periodontitis | rx Periodontitis Infección latente Una correcta higiene bucal y visitas periódicas al especialista son fundamentales para controlar y detener esta patología dental, que también puede comprometer la salud de diversos órganos del cuerpo / Silvia Martins Principal causa de pérdida de dientes en el mundo, Enfermedad paulatina la periodontitis es una infección crónica que afecta las encías, los ligamentos periodontales (fibras que median entre el diente y el hueso) y el hueso alveolar (estructura ósea de la cavidad bucal que ofrece soporte al diente). Sin tratamiento, la periodontitis puede ocasionar daños aun mayores: las bacterias y algunos agentes inflamatorios podrían trasladarse a otros órganos del cuerpo a través del torrente sanguíneo y causar serias complicaciones. Estudios científicos demuestran que padecer periodontitis aumenta las probabilidades de presentar infecciones cardíacas y respiratorias, tener bebés con bajo peso al nacer e, incluso, desarrollar un tipo de cáncer de piel localizado en la cara y el cuello (carcinoma de células escamosas). En pacientes diabéticos, también se ha asociado con la gravedad de sus cuadros clínicos. De lento desarrollo, la periodontitis puede pasar inadvertida durante años y develarse cuando ha avanzando tanto que los dientes afectados quedan sin soporte y se desprenden. En principio, la acumulación de placa bacteriana (una película blanda, formada por restos de alimentos, saliva y microorganismos), puede dar origen a una gingivitis: las encías se irritan, se inflaman y sangran con el cepillado. Ante estos síntomas, el odontólogo puede remover los residuos y recuperar las encías mediante una limpieza profunda. Sin embargo, si la gingivitis es desatendida y continúa avanzando, la encía se separa del diente y comienzan a formarse los llamados sacos periodontales (espacios donde se acumula placa y proliferan bacterias). Así, la infección se propaga hacia el resto de los tejidos, deteriora los ligamen- 37+SALUD rx | periodontitis Aunque silente, la periodontitis puede presentar sangrado bucal, halitosis, inflamación, retraimiento de las encías y movilidad o separación espontánea de los dientes tos periodontales y ocasiona pérdida del hueso alveolar. En consecuencia, los dientes se aflojan y pueden desprenderse. También es posible que cambien de posición y se formen abscesos. Algunas manifestaciones clínicas advierten sobre la necesidad de acudir a la consulta con el especialista: sangrado bucal (a menos que el cepillado haya sido muy brusco), halitosis, inflamación, retraimiento o enrojecimiento de las encías y movilidad o separación espontánea de los dientes. Exploración profunda Si bien la periodontitis puede originarse por una deficiente higiene bucal, a la hora de realizar el diagnóstico se deben considerar otras variables: la Academia Americana de Periodontología señala que en su aparición pueden intervenir factores como predisposición genética, diabetes, consumo Higiene fundamental Si bien la periodontitis puede ser causada por múltiples factores, la higiene bucal –sumada a la consulta odontológica semestral– es indispensable para evitar su aparición, incluso si existen predisposición genética o enfermedades asociadas a su desarrollo. Los especialistas insisten en que todas las personas deben cepillarse los dientes después de cada comida y utilizar, al menos dos veces al día, hilo dental y enjuague bucal. Si se elige un enjuague específico para casos de periodontitis (con clorexidina, antiséptico que elimina las bacterias causantes de esa infección), debe emplearse media hora después del cepillado, porque los ingredientes de la pasta dental inhiben su acción. 38+SALUD de cigarrillos, estrés, enfermedades que afectan el sistema inmunitario (como el VIH), desajustes hormonales, desnutrición u obesidad, ciertos fármacos (como anticonceptivos orales y antidepresivos) y bruxismo (rechinamiento involuntario de los dientes durante el sueño). Para Juan Carlos Contreras, periodoncista del grupo odontológico Dental Works, para obtener un diagnóstico acertado es imprescindible realizar un examen clínico y pruebas radiológicas: “Antes de dar un pronóstico hay que tomar en cuenta todos los factores. Hay pacientes que, aunque tienen la enfermedad, no sangran porque son fumadores y tienen vasoconstricción periférica. Otros pueden presentar unos surcos gingivales muy profundos, pero tienen un mejor pronóstico porque la periodontitis no ha afectado