4 CAPÍTULO CÓMO

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CAPÍTULO
CÓMO
ENTRENAR AL
COLOCADOR
SICCED
4
SECCIÓN
CONTENIDO
4.1
Introducción
4.2
Enseñanza de la técnica
4.3
Diferentes tipos de colocación
4.4
Formación de un buen estilo y
estabilidad psicológica
4.5
Ejercicios para el entrenamiento
4.6
Conclusiones
4.7
Sugerencias didácticas
4.8
Autoevaluación
4.9
Bibliografía
Manual para el Entrenador de Voleibol
Nivel 3
MANUAL DEL ENTRENADOR
CÓMO ENTRENAR AL COLOCADOR
OBJETIVO
Designar a los jugadores en posición de colocador considerando sus cualidades y
desarrollo técnico y táctico.
INSTRUCCIONES:
Después de haber leído este capítulo, Usted va a ser capaz de:






Poner en práctica las orientaciones para la detección de colocadores.
Aplicar los ejercicios que proponemos a su repertorio personal.
Practicar la enseñanza de la técnica del colocador.
Identificar los diferentes tipos de colocación que existen.
Definir un entrenamiento sistemático.
Desarrollar un buen estilo y estabilidad psicológica en su colocador.
4.1 INTRODUCCIÓN
El tema de los colocadores se ha convertido en un grave problema para los
entrenadores. En razón de que ciertos entrenadores descuidan el entrenamiento de la
colocación, otros, siguiendo sus pasos, han dejado de lado este entrenamiento del
colocador.
Debido a la posición fundamental que ocupa la colocación en un equipo, formar un
colocador es, en cierto sentido, mucho más difícil que formar un rematador.
Es bien conocido el importante papel que desempeña el colocador en el voleibol, un
colocador eficaz no sólo puede crear condiciones favorables para organizar la táctica de
su equipo sino que puede también confundir y perturbar el bloqueo del adversario,
contribuyendo de este modo al remate. En el voleibol contemporáneo las tácticas de
ataque son cada vez más rápidas y más variadas, por lo tanto, el colocador se ve
enfrentado con mayores exigencias en cuanto al dominio de la técnica, inteligencia
táctica y habilidad para organizar el juego. El alto o bajo nivel de las tácticas de ataque
de un equipo depende en gran medida del colocador. El hecho de que los mejores
equipos de voleibol del mundo posean excelentes colocadores nos lleva a la conclusión
de que el colocador es el corazón y el alma del equipo.
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MANUAL DEL ENTRENADOR
Hay muchos colocadores con estilos y técnicas diferentes; las técnicas mostradas en
este capítulo, tienen su origen en una sencilla filosofía, un colocador debe ser
entrenado con una base sólida. A medida que gane experiencia, sé ira desarrollando de
forma inevitable un estilo personal.
4.2 ENSEÑANZA DE LA TÉCNICA
Como entrenador se debe estar dispuesto a invertir tiempo extra para desarrollar a su
colocador. El tiempo mínimo diario, específicamente destinado para su o sus
colocadores, debe ser de treinta minutos, si se puede dedicarles una hora, previo al
entrenamiento general, su progreso será más rápido y mayores los éxitos de su equipo,
para obtener resultados se precisa tiempo y repeticiones, y usted como entrenador
debe llevar la dirección de estos ejercicios. Los buenos colocadores han pasado
muchísimas horas observando, imitando y practicando.
La utilización adecuada de los métodos correctos es un factor importante para
desarrollar las técnicas básicas del colocador y para la profundización de su progreso.
En consecuencia, hay que prestar a estos jugadores una atención especial durante la
fase inicial de su instrucción, que es cuando los errores son más fáciles de corregir.
Con el fin de sugerir y explicar mejor un estilo que usted puede emplear para entrenar a
su colocador, vamos a describir a continuación un método de enseñanza tradicional de
juego de piernas y postura anatómica. En la postura anatómica básica, los hombros, la
cadera y los dedos de los pies del jugador deben encarar el objetivo, el pie derecho
debe situarse ligeramente por delante del izquierdo, y los dos pies deben estar
separados entre sí.
Idealmente, el colocador debería moverse con rapidez, situar los pies en posición y
dirigir los hombros hacia el objetivo. No importa donde se coloque el balón, el objetivo
principal del colocador es situarse debajo del balón, encararse correctamente, y
después colocarlo. Esta parte de la técnica exigirá
tiempo y repeticiones para
desarrollarla.
