Vegetación post incendio ocurrido hace 13 años en la comuna de Dalcahue, Provincia de Chiloé, Región de Los Lagos. Patrocinante: Sr. Juvenal Bosnich A. Trabajo de titulación presentado como parte de los requisitos para optar al título de Ingeniero Forestal ANDREA ELIZABETH BARRIENTOS VERGARA VALDIVIA 2010 CALIFICACIÓN DEL COMITÉ DE TITULACIÓN Nota 7,0 Patrocinante: Sr. Juvenal Bosnich Alvarado Informante: Sr. Carlos Le Quesne Geier 6,3 Informante: Sr. Jorge Cabrera Perramón 6,8 El patrocinante acredita que el presente Trabajo de Titulación cumple con los requisitos de contenido y de forma contemplados en el reglamento de Titulación de la Escuela. Del mismo modo, acredita que en el presente documento han sido consideradas las sugerencias y modificaciones propuestas por los demás integrantes del Comité de Titulación. _______________________________ Sr. Juvenal Bosnich Alvarado. AGRADECIMIENTOS En primer lugar, el más grande de los agradecimientos es para mi familia en especial a mi madre que durante todos estos años me ha dado su incondicional apoyo. A mi profesor patrocinante, Sr. Juvenal Bosnich por toda su ayuda, preocupación e iniciarme en el ámbito profesional, agradezco su importante colaboración. A mis profesores informantes por apoyarme en cada momento. A Carlos Le Quesne por su dedicación y conocimientos desde el primer día, a quien también le agradezco enormemente su amistad. A los funcionarios de CONAF Chiloé por toda su ayuda, en especial a Don Pedro Bahamondez por tener siempre disponibilidad para atender mis dudas, ideas y revisiones. Para realizar este trabajo fue necesario asistir a terreno. Esto no hubiera sido posible sin Ricardo Krause y mi hermano Andrés. Y para el premuestreo Guenuman y Escobar. A las siguientes familias que desinteresadamente siempre me han apoyado Hernández Alvarado, González Cifuentes, Lorca Pérez y Barrientos Arismendis. A mis tías Erica Bahamonde, Patricia Yáñez y Carolina Vergara. En especial a mi segunda familia los valdivianos Leal Baeza, durante estos años su cariño, alegría y amistad han sido muy importantes para terminar esta etapa, nunca olvidaré esa navidad o esos dieciochos que pasamos juntos. A Lety por ser una gran amiga, gracias por todo. A los Krause Rutherford que siempre me han ayudado cuando lo necesité, cada uno de ustedes han hecho que este periodo sea más grato y reconfortable. Mi más sincera gratitud a Angélica Aguilar, Alejandra Portales, Luis Macías, Víctor Barrera, Luis Molina, Roxana Ceballos y Marcelo Peña. A Eduardo Jara por ser pilar fundamental de apoyo y aliento en la finalización de esta etapa de mi vida. A mis amig@s y compañeros de Universidad que alegraron esta extensa estadía. Dedicado a mi abuela María Carlina Yáñez (q.e.p.d) por enseñarme desde pequeña a querer la naturaleza, y ese entusiasmo en restaurar los bosques degradados y A mi madre Mirna Vergara. ÍNDICE DE MATERIAS Página 1 1. INTRODUCCIÓN 2. MARCO TEÓRICO 2 2.1 Antecedentes de los Bosques siempreverdes 2 2.1.1 2.1.2 Distribución geográfica y descripción Condiciones climáticas y de suelo 2 2 2.2 Antecedentes generales del tipo forestal Ciprés de las Guaitecas 3 2.2.1 2.2.2 Distribución geográfica y descripción Condiciones climáticas y de suelo 3 3 2.3 Efectos del fuego sobre la vegetación 3 2.4. Sucesión secundaria 5 2.5 Dinámica regenerativa 5 2.6 Restauración ecológica 7 3. DISEÑO DE INVESTIGACIÓN 8 3.1 Antecedentes del área de estudio 9 3.2 Metodología de muestreo 9 3.2.1 3.2.2 3.2.3 3.2.4 3.2.5 4. Delimitación del área de estudio Premuestreo y diseño de unidades muestrales Patrón de ocupación de los estratos Matorral y Matorral arborescente Evaluación de la composición florística Regeneración arbórea y crecimiento en altura PRESENTACIÓN DE RESULTADOS 11 12 13 4.1 Descripción del estrato y su patrón de uso 13 4.1.1 4.1.2 4.2 Descripción Estrato Matorral Descripción Estrato Matorral arborescente Composición florística 13 13 14 4.2.1 4.2.2 Estrato matorral Estrato matorral arborescente 14 15 4.3 Regeneración arbórea 19 4.3.1 4.3.2 Regeneración estrato matorral Regeneración estrato matorral arborescente 19 20 5. DISCUSIÓN DE RESULTADOS 21 5.1 Dominancia y diversidad de especies 21 9 9 11 5.2 Amenazas y políticas para desarrollar restauración 24 6. CONCLUSIONES 26 7. BIBLIOGRAFÍA 27 ANEXOS 1 2 3 4 Abstract and Key words Área de las comunidades de P. uviferum Formulas para los parámetros de la composición florística Fotografías ÍNDICE DE CUADROS Página 9 Cuadro 1. Categorías de uso y superficies definidas en el área de estudio Cuadro 2. Presencia y cobertura vegetacional según Braun-Blanquet (1981) 11 Cuadro 3. Composición florística de los estratos estudiados, matorral (E1) y matorral arborescente (E2). Se presentan los principales parámetros y valor de importancia considerando todas las parcelas de regeneración 16 Cuadro 4. Densidad y altura de plántulas de ambos estratos, matorral (E1) y matorral arborescente (E2) se indica el número de individuos de cada especie por hectárea 17 ÍNDICE DE FIGURAS Página 8 Figura 1. Ubicación del área de estudio en la Isla de Chiloé Figura 2. Distribución de las unidades muestrales para cada estrato 10 Figura 3. Diseño de unidad muestral para regeneración de P. uviferum 12 Figura 4. Vista general del estrato matorral 13 Figura 5. Vista general del estrato matorral arborescente 14 RESUMEN EJECUTIVO En este estudio se analizó la respuesta de la regeneración post-fuego ocurrido hace trece años, el cual afecto 206 hectáreas de bosques siempreverdes y comunidades de Ciprés de las Guaitecas, ubicado en la comuna de Dalcahue, Isla de Chiloé. En este sector se diferenciaron dos estratos para el muestreo sistemático, Matorral y Matorral arborescente, en base a información de parcelas planteadas (4m2) para ambos casos se elaboró una lista de composición florística de acuerdo a su forma de vida, densidad, altura de la regeneración arbórea, la dominancia y la diversidad de las especies. La estimación de los índices de diversidad de Margalef para la composición florística arrojó un mayor valor en Matorral arborescente (6,8) lo que indicaría una mayor diversidad de especies para este estrato. Para matorral la regeneración arbórea es baja, mientras que la diversidad de acuerdo al índice de Margalef también es alta (6,1). Los estratos presentan una regeneración arbórea para Matorral de 3243 plántulas/hectárea, siendo N. antarctica la especie con mayor densidad (46%), seguidas de N. dombeyi y P. uviferum ambas con un 19%, esta última especie se encuentra en todas las categorías de altura. Para el estrato Matorral arborescente 5938 plántulas/hectárea, liderando N. dombeyi con un 29% aquí la participación de P.uviferum es casi nula (3%). Se ubicaron tres individuos de P. uviferum que resistieron el fuego, se contabilizó y clasificó individuos de la misma especie que crecían a su alrededor (radio 10 m), dando como resultado 1336 pl/ha. La mayor cantidad se registró en el radio de 5 m que equivale a 954 pl/ha o sea un 71% de la regeneración total de la parcela circular de radio 10 m. Palabras claves: Pilgerodendron uviferum, regeneración post incendio, Chiloé. 