Responsables Operativos de Fuerzas Represivas

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Responsables Operativos de Fuerzas Represivas:
Gral. Alfredo Stroessner
Presidente de la República
Sabino Augusto Montanaro
Ministro del Interior
Gral. Alcibíades Brítez Borges
Jefe de Policía de la Capital
Pastor Coronel
Jefe de Investigaciones
Lugar(es) de Detención:
Departamento de Investigaciones
Asunción
Comisaría 3ra
Asunción
Comisaría 1ra
Asunción
Comisaría 7ma
Asunción
Comisaría de Fernando de la Mora
Fernando de la Mora
Departamento de vigilancia y Delitos
Asunción
Tacumbú
Asunción
Penal de Emboscada
Emboscada
Hechos Violatorios de los Derechos Humanos
Humanos: Detenciones
arbitrarias, torturas, malos tratos, detención prolongada,
Proceso Judicial: Sí
Juez
Juez: Abog. Carlos Báez Rehnfeldt,
Sentencia
Sentencia: Condenados por la Ley 209/70
II- Secuelas
Secuelas: Físicas, Psicológicas, Económicas.
III- Breve Descripción
Documentos Suplementarios
Entre noviembre y diciembre de 1974, la Policía detuvo a ocho
febreristas, tres colorados y dos liberales radicales, acusados de
pertenecer al grupo armado Mopal, Movimiento Paraguayo de Liberación
(Simón, 1992; 127). El Mopal tenía vinculaciones con el EPR, pero no
estaba embarcado en el proyecto de lucha armada, “sus tareas
fundamentales consistían en el funcionamiento de células que
desarrollaban trabajos clandestinos de propaganda (Formación de
Cuadros) y actividades semilegales de politización, al amparo del Partido
Febrerista (Lachi; 2004:34).
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Los detenidos –en su mayoría torturados– fueron Ricardo Lugo,
Fernando Robles, Euclides Acevedo, Roberto Paredes, Esteban
Riquelme, Roberto Grau, Odón Oviedo, Ángel Bernal, Sebastián A.
Romero, Julián Cubas, Agripina Portillo, Arnaldo Llorens, Hebe Rojas y
Bernardo Rojas. Varios fueron procesados por la Ley 209 y condenados
por el Juez Diógenes Martínez a tres años de prisión. Salvo los febreristas,
todos tuvieron que cumplir el total de la condena (Blanch; 1991:190). Se
les abrió un proceso por las leyes 294/55 y 209/70 a los profesionales,
estudiantes y profesores que la integra-ban, sin acusaciones concretas
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