Impresiones de la calle: que habla y enseña con el otro Por Juan María Alponte / pág.9 Director: Carlos Ramírez noticiastransicion.mx Lunes 10 de Agosto de 2015 contacto@noticiastransicion.mx Número 61 $5.00 2018: el PRI frente a las alianzas PAN-PRD Por Carlos Ramírez / pág. 5 Suplemento Descifrando a Peña Nieto Por Roberto Vizcaíno / pág. 7 PRI 2018: Peña y Beltrones, un partido en busca de autor Por Carlos Ramírez / pág. I Nuevas dirigencias partidistas Por Armando Reyes Vigueras / pág. 4 2 10 de Agosto de 2015 C o n s p i r ac y T h e o ry La CNTE, desesperada, pacta con AMLO La CNTE entró en fase de desesperación y por lo tanto de cometer más errores. Para empezar acordó recurrir al mismo diablo y en asamblea aceptó realizar “el diálogo abierto” con Andrés Manuel López Obrador, dirigente de Morena. Por órdenes de Rubén Núñez, líder de la Sección 22 de la CNTE, el vocero Mohamed Otaqui Toledo anunció que el diálogo es para sumar esfuerzos contra la Reforma Educativa. El vocero admitió que en un principio “se rechazó de manera contundente” el saludo y la invitación que les formuló Andrés Manuel a finales de julio para hacer una alianza electoral. Posteriormente, se valoró cómo van las cosas y se acordó el acercamiento, agregó. Adelantó que se conformarán comisiones de enlace para establecer un primer acercamiento. De manera paralela, dijo, se acordó impulsar la mesa de negociación abierta y pública con los gobiernos federal y estatal, así como la realización de una marcha masiva estatal el 14 de agosto. No obstante, el hecho es que la CNTE contraviene una de sus principales reglas: mantenerse al margen de los partidos y políticos, no obstante ahora van a pactar con López Obrador para ver qué logran recuperar. Rubén Núñez, dirigente de la CNTE, dispuesto a pactar con López Obrador, ante la caída vertical del poder de su organización disidente. Directorio Mtro. Carlos Ramírez Presidente y Director General carlosramirezh@hotmail.com Lic. José Luis Rojas Coordinador General Editorial joselrojasr@hotmail.com Mtro. Carlos Loeza Manzanero Coordinador de Análisis Económico Emiliano López Analista emiliano_082002@yahoo.com Raúl Urbina Asistente de la dirección general Roberto Vizcaíno Director editorial rvizcaino44@gmail.com Dr. Rafael Abascal y Macías Coordinador de Análisis Político Wendy Coss y León Coordinadora de Relaciones Públicas Ana Karina Sánchez Coordinadora Operativa anakarinasl08@gmail.com Mathieu Domínguez Pérez Diseño Monserrat Méndez Redacción Diario Indicador Político es una publicación diaria editada por el Grupo de Editores del Estado de México, S. A., y el Centro de Estudios Políticos y de Seguridad Nacional, S. C. Editor responsable: Carlos Javier Ramírez Hernández. Todos los artículos son de responsabilidad de sus autores. Oficinas: Durango 223, Col. Roma, Delegación Cuauhtémoc, C. P. 06700, México D.F. noticiastransicion.mx Índice 4 Nuevas dirigencias partidistas Por Armando Reyes Vigueras 5 6 I 2018: el PRI frente a las alianzas PAN-PRD Por Carlos Ramírez 7 Descifrando a Peña Nieto Por Roberto Vizcaíno 9 11 Impresiones de la calle: que habla y enseña con el otro Por Juan María Alponte Agenda del día Torre de Babel PRI 2018: Peña y Beltrones, un partido en busca de autor Los Pinos 2018: La Silla Embrujada 3 s ítico l o p a la e r s estab nejo. a t í c i n l o E veas de p n co cional lincuente: u iético te v nterna e d so to i peona un presunto as; el policía enas dos m a c r n a p o u —En de capturar rdó cinco h MI6 inglés a duado con a a l t b e I e d , gra B u l r F e p del ras, xicano tardó media én: a o e í h c i m s l e o a r í sd El p B tardó t o al polic aro, con de das; cl del KG legó el turn emias de Ju sonrío y dijo L horas. s en las Acad erro. El juez e r o hon trajo… un p un conejo. í y a r . ho as, ped eguen or jud ló: ñ e S o me p n b — a a h y o rr ero Y el pe y conejo, p o s o Y — teó onso p s e ser c rande, i u q h e n c e Y tie erta g Se m na pu muro. a este os un orta tener u ueda venir ecanm a y u r p p pr st e me im je con a gent ate de “Yo di rápido. Y no , para que l p, en el deb o truido a, en el mur onald Trum s D o i : c ” e e r hio. t p n s en O galme país le republicano s didato : edes r s a En l y trae un ogo: a llevan Obama, s s o d a o t e al que o años, los d o se vale. U Carrtketinol U . E N h na asi oc o en E nejos. ma exican levamos ya c como a co no falta algu m : s o o d e n a l o y l ga Ja .L nt n, s e Y . si ña osotro do Dr ya os per hacer? docum campa