MENSAJE DE LA SEÑORA MINISTRA OLGA SÁNCHEZ CORDERO DE GARCÍA VILLEGAS, ENVIADO PARA SU LECTURA EN LA CEREMONIA DE ENTREGA DEL PREMIO “FUTUROS JURISTAS LATINOAMERICANOS”, ORGANIZADO POR EL ITESM Y LA FIRMA GARRIGUES, EL 29 DE JUNIO DE 2009. ESFUERZO: EL MAYOR DE LOS PREMIOS. YZ “La civilización no dura porque a los hombres sólo les interesan los resultados de la misma: los anestésicos, los automóviles, la radio. Pero nada de lo que da la civilización es el fruto natural de un árbol endémico. Todo es resultado de un esfuerzo. Sólo se aguanta una civilización si muchos aportan su colaboración al esfuerzo. Si todos prefieren gozar el fruto, la civilización se hunde. José Ortega y Gasset Muy queridos jóvenes: Latinoamérica es una región grandiosa lo es por su geografía se suceden el desierto imponente, las montañas majestuosas, los ríos caudalosos y la exuberante selva. Por su territorio coexisten macizos nevados que contemplan el devenir de un pueblo que vive, sufre, que se esfuerza y que lucha por la realización de los ideales de grandes mujeres y hombres que han entregado por esta región sus sueños sus denuedos, que han donado su vida en aras de un mejor vivir. Latinoamérica es un lugar privilegiado de la geografía planetaria; pero lo es más aún por la calidad de su gente, por el valor de su capital humano. Sus habitantes son, quizá, lo que más vida le da a este territorio en el que convergen Incas, Guaraníes, Mayas, Mapuches; zonas arqueológicas como Paquimé, como Machu Pichu, como Tikal; como Chichen Itzá, océanos como el Pacífico y como el Atlántico; ciudades como Brasilia, como Monterrey como Montevideo y o Guayaquil. 2 América Latina es quizá la zona del planeta con mayor diversidad étnica y geográfica y también biológica. Es la región que admira por igual la entereza y el arte de Octavio Paz o de José Martí, el valor y la integridad de Artigas de Hidalgo y de Bolívar. Que vibra y que se emociona por igual con la poesía de Benedetti y la prosa de García Márquez, que con un son cubano, con un Bossa Nova, o con una música de mariachi. Pero Latinoamérica, hoy, se viste de gala, orgullosa, como nos sentimos quienes hemos tenido la oportunidad de participar como jurado en este evento, de contar con jóvenes como ustedes, que hacen todo lo que está en sus manos para salir adelante en medio de la pluralidad y de la diversidad de su entorno, en medio de una problemática 3 social que generacionalmente les ha tocado enfrentar. Por eso lamento, y lo lamento tanto por los compromisos que he tenido para asistir a las sesiones de este Tribunal Constitucional de mi país que este mensaje no se los pueda expresar de viva voz, porque, créanlo, me hubiera encantado estar personalmente ante ustedes para darles un cordial abrazo, para felicitarlos por la inteligencia, por su talento por su dedicación que han puesto para lograr este reconocimiento. En América Latina y en el mundo –quizá valga ésta generalización– el sentido moral e intelectual de las profesiones se ha desvalorizado. Asistimos, hoy en día, a un fenómeno extraordinario que es la globalización, con todos sus claroscuros. 4 Entre ellos, precisamente, desvalorización de las el de profesiones esa en general, pero en particular la jurídica. Quisiera, por lo dicho, aprovechar esta oportunidad que los organizadores de este evento (y me refiero concretamente a la Cátedra Eduardo A. Elizondo del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey y a la firma Garrigues Abogados y Asesores Tributarios) que me han otorgado, para expresarles algunas ideas que me suscita el premio que hoy les es entregado. Particularmente, respecto al valor del esfuerzo y a la importancia que tiene el pensamiento como factor detonante de cambios sustanciales en una sociedad, en un país, en una región. 5 Este premio, obvia decirlo, es un reconocimiento, es un reconocimiento a la brillantez intelectual que despliegan a su temprana edad, a su buen juicio, a sus conocimientos, a su ingenio, a su pericia, en fin, al conjunto de muchos méritos. De entre ellos, en primer lugar, el de tener el valor de haber intentado, de arriesgarse, de emprender. No es fácil, y no es fácil para nadie, salir de una zona de confort en la que regularmente tendemos a instalarnos y salir como ustedes a buscar mejores condiciones de vida. En el caso, emprender la aventura de someterse al escrutinio de expertos en derecho empresarial, como lo fueron muchos miembros del jurado, y desde luego al de 6 grandes juristas iberoamericanos, como es el caso de muchos otros. No es fácil acumular tantos méritos como para que, la dirección de las escuelas en las que han estudiado o la rectoría de sus universidades, los hayan propuesto para este premio. No resulta sencillo que, apenas saliendo de la universidad, hayan adquirido las herramientas técnicas y la suficiencia de criterio como para lograr el reconocimiento de quienes les hemos evaluado. ¡Los felicito! Felicito a quienes han participado en la organización de este evento y me felicito y agradezco a ellos el haberme considerado para esta difícil misión de evaluar tanto talento. Les anticipo, además, que esta 7 felicitación es un incentivo para que sigan adelante, pues el premio consiste, precisamente, en invertir más esfuerzo, pues serán premiados con un curso que no será fácil aprobar. Sin embargo, insisto, deben sentirse orgullosos, pues, lo decía ya un filósofo griego hace miles de años: hay que aprovechar la oportunidad en todas las ocasiones; y esto es “no hay mérito mayor”. Los invito, aprovechen queridos este jóvenes, a que que es un premio reconocimiento a su talento, que ejerzan a cabalidad el pensamiento, pues es el pensamiento la fuerza de las ideas. Y las ideas hacen florecer culturas y sociedades grandiosas, como las que al inicio de este mensaje les he mencionado. 8 Ejerzan el pensamiento siempre como generador de una acción social de mejoramiento, pues el pensamiento libera o ata tanto como se quiera. El pensamiento es un factor de una inconformidad que solo se da en los espíritus libres, como los que han forjado este Continente, y esos espíritus se forjan sólo al calor del esfuerzo. Opten siempre por la justicia, por la igualdad y por los valores democráticos; y hagan de esa opción la constante de su vida. Esta región, en la que –como dijera Eduardo Galeano– contrastan la riqueza de la tierra con la pobreza del hombre, necesita, con urgencia, hombres y mujeres que asuman esa elección. 9 ¡Muchas Felicidades¡ 10