INDICE 1. Introducción. 2. Metodología para el análisis económico del cambio tecnológico. 2.1. La estática comparativa: los modelos micro y macro estáticos. 2.2. La Teoría del Crecimiento Económico. 2.3. La Teoría de Juegos. 2.4. La Teoría de la Difusión. 2.5. El enfoque de J.L.Schumpeter: la innovación como determinante de la dinámica capitalista. 2.6. La Teoría evolucionista del cambio técnico. 2.7. El enfoque de la Trayectoría Tecnológica: Un análisis desde la oferta tecnológica. 2.8. El enfoque de N.Rosenberg: el cambio técnico como proceso continuo. 3. Conclusiones. 1 1.Introdución: Cuando un economista se aproxima a un tema tan aparentemente fuera de su área de trabajo como es el cambio tecnológico (que parecería más propio de un ingeniero industrial) lo primero que se impone es la necesidad de justificar los motivos de su interés. A este fin dedicaré esta introducción. Fundamentalmente han sido dos los factores que han atraído mi atención por el tema. En primer lugar, el tratamiento que la teoría económica neoclásica suele hacer del cambio tecnológico, bajo la consideración de que se trata de una variable exógena del modelo. La cuestión del papel de las variables exógenas en los modelos económicos dominantes es de gran importancia. Éstos se abstienen de dar una explicación de las variables exógenas precisamente por el carácter exógeno de las mismas. Sin embargo, gran parte de las variables consideradas exógenas son aquellas en las que reside el componente dinámico del propio modelo. Una de dichas variables es el cambio técnico, variable a la que estos mismos modelos atribuyen una vital importancia para comprender el crecimiento o disminución del conjunto de sus variables endógenas. Por consiguiente, resulta desilusionante que nada puedan decir estos modelos sobre la evolución y los determinantes del cambio técnico. En segundo lugar, mi interés por el cambio tecnológico no pudo aplazarse por más tiempo una vez me hallé inmerso en el análisis de la competitividad de un sector industrial como el sector químico. Uno de los resultados de mi tesina1 fue que la competitividad del sector venía explicada en gran medida por el cambio tecnológico. Lo que se hacía imprescindible, a partir de entonces, era iniciar el estudio de cuáles eran los determinantes de dicho cambio tecnológico. Presento a continuación una síntesis de los principales enfoques, y también una discusión sobre las principales virtudes y limitaciones de cada uno de ellos a la hora de abordar el tema que nos interesa. Se trata de un paso previo en el estudio del cambio tecnológico, un paso en el que se pretenden sentar las bases para realizar un sólido tratamiento metodológico de la cuestión. 2. Metodología para el análisis económico del cambio tecnológico: Divido los enfoques en dos grandes grupos, en relación a si analizan las relaciones internas del proceso de cambio tecnológico (las causas que lo generan, la esencia o dinámica de su desarrollo) o si sólamente recogen relaciones externas del proceso (siguen sin poder dar cuenta de cuáles son los elementos que explican el proceso). No empleo la terminología endógeno- exógeno para atender a la distinción entre estos dos grupos, porque todos los modelos en sus versiones más desarrolladas se plantean la endogeneización del cambio tecnológico y por tanto creo que dicha denominación puede dar lugar a cierta confusión. 1Tesina: "Los determinantes de la competitividad de la Industria Química de Base en España", dirigida por V.Salas y presentada en el Departamento de Economía Aplicada de la UAB en Septiembre de 1994. 1 Este esquema no recoge todos los enfoques existentes (aunque muchas veces metodologías que quedan fuera puedan resultar muy parecidas a aquellas que sí han sido consideradas) ni tampoco toda la literatura que haya podido generarse sobre el tema dentro de cada uno de los enfoques. Extraigo los puntos esenciales de la metodología empleada por cada enfoque para así poder realizar una valoración crítica de los mismos. El esquema que planteo lo reflejo en la figura1. 2.1. La estática comparativa: los modelos micro y macro estáticos: El objetivo de estos modelos no es analizar el cambio técnico, pero en la medida que tienen en cuenta el cambio técnico vale la pena hacer una breve mención de ellos para ejemplificar alguno de los problemas que recorrerán, como posteriormente veremos, el planteamiento de otras metodologías. La manera en que los modelos macro y micro estáticos recogen el cambio técnico es a través del desplazamiento de la función de producción y de la isocuanta respectivamente. En el primer caso (ver.Fig.2) la función de producción se desplaza hacia arriba; esto es, un aumento del cambio tecnológico, dadas el resto de variables exógenas del modelo, llevan a aumentar la productividad del factor trabajo, y por consiguiente a aumentar el volúmen de producción por cada trabajador ocupado. En el segundo caso (ver.Fig.3) el cambio técnico desplaza la isocuanta hacia abajo; es posible producir la misma cantidad de output con toda una gama de combinaciones ahorradoras de los factores capital y trabajo. En ambos casos el desplazamiento de las funciones responde a un aumento del cambio técnico. El modelo nos podrá aportar información de cómo varían las variables endógenas (producción, número de trabajadores u horas trabajadas, volúmen de inversión, tipos de interés,...) una vez alterada la variable exógena que nos ocupa, pero no nos dice porqué esta variación del cambio tecnológico es mayor o menor ni qué la origina. Esto es así porque el modelo, desde el principio plantea que el cambio tecnológico es exógeno, y por tanto no es objeto de estudio de estos modelos. Ahora bien, la concepción del cambio tecnológico como un fenómeno exógeno no es la única particularidad que caracteriza al tratamiento que estos modelos hacen del cambio técnico. La otra particularidad reside en lo que podríamos denominar "Paradigma de la Selección de la Tecnología Óptima". El punto importante es la concepción implícita que el modelo tiene del cambio tecnológico. Para sintetizarlo -luego lo explicaré con más detenimiento- se trata de lo que podríamos denominar como el paradigma del ajuste técnico pasivo (Rosenberg, 1976) de la economía y el consiguiente paradigma de la selección de la tecnología óptima. La primera cuestión fue ampliamente abordada ya por Rosenberg. Si nos fijamos en la aproximación micro a la cuestión del cambio tecnológico que hace la estática comparativa, observamos cómo la isocuanta y la isocoste son las piezas clave para determinar cuál es la técnica productiva óptima. La isocuanta representa la infinidad de alternativas técnicas de que dispone una economía en un momento del tiempo para alcanzar un determinado nivel de 4 producción. Esta concepción suscitó fuerte controversia (Rosenberg, 1976) en tanto que no parecía razonable que una economía dispusiera de una gama muy amplia de técnicas productivas para producir un determinado bien (en este sentido Rosenberg sugería, a los enfoques neoclásicos estáticos, considerar una isocuanta que tuviera un trazo más corto, que diera cuenta de que a lo sumo un número finito, incluso bajo, de alternativas tecnológicas podían ser disponibles por la economía en un momento determinado del tiempo). Ahora bien, esta concepción que refleja la isocuanta alcanza su máxima expresión cuando se produce una variación en los precios de los inputs -por consiguiente, un cambio en la pendiente y/o posición de la isocoste-. En este caso la economía no hace más que ajustarse modificando la técnica productiva empleada, dirigiéndose hacia aquella combinación de inputs que permita producir la máxima cantidad posible dados los nuevos precios de los inputs (Ver Fig. 4). A este proceso de ajuste lo denominamos ajuste técnico pasivo. Es decir, aquel proceso por el cual cualquier alteración en las condiciones del mercado (variación de precios de los inputs, del output, de la demanda) provocan una reacción inmediata, automática en la tecnología empleada. Frente a cualquier cambio en las condiciones de mercado la economía puede ajustarse de manera automática eligiendo una técnica productiva distinta más apropiada a las condiciones presentes. Es a este ajuste automático a lo que aquí denominamos como ajuste técnico pasivo; no es que la economía disponga de estrategias tecnológicas explícitas en las que decide profundizar, y ser un protagonista activo del cambio técnico, sino que hay un proceso de acomodación pasiva a las nuevas circunstancias en la medida en que la economía dispone de infinitas técnicas productivas para satisfacer un determinado volúmen de producción. La pregunta, ante este planteamiento, es: ¿no hay condicionamiento tecnológico en una sociedad?, ¿puede ésta emprender en cualquier momento del tiempo cualquier desafío tecnológico?2. Esta cuestión es de gran importancia porque recorre la concepción que del cambio tecnológico tienen muchos otros modelos3. Es decir, se omite por completo tratar la cuestión de cuáles son las limitaciones tecnológicas a las que se enfrenta una sociedad en un momento del tiempo y, por otro lado, no se ofrecen instrumentos metodológicos para abordar la cuestión de que los agentes (empresas, individuos) no son tecnológicamente pasivos sino tecnológicamente activos; tienen un comportamiento estratégico definido en lo relativo al cambio técnico. La segunda cuestión, estrechamente ligada con la anterior, es la de que este modelo en el fondo está planteando un marco para realizar "la selección de la tecnología óptima". Dadas unas alteraciones en las condiciones del mercado, y dadas las infinitas alternativas tecnológicas representadas en la isocuanta, la economía selecciona cuál es la técnica que minimiza costes (la óptima). Todo lo que este modelo pretende resolver en torno al cambio tecnológico se centra en la cuestión de seleccionar, elegir la mejor técnica dentro de una amplia gama de técnicas disponibles. Pero queda sin respuesta cómo se crea una nueva 2En relación con esta cuestión, imaginemos que el precio de la madera sube drásticamente (porque el mundo se queda casi sin recursos en madera). Esto no da lugar inmediatamente a que todas las sillas de madera pasen a producirse con materiales plásticos. Antes, como explica la propia experiencia histórica, hubo que desarrollar toda la industria del plástico, y por tanto el proceso no fue automático sino que tuvieron que pasar varias generaciones para que fuera medianamente resuelto. 3Donde se plasmó con total evidencia fue en los planteamientos de Schmookler (1962), que acabaron denominándose como el enfoque del "tirón de la demanda" (demand pull). 3 técnica: qué es lo que lleva a la generación de una nueva tecnología, en definitiva el dilema de la creación de tecnología frente al de la selección de tecnología. 2.2 La teoría del Crecimiento Económico: El objetivo de estos modelos es el análisis de los determinantes de la evolución del producto per cápita (Y/L) de una economía a lo largo del tiempo y, por extensión, mejorar los instrumentos de medición de la evolución de las macromagnitudes. En sus primeros desarrollos4 estos modelos consideraban que el elemento crucial para explicar la evolución de la Y/L de la economía era la acumulación de capital (la evolución del stock de capital, K). Las dos piezas básicas de todos estos modelos son: 1. la función de producción: Yt= F(Kt,Lt). 