Cuadernos del Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano - Series Especiales Nº1 (2). AÑO 2013 ISSN 2362-1958 ARTE RUPESTRE EN MAESTRE DE CAMPO: ALGUNAS IMPLICACIONES ESPACIALES Elena Vallvé* RESUMEN El eje sobre el cual gira este trabajo tiene que ver con el análisis de las pinturas rupestres ubicadas en el tramo medio del arroyo Maestre de Campo, Durazno, Uruguay, desde una perspectiva espacial poniendo especial énfasis en las condiciones de visualización. En este sentido, se exploran las nociones de visibilidad, visibilización e intervisibilidad. Se discuten las particularidades de los emplazamientos de los sitios con pinturas rupestres, su relación entre ellos, con otras evidencias de ocupación y con ciertos elementos del paisaje. Se propone que una posible función de las representaciones rupestres de Maestre de Campo tendría que ver con una forma de organizar el paisaje ayudando a recordar y a orientarse en el mismo. Para ello se parte de la base de que la distribución del arte rupestre en el espacio tiene que ver con el intercambio y circulación de información e ideas. SUMÁRIO Este trabalho trata da análise de pinturas rupestres encontradas no trecho médio do córrego Maestre de Campo, Durazno, Uruguai, a partir de uma perspectiva espacial com ênfase em condições de visualização. Neste sentido, vamos explorar as noções de visibilidade, visibilidade e intervisibilidade. Discutimos as características dos locais de sítios de arte rupestre, a relação entre eles, com outras provas de ocupação e com certos elementos da paisagem. Propõe-se que um possível papel da arte rupestre do Maestre de Campo têm a ver com uma forma de organizar a paisagem e ajuda a lembrar e a navegar na paisagem. Isto é feito na base de que a distribuição de arte rupestre no espaço tem a ver com a troca eo fluxo de informações e idéias. SUMMARY This paper deals with the analysis of the rock paintings located in the middle stretch of the Maestre de Campo stream, Durazno, Uruguay, from a spatial perspective with an emphasis on viewing conditions. Regarding this, the notions of visibility, visualization and intervisibility are explored. We discuss the characteristics of rock art sites, the relationship between them and with other evidence of occupation and with certain elements of the landscape. It is proposed that a possible role of the rock art in Maestre de Campo has to do with a way to organise the landscape helping prehistoric people to remember and to orientate themselves. This is proposed on the basis that the distribution of rock art in the space is connected with the exchange and flow of information and ideas. INTRODUCCIÓN El paisaje puede entenderse como la conjunción de la dimensión física del medio natural y de la dimensión simbólica del paisaje humano (Acuto 1999; García Sanjuán 2005). Es el resultado de la concepción espacial específica que cada sociedad posee del medio, por lo que debe ser entendido como una categoría cultural y no como un mero escenario de la actividad humana (Villoch 1995). Por consiguiente, la definición de paisaje *Investigadora Asociada Museo Nacional de Antropología. evegerou@gmail.com CUADERNOS - SERIES ESPECIALES 1 (2) involucra mucho más que el medio físico ya que al interactuar en él los grupos humanos lo llenan de significado. La estrecha relación entre arte rupestre y paisaje se vincula primeramente con la elección del sitio y del soporte sobre el cual se ejecutará un diseño que transformará ese paisaje natural en un hecho cultural. Podrán incidir en su emplazamiento factores vinculados al rol que jugaba el área donde se localizan las representaciones dentro de la economía, las necesidades sociales y rituales y la movilidad del grupo que realizó los diseños. Asimismo un mismo paisaje en un determinado momento, puede presentar más de un significado. Por lo tanto, un individuo puede estar capacitado y/o autorizado para participar de ciertas prácticas sociales vinculadas con uno o más de los significados de ese espacio (Acuto 1999). Tomando en cuenta lo anterior, este trabajo se centra en el análisis