SPAN364: COLUMBUS AND LAS CASAS 1 Columbus, 6: Relación del cuarto viaje (Jamaica, 7 July 1503) (Textos y documentos, §74, pp. 485–503) Columbus’s Jamaica letter survives in two MS copies and an early Italian translation entitled Lettera rarissima. It takes the form of a letter to the monarchs, but was obviously composed in instalments at different times during the trip; the earlier parts at sea and on the mainland of Panamá (where Columbus finally made his first landfall on the continent of America), the last part on the island of Jamaica, where he was shipwrecked for a year. Serenísimos y muy altos y poderosos rey y reina: A 9 días de mayo de 1502 partí de Cádiz y pasé a Canaria en 4 días, y dende a las Indias en 16, de adonde escribí a Vuestra Alteza que mi intención era de dar prisa a mi viaje, en cuanto yo tenía los navíos buenos, la gente y los bastimentos, y que mi derrota era en la Isla de Janahica.1 En la Isla Dominica escribí esto; hasta allí traje el tiempo a pedir por la boca.2 Esa noche que allí entré fue con tormenta, y grande, y me persiguió después siempre. […] La tormenta era terrible, y en aquella noche me desmembró los navíos: a cada uno llevó por su cabo, sin esperanzas salvo de muerte; cada uno de ellos tenía por cierto que los otros eran perdidos. ¿Quién nació, sin quitar a Job, que no muriera desesperado, que por mi salvación y la de mi hijo, hermano y amigos me fuese en tal tiempo defendida la tierra y los puertos que yo, por la voluntad de Dios, gané a España sudando sangre? […] Y con esta tormenta, así a gatas me llegué a Janahica. Allí se mudó de mar alta en calmería y grande corriente, y me llevó hasta el las Figeras sin ver tierra. De allí, cuando pude, navegué a la Tierra Firme, adonde me salió el viento y la corriente terrible al opósito; combatí con ellos sesenta días, y, en fin, no le pude ganar más de 70 leguas. En todo este tiempo no entré en puerto, ni pude, ni me dejó tormenta del cielo, agua y trombones y relámpagos de continuo, que parecía el fin del mundo. […] Llegué a tierra de Cariay, adonde me detuve a remediar los navíos y bastimentos y dar aliento a la gente, que venía muy enferma, y yo, que, como dije, había llegado muchas veces a la muerte. Allí supe de las minas del oro de la provincia de Çiamba, que yo buscaba.3 Dos indios me llevaron a Çarabarú, adonde la gente anda desnuda y lleva al cuello un espejo de oro; mas no le querían vender ni dar a trueque. Nombráronme muchos lugares en la costa de la mar adonde decían que había oro y minas; el postrero era Veragua.4 […] Es así de la provincia de Çiguare, que según ellos es de esta otra nueve jornadas de andadura por tierra al poniente.5 Allí dicen que Janahica: Columbus’s name for Jamaica (cf. Diario del primer viaje 6 January & n53 ‘Yamaye’). As Varela & Gil point out, he probably misheard or ‘forced’ the Indian toponym to make it conform with Marco Polo’s remarks about ‘Jaua minor’ —that is, Java, which Columbus misread as ‘Jana’. 1 Columbus arrived off Santo Domingo on 29 June 1502, but the governor of Hispaniola, Ovando, refused to let him land, on the orders of the monarchs. The storm described in the following paragraph, which lasted for two months, sunk several ships, drowning Francisco de Bobadilla, Francisco Roldán, Mayobanex, Guarionex, and other caciques (see Las Casas, Brevísima relación chap. 3 & nn16, 18). 2 According to Las Casas, Historia de las Indias II.21, ‘Cariay’ or Cariarí was a town on Quiribri Island, off the Mosquito Coast of Nicaragua. Columbus persisted in thinking he was in Asia, and goes on immediately to identify the place as Çiamba, Marco Polo’s name for Cochin-China. 3 ‘Veragua’ was the local Indian name for the western coast of Panama, across the Central American isthmus. Columbus’s family were later to receive the title of dukes of Veragua. 