Estima humilde in hacen por n que luego n el tema de años. ¿Qué ramos votar é a a b n n i r Soy u tiran, y nad el voto pa de nuevo e piemos los que si pud r n usan y nos pidiero p nos pone para que lim ni votar, po s m e o u u … r q e m T e d r n en od el seño s defie s no p Ahora iota que no cumentado asura. b o id repuo). actriz que los ind a todos a la orque eje l espej p e . , s d s o e ( n o d j ó r o i e a o t s c o a n ons lad pe en salv o que le ac tán amos b as por sus co en el otro r n é e i i t b u o d o i h n o es exican as grac stedes ñón. Y ni m hí las cosas noameu e u q Much ente: un m a a cir lati ue ec m edo de r de carne d érica) porq Presidente u p Atenta e l r a usa : Sólo Sudam alquie xicano ratas los van alguno de mp que cu e m o o g u r Tr Ami s o demóc (México . s mejo o ís o, D.F blican rese a su pa cirlo pero e ndojit o B l e e g t que re e da pena d a, Plan das. tus du ad de la Vid a o d peor. M i versid spond . ricano que haya re , PhD., Uni s Espero ando Jaleo m Dr. Ar ara p a c i Polmítmies: en vertir más du de con es arte tion a es el ntes las cues c i t í l o —La p ciones brilla a declar s. a r absu d e es u q o O l mismo: as lo e “Dig , que u q lo o n e i e dijist rbio ch e qu ismo, n prov dirán Dice u as, siempre o que es lo m lo g l que di te nada”, o cir hasta que e. is e j i d tien d e d o n ena ni caso p l é a d n fi e e al no t porqu deben 4 10 de Agosto de 2015 Mundo electoral Nuevas dirigencias partidistas Por Armando Reyes Vigueras L os tres grandes partidos en nuestro país renovarán sus dirigencias nacionales en el corto plazo. Más allá de las formas en que se harán los cambios, resalta que el común denominador sea los resultados electorales, materia que se ha convertido en prioritaria para los institutos políticos y que definirá sus planes de cara a los años por venir. Cambios por resultados Acción Nacional, el Revolucionario Institucional y el de la Revolución Democrática tendrán nuevos presidentes nacionales, los dos primeros en el mes actual, y el último antes que finalice el año. Cada uno bajo las reglas que han establecido para el efecto y bajo circunstancias parecidas, en las que el impulso principal para realizar los cambios se ajusten a lo establecido en sus estatutos o no, es el tema electoral. En el caso blanquiazul, desde la modificación a sus estatutos en la pasada Asamblea Nacional Extraordinaria realizada en 2013, se estableció en uno de sus artículos transitorios que la presidencia de su Comité Ejecutivo Nacional se renovaría tras las elecciones federales de 2015, motivo por el cual están en la búsqueda de tal posición Ricardo Anaya y Javier Corral. En el campo tricolor, la llegada del actual presidente del Partido, César Camacho Quiroz, a la Cámara de Diputados abrió la puerta para un cambio de dirigente, por lo que tras semanas de especulaciones todo quedó listo para que Manlio Fabio Beltrones Rivera se inscribiera como candidato de unidad —sin competencia interna por decisión del primer priísta del país— para ser elegido este mismo mes. Y en el caso amarillo, derivado de los pésimos resultados en la última votación federal, Carlos Navarrete ha mencionado la posibilidad de acortar su periodo para que se renueve la dirección nacional del sol azteca, para lo cual mencionan a personajes como Armando Ríos Piter o Fernando Belaunzarán. Detrás de estas modificaciones, se ubica el tema electoral como el eje del cual parte la necesidad de tomar estas decisiones: En el PAN, en sus estatutos se estableció la fecha para realizar la elección del nuevo dirigente para que atendiera las elecciones de 2016 y no afectara los trabajos en la materia en los pasados comicios federales. En el PRI, aunque sus resultados se presentaron de inicio como positivos, al analizarlos con calma se dieron cuenta que los votos recibidos no reflejan un avance en la materia por lo que tuvieron que echar mano de su operador electoral más eficiente para encarar los retos de los años por venir, teniendo en cuenta que el desafío principal se ubica en 2018, pero que las aduanas de 2016 y 2017 son importantes. Y en el PRD, los resultados negativos obtenidos en las elecciones federales de junio, han obligado a los miembros del partido a reflexionar sobre la necesidad de cambiar a la dirigencia nacional, situación que podría hacerse realidad en unos cuantos meses más. En resumen, el tema electoral es prioritario en el seno de los partidos y definirá sus agendas de ahora en adelante. ¿Los partidos