de las pinturas rupestres ubicadas en el tramo medio del arroyo Maestre de Campo desde una perspectiva espacial poniendo especial énfasis en las condiciones de visualización donde entran en juego las nociones de visibilidad -como se ve desde el sitio o el panorama que se domina-, visibilización -como es visto el sitio- e intervisibilidad -relación visual entre ese elemento y otro/s, sean o no arqueológicos- (Criado 1999). Mediante esta estrategia se propone un acercamiento a la dinámica social, entendiendo que ésta puede implicar diferentes procesos de interacción inter e intragrupal. predomina es la de pradera; a ambas márgenes del arroyo se extiende un cordón espeso de árboles y arbustos que conforman el monte en galería. Toda el área corresponde a un valle cuyos límites son las cuchillas Del Carmen y de la Mariscala ubicadas al NW y SE respectivamente. Las numerosas cañadas que bañan el lugar, las praderas naturales y los montes en galería generan un ecosistema rico que alberga gran cantidad recursos vegetales y de especies de aves y peces y numerosos mamíferos. Figura 1. Maestre de Campo, departamento de Durazno, Uruguay. ANTECEDENTES La primera noticia que se tiene de las pinturas de Maestre de Campo corresponde al Dr. Larrauri quien en 1919 identificó varias de ellas e hizo unas breves descripciones de las mismas. En la década de 1950 algunos investigadores como de Freitas y Figueira (1953) y Schuster (1955) hicieron breves referencias a estas pinturas dedicando algunas líneas a la descripción de los paneles y arriesgando algunas hipótesis vinculadas a las técnicas de ejecución, a la interpretación de su simbolismo y a su vinculación con determinadas etnias históricas. Hacia mediados de la década de 1980 Consens (1985) propone un modelo cronológico del arte rupestre para Uruguay y la ÁREA DE ESTUDIO La localidad de Maestre de Campo se ubica al sur del departamento de Durazno, en el centro sur del Uruguay (figura 1). Las pinturas se localizan a una y otra margen del curso medio del arroyo Maestre de Campo, tributario del río Yí. Este arroyo, cuyo flujo corre con dirección noreste-suroeste, es alimentado por infinidad de pequeñas cañadas en su mayoría de carácter intermitente. El área se caracteriza por la presencia de afloramientos rocosos de origen ígneo y metamórfico concentrados sobre todo en el tramo medio del curso. El relieve es ondulado con pendientes suaves a fuertes y la vegetación que 24 ARTE RUPESTRE EN MAESTRE DE CAMPO: ALGUNAS... existencia de cuatro estilos: Chamangá I, Chamagá II, Pan de Azúcar y Maestre de Campo. Define a este último como de “características geométricas combinadas. Está determinado además por líneas zig-zags, por escaleriformes, grecas, pectiformes y cruciformes. La técnica de pintura incluye tanto en trazo digital como el pincel fino. Lo acompaña el grabado fino ornamental. Color único: rojo. Período: del 200 al 800 DC” (Consens 1985: 66). Sin embargo la localidad de Maestre de Campo, como la mayoría del arte rupestre del Uruguay, no ha sido investigada de forma exhaustiva, por consiguiente el objetivo de este trabajo fue generar cierta información que permitiera un primer acercamiento al área y a su arte rupestre. de cruciformes, de cruciformes aislados, de zigzag paralelos, de trazos escalonados oblicuos y enfrentados, de enmarcados con segmentación interna formando romboides, líneas oblicuas paralelas y triángulos rellenos (figura 3). También se registraron figuras cerradas irregulares con subdivisiones internas (figura 4) y varios ovaloides arracimados (figura 5), además de otros motivos indeterminados. Algunas de estas recurrencias morfológicas como los cruciformes aislados y alineados y los LAS PINTURAS DE MAESTRE DE CAMPO El total de paneles asciende a 10, siendo 6 ya conocidos y publicados y 4 los relevados por primera vez durante las tareas de prospección. Todas las pinturas fueron ejecutadas en tonalidades de rojo. En cuanto a los grosores del trazo, varían entre 19 mm y 4 mm, por lo tanto es probable que además de trazos digitales algunos diseños se hayan realizado