Pieza destacada febrero 2014 – Pendientes de nodriza pasiega La figura de la nodriza, asociada invariablemente a la mujer pasiega a partir de la primera mitad del siglo XIX, encontró su origen al pie de las cunas reales cuando por imposibilidad física o por motivos estéticos que las modas demandaban, muchas madres buscaron quien sacara adelante a la criatura. Con el paso del tiempo, encontró un sitio en las casas de la nobleza y de la burguesía, convirtiéndose en símbolo de ostentación económica. Estas mujeres, encontraron una vía a través de la cual aportar un dinero extra a la escasa economía familiar, y abandonando su vida campesina de trabajo duro y privación, se trasladaron a la ciudad, sellando un nexo indiscutible entre la familia burguesa y la aldeana. La nodriza pasiega, procedente del valle del Pas, por su forma física, su fortaleza, su fisonomía, sus buenas costumbres y su reputación, se convirtió en un certificado de salubridad que hizo de ella una opción viable y un referente de su profesión. El tiempo fue configurando un modelo de mujer que encontró en la indumentaria y la joyería, su seña de identidad, un signo de diferenciación y personalización indicativo de la sociedad a la que prestaban sus servicios. Orgullo de la nobleza y de la burguesía urbana, allí por donde pasearon las amas de cría lucieron la opulencia de sus joyas. Ostentosos pendientes en sus orejas, multitud de collares anudados al cuello, numerosas cadenas pendiendo sobre su pecho, eran solo una parte del numerario de aderezos que constituían el punto final a su atavío. Cada una de estas joyas, de una en una o en conjunto, solían ser regalo de la familia a la que prestaban sus servicios, “cuando el niño echa un diente, el ama de cría unos pendientes”. El tamaño y los colores de estas joyas fueron lo bastante llamativos como para garantizar su visibilidad y singularidad. El coral y la plata fueron los materiales por excelencia para configurar el diseño de sus alhajas. El coral, piedra semipreciosa de un característico color rojizo y puesta de moda a principios del siglo XIX, acabó convirtiéndose en adorno casi exclusivo de las nodrizas. La plata va a estar presente en casi todos los aderezos, y particularmente las monedas de plata. De la variedad de joyas que adornaron al ama de cría, fueron los pendientes los que nunca faltaron de sus orejas. Los que presentamos como pieza de este mes son un ejemplo de aquellos que se configuraron a partir de monedas de plata. Nº de Inventario: CE01127: Nombre: Pendientes. Tipología: de nodriza Descripción: Se trata de una pareja de pendientes formados por dos monedas de plata soldadas en hilera y rematadas por un cierre de gancho. Cada una de las monedas se encuentra enmarcada por un aro de abalorios lisos y facetados de color rojizo que imita al coral. El canto es estriado. La moneda superior muestra en el anverso la leyenda ALFONSO XIII POR LA G. DE DIOS / 1900 entre estrellas de seis puntas. Presenta el busto de perfil del monarca y debajo del mismo, la marca del grabador BM (D. Bartolomé Maura); Reverso con la leyenda: REY CONST. DE ESPAÑA/ UNA PESETA entre las iniciales MS (ensayador) y M (juez de balanza). En el centro lleva el escudo de España cuartelado con los símbolos de los cinco reinos históricos peninsulares; Castilla, León, Aragón, Navarra y Granada y en el centro el escudo borbónico con las flores de lis, flanqueado por las columnas de Hércules y rodeadas por una banda con la leyenda PLUS ULTRA. La moneda inferior muestra en el anverso la leyenda: ALFONSO XII POR LA G. DE DIOS / 1882 entre estrellas de seis puntas. Busto de Alfonso XII de perfil con bigote y barba y debajo del mismo la marca del grabador G S (D. Gregorio Sellán); Reverso con leyenda; REY CONST. DE ESPAÑA/ 2 PESETAS entre las iniciales MS (ensayador) y M (juez de balanza). En el centro, la misma representación que la moneda anterior. Materia: plata y abalorios de color rojo Técnica: engastado Lugar de adquisición: Santander Donación: Elvira Quijano González Camino Fecha de ingreso en el museo: 3 de septiembre de 1998 Contexto cultural: Finales del siglo XIX y primera mitad del siglo XX (Las monedas pertenecen a la época inmediatamente posterior a la Primera República (1873-1874), siendo la de mayor valor, 2 pesetas del reinado de Alfonso XII (1875-1885), y la segunda, de una peseta, del reinado de su hijo Alfonso XIII (18861931). Bibliografía: COTERA, G.: Trajes populares de Cantabria, siglo XIX. Ed. Institución Cultural de Cantabria. Santander, 1982. FRAILE GIL, J. M.: Amas de Cría. Ed. Fundación de Joaquín Díez. Urueña, 2000. HERRADÓN FIGUEROA, Mª. A.: Joyas para el ama de cría. Altamira, LXXIX. Centro de estudios montañeses. Santander, 2010, págs. 227-245. VILLEGAS LÓPEZ, R.: Noticias de Pasiegas. Librucos. Cantabria, 2010.