2. la evolución del stock de capital: Kt+1 = sF(Kt,Lt) + Kt. Expresión que a su vez lleva implícitas otras dos identidades; que el ahorro es igual a la inversión Inversión (I=˜Kt= =sF(Kt,Lt)) y que el stock de capital de un período es el stock de capital inicial del período anterior más el aumento de la inversión (aumento del stock de capital) del período anterior. A partir de aquí el modelo "corre" hasta alcanzar el equilibrio estacionario; aquél en que la tasa de crecimiento del stock de capital per cápita se estabiliza ((K/L)t+1 = (K/L)t ). Con R.Solow5 se rompe con la concepción de que es el aumento del stock de capital el principal argumento de la evolución a largo plazo de la renta per cápita. En el artículo pionero de este autor, en 1957, demuestra que, tomando los datos de la evolución de la renta de USA para los años 1900 a 1949, el crecimiento del stock de capital per cápita no explica más que un 15% del crecimiento de la renta per cápita. Solow parte de la consideración de una función de producción Cobb Douglas con rendimientos constantes y donde los factores son retribuidos según su productividad marginal. De esta forma podemos llegar a la siguiente expresión, en tasas de crecimiento, a partir de 1una función de producción Yt= At KÆt L Æt : ˜Y/Y = ˜A/A + (1-—) ˜K/K + — ˜L/L , donde (1- —) y — son las participaciones respectivas del capital y del trabajo en la renta nacional. Lo que Solow demostraba es que las tasas de crecimiento de los factores de producción capital y trabajo (˜K/K y ˜L/L) no daban cuenta más que de una porción muy baja de la tasa de crecimiento de la renta del país, y que había un residuo (˜A/A) que era el que explicaba 4Seguiré en lo fundamental el esquema sugerido por De la Fuente (1992), en la explicación de las diversas modelizaciones que ofrece este enfoque. 5Solow,R (1957): "Technical change and the Aggregate Productiion Function", Review of Economics and Statistics,1957. 8 los mayores porcentajes de dicha evolución. Sobre este residuo (la A de la función de producción), al que se denominó residuo de Solow, empezó a recaer gran parte de la literatura escrita dentro de la Teoría del Crecimiento. La mayor parte de los autores dentro de este paradigma reconocían que fuera lo que fuera lo que hubiera detrás del residuo, uno de los elementos básicos tenía que ser el referido al cambio tecnológico. En ese esfuerzo de la literatura económica referida a los modelos de crecimiento por introducir una modelización del cambio tecnológico, podemos distinguir dos enfoques dominantes: a) los enfoques exógenos del cambio tecnológico: aquéllos en que se establece de partida la tasa de crecimiento del cambio tecnológico a lo largo del tiempo. Es decir, presuponen que el cambio tecnológico, la "A", seguirá una evolución determinada. b) los enfoques endógenos del cambio tecnológico: aquéllos en que se diseña un modelo de crecimiento dentro del cual se ofrece una explicación de los determinantes de la evolución de la "A". Dentro de este subenfoque pueden distinguirse a su vez dos ramas: b1) los modelos que pretenden rescatar la importancia de la acumulación del stock de capital, donde podríamos incluir los modelos de learning by doing y los que introducen la posibilidad de economías de escala, y b2) los modelos que plantean el carácter sustitutivo de las actividades de acumulación de capital en relación a las de I+D. Los modelos endógenos6 que rescatan la importancia del stock de capital como elemento principal para explicar la evolución de la renta de una economía son aquellos que plantean que la evolución de la "A" está intimamente ligada a la del stock de capital (K). Por ejemplo, los modelos de learning by doing plantean, en una versión simplificada pero suficientemente general, lo siguiente: . Y=F(K,AL) . A= G(K)=KÆ De manera que, al aumentar el stock de capital, crece la productividad marginal del trabajo. Por consiguiente, si bien en el modelo se da una explicación de los deteminantes de la evolución de la A, sigue siendo el stock de capital el que está detrás del proceso de crecimiento. Por otro lado, con los modelos que introducen la cuestión de las economías positivas externas pasa algo parecido. De nuevo, en una presentación simplificada el modelo se podría presentar como: . Y= AF(K,L) 1 si K<k . A= { Kª si K >k donde ª es mayor que 1. 6No nos referiremos a los modelos exógenos puesto que estos no aportan nada nuevo en relación a la comprensión del cambio tecnológico, nada más que lo que pudieran establecer los modelos de crecimiento originales. En tanto en cuanto el objetivo de estos modelos es la aproximación a los patrones de evolución del producto per cápita, dicha omisión halla justificación, puesto que el modelo se convierte así en una pieza instrumental útil para la cuantificación (de la evolución de macromagnitudes) pero a costa de desprenderse de toda pretensión explicativa de los determinantes del cambio tecnológico. 8 En este caso, cuando la economía supera un nivel de stock de capital k se generan economías externas positivas de magnitud ª. Esta modelización viene a recoger la concepción de que al aumentar la escala de producción hay disminuciones de costes muy significativas (o ganancias en productividad). Una vez más vuelve a ser el stock de capital el factor determinante de la evolución de la Y/L a largo plazo. En cuanto a los modelos que plantean la sustituibilidad entre las actividades de I+D y la de producción de bienes (función de producción), consisten en que el modelo incorpora un nuevo sector (actividades de I+D) que ofrece una retribución al trabajador. De forma que éste debe optar entre la retribución en el sector productor de bienes y la de las actividades de I+D. Al final llegamos a una situación como la siguiente: I+D . A = f(L ) Donde la evolución de A viene determinada por el número de trabajadores que en cada momento del tiempo están contratados en actividades de I+D. En cualquier caso, en este planteamiento, generar un incremento tecnológico tiene un coste propio (no es fruto simplemente de la acumulación de stock de capital) y en esto reside su novedad. Valoración de estos modelos: El modelo es útil desde un punto de vista macroeconómico, para estimar la evolución y cuantificar algunas variables que no son directamente observables en las estadísticas oficiales, como por ejemplo la evolución del stock de capital, o la evolución del cambio tecnológico, o incluso para hacer predicciones sobre la evolución futura del volumen de producción agregado. Ahora bien, estos modelos resultan altamente insatisfactorios para analizar los determinantes del cambio tecnológico, incluso por parte de aquellas ramas que plantean explícitamente una endogeneización del mismo. Explicaré en los siguiente párrafos poqué resultan instisfactorios y porqué los considero modelos que sólo analizan las relaciones externas del proceso. a) El modelo plantea la existencia de una relación entre K (o L) y A y, simultáneamente, entre A e Y que siempre es exógena, siempre es a priori que debe establecerse la forma concreta de dicha relación. Por ejemplo, en los modelos dentro del grupo b1 la relación existente entre K y A siempre se determina exógenamente7, debemos suponer cuál es la magnitud de Æ o ª para poder hacer correr el modelo y que este lleve a aumentos de A conforme aumenta K a través de una determinada relación.8 Exactamente igual pasa con los modelos incluídos en b2, puesto que 7Romer (1990) lo plantea muy claramente cuando escribe: "La formulaci_n del "learning by doing" tiene la ventaja de hacer end_gena la tasa de acumulaci_n del conocimiento no rival, pero es poco satisfactoria porque toma la proporcionalidad estricta entre conocimiento y capital f_sico, o entre conocimiento y educaci_n, como un rasgo de la tecnolog_a no explicado y ex_genamente dado", pag. 77.(el subrayado es m_o). 8Incluso si lo que hicieramos fuese estimar el valor de tales parámetros (Æ y ª) dentro de un lapso temporal conocido, el hecho de plantear que tales valores estimados seguirán vigentes en el futuro no es más que un supuesto a priori que niega el carácter esencialmente endógeno que debería tener cualquier relación que determinara la evolución de A. 10 la forma concreta de la función "f" que relaciona los aumentos del número de trabajadores en actividades de I+D con aumentos de A es una relación totalmente a priori; en definitiva, nadie puede saber porqué dicha forma funcional "f" puede variar a lo largo del tiempo para un país o porqué puede ser diferente para diferentes países (simplemente podríamos llegar a la evidencia de que existe tal diferencia). Por otro lado, la misma exogeneidad queda patente en la relación existente entre los aumentos de A y los aumentos de Y, es decir, la forma funcional de la propia función de producción. Este cúmulo de encorsetamientos hace difícil que estos modelos sean capaces de endogeneizar verdaderamente el proceso de cambio tecnológico, más aún teniendo en cuenta que el modelo no puede desprenderse, por su propia metodología, de dichos corsés o rigideces (en tanto que son la esencia de la relación que existe entre las variables del modelo). b) Los diversos modelos dentro de la teoría del crecimiento, a la hora de abordar el cambio tecnológico responden a una causalidad específica: es el learning by doing o son las economías externas o son los mayores recursos en actividades de I+D, pero parecen poco apropiados para abordar la complejidad del proceso en su conjunto que abarca mucho más que una única relación causal. El proceso de innovación parece responder a un conjunto muy amplio de elementos, de los cuales, los modelos de crecimiento parecen recoger sólo uno de ellos cada vez (en cada modelización). c) No parecen muy apropiados para distinguir entre innovaciones de proceso o de producto, o innovaciones radicales o secundarias. Se puede argumentar que esto debería ser objeto de una metodología más micro y no de la teoría del crecimiento, pero también parece claro que el proceso de innovación presenta rasgos diferenciados si se trata de innovaciones de proceso o de producto, o si se trata de innovaciones incrementales o radicales, y que por tanto dichas particularidades deberían tenerse en cuenta si lo que se pretende, por parte del modelo, es dar explicación del fenómeno del cambio tecnológico. Tal vez una conclusión que podríamos extraer es que para abordar dicho fenómeno es necesaria una metolología más micro, o cuanto menos que no omitiera aspectos microeconómicos básicos. d) En suma el aspecto crítico fundamental es el carácter rígido de estos modelos para abordar el proceso de cambio tecnológico. Dadas las características descritas, los modelos neoclásicos de la Teoría del Crecimiento podrían denominarse: Modelos de Estática Comparativa de Equilibrios Estacionarios. Lo que quiero expresar con esta denominación es el carácter profundamente estático que tienen estos modelos, derivado del encorsetamiento planteado en el punto a)9. 