mediante el uso de algún tipo de pincel. Todos los diseños ejecutados, a excepción de un panel que podría tener un aspecto pseudo antropomórfico (figura 2), son abstractos. Se trata de alineaciones horizontales y verticales Figura 3. Cruciformes, enmarcados con segmentación interna formando romboides, líneas oblicuas paralelas y triángulos rellenos. Dibujo a mano alzada sin escala. zigzag, se repiten en otros sitios rupestres del Uruguay como en Chamangá y arroyo Porongos (departamento de Flores) y Cerro Pan de Azúcar (departamento de Maldonado). Otro aspecto de las representaciones registradas en Maestre de Campo que merece destacarse es la presencia de grabado fino. Se trata de un panel de grandes dimensiones (1, 88 m de largo) en el cual se distinguen varios diseños pintados: por lo menos 9 zigzag paralelos y de desarrollo vertical, varios ovaloides arracimados, entre otros motivos. Cubriendo una superficie Figura 2. YIMC-4. Posible figura antropomorfa. 25 CUADERNOS - SERIES ESPECIALES 1 (2) bastante menor, hacia la izquierda del panel, se encuentra el grabado fino realizado con un instrumento cortante. El grabado está compuesto por líneas horizontales paralelas y otras oblicuas formando un diseño complejo (figura 6). Consens (1985) incluye la técnica de grabado fino en el estilo que denomina “Maestre de Campo” confiriéndole características ornamentales. También incluye al grabado fino dentro de lo que él llama estilo “Chamangá I” pero sostiene que éste tiene características destructivas. Para nuestro caso, consideramos que sólo mediante un análisis más exhaustivo del panel y mayor investigación en la zona se podrá realizar algún tipo de inferencia en cuanto a su cronología relativa (por superposición) y a su función destructiva o no. Figura 5. Ovaloides arracimados. en la zona de la Laguna Negra en Rocha, registran la presencia de gramíneas a partir de 3800AP. Para Maestre de Campo con la información que actualmente se posee no es posible determinar las características paleoambientales al momento de la ejecución y uso de las pinturas rupestres, sí es interesante el hecho de que la vegetación de pradera haya formado parte del paisaje. Debido a que uno de los objetivos de este trabajo tiene que ver con las condiciones de visualización, es necesario tener en cuenta el tipo de vegetación y la obstaculización que la misma podría haber generado sobre la visibilización de los sitios. La pradera, tal cual se la conoce hoy en día, es fruto del pastoreo intensivo al que fue sometida tras la introducción de la ganadería por los españoles. Tanto los datos provenientes de las fuentes históricas (ver Azara 1850; Hudson 1892; Lope de Souza 1532; entre otros) como los obtenidos a través de estudios florísiticos actuales (ver Altesor 2002; Panario y May 1994; entre otros) coinciden en que, al menos para el momento de contacto, habría existido una pradera más tupida y con mayor riqueza en cuanto a la variedad de especies y subespecies presentes y poblada de gramíneas cuyo porte era bastante más alto que el actual. Figura 4. Figura cerrada con subdivisiones internas. Dibujo a mano alzada sin escala. CRONOLOGÍA Y PALEOAMBIENTE Hasta el momento no se dispone de dataciones relativas o absolutas confiables para la localidad de Maestre de Campo. Sin embargo, y de acuerdo a los datos que se manejan para el resto del Uruguay, especialmente el litoral y la costa Atlántica, el centro del país no habría sido habitado y/o explotado, al menos activamente, por los grupos humanos hasta el Holoceno Medio. Se podría entonces definir una escala temporal de “cuenta larga” (sensu Borrero et al. 1992) que es el máximo temporal teóricamente esperable, que se remontase a este momento. En cuanto al paleoambiente, de acuerdo a autores como Behling (2006), la vegetación de pradera ya estaba presente durante el Holoceno Temprano y Medio en varias zonas del sur de Brasil como Santa Catarina y Río Grande do Sul. Por su parte, Bracco et al. (2004) 26 ARTE RUPESTRE EN MAESTRE DE CAMPO: ALGUNAS... se recuperase era significativa. RESULTADOS Visibilización Con el