El místico arte de la respiración Por George Buletza, Ph.D., F.R.C. Revista El Rosacruz A.M.O.R.C. El hombre puede existir unos treinta días sin alimento, tres días sin agua, pero sin respirar, su existencia puede ser medida dentro de cinco minutos. El promedio de las personas respira 18.926,53 litros o 13.50 kilos de aire cada día, lo que es seis veces más alimento y bebida el que consume por peso. Los animales, las plantas y los metales pasan a través de un período llamado respiración. Hasta nuestro Sol, el corazón de nuestro sistema solar, es denunciado de respirar regularmente, cada aliento tomando once años. Todas las cosas vivientes dependen enteramente en alguna clase de respiración cíclica para poder mantener su existencia. En el hombre, la respiración rítmica es subconscientemente ejecutada por el Sistema Nervioso Autónomo (SNA), tanto durante el día como la noche. La tasa de respiración es gobernada por los requerimientos del cuerpo, y cuando un sujeto está completamente relajado o mentalmente concentrado, puede escasamente estar consciente de que está respirando. Cuando se trabaja sentado, a tales sujetos, a menudo, necesitan ser recordados que el cerebro requiere tres veces más oxígeno para funcionar apropiadamente de lo que necesita el cuerpo. La correcta respiración aumenta la agilidad y la eficiencia, y puede promover una actitud positiva y un relajado sentimiento de bienestar. Debido a las funciones equilibradas y armónicas del SNA, la tasa del corazón responde directa y prontamente a los efectos de la respiración. Si el aliento se mantiene por unos pocos segundos, la tasa del corazón aumenta; si se respira rápidamente, el corazón actúa más lento, y estos cambios ocurren en una escala menor por cada esfuerzo respiratorio hecho. No solamente hay cambios en la tasa del corazón con cada inhalación y exhalación, sino en estado de suave ansiedad o agilidad la respiración puede ser detenida por cortos períodos de tiempo o aire ingerido rápidamente, y estos moldes irregulares de respiración causan cambios significativos en la tasa del corazón. Sobre y encima de su función equilibrante, el SNA es un mecanismo jefe por medio del cual se expresa la emoción. Como todas las otras funciones del SNA, ésta es también un mecanismo de supervivencia. Cualquiera que sea la emoción que se exhiba, cualquiera la acción que se tome, depende sobre la evaluación cerebral de la situación específica a mano. Si la situación es amenazante, la emoción es alarma y temor. Aquí, la división simpática del SNA domina e implementa las respuestas del cuerpo: la respiración se hace rápida, el corazón se acelera, los ojos se dilatan, el estómago detiene sus movimientos. En algunas situaciones la división parasimpática del SNA se hace dominante como, por ejemplo, en profundo relajamiento, contemplación y meditación. Aquí, el cuerpo se calma y tranquiliza, el corazón y la respiración se hacen más lentos. Una dificultad en advertir los cambios de consciencia y sus correlaciones fisiológicas en el laboratorio, es esa en la cual, si el sujeto se pone ansioso y temeroso, la respiración se hace irregular. Cuando eso ocurre, se acelera la tasa del corazón, los músculos se ponen tensos y los sujetos más alerta, haciendo también que el corazón aumente mucho más su rapidez. Muchos experimentos psíquicos Rosacruces no funcionan cuando se comienzan en tales circunstancias. Por esta razón, nuestros experimentos están precedidos por un ejercicio de respiración preliminar que normalmente trae consigo un profundo relajamiento. En un interesante ejercicio los sujetos cierran sus ojos mientras se sientan en una posición confortable. La consciencia es colocada en los pies y progresivamente pasa hacia arriba hasta la cabeza. Respirando por la nariz, el sujeto enfoca consciencia en el proceso respiratorio: inhalación, seguidamente exhalación, inhalación, exhalación, y así, sucesivamente. Él no trata de influir el ritmo respiratorio, sino observa desapasionadamente. Con cada inhalación el sujeto presiona un botón a un aparato de grabación y con cada exhalación el botón se suelta. Métodos alternados incluyen alzar y bajar el dedo índice, o contar las respiraciones. Las habilidades de concentración de los sujetos Rosacruces han probado ser excepcionales. Después de solamente dos ensayos viene un relajamiento completo con poco esfuerzo o distracción. Dentro de dos o tres minutos se alcanza el relajamiento, como lo indican las actividades simpáticas decrecidas, tales como retardando la tasa respiratoria y del corazón, decreciendo la presión sanguínea, la tensión muscular, la respuesta galvánica de la piel (RGP) y los moldes de ondas cerebrales, (EE). Las actividades metabólicas también se retardan dentro de diez minutos y alcanzan un máximo dentro de veinte a cuarenta minutos. Cada célula del cuerpo hace uso de la energía de los alimentos por medio de la oxidación, o en otras palabras, "quemando" los nutrientes. La suma del metabolismo individual de cada célula utilizando