9Una vez m_s Romer (1990)lo plantea algo similar cuando escribe: "Al concentrarse en las v_as de crecimiento equilibrado, el an_lisis omite la din_mica transitoria que surge cuando al econom_a parte de una raz_n de K o A que difiere de la raz_n mantenida a lo largo de la v_a de crecimiento equilibrado", pag.90, y m_s adelante a_ade, "Toda intervenci_n que trate de mover una econom_a de una v_a de crecimiento equilibrado a otra, debe considerar la din_mica de la transici_n, y un an_lisis expl_cito de esta din_mica escapa a los l_mites de 10 La cuestión es como sigue: dados los parámetros del modelo, éste llega a un equilibrio estacionario. Si los parámetros del modelo cambian, se alcanza un equilibrio estacionario distinto. Dado que los elementos que rigen la explicación del cambio tecnológico en estos modelos están plagados de parámetros, si pasamos de un equilibrio estacionario a otro debemos plantearnos que algunos de los parámetros del modelo pueden haber sufrido un cambio y, entre éstos, también los parámetros ligados con el cambio tecnológico (por ejemplo, si la productividad del trabajo alcanza mayores aumentos con iguales cambios en el stock de capital en el modelo de learning by doing). De esta forma es posible plantear que los saltos que la economía pueda observar de un equilibrio estacionario a otro obedecen a cambios en los parámetros del modelo, exactamente igual que lo que observábamos en los modelos de estática comparativa. Al igual que en éstos, también nos encontramos ahora con que los cambios en los parámetros quedan inexplicados. En definitiva, podemos constatar que pasamos de un equilibrio estacionario a otro, e incluso que esto obedece a que han variado los parámetros del modelo. Pero lo que seguimos sin poder explicar es porqué han variado los parámetros del modelo, entre ellos el cambio tecnológico. Utilizando como referencia la Figura 5 podemos ilustrar cómo los modelos de crecimiento pretenden estimar la ruta o senda que va del equilibrio estacionario 1 a al equilibrio estacionario 2 o de éste al 3, pero no las razones que llevan a que pasemos de un equilibrio estacionario a otro, es decir, las razones que llevan a que cambiemos de ruta. 3. La Teoría de Juegos: La Teoría de Juegos tiene un objetivo esencialmente normativo en cuanto al tratamiento del cambio tecnológico se refiere. En general este enfoque parte de establecer un marco donde se especifican las característcas siguientes: 1. corriente de beneficios (ingresos y costes) asociados a cada una de las trayectorias que pueden seguir los agentes. 2. número de agentes que intervienen. 3. características relativas al marco tecnológico: costes asociados con la decisión de innovar, probabilidad asociada con el éxito de la innovación,... Dado este marco, se trata de diseñar un conjunto de instrumentos que permitan alcanzar un objetivo: en general, llevar al máximo el volúmen global de beneficios de los agentes. Gran parte de la literatura hace referencia al establecimiento de una política de patentes óptima. Si nos centramos en esta cuestión no es porque sea la única área de carácter normativo en el que entra la teoría de juegos, sino porque a partir de penetrar en ella podremos extraer algunas interesantes conclusiones generales comunes a otros problemas que se plantean frecuentemente dentro de la teoría de juegos, conclusiones que hacen referencia a la metodología de la que parten estos modelos. En los modelos que pretenden establecer cuál es la política óptima de patentes, la disyuntiva esencial con la que se encuentran estos modelos es la siguiente: por un lado, es necesario este ensayo. Sin embargo, puede compararse f_cilmente la tasa de crecimiento que surge del equilibrio a lo largo de la v_a de crecimiento equilibrado con la que surgir_a de la soluci_n a un problema de planeaci_n social", pag.97 (el subrayado es m_o). 12 establecer un derecho de explotación de la innovación suficientemente generoso para el innovador inicial (esto es, establecer un derecho de explotación de la innovación que garantice al innovador el monopolio temporal de explotación de la misma). Ahora bien, dicho derecho monopólico de explotación no puede ser muy prolongado en el tiempo pues esto desincentiva la entrada en el mercado de nuevas empresas y de nuevas innovaciones, llevando a que elprimer innovador obtenga rentas monopólicas a costa de un menor flujo innovador. Por otro lado, la patente otorgada al innovador inicial no puede ser demasiado baja (alentadora de entrantes potenciales) puesto que esto disuadiría al potencial innovador inicial de tomar la decisión de innovar. Por consiguiente, el planificador social debe elegir aquel diseño de patente que equilibre en la medida de lo posible estas dos fuerzas contrapuestas y permite alcanzar la trayectoria que comporta un mayor beneficio conjunto. Si esta es la problemática genérica a la que se enfrenta la política de patentes veamos, en concreto, cómo se presenta la secuencia de decisiones (el marco del juego) en un caso muy sencillo de modelización de teoría de juegos. Supongamos que la secuencia del juego es la de la Fig. 610. La empresa 1 decide si innova o no. Si lo hace, el fruto de su innovación es un producto x. Si la empresa 1 ha innovado, le corresponde a la empresa 2 tomar la decisión de innovar o no. Si decide innovar, el producto de su innovación será x+y, donde “y” está recogiendo lo que hay de novedoso en el producto obtenido por la empresa 2. Una vez en este punto, hay que determinar si la innovación de empresa 2 infringe o no la patente; esto es, si “y” representa un salto suficientemente cualitativo como innovación. Aquí es donde el diseño de la patente juega un papel crucial. En este caso se trata de establecer cuál es la anchura de patente * adecuada (óptima), es decir, se trata de establecer un valor y tal que: * . si y>y no se infringe la patente, puesto que y representa una innovación importante, * . si y<y se infringe la patente, puesto que y no representa un cambio suficientemente importante respecto a x, por tanto, puede interpretarse como una imitación de x. 10El ejemplo concreto está extraído de un caso planteado en el artículo: "On the division of profit in sequential innovation", J.R.Green y S.Scotchmer, en RAND Journal of Economics, Vol.26, Nº1, 1995. 12 * Por tanto, la politica de patentes en este caso consistirá en establecer el adecuado valor de y teniendo en cuenta que si la innovación de la empresa 2 no infringe la patente, las dos empresas competirán en un marco de competencia oligopolística. Si la infringe, deberán llegar a un acuerdo sobre cuánto debe pagar la empresa infractora para comercializar su producto. * Al final la solución de qué y proponer depende de las características del marco del juego que establezcamos11. Valoración del modelo planteado por la teoría de juegos: El marco metodológico ofrece un campo fértil en el terreno normativo, para responder a cuestiones tales como la siguiente: dado un marco determinado -una secuencia determinada de toma de decisiones-, cuál es la política que permite alcanzar los beneficios máximos. Ahora bien, en lo relativo a comprender el proceso de cambio tecnológico y cuáles son sus determinantes, el modelo presenta serias limitaciones. a) El paradigma del ajuste tecnológico pasivo: las limitaciones del lado de la oferta tecnológica vuelven a pasar desapercibidas al igual que pasaba con el modelo de estática comparativa. Tanto en aquel caso como en éste nos encontramos con la concepción de que el "empuje de la demanda" -siguiendo la terminología derivada de la controversía abierta en relación a los planteamientos de Schmookler- es el factor dirigente o determinante del proceso de innovación. Es decir, las condiciones del mercado, en este caso representadas por las expectativas futuras de beneficios, son las que llevan a que los agentes decidan si innovan o no. Por consiguiente, no se contempla que pueda existir ningún tipo de limitación por el lado de la oferta tecnológica en la medida que el innovar o no depende, en último término, de la decisión de hacerlo (en función de la corriente de ingresos y costes futura). De esta forma, cuestiones tales como porqué una innovación determinada se genera en un momento determinado del tiempo y no en otro, y porqué en un país y no en otro, no pueden hallar respuesta mediante esta metodología, puesto que hacerlo comporta referirse necesariamente a los condicionantes por el lado de la oferta de tecnología. Igual que con el planteamiento de la estática comparativa, la concepción pasiva respecto a la oferta tecnológica comporta plantear el paradigma de la selección tecnológica en lugar de hallar los determinantes de la creación de tecnología. De nuevo, la pregunta a la que se responde es: cuál es la tecnología óptima que hay que elegir o, como en este caso, tomar la decisión de innovar o no en un contexto en que los costes del proceso de innovación son conocidos. Los agentes del modelo (empresas en este caso) no tienen estrategias propias en el ámbito tecnológico, no son agentes activos en lo referente al proceso de innovación. Sin embargo, en un enfoque micro resulta imprescindible reconocer la importancia que tiene el aspecto tecnológico en la estrategia de las empresas; el hecho de que éstas asumen un papel protagonista a la hora de definir las lineas de investigación y, por tanto, no están sujetas a una 11En concreto, se llegaba a la siguiente solución en el caso del artículo citado antes. Si la y era conocida a * priori resultaba mejor una y = ∞ , de manera que fuera necesario un pacto a priori de reparto de beneficios futuros, para que la empresa 2 innovara. Mientras que si y era desconocida, se podía permitir como incentivo el que y*< ∞ , de manera que se da a la empresa 2 un poder negociador fuerte para un acuerdo ex-ante. En cualquier caso, el modelo plantea que la mejor solución vendrá derivada de un acuerdo ex-ante de reparto de beneficios entre los agentes, pues asegura beneficios conjuntos máximos con innovación de las dos partes. 