c~ Cjq < £. » pH » r( i 1 a VI pi O' 3^5 s o 'S CD ! ä CD o Vi Ä ' fi> X •*5 (ñ fS CD •1 a I \ S» CD P o T X i a> 0 6! A S CQ tu C9 u <9 2 U 0 Q. C c: V w rt o (Q Q bc i2 V) U . Í« té •M o ^*4 < Ci bC — i2 Í(A l ^ O *cc 6 o A LA AUMSTIA. © id . \ uelve á mis m a n os, descuidada lira. V u e lv e , y tras luengos años D e m edroso callar y triste o lv id o . D e ja que pulse*tus doradas cuerdas, D a n d o con libre acento H im nos de g o z o y gratitud al viento. ¿ P o r dicha ahora en el inerte p o lv o Ociosa yacerias. Cuando en m i p ech o de entusiasmo henchido Siento que hierve e l apolineo fu e g o , Y co n v o z prepotente Cantar m e manda á la b e ld a d clem ente? % % ¡B e ld a d ! ¡alma b e ld a d ! tu frente pura El trono es del con su elo. Tus ojos grata mansedumbre vierten, T u b oca es nido de placer y amores, Y tu acento sonoro Es la armonía del celeste co r o . ¡Pues qué sí al cíelo concederte plugo D e esplendente diadema E l b rillo seductor! D e regía pompa Cercada y magestad, eres entonces E l íd o lo sagrado Q u e so lo adora el orb e entusiasmado. M orta le s, si anlielais del fiero Marte El b e lic o s o estruendo, Y en luto y sangre sumergir la tierra, F iero conquistador oprima el tronoj P e ro si paz dichosa, Si ventura buscáis, reine la hermosa. jn ^ C3 ) R e in e ; que á par la celestial clemencia, » M il bienes prodigíjiido, C on ella reinará. jVirtucl sublimeí jO h del Real p oder dulce atributo, Y su mas bella parte! SI en una hermosa n o , ¿d ón d e encontrarte? A rd ió en España la fatal discordia: El trono se estrem ece, G im e la patria, y en sangrienta lucha El que fue ven ced or se ve v en cid o , Y se alza la venganza, Y á míseros sin íin sus rayos lanza. j A y , que ya de cien cárceles profuncfan Las resonantes puertas Se abren y tragan al v en cid o b a n d o ! ¡A y , que el p lo m o , el d o g a l ,e l cru do acero Mandan horrible muerte A quien h izo traidor su adversa suerte! H u i d , tristes, huid. R em otos climas B u sca d ; que es al proscripto Tierra de m aldición la que algún dia D u lc e Patria llam ó : no ya estos campos Piséis ¡a y ! tan queridos; N i halague el patrio hablar vuestros oidos. H elos dispersos por estrañas tierras Sin b ie n e s , sin asilo, A l y u g o atados de su atroz miseria. D e s d e la ardiente Libia al yerto p o l o , Suerte vil arrastrando, ¿ Q u é clima no los vió siempre penando? N o es eterno el d o lo r : secad el llo r o , S e c a d lo , desgraciados; Q u e ya se eleva en la felice España Benéfica D e id a d , á cu y o aspecto D o quier dichas y amores Brotar se ven c o m o en A b ril las flores. Miradla jcuán herm osa! En su alba frente Brilla R eal coro n a , Astro nu ncio de p a z ; y de sus ojos D eslum bra m u ch o mas la luz divina. C on su mano preciosa E l aureo cetro rige poderosa. El aureo cetro que el A ugusto E sposo A su b o n d a d fiara C u a n d o a q u e j a d o de fatal d olen cia , A l ruego ardiente y fervoroso anhelo D e la afligida España La muerte atroz detuvo su guadaña, « T o m a , le d i j o , y á mis p u eb los caros «Lleva paz y con su elo. «R ecom pensa su afan: los altos dones «Q u e á su constante amor mi amor c o n c e d e , « V ié r t e , C r i s t i n a , en ellos: «Presentados p or t í , serán mas b e llo s .» Y ¿á q u ién , ó R eina, la piadosa mano H o y tiendes compasiva? A l proscripto in feliz ; que tal le nombras, N o le nombras traidor: si p u d o un tiempo E rrar, no ya culpado Es ante tu b o n d a d , sí desdichado. « V e n id , h ijos, v e n id : eterno olvido (Esclamas bondadosa) «O cu lte y b o rre vuestro error funesto. « D e la Piegia piedad tiéndase el m anto, «Y á su abrigo benigno «N adie se crea de perdón indigno. « T o d o s hermanos s e d , todos mis hijos j «Y el inmenso tesoro « D o m ercedes sin fin los reyes guardan, «D e h o y mas abierto para todos q u e d e ; « Q u e á falta de in ocen cia , «M ay or que toda culpa es m i clem encia.» ■y-', - ¡ O h palabras sublim esí Para asombro D e Reyes y naciones D e siglo en siglo tiansmiticlas sean. Guardadlas, Españoles, y en el p e ch o Q u e gratitud inflama, Grabadas quedeii con buril de llama. A b r i d , m azm orras, las herradas puertas; D e s p a r e c e d , prisiones; Mares p ro fu n d o s, dilatados valles, Fácil Ciunino e l d e s te rra d o os d e b a ; Y j o h , si la tumba avara Las presas que tragó también soltara! L leg a d p re sto , lleg a d: la Patria ansiosa A su regazo os llama. V e n id ; y en torno de C r is t in a escelsa ¡M a d re ! ¡M a d r e ! d e c id ; agradecidos Besad todos su huella, Y su mano piadosa a par que bella. .. r.‘ i! 1 ,' ‘ fj. M ADRID: Noviemlire, 1832. Imprenta de D. J. 'PiiAcios, calle del Factor. s; co co L£> IO k® to to IO g ^ t - k O O O D - ^ c s t n » ^ I I ì •> . II I IO LO LO IO co IV 1*^ 0 co 00 —a