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MANUAL DEL ENTRENADOR
Movimiento
Es de gran importancia entrenar a los jugadores en la técnica del movimiento
apropiadamente. El colocador debe ser capaz de realizar toda clase de movimientos en
todas las direcciones posibles y al mismo tiempo situarse en la posición correcta para
colocar el balón. Los modelos de movimiento que deberá practicar un colocador son
entre otros los siguientes:
- Moverse a derecha o izquierda, adelante y atrás.
- Girar a derecha o izquierda 180 °.
- Correr detenerse y saltar.
- Moverse y efectuar caídas para recuperarse y colocar.
Uno de los movimientos más importantes que realizan los colocadores, es el inicio
cuando se dirigen al balón. En primer lugar debe situarse en la posición adecuada
cerca de la red, y después ajustarse al pase, el colocador debe estar situado cerca de
la red esperando el pase, observando el balón y moverse después hacia ella.
1. Posición inicial
La posición inicial debe ser la misma para todas las colocaciones a fin de no facilitar al
oponente indicación alguna del lugar en que va a colocarse el balón. Por la misma
razón, el lugar de contacto con ella debe ser el mismo en todos los casos. Así, cuando
el balón inicie su descenso, el jugador debe adoptar la posición inicial con los pies
cómodamente separados y el peso del cuerpo distribuido de forma equilibrada, las
rodillas semi-flexionadas y listas para hacer pequeños ajustes a medida que la pelota
se acerca, no debe apoyarse demasiado el peso en los talones, las muñecas deben
estar semi-flexionadas hacia atrás de manera que la mano y el antebrazo formen un
ángulo de 135 ° o menos, las manos en forma de copa y relajadas. Este último punto,
el que estén relajadas, es muy importante para amortiguar el contacto con el balón.
2. Contacto con el balón y la posición de las manos
El contacto con el balón tiene lugar por encima de la cara o de la frente sobre la parte
superior interna de los dedos, no se golpea la pelota, si no que en realidad permanece
en contacto con las manos durante un instante, los dedos deben formar una copa con
las dos manos, los pulgares deben estar hacia arriba y atrás, nunca hacia delante y
abajo. La mayor parte del contacto tiene lugar generalmente sobre los tres primeros
dedos, pero los demás también reciben un contacto, es muy importante que la pelota
se hunda bien entre las manos.
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La mayor parte de la fuerza aplicada al balón no proviene del giro de la muñeca, sino
de la acción coordinada del cuerpo sobre el balón, la línea de fuerza se extiende desde
los pies (o el pie rezagado) a través del centro de gravedad, hasta el balón. Ni la
colocación ni su continuación deben realizarse de un modo rápido o lento; debe ser un
movimiento suave y coordinado con los brazos completamente extendidos en el
momento de soltar el balón. Es muy importante que el movimiento de rodillas, piernas y
brazos que acompaña la colocación sea ligero y suelto, para que el vuelo del balón sea
suave, sí el movimiento del cuerpo es brusco, entonces, el vuelo es incierto, no
deliberado.
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3. El movimiento para soltar el balón
El movimiento para soltar el balón es con los brazos completamente extendidos, se
emplea para colocaciones altas o largas y distantes. Para el contacto con el balón se
emplea la misma posición básica adelante de la frente, pero los brazos se extienden
para soltarla. Esta misma técnica se empleará por parte de todos los jugadores cuando
coloquen el balón a un rematador.
Soltar el balón con rapidez es un movimiento utilizado en sistemas de juego más
avanzados, no obstante, no deje que la palabra “avanzado”, no le permita utilizar dicha
técnica. Se emplea para las colocaciones cortas y rápidas, las manos contactan el
balón a la altura de la frente y regresan a la misma sin efectuar extensión alguna, lo
cual le permite un mejor control del balón en las colocaciones.
 Integración de la posición del cuerpo y los pies
La integración del juego de pies es fundamental para desarrollar a un colocador. Esta
integración incluye, generalmente la siguiente secuencia:
a) Movimiento hacia la zona estimada para interceptar el balón, basándose en el vuelo
y la dirección del balón.
b) Alineación del cuerpo para interceptar la dirección que lleva el balón, que se
aproxima con la dirección que se pretende dar a la colocada.
c) Orientarse hacia el objetivo previsto: situar el pie en posición.
d) Ajustes finales y ejecución.
4.3 DIFERENTES TIPOS DE COLOCACIÓN
Existen muchos tipos de colocación en el voleibol que pueden usarse con eficacia,
trataremos algunos de las más comunes en este capítulo.
 Colocación desde el fondo del campo de juego
Los balones colocados desde el fondo del campo de juego o de atrás de la línea de los
tres metros, reciben el nombre de colocación del fondo del campo de juego. Es preciso
extender completamente los brazos al soltar el balón, debido a que se colocará alto y la
distancia del envío es mayor. La posición del cuerpo será la misma descrita
anteriormente. Esta colocación es la que todos los jugadores deban llevar a cabo con
toda precisión. El entrenamiento y las repeticiones son necesarios para la consistencia
de la totalidad de los jugadores en este tipo de colocaciones.
