GRADO III (5ª SESION) MODULO 2º SOCIALES UNIDAD 7. LIBERALISMO E INDUSTRIA (siglo XIX) 1. LAS REVOLUCIONES LIBERALES A finales del siglo XVIII la crítica de los ilustrados comenzaron a minar las bases políticas y sociales en que se asentaba el Antiguo Régimen (absolutismo). Sin embargo, para acabar definitivamente con él hizo falta la violencia de las revoluciones. Estas revoluciones, que tienen lugar entre finales del siglo XVIII y mediados del XIX, se denominan liberales porque pretenden acabar con el absolutismo e implantar un régimen de participación de los ciudadanos y, también, burguesas, ya que fue la burguesía, consciente de su poder económico y defensora de las ideas ilustradas, la que las protagonizó. Revoluciones liberales La revolución industrial 1750-1914 Revolución industrial 2 Independencia de Estados Unidos Revolución liberal burguesa Movimiento obrero siglo XIX La libertad guiando al pueblo. Este cuadro fue pintado por Delacroix en 1830. Cuando pintó este cuadro afirmo lo siguiente: He emprendido un tema moderno, una barricada, y si no he luchado por la patria, al menos pintaré para ella. Hay tres acontecimientos importantes que tienen lugar a finales del siglo XVIII y principios del XIX. Los tres son hechos determinantes que abren una nueva época en la historia del mundo El primero es la independencia de EEUU, el segundo es la Revolución Francesa, y el tercero son las guerras Napoleónicas. La independencia de Estados Unidos El primer país donde se produjo una revolución liberal fue en las colonias que Inglaterra poseía en la costa este de Norteamérica. Estas colonias junto con la declaración de independencia hicieron una declaración de derechos de los ciudadanos y se dotaron de una Constitución, conjunto de leyes fundamentales de la nación donde se recogen los principios políticos que defendían las ideas ilustradas, así como los derechos y deberes de los ciudadanos y la forma de gobierno elegida. Historia de la estatua de la libertad La Revolución francesa: La Revolución francesa ha sido el acontecimiento histórico más relevante de su época y se considera el verdadero umbral de la Edad Contemporánea. Luis XVI es condenado a morir en la guillotina Tuvo lugar el 1.789, cuando el rey francés Luís XVI convocó los Estados Generales (estamentos franceses) con el fin de aprobar nuevos impuestos dada la crisis económica que sufría Francia. El Tercer Estado (pueblo llano) pretendía que la reforma fiscal obligara a pagar impuestos a los estamentos, hasta ahora privilegiados, de la Nobleza y el Clero, y, al no conseguirlo se declaró en rebeldía autoproclamándose sus miembros representantes de la nación francesa y fundando la Asamblea Nacional con poder para decidir sobre las leyes y el futuro de Francia. La “Toma de la Bastilla” (cárcel política) por parte del pueblo de París supuso el apoyo popular a esta nueva Asamblea y fue el hecho más simbólico de la revolución. La revolución francesa Revolución francesa fin del absolutismo y nacimiento del constitucionalismo Tras una insurrección de los campesinos contra sus señores, la Asamblea nacional declaró abolidos los privilegios y derechos señoriales de la nobleza y del clero, con lo que desapareció la sociedad estamental. Entre la labor legislativa de esta primera Asamblea Nacional francesa contamos con la Declaración de derechos del Hombre y del Ciudadano (donde se recogían los derechos de libertad, propiedad e igualdad ante la ley), y la Constitución de 1.791 por la que Francia se constituía en una monarquía constitucional y se recogían los principios de soberanía nacional popular y división de poderes defendidos por los liberales. Danton Marat y Robespierre fueron tres de los impulsores de la revolución francesa y diputados radicales de la convención. Los tres murieron violentamente, Dantón y Robespierre, fueron guillotinados en 1794. Y Marat fue apuñalado en su bañera. En 1.792 la revolución se radicalizó y la Convención (nombre de la Asamblea Nacional) implantó una república como forma de gobierno e instaurando un régimen de terror (guillotina). Aunque la revolución francesa no tuvo un éxito inmediato, su espíritu se extenderá durante el siglo XIX por otros países europeos, a los que sirvió de modelo para desarrollar sus propias revoluciones liberales o burguesas. Este es el texto integro de la declaración