oxígeno, constituye el consumo total de oxígeno, o metabolismo del cuerpo. El mayor cambio fisiológico asociado con este servicio de observar pasivamente la respiración, es un retardo en la tasa del metabolismo. Durante el sueño, disminuye lentamente el consumo de oxígeno pero progresivamente, hasta después de cuatro o cinco horas, es alrededor de un ocho por ciento más bajo que durante el estado de vigilia. En contraste, durante los primeros diez minutos de profundo relajamiento, el retardo promedia entre 10 y 20 %. No es posible efectuar tal retardo por otros medios. Por ejemplo, si un profundo aliento se mantiene, los tejidos continúan utilizando oxígeno disponible a la misma tasa y la cantidad de oxigeno consumido no cambia. Ansiedad Junto con la caída en consumo de oxígeno, existe una marcada disminución de lactato en la sangre, una substancia producida por el metabolismo de los músculos esqueletales. Esta substancia es de particular interés, porque en un reciente estudio se ha asociado el lactato con la ansiedad. En este estudio llevado a cabo en la Escuela de Medicina Washington, en St. Louis, pacientes con neurosis de ansiedad experimentaron ataques de ansiedad cuando se les inyectó lactato, en tanto que el porcentaje de ataques de ansiedad bajó significativamente cuando placebos (soluciones de sal) se inyectaron. Un veinte por ciento de los sujetos normales también experimentaron ataques de ansiedad con lactato, en tanto que prácticamente ninguno experimento ansiedad con placebo. El nivel de lactato de la sangre baja rápidamente cuando la respiración es vigilada, permanece bajo mientras el estado de relajamiento, y continúa bajo después. Esto es consistente con los informes de relajado bienestar de aquellos que regularmente practican ejercicios respiratorios y técnicas meditativas. Poniendo de lado los cambios metabólicos, otras medidas apoyan un aumento parasimpático y una respuesta de descenso parasimpático. Uno de los mejores indicadores de la actividad SNA es la conductibilidad de la piel. La conductividad eléctrica de la superficie de la piel humana varía con el grado de la superficie húmeda o la transpiración. Las reacciones emocionales activan respuestas simpáticas incluyendo un aumento de la superficie húmeda en la piel y, por lo tanto, capacitan una más grande cantidad de corriente eléctrica fluyente. En contraste, la conductibilidad de la piel disminuye progresivamente cuando un sujeto observa su respiración. Dándole seguimiento, también se observa en el sujeto, que se alcanza un estado permanente dentro de dos o cuatro minutos, y se mantiene durante el resto del ejercicio la tasa de disminución; en pruebas subsiguientes tiende a ser constante para cada individuo probado, a menos que un estímulo simpático muy fuerte sea aplicado. Con un completo relajamiento, la tasa del corazón decrece alrededor de tres a cinco latidos por minuto y la respiración de una a tres aspiraciones por minuto. La presión sanguínea era baja antes, durante y después del ejercicio, lo que puede haberse debido a que el sujeto regularmente practica ejercicios meditativos. El EEG de los sujetos Rosacruces, probado en este ejercicio estaba caracterizado por una alta amplitud theta y ondas cerebrales alfa promediando entre 5-10 Hertz (ciclos por segundo). Estas estaban presentes durante el ejercicio y tendían a persistir un poco después. La amplitud permanecía constante a través de todo el ejercicio. Entre tanto es desconocido el significativo de las ondas cerebrales particulares, está bien reconocido que las cantidades relativas de ondas theta (4-8 Hertz), alfa (8-13 Hertz) y beta (sobre 1-3 Hertz), llevan una relación a estados de sentimientos subjetivos. Las descripciones subjetivas (que tienen significado estadístico) para esta clase de molde theta-alfa, incluye lo siguiente: sentimientos que son transcendentales, contemplativos, misteriosos, reflexivos, inciertos, placenteros o libres. En estos experimentos se tuvo cuidado, al tomar las pruebas de los sujetos, solamente después que ellos informaron un adecuado y descansado sueño la noche previa a la prueba. Las ondas delta (bajo 4 Hertz) y los rápidos movimientos de los ojos asociados con los estados de inacción (dormir) o adormecidos, estuvieron ausentes. El ejercicio no fue llevado a cabo en seguida después de una comida, porque esto se encontró que interfería con la respuesta normal. Durante el ejercicio, los sujetos informaron que sentían una consciencia atenta y total, no obstante relajada y descansada. Frecuentemente fueron informados los beneficios para la salud. Estados de consciencia y práctica de las correctas técnicas de respiración pueden ejercer una profunda influencia en la armonía y el equilibrio de las funciones autónomas del cuerpo, como asimismo un estado de mente alerta y eficiente, promoviendo, generalmente, una actitud positiva y un relajado sentimiento de bienestar. El estudiante místico, sabe que las técnicas respiratorias son esenciales para el total desarrollo del ser más alto.