Pancho Villa

jueves 05 de junio de 2008
EFEMÉRIDES HISTÓRICA / Javier Garciadiego
Hace 130 años nació José Doroteo Arango Arámbula,
"Pancho Villa"
CONDUCTOR: Guillermo Rodríguez
PROGRAMA: ANTENA RADIO (MATUTINO)
FRECUENCIA: 107.9 FM
CADENA: IMER
Transcripción nota radio:
Guillermo Rodríguez, conductor: Vamos a saludar con mucho gusto en esta
mañana al doctor Javier Garciadiego, el nos va a hablar de José Doroteo
Arango Arámbula, "Pancho Villa", qué gusto saludarlo, muy buenos días.
Javier Garciadiego, colaborador: Guillermo, muy buenos días, pues Guillermo
hoy pero hace 130 años nació un 5 de junio de 1878 al personaje mítico que
conocemos como Francisco "Pancho Villa", mucha gente supone que es de
Chihuahua, ese, ni es su estado natal ni Pacho Villa su nombre.
El nació en La Coyotada, municipio de San Juan del Río, Durango, su padre era
un aparcero, esto es, trabajaba sobre tierras que le prestaba una hacienda a
cambio pues de que trabajara también para la hacienda y le entregara parte del
producto.
El nombre del padre era Agustín Arango, la madre Micaela Arámbula, entonces
sí, su nombre era Doroteo Arango Arámbula, quedó desde niño huérfano, en fin
se quedó al frente de la familia y precisamente por ser digamos el hombre
mayor, tuvo problemas con el joven dueño de la hacienda de apellido López
Negrete por una conducta que hoy consideraríamos de acoso sexual contra una
de la hermanas, entonces el baleó a este joven y ahí empezó su vida de medio
fugitivo, medio forajido.
Se trasladó a Chihuahua, adoptó con el tiempo el nombre de Francisco "Pancho
Villa" y alternó en Chihuahua períodos de vida legal trabando de albañil, de
arriero, transportaba metales pero también momentos de vida delictiva, se le
conocía como un abigeo un roba vacas.
Entonces este tipo de vida le permitió tener un gran manejo de las armas, gran
manejo de los caballos, un conocimiento de la geografía local espléndido pues
que le va a ayudar luego en su vida de revolucionario.
Precisamente él se introduce en la revolución Guillermo, cuando conoce a
Abraham González, hay gente que afirma que le vendía ganado robado, por
eso era abigeo, a Abraham González y que éste lo introduce al
antirreleccionismo durante la lucha contra Porfirio Díaz a finales de 1910,
principios de 1911 pues es un guerrillero en ascenso.
Participó de manera protagónica en la toma famosísima, toma de Ciudad
Juárez de mayo de 1912, con la que cae Porfirio Díaz, regresó a Chihuahua al
triunfar la revolución, a la vida civil y con la gratificación que se le dio, algunos
miles de pesos él por su desarme, puso negocios de carnicerías aparentemente
con su hermano Hipólito vendiendo también pues algo de ganado que se había
de pues maneras muy raras.
Retornó a las armas cuando se alzo en armas Pascual Orozco para defender al
gobierno legal de Madero y ahí estuvo bajo las órdenes de Victoriano Huerta,
quien por problemas disciplinarios lo quiso fusilar, las autoridades cambiaron el
fusilamiento por prisión, vino aquí a la cárcel a ciudad de México y también un
poco con el apoyo de las autoridades que se hicieron de la vista gorda, Pancho
Villa pudo salir de la prisión.
Huyó, se fue a Estados Unidos y desde Estados Unidos regresó para luchar
contra Victoriano Huerta cuando éste dio el cuartelazo contra Madero, estamos
hablando ya de marzo de 1913 pero regresó al país Guillermo, con un puñado
de hombres, no llegaban a los 10, pues empezó a crecer su fuerza armada, su
popularidad, sus redes ahí en Chihuahua y a finales de año ya con cerca de 9
mil hombres bajo su mando dominaba ya el estado, la última plaza que tomó
fue Ojinaga en enero de 1914.
Luego se preparó y ya para abril de 1914 inicia el avance al centro del país, la
más importante de esas tomas fue la de Zacatecas a finales de junio, pero ahí
el pleito con Carranza, pues este le impedía, no quería que llegara a ciudad de
México entonces le estaba dificultando el acceso al carbón para sus
ferrocarriles y Pancho Villa se tuvo que quedar en el Norte.
Finalmente no se llegó a pelear del todo con Carranza en ese momento y
acordaron los pactos de Torreón con lo que se hacía, se comprometieron a la
famosa convención, a organizar la convención tan pronto triunfara la revolución.
Pues al instalarse esta convención, finales de 1914 ahora sí se peleó
abiertamente con Venustiano Carranza, se alió con Zapata, el famoso pacto de
Xochimilco, Villa se convirtió en el brazo armado de la convención, se dio la
Guerra de Fracciones pero fue vencido a mediados de 1915 en los famosos
combates de Celaya.
Ahí se le acusa de no haber seguido los consejos, o se le culpa de no haber
seguido los consejos de Felipe Angeles que le recomendaba no pelear en el
centro del país y además no hacer cargas de caballería en esa zona.
Entonces regresó al norte ya con una vida de guerrillero, se lanzó contra
Estados Unidos porque acusó a Estados Unidos de haber apoyado a Carranza,
sabemos que atacó Columbus, la población de Columbus marzo del 16, esta
dio como resultado una expedición punitiva que se operó en México por casi un
año si, y luego luchó contra Carranza hasta que éste cayó a mediados de 1920.
En ese momento ya reconoce al nuevo gobierno al de la Huerta, los famosos
convenios de Sabinas, se le entrega la hacienda de Canutillo pero tres años
después fue asesinado, sabemos que por órdenes de Obregón, de Calles de
Joaquín Amaro pero también a través de enemigos locales como un diputado
Carlos Barraza, pero sobre todo Guillermo, se le mata porque se preveía que
iba a colaborar en la inminente rebelión de Adolfo de la Huerta.
Yo nada más quisiera concluir con esto, el Pancho Villa ni siquiera muerto pudo
lograr la paz, en 1926 su tumba fue profanada, la cabeza fue hurtada y se decía
que bueno era para hacer estudios científicos, también se habló de que había
una hermandad necrofilia que adoraba huesos y que calaveras y que fue la
cofradía que se encargó de hacer ese allanamiento, pero repito el pobre
Pancho Villa no pudo ni siquiera descansar en paz.
Es un personaje mítico pero la revolución no sería la revolución sin Pancho
Villa.
GR: Pues doctor Javier Garciadiego, muchas gracias.
JGD: No, el agradecido soy yo y nos vemos el sábado.
GR: Por supuesto que sí, hasta luego, estamos en conversaciones sobre la
historia con el doctor Javier Garciadiego.