sólo sirven para ganar elecciones? Todo lo anterior nos lleva a la cuestión del objetivo de la existencia de los partidos políticos en México. En sus documentos básicos, cada uno de los institutos señala para lo que fueron creados. En el caso de Acción Nacional, en el artículo 2 de sus estatutos se explica que la organización tiene como objeto: “la formación y el fortalecimiento de la conciencia democrática de todos los mexicanos; La difusión de sus principios, programas y plataformas; La actividad cívico-política organizada y permanente; La educación socio-política de sus militantes; La garantía en todos los órdenes de la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres; La realización de toda clase de estudios sobre cuestiones políticas, económicas y sociales, y la formulación de los consiguientes programas, ponencias, proposiciones e iniciativas de ley; La participación en elecciones federales, estatales y municipales, en las condiciones que determinen sus órganos competentes”, entre otras. El PRI, en el artículo 3 de sus estatutos, plantea que su objetivo es: impulsar “la participación ciudadana que se expresa en la diversidad social de la nación mexicana con la Presencia predominante y activa de las clases mayoritarias, urbanas y rurales, que viven de su trabajo, manual e intelectual, y de los grupos y organizaciones constituidos por jóvenes, hombres, mujeres, adultos mayores, personas con discapacidad, y pueblos y comunidades indígenas cuya acción política y social permanente fortalece las bases sociales del Estado Mexicano”. Y el PRD, plantea en el artículo 2 de sus estatutos que su “objetivo primordial es participar en la vida política y democrática del país”. Como es evidente, la vía electoral es sólo una de las formas que las fuerzas políticas tienen para participar en política nacional, pero en los últimos años el ámbito electoral se ha convertido en lo prioritario para éstas. Las decisiones que se han tomado en el pasado reciente confirman esta situación, por lo que las causas sociales, los temas de formación o las actividades culturales o de vinculación de los partidos dependerán de la agenda electoral y serán autorizadas si contribuyen a esta causa. Es una de los motivos que explica la calidad de la democracia que tenemos en México. @AreyesVigueras Columna Indicador Político 10 de Agosto de 2015 2018: el PRI frente a las alianzas PAN-PRD Por Carlos Ramírez A pesar de que en lo individual hay personalidades opositoras bien posicionadas en las preferencias para el 2018, la verdadera lucha política se dará en la búsqueda de alianzas del PAN y el PRD para combatir a un PRI fortalecido. Y como se presentan las cosas, el tema central es saber si podría darse el caso de una candidatura de coalición PAN-PRD. En el 2009, el PRI firmó un acuerdo de apoyo a la política presupuestal del gobierno de Calderón a cambio de que el PAN no hiciera alianza en el Estado de México con el PRD. Las expectativas entonces temían que una candidatura PAN-PRD derrotara al PRI en la tierra del gobernador Enrique Peña Nieto, el mejor posicionado en las encuestas para las presidenciales del 2012. Ahora, después del 7 de junio de 2015, hay ya conversaciones iniciales entre el PAN y el PRD para algunas candidaturas a gobernador en el 2016 y el 2017 como una forma de ir debilitando al PRI. Por lo pronto podrían repetirse las alianzas en las gubernaturas de Puebla y Oaxaca, y está en duda Sinaloa. En la agenda de posibles estaría Veracruz y Chihuahua. Las alianzas con posibilidad de victoria no responden en automático a una candidatura apoyada por los dos partidos. El éxito de las alianzas en el 2010 obedeció a una lógica local, a la candidatura de un expriísta posicionado en las encuestas y al crispado estado de ánimo de la sociedad contra el PRI. En Puebla catalizó en contra del PRI el gobierno saliente de Mario Marín Torres y en Oaxaca la crisis de la Sección 22 de maestros y la APPO contra el gobernador Ulises Ruiz Ortiz. El candidato poblano fue el expriísta Rafael Moreno Valle y en Oaxaca el expriísta Gabino Cué Monteagudo. Estas circunstancias no se repiten en las gubernaturas en disputa en el 2016: ni hay expriístas que acumulen cohesiones ni conflictos dinamizadores. El éxito de las alianzas dependería de la estrategia y fuerza políticas del gobernador saliente. De las doce gubernaturas en disputa en el 2016, sólo estará caliente la de Puebla por la posición destacada del gobernador aliancista Moreno Valle en las