16 adecuación pasiva a las condiciones del mercado sino que su interés reside precisamente en alterar dichas condiciones (M.Porter,1983). En definitiva, las empresas no reaccionan de forma pasiva sino profundamente activa en lo que se refiere al proceso de innovación, y esta cuestión queda completamente omitida en los modelos de teoría de juegos. b) En este enfoque resulta necesario tener conocimiento perfecto de la corriente futura de ingresos y costes correspondiente a las diversas trayectorias abiertas a cada agente, para que cada uno de ellos pueda perfilar su comportamiento estratégico. Esta concepción representa una importante limitación del modelo pues es fuertemente cuestionable tanto que los agentes se comporten en orden a maximizar una función objetivo, como que tengan conocimiento perfecto de sus beneficios futuros12. Estos interrogantes se acentúan en un tema como el que nos ocupa, puesto que no parece razonable plantear que un proyecto de investigación tenga como objetivo inmediato el obtener beneficios (puede concebirse, en particular en su categoría de investigación básica, como una pieza de infraestructura fundamental, o incluso resultar un elemento indispensable para competir en un mercado determinado, y por tanto la razón de su existencia no obedecería a la lógica de obtención directa de beneficios) y, mucho menos, puede plantearse que los resultados de dicho proyecto sean ciertos. c) Por último, es importante señalar la distancia que separa a estos modelos de un análisis concreto. En la gran mayoría de trabajos, se presenta el modelo y se alcanzan unas conclusiones, pero no hay la más mínima referencia a un caso práctico. Parecería que el modelo quedara cerrado atendiendo sólo al planteamiento abstracto, general. Esto lleva a plantear un serio problema de esta metodología, en la medida que parece ir de la teoría a la teoría, sin pasar un sólo instante por lo práctico o aplicado. Algo así como si se tratara de una teoría que se sostiene a sí misma, burlando siempre su encuentro con el tratamiento de casos concretos. El enfoque resulta altamente satisfactorio en su carácter instrumental desde un punto de vista normativo, pero el problema se presenta cuando se pretende que sea útil para analizar un proceso determinado. Si se quieren introducir muchos elementos institucionales concretos el modelo se rompe por la dificultad de formalizar matemáticamente un cúmulo de características institucionales tan numerosas. Por otro lado, si se pretende darle un carácter más general, el mismo modelo acaba sirviendo para esquematizar fenómenos de comportamiento estratégico tan dispares como pueden ser la decisión de innovar, la decisión de casarse o no por parte de los miembros de una pareja, o la de decidir la extensión de tierra a cultivar por parte de un señor feudal y uno de sus siervos. Es decir, se convierte en un esquema de utilidad universal, para abordar cualquier fenómeno. La pregunta que emerge es entonces si dicho esquema permite comprender la esencia propia del fenómeno que pretende analizar, puesto que es evidente que en cualquier momento del tiempo y en cualquier lugar caben siempre varias alternativas: una solución cooperativa o una de confrontación. Pero esta conclusión, dada su generalidad y universalidad, no aporta nada a la comprensión de un fenómeno concreto. Considero que lo más importante es poner de manifiesto lo que el modelo considera como el 12Tanto institucionalistas como evolucionistas criticarán esta cuestión, en particular, estos últimos (Nelson y Winter, 1982) cuestionarán tanto lo relativo a la maximización de funciones objetivo como al conocimiento perfecto de la corriente futura de beneficios, mientras que los primeros (North, 1990) consideran demasiado fuertes los supuestos de la Teoría de Juegos en relación a la maximización de una corriente conocida de ingresos y costes. 16 marco instittucional. Dicho marco institucional debe ser objeto de nuestro interés, como el conjunto de factores que llevan a que los agentes se enfrenten o cooperen, y no tanto el centrarnos en el agente y su decisión (su corriente futura de beneficios) como el centro de la cuestión. En definitiva, estos modelos siempre consideran el aparato institucional como un elemento dado, cuyo cambio corresponde al planificador social. Nos interesa sin embargo tomar dicho marco como algo esencialmente móvil, objeto de nuestro análisis: pues es lo que dota de contenido, de significado, al continuo proceso de formación de decisiones de los agentes13. 4. La teoría de la Difusión: Este enfoque del análisis del cambio técnico tiene como objetivo fundamental hallar los determinantes del proceso de imitación de una innovación. El argumento que justifica esta orientación es la consideración de que una innovación sólo tiene relevancia económica si consigue ser adoptada por el núcleo de las empresas de un sector industrial, esto es, si consigue desplazar a los productos o técnicas alternativas existentes previamente. El trabajo pionero, dentro de este enfoque, es el de Mansfield (1961), en el que se establecen los elementos básicos de esta metodología. En dicho trabajo el autor se plantea descubrir cuáles son los factores que rigen el proceso de imitación. Propone que la tasa de imitación de una innovación (número de empresas imitadoras en período t dividido por el número de empresas que todavía no han imitado) es función de las expectativas de beneficios en el períiodo t, el coste de la inversión asociado a la imitación de la innovación y del número de empresas que han realizado la imitación hasta el período t. La relación sería: ºij = (mij (t+1) - mij (t)) / (nij -mij (t)) = f (—ij , sij , mij (t)/nij) 13Necesariamente esto lleva a plantearnos la disyuntiva de si nos centramos en el individuo o en las instituciones. Pienso que esta discusión es fundamental, en tanto que no considero que el centro del análisis deba ser el individuo o el agente singular, sea éste el que sea. Lo que verdaderamente es de interés es la interacción entre marco institucional y “agentes”, el análsis de su influencia mutua, algo que los modelos de Teoría de Juegos no tienen en cuenta. Éstos parecerían atender a un sólo vínculo causal, el que va del marco institucional al comportamiento de los agentes, pero no a la inversa. Aunque simplemente sea por la concepción de equilibrio, estos modelos no son capaces de aprehender la dinámica interacción entre instituciones-agentes. Es decir, si hay equilibrio hay un momento en que la sociedad alcanza un punto estacionario, ¿deja de haber entonces interacción entre agentes y contexto institucional?. Dos de los puntos esenciales en el enfoque de estos modelos, partir de que el centro del análisis es el individuo y partir de la concepción de equilibrio, se presentan como especialmente cuestionables para un análisis desde las ciencias sociales. 18 Donde ºij es el coeficiente de imtación, los subíndices i y j hacen referencia el primero a la innovación concreta que se está estudiando y el segundo a la industria en al que dicha innovación se da14, m (t) es el número de imitadores de una innovación en el período t, nij es el número de empresas en la industria j que realizan la imitación en el período estudiado. —ij es el beneficio esperado en la industria j por realizar la imitación de i, y sij es el coste asociado a dicha imitación. Operando se llega a la siguiente expresión logarítmica: ln ( mij (t)) / (nij -mij (t)) ) = lij + _ijt , donde _ij es función lineal de —ij y sij y lij es un coeficiente fijo para cada industria. El trabajo planteaba comprobar la significatividad de estas variables y confirmar el signo de la relación (se espera que la tasa de imitación dependa positivamente de las expectativas de beneficios y del número de empresas que con anterioridad han realizado la imitación -se considera que cuanto mayor sea el número de imitadores más garantía para el siguiente imitador respecto a la efectividad de la imitación y mayor información sobre la misma-, mientras que se espera relación negativa con la magnitud del coste asociado a la imitación). Lo que el autor comprueba es que el modelo se ajusta bien a los datos, confirmando todas las hipótesis formuladas en un principio. Valoración del modelo: 1.El propio Mansfield destaca algunas de las limitaciones del planteamiento: 1a) no se explican las diferencias entre sectores. En otras palabras, se constata que hay diferencias en el proceso de imitación (en el ritmo de la imitación, en el número de empresas que imitan) pero no queda claro cómo resolver esta dificultad: la comprensión de porqué hay un comportamiento diferencial por sector industrial. En cualquier caso, éste no parece ser un problema infranqueable para este tipo de enfoques, en la medida en que se profundice en analizar los determinantes de estas diferencias sectoriales. Sin embargo, es interesante constatar una característica recurrente en estos planteamientos: los elementos que se introduzcan para dar explicación de las diferencias intersectoriales saldrán inevitablemente de un estudio empírico pormenorizado de cada sector industrial. El propio Mansfield ofrece un ejemplo cuando propone que una de las cuestiones que deberán tenerse en cuenta en el estudio de estas diferencias son las diferentes políticas de patentes vigentes en cada sector. Lo que quiero subrayar con esta frase es que este enfoque parece estar mucho más subordinado a la evidencia empírica que los tratados con anterioridad, que se presentaban como cerrados en un formulación estríctamente teórica. 14En concreto el autor contrasta el modelo para 12 innovaciones, teniendo en cuenta que se trata de 3 innovaciones distintas en 4 sectores industriales. 18 De tal manera esto es así que la propia formulación de los determinantes de la difusión, tal como lo plantea Mansfield, responde a una concepción completamente intuitiva derivada de la observación directa de la realidad.15 Por consiguiente no parece razonable pensar que desarrollos ulteriores de este enfoque puedan hacerse sin partir de una detallada y minuciosa investigación empírica, a nivel sectorial o de país, del proceso de imitación. 1b) la imitación resulta ser un fenómeno profundamene restrictivo. Mansfield destaca que su modelo sólo es útil para abordar la imitación, pero resulta insatisfactorio para detectar la existencia de alteraciones llevadas a cabo por el adoptante de la imitación en su esfuerzo por adecuar la innovación a las características específicas de su proceso productivo. Es un enfoque que prioriza únicamente la relevancia económica del fenómeno de la difusión (ver si las empresas la imitan y a qué ritmo, como confirmación de que desplaza a las técnicas preexistentes) pero despreciando por completo la relevancia desde el punto de vista estríctamente tecnológico. Sería, empleando la terminología de Rosenberg, como la búsqueda de un paradigma de la relevancia o superioridad económica del proceso de innovación. b) Los determinantes tecnológicos (las limitaciones del lado de la oferta de tecnología) quedan completamente omitidas en el análisis. En él se priorizan los condicionantes de la demanda o el mercado como los determinantes del proceso de imitación. Esto se observa a dos niveles: b1) la imitación sólo depende de si hay expectativas de beneficios suficientes ligadas con ella. b2) existe un primer innovador y a partir de ahí se inicia el proceso de difusión. Pero la cuestión irresuelta es: qué determina la innovación de esa primera empresa. En otras palabras, las etapas previas al proceso de difusión se omiten por completo, cuando son de una importancia crucial, en particular para comprender de dónde surgen las innovaciones radicales o porqué la primera innovadora innova en el momento t y no en t-x. Es más, el modelo no se plantea ni siquiera porqué la empresa pionera innova, sino que parte de un momento en que dicha empresa ya ha innovado, y a partir de ahí se inicia el área de trabajo de este enfoque. A modo de síntesis, el modelo no se sitúa dentro del paradigma de la selección tecnologcia sino que su área de acción se encuentra un paso más allá de la elección de la tecnología, es decir, una vez se ha llevado a cabo el fenómeno de la innovación. Lo que le preocupa es el fenómeno de la difusión de ésta y, por tanto, lo que calificaría como el paradigma de la relevancia económica de la innovación, analizar la velocidad y amplitud del proceso de difusión. 