1. INTRODUCCIÓN Los bosques Siempreverdes y de Ciprés de las Guaitecas (Pilgerodendron uviferum) en la Isla de Chiloé cubren una superficie total de 575.114 hectáreas, los que históricamente han sido alterados por el ser humano mediante el uso del fuego, el aprovechamiento de madera, y el cambio de uso para la agricultura y ganadería. Los bosques de Ciprés de las Guaitecas se caracterizan por ocupar sitios anegados, generalmente planos, de baja productividad, en los cuales esta especie despliega una alta capacidad competitiva (Cruz y Lara, 1981). Los bosques se han acostumbrado en cierta manera a los incendios, y por eso han desarrollado sorprendentes mecanismos de adaptación al fuego, es a través de él como se regeneran y reproducen. El problema se presenta cuando estos incendios son reiterados, ya que el bosque pierde su poder de recuperación, se agravan los procesos de erosión del suelo, y aumentan las pérdidas de biodiversidad. La regeneración del bosque quemado es fundamental para estas masas forestales. Considerando estos antecedentes, se planteó el presente estudio, como objetivo general evaluar la respuesta de la regeneración después de 13 años de un incendio forestal, ocurrido en un bosque del tipo forestal Siempreverde con comunidades de Ciprés de las Guaitecas. Objetivos específicos. a) Cuantificar la densidad de la regeneración en 2 tipos de estratos. b) Identificar las principales especies que han colonizado el sitio. c) Identificar el tamaño y calidad de las plantas de regeneración d) Identificar las principales amenazas y sugerir una restauración con respecto a las leyes chilenas. 1 2. MARCO TEÓRICO 2.1 Antecedentes de los Bosques siempreverdes 2.1.1 Distribución geográfica y descripción Donoso (1981), señala que esta conformación boscosa se ubica aproximadamente entre los paralelos 40º30’ y 47º Sur, bajo los 1000 msnm, en la Cordillera de los Andes y en la Cordillera de la Costa desde 38º30’ Sur en sus laderas occidentales, áreas planas y con mal drenaje. El tipo forestal siempreverde (TFSV) se extiende en casi todo el territorio de la isla de Chiloé, una excepción de ello ocurre en la continuación de la Cordillera de la Costa llamada en esta zona Cordillera de San Pedro donde se pueden encontrar bosques de la conífera Fitzroya Cupressoides y sectores bajos planos y muy húmedos, de tipo turboso, dominados por Pilgerodendron uviferum (Ciprés de las Guaitecas). Los bosques siempreverdes al ser de gran diversidad se dividieron en cinco subtipos, Ñadis, Olivillo Costero, Siempreverde con intolerantes emergentes, Siempreverdes de Tolerantes y Renovales de Canelo. La clasificación de los subtipos siempreverde de tolerantes y siempreverde con intolerantes emergentes se basa en la presencia o ausencia masiva de las intolerantes Coihue, C. de Chiloé, C. de Magallanes, Tineo y Ulmo. Otro subtipo se define por las características edáficas, como es el subtipo ñadi o por la importancia relativa muy alta de una especie en una situación geográfica especial como el caso del bosque de Olivillo costero, A. punctatum como especie dominante. Un quinto subtipo es el de renovales de Canelo (Donoso, 1998). El sector a estudiar se caracterizaba por tener antes del incendio el subtipo Ñadis que corresponde a una condición particular del sustrato que se extiende en el Llano Central entre Valdivia y Puerto Montt y partes de Chiloé. Las especies que predominan estos bosques son Drimys winteri, Nothofagus nitida, Laurelia philippiana, Eucryphia cordiflia, Weinamannia trichosperma, Podocarpus nubigena, Saxegothaea conspicua y Amomyrtus luma (Hormazábal, 2006). 2.1.2 Condiciones climáticas y de suelo El TFSV se extiende en un gran rango latitudinal extenso de 9 grados. En climas clasificados como templado lluvioso oceánico o de costa occidental. La variación de las precipitaciones es entre 1300 mm en la zona septentrional y 6000 mm en la Cordillera de Los Andes. Los suelos también son variados pueden desarrollarse sobre material metamórfico en la Cordillera de la Costa, sobre depósitos fluvioglaciares y volcánicos en el Llano Central (ñadis) y suelos volcánicos de material granítico en la Cordillera de los Andes (Donoso, 1998). 2 2.2 Antecedentes generales del tipo forestal Ciprés de las Guaitecas 2.2.1 Distribución y descripción El tipo forestal Ciprés de las Guaitecas (TFCG) se ubica entre los 40° y los 54°, es decir entre Valdivia y Tierra del Fuego. La mayor abundancia se encuentra en las islas de Chiloé, Aysén y Magallanes. En Chiloé habita de preferencia en lugares planos altos caracterizados por su mal drenaje. En la zona continental ocupa áreas bajas, próximas al litoral, a lo largo de los ríos, situación que se prolonga hasta Magallanes (Donoso, 1981). La especie del TFCG (Pilgerodendron uviferum) que forma asociaciones ralas o bosques ralos puros de características multietáneas, donde Ciprés se desarrolla como un pequeño árbol de 3 a 10 m de altura, formando a veces agrupaciones más bien de tipo arbustivo. Pilgerodendron uviferum en la isla de Chiloé y en las islas de las regiones de Aysén y Magallanes, así como en el litoral continental, es común su asociación con Tepualia stipularis. Además, es frecuente la presencia de Nothofagus nitida, Podocarpus nubigena, y Drimys winteri en las áreas más húmedas. Nothofagus betuloides, Lomatia ferruginea, Weinmannia trichosperma y Embothrium coccineum se ubica en sectores con mejor drenaje (Cruz y Lara, 1981). También puede asociarse con Nothofagus antarctica en turberas (Donoso, 2006). 2.2.2 Condiciones climáticas y de suelo Las condiciones climáticas en que se desarrolla el TFCG son muy variadas, según la altitud especialmente. Las temperaturas mínimas rara vez bajan de 0°C y las oscilaciones son de aproximadamente 4,1°C. Su distribución se asocia a altas precipitaciones que van de 2.500 a 7.500 mm (Donoso, 1981). Los bosques de Ciprés tienen un drenaje restringido, por lo que están constantemente saturados de humedad y de mal drenaje, con abundante materia orgánica y extremadamente ácidos, por lo general con pH inferiores a 5,0 en los cuales dominan los procesos de gleyzación (Cruz y Lara, 1981). 2.3 Efectos del fuego sobre la vegetación. En términos generales se considera como incendio forestal toda destrucción de la vegetación (aérea, superficial, subterránea) en zonas rurales por medio del fuego, cualquiera que sea su origen y cuando se propaga libremente (Julio, 1994). Los incendios forestales producen alteraciones o impactos en los siguientes ámbitos: efectos sobre la vegetación, suelo, fauna, microclima y valores recreativos. Los incendios forestales provocan la muerte o la pérdida del follaje del sotobosque, matorrales y renovales de bosques naturales, si el fuego es de copa o cuando el incendio es de superficie la calcinación de los tallos o el chamuscado del follaje rebasan la temperatura de sobre vivencia vegetal (Bosnich, 2005). 3 El efecto del fuego sobre la vegetación depende en gran medida de la severidad e intensidad del fuego, la duración del incendio con los patrones de consumo de combustible, el grado de penetración al subsuelo y como el fuego actúa en las diferentes áreas donde ocurre; la estructura y dinámica de la vegetación (Fernández, 2009). Brow y Smith (2000) propusieron los siguientes sistemas de clasificación para la severidad del efecto del fuego. Fuegos de sotobosque, habitualmente no matan la vegetación dominante y no cambian su estructura, sobreviviendo el 80% de la vegetación dominante. Fuegos de reemplazo, destruyen las estructuras aéreas de la vegetación dominante, más del 80% de la vegetación aérea se consume o muere. Fuegos de severidad heterogénea, causan mortalidad selectiva de la vegetación dominante, dependiendo de la susceptibilidad de las diversas especies vegetales al fuego. Sin regímenes de fuego, nula o poca ocurrencia de incendios. La susceptibilidad de los árboles a los efectos del fuego depende de diversos factores: edad del árbol; tamaño y morfología de los órganos expuestos; características físicas de la corteza; forma del follaje; constitutivos químicos del follaje, corteza y madera; tipo de arraigamiento; propiedades del suelo; características del rodal, estación del año; e intensidad del incendio (Bosnich, 2005). La acción del fuego seguida por ramoneo intenso por ganado y/o ciervo puede tener consecuencias sobre la vegetación totalmente diferentes a la que tendría el fuego actuando como único agente de disturbio (Veblen et al., 1989). En los registros históricos de incendios ocurridos en Chiloé desde 1978 a la actualidad, la temporada 1995-1996 ha sido la con mayor número de incendios (195) afectado una superficie de 3051 hectáreas, siendo Dalcahue la comuna con mayor superficie quemada 1410 ha aproximadamente (CONAF, 2010). La temporada 1995-1996 se caracterizó por tener altas temperaturas y sequía prolongada. El incendio que afectó esta área fue catalogado como de alta intensidad y tuvo una duración de 3 meses, propagándose de forma subterránea.1 ______________________________________________ 1 Barrientos, G. 2009. Castro, Corporación Nacional Forestal “Comunicación personal”. 