nominaciones presidenciales del PAN. Una plaza importante en la que sí se intentará una alianza local será de nueva cuenta el Estado de México, en la elección de gobernador en el 2017. El nivel de aceptación de la gestión del gobernador priísta Eruviel Ávila es mucho menor que el que tuvo Peña Nieto a la mitad de su gubernatura. Además, el PAN y el PRD tienen claro que la derrota del PRI en el Estado de México dañaría las posibilidades del PRI en las presidenciales del 2018. Por lo pronto, Peña Nieto ya involucró al PRI nacional para posicionar a una de las precandidatas, la secretaria general mexiquense propuesta con Beltrones para nueva dirigencia. Las posibles alianzas estatales estarían en la lógica política de sembrar posibilidades a una candidatura presidencial PAN-PRD, más viable en el escenario teórico que en la real politik. En el 2012 lo quiso intentar Marcelo Ebrard Casaubón, pero se le atravesó López Obrador y su negativa a aliarse con el PAN. Antes de su exilio en París-Nueva York-Houston, Ebrard volvió a iniciar contactos con miras a una alianza presidencial PAN-PRD en el 2018. El problema que tienen las alianzas es su incomprensión real. El único que entendía la lógica de las alianzas era Manuel Camacho Solís, pero las dirigencias de la coalición neopopulista de centro-izquierda nunca quisieron racionalizar esa posibilidad. Camacho señalaba que el problema no era una candidatura de dos partidos, sino que su viabilidad radicaba en una propuesta de proyecto de gobierno. Las posibilidades de una alianza PANPRD-chiquillería para el 2018 tiene más negativos que positivos. La suscripción de un compromiso chocaría contra la pared de López Obrador, quien no se niega a una candidatura de alianza pero la condiciona a que el candidato sea él y sin programa de gobierno. Y lamentablemente para el PRD, en sus filas no existen figuras que pudieran disputarle a López Obrador la posición de ventaja en Las posibilidades de alianzas PAN-PRD podrían ser una estrategia de desesperación de ambos partidos ante la caída de sus votos y las fracturas internas. las primeras encuestas. El único sería Miguel Ángel Mancera, pero en el PRD comienzan a regatearle su apoyo. Por tanto, las posibilidades de alianzas PAN-PRD podrían ser una estrategia de desesperación de ambos partidos ante la caída de sus votos y las fracturas internas. El PRI se ha fortalecido en Oaxaca y Sinaloa, donde las gubernaturas aliancistas habrían perdido fuerza local. Y la fuerza electoral del PRD sufrió un descalabro el 7-J ante el PRD. Por tanto, en el PAN también existen suspicacias de aliarse con un partido que viene de regreso y en declinación. Y López Obrador tiene la certeza de que podría ganarle al PRI sin aliarse con nadie, aunque aceptaría declinaciones a su favor. En este contexto, la estrategia del PRI se va a centrar en recuperar gubernaturas, mantener el Estado de México y avanzar en el DF. noticiastransicion.mx carlosramirezh@hotmail.com @carlosramirezh 5 6 10 de Agosto de 2015 Agenda del día Navarrete deja la dirigencia nacional del PRD A nte el Consejo Nacional del PRD, Carlos Navarrete dimitió a la presidencia del PRD, tras reconocer que ese partido pasa por la peor crisis en sus 26 años de existencia. El dirigente perredista admitió que la renuncia de sus principales liderazgos como Cuauhtémoc Cárdenas y Andrés Manuel López Obrador, así como la conformación de un nuevo partido de izquierda (Morena) y la desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, Guerrero, colocaron al perredismo en una situación muy grave. “Nunca, en 26 años, habíamos vivido una situación semejante”, sostuvo una vez instalado el Consejo Nacional, y destacó ante sus integrantes la necesidad de un relevo adelantado en la dirigencia. “Sabemos que ustedes nos eligieron por una abrumadora mayoría y que tienen la legitimidad de haber contado con el respaldo de más de dos millones de afiliados; siempre les agradeceremos su apoyo y respaldo, pero un relevo adelantado es necesario; por eso, propongo que se procese la elección de una nueva dirigencia entre este consejo y la celebración del congreso nacional, que hoy convocaremos”, expresó. Como en días pasados lo adelantó, se trata de comenzar a trabajar en una lista de nueve puntos para transformar y relanzar al sol azteca, además de establecer el tiempo para acordar la elección de una nueva dirigencia que se haga cargo del proceso electoral del año próximo, donde se renovarán 12 gubernaturas, entre