Exclusividad y servicios personalizados: la era del Hotel Boutique Desde su nacimiento hace varias décadas, el concepto de Hotel Boutique ha ido evolucionando, experimentando nuevas tendencias y expandiéndose por la planta hotelera mundial para llegar, en la actualidad, a convertirse en una de las opciones con mejores perspectivas a juzgar por las inauguraciones registradas. Básicamente un Hotel Boutique es un establecimiento que debe ofrecer una experiencia de alojamiento única, a la medida de una clientela enormemente exigente y que necesita una atención muy personalizada. Estas premisas básicas chocan con la estandarización de las grandes marcas, aspecto al que el creador de este concepto, Ian Schrager, se opuso al abrir su primer establecimiento en Nueva York, un hotel que rápidamente se erigió como símbolo de la distinción y del servicio personalizado. Varias décadas después, este modelo se halla en expansión en Europa, América y especialmente: Asia. Entre las características que suelen presentar estos alojamientos se puede mencionar su tamaño, -no superior a las 150 habitaciones-, una categoría igual o superior a las cuatro estrellas, restaurantes de muy alta calidad, ausencia de grandes espacios para eventos, decoración de diseño o lobbies reducidos. Por el contrario, la ubicación no es tan determinante ya que se pueden encontrar en playas, medio rural, grandes ciudades, etc. Aunque en numerosas ocasiones, suelen estar ubicados en antiguos edificios como masías, pazos, cortijos, haciendas, palacios, monasterios o casonas. Efectuar una clasificación de sus distintas tipologías es complicado pero puede servir la realizada por The Best Boutique Hotels (The BBH) la primera red de este tipo de establecimientos surgida en Argentina y que aglutina a varios de ellos no unidos a una misma cadena. Según este colectivo, los hoteles boutiques se clasifican en dos tipos, dependiendo de si se hallan en el medio urbano o rural. A su vez, cada tipología está estructurada en tres categorías: Magnificient, Refined y Classic. Una alianza similar la constituye Hoteles Boutique de México, marca especializada en este segmento. En Europa destacan los pequeños operadores, con marcas como Sorat Hotels, Inside Premium Hotels y Malmaison Hotels en primera fila, aunque también grandes cadenas como NH, Sol Meliá o Starwood tienen ya establecimientos de este tipo. Del mismo modo, en España algunas de las cadenas más representativas, como Derby, Barceló, Hesperia, Silken o AC, han apostado por este concepto. Y por supuesto, pequeños establecimientos independientes como Omm, Eme, Casa Imperial, Rocamador, Orfila, L’Odissea de L’Empordà, Mas de Torrent, Torre del Remei, Casa Boscá… El extremo del glamour y el diseño lo constituyen las aventuras hoteleras de Versace y Armani. En el año 2000, Gianni Versace Spa inauguraba su primer hotel en la Cosa de Oro australiana como prolongación del lujo de las pasarelas y las boutiques más exclusivas. En los últimos años están proyectados más de una decena de esta marca incluido uno, como no, en Dubai. Armani, Bulgari, Christian Lacroix y Chanel son algunas de las marcas que también cuentan con su división hotelera con establecimientos en los destinos más exclusivos del mundo. Una variación de este concepto lo constituyen hoteles en los que sus elementos decorativos están a la venta, como sucede con el Hotel Boutique Casa Romana, en Sevilla. Todas ellas son muestras de un turismo exclusivo y cada vez más importante. Y no es para menos, porque la tendencia de mercado indica que se mantendrá el auge de este segmento y las inauguraciones de nuevos establecimientos