4 5 The ‘land of Ciguare nine days’ journey to the west’ is, to judge by the description which follows, the first report of the Maya civilization of Central America. Some details below (horses, firearms) show that Columbus was hearing what Marco Polo had said about the Chinese, not what his informants were telling him; and the subsequent mention of the River Ganges shows that he identified Ciguare with Ptolemy’s Catigara (see next n). © Jeremy Lawrance 2002 1 2 3 2 SPAN364: COLUMBUS AND LAS CASAS hay infinito oro, y que traen corales en las cabezas, manillas a los pies y a los brazos dello, y bien gordas, y de él sillas, arcas y mesas las guarnecen y enforran. También dijeron que las mujeres de allí traían collares colgados de la cabeza a las espaldas. En esto que yo digo, la gente toda de estos lugares conciertan en ello, y dicen tanto que yo sería contento con el diezmo. También todos conocieron la pimienta. En Ciguare usan tratar en ferias y mercaderías; estas gentes así lo cuentan, y me mostraban el modo y forma que tienen en la barata. Otrosí dicen que sus naos traen bombardas, arcos y flechas, espadas y corazas; y andan vestidos, y en la tierra hay caballos y usan la guerra y traen ricas vestiduras, y tienen buenas casas. También dicen que la mar boja a Çiguare, y de allí a diez jornadas es el río de Ganges. […] También esto que yo supe por palabra, habíalo yo sabido largo por escrito. Ptolomeo creyó de haber bien enmendado a Marino, y ahora se halla su escritura bien propincua al cierto. Ptolomeo asienta Catigara a 12 líneas lejos de su Occidente, que él asentó sobre el cabo de San Vicente en Portugal 2 grados y un tercio; Marino en 15 líneas constituyó la tierra.6 Ese mismo Marino en Etiopía escribe allende la línea equinoccial más de 24 grados, y ahora que los portugueses le navegan le hallan cierto; Ptolomeo dice que la tierra más austral es el plazo primero, y que no abaja más de 16 grados 1/3. El mundo es poco: el enjuto dello es seis partes, la séptima solamente es cubierta de agua; la experiencia ya está vista, y la escribí por otras letras con adornamiento de la Sacra Escritura, con el sitio del Paraíso terrenal que la santa Iglesia aprueba. Digo que el mundo no es tan grande como dice el vulgo, y que un grado de la línea equinoccial corresponde [a] 56 millas y dos tercios: presto se tocará con el dedo. Dejo esto, porque no es mi propósito de hablar en aquella materia, salvo de dar cuenta de mi duro y trabajoso viaje, bien que él sea el más noble y provechoso. […] 4 [Columbus left the Central American mainland because the weather again turned against him; for six months he was driven by storms. When they were driven ashore they faced hostile Indian attacks, fever, and the destruction of their boats by shipworm. The description of the tempests takes on an apocalyptic tone; Columbus underwent a crisis of faith, described in the following passages] Nueve días anduve perdido sin esperanza de vida. Ojos nunca vieron la mar tan alta, fea y hecha espuma. El viento no era para ir adelante, ni daba lugar para correr hacia algún cabo; allí me detenía en aquella mar hecha sangre, hirviendo como caldera por gran fuego. El cielo jamás fue visto tan espantoso: un día y una noche ardió como horno, y así echaba la llama con los rayos, que cada vez miraba yo si me había llevado los mástiles y velas. Venían con tanta furia espantables que todos creíamos que me habían de fundir los navíos. En todo este tiempo jamás cesó agua del cielo, y no para decir que llovía, salvo que resegundaba otro diluvio. La gente estaba ya tan molida que deseaban la muerte y salir de tantos martirios. Los navíos ya habían perdido dos veces las barcas, anclas, y cuerdas, y estaban abiertos, sin velas. Cuando plugo a nuestro Señor volví a Puerto Gordo, adonde reparé lo mejor que pude. […] Mi hermano y la otra gente toda estaban en un navío que quedó adentro; yo, muy solo, de fuera, en tan brava costa, con fuerte fiebre. En tanta fatiga la esperanza de escapar era muerta. Subí así trabajando en lo más alto, llamando a voz muy temerosa, llorando y muy aprisa, los maestros de la guerra de Vuestra Alteza a todos cuatro los vientos por socorro; mas nunca me respondieron. Cansado, me adormecí gimiendo; una voz muy piadosa oí diciendo: —O estulto y tardo a creer y a servir a tu Dios y Dios de todos, ¿qué hizo Él más por Moisés o por David, sus siervos? Desque nacistes, siempre Él tuvo de ti muy grande cargo. Cuando te vio en edad de que Él fue contento, maravillosamente hizo sonar tu nombre en la tierra. Las Indias, que son parte del mundo tan ricas, te las dio por tuyas; tú las repartiste adonde quisiste, y te dio 6 The ancient geographers Ptolemy and Marinus of Tyre counted the earth into 24 lines (i.e. hours), so that Ptolemy’s 12 lines for the extent of