Rediscovering the Gospel Part 4: “Idolatry” 1. What must we do? Believing, before doing. Jn. 6:28-29 The key to spiritual maturity doesn’t ‘start’ or ‘end’ with doing, but believing. 2. Why don’t we believe? Idolatry… the sin beneath the sin. Rom. 1:21-25 Our surface sins are only symptoms of a deeper problem. Underneath every external sin is a heart idol— a false god that has eclipsed the true God in our thoughts or affections. The key to gospel-driven transformation is learning to repent of the “sin beneath the sin”—the deeply rooted idolatry and unbelief that drive our more visible sins. Let’s take the surface sin of gossip—talking about people behind their backs in judgmental or destructive ways. Why do we gossip? What are we looking for that we should be finding in God? Here are some common heart idols that can manifest themselves in the surface sin of gossip: » The idol of approval (I want the approval of the people I’m talking to) » The idol of control (Using gossip as a way to manipulate/control others) » The idol of reputation (I want to feel important, so I cut ‘others’ down verbally) » The idol of success (Someone is succeeding—and I’m not—so I gossip about him) » The idol of security (Talking about others masks my own in- security) » The idol of pleasure (Someone else is enjoying life—and I’m not—so I attack her) » The idol of knowledge (Talking about people is a way of showing I know more) » The idol of recognition (Talking about others gets people to notice me) » The idol of respect (That person disrespected me, so I’m going to disrespect him) All these idols are false saviors promoting false gospels. Every one of these things— approval, control, reputation, success, security, pleasure, knowledge, recognition, respect—is something we already have in Jesus because of the gospel! But when we are not living in light of the gospel, we turn to these idols to give us what only Jesus can truly give us. *Adapted from Gospel-Centered Life, World Harvest Mission, 2011, p.47 3. Who must we believe in for joy & satisfaction? The Bread of Life. Jn.6:35 “If we consider- the staggering- rewards promised in the Gospels, it would seem that our Lord finds our desires, not too strong, but too weak. We are half-hearted creatures, fooling about with drink and sex and ambition when infinite joy is offered us, like an ignorant child who wants to go on making mud pies in a slum because he cannot imagine what is meant by the offer of a holiday at the sea. We are far too easily pleased.” ‘C.S. Lewis, Weight of Glory’, 1941 Redescubriendo el Evangelio Parte 4: “La Idolatría” 1. ¿Qué debemos de hacer? Creer, antes que el hacer. Jn. 6:28-29 La madurez espiritual no "comienza" o "termina" con el hacer, sino creer. 2. ¿Por qué no creemos? La idolatría… el pecado debajo del pecado. Rom. 1:21-25 Nuestros pecados en la superficie son solo síntomas de un problema mucho más profundo. Debajo de cada pecado externo hay un "corazón idolatra"-un dios falso que roba el afecto y los pensamientos que deberían de ser para el verdadero Dios y Señor. En otras palabras Dios debe ser el fundamento para la madurez espiritual. La llave para la transformación del evangelio es aprender a arrepentirse del "pecado debajo del pecado"-la raíz del pecado es la idolatría y no creer que nuestras motivaciones son pecados más visibles que los que podemos ver. Tomemos un ejemplo: el chisme o murmuración-hablar detrás de una persona con el propósito de juzgar o destruir la reputación, ética o integridad de una persona, es un pecado. Porque murmuramos o hablamos en contra de otra persona? Que es lo que realmente buscamos al murmurar de otra persona, cuando podemos y debemos encontrarlo todo en Cristo! A continuación algunos ejemplos de corazones idolatras que se manifiestan en la superficie del pecado de "chisme o murmuración" Ø ídolo de aprobación (quiero la aprobación de las personas con las que estoy hablando) Ø ídolo de control (usar el chisme como medio para manipular o controlar a otros.) Ø ídolo de reputación (querer sentirse importante, entonces habla mal de otros.) Ø ídolo del éxito (alguien está teniendo éxito-y yo no! Entonces murmuro acerca de esa persona Ø ídolo de seguridad (cuando murmuro escondo mis propias inseguridades) Ø ídolo del conocimiento (cuando hablo en contra de otras personas es una manera de demostrar que tengo más conocimiento que otros) Ø ídolo de reconocer (cuando murmuro consigo que otros me noten) Ø ídolo del respeto (esa persona me falto el respeto entonces yo se lo falto ahora) Estos ídolos son “falsos salvadores” que promueven el falso evangelio. La lista mencionada anteriormente- la aprobación, control, reputación, éxito, seguridad, conocimiento, reconocimiento y respeto son cosas que ya tenemos en Jesús; porque él es el evangelio. Pero cuando no vivimos en la luz del glorioso evangelio nos volvemos a estos falsos dioses para que nos den todo lo que solamente Jesús nos puede dar. *tomado de Gospel-Centered Life, World Harvest Mission, 2011, p.47 3. ¿En quién debemos de creer para la alegría y satisfacción? El Pan de Vida. Jn. 6:35 "Si tenemos en cuenta- las gran recompensas prometidas en los evangelios, parece que nuestro Señor encuentra nuestros deseos, no demasiado fuertes, pero demasiado débiles. Somos medias criaturas, engañados acerca de la bebida y el sexo y la ambición cuando la alegría infinita se nos ofrece, como un niño ignorante que quiere seguir haciendo pastelitos de lodo en un barrio pobre porque no puede imaginar, ni entender la oferta de un día de fiesta en la playa. Somos demasiado fácil de complacer.” C.S. Lewis, sermón ‘Weight of Glory’ 1941