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 Colocación hacia atrás
Una colocación hacia atrás se produce cuando el balón se coloca desde encima de la
cabeza hacia un rematador situado detrás. La posición inicial para este tipo de
colocaciones es la misma que la de la colocación hacia adelante. Las manos deben
estar adelante de la frente con los dedos extendidos. Inmediatamente después de
contactar el balón, las muñecas se doblan ligeramente hacia atrás. La amplitud de la
extensión del brazo dependerá de la distancia y de la altura de la colocación, la cadera
debe estar suelta para empujar el balón, el mayor o menor empuje de la cadera y la
extensión de los brazos determinarán la amplitud y la distancia de cada colocación. Es
importante que la posición de las manos no varíe. Las manos se sitúan más arriba de la
cabeza, la colocación hacia atrás ya no resulta tan inesperada para los oponentes.
La posición del cuerpo en la colocación hacia atrás más común entre los colocadores,
se realiza con el cuerpo de espaldas a la parte frontal derecha del campo de juego. La
desventaja de esta técnica reside en el hecho de que se pone sobre aviso a los
bloqueadores hacia adonde se colocará el balón. Esta es una forma que facilita la
enseñanza del colocador, una posición del cuerpo que puede aumentar las
posibilidades de engañar al equipo contrario es la previamente descrita con la posición
del cuerpo básica. La posición del cuerpo no varía en esta posición a menos que el
balón se quede cerca del fondo del campo de juego. El jugador debe situarse
rápidamente en posición y dirigir los pies y la cadera, los hombros y los dedos de los
pies hacia la parte frontal izquierda. Los únicos movimientos que cambian son la
extensión de los brazos y el acompañamiento. Una vez que el balón ha entrado en
contacto con las manos, estas y los brazos se extienden hacia la parte frontal derecha.
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 Cómo colocar durante el juego
Es importante soltar el balón con rapidez en todas las colocaciones durante el juego
para crear consistencia. El jugador debe ser capaz de colocar un balón en forma
apropiada con cada posición de ataque, se emplean muchas técnicas para indicar el
tipo de colocación. El colocador puede llamar por un número previamente acordado a
cada uno de los rematadores o puede hacer una señal con la mano que les indique a
los rematadores la colocación que va a efectuarse.
 La colocación con salto (en suspensión)
La colocación saltando debe emplearse para cualquier ataque “avanzado”, aumenta las
opciones ofensivas del colocador, incrementando como consecuencia la del rematador.
La posición de las manos y del cuerpo son importantes para la efectividad de esta
colocación, la posición del cuerpo es la misma que para todas las demás clases de
colocaciones. Si el colocador salta con las piernas separadas, el rematador tendrá
dificultades en sus ángulos de aproximación. Es muy importante mantener las manos a
la altura de la frente. El balón se contacta en el momento en que el salto alcanza su
máxima altura, el colocador salta, y en el instante en que queda inmóvil en el aire,
coloca el balón.
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 Colocación con caída
Esta colocación se emplea cuando el jugador no es capaz de conseguir adoptar la
posición corporal correcta con respecto al balón, esta posición puede ser el resultado
de un pase de recepción del saque, o una defensa del campo mal ejecutada o muy
abajo. En este caso el colocador debe ser flexible y acrobático para conseguir alcanzar
el balón y realizar una colocación alta que permita ser rematada. El medio más efectivo
es mediante una media caída hacia atrás que permite al jugador situarse debajo del
balón con las manos en la frente y colocar extendiendo totalmente los brazos.
1- Las rodillas deben estar enfrente del balón, con el pie derecho hacia adelante.
2- Las manos se colocan a la altura de la frente.
3- Después de contactar el balón, los brazos se extienden empujando el balón.
4- El impulso lanzará el cuerpo hacia atrás provocando la media caída o media
rodada.
Sugerencias para entrenar la observación del campo contrario
Después de entrenar a sus colocadores en las técnicas apropiadas no se debe
descuidar el adiestrar los ojos, cuanto más habituado y experimentado sea el jugador
en las colocaciones básicas, más fácil le será apartar los ojos del balón y observar la
totalidad del campo contrario. Muchos colocadores concentran la mirada solo en el
balón, ignorantes de lo que sus oponentes están haciendo, esta habilidad, le permitirá
ser capaz de apartar los ojos del balón, para observar la cancha contraria, requiere
muchas horas de práctica mediante el entrenamiento del movimiento ocular.
