La Phi/alltie Pont, Institutum Otientalium Studioraum Rome, p.44.
20. lb., p.45.
21. lb., p.54.
22. Nisargadatta Maharaj, Prior to Consciousness, Acom Press USA, p.67.
23. Swahananda, Meditation and its me/hod, Advaita Ashram Calcutta.
24. Kadloubovsky, p.78.
25. Winn D., The manipulated Mind, Octoagon Press, London, p.70.
26. Vigne, lv/editatloll et psychologie, (Capitulo sobre las sustancia'i), Spititualites vivantes.
27. Saint Athanse. Saint Antoine. Ie Pere des moines, Cerf, p.66.
28. Drewennann E., Fonctionnaires de Dieu, Albin Michel, p.241-251.
29. Hausherr, p.128.
30. Saint Athanase, p.82.
31. Guy,p.68.
32. Jourdan Michel, La Vie d'emlite, Spiritualites vivantes.
33. Sobre la obediencia y el martirio, cf. Vigne Jacques, Elements de psychologie spirituelle, Spiritualites
vivantes, p.166 y 173.
I. 2.
Kadowaki, Lt
Drewenl1ann.
3. Le Afessage C
4. lb., p.42.
5. Clement OliVI
6. Kadoublovsk;
7. Srimad De.-i 1
8. Bloom A .. en
q. Vigne 1., Le 1/;
10. Meyendorf. G
I L Jean Clil11aqu
12. If, p.268.
13. GUy,p.71.
14 lb., p.96.
15. Jean Climaqu
16. Vivekananda.
17. Guy,p.IS.
IS. Hausherr. La .
19. Meyendorf, p
I.
2. ParI
Brosse Jacque
Grant S., Tu\\'
Pseudo-Dioni
4. Lossky, cap. I
5. Lacombe et C
6. Urosse,op.cit
7. lb., p.249.
Camus A, I.l,
9. Pannikar R.. :
10. Citado por St
II. Sermons Sill' ,
12. Clement, p.l:
n. Lossky, pp. II
14. Clement, p.1 :
Varela F.. L'iI.
10. Nisargadatta.
17. Maestro Eck:
I K Bader 1., .\/e,
19. Vigne, Le 111<1
20. Nisargadana.
21. Gmines de e,
22. Weldenfcb. 1
23. Bloom, p.50.
24. Kadoublm,k
25. lb., p.141.
I. 2. 171
Jacques Vigne
1'('d(l/1la y lies/casillo
Parte III: Un ascesis para nuestros dias
188.
I.
antes p.78.
Kadowaki, Le zen et la Bible, Albin Michel, p.229.
Drewemmnn, op.cit., pA18-529 y 604-631.
Le Message Orrhodoxe, numero especial sobre 'Le Monte Athos a~iourd'hui', n095, p.56.
4. lb., pA2.
s. Clement Olivier Berdiev, DDS, p.229.
6. Kadoublovsky, op.cit., p.275.
7. Srimad Devi Bhagamulln, Munshiram, Delhi, p.26.
8. Bloom A., en Technique el Conlemplatioll, DDB, p.59.
9.
Vigne J., Le maitre elle t/U?rapeUle, Spiritualites vivantes, p.62. 10 Meyendorf, Gregory Palamas alld Orthodox spirituality Sl Vladimir, Seminary Press, USA, p.96. II. Jean Climaque, p.!76.
12. If, p.268.
13. Guy, p.71.
14 Th., p.96.
15. Jean Climaque, p.3! O.
16. Vivekananda, Meditatioll and its Alethods, Advaita Ashram, p.I30.
17. Guy, p.!5.
18. Hausherr, La Philaulie, p.190.
19. Meyendorf, p.2l.
l. Parte IV: La no-dualidad: una necesidad para Occidente
l. 2. 3. 4. 5. K
9.
lil.
II. 12. 13.
i4.
15
16. ·ivantes.
?iriIUelle, Spiritualites
17.
i8.
19. 20. 21. 22. 23. 24. 25. Brosse Jacques, Le :::.ell el I'Occidellt, Albin Y!iehcl 1992.
Grant S., 7()Hwr/s (//1 altematil'e theolog)~ Asian Trading Corp. Bangalore.