5. El enfoque de J.L.Schumpeter: la innovación como determinamte de la dinámica capitalista: 15El autor considera que los determinantes del proceso de imitación son las expectativas de beneficios y el coste de la inversión asociado con al imitación, respondiendo a una percepción esencialmente empírica. Es decir, plantea las relaciones causales partiendo de una percepción intuitiva de cómo deben funcionar éstas. 20 Schumpeter16 se ha convertido en una referencia obligada en cualquier estudio económico sobre el proceso de innovación, no tanto porque en su obra se trate esta cuestión -algo que también hicieron otros autores con anterioridad- sino porque la innovación juega un papel central en el esquema argumental de Schumpeter. Es necesario destacar los puntos centrales de la concepción de Schumpeter, aún siendo consciente del riesgo que representa sintetizar una obra tan vasta, para comprender la influencia que el autor tuvo sobre la posterior literatura relacionada con la cuestión de la innovación. Desde mi punto de vista, los dos ejes centrales de su análisis son: a) que la economía capitalista es algo esencialmente dinámico e inestable, y b) que el determinante fundamental de su dinamismo e inestabilidad es la innovación. En relación al primero, Schumpeter concibe la sociedad capitalista como algo esencialmente dinámico, en continua transformación. Esto lleva al autor a plantearse como objetivo la comprensión de dicha dinámica. En este sentido, constata que la dinámica del capitalismo viene marcada por la existencia de una inherente inestabilidad, el proceso que él denomina de destrucción creadora. Con cada innovación se da paso a la aparición de un nuevo grupo de empresas y a la desaparición de otras. A continuación se abre paso el proceso de difusión de la innovación (enjambre de adoptantes) que impulsan el crecimiento del sector o de la economía. A medida que los beneficios ligados con el proceso de innovación se reducen, como consecuencia de la entrada de gran número de empresas, el ciclo entra en su fase descendente. Este proceso es algo inherente al funcionamiento del sistema. En relación al segundo punto, queda implícito en lo planteado arriba que el factor determinante de la inestabilidad y la formación de ciclos en la economía, es la existencia de la innovación. Schumpeter plantea que el principal elemento de competencia entre las empresas no son los precios sino que es la capacidad de innovar. Todos aquellos cambios "(...) que revolucionan incesantemente la estructura económica desde dentro, destruyendo ininterrumpidamente lo antiguo y creando continuamente elementos nuevos. Este proceso de destrucción creadora constituye el dato esencial del capitalismo" (Schumpeter, 1942, pag. 120-121). Valoración de la concepción de Schumpeter: 1. El marco metodológico: se levanta una explícita crítica a dos concepciones aceptadas por la teoría económica dominante: la de equilibrio y la de estática comparativa. En relación con lo anterior el autor señala: El punto esencial que hay que tener en cuenta consiste en que, al tratar el capitalismo, nos enfrentamos a un sistema evolutivo. (...) No obstante, lo deja a un lado persistentemente aquel análisis fragmentario que nos ha proporcionado la mayor parte de nuestras tesis relativas al funcionamiento del capitalismo moderno. El capitalismo es, por su naturaleza, una forma o método de transformación económica y no solamente no es jamás estacionario, sino que no puede serlo nunca. (Scumpeter, 1942, pag. 16J.A.Schumpeter (1942): "Capitalismo, Socialismo y Democracia". 20 120). Por esta razón considero que es interesante recuperar muchas de las ideas planteadas por Schumpeter, puesto que nos remite a la preocupación irrenunciable por abordar las leyes que rigen el movimiento de las cosas, en particular, de los fenómenos sociales. 2. El proceso de innovación: esta cuestión ocupa un papel central en su planteamiento. Sin embargo, la debilidad de su planteamiento se encuentra, a mi juicio, en que concibe al empresario como el sujeto del proceso innovador, y al proceso innovador en sí como la función del empresario. Esta conceptualización, que lleva al autor a crear una clase social17, la de los empresarios, que se caracteriza por tener la responsabilidad de llevar a cabo el proceso de innovación, es fatal para su análisis porque le lleva a concluir que cuando el proceso de innovación se "rutinariza" en el seno de los laboratorios de I+D de las grandes empresas, el empresario deja de existir al perder su función objetiva, y esto comporta el desmoronamiento del capitalismo (al desaparecer la clase social que lo define, o cuanto menos, que es el motor del mismo según la concepción del autor). 17Una cosa es, partiendo del materialismo histórico, plantear que la burguesía necesita desarrollar las fuerzas productivas para sobrevivir, y otra, plantear que la innovación es la función del empresario en el sistema captialista de competencia perfecta. Si confronto el enfoque de Schumpeter con el materialismo histórico es porque en ocasiones parece que Schumpeter quiera apoyarse en concepciones marxistas, cuando en realidad lo que hace es algo que no tiene nada que ver con éstas. 20 En cuanto al proceso de innovación en sí mismo, es necesario destacar algunas cuestiones. A Schumpeter hay que agradecer la distinción entre invención e innovación18, sin embargo quedaron fuera de su marco de análisis dos fenómenos relevantes dentro de este proceso: .el papel jugado por la oferta tecnológica existente en la sociedad. .la innovación como un proceso continuo y no sólo como origen del proceso de destrucción creadora. Ambas críticas las formula N.Rosenberg (1976). La primera planteando que, como ya señalamos en otras ocasiones, en las relaciones del proceso productivo con el entorno económico parece que no jueguen ningún papel las limitaciones procedentes del lado de la oferta tecnológica. Es decir, la iniciativa innovadora del empresario debe estar influída por la capacidad de generación de nuevos descubrimientos relacionados con su actividad productiva. Sin embargo, esa esfera de la realidad social queda, una vez más, fuera del análisis (como algo exógeno al análisis). Y, en segundo lugar, la concepción schumpeteriana de la innovación remite a una idea de gran transformación de las condiciones previas en el proceso de competencia, comportando un proceso de destrución de unas empresas por parte de aquéllas que protagonizan el proceso innovador. Sin embargo, este planteamiento deja de lado todo aquel conjunto amplio de pequeñas pero imprescindibles innovaciones que se producen en el seno de una empresa y que si bien no son la génesis de un proceso de "destrucción creadora" (no generan una nueva fila y columan en una Tabla Input-Output, como diría C.Freeman (1982)) sí sientan las bases para que ésta se pueda producir en el futuro al almacenar experiencia técnica suficiente por parte de la empresa. En definitva, parecería que el esquema schumpeteriano recogería sólo lo que se conoce como innovaciones radicales pero no las incrementales o secundarias. En definitiva, Schumpeter pone en el centro de su interés el proceso de innovació en tanto que él lo considera como el motor o determinante del dinamismo e inestabilidad inherentes del sistema económico que estudia: el capitalismo. Su diferencia principal con los enfoques vistos hasta ahora reside precisamente en partir de analizar algo que se concibe, en sí mismo, como algo esencialmente dinámico y en su interés por descubrir la esencia de dicho dinamismo. Por esta razón plantea lo siguiente: (...)En otras palabras, el problema que usualmente se toma en consideración es el de cómo administra el capitalismo las estructuras existentes, siendo así que el problema relevante es el de descubrir cómo las crea y cómo las destruye. Mientras no tenga conciencia de esto el investigador realiza una labor que carece de sentido, pero en cuanto lo reconozca, su visión de la práctica y sus consecuencias sociales se modificarán considerablemente. (Schumpeter, 1942, Pag.122). De este enfoque que pretende analizar la dinámica del sistema capitalista y el papel central que juega en éste el proceso de innovación, surgirán diversos enfoques teóricos que abordaremos a continuación. 18Invención hace referencia a la primera concepción un nuevo producto o proceso, mientras que la innovación hace referencia a la puesta en práctica de aquella concepción, una vez superadas las barreras técnicas. 23 6. La teoría evolucionista del cambio técnico: La teoría evolucionista, de la cual R.Nelson y S.Winter son los padres fundadores, recoge de la concepción schumpeteriana dos ideas fundamentales: la de que la economía es un fenómeno dinámico y la de que el proceso de innovación es un elemento central de dicha dinámica. A diferencia del enfoque de Schumpeter, que considera el cambio tecnológico como un fenómeno de ruptura, que da lugar a ciclos económicos, Nelson y Winter consideran el cambio tecnológico como un fenómeno continuo. Con esta concepción de partida formulan un modelo de crecimiento económico (Nelson y Winter, 1982 y Nelson, 1987) en respuesta a muchas de las limitaciones que encuentran en los modelos de crecimiento neoclásicos. En dichos modelos introducen cinco piezas que son fundamentales para apreciar la distancia que los separa de aquéllos: 1. el proceso de crecimiento no se analiza bajo la concepción de la existencia de agentes maximizadores de funciones objetivo. 2. no se plantea la consecución de un equilibrio a largo plazo en el modelo, sino que se parte de la idea de un proceso continuo, ilimitado, cuyo "destino" no es necesariamente alcanzar un equilibrio estacionario (como sucede en los modelos de crecimiento necoclásicos). 3. se establecen relaciones técnicas de coeficientes fijos (tecnologías Leontieff) en lugar de las tradicionales funciones de producción en que existen una infinidad de tecnologías disponibles para obtener un determinado nivel de producción. 4. se introducen en el modelo elementos que permitan distinguir diferentes tipos de empresas, tanto en relación a su tamaño como en relación a su estrategia tecnológica, de manera que el modelo pueda establecer una relación entre estructura del mercado y cambio técnico. 