ACCIDENTES VASCULARES ENCEFÁLICOS FACTORES DE RIESGO Dr. Federico Fortún De la Quintana* De los escasos datos estadísticos sobre accidentes vasculares encefálicos con que contamos en nuestro medio, son importantes de señalar: en el Hospital Obrero Nº1 de la ciudad de La Paz, el centro mas importante a nivel nacional de la seguridad social en el país, la primera causa de internación en el Servicio de Neurología y Neurocirugía con 22 a 25% corresponde a las diversas formas de enfermedad vascular del encéfalo; en la Unidad de Neurología del Hospital de Clínicas corresponde al 15%, considerando que solo se informan en este servicio a los AVE isquémicos y de manejo en sala común, en el Hospital Santa Barbara se reporta como el 15% de las internaciones. Podemos concluir que este padecimiento es actualmente en el país, como en el resto del mundo, una enfermedad de elevada prevalencia y constituye una de las afecciones neurológicas mas importantes. La Sociedad Boliviana de Neurología tomando conciencia de esta realidad, que la Organización Mundial de la Salud, a través del organismo regional recomienda la elaboración de manuales y normas nacionales para enfrentar patologías prevalentes y en ascenso en su presentación, y considerando que ella y solo ella puede elaborar adecuados procedimientos para enfrentarlas en diferentes niveles de atención y en todas las características de su amplio tratamiento, pese a que en los últimos tiempos son otros los organismos que están dando adecuada capacitación para la identificación, traslado y tratamiento en centros hospitalarios, DEBE ENCARGARSE de confeccionar a la brevedad posible un PROTOCOLO DE ATENCIÓN DE AVE, tomando en cuenta las variadas características de la atención de salud en las diversas realidades de nuestro país, solicitando la colaboración de los niveles naciona* Neurólogo. Jefe de la Unidad de Neurología. Hospital de Clínicas - Docente UMSA 38 les comprometidos (ministerio, prefecturas, alcaldías, etc.) para su aprobación, para la publicación como para la autorización para contar con los medicamentos y medios para su efectivización. Para iniciar este proceso es que presentamos este artículo a la revista de la sociedad. Los factores de riesgo en nuestro medio están muy poco estudiados y no contamos en todo el país con la tecnología para analizar correctamente todos los conocidos. Los factores de riesgo son clásicamente diferenciados entre aquellos que son no modificables, los potencialmente modificables y los modificables, entre los primeros se mencionan a los siguientes: edad, sexo, raza y etnia y carga o factor genético, considero que es innecesario analizarlos y comentarlos, pero si ratificar su radical importancia como indicadores de gran valía y de elevada precisión y certeza, además vemos que cada día los factores genéticos conforman una lista mas amplia al agregarse nuevas afecciones. Entre los potencialmente modificables señalamos en primer lugar a los ambientales que no son modificables por si mismos, pero el paciente al ser trasladado de hábitat si los cambia, es necesario señalar la total falta de esta información en nuestro medio en relación a la enfermedad vascular pese a que se realizo un excelente y destacado trabajo en la década del 80, pero ha sido imposible conseguir el mismo; el resto de este grupo tiene enfermedades que por escasa colaboración del paciente y/o tipo - gravedad del cuadro se hacen muy difíciles de cambiar, entre ellos podemos mencionar el abuso de alcohol (alcoholismo), dieta inadecuada y obesidad, estres, consumo de fármacos y drogas, etc., y otras que por la misma enfermedad son muy difíciles de cambiar , como ser anticuerpos antifosfolipido, hiperfibrinogenemia, hipotensión ortostática, ferritina sérica elevada, etc. En el tercer Revista de Neurología grupo, el de los factores modificables, es donde mayor trabajo se puede realizar, pero debe ser cuidadoso, serio, bien definido y responsable, la sola mención de las patologías y enfermedades a tratarse es objetiva. La hipertensión arterial, la diabetes, cardiopatias y valvulopatias, tabaquismo y dislipidemias, son afecciones que requieren del manejo de personal profesional altamente capacitado, el trabajo integrado de diversas especialidades médicas se impone, la medicina interna y la cardiología en respaldo al manejo de la enfermedad por el neurólogo, quien con su conocimiento clínico debe guiar al equipo y tomar decisiones sobre los momentos y definiciones de a quienes y cuando se les podrá introducir en los diversos tipos de terapéutica, ademas de contar con una terapia instalada para el tratamiento con trombolítios. La creación de centros para este manejo requiere contar con exámenes complementarios de laboratorio y sobre todo de imagenología, tomografía axial computarizada, con profesionales preparados para la toma de decisiones y acciones en enfermedad vascular de encéfalo, y por último, como corresponde a todo centro de tercer nivel, un bloque quirúrgico con neurocirujanos que resuelvan las afecciones vasculares abordables y sobretodo cuando sean requeridos por complicaciones hemorrágicas del tratamiento. Es pertinente señalar que la elaboración de un protocolo que nos permita atender a los pacientes afectados por un accidente vascular encefálico deben iniciarse con la capacitación de personal para la primera atención, el recojo de los pacientes y traslado en optimas condiciones, la estructuración de servicios de ambulancias con personal entrenado, de operadoras capaces de dirigir la red de información y sobre todo de conocimientos en la población para reconocer una afección vascular del encéfalo, saber como y a quien solicitar colaboración. Estos pasos previos Revista de Neurología son actualmente de primera importancia y tal vez la base sobre la que se elaboraría un programa de atención a pacientes de emergencia con afección vascular del cerebro. Los factores de riesgo son y han sido descritos en diversos textos, artículos, conferencias y congresos, por lo que se tiene amplios conocimientos sobre ellos, sin embargo creo necesario señalar los otros factores para la creación, manejo y funcionamiento de centros, que con protocolos debidamente validados por la SOCIEDAD BOLIVIANA DE NEUROLOGÍA, permitan un correcto y apropiado tratamiento, sin que estos nuevos factores, vale decir: uso de técnicas indebidas, profesionales no indicados para cada paso del proceso, falta de equipamiento, etc., se transformen en severos factores de riesgo y de fracaso del proyecto. BIBLIOGRAFÍA 1. Castillo Sánchez. J, Alvarez Sabin. J, et al. Manual de Enfermedades vasculares cerebrales. Editorial J.R. Prous. 1995 España. 2. Barrinagarrementeria. F ., Cantu, C. Enfermedad Vascular Cerebral. Editorial McGraw - Hill Interamericana, Pag 71 a 80. 1998. México. 3. Robertson. JT., Nowak. TS. Fronteras en la enfermedad cerebrovascular. 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