the known land-mass of Europe and Asia from its western limit at Cape St Vincent to its eastern limit at ‘Catigara’ in China equalled 180º of longitude (half of the 24 lines), while Marinus’s 15 lines equalled 225º. As he goes on to say, Columbus believed that Marinus was correct —because this would confirm his conviction that he had reached China. © Jeremy Lawrance 2002 5 6 COLUMBUS, 6: RELACIÓN DEL CUARTO VIAJE, 1503 3 poder para ello. De los atamientos de la mar Océana, que estaban cerrados con cadenas tan fuertes, te dio la llave, y fuistes obedecido en tantas tierras, y de los cristianos todos cobraste tan honrada fama. ¿Qué hizo Él más al tu pueblo de Israel cuando le sacó de Egipto, ni por David, que de pastor hizo rey en Judea? Tórnate a Él, y conoce ya tu yerro; su misericordia es infinita. Tu vejez no impedirá a toda cosa grande; muchas heredades tiene Él grandísimas. Abraam pasaba de ciento años cuando engendró a Isaac, ni Sara era moza. Tú llamas por socorro incierto; responde, “¿Quién te ha afligido tanto y tantas veces, Dios o el mundo?” Los privilegios, cartas y promesas que da Dios todos los cumple con ventaja, y después de haber recibido el servicio acrecienta las mercedes y les da el Paraíso.7 Esto es su uso. Dicho te tengo lo que tu Criador ha hecho por ti, y hace con todos. Ahora— me dijo— muestra el galardón de tus afanes y peligros que as pasado sirviendo a otros.8 Yo, así amortecido, oí todo, mas no tuve yo respuesta a palabras tan ciertas salvo llorar por mis yerros. Acabó él de hablar, quienquiera que fuese, diciendo: —Confía y no temas: todas estas tribulaciones están escritas en piedra mármol, y no sin causa. Levantéme cuando pude, y al cabo de nueve días hizo bonanza, mas no para sacar navíos del río. Recogí la gente que estaba en tierra y todo el resto que pude, porque no abastaba para quedar y para navegar los navíos. […] Llegué a Janahica en fin de junio, siempre con vientos punteros y los navíos en peor estado; con tres bombas, tinas y calderas no podía con toda la gente revencer el agua que entraba en el navío, ni para este mal de bruma hay otra cura.9 Cometí el camino para me acercar a lo más cerca de la Española, que son 28 leguas; y no quisiera haber comenzado. […] El navío se me anegó, y milagrosamente me trajo nuestro Señor a tierra. ¿Quién creerá lo que aquí yo he escrito? Digo que de cien partes no he dicho la una en esta letra; los que fueron con el Almirante lo atestigüen. […] Esta carta envío por vía y mano de indios. Grande maravilla será si allá llega.10 [The remainder of the letter was written during the year during which Columbus was stranded in Jamaica after the shipwreck. The style and structure of the text, already disjointed and rambling, becomes confused and incoherent, reflecting a state of mind which was pyschologically impaired, and perhaps affected by physical illness and hunger. The storms had made him lose his bearings; he later found that his navigation was 1200 nautical miles astray, and realized with anguish that he could not reconstruct the route he had taken to the gold-mines of Veragua: ‘a visión profética se asemeja esto’. In the following passages he falls to random musing on the sights he had seen, trying to work out whether he had really been in China and 7 The Salamanca MS gives a different reading: ‘Los privilegios y promesas que da Dios no las quebranta, ni diçe, después de aver reçibido el serviçio, que su intençión no era ésta y que se entiende de otra manera, ni da martirios por dar color a la fuerça: Él va al pie de la letra; todo lo que Él promete cumple con acrescentamiento.’ 8 In this dream Columbus casts himself in the role of Moses, David, and Abraham, and includes literary reminiscences of the Bible (Luke 24:25 ‘He said to them, “Oh, how foolish you are, and how slow of heart to believe all that the prophets have declared!”’) and the Roman tragedian Seneca (Medea 375–79, ‘In later years there will come an age when Ocean will loosen the chains of things and the great earth will lie open, Tethys [goddess of the sea] will uncover new worlds, and Thule will not be the last among lands’; a passage which Columbus applied to himself in Libro de las profecías, fol. 59v, see Textos y documentos, §60, p. 454). This suggests we should analyze the dream as a rhetorical invention designed to allow Columbus to upbraid the monarchs, through the mouth of the unidentified angel, for having abandoned him. Mal de broma, ‘shipworm’, a major hazard in the age of wooden ships. In an earlier sentence (omitted in these extracts) Columbus reported that by May his ships were so worm-eaten that they were more full of holes than a honeycomb ('foradados de busanos más que un panal de abejas’). The shipwreck which follows was more or less inevitable. 