Defendiendo el Acceso de los Refugiados a la Protección en Europa 1. ¿Por qué el acceso a la protección en Europa supone un asunto crucial? En los últimos años la Unión Europea (UE) ha centrado cada vez más su política de asilo y migración en la prevención y lucha contra las entradas irregulares. El constante endurecimiento de los controles fronterizos de la UE está teniendo un fuerte impacto sobre los refugiados al impedirles solicitar asilo en Europa. Sin apenas rutas de migración legal dentro de la UE que procedan de terceros países, los migrantes se ven obligados a recurrir a medios irregulares para viajar. Esto significa a menudo que las personas se ponen en manos de contrabandistas o traficantes sin escrúpulos y / o arriesgan potencialmente sus vidas para conseguir llegar a Europa. La mayoría son objeto, a lo largo del recorrido, de una terrible violencia y de abusos de derechos humanos y muchos miles han muerto. Mientras tanto, la UE y sus Estados miembros cooperan para detener la “inmigración ilegal” a toda costa. A pesar del derecho a solicitar asilo establecido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y el derecho de todo refugiado a no ser sancionado, en virtud de la Convención de las NU de 1951, si se ha visto obligado a cruzar la frontera de manera irregular, los refugiados suelen ser criminalizados, se les impide presentar una solicitud de asilo y son retornados por haber viajado de manera irregular. Esto podría costarle la vida a un refugiado. 2. ¿Qué les impide a los refugiados acceder a la protección en Europa? Los Estados de la UE están implementando un creciente despliegue de medidas de control fronterizo, la mayoría de las cuales carecen de mecanismos para identificar a posibles solicitantes de asilo. Ello esta ocasionando la violación en las fronteras de Europa del principio de non – refoulement, consagrado en la Convención sobre los Refugiados de 1951. Los Estados también han desarrollado una serie de controles migratorios externalizados más allá de sus fronteras, lo que permite que las personas puedan ser obligadas a retroceder aún antes de alcanzar territorio europeo. Las medidas pre- fronterizas consisten en requerir visa a los refugiados, imponer sanciones a los transportistas que transportan personas sin documentos legales, apostar Funcionarios de Enlace de Inmigración / Aeropuertos (ILO / ALO), así como la utilización de datos biométricos y bases de datos en el ámbito de la migración. Estas medidas pueden impedir, de manera injusta, que los refugiados alcancen un entorno seguro. Y aún a pesar de que los refugiados consiguieran eludir los numerosos obstáculos a los que enfrentan en su camino a la UE, podrían tener dificultades de ser admitidos en los puestos fronterizos debido a la aplicación de los acuerdos de readmisión. En algunos casos los agentes del Estado reconducen a la frontera a los migrantes irregulares apresados en las cercanías de aquella o rehúsan registrar su presencia. Se aplican igualmente medidas para evitar que las personas lleguen a Europa por vía marítima. Los Estados llevan a cabo intercepciones generalizada en el mar, incluidas actividades que impiden la salida de barcos o buques amarrados a tierra firme o que se encuentran en las proximidades de la costa; desviaciones; y visita / apresamiento de los barcos. El cumplimiento de la interceptación se solapa con frecuencia con la obligación de prestar asistencia a personas y buques en peligro en el mar, sea donde sea que se encuentren navegando. Otro problema frecuente se produce cuando se bloquea el desembarco de migrantes en el territorio de la UE. La Agencia Europea para la Gestión de la Cooperación Operativa en las Fronteras Exteriores (FRONTEX) planifica y coordina las operaciones sobre el territorio terrestre, aéreo y marítimo de la UE. Ha logrado hasta la fecha una disminución considerable en el número de entradas irregulares en la UE, presentando este hecho como un éxito y un factor que contribuye a salvar vidas humanas. Pero, ¿sabe FRONTEX que muchas de estas personas podían haber solicitado protección internacional? ¿si han sido capaces de acceder a un procedimiento de asilo, y dónde? ¿Qué les ha ocurrido ahora? Si el 65% de los que llegaron a Malta durante el 2007 obtuvo alguna forma de protección internacional, es evidente que algunos a los que FRONTEX les impidió llegar, también estarán necesitados de protección internacional. 3. ¿Qué debería hacerse para resolver estos problemas? Si bien ECRE reconoce el derecho de los Estados a controlar sus fronteras hace un llamamiento urgente a los países de la UE a fin de que revisen y adapten todas sus políticas de gestión de fronteras y operaciones con el fin de garantizar el pleno respeto del principio de non - refoulement. Que las obligaciones de los Estados miembros respecto al derecho Europeo e internacional de los derechos humanos y los refugiados no se detenga en las fronteras nacionales. ECRE insta a la UE a que considere la suspensión de las restricciones de visado durante un período de tiempo determinado (que puede ser objeto de revisión) para aquellos nacionales y residentes cuyo país está experimentando una importante y reconocida agitación o una crisis humanitaria, y donde además no existen instalaciones para la expedición de visados. La legislación de la UE sobre la responsabilidad de los transportistas debe ser revisada a fin de garantizar que las sanciones no pueden ser aplicadas por cualquier Estado miembro en el caso de que un nacional de un tercer país sea admitido en el procedimiento de asilo. En el curso de las operaciones de interceptación y rescate, se debería dar prioridad a garantizar la seguridad de las personas a bordo. Ello implica su traslado a un lugar seguro, no pudiendo ser un buque, sino el desembarco en tierra firme. En los casos de interceptación en los esté involucrado un Estado de la UE y se proceda al desvío a un tercer país, aquel debería garantizar la seguridad de las personas que son interceptadas o rescatadas. Cualquier solicitante de asilo debería ser conducido sin demora a territorio de la UE. En los casos en los que un Estado miembro esté involucrado en la interceptación en aguas territoriales de un tercer país deberá asegurarse la plena conformidad con la Convención sobre los Refugiados de 1951 y el derecho internacional. Si bien los Estados miembros son los principales responsables de los refugiados, se requiere de forma urgente una aclaración respecto a cual es el alcance de las responsabilidades y obligaciones de FRONTEX para con aquellos. FRONTEX no debería participar en operaciones fuera de las fronteras exteriores de la UE. Las actividades de vigilancia de fronteras deberían mantenerse y ampliarse en todos los países con fronteras exteriores de la UE. El ACNUR y las ONG deberían ser socios clave de los gobiernos en la vigilancia de las fronteras y en actividades de formación. La financiación de la UE, incluido el Fondo europeo para las Fronteras Exteriores, debería respaldar este tipo de partenariado. Crear cauces legales para que las personas que huyen de la persecución puedan viajar a Europa. El no abordar urgentemente los indiscriminados y graves obstáculos existentes en el acceso de los refugiados a la protección en Europa hará que la noción de un sistema europeo común de asilo no tenga sentido y socavará los valores de derechos humanos en los que se funda la UE. Para más información sobre el tema, póngase en contacto con la asesora legal del ECRE Anne Peeters (apeeters@ecre.org +32 2 212 0820). Para consultar todo el material http://www.ecre.org/topics/access_to_europe del ECRE sobre el tema visite: Working together to protect and respect refugees. | www.ecre.org Este documento ha sido traducido por Accem. Área Internacional. 2009. En el marco del Proyecto de Reasentamiento de Refugiados (2009), financiado a través del Fondo Europeo para los Refugiados y cofinanciado por el Ministerio de Trabajo e Inmigración.