objetivo de obtener información en relación a la visibilización, se registraron ciertos datos respecto al soporte y al panel. En cuanto al soporte, el 100% de las pinturas se encuentran en conjuntos rocosos. No siempre se seleccionaron rocas que destacasen por su altura, aunque en ningún caso se registraron soportes menores a los 2 m. Teniendo en cuenta que los soportes se podrían haber elegido en relación a su destaque visual en el terreno, las rocas menores a los 2 m de altura no serían las más adecuadas. Se debe recordar además, que la altura de las gramíneas de la pradera prístina sobrepasaba los 50 cm e incluso podría llegar a superar el metro, entonces las rocas cuya altura fuese inferior a los 2 m gozarían de muy baja visibilización. En el 60% de los casos las propias rocas que sirven de soporte para las pinturas rupestres son a su vez, las rocas más altas del conjunto. De los 4 casos restantes, en dos de ellos la diferencia de altura entre el soporte y la roca más alta es mínima (20 y 40 cm). Por lo tanto, y si bien no se puede afirmar que existe una marcada intención en seleccionar a las rocas más altas del conjunto como soporte de los diseños, ésta es la tendencia del grupo de pinturas registradas. Otro aspecto de la visibilización tiene que ver con la propia pintura. En este caso, entran en juego los datos recogidos respecto a la altura relativa (máxima y mínima) del panel respecto al suelo, al ángulo de inclinación del soporte en relación al plano del suelo y a la orientación del panel. En cuanto al campo manual, que refiere a la altura relativa desde el suelo en la que se desarrolla la pintura, en relación a la visibilización, y teniendo en cuenta la altura de las gramíneas de la pradera prístina, la altura máxima es la más importante ya que en muchos casos la parte más baja del diseño no se debería percibir visualmente hasta que no se estuviese muy cerca del mismo. En este sentido, no hay pinturas cuya altura máxima respecto al suelo sea inferior a los 0,85 m, por consiguiente Figura 6. Grabado fino. ABORDAJE DEL ÁREA Teniendo en cuenta los escasos antecedentes para la localidad se optó por llevar a cabo una prospección del área con el objetivo de corroborar la localización de las pinturas ya conocidas y de recoger datos vinculados a la presencia de otras pinturas. Asimismo una fase a prospección permitiría trabajar a escala espacial analizando el emplazamiento de las pinturas y sistematizando la información existente y la obtenida en esta etapa. Se plantearon los siguientes objetivos: - Estimar las posibles vinculaciones espaciales y/o visuales de los sitios con arte rupestre entre ellos y con otro tipo de sitios. - Estimar las posibles vinculaciones espaciales y/o visuales de los sitios con arte rupestre con elementos del paisaje físico que podrían haber sido buscados y/o apreciados por las poblaciones que realizaron las representaciones rupestres. - Evaluar la posibilidad de que los sitios con arte rupestre hubiesen actuado como un sistema de mensajes. En cuanto a la estrategia de prospección, se llevó a cabo un muestreo no probabilísitico, ya que las investigaciones de Florines (2001) y de Consens y Béspali (1977) en la vecina localidad rupestre de Chamangá (ubicada a unos 40 km al suroeste de Maestre de Campo) sugerían una baja densidad de material en general concentrado en lomadas. En cuanto a los afloramientos en sí mismos, se optó por una estrategia de reconocimiento de cobertura total ya que la información que de ellos 27 CUADERNOS - SERIES ESPECIALES 1 (2) en todos los casos el diseño se puede distinguir a pesar de la altura de las gramíneas. La mitad de las pinturas tienen una altura máxima que no excede de 1,25 m y las más altas no sobrepasan los 2 m. En relación al ángulo de inclinación varía entre 64° y 90° (figura 7) por lo tanto, permite una buena visión de las pinturas sin necesidad de adquirir una determinada postura (de rodillas, de cuclillas, acostado) como sucedería si el ángulo fuese inferior a 45°. Se puede decir entonces, que estas representaciones fueron hechas para que quien se acercara