TEXTO DE SANTO TOMÁS “Una proposición puede ser evidente de dos maneras: en sí misma, pero no con respecto a nosotros, o en sí misma y para nosotros. La causa de que una proposición sea evidente es porque el predicado está incluido en el concepto del sujeto: por ejemplo, “el hombre es animal”, pues “animal” entra en el concepto de hombre. Si, pues, todos conociesen la naturaleza del sujeto y la del atributo de una proposición cualquiera, esta sería evidente para todos, como lo son los primeros principios, cuyos términos, ser y no ser, todo y parte, y otros parecidos, son cosas tan sabidas que nadie las ignora. Pero su hay quienes ignoran cuál es la naturaleza del sujeto y la del predicado la proposición en sí misma será, sin duda evidente, pero no lo será para quienes ignoran aquellos extremos;… La proposición “Dios existe”, en sí misma es evidente, porque en ella el predicado se identifica con el sujeto, ya que (…) dios es su mismo se. Pero con respecto a nosotros, que desconocemos la naturaleza divina, no es evidente, sino que necesita ser demostrada…. TEMA: La necesidad de probar la existencia de Dios pues no es evidente para nosotros IDEAS - Una proposición puede ser evidente de dos maneras: En sí misma pero no para nosotros y en sí misma y para nosotros - La razón de que una proposición sea evidente en sí misma es que el concepto de predicado esté contenido en el concepto de sujeto, como ocurre con la proposición “El hombre es animal” - Que sea o no evidente para nosotros depende de que conozcamos los términos de la proposición: o Si siendo la proposición evidente en sí, conocemos sus términos, esa proposición es evidente para nosotros (como ocurre con los primeros principios) o Aunque una proposición sea evidente de suyo, no lo será para quien no conozca sus términos. - La proposición “Dios existe” es evidente en sí, pues en el concepto de Dios se incluye su existencia, ya que Dios es su ser, pero no es evidente para nosotros que no conocemos la esencia divina. - Por tanto, la existencia de Dios necesita ser demostrada RELACIONES El texto comienza estableciendo la distinción entre dos tipos de evidencia para una proposición: evidente en sí y evidente para nosotros. A continuación establece las causas de estos dos tipos de evidencia: - Lo que hace que una proposición sea evidente en sí es que el sujeto contenga el predicado - La condición de que una proposición evidente en sí lo sea para nosotros es que conozcamos los términos de la misma. Una vez establecidas las condiciones generales de la evidencia en sí y para nosotros de cualquier proposición, las aplica a la proposición “Dios existe” y establece que aunque es evidente en sí pues cumple la condición para ello: el sujeto “Dios” contiene el predicado “existencia”, pues Dios es su ser, sin embargo no es evidente para nosotros pues no conocemos la esencia de Dios, el sujeto de la proposición. Por lo que concluye que la existencia de Dios debe ser demostrada.