de derechos humanos que aportó la revolución francesa Declaración de los derechos del hombre y del ciudadano. Los representantes del pueblo francés, constituidos en Asamblea Nacional, consideramos que la ignorancia, el olvido o el desprecio de los derechos del hombre, son las únicas causas de las desdichas públicas y de la corrupción de los gobiernos; por tal razón hemos resuelto exponer, en una declaración solemne, los derechos naturales, inalienables y sagrados del hombre, con el fin de que esta declaración, constantemente presente en todos los miembros del cuerpo social, les recuerde sin cesar, sus derechos y sus deberes, para que los actos de Poder Legislativo y del Poder Ejecutivo puedan ser, a cada instante, comparados como cualquier institución política siendo así más respetados; para que las reclamaciones de los ciudadanos, fundadas, desde ahora en adelante, sobre principios simples e incontestables, giren siempre en torno al mantenimiento de la Constitución y a la felicidad de todos. En consecuencia, la Asamblea Nacional, en presencia y bajo los auspicios del Ser Supremo, reconoce y declara los siguientes derechos del Hombre y del Ciudadano. Artículo 1º Los hombres nacen y permanecen libres e iguales en derecho. Las distinciones sociales no pueden ser fundadas más que sobre la utilidad común. Artículo 2º La finalidad de toda asociación política es la conservación de los derechos naturales e imprescindibles del hombre. Estos derechos son la libertad, la propiedad, la seguridad y la resistencia a la opresión. Artículo 3º El principio de toda soberanía reside esencialmente en la Nación. Ningún orden, ningún individuo puede ejercer autoridad si no emana expresamente de ella. Artículo 4º La libertad consiste en poder hacer todo lo que no perjudique a terceros: así, el ejercicio de los derechos naturales de cada hombre, no tiene otros límites que los que aseguran a los demás miembros de la sociedad el goce de estos mismos derechos. Estos límites sólo pueden ser determinados por la Ley. Artículo 5º La Ley sólo tiene el derecho de impedir las acciones perjudiciales a la sociedad. Todo lo que no esta impedido por la Ley, no puede ser prohibido, y nadie puede ser obligado a hacer lo que ella no ordena. Artículo 6º La Ley es la expresión de la voluntad general. Todos los ciudadanos tienen el derecho de acudir personalmente o por medio de sus representantes a su formación. Debe ser la misma para todos, ya sea que proteja, ya sea que castigue. Todos los ciudadanos, siendo iguales ante ella son también admisibles a cualquier distinción, cargo y empleo público, según su capacidad, y sin otra diferenciación que la de sus virtudes y sus talentos. Artículo 7º Ningún hombre puede ser acusado, arrestado o detenido, más que en los casos determinados por la Ley, y según las formas que ésta ha prescrito. Aquellos que solicitan, expiden, ejecutan o hacen ejecutar órdenes arbitrarias, deben ser castigados, pero todo ciudadano, requerido o incautado en virtud de la Ley, debe obedecer al instante, al resistirse, se vuelve culpable. Artículo 8º La Ley sólo debe establecer penas estricta y evidentemente necesarias, y nadie puede ser castigado más que en virtud de una Ley establecida y promulgada con anterioridad al delito, y legalmente aplicada. Artículo 9º Siendo todo hombre tenido por inocente hasta que se le haya declarado culpable, en caso de que se considere indispensable su arresto, todo rigor que no fuese necesario para asegurar su detención, debe ser severamente reprimido por la Ley. Artículo 10º Nadie puede ser inquietado por sus opiniones, incluso religiosas, mientras su manifestación no perturbe el orden público establecido por la Ley. Artículo 11º La libre comunicación de los pensamientos y de las opiniones es uno de los más preciados derechos del hombre; todo ciudadano puede, entonces, hablar, escribir, imprimir libremente, salvo para responder del abuso de esta libertad en los casos determinados por la Ley. Artículo 12º La garantía de los Derechos del Hombre y del Ciudadano necesita de una fuerza pública; esta fuerza es, entonces, instituida en beneficio de todos, y no para la utilidad particular de quienes la ejerzan. Artículo 13º Para el mantenimiento de la fuerza pública y para los gastos de administración, una contribución común es indispensable; así, debe ser