estando a la mesa, tomó el pan

3. Reconocemos al Señor
I. En base a lo que hemos leído y reflexionado, respondemos:
- ¿Qué hemos descubierto o redescubierto acerca de la misa?
- ¿Qué valor le doy a Jesús que se entrega en la Eucaristía?
- ¿Qué le podemos decir a Nahuel? (ver diálogo del grupo Estrella de Belén"
Encuentros formativos de preparación para Invasión 2005
II. Otras actividades para compartir en grupo
Los invitamos a reflexionar sobre algunas las oraciones de la misa. ¡Cuánto expresamos en pocas
palabras!
a) ¿Qué oración de la misa se compone con Is 6, 3 y Mt 21, 9? ¿Y con Jn 1, 29?
b) En la presentación de los dones, el sacerdote nos invita a orar:“Oren hermanos para que ...” y los
fieles respondemos: “El Señor reciba ...” . Recordemos este diálogo y meditemos cada palabra.
III. Momento de oración
La oración la realizamos todos sentados alrededor de una mesa. En la cabecera de la mesa, colocamos una
imagen de Jesús crucificado y otra de Jesús resucitado.
- Cantamos: “No hay mayor amor”
- Necesitamos de los alimentos para tener vida, para crecer, para estar sanos. Pero uno sólo es el alimento
que nos da vida en plenitud, que colma todas nuestras esperanzas, que llena de luz nuestra existencia, que
nos llena de Dios.
- Un lector proclama Juan 6, 51
- Un ratito de silencio, se puede volver a leer la lectura en forma pausada,
dejando que cada palabra empape el corazón.
- Jesús es nuestro alimento, Él es nuestro pan que sacia nuestra hambre de vida.
- Pensemos cuáles son nuestras necesidades y pidámosle que nos dé lo que
precisamos. Diciendo:
Jesús dame el pan de ... para ...
(Jesús dame el pan de la paciencia para tolerar a los defectos de los demás)
- En acción de gracias porque el Padre envió a Jesucristo para que siempre esté a nuestro lado, rezamos:
Padre nuestro...
- Cantamos “Pan de nuestra juventud”
Invasión de Pueblos
9, 10 y 11 de setiembre de 2005
Parroquia Sagrado Corazón de Jesús
Martínez Ituño 266 – 7163 Gral. Madariaga
Tel./fax: (02267) 42 5133
pscorazon@telpin.com.ar invasiondepueblos@yahoo.com.ar
Encuentro 3: ...estando a la mesa, tomó el pan...
* Cuando estamos listos, comenzamos el encuentro con esta oración.
- En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén
- Canto (a elección)
- Rezamos la oración de la próxima Invasión:
Padre nuestro, Creador del cielo y de la tierra,
te agradecemos haber revelado tu voluntad a los pobres y sencillos.
Envíanos con Jesús, Señor de la historia y Luz de las naciones, al Espíritu Santo.
Que Él nos conceda un verdadero espíritu de adoración,
para saber reconocer el Mesías al partir el pan y construir cada día su Reino.
Junto a María, Estrella de la Evangelización. Amén.
- Le pedimos al Espíritu Santo que nos dé el gusto por la misa, que nos ayude a estar agradecidos
y atentos por las maravillas que Dios hace en cada misa.
- Gloria al Padre, y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los
siglos de los siglos. Amén
- Canto (a elección)
1. Ésta es la vida del grupo
* Reunión del grupo “Estrella de Belén”, un sábado cualquiera.
Amparo: Cuando comulgo me siento ... no sé cómo explicarlo ... paz ... una cosa hermosa ...
Jesica: Yo hace mucho que no comulgo.
Amparo: Por?
Jesica: No sé, no me siento preparada ... hace mucho que no me confieso ... como que no me siento en
condiciones para comulgar.
Nahuel: Yo también hace mucho que no me confieso, creo que después de la Primera Comunión me
confesé y después ... nunca más... pero tengo necesidad de comulgar y me pongo la fila y comulgo ... no
sé si está bien ... pero yo lo siento así.
Julián: Hasta ahora veo muchas dudas. Me pregunto si tienen alguna certeza.
Para dialogar:
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En nuestro grupo, ¿cómo vivimos la comunión eucarística?
¿Cuáles son las dudas y cuáles las certezas acerca de la comunión?
2. Ésta es la fe de la Iglesia
Jesús compartía comidas con sus discípulos, con sus amigos, iba a la casa de todos
los que lo invitaban, justos y pecadores.
Entre todas las comidas, hay una que se destaca: la Última Cena
Leemos el relato de la Cena de Jesús en Primera Carta del apóstol san Pablo
a los corintios : 1 Cor 11, 23 – 26
¿Cuáles son los gestos y las palabras de Jesús durante esta Cena?
¿Cuándo volvemos a ver y escuchar estos gestos y palabra? ¿Quién los
realiza?
Como ya vimos en el encuentro 1, los primeros cristianos fueron fieles a este pedido de Jesús y realizaron
la última cena, que llamaban fracción del pan ...
Comentamos el siguiente texto a medida que lo vamos leyendo.