ellas, Sinaloa, Oaxaca y Puebla, ganadas hace cinco años por el PRD, en alianza con el Partido Acción Nacional. En su planteamiento, señaló que se tomaron buenas y malas decisiones pero que se condujo al barco en medio de la tormenta y fue así como se llevó el proceso electoral que culminó con las elecciones de junio pasado en medio de un escenario de cuatro partidos de izquierda divididos. La fractura de la izquierda no sólo se refleja en las cifras, va más allá, casi al exterminio, destacó el perredista. Agregó que las relaciones políticas entre el PRD, Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y Movimiento Ciudadano se han deteriorado en los últimos tres años, a tal grado que parece que estos dos partidos buscan el “exterminio del PRD”. Tropezones de Carolina Monroy C arolina Monroy del Mazo, quien será compañera de fórmula de Manlio Fabio Beltrones en el PRI, aseguró que será secretaria general del partido por su trayectoria política, no por ser prima del presidente Enrique Peña Nieto. Estas aseveraciones incomodaron mucho a Los Pinos, ya que le faltó “sensibilidad para hacerlo”. “Tengo una carrera partidista muy larga, la convicción priista la tuve desde que tuve consciencia política”, aseguró la mexiquense. “Construí una carrera que la construí sola, ladrillo por ladrillo, desde que tengo 18 años”, dijo Monroy del Mazo. El desencanto se dio porque Carolina dijo: “el señor Presidente y yo somos familiares lejanos en la línea de conducción, pero muy cercanos en el afecto y el respeto”. Balconeó a su primo al decir que el presidente Peña la puso en la secretaría general del partido y en todo hay que guardar las formas, se quejaron en Los Pinos. Carolina también dijo que “así como tan deshonesto me parecería que simplemente una relación de familia obsequie oportunidades, como también me parece que lo sería el que cancele oportunidades”. En Los Pinos reprocharon que hay palabras que no se deben usar en el vocabulario de una dirigente, como “deshonestos”. No obstante los tropiezos, la prima del presidente Peña no será relevada. Monroy del Mazo dijo que es un honor acompañar a Beltrones en la búsqueda de la dirigencia del PRI y señaló que los une “la coincidencia de este afán de seguir impulsando el proyecto de nación del presidente Enrique Peña Nieto”. “Estoy segura de que haremos un gran equipo”, afirmó. Tiro de gracia a la Sección 22 L a Sección 22 cosecha todo el daño que le ha hecho a la infancia y la sociedad oaxaqueñas. Joaquín Echeverría, secretario general de la sección 59 del SNTE, ofreció todo el apoyo de su central para abrir planteles tanto para mantenimiento, como para impartir clases a partir de este mes. Lo anterior daría el tiro de gracia a los disidentes de la 22. Ante el amago de la CNTE en la entidad de tomar las escuelas, la sección 59 del SNTE “abrió las puertas” a la Policía Federal para que elementos de la Gendarmería ayuden en las labores de rehabilitación en los planteles. Joaquín Echeverría explicó que entre 350 y 400 centros escolares que atienden, ubicados en todas las regiones pero principalmente en las comunidades rurales, son las que necesitan más atención. “Las puertas abiertas a la autoridad que quiera ir a las escuelas, nosotros no vamos a cerrar ninguna puerta, al contrario, si es que llegan las fuerzas federales a nuestras escuelas a ayudar al remozamiento, bienvenidos, porque estamos muy claros de lo que vienen haciendo, porque lo vienen haciendo y consideramos que debe de hacerse”, enfatizó. El secretario general de la sección 59 aseveró que apoyarán en todo momento con sus agremiados el inicio del próximo ciclo escolar y están dispuestos a ayudar a toda la infancia oaxaqueña a que reanude las clases. Lo anterior eliminaría en los hechos las pretensiones de la Sección 22 de boicotear el inicio de clases. Por lo que reiteró la “bienvenida” a este apoyo, no sólo de la Gendarmería, sino del gobierno federal por los programas sociales que anunciaron el lunes pasado en conjunto la Secretaría de Desarrollo Social, así como del mandatario estatal, Gabino Cué. “Bienvenido todo esto, porque es una ayuda directa a las escuelas y además permite la movilidad económica en el estado, estos recursos son bienvenidos en cuanto a la operación o ejercicio del mismo”, destacó. 