5. el comportamiento tecnológico de las empresas se formula a través de una función de probablilidad que depende de la intensidad de esfuerzo tecnológico (gasto en I+D en relación al producto). Y, por otra parte, se permite la distinción entre empresas que tienen estrategia innovadora y aquéllas que son solamente imitadoras. Con la aleatoriedad de estas funciones lo que se quiere expresar es el desconocimiento a priori sobre cuánto invertir y si será o no exitosa la inversión (es decir, si habrá o no innovación), y dar a entender que todo esto sólo se conocerá mediante el curso del proceso de competencia, a lo largo de la evolución del proceso de crecimiento. Por último, una cuestión adicional que presentan estos modelos, es que el éxito o fracaso en la actividad inventiva de la empresa condiciona las oportunidades tecnológicas (la magnitud de sus éxitos técnicos) en períodos posteriores. Las relaciones entre las variables del modelo se establecen siguiendo los patrones de las identidades macro en algunos casos y la intuición económica en otros. Los elementos esenciales de dicho modelo giran en torno a la relación entre el volúmen de producción y la evolución, tanto del stock de capital (K) como de la productividad de la técnica empleada (A): a)Qt = Σ Ait Kit , donde Q es el volúmen de producción en el momento t, Ait es la productividad de la técnica empleada por la empresa i en el momento t, y Kit es el stock de capital de la empresa i en el momento t. 22 b)Pr( innovar y/o de imitar)i= F( gasto de la empresa i en actividades ligadas a la innovación o a la imitación, volúmen de capital de la empresa i, ...). De manera que se establecen los elementos de los cuales depende la probabilidad de tener éxito en la estrategia de innovación o imitación. En segundo lugar, el haber tendio éxito en el proceso de innovación permitirá a la empresa mejorar su capacidad para ampliar la productividad de la técnica empleada en el período siguiente (Ai(t+1)). c) Se establece el esquema de evolución del stock de capital: Ki(t+1)= Inversión + Kit. No entramos a mostrar de qué depende la inversión, o el papel que juegan los beneficios y la función de demanda en este modelo, porque no es imprescindible para lo que nos interesa aquí. Simplemente pretendo ilustrar cómo modeliza este enfoque la cuestión de la innovación y su relación con el resto de variables. Valoración del modelo: a) El modelo evolucionista plantea críticas muy interesantes a los modelos neoclásicos de crecimiento, discutiendo uno por uno los supuestos de partida que dichos modelos plantean. Desde un punto de vista metodológico esta controversia la considero de enorme interés. Fundamentalmente se centra en cuestiones relacionadas con: el rechazo de la idea de agentes maximizadores, el rechazo de la concepción de equilibrio y la defensa de la concepción de colocar el proceso de cambio técnico como eje central del proceso de crecimiento. Abrir estos puntos de discusión es de sumo interés en la medida que se pretendan superar problemas en el análisis del cambio tecnológico (y de cualquier fenómeno económico). b) Sin embargo, si en la formulación de principios puede resultar muy sugerente el enfoque evolucionista, cuando se plantea la formulación de las relaciones entre variables económicas se manifiestan serias debilidades en cuanto a la comprensión del propio proceso de cambio tecnológico. Parecería en definitiva que el modelo se construyera con el fin último de mejorar, perfeccionar los modelos de crecimiento neoclásicos, formulando nuevos modelos de crecimiento que superaran las limitaciones de aquéllos. Se trataría en definitiva de modelos de crecimiento indeterminados (en una formulación probablemente poco afortunada que me voy a permitir la licencia de emplear ahora a falta de otra mejor). Indeterminados en el sentido de que no se dirigen a un punto de equilibrio sino que su evolución es siempre indeterminada (impredecible) dado el componente aleatorio que se introduce en la modelización, queriendo reflejar a su vez la incertidumbre que rodea al proceso de innovación. De todas formas, como planteaba antes, poco aportan en el análisis del cambio tecnológico en sí mismo. Por un lado, en tanto que éste sigue siendo un fenómeno inexplicable, ahora expresado a través de una función aleatoria para dar a entender precisamente el desconocimiento que los agentes tienen respecto al coste y al éxito o fracaso del proceso inversor en investigación. Por otro lado, al hecho de que una vez más quedan fuera del esquema los condicionantes o limitaciones por el lado de la oferta, lo que podríamos denominar como las relaciones entre 25 ciencia y tecnología. Esto es así porque si bien ahora es la oferta de innovaciones la que determina el proceso de crecimiento, no se sabe qué es lo que rige dicho proceso de generación de tecnología, en tanto que éste es un proceso aleatorio. 7. El enfoque de la Trayectoria Tecnológica: Un análisis desde la oferta tecnológica: Este enfoque es también heredero de las concepciones schumpeterianas, en la medida que toma como objetivo de trabajo el análisis de la dinámica económica y parte de la consideración de que la innovación juega un papel central en esa dinámica. Su aportación central, como veremos con algo más de detenimiento más adelante, reside en su interés por abordar precisamente aquella cuestión que hasta ahora todos los modelos anteriores dejaban fuera o tocaban tangencialmente: las limitaciones de la oferta tecnológica y las relaciones entre la esfera productiva y aquella generadora de ciencia y tecnología. No se trata de que el modelo niegue la relevancia de las condiciones de mercado, en tanto que la competencia interempresarial y las expectativas de beneficio ocupan un papel central en el proceso de innovación, tal como lo conciben estos modelos. La novedad consiste en que el modelo considera que la estrategia innovadora de la empresa no se puede dar independientemente de las condiciones que afectan a la generación de tecnología y de nuevos avances tecnológicos y científicos, sino que están muy conectadas entre sí, y que dicha conexión debe ser analizada. El marco de análisis en el que se apoya este enfoque es el de la economía industrial, en tanto que el interés es conocer la dinámica del mismo, las particularidades de su desarrollo tecnológico y las ligazones entre estas particularidades y aquella dinámica. La justificación de tomar este marco de análisis es que cada sector -mejor incluso cuanto más desagregadoresponde a unas determinadas pautas tecnológicas y, por tanto, a unos rasgos específicos en relación con lo que aquí nos preocupa que es el análisis del cambio tecnológico. Metodológicamente es un planteamiento, de entrada, muy diferente a los vistos hasta ahora. No se parte de un modelo abstracto que debe permitir explicar el fenómeno analizado, sino que plantea el orientarse directamente a aprehender las contradicciones concretas con que se encuentra el fenómeno objeto de estudio. El objetivo será extraer conclusiones generales, pero a partir del estudio de las contradicciones particulares con que se encuentra el fenómeno que se desea analizar. Tampoco se trata de modelos macroeconómicos; tanto el ámbito territorial como sectorial suelen estar claramente delimitados. Una vez aclarados los objetivos del modelo y la metodología con la que lo abordan, veamos qué es lo que el modelo plantea y cuáles son las principales líneas de investigación que se derivan. a) Ligazón dinámica industrial - dinámica tecnológica: Gran parte de los investigadores que se encuentran dentro de este enfoque plantean la existencia de una relación entre las diferentes etapas por las que pasa la vida de una rama industrial y las etapas por las que pasa la vida de una determinada tecnología. 24 De esta manera se pone en evidencia que la fase de nacimiento y crecimiento de un sector industrial suele estar asociada al descubrimiento de una o múltilples innovaciones radicales (aquéllas que representan un salto cualtitativo en el estado del conocimiento, científico y/o técnico). Dichas innovaciones pueden ser más o menos constantes en esta primera etapa de crecimiento, y son las que proporcionan posiciones fuertes de competencia a las empresas que las detentan, garantizándoles amplios beneficios. Ahora bien, el estado de efervescencia tecnológico no dura siempre, y llega un momento (más pronto o más tarde, eso dependerá de las características de la industria y de la tecnología en cuestión) en que la mejora de la posición competitiva de las empresas se alcanza dominantemente a través de mejoras marginales en el proceso productivo o en el producto -innovaciones incrementales o secundarias-. Esto da lugar a una etapa del ciclo industrial en que el crecimiento del sector se va reduciendo, las expectativas de beneficio no son tan altas (han desaparecido las ventajas que otorgaban las innovaciones radicales) y dominan las prácticas depredatorias (mejorar la cuota de mercado eliminando o absorbiendo a competidores). De este planteamiento se derivan algunas líneas de investigación interesantes: . la consideración de que el proceso de innovación es continuo (Rosenberg, 1976). Es decir, las innovaciones radicales son las que presentan una clara discontinuidad, pero no así las secundarias. Lo que lleva a pensar que gran parte de la literatura económica sobre el tema de la innovación se ha concentrado en un tipo de innovaciones como las radicales, muy significativas en el aspecto técnico y económico y claramente dispersas en el tiempo, mientras que han dejado de lado el análisis de las innovaciones secundarias, las cuales si bien no representan grandes rupturas técnicas sí son económicamente muy importantes (pueden comportar fuertes disminuciones en los costes de producción) y presentan un perfil continuo, es decir, se dan permanentemente en el seno de la industria. . y la concepción de "empuje tecnológico" (technology push) que tanta disputa levantó en relación a los planteamientos de "tirón de la demanda" (demand pull), encabezados por Schmookler. Dicha disputa obedecía a la ya comentada cuestión de si el proceso innovador es una respuesta automática a las condiciones del mercado o responde dominantemente a la generación de nuevos descubrimientos que permiten desarrollar, a su vez, nuevas técnicas19. Este enfoque plantea que el impulso de la innovación viene determinado por la expectativa de beneficios pero que la base material., la condición necesaria para que pueda darse una innovación radical y gran parte de las secundarias responde al estado en que se encuentre el conocimiento científico y técnico. b) Las relaciones Ciencia - Tecnología - Producción: Este enfoque tiene como uno de sus objetivos principales analizar cuál es el entorno más adecuado para promover la generación de tecnología. Se trata de, a través del estudio de casos concretos, profundizar en las relaciones que mantienen la esfera de lo científico con la 19Autores como C.Freeman responden que no se trata de que exista una sóla línea causal, ambas actúan en el proceso innovador. La cuestión es que el empuje tecnológico parece jugar un papel primordial en la generación de innovaciones radicales mientras que el tirón de la demanda juega un papel determinante en la generación de innovaciones secundarias.(ver, para un desarrollo detallado de este planteamiento aplicado al caso de la industria química, V.Walsh, 1984). 