La celebración de la Misa
 En la liturgia de la Eucaristía reproducimos ritualmente los tres gestos que Jesús hizo en la última
Cena.
1) tomó pan .......................... presentación de los dones
2) dio gracias ........................ plegaria eucarística
3) lo partió y lo dio .............. rito de comunión
Veamos cada uno de estos momentos
 Presentación de los dones. Con los dones del pan y el vino, toda la comunidad se presenta a
Dios tal cual somos, con nuestros problemas, vivencias, personas que queremos encomendar,
proyectos, anhelos, etc. para que Dios los complete y transforme. El sacerdote prepara los dones
y los presenta a Dios mediante oraciones en las que le pide que convierta el pan y el vino en el
Cuerpo y Sangre de Jesús. En la presentación de los dones se prepara la mesa del altar.
 Colecta. Es compartir lo que tenemos, nos desprendemos de algo para ofrecerlo a la comunidad.
 Plegaria eucarística. Es la gran oración de bendición. Es el centro de toda la misa. Durante la
plegaria estamos de pie (salvo en la consagración) para expresar que la oración no es sólo del
sacerdote sino de todos, es nuestra plegaria para celebrar al Señor. Hay distintas plegarias y el
sacerdote puede usar una u otras. Todas constan de:
- El prefacio. Es una acción de gracias y alabanza que comienza con el saludo del sacerdote (“El
Señor esté con ustedes”). Es justo y necesario dar gracias a Dios Padre, siempre y en todo lugar,
no sólo en la misa sino en toda nuestra vida. Luego aclamamos al Señor cantando el Santo. Es un
himno celestial que cantan los ángeles y los santos en la presencia de Dios. En el altar nos
unimos a la Iglesia que está en el cielo.
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- La epíclesis. El Espíritu Santo está presente durante toda la misa pero en este momento se
destaca su presencia. El sacerdote invoca al Espíritu Santo para que los dones de pan y vino sean
consagrados, en este momento pone la manos sobres los dones y los fieles nos arrodillamos,
como gesto de adoración y humildad.
- El relato de la institución de la eucaristía. En este momento contemplamos, como si
fuéramos los mismos discípulos, los gestos y las palabras de Jesús: “Esto es mi Cuerpo”, “Esto
es mi Sangre”. Después de la Consagración, el sacerdote aclama: “¡Este es el Misterio de la fe!”
y respondemos “¡Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección! ¡Ven Señor Jesús!” De
esta manera se expresa la íntima conexión entre la Cena de Jesús, su muerte y resurrección y la
Misa que celebramos.
- La anámnesis (memoria). Es una oración en la que se hace memoria de lo que Dios ha hecho
por nosotros. No sólo recordamos sino que Jesús nos hace participar de su muerte y resurrección.
Toda la asamblea ofrece al Padre la mejor de todas la ofrendas: Jesucristo muerto y resucitado.
Por esto la misa es el acto de culto más perfecto y la oración más valiosa. Luego invocamos
nuevamente al Espíritu Santo para que realice la unidad de los hermanos.
- Oraciones de intercesión. Expresamos el amor fraterno y la comunión con toda la Iglesia (la
del Cielo, la del purgatorio y la que peregrina en la tierra)
- Alabanza final. El sacerdote toma el Cuerpo y la Sangre de Jesús y los eleva : “Por el él, con él
y en él, a ti, Dios Padre omnipotente, todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos”
Contemplamos con amor a Jesús que se entrega por nosotros en la eucaristías y respondemos con
un fuerte Amén. Este amén es un acto de fe muy grande.
El padrenuestro. Expresamos la comunión con Dios rezando el padrenuestro. Tengamos
presente que no se dice el amén pues se continua con la súplica del sacerdote: “Líbranos de
todos los males Señor, y concédenos la paz ...”
El saludo de la paz. Expresamos la comunión con los hermanos. Es un gesto que nos invita a
vivir reconciliados con los hermanos. En tiempos de Jesús, el saludo de la paz era como una
bendición, desearle que le vaya bien.
Partir el pan. Luego el sacerdote realiza el gesto de la fracción del pan (simboliza a Cristo que
se parte para todos podamos recibirlo) mientras miramos a Jesús y cantamos “Cordero de Dios
que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros”.
Exposición de la hostia y oración. El sacerdote eleva la hostia para ofrecerlo a los fieles.
Nuestra mirada está en él, no es un pedazo de pan, es realmente Jesús. Con fe decimos: “Señor,
no soy digno de que entres en mi casa pero una palabra tuya bastará para sanarme”.
Comunión. En procesión, nos acercamos al altar a comer a Jesús. Jesucristo nos ama al extremo
de dejarse comer por nosotros. En la eucaristía nos unimos a Jesús entero, con toda su fuerza,
con su amor, con su corazón humano y con su gloria divina. El ministro muestra la hostia : “El
Cuerpo de Cristo” – “Amén” , respondemos. Este amén es personal.
Oración después de la comunión. El sacerdote pronuncia una oración pidiendo a Dios, que la
Eucaristía que hemos recibido de frutos de unidad y caridad en la vida concreta.