9 The letter was actually entrusted to Diego Méndez, who also wrote a narrative of his lone trip in a canoe across the storm-wracked sea from Jamaica to Santo Domingo to fetch help. Columbus’s letter contains many such inaccuracies, attributable perhaps to his state of mind. 10 © Jeremy Lawrance 2002 7 8 4 SPAN364: COLUMBUS AND LAS CASAS recalling stray episodes.] La gente de que escribe Papa Pío, según el sitio y señas, se ha hallado, mas no los caballos, petrales y frenos de oro;11 ni es maravilla, porque allí las tierras de la costa de la mar son todas paúles y anegadas, y no requieren salvo pescadores, ni yo me detuve, porque andaba aprisa. En Cariay y en esas tierras de su comarca son grandes hechiceros y muy medrosos.12 Dieran el mundo porque no me detuviera allí una hora. Cuando llegué allí, luego me enviaron dos muchachas muy ataviadas; la más vieja no sería de once años, y la otra de siete, ambas con tanta desenvoltura que no serían más unas putas; traían polvos y hechizos escondidos. En llegando, las mandé adornar de nuestras cosas y las envié luego a tierra. Allí vi una sepultura en el monte, grande como una casa y labrada a maravilla, y el cuerpo descubierto y mirrado en ella.13 De otras hartas me dijeron y más excelentes. Animalias menudas y grandes hay hartas y muy diversas de las nuestras. Dos puercos hube yo en presente, y un perro de Irlanda no osaba esperarlos.14 Un ballestero había herido una alimaña que se parece a gato paúl, salvo que es mucho más grande y el rostro de hombre: teníale atravesado con una saeta desde los pechos a la cola, y porque era feroz le hubo de cortar un brazo y una pierna; el puerco, en viéndole, se le encrespó y se fue huyendo; yo cuando esto vi mandé echarle begare, que así le llaman, adonde él estaba; en llegando a él, así estando a la muerte y la saeta siempre en el cuerpo, le echó la cola por el hocico y se le amarró muy fuerte y con la mano que le quedaba le arrebató por el copete como a enemigo. El auto tan nuevo y hermosa montería me hizo escribir esto. […] Gallinas muy grandes y la pluma como lana vi hartas; leones y ciervos, corzas otro tanto, y así aves. […] Cuando yo andaba por aquella mar en fatiga, en algunos se puso herejía que estábamos ahechizados, y hoy día están en ello. Otra gente hallé que comían hombres; la desformidad de su gesto lo dice. Allí dicen que hay grandes mineros de cobre; hachas dello y otras cosas labradas y fundidas y soldadas hube, y fragua con todo aparejo de platero y los crisoles. Allí van vestidos, y en aquella provincia vi sábanas grandes de algodón labradas de muy sutiles labores, y otras pintadas muy sutilmente a colores y con pinceles. Dicen que en la tierra adentro hacia el Catayo las hay tejidas de oro. De todas estas tierras y de lo que hay en ellas a falta de lengua no se sabe tan presto. Los pueblos, bien que sean espesos, cada uno tiene diferenciada lengua, y es en tanto que no se entienden los unos con los otros más que nós con los de Arabia. […] Cuando yo descubrí las Indias dije que eran el mayor señorío rico que hay en el mundo. […] Yo vi en esta tierra de Veragua mayor señal de oro en dos días primeros que en la Española en cuatro años. […] Tan señores son Vuestras Altezas de esto como de Sevilla o Toledo: sus navíos que fueren allí van a su casa. […] El oro es excelentísimo: del oro se hace tesoro, y con él, quien lo tiene hace cuanto quiere en el mundo, y llega a que echa las ánimas al Paraíso. Los señores de 11 This refers back to the report of ‘Ciguare’ in §3, above. Pius II’s Cosmographia (see Carta al Papa Alejandro VI, n2) spoke of the tribe of Scyths in eastern Asia who made gold breastplates (pretales, petrales) for their horses, but the swampy Mosquito Coast of Nicaragua militated against this identification; perhaps, Columbus speculates, these were the Ichthyophagi or ‘Fish-eaters’ of the mappae mundi. 