4 2.4 Sucesión secundaria Se puede entender sucesión como el desarrollo de la comunidad a partir de un área desnuda, la cual es colonizada por especies que al establecerse producen cambios en el medioambiente, modificaciones que, a su vez permiten el establecimiento de otras especies. Este cambio gradual es la composición de especies de la comunidad en proceso sucesional es direccional y predecible, porque implica el cambio en el tiempo en una dirección, hacía algún tipo de comunidad distinta de la inicialmente invadió el área (Donoso, 1993). La teoría de sucesión explica el proceso de reemplazo de especies y el cambio en el desempeño de los individuos a través del tiempo en un mismo espacio. La primera fase de la sucesión secundaria, luego de una perturbación, es la invasión o regeneración de especies pioneras y el establecimiento de las plantas en el sitio perturbado (Díaz, 2007). Se origina en áreas en que existe un ecosistema sólo parcialmente alterado. El área secundaria en que se inicia este tipo de sucesión se caracteriza esencialmente por poseer aun un suelo que se desarrolló bajo un tipo de vegetación y que será capaz de permitir el desarrollo relativamente rápido de una nueva vegetación (Donoso, 1993). Para sucesiones secundarias se postula un “desarrollo en base a la composición florística inicial; hierbas, gramíneas, arbustos, árboles están todos presentes y germinan o brotan al mismo tiempo (ya sean árboles o anuales) y las etapas aparentes en la sucesión se deben a las distintas velocidades de crecimiento (Bosnich, 2005). La dispersión de semillas puede ser el principal obstáculo para el establecimiento natural de un especie arbórea en áreas donde han ocurrido perturbaciones, la cantidad se semillas y cercanía de comunidades boscosas puede retrasar o perjudicar el proceso de sucesión forestal (Bustamante, 2010) La resiliencia de un ecosistema es la capacidad de recobrar los atributos estructurales y funcionales que han sufrido daño debidos a perturbaciones (SER, 2004). Los bosques siempreverdes comúnmente se ven afectados por perturbaciones que corresponden a causas antropogénicas, como la corta de los bosques por explotación forestal, talas rasas o los incendios forestales, por esa razón siempre estos bosques se encontraran en alguna etapa sucesional (Donoso, 1998). 2.5 Dinámica regenerativa Los métodos de reproducción del bosque pueden ser de dos tipos generales: por regeneración natural y por siembra directa o plantación. Los procesos que constituyen los eslabones completos de esta cadena son; abastecimiento adecuado 5 de semillas, diseminación homogénea sobre el área, semillas viables, germinación rápida y abundancia de semillas, establecimientos de las plantas, sobrevivencia de las plantas hasta que se inicie la competencia con otras especies (Donoso, 1993). Los mecanismos de regeneración de las especies vegetales frente al fuego, dependen exclusivamente de sus habilidades para tolerarlo, el cual puede ser devastador para especies desprovistas de adaptaciones de resistencia. En estos casos, el mantenimiento de las poblaciones depende exclusivamente de la resistencia de las semillas o la capacidad de recolonizar sitios desde sectores no afectados. Aún contando con adaptaciones de resistencia, el fuego puede tener un efecto diferente sobre los individuos de una misma especie, dependiendo de la topografía, los gradientes ambientales, la frecuencia e intensidad del fuego, época del año, clima anterior y posterior, el tamaño de las plantas y la presencia o ausencia de herbívoros (Fernández, 2009). Donoso y Lara (1998) señalan que para que ocurra una dinámica regenerativa o sucesional dependerá de las características del hábitat, las características ecológicas de las especies en relación al hábitat y con el estado de alteración y las posibilidades de acceso al área alterada de las diferentes especies, posibilidades que están ligadas a sus propiedades ecológicas, factores al azar y el tiempo transcurrido. Donoso (1982) propone un triángulo de la regeneración para que las especies tengan éxito de colonización en un área alterada, debe estar compuesto de una adecuada fuente de semillas, una apropiada cama de semillas y un medio ambiente favorable. Se ha estudiado la dinámica de los bosques de Ciprés en Chiloé en diferentes tipos de sitios, desde planos de mal drenaje hasta relieves abruptos, donde los pioneros iniciales son musgos del tipo Sphagnum o gramíneas. La meteorización del material metamórfico y el desarrollo en altura de las turberas ha originado zonas de mejor drenaje donde el primer colonizador arbóreo es Ciprés. Esta comunidad recibe el nombre de “Bosque abierto de Ciprés” y presenta una estructura multietánea con regeneración muy densa. Cuando mejora la condición de drenaje se presenta la oportunidad para que las especies más exigentes puedan acceder a este hábitat (Donoso, 2006). Cruz y Lara (1981) señalan que Pilgerodendrun uviferum es una especie tolerante o semitolerante a la sombra capaz de establecerse como plántulas de origen de semillas o por reproducción vegetativa en áreas abiertas colonizando turberas y áreas de mal drenaje. También se pueden establecer en sectores afectados por incendios de intensidad media a baja. 6 2.6 Restauración ecológica Gálvez (2002) plantea que la restauración ecológica es una ciencia emergente con una profunda importancia en conservación biológica. Los esfuerzos que se hacen actualmente en este campo son escasos. Sin embargo, a medida que aumenta el uso de recursos en las diferentes regiones, será más frecuente encontrarse con casos críticos que requieren de restauración ecológica. La restauración de comunidades podría convertirse en un componente importante de la conservación de la biodiversidad mundial. La importancia que tiene la restauración ecológica se deriva de la existencia generalizada de distintas formas de degradación de los recursos naturales y las condiciones ambientales, que tienen su manifestación en aspectos tales como la pérdida de vegetación y suelos, aguas contaminadas; contaminación atmosférica; pérdida de recursos genéticos; pérdida o destrucción de partes vitales de hábitat; erosión genética; mortalidad y baja reproducción de las especies; cambios climáticos, geológicos y evolutivos; extinción de la especies y en general, el deterioro progresivo de distintos tipos de sistemas : naturales, modificados, cultivados y construidos (SER, 2004). La restauración deriva a una acción intencional con el propósito de iniciar o acelerar el proceso de la recuperación de la estructura, composición, y diversidad de un ecosistema degradado (Armesto, 2005). Existen tres formas básicas de restaurar un área degradada (Machlis 1993) recuperarla volviendo a cubrir de vegetación con especies apropiadas, rehabilitarla usando una mezcla de especies nativas y exóticas para recuperar el área, y restaurarla estableciendo en el lugar el conjunto original de plantas y animales con aproximadamente la misma población que antes. En Chile son muy pocas las investigaciones que hay en cuanto a restauración ecológicas post-fuego, la mayoría son con financiamiento extranjero y de empresas privadas (Fernández, 2009). 