a ellas las percibiera sin dificultad. todas las pinturas ubicadas a la margen derecha del arroyo tienen similar orientación (NE), no ocurre lo mismo hacia la margen izquierda, donde se registraron orientaciones NE pero también NW. Sin embargo, una observación interesante es que la mayoría de los paneles orientan de forma tal que se encuentran enfrentados al arroyo (se tenga o no dominio visual del mismo desde la pintura). Visibilidad e Intervisibilidad Con el fin de distinguir con mayor precisión el panorama que se domina desde cada pintura, lo que permite acercarse tanto a la visibilidad como a la intervisibilidad, se utilizaron tanto, técnicas directas (observación de campo) como indirectas (análisis de cuencas visuales potenciales y de perfiles de pendiente), ya que ambas son complementarias. A nivel de campo se realizaron observaciones en relación al panorama que se domina y a los elementos que se distinguen. De acuerdo con estas observaciones se generaron tres categorías: pinturas que poseen visibilidad óptima, pinturas de visibilidad media y pinturas de visibilidad baja. Estas categorías tienen un carácter más bien cualitativo, por lo tanto no indican cuánto se ve y hacia qué dirección, sino más bien cuál es la percepción que se tiene del paisaje desde ese determinado punto. Para complementar este aspecto cualitativo de la visibilidad, se realizó un listado de elementos que se pueden divisar desde cada pintura. Este listado incluye: afloramiento con pinturas, afloramiento sin pinturas, arroyo Maestre de Campo, curso de agua menor, otro tipo de sitio (como canteras de materia prima) y accidente geográfico destacado. Las tres categorías están representadas de forma bastante equitativa: 3 pinturas tienen visibilidad baja, 4 tienen visibilidad media y otras 3, visibilidad alta. La intervisibilidad entre pinturas puede estar evidenciando relaciones jerárquicas entre sitios con representaciones rupestres. El relieve en algunos casos, la vegetación en otros (monte en galería) y la distancia en otros, o algunas de estas variables sumadas, hacen que en general no se registre relación visual de una pintura con otra Figura 7. Ángulos de inclinación de los soportes. La orientación del panel respecto a los cuatro puntos cardinales puede vincularse a la noción de visibilización ya que cada pintura sólo puede ser vista desde determinada coordenada. El 60% de las pinturas orientan al NE y el 40% al NW. La ausencia de orientaciones hacia el S debe ser considerada desde varios ángulos. Una a posibilidad supone la intención de pintar hacia determinadas coordenadas y de no hacerlo hacia otras, pero también puede tener que ver con la ausencia de superficies lisas con orientación sur y por último puede obedecer a una conservación diferencial de las pinturas orientadas hacia el norte vinculada a factores de intemperismo -como ya lo señaló Florines (2001) para Chamangá. Si se opta por la primera opción y se considera que hay intencionalidad en la orientación de las pinturas, se debería observar algún tipo de patrón, por ejemplo en cuanto a la distribución de las distintas orientaciones en el espacio. Si bien 28 ARTE RUPESTRE EN MAESTRE DE CAMPO: ALGUNAS... u otras. En los casos en donde se registró relación visual, ésta se da entre los bloques que hacen de soporte y no entre las pictografías en sí mismas. A partir de los análisis de cuencas visuales dos pinturas se destacan: - YIMC7 no sólo posee una muy buena visibilidad, sino que es la pintura que es más vista desde otras pinturas. Además, posee relación visual con por lo menos dos pinturas más. Por consiguiente, desde el punto de vista visual es un punto importante. A ello se deben agregar otras observaciones: el conjunto rocoso en el que se encuentra es el de mayor tamaño, el panel es el de mayor extensión, presenta diseños recurrentes para la región (zigazags) y otros originales (ovaloides arracimados), es el único caso en el que se observa la técnica de grabado fino. Por todas estas razones esta pictografía podría presentar cierta relevancia Figura 9. YIMC-4. Soporte, conjunto