igualmente asignada a todos los ciudadanos en base a sus facultades. Artículo 14º Todos los ciudadanos tienen el derecho de constatar por sí mismos, o por sus representantes, la necesidad de la contribución pública, de consentirla libremente, de vigilar su empleo y de determinar la cuota proporcional, las bases tributarias, su cobranza, y su duración. Artículo 15º La sociedad tiene el derecho de solicitar informes de su administración a todo agente público. Artículo 16º Toda sociedad en la que la garantía de los derechos no está asegurada, ni la separación de los poderes determinada, no tiene Constitución alguna. Artículo 17º Siendo la propiedad un derecho inviolable y sagrado, nadie puede verse privado de ella, salvo en caso de que la necesidad pública, legalmente constatada, lo exija con evidencias, y bajo la condición de una justa y previa indemnización. París, 26 de agosto de 1789. Las guerras napoleónicas: Napoleón es considerado como uno de los mayores genios militares de la Historia, habiendo comandado campañas bélicas muy exitosas, aunque con ciertas derrotas igualmente estrepitosas. Sus agresivas guerras de conquista se convirtieron en las mayores operaciones militares conocidas hasta ese momento en Europa, involucrando a un número de soldados jamás visto en los ejércitos de la época. Además de estas proezas bélicas, a Napoleón también se le conoce por el establecimiento del Código Napoleónico y es considerado por algunos un «monarca iluminado» debido a su extraordinario talento y capacidad de trabajo. Otros, sin embargo, lo estiman un dictador tiránico cuyas guerras causaron la muerte de millones de personas, así como uno de los personajes más megalómanos y nefastos de todos los tiempos. Se le juzga como el personaje clave que marcó el inicio del siglo XIX y la posterior evolución de la Europa contemporánea. Europa y el imperio napoleónico Napoleón, presentación Batalla de waterloo, fin del imperio Napoleónico Un golpe de estado dado por el ejército en 1.799 llevará al gobierno de Francia a Napoleón que llegó a coronarse emperador. Napoleón practicó una política de gobierno personal y entró en guerra con casi toda Europa extendiendo así las ideas revolucionarias francesas. Redactó los nuevos códigos legales (penal y civil) que se imitarían posteriormente en otros países y cuya vigencia ha llegado hasta nuestros días. Las potencias europeas que defendían el Antiguo Régimen derrotaron a Napoleón y crearon una coalición que actuaría en cualquier país en defensa de la monarquía absoluta (la Santa Alianza). Entonces se produjo la llamada Restauración por la que volvieron a sus tronos muchas de las antiguas dinastías (Bombones en España y Francia) Sin embargo, las ideas revolucionarias se fueron imponiendo y el liberalismo y el nacionalismo acabaron definitivamente con el Antiguo Régimen en 1.848, quedando solamente el imperio ruso (zarismo) como única muestra de absolutismo al comenzar el siglo XX. Tras la independencia de los Estados Unidos y la ocupación de España por las tropas napoleónicas, en las colonias españolas y portuguesas de América las ideas liberales y el nacionalismo surgido allí acabaron con la independencia de la mayor parte de ellas que se convirtieron n Repúblicas. A finales del siglo XIX España sólo conservaba las colonias de Cuba y Puerto Rico de su antiguo imperio. Independencia de las colonias americanas Proceso de independencia de las colonias 2. LAS TRANSFORMACIONES ECONÓMICAS (Revolución industrial) El siglo XIX es conocido como "el siglo de las revoluciones", ya que durante su transcurso los diversos países europeos van haciendo sus revoluciones políticas (paso a sistemas liberales constituyentes) que ya hemos estudiado y las revoluciones industriales (industria moderna) que consistió en un cambio radical en la actividad productiva como no se había visto desde el Neolítico. Con la Revolución industrial aumentó en gran medida la cantidad y variedad de productos fabricados (producción) y la economía pasó de ser eminentemente agraria a ser industrial y de un crecimiento espectacular. Máquina de vapor situada en el vestíbulo de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales de la UPM (Madrid). Gran Bretaña fue el país cuna de la Revolución industrial ya en el siglo XVIII, pues allí se daban los factores que contribuyeron a su