12 Instead of fechiceros ‘witch-doctors’ the Tarragona text reads frecheros, ‘bowmen’; that the former reading is correct is shown by the following story of the attempt to make the whites sail away by sending them girls (Columbus’s refusal of their sexual advances won Las Casas’s approval) who carried polvos y hechizos, magic powders and spells, charms, or fetishes. What the Indians had in mind is not clear, but the idea of magical entrapment would not have seemed strange to Spaniards, despite the Church’s insistence that belief in witchcraft was heresy; Columbus later tells us (end of §10) that his sailors were convinced that the ships were indeed ahechizados, ‘bewitched’. 13 Mirrado, ‘embalmed, mummified’, from mirra, ‘myrrh’. The ‘pigs’ were in fact peccaries, as Columbus makes clear in the account below of hunting the man-like ‘monkey’ (cf. Relación del tercer viaje, n10), where he gives one the Indian name begare. Below, the ‘chickens’ were turkeys, the ‘lions’ pumas. 14 © Jeremy Lawrance 2002 9 10 11 12 COLUMBUS, 6: RELACIÓN DEL CUARTO VIAJE, 1503 5 aquestas tierras de la comarca de Veragua, cuando mueren, entierran el oro que tienen con el cuerpo; así lo dicen.15 […] Jerusalén y el monte Sión ha de ser reedificado por mano de cristiano: quién ha de ser, Dios por boca del Profeta en el décimo cuarto salmo lo dice.16 El abad Joaquín dijo que éste había de salir de España; San Jerónimo a la santa muger mostró el camino para ello.17 El emperador del Catayo ha días que demandó sabios que le enseñasen en la fe de Cristo.18 ¿Quién será que se ofrezca a esto? Si nuestro Señor me lleva a España, yo me obligo de llevar allá, con el nombre de Dios, en salvo. […] 13 [At this point the letter degenerates further into a series of disjointed sentences: requests that his men be paid, advice on how to run the colony in Hispaniola and rantings against the idleness and greed of his enemies, regrets for the thousands of Indians killed and enslaved as a result of the conquest, laments that with one good ship and a little fine weather he could have finished the voyage successfully, and prayers for God’s mercy. It is apparent that Columbus thought he might die before being rescued. The remaining extracts are some of the more intelligible scraps.] El oro que tiene el Quivián de Veragua y los otros de la comarca, bien que según información él sea mucho, no me pareció bien ni servicio de V.A. de se le tomar por vía de robo. La buena orden evitará escándalo y mala fama, y hará que todo ello venga al tesoro que no quede un grano. […] Yo tengo en más esta negociación y minas, con esta escala y señorío, que todo el otro que está hecho en las Indias. Non es éste fijo para dar a criar a madrastra. De la Española, de Paria y de las otras tierras non me acuerdo dellas que non llore. Creía yo que el ejemplo dellas hubiese de ser por estotras; al contrario, ellas están boca ayuso; bien que no mueran, la enfermedad es incurable o muy larga. Quien las llegó a esto venga ahora con el remedio, si puede o sabe. Al descomponer cada uno es maestro. […] Otro negocio famosísimo está con los brazos abiertos llamando.19 […] Siete años estuve yo en su real corte, que a cuantos se habló desta empresa todos a una dijeron que era burla. Ahora cada uno se da por autor y dice maravillas, y hasta los sastres suplican por descubrir, y se les otorga, que cobran con tanto perjuicio de mi honra y tanto daño del negocio. Bueno es de dar a Dios lo suyo y a César lo que le pertenece; ésta es justa sentencia, y de justo.20 Toda la costa de las tierras de Paria e islas de la comarca, que son tantas, han sido robadas, y muerto gran número de gente. En días que vivan, los vivos no serán amigos nuestros. Ricas son y no de tener en poca estima: oro y perlas y especiería, con brasil (en mucho se tiene entre cristianos y moros y toda gente). Las tierras que acá obedecen a V.A. son más que todas las otras de cristianos, y ricas. Después que yo por voluntad divina las hube puestas en su real y alto señorío y en hilo por haber grandísima renta, de improviso, esperando navíos para venir a su alto conspecto con mi victoria y grandes nuevas del oro, muy seguro y alegre, contra su real 15 Columbus’s little hymn to gold continues with biblical allusions (here omitted) to Solomon’s building of the Temple with the gold of Tarshish, before returning to the idée fixe of his own crusade to recapture Jerusalem (cf. Diario del primer viaje 26 December & n51). 