Cuanto más eficiente sea el movimiento de los ojos, más exitoso se volverá el
colocador en el esfuerzo total del equipo, resultará más fácil para los colocadores tratar
las situaciones una por una, o efectuar ataques de segundo golpe en el momento
oportuno, si son conscientes de la situación total del campo de juego.
La observación ocular puede incorporarse a la mayoría de los entrenamientos de los
colocadores, una vez que el colocador se ha familiarizado con las técnicas de
colocación básica.
El siguiente desarrollo del examen ocular se lleva a cabo después del pase y antes de
la colocación:
1- Observación ocular hacia la parte frontal izquierda (posición cuatro). Localizar el
balón y antes de colocar localizar al rematador, y donde se enviará el pase, esto
servirá también de ayuda para dirigir el cuerpo en esa dirección.
2- Observación del bloqueador contrario situado en la parte frontal derecha.
3- Observación ocular del bloqueador medio contrario, este es de importancia
crítica.
4- Observación ocular del rematador en la parte frontal derecha.
5- Observación ocular de la defensa zaguera del campo contrario.
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El entrenamiento de cada una de estas observaciones, preparará al colocador para
cualquier situación, la visión periférica también es importante, puesto que son muchas
las veces en que el colocador necesita ver al bloqueador contrario, especialmente al
bloqueador central, justo antes de colocar el balón, con una buena visión periférica, el
colocador puede percibir la situación antes de colocar el balón.
Una vez que se ha trabajado lo suficiente en los movimientos y las técnicas básicas, el
entrenamiento deberá planificarse de manera tal que el colocador deba abordar los
aspectos de más dificultad de las técnicas, estos varían según el nivel del jugador.
El novato deberá poner acento en el entrenamiento de los movimientos básicos para los
colocadores que han alcanzado un cierto nivel, el acento deberá ponerse en el envío de
balones relativamente bajos y los colocadores hacia atrás. Una vez superado este
punto, estarán seguramente en condiciones de enfrentar sin problemas otros tipos de
balones. Para los colocadores más avanzados, los puntos de más dificultad podrían
residir en la organización de tácticas veloces de ataque, lo que requiere precisión y una
estrecha cooperación entre los jugadores. Aquellos colocadores de un nivel aún más
sofisticado, deberán avocarse al desarrollo de la técnica de la colocación en salto, fintas
de colocación y otro tipo de técnicas que perturben el juicio del equipo contrario
respecto de la verdadera intención del colocador.
El insistir en los aspectos difíciles uno por uno, de manera gradual, permitirá acelerar el
proceso de crecimiento técnico del colocador.
El entrenamiento sistemático
Existe una gran variedad de técnicas para la colocación, las que requieren experiencia
y acciones diferenciadas. Por ejemplo, la posición de las manos es diferente en los
pases rápidos y en la colocación alta; la rápida lanzada es diferente de la rápida corta;
la colocada atrás es diferente de la colocación adelante, etcétera.
En la planificación del entrenamiento del equipo, el entrenador deberá idear planes
específicos de acuerdo con las características del colocador, los objetivos de las
tácticas del equipo en su totalidad y el nivel del colocador en ese momento. El plan
deberá llevarse al cabo paso a paso, en forma estricta y sistemática.
Durante el entrenamiento, los colocadores deben centrarse en la cooperación con los
atacantes y en las acciones a ejecutar en el ataque y la defensa. Además, el colocador
debe disponer de tiempo para perfeccionar sus técnicas de colocación de manera
sistemática.
De esta forma, puede garantizarse la calidad de la colocación y acelerarse el proceso
de aprendizaje y el manejo de la técnica del mismo. Entre tanto, el entrenamiento de la
colocación debe combinarse con el de otras técnicas, lo que contribuirá, además, al
desarrollo integral del colocador; a fin de dar más énfasis al colocador, es aconsejable
asignar un entrenador para el entrenamiento específico de aquél.
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 Poner énfasis en los movimientos básicos
En el curso del entrenamiento, debe ponerse especial énfasis en los movimientos
básicos de la colocación, los que constituyen el fundamento más sólido para el posterior
perfeccionamiento del colocador. Ni siquiera aquellos colocadores que han alcanzado
un cierto nivel pueden dejar de lado este aspecto, si su objetivo es lograr un constante
desarrollo.
-
Debe prestarse mucha atención a la velocidad de las acciones y movimientos de
partida. Es muy importante que el colocador efectúe un juicio acertado sobre la
trayectoria de los diferentes balones que llegan en segundo golpe (recepción del
saque). Para ello, el entrenador deberá poner énfasis en los puntos básicos, tales
como: velocidad de la partida y el desplazamiento del colocador hacia el encuentro
del balón, su buen dominio del centro de gravedad de su cuerpo y su capacidad
para detenerse completamente en forma repentina y cambiar velozmente la
dirección de sus desplazamientos.