desarrollo, que fundamentalmente fueron: • • Aplicación de nuevas fuentes de energía: el carbón. Nuevas materias primas: carbón, algodón, hierro... • Introducción de máquinas al sistema productivo: la máquina de vapor en especial. En la Revolución industrial se aumenta la cantidad de productos y se disminuye el tiempo en el que estos se realizan, dando paso a la producción en serie ya que se simplifican tareas complejas en varias operaciones simples que pueda realizar cualquier obrero sin necesidad de que sea mano de obra cualificada, y de este modo bajar costos en producción y elevar la cantidad de unidades producidas bajo el mismo costo fijo. Una serie de condiciones favorecieron el desarrollo de la industria moderna en Gran Bretaña: • El rápido crecimiento de la población (revolución demográfica) que activó la demanda y obligó a los empresarios a fabricar más y más deprisa. Los avances en medicina, higiene y alimentación contribuyeron a este crecimiento demográfico que supuso mano de obra abundante para la industria. • Aumento de la producción agrícola (revolución agrícola) que permitió alimentar al exceso de población. El abandono del barbecho, la técnica de rotación de cultivos y el empleo de máquinas que simplificaban las labores agrícolas hizo que sobrase mano de obra en el campo dispuesta a trabajar en la industria naciente. • Los grandes comerciantes ingleses que transportaban desde hacía tiempo todo tipo de mercancías a todos los países del mundo (imperio colonial) conocían bien los mercados, disponían de grandes barcos para transportar sus productos (revolución de los transportes) y disponían del capital (dinero) necesario para invertir en el proceso productivo (industria). 1.- El aumento de población: la revolución demográfica Se produce un aumento de población gracias a que la mayor disponibilidad de alimentos (revolución agraria) permite que la población esté mejor alimentada y por ello tenga mayor resistencia frente a las enfermedades. Desaparecen una serie de epidemias (como la peste) por causas no conocidas todavía y son sustituidas por otras (la viruela) de mortalidad más baja. Se produce el despegue demográfico (Inglaterra pasa de 6.500.000 de habitantes en 1750 a 9.000.000 en 1800). A partir de entonces el proceso de crecimiento demográfico será espectacular gracias a la mejora de las condiciones higiénicas (uso del jabón, sustitución de los vestidos de lana por los de algodón, infraestructuras urbanas como la recogida de aguas residuales y basuras...) y a los Progresos de la medicina curativa y preventiva (progresos en el conocimiento de las patologías médicas, vacunas, hospitales...) 2.- La revolución agraria. Una serie de propietarios agrícolas en Inglaterra desarrollaron un conjunto de innovaciones técnicas buscando incrementar la productividad para obtener beneficios económicos de su comercialización. Se inventaron máquinas para facilitar las labores del campo: sembradoras, Cosechadoras y trilladoras. Al principio eran arrastradas por la tradicional fuerza animal (caballos), pero luego fueron sustituidos por la máquina de vapor. Igualmente se introdujeron nuevas formas de cultivo que suponían aprovechar mejor la tierra cultivable suprimiendo los períodos de descanso de la tierra, los barbechos, utilizando los abonos como medio regenerador de los suelos. Asimismo acabaron con los periodos estacionales en que la tierra quedaba sin cultivar mediante la alternancia de cereales de verano e invierno. Rotaron los cultivos introduciendo el cultivo de plantas forrajeras que permitían poder alimentar al ganado en invierno. 3.- Las mejoras en los transportes. Una de las causas del inmovilismo de las sociedades agrarias era su incapacidad de transportar mercancías, lo que reducía su capacidad de comercialización. En Inglaterra a partir de 1750 se construyen nuevas carreteras y se mejoran las ya existentes. Los canales tuvieron una gran importancia en el desarrollo del transporte de mercancías muy pesadas que van a tener una gran importancia en el arranque de la industria como es el caso del carbón. La revolución industrial Consistió en un proceso por el cual la industria artesanal fue desapareciendo progresivamente siendo sustituida por la industria moderna basada en la máquina y en la utilización del vapor como fuente de energía. El proceso se desarrolla ligado a la industria textil (el algodón), el hierro y el carbón. Orígenes de la primera revolución industrial Progreso de la revolución industrial Revolución Industrial II 1.