rocoso en el que se encuentra, cuenca de visibilidad potencial. en relación a las demás (figura 8). - En cambio, YIMC4 no presenta relaciones visuales con otra pintura y no es vista desde ninguna otra. Además domina visualmente un área (NW) que ninguna otra pintura domina. En cuanto al diseño, presenta características que lo distinguen claramente de los demás (ha sido clasificado por varios autores como antropomorfo) y se encuentra en una superficie pulida de características distintas (tamaño, ubicación, color, textura) al resto de las superficies donde se hallan las demás pictografías. En cuanto a las razones de estas diferencias, los conocimientos actuales no permiten más que especular respecto a diferencias en cuanto a su función y/o cronología (figura 9). hallazgos /hectárea. Se identificaron fuentes primarias y secundarias de materias primas líticas. En cuanto a las materias primas de los artefactos, el cuarzo (50%) y la caliza silicificada (37%) son los más abundantes y en menor proporción se encuentran la arenisca silicificada y la cuarcita (13%). Se analizaron 29 ejemplares que constituyen la totalidad de los recuperados en las tareas de prospección. Las lascas son el tipo mejor representado (38%), seguidas por los instrumentos (28%), los fragmentos artificiales (14%) y por último las microlascas (10%) y los núcleos (10%). En términos generales y como un primer acercamiento, la escasa cantidad de núcleos identificados como de lascas con remanentes de cortex o superficie natural, sumado al tamaño relativamente pequeño de la mayoría de las lascas y a la presencia de microlascas, podría estar indicando tareas más vinculadas con el uso y mantenimiento de instrumentos que con la elaboración de los mismos, especialmente para el caso de la caliza silicificada y la arenisca silicificada. Tomando en cuenta estos datos, el registro arqueológico presente en Maestre de Campo comparte similares características con el documentado para el centro-sur del Uruguay y apoya la hipótesis planteada por otros investigadores (Consens y Bespali 1981; Florines 2001) respecto a que los sitios de esta región estarían más vinculados a la circulación estacional de los grupos que habrían habitado las costas del Río de la Plata y la cuenca del Río Negro. MATERIAL ARQUEOLÓGICO La totalidad del material que se recuperó corresponde a material lítico en distintas etapas de producción. Es importante destacar la baja densidad de hallazgos que no supera los 0,07 DISCUSIÓN Si se parte del supuesto de que el arte rupestre puede ser entendido como un sistema de señales dejadas por los grupos móviles para otras personas que utilizan el mismo medio social Figura 8. YIMC-7. Detalle del diseño, conjunto rocoso en el que se encuentra, cuenca de visibilidad potencial. 29 CUADERNOS - SERIES ESPECIALES 1 (2) y físico, se puede asumir que el arte rupestre fue ejecutado para “sugerir o transmitir algún tipo de información…bajo códigos particulares de producción y significación” (Aschero 1997: 19). Esto implica la existencia de receptores de esa información y de un espacio en el que el retorno esta previsto. Para sistemas de asentamiento nómades o semisedentarios ese retorno sería posible si el emplazamiento se relaciona con lugares habitualmente recorridos durante los ciclos anuales de movilidad o si existiera un momento determinado en el que se pudiera acceder a ese sitio (Aschero 1997). En base a lo anterior, las pinturas rupestres de Maestre de Campo podrían haber señalado algún tipo de recurso apreciado y al que se iba a buscar o accedía en ciertos momentos. La zona de Maestre de Campo posee abundantes cañadas, lagunas y bañados. Además de la presencia de agua y de recursos vinculados a ella (peces, aves, mamíferos acuáticos), el arroyo, como cualquier curso, funciona como atractor de fauna en busca de agua, como ciervos, ñandúes y mamíferos pequeños. El monte en galería ofrece una buena oferta de vegetales silvestres (alimentos, medicinas) y leña. Arcilla, arena, y cantos costeros pueden ser aprovechados como fuentes de materia prima local, así como los