4.4 LA FORMACION DE UN
BUEN ESTILO Y ESTABILIDAD
PSICOLÓGICA
Si en los rematadores un buen estilo y un adecuado grado de estabilidad psicológica
son factores importantes, en el colocador estas características son aún más
importantes debido al papel que éste desempeña y a la posición que ocupa en el
equipo. La formación de un buen estilo y estabilidad psicológica implica el desarrollo de
los siguientes aspectos:
-
Debe entrenarse al colocador para que adquiera una fuerte voluntad, audacia para
luchar por el triunfo y capacidad para manejar y resolver toda clase de situaciones
desfavorables.
Además, el colocador no deberá demostrar temor ante adversarios fuertes, por el
contrario debe tener una buena predisposición todo el tiempo y luchar hasta el final.
-
El colocador debe tener sentido de la responsabilidad y realizar el máximo esfuerzo
para ganar cada tanto. Debe además, ser capaz de actuar como el motor del equipo
en cualquier circunstancia, especialmente en condiciones desfavorables, y ser lo
suficientemente valiente como para asumir responsabilidades y adoptar las medidas
necesarias de acuerdo con cada situación en el campo de juego.
-
El colocador debe tener una actitud de cooperación. Por un lado, debe desempeñar
correctamente su propia función y, por el otro, debe subordinar sus acciones a las
de los atacantes, lo que requiere magnanimidad de su parte para crear
oportunidades de ataque para sus compañeros de equipo.
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-
Por último, el colocador debe encontrarse lúcido en todo momento, para los
partidos, ante todo, debe tener información general sobre ambas partes, lo que le
permite tener la suficiente confianza y sofisticación para manejar todas las
situaciones que puedan producirse en la cancha.
La formación de un buen estilo y un adecuado grado de estabilidad psicológica se logra
a través de entrenamientos diarios y competiciones constantes, y ello no puede lograrse
en un día. El entrenador deberá crear diversas situaciones que tengan dificultades, a fin
de entrenar a los colocadores y exigirles al máximo.
Seleccione los candidatos adecuados
Debemos ser muy estrictos en lo que respecta a la selección de los posibles
colocadores. El colocador ideal debe reunir condiciones tales como poseer un estilo
tenaz, estabilidad psicológica, lucidez, versatilidad en las técnicas, habilidad en el uso
del tren inferior, velocidad de reacción y que tales condiciones le permitan realizar
colocadas perfectas. Asimismo, el candidato debe tener una estatura aproximada: en
las mujeres 1.75 a 1.85 metros, en los hombres 1.80 a 1.90 metros, y tener habilidad
para el remate y el bloqueo, y, por supuesto, capacidad de criterio y organización dentro
del campo de juego. Preferente, el colocador debe ser zurdo, lo que constituye una
ventaja para realizar remates o toques directos de segundo golpe.
Lo ideal es que el primer colocador sea capitán del equipo, a fin de que pueda llevar al
cabo los objetivos tácticos, dirigir a todo el equipo y reunir a este en un todo para poner
en pleno funcionamiento las tácticas y las técnicas. El colocador puede ser
seleccionado de entre los rematadores, quienes, se supone, reúnen los requisitos
mencionados precedentemente. Aquellos que no se ajusten a los requisitos no deberán
ser tomados en cuenta (jugadores de baja estatura, poca capacidad de salto, poca
versatilidad en las técnicas o falta de perceptividad).
Seleccionar los métodos de entrenamiento adecuados
Los efectos del entrenamiento del colocador deben hacerse evidentes en los partidos y
en las competencias. En lugar de pararse al lado de la red esperando pasivamente el
balón, el colocador debe ser entrenado para manejar cualquier clase de balones que
reciba, mediante movimientos rápidos, cambios repentinos de dirección, acciones
continuadas y un ritmo intenso de competición.
Más concretamente:
 Debe acentuarse la importancia de realizar un juicio sobre la trayectoria del balón
proveniente de la recepción del saque. Debe entrenarse al colocador para que sea
capaz de colocar balones provenientes de todas las direcciones y con diferentes
velocidades – balones altos o bajos, largos, cortos, pesados y livianos, lentos o
veloces – y para que pueda efectuar la colocación con movimientos veloces y
cambios repentinos de dirección.
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 El entrenamiento del colocador debe ponerse en relación con el entrenamiento de
las tácticas de ataque de todo el equipo. El colocador debe estar al servicio de los
requerimientos de dichas tácticas.
En entrenamiento del colocador también deberá incluir la práctica de acciones
continuadas, tales como cubrir los remates y regresar a su posición original.