7 3. DISEÑO DE INVESTIGACIÓN 3.1 Antecedentes del área de estudio Corresponde al fundo “Las Cañas” ubicado en el sector de Pindapulli ubicado entre los 42º17’ S y 73º42’O con una altitud de 110 m snm, el predio se encuentra situado en el borde de la ruta 5 Sur, perteneciente a la comuna de Dalcahue, provincia de Chiloé, Décima Región de Los Lagos. Ruta 5 sur Camino secundario Figura1: Ubicación del área estudio en la Isla de Chiloé. El territorio comprendido por el Archipiélago de Chiloé, posee un clima definido como de tendencia oceánica, húmeda y templada. El régimen pluviométrico, posee características mediterráneas con máximos de lluvias en invierno pero normalmente con ausencia de período seco estival (Hormazábal, 2006). Se caracteriza por presentar precipitaciones todo el año entre los 2.000 y 3.000 mm anuales. La amplitud térmica anual es de 9,6º C, con 17º C en el mes más cálido que corresponde a enero y el mes más frío julio (Valenzuela, 2004). Los suelos de la isla grande de Chiloé e islas adyacentes derivan en su totalidad de cenizas volcánicas evolucionadas bajo condiciones excesivas de humedad. Las cenizas son en gran parte de naturaleza ácida, principalmente riolíticas, se han depositado en estratos de espesor variable, pero fácilmente reconocibles. Todos los suelos muestran en común una banda de pómez más gruesa, que se presenta a una profundidad máxima de 70 cm en los suelos más profundos y alrededor de 50 cm en 8 los suelos más delgados. Esta banda no existe en la mayor parte de los suelos ñadis (Hormazábal, 2006). La zona estudiada presenta suelos ñadis, que se caracterizan por ser delgados, anegados sólo en invierno y muy secos en verano. Constituyen biótopos extremos, debido a la presencia de una capa de fierrillo impermeable que se forma entre el suelo orgánico y el sustrato de ripio. Forman una franja continua en la Depresión Intermedia del centro-sur de Chile. El paisaje de los suelos ñadi está formado por una gran cantidad de comunidades vegetales primarias y secundarias (CONAMA, 2008). 3.2 Metodología de muestreo 3.2.1 Delimitación del sector de estudio Por medio de fotografías aéreas SAF 2005 (F34336) a escala 1:70.000 y el programa ARCVIEW 3.2 se delimitó el área quemada. Para representar la vegetación se usó como base la metodología desarrollada por el Centro de Estudios Fitosociológicos y Ecológicos L. Emberger, conocida como Carta de Ocupación de Tierras (COT). La idea de esta metodología es proporcionar una representación lo más objetiva posible de la vegetación en su estado actual. Al fotointerpretar el área se clasificó en tres categorías de usos con sus respectivas subcategorías y se obtuvo la superficie de cada una. Cuadro 1: Categorías y superficies definidas en el área de estudio. Código Categoría de uso Superficie (ha) 1 1.1 3 3.1 3.3 3.4 4 4.1 4.1.1 Área urbana e industrial Zona industrial Praderas y Matorrales Praderas Matorral Matorral arborescente Bosques Plantaciones Plantación joven 2 22 138 38 9 En este estudio se trabajará con los usos Matorral (E1) y Matorral arborescente (E2), ya que estos no están intervenidos y así se puede cumplir con los objetivos. Estos estratos fueron comprobados en terreno mediante un formulario. 9 3.2.2 Premuestreo y diseño de unidades muestrales El premuestreo se realizó en el estrato Matorral y Matorral arborescente, donde se realizaron 10 parcelas al azar de 4 m2 (2x2 m) en esta área se contabilizó la regeneración arbórea. Derivado del premuestreo se estimó el número de unidades muestrales para cada estrato. n= t2 * CV%2 / E%2 Considerando: Se asume un error de 15 % Se asume un t = 2 CV: es el coeficiente de variación (%) del número de plantas. El número de unidades muestrales arrojó que para el estrato Matorral se deben realizar 38 unidades y para el estrato Matorral arborescente 16 unidades las que se distribuyen de forma sistemática. Figura 2. Distribución de las unidades muéstrales para cada estrato. 10 Estas unidades serán de 4 m2 (2x2 m) distribuidas sistemáticamente en red cuadrada con un espaciamiento de 159 m. Se escogió este tipo de muestreo porque asegura una mejor representación de la variabilidad poblacional ya que las muestras son distribuidas sobre toda la superficie. Por lo tanto, no existen áreas que no se encuentren representadas. Además esta zona es de fácil acceso para la actividad en terreno. Todas las parcelas fueron geo-referenciadas por medio de GPS (Global Position System), registrando coordenadas UTM y altitud de cada parcela establecida. 3.2 Patrón de ocupación de los estratos matorral y matorral arborescente. Para el uso del suelo circundante se efectuó una descripción de los predios que rodean al área quemada como por ejemplo, praderas para uso ganadero y agrícola, renovales, bosque adulto y plantaciones. 3.2.3 Evaluación de la composición florística. En el área de estudio se describió la composición florística para realizar la comparación de los estratos Matorral y Matorral arborescente. Esto se realizó por medio de coberturas medias observadas en terreno. La composición florística se dividió según formas de crecimiento para cada especie. Las formas de crecimiento fueron: arbórea, arbustiva, hierbas, helechos, musgos y líquenes. Para este punto se contó con libros de flora que ayudaron a identificar las especies desconocidas las cuales fueron herborizadas. Con la finalidad de estimar la riqueza y cobertura de especies en el sotobosque y la densidad de regeneración arbórea en cada parcela de regeneración, se determinó la cobertura de acuerdo a la escala de abundancia-dominancia de Braun-Blanquet. Cuadro 2: Presencia y cobertura vegetacional según Braun-Blanquet (1981) Coberturas % Graduación 100 – 75 75 – 50 50 – 25 25 – 5 5-1 <1 5 4 3 2 1 + Punto medio del rango de Cobertura % 87,5 62,5 37,5 15 3 0,5 Para determinar la dominancia de las especies y el grado de heterogeneidad, se calculó el “índice de valor de importancia” de las especies de acuerdo a la forma de crecimiento, basado en la suma de la frecuencia relativa con la cobertura relativa. 11 Por medio del Índice de Margalef (DMg) se representa la riqueza de especies en un sentido clásico, en función del número total de individuos por muestreo. Para determinar la riqueza específica del área de estudio en relación a las especies vegetales se consideró valores inferiores a 2,0 como zonas de baja diversidad y valores superiores a 5,0 como indicativos de alta diversidad. La fórmula utilizada para el cálculo es: d = (S – 1) / Log N Donde: S = nº de especies N = nº total de individuos 3.2.4 Regeneración arbórea y crecimiento en altura Se cuantificó la regeneración arbórea en las parcelas de 4 m2 y esta se clasificó en categorías de altura total, medidas desde la base al ápice de la planta en los siguientes rangos; ≤20 cm, 21-50 cm, 51-100 cm, 101-150 cm y 151-200 cm, estos datos se llevaron a una tabla, para obtener la densidad total por especie. Para la regeneración arbórea se evaluó visualmente la presencia de algún tipo de daño, tanto como ramoneo o daño de algún agente patógeno. Para estimar la regeneración de Pilgerodendron uviferum, se escogieron 3 individuos que sobrevivieron al incendio y en un radio de 10 m entorno al punto de muestreo se contabilizó y midió la altura de regeneración (figura 3). Figura 3. Diseño de unidad muestral para regeneración de P. uviferum Se dividió el radio en 2 partes iguales para de esta forma evaluar a qué distancia hay una mayor regeneración de la especie. Se analizaron las principales amenazas a las que está expuesta el área, através de observaciones efectuadas en terreno. 12 4. RESULTADOS Y DISCUSIÓN 4.1 Descripción del estrato y su patrón de uso. 4.1.1 Descripción estrato Matorral Este uso se presenta en 138 hectáreas aproximadamente es un terreno plano que registra una altura de 110 m snm, en su interior se encuentran parches que forman el estrato Matorral arborescente. Por el norte hay una mezcla entre praderas con ganado y de uso industrial para la extracción de áridos. Por el este lo rodea bosque adulto del TFSV el cual no se alcanzó a quemar, ya que la brigada de incendios forestales de la provincia de Chiloé realizó cortafuegos los que aún se evidencian en terreno, por el oeste el predio colinda con una plantación de Eucalyptus nitens de 6 y 2 años y por el sur existe un río que sirvió de cortafuego. Figura 4. Vista general del estrato matorral. 