27 de lo tecnológico y, a su vez, estas dos con la esfera de la producción. Este tipo de planteamientos abre campos de investigación muy diversos: . qué diseño institucional es el más apropiado para una rama industrial en particular, teniendo en cuenta que cada rama tiene una necesidad específica de investigación básica, aplicada y desarrollo técnico ligado a su proceso de producción. . qué factores hacen que una región determinada pueda fomentar el desarrollo tecnológico autóctono frente a una situación de retraso tecnológico; problemática ligada a países de desarrollo medio o subdesarrollados. Existe un área de investigación en ascenso, la relacionada con el sistema nacional de innovación (SNI20), preocupada de esta cuestión. c) la trayectoria tecnológica: Desde el punto de vista del desarrollo teórico de este enfoque, varios investigadores han propuesto conceptos generales, con el fin de darle un carácter más sólido al planteamiento que presenta este enfoque. Autores como G.Dosi o C.Freeman, si bien no emplean exactamente la misma terminología sí plantean conceptos similares, uno bajo el nombre de Paradigma Tecnológico y otro bajo el nombre de Nuevo Sistema Tecnológico. Estos investigadores constatan la existencia de grandes rupturas tecnológicas que dan lugar al nacimiento de nuevas áreas tecnológicas y al nacimiento de nuevas ramas industriales. Dichas rupturas tienen lugar de manera muy irregular a lo largo del tiempo, se nutren de lo que antes definimos como innovaciones radicales y suelen presentar conexión entre sí (esto es, el desarrollo de una tecnología en una rama industrial determinada puede presentar conexiones con el desarrollo tecnológico en otra rama industrial completamente distinta, de manera que el desarrollo en una de las tecnologías alimenta el desarrollo de la otra; por este motivo el calificativo de sistema tecnológico). Ahora bien, en el momento en que esta ruptura acontece, presenta características científicas y técnicas propias tan sumamente distintas de las observadas con anterioridad y un radio de influencia tan extenso (gran número de industrias afectadas) que lleva a que estos autores hablen de un nuevo sistema tecnológico y/o de un nuevo paradigma tecnológico. La Trayectoria Tecnológica es la senda, evolución propia de cada sistema tecnológico, es decir, las etapas por las que pasan las tecnologías nacidas en el seno de un Paradigma Tecnológico. Por consiguiente, no cabe la menor duda que este enfoque nos sumerge inevitablemente en el análisis de las condiciones de la oferta tecnológica, de los determinantes de la oferta tecnológica. Esta es su principal característica, en cuanto a los objetivos de investigación se refiere, pues se enfrenta radicalmente a abordar una serie de cuestiones que los otros modelos dejaban irresueltas. Valoración del enfoque de la Trayectoria Tecnológica: a) Tanto en su objetivo, en la medida en que el modelo nace para abordar los determinantes del cambio tecnológico, como sobre todo por su metodología, dada la exigencia del modelo por aprehender el proceso de manos de la expreriencia práctica en una rama industrial, el 20Me parece interesante destacar la similitud que existe en la concepción, no así en la metodología empleada, de un sistema nacional de innovación que tienen autores tan diversos como aquéllos que se encuentran dentro del enfoque de la Trayectoria Tecnológica (Lundvall, Dosi) y otros como M.Porter, cuando éste plantea la existencia de ventaja competitiva a nivel de país. 26 enfoque resulta muy bien dotado para analizar el proceso de cambio tecnológico y sus determinantes. Creo que es muy importante el enfatizar la cuestión de la metodología, en la medida en que cualquier generalización a la que se llegue -y deberá ser imprescindible que se llegue a alguna- deberá nutrirse de la plena comprensión de la dinámica del proceso que estudia. Por eso considero muy interesante abordar el estudio tomando como marco de análisis el sector industrial y analizar cómo se da en él el proceso de cambio tecnológico. b) Por otra parte, y en relación con el punto anterior, el enfoque puede ser de gran utilidad para el diseño de políticas económicas en el área tecnológica, ya sea para alentar la competencia estratégica de las empresas, para dotar a una determinada región de las instituciones apropiadas, o para superar situaciones de dependencia tecnológica apoyándose en la experiencia de otras regiones. c) La crítica principal que debe hacerse a estos enfoques es la de la tendencia a caer en un fuerte determinismo tecnológico. Es decir, el enfoque, en algunos trabajos particulares21, lleva a plantear que la evolución de la tecnología determina la evolución del conjunto de la economía, en una percepción que parecería erigir el cambio tecnológico en la causa, el determinante de todos los movimientos de la economía, como si el propio cambio tecnológico no fuera a su vez un elemento afectado e incluso determinado por la dinámica social. 8. El enfoque de N.Rosenberg: el cambio técnico como proceso continuo: Rosenberg, a lo largo de toda su obra, plantea analizar el proceso de cambio tecnológico y sus determinantes. El autor desarrolla su enfoque en respuesta a todas aquellas cuestiones que la teoría económica dominante deja irresueltas. En su enfoque hay tres elementos que me parecen muy relevantes: la concepción de que el cambio tecnológico es un proceso continuo frente a la concepción schumpeteriana de la destrucción creadora, el poner de manifiesto la relevancia de los determinantes por el lado de la oferta tecnológica frente a lo que hemos denominado el paradigma de la selección tecnológica (dominante en toda la teoría económica neoclásica) y, por último, el análisis del proceso de innovación desde un perspectiva multidisciplinar, su interés por subrayar la importancia del análisis histórico frente a esquemas ahistóricos. Vamos a ver estos puntos con un poco más de detenimiento. a) En relación a la primera cuestión, Rosenberg señala que la innovación no es un fenómeno que se produzca en ciclos o de manera irregular, sino que tiene lugar de manera permanente en el seno de las empresas por exigencia de la competencia a la que se enfrentan y, por tanto, que es una actividad que se presenta de manera continua en la dinámica de los sectores industriales. Rosenberg pone mucho énfasis en la relevancia económica que tienen aquellas innovaciones que son fruto de la mejor y progresiva adaptación al nuevo proceso por parte de los trabajadores, y que si bien pueden carecer de gran relevancia desde un punto de vista 21C.Freeman (1982) destaca la posible relación entre evolución de tecnología y ondas largas. 29 tecnológico tales innovaciones son, sin embargo, de extraordinaria importancia desde un punto de vista económico. Entre otros, el concepto de learning by using será fruto de esta concepción. Por supuesto, esto choca con la idea de la innovación como un proceso extraordinario, que tiene lugar tras períodos de fuerte sequía innovadora. Esta última concepción, en definitiva, parecería estar ligada a la idea de innovación como innovación radical, es decir, como si la innovación necesariamente representara una ruptura trascendente de las disponibilidades u oportunidades tecnológicas y, por consiguiente, su impacto fuera grande tanto desde un punto de vista económico como científico. Sin embargo, como se ocupará de repetir Rosenberg, éstas no son el único tipo de innovaciones existentes, en número son una clara minoría, pero además deben ir acompañadas de mejoras muy sustanciales para que puedan alcanzar su plena efectividad técnica. b) Rosenberg destaca que la economía no es un mecanismo que reaccione pasivamente a las necesidades tecnológicas que van apareciendo sino que: . existen limitaciones por el lado de la oferta de tecnología . las empresas tienen estrategias explícitas en relación a la tecnología. Como el propio autor señala, hubiera sido imposible curar una serie de enfermedades en la edad media, pese a que la necesidad de una solución médica existía, dado lo limitado del desarrollo del conocimiento fisiológico y farmacológico en ese entonces. Por consiguiente, no puede dejarse a un lado el avance del conocimiento científico para comprender los éxitos alcanzados en numerosas áreas, y atender sólo a la existencia de una demanda que ansiaba ser satisfecha. Destacar la necesidad de tener en cuenta el lado de la oferta tecnológica lleva a la cuestión de implementar el entorno adecuado para que dicha oferta tecnológica sea efectiva y amplia, como se planteaba también por parte del enfoque analizado antes. Por otro lado, debe asumirse que las empresas tienen estrategias tecnológicas propias y, por tanto, distan mucho de poder ser consideradas como agentes pasivos en el ámbito tecnológico (como lo indica el volúmen de gasto en I+D que presentan las empresas en cualquiera de los sectores productivos estudiados por el autor)22. Por otro lado, Rosenberg destaca la relevancia que tienen los condicionantes por el lado de la oferta de tecnología: En este sentido toma en consideración tres elementos: .los cuellos de botella tecnológicos. .el learning by using. .la ciencia como un elemento endógeno. En relación al primero, el autor plantea que en el momento que tiene lugar una innovación, ésta puede comportar la necesidad de avances en otros terrenos, en la medida que pueda necesitar instrumentos de mayor precisión (nuevas demandas al sector de bienes de equipo), o nuevos matieriales más duros, resistentes, flexibles, lo cual comportará también el desarrollo de posteriores innovaciones en áreas económicas diferentes a aquella en donde efectivamente se produjo la innovación. En otras palabras, cuando acontece una innovación, 22Este punto no es directamente tratado por el autor aunque sí recorre claramente todos sus trabajos. Autores como C.Freeman analizan con mayor profundidad la cuestión de las estrategias tecnológicas de las empresas (ver C.Freeman, 1974). 