 El entrenamiento del colocador debe combinarse con el bloqueo del contrario. Debe
entrenarse al colocador para que pueda elegir el lugar, el punto débil al cual dirigir
sus acciones y aplicar las tácticas apropiadas a las competencias de ritmo intenso.
Aplicaciones tácticas
El pase por arriba es un contacto intermedio, sin embargo, en virtud de la naturaleza del
voleibol, la aplicación táctica del pase por arriba en la colocación define la ofensiva del
equipo. Todas las trayectorias y velocidades planeadas, combinadas con las carreras
de aproximación del rematador, debidamente sincronizadas, constituyen la aplicación
específica del pase por arriba al esquema de ataque total.
No obstante, todo jugador, cualquiera que sea su nivel de competencia, debe
comprender algunos principios básicos:
-
-
-
-
-
Cuanto más duro es el juego, más altos son los pases.
Al colocar, debe hacerse la jugada más simple que se pueda. El colocador debe
pasar para el rematador más cercano frente a el. Es fundamental que el rematador
pueda dar al balón un buen golpe.
Separar el balón de la red.
Detenerse antes del contacto. El jugador debe ubicarse de manera que puede
enviar el balón al punto deseado. SI el jugador retrocede, este debe compensar el
movimiento con las manos, perdiendo así, ritmo y control.
Al colocar el balón alto, hay que colocarlo entre el atacante y la red. Aquí no es
necesaria la precisión sino la altura. El balón debe enviarse a 1 o 2 metros de la red,
una vez alcanzado el punto máximo, el balón debe caer como el agua en cascada.
El balón debe colocarse dentro del alcance del rematador, este principio está
dirigido a los jugadores que no son específicamente colocadores, el objetivo más
importante es posibilitar al rematador un golpe contundente. Si el balón se coloca
demasiado al costado o demasiado cerca de la red, el rematador no podrá efectuar
un buen golpe.
Dirigir la colocación a la opción más fácil. Cada jugador debe procurar realizar el
mayor porcentaje posible de aciertos, puesto que entrenadores, compañeros de
equipo y simpatizantes por igual estarán a la expectativa, cuando un jugador cuya
función no es la de colocador realice una colocada con salto, uno hacia atrás, o
intente una variante difícil. Cada jugador debe colocar para la opción más cercana o
más fácil delante de él, si no hubiese otra opción entonces, el jugador intentar debe
una colocada hacia atrás.
En cada caso, el entrenamiento de la defensa depende de las respuestas que el
entrenador da a las preguntas sobre el nivel técnico-táctico de su equipo; las
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especialidades del adversario en cuanto el remate, y las posibilidades de desarrollo. No
obstante, pueden establecerse algunos principios generales para el entrenamiento de la
defensa, lo que jugadores y entrenador pueden desarrollar con la mayor profundidad.
El entrenamiento de la defensa no debe ser demasiado prolongado ni muy intenso.
Puesto que son los componentes, cognitivos los que deben ocupar un lugar privilegiado
dentro de las variables del rendimiento. Y “matar” a un jugador en el entrenamiento de
la defensa, no mejora automáticamente la defensa. En el mejor de los casos, lo que se
entrena con ello y se fortalece es la voluntad del jugador.
4.5 EJERCICIOS PARA EL ENTRENAMIENTO DEL COLOCADOR
Ejercicio N° 1.
Ejercicios básicos para los golpes de arriba.
Los jugadores, de dos en dos, se pasan el balón a una distancia de 6 metros como
mínimo, de 50 a 100 veces cada uno. Antes de realizar el pase, el jugador debe mirar a
su compañero.
Igual para los pases rápidos.
Variantes:
-
El jugador hace un auto-pase y luego pasa el balón al compañero (30 a 50 veces
cada uno).
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-
El jugador hace un auto-pase, luego gira 90° y hace un pase lateral (gira una vez a
la derecha y una a la izquierda).
-
Hace un auto-pase, gira 180° y hace un pase atrás a su compañero (30 a 50 veces
cada uno).
-
Hace un auto-pase en salto y luego pasa el balón a su compañero.
-
Hace un auto-pase, salta y gira 90° y hace un pase lateral a su compañero.
-
Hace un auto-pase, salta y gira 180° y hace un pase atrás a su compañero.
-
Antes del pase, realiza una acción simulada de remate.
-
Auto-pase en salto con una sola mano y luego pasa el balón a su compañero (con
ambas manos).
Ejercicio N° 2
Pases cerca de la red.
Se realizan dos pases con el mismo balón. El entrenador arroja un balón y el colocador
se desplaza hacia adelante (en forma paralela a la red), devuelve el balón, vuelve al
punto de partida, hace otro pase y se desplaza hacia atrás (en forma perpendicular a la
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red).