4.1.1 Descripción Matorral arborescente Este uso tiene una superficie total de 38 hectáreas que en su gran mayoría se ubican como parches dentro del estrato matorral, se caracteriza por presentar individuos con altura superior a 2 metros que permanecen en pie y sobrevivieron al incendio, una característica de los incendios es que varían su severidad e intensidad en una misma área afectada. Circundante a estos parches podemos diferenciar varios usos, por el Norte y Este existe bosque adulto del TFSV que se separa de este estrato por los cortafuegos, en la parte Oeste se encuentran plantaciones de E. nitens. 13 Figura 5. Vista general del estrato matorral arborescente. 4.2 Composición florística 4.2.1 Estrato matorral La diversidad de plantas encontradas en el estrato matorral (E1) registra un total de treinta y cinco especies cuyas frecuencias relativas y coberturas se observan en el cuadro 3. En la categoría arbórea se registraron ocho especies entre ellas Nothofagus antarctica presenta el valor de importancia más alto (8,7%) seguida de Nothofagus dombeyi que alcanza un valor de importancia de 5,4%. La especie Pilgerodendron uviferum presenta un valor de importancia de 4,3%, mientras que para Amomyrtus luma y Eucryphia cordifolia el valor de importancia es 2,7%. Se registraron diez especies arbustivas, siendo Gaultheria mucronata y Gaultheria sp. las especies que dominan a nivel de sotobosque sumando un valor de importancia de 26 %. La sigue las mirtácea Myrteola nummularia (10,9%). Destaca la presencia de Empetrum rubrum (8,5%), Ovidia pillo-pillo (7,7%) y Baccharis patagonica (7,3%). En cuanto a la forma de crecimiento herbáceo y helecho se registraron doce especies, siendo el helecho Gleichenia cryptocarpa y Blechnum penna-marina las que presentan el mayor valor de importancia de 10,7% y 10,2% respectivamente. De las herbáceas, Oreobolus obtusangulus la especie con el valor de importancia mayor (8%) seguida de Centella asiatica (6,7%). Se identificaron 5 especies en la forma de crecimiento musgos y líquenes. Siendo Sphagnum magellanicum la que registra el más alto valor de importancia con 17,8 y 14 una cobertura relativa de 10,9%. Se identificó en líquenes Cladonia sp. con un valor de 7,1%. El índice de Margalef presenta un valor de 6,1 indicando para el estrato matorral una alta diversidad de especies vegetales, posiblemente influenciada por los factores antropogénicos que afectaron el área. 4.2.2 Estrato matorral arborescente En el estrato matorral arborescente (E2) se registraron treinta y tres plantas de las diferentes categorías de crecimiento (cuadro 3). En la categoría arbórea se registraron once especies, entre ellas las que presenta el mayor valor de importancia es Nothofagus antarctica con 6,2 %, seguida por Drimys winteri (5,2%). Las especies Amomyrtus meli, Nothofagus dombeyi y Gevuina avellana presentaron el mismo valor (4,6%) siendo esta última la que presentó mayor cobertura promedio (20%). Para la forma de crecimiento arbustiva se registraron ocho especies, siendo Gaultheria mucronata la que presenta el valor de importancia más alto (11,6%), seguida de Tepualia stipularis (8,2%), Baccharis patagonica (7,9%) y la especie Chusquea quila presenta un 5,8 %. En estrato no se encontró Gaultheria sp ni Myoschilos oblonga, especies sólo presentes en el estrato matorral. En cuanto a la forma de crecimiento herbáceo y helecho se registraron once especies, siendo Nertera granadensis la que presenta el mayor valor de importancia 13,3% y la segunda en cobertura relativa (8,4%) para esta forma de crecimiento. La sigue Centella asiatica con un valor de 9,9% y la mayor cobertura relativa (9%). Se identificaron 4 musgos y un liquen, siendo Dicranoloma imponens la especie con mayor valor de importancia (13,4%) seguida del liquen Cladonia sp con un 11,2 % y la menor cobertura relativa (2,3%) para esta forma de crecimiento. 15 Cuadro 3. Composición florística de los estratos estudiados, matorral (E1) y matorral arborescente (E2). Se presentan los principales parámetros y valor de importancia considerando todas las parcelas de regeneración. Forma de Crecimiento Arbóreo Amomyrtus luma Amomyrtus meli Drimys winteri Eucryphia cordifolia Gevuina avellana Nothofagus antarctica Nothofagus dombeyi Nothofagus nitida Pilgerodendron uviferum Raukaua laetevirens Weinmannia trichosperma Arbustivo Baccharis patagonica Berberis microphylla Chusquea quila Empetrum rubrum Gaultheria mucronata Gaultheria sp. Myoschilos oblonga Myrteola nummularia Ovidia pillo-pillo Tepualia stipularis Campsidium valdivianum Nº parcelas Frecuencia ocurrencia (%) Cobertura promedio (%) Frecuencia Cobertura Valor de relativa (%) relativa (%) importancia (%) E1 E2 E1 E2 E1 E2 E1 E2 E1 E2 E1 E2 1 1 3 1 -16 8 -4 -1 1 3 5 1 2 1 4 1 1 1 3 2,7 2,7 8,1 2,7 -43,2 21,6 -10,8 -2,7 6,3 18,8 31,3 6,3 12,5 6,3 25 6,3 6,3 6,3 18,8 15 3 7 15 -16,4 14,8 -17,6 -3 15 15 7,8 15 20,3 37,5 9 15 3 3 7 0,4 0,4 1,2 0,4 -6,2 3,1 -1,5 -0,4 0,8 2,4 4,1 0,8 1,6 0,8 3,3 0,8 0,8 0,8 2,4 2,4 0,5 1,1 2,4 -2,6 2,3 -2,8 -0,5 2,2 2,2 1,1 2,2 2,9 5,4 1,3 2,2 0,4 0,4 1,0 2,7 0,9 2,3 2,7 -8,7 5,4 -4,3 -0,9 3,0 4,6 5,2 3,0 4,6 6,2 4,6 3,0 1,2 1,2 3,5 13 3 3 11 25 5 1 21 8 4 6 2 4 2 10 --5 6 5 * 35,1 8,1 8,1 29,7 67,6 13,5 2,7 56,8 21,6 10,8 37,5 12,5 25 12,5 62,5 --31,3 37,5 31,3 14,8 22,5 22,5 27,4 30,5 24,7 3 18,2 29,4 14,6 20,9 9 17,6 9 24,2 --14,7 10,5 28,5 5,0 1,2 1,2 4,2 9,6 1,9 0,4 8,1 3,1 1,5 4,9 1,6 3,3 1,6 8,1 --4,1 4,9 4,1 2,3 3,5 3,5 4,3 4,8 3,9 0,5 2,9 4,6 2,3 3,0 1,3 2,5 1,3 3,5 --2,1 1,5 4,1 7,3 4,7 4,7 8,5 14,4 5,8 0,9 10,9 7,7 3,8 7,9 2,9 5,8 2,9 11,6 --6,2 6,4 8,2 * especie presente cerca de la parcela continúa 17 Continuación cuadro 3. Composición florística de los estratos estudiados, matorral (E1) y matorral arborescente (E2). Se presentan los principales parámetros y valor de importancia considerando todas las parcelas de regeneración. Forma de Crecimiento Nº parcelas Frecuencia ocurrencia (%) Cobertura Frecuencia Cobertura promedio (%) relativa (%) relativa (%) Valor de importancia (%) E1 E2 E1 E2 E1 E2 E1 E2 E1 E2 E1 E2 2 8 18 3 6 4 16 -5 11 -4 8 3 -* * --7 2 6 1 3 1 -4 5 6 4 -1 5,4 21,6 48,6 8,1 16,2 10,8 43,2 -13,5 29,7 -10,8 21,6 8,1 -- --43,8 12,5 37,5 6,3 18,8 6,3 -25 31,3 37,5 25 -6,3 3 8,8 21 22,8 14,8 32,8 29 -10,2 9,4 -14,6 31,6 7 -- --26,8 32,8 32,8 62,5 18,5 3 -9 12,6 58,3 26,3 -0,5 0,8 3,1 6,9 1,2 2,3 1,5 6,2 -1,9 4,2 -1,5 3,1 1,2 -- --5,7 1,6 4,9 0,8 2,4 0,8 -3,3 4,1 4,9 3,3 -0,8 0,5 1,4 3,3 3,6 2,3 5,2 4,6 -1,6 1,5 -2,3 5,0 1,1 -- --3,9 4,7 4,7 9,0 2,7 0,4 0,0 1,3 1,8 8,4 3,8 -0,1 1,2 4,5 10,2 4,7 4,6 6,7 10,7 -3,5 5,7 -3,8 8,0 2,3 -- --9,6 6,4 9,6 9,9 5,1 1,2 0,0 4,6 5,9 13,3 7,1 -0,9 5 18 3 5 12 1 8 --11 13,5 48,6 8,1 13,5 32,4 6,3 50 --68,8 3 69,4 22,5 21,6 15,6 62,5 47,5 --15,7 1,9 6,9 1,2 1,9 4,6 0,8 6,5 --8,9 0,5 10,9 3,5 3,4 2,5 9,0 6,9 --2,3 2,4 17,8 4,7 5,3 7,1 9,9 13,4 --11,2 total parcelas 260 * especie presente cerca de la parcela 123 702,7 768,8 636,5 690,8 100 100 100 100 200 200 Herbáceo y helecho Acaena ovalifolia Blechnum chilense Blechnum penna-marina Brachiaria sp. Carex sp. Centella asiatica Gleichenia cryptocarpa Gunnera trinctoria Juncus microcephalus Juncus procerus Lycopodium paniculatum Nertera granadensis Oreobolus obtusangulus Schizaea fistulosa Taraxacum officinalis Rubus geoides Blechnum magellanicum Musgos y líquenes Dicranoloma imponens Sphagnum magellanicum Sphagnum sp. Racomitrium sp. Cladonia sp. 18 La estimación del índice de diversidad de Margalef entrega como resultado 6,8; lo cual indica una alta diversidad para este estrato. 