afloramientos de cuarzo hallados. Sin embargo, la presencia y/o abundancia de recursos faunísticos, vegetales y de materias primas no difiere mucho de las de cualquier otro punto del paisaje del territorio uruguayo. Es entonces poco probable que la vegetación, los animales o las materias primas hayan sido la causa de la señalización del paisaje mediante la realización de pinturas rupestres. Otra posibilidad sugiere que lo que se está marcando no es la ubicación de ciertos recursos apreciados sino rutas de tránsito de una zona a otra. A pesar de su aparente distribución irracional, existen criterios de selección y esta selección genera una distribución en el territorio que puede tener una lectura espacial. No todas las pictografías de Maestre de Campo gozan de las mismas condiciones de visibilidad e intervisibilidad. Sin embargo en relación al panorama que dominan, más importante que la visibilidad individual de cada pintura, lo es el conjunto total de territorio, que aumenta considerablemente en relación al área efectivamente ocupada por estas manifestaciones rupestres (figura 10). Figura 10: Cuenca de visibilidad potencial del conjunto de pinturas. Respecto a las condiciones de visualización, todas fueron hechas para que quien se acercara a ellas las viera sin dificultad (se ubican a una altura adecuada desde el nivel del piso, el ángulo del panel permite observarlas sin necesidad de adquirir un postura particular, no se encuentran en oquedades o áreas ocultas de la roca, en general la roca soporte es la más alta del conjunto). Si se retoma el tema de la orientación de las pinturas y su relación con el arroyo Maestre de Campo, la gran mayoría de los paneles orientan de forma tal que se encuentran enfrentados al arroyo. Entonces el Maestre de Campo podría estar funcionando como eje ordenador de la orientación del los paneles y tal vez, del tránsito por la zona. Por consiguiente junto al propio arroyo, las pinturas fácilmente visibles y orientadas hacia el arroyo, tal vez estén actuando como un sistema de mensajes destinados a orientar en el paisaje (figura 11). Esto no descarta el hecho de que el arte rupestre esté transmitiendo a su vez otro tipo de información vinculada a aspectos simbólicos o rituales. La información que almacena y transmite el arte rupestre puede 30 ARTE RUPESTRE EN MAESTRE DE CAMPO: ALGUNAS... tener significados múltiples. La edad, el sexo y los conocimientos del que lo “lee”, así como también el contexto en el cual fue ejecutado, van a incidir en la cantidad y calidad de información que se perciba (Mithen 1991). En suma, los datos y consideraciones volcados en este trabajo en relación a las condiciones de visualización de las pictografías de Maestre de Campo junto al tipo de material lítico hallado y especialmente a su prácticamente escasa presencia, apoyarían la hipótesis de que las pinturas están relacionadas con zonas de tránsito y/o dominio visual del área. BIBLIOGRAFÍA ASCHERO, C. 1997. De Cómo Interactúan Emplazamientos, Conjuntos y Temas. 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CONCLUSIONES A partir de este trabajo se generaron algunos resultados inmediatos y también se abrió la posibilidad de desarrollar otras líneas a largo plazo. En cuanto a los resultados inmediatos, tanto la información sobre las pinturas como el material arqueológico recuperado, han contribuido a ampliar el conocimiento de los grupos humanos que habitaron y/o realizaron ciertas actividades en Maestre de Campo. Las posibilidades que ofrece el arte rupestre en relación al estudio de la espacialidad y del intercambio y circulación de información no se agotan aquí, serán necesarios nuevos trabajos de investigación para avanzar en estas ideas y para ahondar en otras. Los planteamientos aquí discutidos pretenden contribuir a la generación de nuevas preguntas y en última instancia, al conocimiento de la región centro sur del Uruguay. BRACCO, R. DEL PUERTO L., INDA H. y C. CASTIÑEIRA 2004. Mid-late Holocene cultural and environmental dynamics in Eastern Uruguay. 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