Variantes:
-
El colocador se desplaza hacia la derecha y hacia la izquierda para efectuar los
pases.
-
El mismo ejercicio pero con dos balones.
-
El colocador se acerca a la red, vuelve atrás y, luego de recibir el balón del
entrenador, hace un pase bajo.
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Ejercicio N° 3
Pase y defensa de campo.
Luego de pasar el balón al entrenador, el colocador vuelve hacia atrás, defiende el
balón (arrojado nuevamente por el entrenador), pasándolo a otro colocador ubicado en
la red.
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2
Ejercicio N° 4
Pase y defensa del balón.
Luego de enviar el balón, el colocador regresa y defiende el balón (arrojado por el
entrenador) pasándolo a otro colocador.
Ejercicio N° 5
Pase cubriendo el balón.
Luego de colocar el balón (devolviéndolo al entrenador), cubre dos balones (arrojados
por el entrenador), el primero en la zona de ataque (devolviéndolo al entrenador) y el
segundo en la zona de zagueros (pasándolo a otro colocador).
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Ejercicio N° 6
Pase, cubriendo y defendiendo el balón.
Luego de colocar el balón, el colocador cubre y defiende los balones arrojados por el
entrenador, pasándolo a otro colocador.
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3
Ejercicio N° 7
Penetración para el pase.
El colocador penetra desde la posición 1, 6 o 5 y hace un pase al jugador en posición 4.
Se utilizan dos balones, uno para colocar alto y otro para colocar rasante, o tendido,
alternativamente.
Ejercicio N° 8
Pase al jugador en posición 3.
Ejercicio con dos balones, el colocador hace rápidas lanzadas y rápidas cortas.
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Luego de la colocación, el colocador recoge su propio balón.
Ejercicio N° 9
Pase al jugador en posición 2.
Ejercicio con dos balones, el colocador realiza una colocada rápida corta atrás – semirápida o alta atrás, dirigiéndolo al asistente, quien devuelve el balón al entrenador.
Ejercicio N° 10
Pase a la posición 2 o 4.
Ejercicio con un solo balón. Luego de colocar el balón, el colocador sigue la trayectoria
de éste. El otro colocador vuelve hacia atrás y penetra para hacer su pase. Después de
colocar, el primer colocador recoge su propio balón.
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Ejercicio N° 11
Pase de dos balones con diferentes tendencias.
Ejercicio con dos balones, todos efectúan dos pases, el primero es una colocada larga,
el segundo, una corta.
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Ejercicio N° 12
Pase a la posición 4, salto y colocar en cuclillas.
Ejercicio con dos balones, todos efectúan dos pases, el primero es una colocación en
salto, el segundo, uno en cuclillas.
4. 6 CONCLUSIONES
El colocador es ante todo, la cabeza pensante del equipo dentro del campo de juego,
cualquiera sea el resultado, no puede decaer, debe mantenerse lucido en todo
momento. Debe ser quien comande en el terreno de juego, ante todo mentalmente, y
luego técnica y tácticamente, el juego debe desarrollarse a partir de sus ideas.
Para adquirir este nivel de juego es necesario pasar por un gran número de
entrenamientos específicos, debe dedicarse mucho más tiempo a la formación del
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colocador que al resto del equipo.
En el voleibol moderno, el tiempo es el regulador de todo, entrenadores y jugadores,
colocadores y rematadores necesitan tiempo para llegar a conocerse unos a otros, se
requiere mucha paciencia para formar los talentos de mañana.
Durante las sesiones de entrenamiento nosotros como entrenadores debemos
confrontarlos constantemente con problemas a resolver y dificultades a vencer la noción
de lo mental debe estar siempre presente, como lo esta el prepararse para jugar contra
un adversario difícil.
Finalmente la única manera de ganar es conocer y estudiar al adversario pero antes
conocerse a sí mismo.
4.7 SUGERENCIAS DIDÁCTICAS
Para la revisión de este capítulo se recomienda:
 Ensaye la posición del colocador cuidando los movimientos y posición del cuerpo,
corrija la ejecución de la técnica.
 Ejemplifique los diferentes tipos de colocación enfatizando, los aspectos que hay que
cuidar.
 Utilice videos en los que se visualice el papel del colocador.
 Para entrenar la observación del campo, ejemplifique varios ejemplos que se pueden
utilizar durante el entrenamiento.
 Enfatice la importancia de integrar el programa de entrenamiento ejercicios para
desarrollar al colocador.
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4. 8 AUTOEVALUACIÓN
Instrucciones: Coloque en el paréntesis la letra que corresponda a la respuesta
correcta.