10 de Agosto de 2015 PRI 2018: Peña y Beltrones, un partido en busca de autor Por Carlos Ramírez I i bien el cambio de dirigente del PRI fue motivado por el paso de su presidente César Camacho a la Cámara de Diputados y la puesta en marcha de la maquinaria para las elecciones presidenciales del 2018, de todos modos el arribo de Manlio Fabio Beltrones al tricolor ocurrió en un escenario diferente al 1929-2000: el perfil político del PRI después de la pérdida de la Presidencia de la República en las elecciones de 2000 y 2006, el regreso del PRI a Los Pinos en el 2012 y el escenario incierto del partido en un sistema de partidos más competitivo. Y si la tarea obvia de Beltrones será la de poner en marcha la maquinaria del partido para ganar las elecciones de gobernador de 2016 y 2017, y la presidencia en el 2018, en un segundo plano central estará la redefinición del PRI que regresó al poder presidencial. ¿Qué tipo de partido debe ser, qué hacer con los sectores inservibles del partido, cómo lidiar con la sociedad-red, qué tipo de votantes le darán ahora fuerza, con votos de quién ganar las elecciones y sobre todo cuál será el proyecto político-ideológico? En este contexto, el desafío del PRI de Peña Nieto y Beltrones no radica en ganar los procesos electorales, sino ahora más que nunca en aportar una razón especifica para las victorias. Por tanto, el PRI de Peña Nieto y Beltrones oscilará entre la restauración del viejo régimen corporativo o la reorganización estructural de su militancia. En términos generales, el voto leal —duro— del PRI se localiza en un rango de 27%-30%, con la necesidad de aliarse al Verde o a otros partidos para consolidarse como primera minoría, suficiente para mantener la presidencia y las gubernaturas pero insuficiente para fortalecer su espacio de legitimidad. Y lo más importante: el PRI necesita fijar su espacio de lealtad y ya no depender sus victorias del deterioro de la oposición y de sus candidatos. El problema de la gestión de Beltrones estará en un doble escenario: el del antipriísmo dinamizado en las redes sociales cibernéticas y la comodidad de la militancia amarrada a cargos o beneficios sociales. Ciertamente que la crisis de los partidos es ideológica y que todos ajustan sus espacios a los programas asistencialistas que relacionan votos-programas. Y ante los mecanismos de supervisión de ejercicio del cargo o del pre- S supuesto, los partidos han perdido lealtades al disminuir su reparto de posiciones. Como bien lo señaló el presidente Peña Nieto, el PRI ha perdido la simpatía de los jóvenes; hay que recordar, en este punto, la oleada de críticas severas contra el PRI que impulsaron los jóvenes de #YoSoy132 de la Universidad Iberoamericana en la campaña presidencial del 2012. El PRI explotó en el pasado la militancia de jóvenes al convertir al gobierno en contratante de universidades públicas. Ahora que el Estado se ha ido privatizando, los espacios laborales son reducidos y los jóvenes ya no tienen el pase automático de la universidad al gobierno. Pero al PRI le ha ayudado que el PAN y el PRD, y ahora Morena, tampoco tienen la intención de construir un partido para los jóvenes. A pesar del optimismo de la clase política gobernante, la crisis de legitimidad no puede ocultarse: el PRI ganó con alianzas la mayoría absoluta de la Cámara de Diputados pero obtuvo el 29.2% de los votos y los 11.6 millones de sufragios corresponden al 9.6% del total de la población mexicana de 120 millones. Y del lado contrario, Andrés Manuel López Obrador aparece como número uno en la tendencia de votos presidenciales del 2018 cuando su partido Morena apenas acumuló 3.3 millones de votos, el 2.7% del total de la población mexicana. El tema de la legitimidad se complica: Peña Nieto como candidato del PRI apenas acumuló 29% de los votos en el 2012 y subió a 39 con sus alanzas con el Verde, pero su voto real y directo fue de menos de un tercio de la población votante. Este porcentaje se va a mantener en las elecciones presidenciales del 2018 por la fragmentación de los partidos y las candidaturas independientes: nueve partidos registrados y cuando menos unas cinco independientes competitivas. Si al final del día al PRI le ha beneficiado la fragmentación de la democracia, la baja participación política de los mexicanos se convierte en un obstáculo en la gobernabilidad porque los mexicanos no participan en procesos electorales —52.7% de abstención el 7-J— pero viralizan su crítica al incendiar la red social del twitter, dejando como un gran cañón el espacio entre la participación real en elecciones y la partición crítica en redes cibernéticas. Una cosa es gobernar con los que votan y otro tener una baja intensidad en