respiración boca a boca

MANUAL DE PRIMEROS AUXILIOS
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1.
EN CASO DE ACCIDENTE (CAIDA, DESMAYO)
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Conserve la tranquilidad, actúe con serenidad y rapidez.
Sea amable y comprensivo con el lesionado.
Evite movimientos bruscos al dar la atención.
Vigile permanentemente el estado de conciencia, respiración, pulso y
sangrado.
Si la persona que requiere los primeros auxilios se encuentra inconsciente,
colóquelo de lado para evitar que se ahogue con la saliva, el vómito, la
lengua o la prótesis dental. Por ningún motivo dé bebidas o drogas.
Asegúrese de que una tercera persona solicite ayuda médica.
NUNCA abandone al paciente.
2.
EN CASO DE HERIDAS
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Mantenga las manos limpias para manipular cualquier herida.
Lave la herida con abundante agua y jabón.
Cubra la herida con gasa limpia, tela, venda o pañuelo igualmente limpio.
Traslade al lesionado a un centro asistencial
3.
EN CASO DE HEMORRAGIA EXTERNA
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Haga presión constante con sus manos y con una gasa, tela o pañuelo
limpio sobre el sitio de la hemorragia.
Si no hay fracturas, eleve el brazo (o el miembro), para controlar el
sangrado.
Traslade de inmediato al lesionado.
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NOTA:
Por el riesgo que tiene el uso del torniquete, no se recomienda
hacerlo a menos que la situación sea muy grave y quien lo vaya a
hacer, esté bien entrenado.
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4.
EN CASO DE FRACTURAS
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Inmovilice la parte afectada.
Utilice revistas, periódicos, toallas, cartón, etc., para inmovilizar.
Coloque hielo local y traslade de inmediato al centro asistencial.
Jamás mueva la parte afectada.
No haga masajes.
No vende con fuerza.
No trate de colocar el hueso fracturado en su posición normal.
5.
EN CASO DE LUMBAGO
Cuando se realizan sobrefuerzos o movimientos bruscos e inadecuados del
cuerpo, es frecuente el lumbago. Este se manifiesta con un fuerte dolor a nivel de
la cintura y la persona queda “Engranada” o inmovilizada al sentir el espasmo.
Lo más recomendable es ayudar entre varias personas a que el lesionado se
acueste en una camilla o superficie dura, en la misma posición como haya
quedado y trasladar de inmediato a un centro asistencial.
Nunca trate de enderezar la persona con lumbago.
Al ayudarlo a acostar, no realice movimientos bruscos para evitar más dolor a la
persona afectada.
RESPIRACIÓN BOCA A BOCA
Se debe aplicar cuando la persona presenta los siguientes signos:
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Pérdida del conocimiento.
Piel pálida o morada.
Ausencia o disminución severa de la respiración, comprobada por la falta de
elevación del pecho y la no exhalación de aire por la nariz (Aplique el dorso
de la mano al frente de la nariz y sienta si hay salida de aire.
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QUÉ SE DEBE HACER?
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Asegúrese de que la lengua o cualquier otro elemento o sustancia estén
obstruyendo el flujo respiratorio.
Con una mano levante el cuello de la persona y con la otra lleve hacia atrás
la cabeza para abrir el paso del aire.
Tape la nariz del lesionado con los dedos índice y pulgar de la mano
colocada sobre la frente de la persona.
Coloque su boca firmemente sobre la boca del paciente y sople con fuerza
hasta que el pecho del lesionado se levante. (Los niños requieren poco
aire).
Libere la nariz y la boca de la persona para permitir la salida del aire.
Observe si aparecen respiraciones y pulso espontáneamente. En caso
positivo, suspenda la reanimación y en caso negativo continúe insuflando
aire cada 5 segundos, hasta que la persona respire por su cuenta o llege un
auxiliador con más recursos.
En caso de ser requerido el traslado de una víctima a un centro asistencial,
realícelo al centro de atención de urgencias más cercano, siempre acompañado
por otra persona (Acompañante o auxiliar).