28 su correcta puesta en marcha puede hallarse frenada por la existencia de cuellos de botella tecnológicos, en la medida que se exijan ulteriores innovaciones para alcanzar la plena potencialidad de la innovación. Y este empuje tecnológico que trae consigo la nueva innovación -esto es lo que enfatiza el autor- no nos remite a las necesidades últimas del mercado sino a las necesidades propias del sistema tecnológico en que esta innovación se inserta. Por consiguiente, esta cuestión nos conduce a tomar en consideración las propias limitaciones por el lado de la tecnología, y cómo es a partir del objetivo de superar dichas limitaciones que encontramos ulteriores desarrollos tecnológicos. El concepto de learning by using lo sugiere Rosenberg (1982) para abordar la cuestión de que en numerosas ocasiones son los empleadores de una determinada tecnología quienes mejor capacitados pueden estar para introducir mejoras en la tecnología empleada. Frente al concepto de learning by doing, en que los productores a base de repetir el proceso ganan eficiencia en la ejecución del mismo, ahora se trata de que los que ejecutan un proceso sugieren modificaciones sustanciales hacia atrás, es decir, en referencia a los que les proporcionana los medios de producción, señalando cómo pueden perfeccionarse éstos en orden a ganar eficiencia en la ejecución. De nuevo, se destacan aquí dos elementos cruciales en el planteamiento de Rosenberg: la continuidad del proceso de innovación y la relevancia de los elementos de la oferta tecnológica. La continuidad, en tanto que este proceso de learning by using se lleva a cabo de manera permanente en cualquier proceso productivo -no se trata de plantear una innovación radical sino que este proceso está conectado con el fenómeno de las innovaciones secundarias- siendo los empleadores de una determinada tecnología los que, mediante el empleo continuado de la misma, mejor capacitados están para conocer qué mejoras podrían introducirse en la misma de manera que mejorasen su capacidad de ejecución. Y, como señalabamos antes, de nuevo el autor pone énfasis en el estudio de los condicionantes de la oferta tecnológica, de cuáles son los mecanismos por los que se rige la oferta de tecnología sin caer en el determinismo simplificador de que la innovación responde a la demanda. En cuanto al objetivo de la endogeneización de la ciencia, el autor plantea la necesidad de tener en cuenta el fenómeno de que cada vez son más las empresas que tienen sus propios laboratorios, en donde se desarrolla no sólo actividades de investigación aplicada y desarrollo sino también de investigación básica. No se trata de plantear que toda la actividad científica responda a las estrategias tecnológicas de las empresas, sino que se trata de profundizar la manera en que se conectan estas dos esferas, destacando obviamente las notables diferencias que pueden existir de un sector productivo a otro. c) Por último, Rosenberg quiere analizar el proceso de cambio tecnológico en sí mismo, las etapas por las que pasa este proceso. El autor plantea que el proceso de innovación lejos de ser un fenómeno sencillo o depender únicamente de una decisión (como parecerían señalar algunos enfoques económicos en donde toda la cuestión se reduce a si la empresa decide si innova o no) está sujeto a una serie de etapas cada una de las cuales observa características y obstáculos propios. El proceso se compone de tres etapas: la etapa de invención, la de innovación y la de difusión. En la etapa de invención tiene lugar el descubrimiento del principio básico. Ahora bien, su descubrimiento no comporta necesariamente que puedan ser superados los 28 problemas de carácter técnico que permiten un primer empleo práctico del invento. Cuando están superados todos los problemas técnicos, es decir, se alcanza la viabilidad técnica, llegamos a lo que denominamos una innovación. Con la innovación tenemos la primera ejecución práctica basada en el principio básico del invento. Sin embargo tampoco ahora están resueltos todos los problemas, puesto que muy frecuentemente dicha innovación no es lo suficientemente precisa como para resultar superior a los productos o procesos que existían con anterioridad y con los que la innovación compite (ya sea porque todavía resulte demasiado caro de fabricar o porque aún no haya alcanzado una sencillez de ejecución suficiente como para resultar más práctica que otras técnicas alternativas). Entramos así en la etapa de difusión, que es aquella en que la innovación debe demostrar si es o no superior a las técnicas o productos alternativos. Es en esta etapa donde la innovación, si tiene éxito, alcanza lo que se conoce como superioridad económica respecto a productos o procesos alternativos. O en otras palabras, es la difusión de la innovación lo que permite demostrar que ésta es superior económicamente, pues significa que ha desplazado a sus competidoras (Ver. Fig. 7). Valoración del enfoque de N.Rosenberg: En relación a la metodología de Rosenberg deben apuntarse algunas cosas que ya se dijeron cuando se trató el enfoque de la Trayectoria Tecnológica. El área de trabajo es, generalmente, un sector industrial, y es a partir del conocimiento de cómo funcionan los procesos que el autor desea estudiar cuando extrae conclusiones, ya sea la cuestión de la difusión, de los cuellos de botella, del learning by doing o de los diferentes desempeños 23 regionales . Rosenberg, por otro lado, siempre recalca en sus trabajos la necesidad de un tratamiento interdisciplinar, él mismo se autocalifica de ser un historiador económico. En cualquier caso su apelación a la historia, para comprender mejor la esencia de los procesos económicos (no sólo en relación al cambio tecnológico) es un elemento esencial en todos sus trabajos de campo. Frente a otros enfoques, Rosenberg no establece un modelo cerrado con que abordar el proceso de cambio tecnológico sino que hace más bien una apelación al estudio de cada caso en particular. En las relaciones ciencia-tecnología, en la explicación de cómo se explican desarrollos de nuevas ramas industriales y en la relación desarrollo regional-grado de independencia tecnológica, se abren tres posibles áreas en que los planteamientos de Rosenberg sientan las bases para análisis posteriores. También se abre un campo muy amplio para el diseño de políticas económicas tanto a nivel de un sector industrial como al nivel de región, en particular cuando plantea que las tecnologías que desarrolle una región deben estar íntimamente ligadas a las necesidades particulares de la región para que puedan 23 En este sentido me parece útil remarcar el artículo de Z.Grilliches (1961) en que a partir de un trabajo empírico meticuloso se analizan las causas de que una determinada innovación -las semillas híbridas- se hubieran difundido más en su empleo en las regiones del norte que en las del sur de USA.El trabajo me parece un ejemplo de este tipo de metodología preocupada por analizar la esencia del proceso y no de diseñar un modelo económico sin mayor atención al proceso concreto. 30 ser adoptadas y desarrolladas por la propia región (Rosenberg,1971). 3. Conclusiones: Creo que es necesario avanzar todavía mucho en relación a la metodología con que abordar el análisis del cambio tecnológico. En cualquier caso, me parece que se vaya por donde se vaya, debe hacerse indicando claramente las limitaciones y virtudes del enfoque elegido. Mi objetivo fundamental era señalar porqué considero que una serie de metodologías son poco capaces de captar la esencia del proceso, los elementos que determinan la existencia de cambio tecnológico y la manera en que este proceso se manifiesta. La manera de abordar un fenómeno social tiene que ser desde las ciencias sociales. Ahora se tratará de ver a qué nos referimos cuando hablamos de éstas, pero en cualquier caso dista mucho de quedar limitada a cualquiera de los enfoques dominantes de la actual teoría económica. Considero que el estudio del cambio tecnológico debería contener, por un lado, un análisis empírico dirigido a señalar las características concretas del proceso (tomando como referencia la manera en que se concretan en el seno de un sector industrial particular, por ejemplo) y, por otro lado, un análisis teórico orientado a desentrañar cuáles son los determinantes estructurales, las fuerzas que dirigen y determinan dicho proceso (respondiendo muy probablemente, estos determinantes, a un conjunto amplio de interrelaciones 24 socioeconómicas y a factores de carácter histórico) . En este sentido, es de gran interés la metodología de autores como M.Porter (1990), que sitúan el sector industrial como undidad básica de análisis, al tiempo que destacan la importancia de los factores de carácter nacional por su incidencia en el desempeño de la capacidad innovadora en el seno de un determinado sector. Su enfoque lleva a situar el proceso de innovación en el centro del análisis, pese a que su objetivo primero fuera la comprensión de la dinámica sectorial y en particular de los determinantes de la competitividad. 24 Autores, procedentes de escuelas muy distintas, como B.Lundvall (1988), M.Porter (1990) o D.North (1990) se_alan la importancia de tener en cuenta los factores de orden institucional o estructurales, que en un caso se denominar_n como "user -producer interaction", en otro como diamante nacional o sencillamente instituciones, pero que expresan siempre la necesidad de llevar a cabo un an_lisis amplio de los determinantes del cambio tecn_l_gico. 30 Si el proceso de innovación emerge como una pieza esencial del proceso es por la presencia 25 de una profunda interrelación entre la innovación y los cuatro determinantes con los que Porter define el "diamante nacional": la generación de innovación altera y mejora las condiciones del diamante, mientras que el buen funcionamiento en las conexiones del diamante impulsa, a su vez, el proceso innovador. El estudio de casos concretos permite dilucidar cuál es la fuerza que tira del proceso o lo retrasa, exigiendo por tanto una familiarización con los rasgos propios de la dinámica del sector que se analice. Se hace imprescindible, además, el contemplar el proceso desde una perspecitva histórica en tanto que lo que se estudia es un fenómeno dinámico, que varía a lo largo del tiempo, y que no puede comprenderse desde una perspectiva estática o de corto plazo. Por otra parte, los estudios realizados en torno al cambio tecnológico omiten el tratamiento de cuestiones tan relevantes como la dependencia tecnológica y el papel de las empresas transnacionales, y la conexión de estos dos elementos con la cuestión del desarrollo regional y la difusión de la tecnología En este campo hay abiertas líneas de trabajo muy interesantes y considero que poco explotadas aún. Bibliografía. 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Green, J., Scotchmer,S (1995): "On the division of profit in sequential innovation", Rand Journal of Economics, Vol.26, nº1,1995, pp. 20-33. 25 Los cuatro determinantes son: la condición de los factores productivos, las características de la demanda, los rasgos de los sectores conexos y proveedores, y las condiciones de la rivalidad empresarial dentro del sector estudiado. 32 Griliches,Z. (1960): "Hybrid corn and the economics of innovation", Science, 1960, pp.275-280. Contenido en Rosenberg (1971): The economics of technical change, Pinguin Books Ltd. Lundvall, B.A. (1988): " Innovation as an interactive process: from user-producer interaction to the national system of innovation", contenido en Dosi et al.: Technical Change and Economic Theory, Pinter Publishers, London, 1988. Mansfield,E.(1961): "Technical change and the rate of imitation", Econometrica, 1961, pp.741766. Contenido en Rosenberg (1971): The economics of technical change, Pinguin Books Ltd. Nelson,R. 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Por ejemplo, la cuestión de la dependencia tecnológica, y su conexión con dos cuestiones: el desarrollo económico de las regiones tecnológicamente dependientes, y el papel que en esa dependencia juegan las 34 estrategias de las empresas multinacionales. 2. mi interés es analizar la situación de un sector industrial (industria química) en un país (España) destacando la posible dependencia tecnológica en la que se puede encontrar debido a las estrategias de las multinacionales, y en qué situación al coloca ese hecho, tanto a nivel de competitividad como de flujos comerciales como de inversión y empleo. Y, en función de todo eso, qué alternativa de política económica se podría sugerir, apoyándome en la concepción del National System of Innovation. 34