la legitimidad vía la participación. Lo que se tiene hasta ahora es un Beltrones eficaz, sin oferta de redefinición ideológica del PRI, sin una propuesta de reorganización de militancia-bases-simpatizantes y sin un proyecto de reforma de las estructuras corporativas de representación social. En este sentido, el objetivo de Beltrones será más hacia dentro del partido para poner orden en la asignación de candidaturas. Es decir, el PRI seguirá sin redefinir su papel en el México del siglo XXI. I II 10 de Agosto de 2015 II La periodización del PRI es fundamental para entender sus escenarios. Su larga vida de 1929 al 2018 se puede dividir en etapas: —De su fundación en 1929 a su redefinición ideológica en 1982 con el agotamiento del programa social-populista y la entronización del neoliberalismo. —De 1982 con el desplazamiento de los políticos por parte de los tecnócratas hasta 1992 en que Salinas liquidó la ideología de la Revolución Mexicana y la incorporación al partido de la ideología del “liberalismo social”. —Del 1992, del fin de la Revolución Mexicana, al 2000 con la sana distancia de Zedillo, pasando por el colapso de 1994, el asesinato impune del candidato presidencial priísta Colosio, el crack económico por la devaluación, la pérdida de la mayoría absoluta en la cámara en 1997, la victoria perredista en el DF y la derrota electoral en las presidenciales del 2000. —Del 2000 al 2009, un periodo de desgaste que hizo caer al PRI al piso en las elecciones presidenciales del 2006 quedando en tercer sitio con apenas 22% de los votos y 9.3 millones de sufragios. Pero manteniendo el control del congreso en el 2009 con el 47.2% y 12.8 millones de votos. —Y del 2012 al 2018: el regreso del PRI a la presidencia con una ventaja de 7 puntos porcentuales sobre López Obrador, aunque con apenas 29% de los votos como PRI y 39% con el Verde. En este itinerario, el PRI nació del fondo de una revolución armada-guerra civil para ser gobierno y mantener vigente un proyecto de nación, pero su camino ha sido largo y sinuoso. Sin embargo, a pesar de los vaivenes de sus élites dirigentes y los gobiernos que representaba, el PRI quedó como una estructura de poder dentro del aparato del Estado. Torre de Babel La clave de la fuerza del PRI radicó en la concepción de partido-sistema, es decir, una estructura de poder dentro de la estructura del Estado. Al principio esa configuración obedecía al hecho de que la élite revolucionaria que sobrevivió a la guerra civil elitista fue la encargada de fundar el partido como el espacio físico y político de mantenimiento del discurso histórico de la Revolución Mexicana y, sobre todo después de los asesinatos de revolucionarios a manos de otros revolucionarios, el camino para administrar y acceder al poder burocrático. El secreto del PRI radicó en dos claves: aceptar el dominio del partido y repartir el poder entre la clase gobernante. La ideología, el proyecto de nación y el pensamiento histórico —las tres claves del dominio cultural del PRI como partido de la Revolución Mexicana— agotaron su dinamismo con los acuerdos para administrar el poder. La ideología quedó en un catálogo de discursos, el proyecto negoció su origen de clase para quedar en cifras de corto plazo y el pensamiento histórico se transformó en un aparato de control ideológico del Estado. Lo que al principio fue una idea histórica y social, al final derivó en una coartada. El itinerario ideológico del PRI como el partido nacido de la Revolución Mexicana para mantener el dominio ideológico del país, pasó también por etapas: —El partido del movimiento social de 1910: de 1929 a 1940. —El partido de la burocracia política con un proyecto de gobierno desarrollista: de 1940 a 1981. —El partido del neoliberalismo: de 1981 al 2018. Así, el PRI atravesó la gama de colores del arcoíris ideológico: izquierda, populis- mo, centro y derecha. Pero fue el mismo PRI —en su versión de PNR y PRI— el que expropió el petróleo y el PRI que privatizó el petróleo en 2013. El mismo que privilegió en el cardenismo la expropiación de tierras a los latifundistas y su entrega a los ejidatarios, y el PRI que frenó ese proceso con el amparo agrario y que en 1992 también privatizó el ejido. Y todo, por cierto, en nombre del discurso ideológico de la Revolución Mexicana. Así, el PRI pasó por tres grandes etapas: —La propiamente revolucionaria de 1929 a 1940. —La realista de la economía mixta de 1940 a 1981. —Y la neoliberal privatizadora de 1981 al 2018. Cada etapa