MOVIMIENTO CONCERTACIÓN NUESTROS PRINCIPIOS Nuestra organización política asume como principios básicos la defensa de la dignidad del ser humano, el desarrollo integral de todas sus potencialidades y la garantía de sus derechos y libertades. Estos son los fines que deben guiar la organización de la sociedad, la economía y el Estado. Nuestra actuación política se orientará a lograrlos. Entendemos la dignidad humana como el respeto a los derechos humanos tanto individuales como colectivos de todas las personas; la igualdad ante la ley, la igualdad de derechos y obligaciones. El derecho de ninguna persona puede ser obtenido a costa de los derechos de otra. El logro del bien común puede en ciertas ocasiones significar la necesidad de posponer intereses individuales. Las personas que están en especial desventaja requieren atenciones y leyes que garanticen su real igualdad. El conjunto de la sociedad tiene la obligación de reparar o indemnizar con justicia a quienes fueren por ello perjudicados. Promover la dignidad humana incluye también cuidar de bienes comunes como la seguridad, la paz, la justicia, el desarrollo, la cultura y la naturaleza; reconocer que las libertades individuales y la democracia han aportado importantes beneficios a la humanidad; superar toda forma de discriminación, maltrato, agresión y violencia que perjudique a cualquier grupo de la sociedad. De la misma manera, nuestra organización política: - Reconoce el valor y la necesidad de la participación, la misma que debe partir de la responsabilidad de las personas 1 debe ser independiente del estado y en ningún caso puede remplazar el adecuado funcionamiento del sistema político ni menoscabar el imperio de la ley. - Afirma la soberanía del Estado ecuatoriano, rechaza todo intento de poner a nuestro país al servicio de intereses extranjeros o la intromisión de éstos en nuestros asuntos internos. - Propone la integración plena e inteligente del Ecuador a la comunidad internacional, insistiendo en la necesidad de generar las capacidades internas que permitan a todos los actores de la sociedad vincularse y estar preparados para afrontar los desafíos de la emergente sociedad del conocimiento y de su responsabilidad frente al cambio climático. Entendemos a la política como una dimensión de servicio a la que estamos llamados a participar, en un espíritu de generosidad y de lucha contra toda forma de abuso, opresión e injusticia. Por ello, nuestra actividad política se orientará a: - La defensa de los valores de la democracia, entendida ésta como la forma de gobierno y de convivencia social que partiendo de la igualdad política de todos los ciudadanos garantiza que estos participen en la toma de decisiones y que para ello dispongan de información adecuada, de espacios de deliberación respetuosos, de libertad para organizarse políticamente. - La búsqueda de la concertación, es decir, la deliberación y la articulación de posiciones diversas en pos de encontrar puntos comunes como el mecanismo básico para resolver los problemas del país. - La afirmación del pluralismo y el respeto a posiciones distintas, indispensables para la convivencia democrática. Nuestra organización política sostiene que la vida en conjunto debe caracterizarse por la equidad, entendida como: - La igualdad de oportunidades para el desarrollo de todas las personas. 2 - El acceso equitativo a servicios públicos de calidad. - La atención adecuada a las necesidades de quienes tienen necesidades especiales. - El derecho de las personas de beneficiarse de su propio trabajo. - La eliminación de toda forma de discriminación. - La superación de la miseria de la indigencia y la pobreza. Ello nos conduce a comprender que la actividad económica debe orientarse a producir la riqueza necesaria y garantizar una adecuada calidad de vida, en armonía con el entorno natural, de todas las personas. Para ello, objetivo prioritario de la economía debe ser la generación constante de fuentes de trabajo, dignas, productivas y bien remuneradas. Por ello: Creemos en el valor fundamental que tiene para la sociedad la función empresarial, la misma que debe ser estimulada y apoyada en el marco del cumplimiento de las leyes. Reconocemos al mercado como un sistema eficiente para asignar recursos en muchos campos. El mercado es un bien colectivo, que debe ser cuidado y regulado por el Estado y la sociedad, asegurando condiciones adecuadas de competencia y libertad y evitando prácticas monopólicas o abusivas de actores públicos o privados; Afirmamos que la sociedad necesita varias funciones y servicios que debe ser garantizados por el Estado, entre estos, el imperio de la ley, seguridad, salud y educación de calidad para todos. Las empresas estatales y los servicios públicos deben estar al margen del proselitismo político y someterse a altos estándares de eficiencia, calidad y transparencia. Consideramos al Ecuador un país diverso en cuanto a sus formas alternativas de desarrollo; consideramos a la autosustentabilidad, el cooperativismo y el asociativismo, 3 entre otros, como formas válidas para satisfacer las necesidades humanas básicas. Para el logro estos fines, sostenemos la necesidad de construir un verdadero Estado de derecho. Aquello implica, entre otras cosas, desarrollar en el Ecuador un Estado: Regido bajo el imperio de la ley, lo que exige instituciones sólidas, autoridades con firmes criterios éticos, leyes justas y de calidad. Al servicio de la sociedad, cuya finalidad fundamental sea lograr el respeto y plena vigencia de los derechos humanos y la promoción de la igualdad de oportunidades de todos. Controlado por los ciudadanos, que no caiga en el abuso del poder, ni en la arbitrariedad; un Estado sometido a formas de fiscalización, transparentes e independientes. Fundado en la independencia de poderes, alternancia en la representación y respeto a las minorías. Respetuoso de todas las opciones religiosas y del espacio de la conciencia individual donde las personas asumen sus opciones sobre temas éticos, políticos y religiosos. Pluralista, basado en la diversidad y fundado en la articulación de múltiples visiones y puntos de vista. Unido, descentralizado, autonómico y solidario, que avance hacia niveles crecientes de autogobierno. Capaz de una planificación integral que oriente un desarrollo equilibrado entre campo y ciudad, con productividad y responsabilidad social y ambiental de todos los actores. Estos son los principios que nos llevan a organizarnos. Invitamos a todos aquellos que compartan estos ideales a unirse a este esfuerzo, basándonos en el respeto mutuo, la armonía con la naturaleza, la solidaridad, la productividad y la eficiencia. 4