- La industria textil en Inglaterra, A mediados del s. XVIII, experimentó un incremento de la demanda como consecuencia del crecimiento demográfico. La productividad era muy baja por lo que una serie de artesanos realizaron inventos con el fin de solucionar problemas concretos que se les planteaban para poder satisfacer una mayor demanda. Aparecen así una serie de máquinas capaces de hilar y tejer de forma mucho más rápida y con una mayor calidad. La aparición de las máquinas fue la principal innovación tecnológica de la Revolución industrial. La primera industria moderna fue la industria textil que utilizará una nueva materia prima, el algodón y la máquina más significativa será la máquina de vapor (1.770) que se aplicó en un principio a las máquinas hiladoras y tejedoras de esta industria. La máquina de vapor utiliza el carbón como combustible para calentar el agua que al convertirse en vapor generará la energía para el movimiento necesario de las máquinas a que se aplique. Spinning Water Frame, máquina hiladora de ocho bobinas 2.- Industria Siderúrgica y del Carbón A principios del siglo XVIII la madera seguía siendo el combustible más utilizado. Los objetos de hierro eran fabricados por los herreros en las fraguas alimentadas por combustión de la madera. El carbón vegetal (procedente de la lenta combustión de la madera) era utilizado sobre todo en las fraguas. Pero ya en esta época la deforestación era un problema muy grave en Inglaterra por lo que el carbón mineral empezó a sustituir a la madera. Había venido siendo utilizado antes y ya existían minas de carbón, pero era poco utilizado. Abraham Darby, un herrero, será el primero en utilizar carbón mineral (hulla) para fundir el mineral de hierro a principios de siglo. Las ventajas del carbón en el tratamiento del hierro eran inmensas pues permitía fundir el mineral, cosa que era imposible con la madera. De esta forma nace la industria siderúrgica o de elaboración del hierro que va a ver multiplicada por cinco su producción en pocos años debido al crecimiento de la demanda, ya que era posible obtener objetos de hierro más variados y de mejor calidad que hasta entonces. El carbón era muy abundante en la isla, hecho que favoreció el desarrollo de la industria siderúrgica. Otra serie de inventos contribuyeron a mejorar la calidad del hierro obtenido y desde entonces el hierro lo invade todo: máquinas, herramientas, raíles, locomotoras, estructuras para edificios... Es una verdadera edad del hierro la que se inicia con la revolución industrial y domina todo el s. XIX. 3.- La máquina de vapor. Todo lo anterior resultaría inútil si no se hubiera producido al mismo tiempo otro invento: la máquina de vapor, de James Watt, considerada como el primer motor de la Historia y la innovación técnica más importante de la revolución industrial. Esquema de la maquina de vapor de Watt La demanda de productos de hierro en el siglo XVIII hizo que apareciera otra industria moderna muy importante, la siderurgia, en la que se crearían los altos hornos en los que se producía acero de gran calidad y que utilizarían como combustible el carbón, fuente de energía imprescindible en la Revolución industrial. La máquina de vapor revolucionaría más tarde el mundo de los transportes al aplicarse a la primera locomotora que haría surgir los ferrocarriles y a los barcos (barco de vapor) que ya no necesitarían de la fuerza del viento para navegar. Hierro y carbón serán pues los minerales básicos de esta revolución. Liberalismo económico y capitalismo La revolución industrial vino acompañada de una nueva teoría económica expuesta por el economista inglés Adam Smith: el liberalismo económico. El liberalismo económico se basa: La producción va destinada al mercado (venta) no al autoconsumo. .-Los precios se regirán libremente por las leyes de la oferta y la demanda. .-El objetivo de los empresarios será obtener los máximos beneficios posibles. .