1. El alto o bajo nivel de las tácticas de ataque de un juego depende en gran medida
del.
( )
a) Bloqueador central
b) Rematador principal
c) Colocador
2. Si en los rematadores un buen estilo y un adecuado grado de estabilidad psicológica
son factores imperantes, en el colocador estas características son aún más
importantes debido a:
( )
a) El papel que desempeña y la posición que ocupa en el equipo
b) La potencia que aplica en sus remates
c) Que sabe leer la colocación y entrada del rematador contrario para saltar a bloquear
oportunamente
3. ¿Cómo puede garantizarse la calidad de la colocación y acelerarse el proceso de
aprendizaje y el manejo de la técnica del mismo?
( )
a) Disponiendo de un tiempo aparte en el entrenamiento para perfeccionar sus técnicas
de colocación de manera sistemática
b) Entendiendo a la preparación física como determinante para su desarrollo
c) Asistiendo a juegos informales, le ayudara más en su desarrollo que el
entrenamiento sistemático
4. El insistir en los aspectos difíciles uno por uno, de manera gradual permitirá el
proceso del ______________ del colocador.
(
)
a) Nivel
b) Crecimiento técnico
c) Desarrollo físico
5. Manejar cualquier clase de balones que reciba, mediante movimientos rápidos,
cambios repentinos de dirección, acciones continuas y un ritmo intenso de la
competencia, son:
(
)
a) Los efectos del entrenamiento del colocador que se hacen evidentes en los partidos
y en las competencias.
b) Las características naturales de todo jugador que se decide a ser colocador
c) Son producto del desarrollo de un programa específico del desarrollo de la fuerza.
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MANUAL DEL ENTRENADOR
6. ¿Qué características tiene el colocador principal?
(
)
a) Dirige a todo el equipo, y reúne a este en un todo para poner en pleno
funcionamiento las tácticas y técnicas.
b) Es el jugador más castigado, cuando se gana, porque quien llama la atención son
los rematadores.
c) Es el jugador que menos invierte en su preparación
7. ¿Cuál considera usted que debe ser la cualidad mental más importante del
colocador?
( )
a) Tenerle demasiada consideración al contrario
b) Su actitud y predisposición
c) Su disposición para estar al servicio del equipo
8. Una vez que se ha trabajado lo suficiente en los movimientos y las técnicas básicas
el entrenamiento deberá planificarse de manera tal que deberá abordar los aspectos
de más dificultad de las técnicas y estos varían según el.
( )
a) El nivel del jugador
b) El físico del jugador
c) Entrenador del equipo
9. Un colocador eficaz no solo puede crear condiciones favorables para organizar las
tácticas de su equipo, sino que puede también confundir y perturbar el bloqueo del
adversario, contribuyendo este al.
(
)
a) Cambio al bloqueo
b) Modo al ataque
c) Punto de objetivo
10.El colocador debe tener sentido de la responsabilidad y realizar el máximo esfuerzo
para ganar cada tanto. Debe además, ser capaz de actuar como el motor del equipo
en cualquier circunstancia, a todo esto ¿como se le considera?
(
)
a) Un buen estilo y estabilidad psicológica
b) Características muy propias de un ganador
c) Elementos imprescindibles de cualquier jugador
11.Todas las trayectorias y velocidades planeadas, combinadas con las carreras de
aproximación del rematador, sincronizadas constituyen la aplicación específica del
pase por arriba como.
(
)
a) Un esquema de ataque total
b) Como un contacto intermedio
c) Como una de las jugadas más simples
12.¿Cuál es el objetivo principal en el desarrollo técnico del colocador?
a) Contactar el balón
b) Llegar al mismo tiempo que el balón
c) Situarse debajo del balón, antes del contacto
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(
)
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MANUAL DEL ENTRENADOR
Instrucciones: Conteste Falso (F) o Verdadero (V) según sea el caso.
13.La posición inicial debe ser la misma para todas las colocaciones a fin de
no facilitar información alguna de donde va a colocarse el balón
(
)
14.EL contacto con el balón debe ser la parte superior interna de los dedos
(
)
15.Soltar el balón con rapidez es un movimiento utilizado en sistemas de
juego más avanzados
(
)
16.La integración del juego de pies es fundamental para desarrollar al
colocador
(
)
Hoja de respuestas
4.9 BIBLIOGRAFÍA
Hiroshi Toyoda Masuro Saito, Sports course , Ed. Oizumi Sports, 1996
Pittera, Carmelo, Voleibol dentro del movimiento, Ed. Revista Voley, 1996
Material del Curso Internacional, Japón 1993
Guía Voleibol de la AEAB, Ed. Paidotribo
Revista Volley – Teach 3/90 ed. FIVB
Capítulo 5
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