4.3 Regeneración arbórea 4.3.1 Regeneración estrato Matorral La regeneración arbórea se ilustra en el cuadro 4, para el estrato matorral (E1) se registraron ocho especies con un total 3243 plantas por hectárea (pl/ha), siendo N. antarctica la especie más abundante con 1.486 pl/ha (46%), también se presenta en todas las categorías de altura y con mayor densidad en el rango de altura 150 a 200 cm. La totalidad de la regeneración arbórea se encuentra sobre sustrato compuesto por el musgo Sphagnum magellanicum. En la categoría de altura menor a 20 cm para el estrato matorral, se registró la menor densidad con 338 pl/ha (10%), pero es donde hay más diversidad con 5 especies. Para la categoría de 21 a 50 cm de altura la cantidad de plantas encontradas alcanzó a 811 pl/ha. En este caso la especie más abundante fue N. dombeyi con un 33%, seguida de N. antarctica y P. uviferum (25% y 17% respectivamente). Cuadro 2. Densidad y altura de plántulas de ambos estratos, matorral (E1) y matorral arborescente (E2) Se indica el número de individuos de cada especie por hectárea. Especie / estrato 1 A. luma A. meli D. winteri E. cordifolia G. avellana N. antarctica N. dombeyi N. nitida P. uviferum R. laetevirens W. trichosperma 2 135 68 68 E1 3 4 68 68 68 68 203 270 203 68 135 135 5 1 2 156 156 469 156 68 total 135 68 203 68 405 135 608 135 1486 608 469 135 135 608 156 68 156 68 313 156 1094 156 156 313 E2 3 156 156 156 4 156 156 5 156 313 156 156 156 313 total 313 625 781 469 313 625 1719 156 156 156 625 1: categorías de alturas (<20), 2: (21-50 cm), 3: (51-100 cm), 4: (101-150) y 5: (151-200) En la categoría 51 a 100 cm N. antarctica presenta la mayor densidad con 203 pl/ha, ésta es la categoría donde se registraron menor número de especies. Para el rango de alturas de 101 a 150 cm, lidera N. antarctica con 405 pl/ha, seguida de N. dombeyi. 19 4.2.1 Estrato matorral arborescente Para este estrato (E2) se registraron once especies con un total 5938 plantas por hectárea (pl/ha), siendo N. dombeyi la más abundante con 1.719 pl/ha (29%), se presenta sólo en las tres primeras categorías de altura. D. winteri es la segunda especie con mayor densidad con 781 pl/ha. En la categoría de altura menor a 20 cm, se registró una densidad con 1406 pl/ha equivalente al 24% de la densidad total del estrato. Liderando por especie N. dombeyi con 469 pl/ha. Para la categoría de 21 a 50 cm de altura la cantidad de plantas encontradas alcanzó a 2500 pl/ha donde se registró la densidad más alta (42%). N. dombeyi representa el 18% de la regeneración total. En la categoría 51 a 100 cm se encontraron tres especies todas obteniendo la misma densidad para N. antarctica, N. dombeyi y W. trichosperma (156 pl/ha). Para el rango de alturas de 101 a 150 cm son cuatro las especies con la misma densidad A. luma, D. winteri, G. avellana y N. antarctica (156 pl/ha). Para la categoría de altura (151 a 200 cm) se registra una densidad total de 938 pl/ha (16%), siendo A. meli y N. antarctica las especies con mayor presencia. Del total de parcelas realizadas la regeneración arbórea no presentó daño por ramoneo, ya que el área se encontraba excluida de ganado por ser muy pantanosa. Se encontró un individuo de N. antarctica de una altura de 150 cm, afectado por barrenador (se aprecio las galerías y posterior corte a una altura de 60 cm desde la base), además se observaron los mismos signos para otros individuos encontrados en el área. El conteo arrojó 47 individuos por hectárea o sea un 2% de la densidad total de N. antarctica (Anexo 4). Al registrar la regeneración que crece alrededor de los tres cipreses sobrevivientes al incendio, se contabilizó un promedio de 42 plantas de Ciprés, lo que equivale a 1336 pl/ha. La mayor cantidad se registró en el radio de 5 m con 30 plantas, que equivalen a 954 pl/ha o sea un 71% de la regeneración total de la parcela circular de radio 10 m. 20 5. DISCUSIÓN DE RESULTADOS 5.1 Dominancia y diversidad de especies La forma de crecimiento más característica de las especies de las tundras magallánicas es el cojín duro, abultado, constituido por diminutos individuos. Esta forma de vida está especialmente conformada por Oreobolus obtusangulus, también entre estos cojines crecen un primitivo helecho Schizaea fistulosa, y los arbustos enanos Myrteola nummularia (Villagrán, 2002). Según Villagrán (2002) en transectos realizados en Chiloé, Sphagnum habita en turberas o ñadis, cuyos pisos están cubiertos uniformemente por esta especie, algunas semi-sumergidas en pozones de agua. En los bordes húmedos y estacionalmente inundados se desarrollan vegas o mallines, dominados por Ciperáceas y Juncaceas con discretos manchones de Sphagnum. Los musgos como Sphagnum son plantas exitosas, tienen facilidad para propagarse y obtener los nutrientes necesarios del agua de lluvia o del rocío, son colonizadores en ñadis y suelos desnudos pobres en nutrientes. Como acumulan materia orgánica, facilitan el asentamiento de plantas vasculares. Cumplen importantes roles ecológicos puesto que evitan la erosión del suelo, fijan en sus estructuras enormes cantidades de C y N, ayudan a mantener una significativa carga de humedad necesaria para la subsistencia de las especies, evitando así el estrés hídrico, y sirven de vivienda, cobijo y alimentación a innumerables vertebrados e invertebrados (CONAMA, 2008). Díaz (2005) señala que Baccharis patagonica, se caracteriza por ser una especie que crece en lugares perturbados, generalmente producto del fuego. Según Moreno (2007) en estudio realizado en diferentes sitios en Chiloé, el sotobosque está compuesto por especies tales como Oreobulus obtusangulus, Juncus procerus y Myrteola nummularia que están bien adaptadas a los ambientes con excesiva humedad e incluso aquellos con anegamiento temporal, estas especies podrían inhibir o retardar el establecimiento en los primeros años de P. uviferum y otros árboles. En diferentes muestreos realizados en Chiloé (Villagrán, 2002; Díaz, 2005) señalan que el desarrollo de densos matorrales o chaurales dominados por G. mucronata es común en la isla, colinas en torno a depresiones ocupadas por turberas o en los sitios deforestados y abandonados. En la cubierta herbácea del piso de estas formaciones crecen densos céspedes de musgos tales como Dicranoloma sp. En Chiloé es común en los tepuales (Tepualia stipularis) encontrar P. uviferum especies adaptadas a climas fríos y de mal drenaje, asociados a Nothofagus nitida y D. winteri. En los mallines y en los ñadis dominados por el musgo de las turberas especies de Sphagnum, se desarrollan densas poblaciones de Blechnum pennamarina, Blechnum chilense y Gleichenia cryptocarpa. En los sitios abiertos y/o 21 perturbados por el hombre se desarrollan también asociaciones características de helechos. Así por ejemplo en las praderas abandonadas abundan Blechnum pennamarina y Gleichenia cryptocarpa (Villagrán, 2002; Díaz, 2005). Villagrán (2002) y Donoso (2006) señalan que es común encontrar en áreas muy húmedas (ñadis) la presencia de N. antarctica estos son suelos muy secos en verano y anegado en el invierno. Esta especie presenta gran resistencia a estrés hídrico, viento y sequedad. Por esta razón se le encuentra en diversas formas de crecimiento, siendo principalmente su reproducción vegetativa. Después de incendios en la estepa de la Patagonia se produce rebrote de las raíces de esta especie. Especie común en los Tipos Forestales; Lenga, Araucaria, Ciprés de las Guaitecas y Alerce. Al evaluar la regeneración total de P. uviferum para ambos estratos hasta los 50 cm de altura presentó solamente un 4% de la regeneración total (359 pl/ha). Esta resultó ser la gran mayoría de origen vegetativo lo que está acorde con lo normal observado en otros estudios (Cruz y Lara, 1981; Bannister, 2004). P. uviferum se presenta en todas las categorías de altura lo que demuestra su continua regeneración, aunque