16 Psalm 14:7 (Catholic translation) ‘Who from Zion will give deliverance for Israel? When the Lord averts the captivity of his people, Jacob will rejoice and Israel will be glad.’ 17 On the prophecy attributed to Joachim da Fiore see Carta a los reyes 6 & n10. The source of the allusion to St Jerome’s letter to a ‘santa mujer’ is not identified. 18 See Diario del primer viaje Prologue & n2. Kublai Khan’s request for missionaries occurred not ‘the other day’, but two centuries before. 19 This curious but memorable sentence, which appears in different places in the two MSS (Tarragona places it in the middle of the previous paragraph) may mean ‘the business of my reward’, but is more likely another reference to the crusade for the recapture of Jerusalem (n15, above). 20 Matt 22:21 ‘Render therefore unto Caesar the things which are Caesar’s, and unto God the things that are God’s’; the ‘just man’ who said this was Jesus Christ. © Jeremy Lawrance 2002 14 15 16 6 SPAN364: COLUMBUS AND LAS CASAS mandado fui preso y echado con dos hermanos en un navío, cargados de fierros, desnudo en cuerpo, con muy mal tratamiento, sin ser llamado ni vencido por justicia. ¿Quién creerá que un pobre extranjero se hubiese de alzar en tal lugar contra V.A. sin causa y sin brazo de otro príncipe, y estando solo entre sus vasallos y naturales, y teniendo a todos mis fijos en su real corte? Yo vine a servir de 28 años, y ahora no tengo cabello en mi persona que no sea cano, y el cuerpo enfermo para siempre y gastado. Cuanto me quedó de aquello me fue tomado y vendido, y a mis hermanos hasta el sayo, sin ser oído ni visto, con gran deshonor mío y contra su real orden y mandado. […] También tenía yo urdido por hacer pueblos gruesos de indios, y cómo fuesen cristianos, y ya andaba en la obra; y si envié dellos a Castilla, fue para los volver a las Indias. La razón di muy larga a V:A. por escrito. La Española boja 800 leguas; al tiempo que yo fui allá, era populatísima y de gente provechosa. Cuando salí, le dejé en tanta obediencia que, si enviaba a llamar el mayor cacique desde el fin della al otro cabo con un solo cristiano, venía él luego con todos sus vasallos sin se detener una ora ni buscar excusa. Todo esto vio quien estaba en la tierra. Siempre dije y di por escrito a V.A. que los indios eran allí el oro y la riqueza. […] Perdidos los indios, perdida la tierra. Buena orden puede conservar todo esto. Yo estoy perdido si Dios no me socorre presto. Yo he llorado hasta aquí a otros; haya misericordia ahora el cielo y llore por mí la tierra. En el temporal, al cabo de veinte años de servicio que he servido con tantos trabajos y peligros, no tengo hoy día en Castilla una teja, y si quiero comer o dormir no tengo adónde salvo al mesón o en taberna, y las más de las veces falta por pagar el escote. En el espiritual, he parado aquí en las Indias de la forma que está dicho, aislado en esta peña, enfermo, aguardando cada día por la muerte, y cercado de un cuento21 de salvajes llenos de crueldad y sin misericordia y enemigos nuestros, móviles más que una hoja de álamo, y tan apartado de los santos sacramentos de la santa Iglesia que se olvidará desta ánima si se aparta acá del cuerpo. Llore por mí quien tiene caridad,22 verdad y justicia. Yo no vine este viaje a navegar por ganar honra ni hacienda. Esto es cierto: yo vine por servir a V.A. con sana intención y buen celo, y no miento. Suplico a V. A. que si algo h[e] dicho aquí contra su real voluntad, que me perdone. Yo estoy en tantas angustias y en tanto extremo que es maravilla cómo yo sea vivo y no tornado loco a echar piedras. En mil papeles no se escribirían mis penas. El sangre tengo convertido todo en apostema. También suplico a V.A. que, si a Dios place de me sacar de aquí, que haya por bien mi ida a Roma y otras romerías. Cuya vida y muy alto estado guarde y acreciente la Santa Trinidad a su santo servicio. Hecha en las Indias en la isla de Janahica, a 7 de julio de 1503 años De Vuestra Alteza muy humilde siervo que sus reales pies y manos besa .S. .S.A.S. XMY Xpo FERENS./ 21 cuento, ‘million’. 22 The Tarragona MS adds here, ‘castidad’. © Jeremy Lawrance 2002 17