Pseudo-Dionisio, La tiIeo{ogie IIH'Sliqu(', Migne Brepols, p-K
Lossky, cap. II.
Lacombe et Gardet, L'experiellce du Sol, DDB, segunda parte.
Brosse, op.cit., p.250.
lb., p.249.
Camus A., La peste, Gallimard, p.276.
Pannikar R., The Unknowil Chrisl ofHinduism, Longman & Todd, london.
Citado por Staal, p.1 O.
Sermons Sill' Ie zen, p.!38-139.
Clement, p.152.
lossky, pp.!!9. Clement, p.!52. Varela F., L'inscription cOlporelle de l'e~pril, SeuiL p.97-130. Nisargadatta, PriOi' to COl/seiol/ness, p.12!.
Y!aestro Eckart, Sermons JJ, p.147. Bader L Meditatioll ill Shallkara, Vedanta Aditya Prakashan, Delhi, cap. III. Vigne, Le maitre et Ie rherapeUle, Spiritualites vivantes.
Nisargadatta, op.cit., p.90.
Graines de conscience, Les Deux Oceans.
Weldenfels, La meditatioll en Orient el ell Occident, Seuil, p.59.
Bloom, p.50.
Kadoublovsky, p.140.
lb., p.141.
172
No-dualidad y Atisliea Crisliana: Vedanta y Hesieasmo
Guy, p.42.
Lossky, p.197.
28. The Moul1Iain Path, Ramanashram, Tiruvanamalai, Junio 1994, p.76.
29. Lossky, p.l28.
30. Eckart I, p.65.
31. Shanna CH.,A Critical Survey ofIndian Philosoph)\ Motilal Banarsidas, Delhi, p.167-171.
32. Vigne, Elements de psychologie spiriluelle, p.124-131.
33. Shanna, pJ72.
34. Vivekananda, J'lana Yoga, Advaita Ashram, p.1392.
35. Tripura Rahastya, Ramanashram, Tiruvanamalai. p.123.
36. Godman D. en The Moulltain Palh, Diciembre 1993, p.182.
37. Jean Climaque, pJ02.
38. Guy, p.30.
39. lb., p.40.
40. Lossky, p.234.
41. lb., p. 209.
42. lb., p.227.
43. Delseillc, p.207.
44. lb., p.227.
45. Le Mont At/lOS auiourd'hui, p.55.
46. Kad loubovsky, p. 137. 47 Kovalevsky, p.184. 4~. Barzel 8., Mvslique de l'inefjahle dalls I'lzindouislIIe el Ie christianislIle: S/wllkara 1.'1 Eck!tar~ Lc
Ccrf, en particular el cap.Jv.
49. Silesius A, Le peterill c/lI?l1Ihinique, Aubier, p.244.
50. Waldcnfels, p.72. SI Staal, p.168. 52 Jean Chrysostoll1e, HomNies slIr l'illcomprehensibilile de Dieu, Albin Michel, p.15. 53. lb., p.38.
54. lb., p.1 0 1.
55. Sermons sur /1.' ::::1.'11, p.22.
56. Vallin G., Voie de gl1ose, fi)ie d'amour, Presence, p.113.
57. Kovalevsky, p.248.
SR. Pseudo-Dionisio, p.74.
59. Hess Linda, The Bijak o/Kabil; Motilal Banarsidas, Delhi, p.l 03.
26.
27.
,I
,
Esta tesis se pia:
tres partes, de la~
presenta la mayor
originalmente pro
tuye la primera d
ciaci6n: La estn
con unas indicaci
algunos de los elCI
haberse incluido
titulada: "Vi rup;)
Vidushaka", y sin
tercera parte titula
del Medio (madh)
(sadhana)". Sin e
de estos trcs aspe;
ccr la tesis enon
dado que el result.
produce la impre
equilibrio, darem<
Esta contribuci6r
humor y de la risa
fue concebida p1
paso para un entt
la funci6n y sig
que, aunque es
ha<;ya en la etap
*' Este artieulc
ala tesis euyo nomt
incluye al final un
critos).
** Doctor en ~
Benares Hindu Cni
Departamento de s~
la Universidad de H
Descargar