la raíz del diente”. Con el examen clínico, el especialista estudia el color y la consistencia de las encías, y verifica si hay sangrado y movilidad dental. Luego, introduce un instrumento –conocido como sonda periodontal– entre la encía y el diente, para medir la profundidad de los sacos periodontales. Mediante las pruebas radiológicas, que comprenden las llamadas radiografías periapicales –técnica de exploración intrabucal que muestra los dientes de forma individual o en grupo–, se puede conocer la magnitud de la pérdida ósea. Compromiso mayor Estudios clínicos han demostrado que, debido a la inflamación sistémica que ocasiona, la periodontitis incrementa el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Además, las bacterias presentes en la boca pueden trasladarse al corazón a través del torrente sanguíneo y causar infecciones en las válvulas cardíacas. periodontitis | rx 50% de los venezolanos mayores de 35 años presenta periodontitis, según cifras de la Sociedad Venezolana de Periodontología José Benítez, cardiólogo del Instituto Médico La Floresta, advierte que los pacientes que requieran cirugías de reemplazo de válvula, deben primero subsanar sus afecciones bucales. De lo contrario, señala el especialista, corren el riesgo de contraer endocarditis, una infección bacteriana de la membrana interna del corazón que puede poner en riesgo la vida del paciente. La periodontitis también está asociada a la diabetes: considerada como una complicación de esta enfermedad metabólica, puede, a su vez, agravar el estado de los pacientes diabéticos. Investigaciones científicas demuestran que puede incrementar la resistencia a la insulina. En consecuencia, quienes tengan alteraciones de los niveles de azúcar en sangre deben tener especial cuidado para prevenir o controlar enfermedades periodontales. Bajo control La periodontitis es incurable, pero con un adecuado control odontológico se puede detener para impedir que se propague a los dientes sanos. Para los especialistas también es clave la modificación de los hábitos de higiene del paciente. Dependiendo de la pérdida ósea y del nivel de retraimiento de la encía, la afección puede ser leve, moderada o severa. De acuerdo con Julia Corser, periodoncista del Centro Médico de Caracas, si la periodontitis es leve o moderada, es posible salvar los dientes comprometidos, pero si el cuadro es severo, los dientes se mueven en varios sentidos y es muy difícil preservarlos. Frente a un diagnóstico de periodontitis, se debe someter al afectado a una limpieza profunda bajo anestesia local, mediante un procedimiento de raspado y alisado radicular: se introducen hasta la raíz del diente unos instrumentos filosos que, con la ayuda de aparatos de ultrasonido, remueven todo el cálculo (placa bacteriana solidificada) y los microorganismos adheridos. Con esa técnica, los dientes pueden recuperar su textura original y las fibras periodontales se unen nuevamente a los dientes. Si el paciente continúa sangrando después de ocho semanas, debe repetirse el proceso de limpieza para asegurarse de que se haya removido todo el cálculo. Si luego de esta segunda limpieza no se observa mejoría, significa que el daño es más profundo. En esos casos, se indica la intervención quirúrgica para mejorar el estado del hueso (a través de técnicas de tallado) o, si está muy deteriorado, para colocar un injerto. Corser advierte que el paciente debe someterse a cirugía –tallado o injerto– sólo cuando sea estrictamente necesario, “porque así como se remueve el cálculo, durante el procedimiento también se elimina el cemento radicular (tejido duro que rodea la parte externa de la raíz), y eso puede provocar mucha sensibilidad”. En algunos casos severos, cuando se detecta la presencia de abscesos, se pueden prescribir antibióticos –antes y después de la intervención– como coadyuvantes del tratamiento. • F u e n t e s c o n s u lta d a s º José Benítez, cardiólogo. Instituto Médico La Floresta. º Juan Carlos Contreras, odontólogo periodoncista. Grupo odontológico Dental Works (Caracas). º Julia Corser, odontólogo periodoncista. Centro Clínico Profesional Caracas. º Lorena Dávila y Susana Arteaga. La periodontitis y su relación con la diabetes mellitus. Reporte de caso y revisión. Revista de la Facultad de Medicina, Universidad de Los Andes. Vol. 17. Nº 1. º Academia Americana de Periodontología / American Association for Cancer Research / Sociedad Venezolana de Periodontología. 39+SALUD