- Se debe dar libertad al comercio entre países eliminando los aranceles de las aduanas que lo entorpecían, propios del proteccionismo ADAM SMITH mercantilista de la época anterior. Este sistema económico, basado en la inversión de capital, se conoce, hoy en día, con el nombre de capitalismo liberal. La clase social protagonista de las revoluciones estudiadas será la burguesía, que además de simpatizar con las ideas políticas del liberalismo será la propietaria del capital, de las empresas, bancos y medios de transporte y se convertirá en la nueva clase social dominante. 3. NUEVAS CORRIENTES: NACIONALISMO Y SOCIALISMO Nacionalismos triunfantes Las ideas de libertad para las personas y de soberanía nacional que defendía la Revolución francesa hará nacer una nueva ideología en el siglo XIX: el nacionalismo. Los pueblos que tienen una lengua propia, una historia y una cultura comunes, unas creencias y un folklore pertenecen a una comunidad nacional diferenciada y por ello reclaman su derecho a la independencia, cuando estaban sometidos al dominio de vastos imperios, o a formar una nación, cuando estaban separados en distintos estados. Así surgirán los estados independientes de Bélgica, Grecia y Hungría (con parlamento propio dentro del imperio austro-húngaro) y se producirán los procesos de reunificación nacional de Alemania e Italia, que hasta entonces se encontraban divididos en multitud de estados. Garibaldi buscaba la unidad italiana, fue uno de sus artífices, sobre todo por los territorios conquistados en la zona del sur. En el proceso de unificación de Italia hubo muchos intereses en un sentido y en otro. La incorporación de las diferentes áreas fue progresiva. El proceso de la unificación no fue producto de la voluntad popular pese a los plebiscitos convocados por Cavour, por tanto la acción del Estado se centró en la construcción de una nacionalidad italiana. Alemania se encontraba fraccionada tras el Congreso de Viena de 1815, que ignoró las ansias de unidad de los nacionalistas. Se formó una Confederación Germánica de treinta y nueve Estados con una Dieta común integrada por representantes de todos los Estados y presidida por Austria. El proceso de unificación se realizará desde arriba, por los príncipes y al margen de la movilización popular, por razones de orden práctico. Se realizará en torno a Prusia, el país más fuerte de la Confederación por su supremacía política y militar, y será dirigido por el canciller Otto Von Bismarck, llamado el Canciller de Hierro, quién formó un poderoso ejército prusiano para conseguir la unidad «por el hierro y la sangre», buscando el interés de Prusia. Unificación Italiana Unificación de Alemania El movimiento obrero: socialismo y anarquismo Historia del movimiento obrero La revolución industrial trajo consigo el nacimiento de una nueva clase social compuesta por los trabajadores de las nuevas fábricas: el proletariado. Los primeros obreros industriales cobraban escasos salarios, tenían unos horarios muy prolongados y malas condiciones de trabajo. La explotación de la nueva mano de obra por parte de los empresarios burgueses no tenía límite según las teorías del liberalismo económico. Ante esta situación los obreros se unieron formando los primeros sindicatos que tenían como misión fundamental la mejora de las condiciones laborales. Había nacido el movimiento obrero. Algunos intelectuales criticaron el orden social y económico establecido y pretendieron sentar las bases de una sociedad más igualitaria en la que se respetaran los derechos de los trabajadores: es el socialismo. El creador del pensamiento socialista fue Karl Marx, que con la colaboración de Friedrich Engels, propugnó una revolución que acabaría con el sistema capitalista y crearía un estado igualitario socialista. Para ello el proletariado debía rebelarse contra sus opresores mediante la revolución que llevaría al triunfo de la lucha de clases que protagonizaban la burguesía, dueña del capital y de las empresas, y el proletariado (obreros industriales). Algunos intelectuales, como Mihail Bakunin, fueron aún más lejos y propugnaron la libertad individual absoluta y la oposición a cualquier tipo de organización impuesta, por lo que pretendieron acabar con el Estado mediante la acción directa (lucha armada). Surge así el anarquismo. El pensamiento de Carlos Marx 1ª parte Puedes acceder a las otras partes con el mismo enlace. En 1.864 tuvo lugar la I Asociación Internacional de Trabajadores, de orientación marxista, que pretendía unir a los obreros de todos los países en un gran sindicato.