en el estrato matorral y con altura menor a 20 cm se encontró una escasa regeneración. Al igual que en el estudio de Soto (2004) y Moreno (2007) en el área se encuentra la presencia de Tepú el cual indicaría que las condiciones del suelo son menos restrictivas para el establecimiento de especies más exigentes de sitio que P. uviferum, como G. avellana y D. winteri. Debido a su mayor tolerancia a la sombra y la humedad. Lo que se podría suponer que estas especies podrían desplazar a Ciprés como consecuencia de la disminución del régimen hídrico en el sector. Como también permitir la recuperación de un bosque con mayor diversidad de especies. Soto (2004) señala que la mayor abundancia de Ciprés se encuentra sobre un sustrato de Sphagnum, esto indicaría en forma positiva la regeneración. En los estratos estudiados el 100% de la regeneración de Ciprés estaba creciendo sobre este musgo. De la regeneración que crece alrededor de los cipreses sobrevivientes al incendio su gran mayoría se presenta mediante “acodos”; una de las características más comunes en cuanto a la regeneración de esta especie (Cruz y Lara, 1981). La regeneración de P. uviferum se ubicaban preferentemente agrupados en los sectores de peor drenaje y/o cercanos a algún Ciprés que sobrevivió al fuego (Bannister, 2004). Al existir una mayor diversidad de especies y mayor densidad de la regeneración arbórea en el estrato matorral arborescente, tiene relación al tipo de especies que se mantuvieron a pesar del incendio, también por ser el estrato que se encontraba más cercano a los bosques que no fueron afectados por el incendio, ya que estos pueden proporcionar de semillas, sombra y refugio para que las especies puedan regenerarse. En este estrato se encontraron tres especies más que en el estrato matorral (G. avellana, N. nitida y Raukaua laetevirens). 22 Cruz y Lara (1981) al estudiar la dinámica de ciprés en diferentes tipos de sitios, con mal drenaje, planos y relieve abrupto, concluyen que la sucesión primaria comienza en los sectores planos sin drenaje, donde las pioneras son los Sphagnum o gramíneas. Luego de la meteorización se han originado zonas de mejor drenaje donde el primer colonizador es Ciprés formando un bosques abierto, y presenta una estructura multietánea con densa regeneración. Una vez que se mejoran las condiciones de drenaje se presenta la oportunidad para que las especies más exigentes puedan acceden al sitio. Bannister (2004) indica que P. uviferum fue la especie arbórea que colonizó el área y que luego que se estableció al mejorar las condiciones de sitio, facilitó la llegada de las otras especies. Todo esto estaría demostrando que el modelo de dinámica sucesional propuesto por Cruz y Lara (1981) para este tipo de comunidad en Chiloé. Cruz y Lara (1981) mencionan que los suelos gley en que se desarrollan estas comunidades, se van modificando gradualmente y constituyen hábitat con menor humedad, donde Ciprés es gradualmente desplazado por Tepú, Coihue de Chiloé, Mañio Macho y Canelo. La especie arbórea más exitosa y colonizadora en esta área es N. antarctica, presenta la densidad más alta, esto se debe a su capacidad de colonizar sitios perturbados, pobres y con alta humedad. Que esta especie este siendo afectada por un patógeno puede ser en respuesta a la fragmentación que ocurrió en el área, ya que en los fragmentos de bosque existe una mayor cantidad de coleópteros nativos, aves y roedores respecto de la existencia en bosques más continuos (Bustamente, 2004). En observaciones realizadas en la Patagonia Austral señala que N. antarctica presenta en general una buena capacidad de recuperación ante perturbaciones como deforestación, volcanismos, avalanchas e incendios gracias a su capacidad de recuperación para tolerar condiciones extremas. La habilidad de esta especie para reproducirse vegetativamente, le permite rebrotar después de los incendios (Luebert, 2006). Díaz (2007) señala que en estos sitios sucesionales los bosques no sólo han sido quemados y madereados, sino que en la mayoría de los casos su recuperación ha estado fuertemente limitada por la continua presión ganadera. Por el contrario, Sphagnum al menos, podría facilitar la regeneración de la especie pionera E. coccineum. Otros factores limitantes, alternativos o adicionales a los ya citados, que explicarían el estancamiento sucesional podrían ser la limitada dispersión de semillas desde el bosque a los sitios abiertos y la baja disponibilidad de sustratos elevados por sobre el suelo anegado. Debido a que la distancia de dispersión de semillas de los árboles dominantes del bosque de Chiloé es limitada, los cambios más rápidos en la composición de especies ocurrirían en los bordes. En esta área la recuperación boscosa será liderada por de N. antarctica, aunque a un ritmo lento de crecimiento. Lo que más favorece a la especie es la exclusión del ganado. 23 Bannister (2004) señala que al quedar cipreses remanentes del incendio, se han desarrollado pequeños bosquetes, muy agrupados donde se puede ver una cierta recuperación del bosque original. 5.2 Amenazas y políticas para desarrollar restauración En predios colindantes que también corresponden al área quemada pero excluida del estudio, se apreció regeneración de Ciprés, aquí el sector está siendo drenado y sustituido por plantaciones exóticas. En el estudio de Soto (2004) se observó la misma situación donde plantaciones forestales de rápido crecimiento se encuentran hasta los mismos bordes del rodal, lo que afectaría el régimen hídrico y por ende la permanencia de Ciprés ya que son dependientes del agua. En Chiloè se ha plantado Eucalyptus nitens en lugares donde está creciendo Ciprés, una especie considerada “vulnerable”, resulta que estos bosquetes no superan los dos metros de altura, para el Decreto de Ley 701 estos no serían considerados árboles. Siendo que para este tipo forestal Soto (2004) encontró cipreses de 50 cm con una edad estimada de 25 años. En este caso el propietario necesita obtener ingresos a futuro, pero al plantar E. nitens, una especie que necesita alto régimen hídrico para su rápido crecimiento y los canales de drenaje que se hacen para eliminan de forma más rápida el agua, lo más probable es que el agua que había disponible para ciprés ya no se encuentre. Cercano al predio estudiado hay abundante Ulex europaeus (espinillo) que cada año es cortado por el municipio, una vez que se den las condiciones en el sector puede llegar a establecerse, y comenzar el repoblamiento del área. Soto (2004) señala que el ingreso de especies exóticas podría inhibir el establecimiento de especies. La extracción de Sphagnum artesanal que se ejecuta en el área de estudio, no se debe hacer de forma severa, ya que también ponen en riesgo la disminución del agua disponible. Existen estudios donde se señala el manejo sustentable del musgo permitiendo una regeneración que tardea entre 3 a 5 años. Soto (2004) menciona un sitio con escasa regeneración, la que se debería a la alteración del drenaje causadas por la matriz de uso intensivo, al cambio de uso del suelo y a la confección de obras que comprometen la geomorfología, en donde conservar las propiedades físico-químicas del suelo es fundamental para poder facilitar la recuperación de estos bosques. Szejner (2007) señala que el área de estudio al estar disectado por un camino, significa un cambio drástico en el drenaje del fragmento presentando grandes cambios en el flujo de agua, el cual es de vital importancia para la persistencia de Ciprés. En ensayos de restauración en la isla de Chiloé (41º 53’S y 73º 40’W) con Pilgerodendron uviferum, se ha registrado una supervivencia entre 79 y 100% durante el primer año de la plantación (C. Smith-Ramírez, Fundación Senda Darwin). Lo que sería un indicador de que en estas áreas si se puede implementar una restauración ecológica, y esto sería con la finalidad de unir por medio de corredores 24 biológicos las comunidades de cipreses que se están formando. Con respecto a la nueva Ley de Bosque (Num. 20.283) de las actividades que son bonificadas esta la revegetación “acción de repoblar con vegetación nativa o autóctona, mediante manejo de la regeneración natural, siembra o plantación, un terreno. Tratándose de siembra o plantación se deben utilizar semillas o propagulos de las poblaciones silvestres más próximas al área a manejar”, pero no se específica como implementarla para los diferentes tipos forestales, mediante esta actividad bonificable se pueden plantar 300 plantas/ha. Lo ideal sería plantar 400 pla/ha y así comenzar a restaurar el área2. Otra actividad bonificable sería “establecimiento de conexiones entre áreas de formaciones xerófitas de alto valor ecológico o bosques nativos de preservación”, la cual puede servir de corredores biológicos. La incorporación de consideraciones de conservación de la biodiversidad en las prácticas de gestión en sectores como la agricultura, en Chile el Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP) trabaja en conjunto con la Corporación Nacional Forestal en la forestación que favorece a zonas ñadis y laderas pronunciadas, en Chiloé su gran mayoría es con especies exóticas y no con especies nativas, esto se debe al poco interés que tienen los propietarios. INDAP a través del Programa de Desarrollo Local (PRODESAL) ayuda a que propietarios disminuyan el uso de fertilizantes químicos. En Chiloé la gran mayoría de los pequeños propietarios agrícolas utiliza fertilizantes orgánicos por lo que el uso de fungicidas es sólo para algunas prácticas. No hay un programa que incluya a la biodiversidad como tema principal, ya que INDAP ve sólo situaciones a corto plazo3. La forma de cómo se debe concientizar a las personas sobre la importancia de la biodiversidad es a través de la educación, capacitaciones y lo más importante se deben destinar más recursos para investigaciones que tengan que ver con la restauración, ya que en Chile son demasiadas las áreas degradada que necesitan su pronta recuperación. ______________________________________________ 2 3 Juan Armesto, 2010. Fundación Senda Darwin, Ancud. “Comunicación personal” Chantal Jeldrez, 2010. INDAP- Quemchi. “Comunicación personal” 25 6. CONCLUSIONES A pesar que el área fue afectada por un incendio de severa intensidad, se verifica que hay una lenta recuperación del bosque. Nothofagus antarctica es una especie que coloniza rápida y densamente, aunque se vea afectada por algún otro agente de daño. El bosque de Pilgerodendron uviferum se recupera y mantiene el mismo tipo forestal, esto debido a la densidad que presenta, sobre 10 pl/ha para seguir siendo considerado del tipo forestal Ciprés de la Guaitecas, todos estos individuos se encontraban sobre el sustrato se Sphagnum. El estrato matorral arborescente presenta mayor índice de diversidad que el estrato matorral. Las amenazas a las que se exponen estas comunidades de Ciprés, donde se les está interrumpiendo las condiciones de sitio que necesitan para su permanencia, están siendo seriamente afectadas. Las leyes deberían especificar la forma de ejecutar alguna intervención, no se debe permitir las bonificaciones de plantaciones exóticas con altos requerimientos hídricos en zonas donde existan especies vulnerables. Además de enfocar apoyo a actividades de restauración, por estar los bosques susceptibles a los incendios forestales. Entregar mayor información sobre educación ambiental a pequeños propietarios, replanteando la necesidad de conseguir reestructurar las políticas para establecer mejores estrategias de restauración. 26 7. BIBLIOGRAFÍA Armesto, J. (2005). Taller; Diseño y análisis de experimentos de restauración ecológica: Experiencias lationamericas y proyecciones futuras. Universidad Austral de Chile. Valdivia (Chile). 6 p. Bannister, J. 2004. Estado de conservación de Pilgerodendron uviferum (D.Don) Florin, en el área norte de la Cordillera de Pirulil, Isla Grande de Chiloé, X región. Trabajo de titulación para Ing. Forestal. Valdivia (Chile), Universidad Austral de Chile, Facultad de Ciencias forestales. 47 p. Bannister. J.; C. Donoso; B. Escobar; A. Lara; A. Premoli; A. Rovere; D. Soto. 2006a. Pilgerodendron uviferum. In Donoso, C. ed. Especies arbóreas de los Bosques Templados de Chile y Argentina. Autoecología. Valdivia (Chile). Marisa Cúneo Ediciones. p. 82-91. Bosnich, J. 2005. 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According to recorded information regarding the vegetation which existed, in the effected plots areas, which were 4m2,all areas had a discrete inventory of flower composition related on its way of life, prevalence, tree regeneration height, predominance’s and variety of species. The estimated diversity indices from Margalef illustrate a major flower composition in the tree Thicket stratum (6,8), that would indicate a higher species diversity for this tree stratum. Conversely, the tree regeneration for a Thicket is lower however if one compares it to the amount from Margalef, we could also say that due to height (6,1). Tree stratums present a tree regeneration for a thicket of 3243 seedling/hectares, being N. antarctica the specie with a major density of 46% is followed by N. dombeyi and P. uviferum, both with 19%. P. uviferum is recorded to exist in all height categories. For the Tree thicket of 3243 seedling/hectares the most prevalent is N. dombeyi with a 29%, and a very minimal presence of P. uviferum with 3%. Five P. uviferum tree stratums resisted the fire, they were entered and classified alongside the new-growth vegetation from the same species, which grew to a 10 m radius. This renders an average of 42 plants (1336 seedling/hectares), just slightly larger than the amount of the thicket stratum regeneration. The recovery of the forest has been the same kind that existed before, due to the successful regeneration of both density and species diversity. Key words: Pilgerodendron uviferum, regeneration post-fire. Chiloé Island. Anexo 2 Formulas para los parámetros de la composición florística Cobertura relativa = _ Cobertura de una especie Cobertura de todas las especies Frecuencia absoluta = _ Nº parcelas ocurrencia de la especie Total pareclas Frecuencia relativa = _ x 100 x 100 Nº puntos ocurrencia de la especie x 100 Nº puntos ocurrencia de todas las especies Valor de importancia = ∑ (cobertura relativa + frecuencia relativa) • • • • • • Densidad: número de individuos de una especie por unidad de área. Densidad relativa: densidad de una especie referida a la densidad de todas las especies del área. Frecuencia: número de muestras en las que se encuentra una especie. Frecuencia relativa: la frecuencia de una especie con referencia a la frecuencia total de todas las especies. Dominancia: la cobertura de todos los individuos de una especie, medida en unidades de superficie. Dominancia relativa: la dominancia de una especie, referida a la dominancia de todas las especies.[1] Anexo 3 Área de las comunidades de ciprés Comunidades de Ciprés Área total quemada Anexo 4 Fotografías Figura 1. Estrato matorral, regeneración de N. antarctica y N. dombeyi. . Figura 2. Restos de troncos Figura 3. Ciprés adulto que sobrevivió al incendio. Figura 4. Individuo de N. antarctica. Figura 5. Regeneración de W. trichosperma creciendo junto a G.mucronata. Figura 6. Regeneración de N. antarctica sobre sutrato de Sphagnum magellanicum. b) a) Figura 7. a) Ciprés regenerando en un área saturada de agua b) Regeneración de Ciprés sobre un sustrato afectado por el incendio. 2,5 cm Figura 8. Individuos de N. antarctica atacados por algún barrenador. Figura 9. Sector colindante al área de estudio, extracción de áridos. En el borde se apreciaron individuos de Ciprés de las Guaitecas. Figura 10.Evidencia de la extracción artesanal de Sphagnum.