tuvo su punto de quiebre: la fundación del partido fue producto del asesinato de Obregón y el peligro de otra guerra civil, la mixta resultó del alemanismo como ideología económica y el neoliberalismo fue introducido con una reforma a fondo — ideológica y de élite— por Salinas y la instalación del Consenso de Washington. La pérdida de la ideología del PRI dio paso al pragmatismo de los acuerdos entre grupos y el reparto del poder; las fases de acaparamiento del poder a favor de un grupo tuvo salidas violentas: la represión obrera y estudiantil por López Mateos y Díaz Ordaz, el alzamiento violento de los empresarios contra Echeverría, el colapso de 1994 contra Salinas de Gortari y las protestas sociales por la pérdida de bienes de consumidores ante la devaluación con Zedillo. La alternancia partidista en el 2000 derivó de un ajuste en las élites porque el PRI siguió conservando en el periodo 2000-2012 la primera mayoría en el congreso y la mayoría de las gubernaturas estatales. Torre de Babel III La sobrevivencia del PRI ha sido un desafío a la interpretación política de los hechos sociales. ¿Cómo fue que la sociedad le quitó la presidencia al PRI pero le siguió dejando el control de las estructuras políticas legislativas y regionales? ¿Por qué razones la sociedad le negó a Fox en 2003 y a Calderón en 2006 la díada del poder presidencia-congreso? Quizá la interpretación más sensata sea la que revelaron las decisiones sociales electorales: el hartazgo social hacia los abusos presidenciales, pero sin modificar la estructura del sistema priísta que satisfacía el modelo de demandas sociales-políticas públicas del PRI. Es decir, que la sociedad votó contra las élites priístas y no contra el sistema. La clave, por tanto, se localizaría en la configuración del PRI como un partido-sistema, es decir, el PRI como el engranaje central que hacía funcionar los mecanismos de administración de demandas sociales. El PAN en la presidencia ignoró este mecanismo político-social y sus candidatos perdieron votos; en cambio, el PRD proyectó más a fondo la dinámica de la atención social y construyó un segmento social definido aunque no mayoritario de lealtad electoral, no suficiente para ganar la Presidencia de la República. A lo largo de su experiencia en el poder, el PRI edificó un juego de poleas políticas y sociales alrededor de los tres instrumentos de poder: la Constitución y su fundamento histórico legitimador de las facultades, funciones y espacios, el Estado como la envoltura del gobierno y por tanto la totalización —teoría de José Revueltas— de la acción pública y el control presupuestal. No se trató de una invención priísta sino de una continuación histórica: Benito Juárez consolidó la fuerza de la presidencia con el control del Estado y la absorción de funciones legislativas a través de facultades extraordinarias que nunca le regresó al congreso, Porfirio Díaz privilegió el poder personal a través del gobierno y del Estado y el PRI sólo acumuló en forma sistémica este proceso histórico-político de relación de demandas sociales-políticas públicas. Así, el PRI fue sustituyendo la Revolución Mexicana como elemento de ideología de consenso por el de la eficacia en resultados de bienestar; por eso la etapa de oro del PRI, la conocida como la del “milagro mexicano” por sus tasas de 6% de PIB y 2% de inflación, ambas anuales, construyó la base política del PRI; cuando el PRI no supo administrar la La sociedad parece estar satisfecha con el PRI, aunque vota en contra cuando sus élites no satisfacen las expectativas sociales o cuando la disputa por el poder provoca desajustes en el funcionamiento de las instituciones o disminuye el bienestar social. 10 de Agosto de 2015 crisis de las finanzas públicas y tuvo que disminuir sus inversiones sociales abandonando a importantes sectores medios, el consenso a favor del partido terminó, aunque le benefició en los ochenta y noventa que el PAN careció de una propuesta similar y que el PRD encontró ese camino hasta el 2000 con López Obrador en el DF. Más que un acto de justicia y de bienestar social, la política de gasto asistencialista del PRI y del PRD se orientó sólo a los más pobres como voto cautivo. Y en el caso concreto del PRD, no hubo en realidad una política de bienestar social sino programas de dinero regalado a ancianos, madres solteras, hijos en la escuela, demandantes de vivienda, pero todos ellos vistos más como votantes cautivos. Por ello la estrategia de gasto social del PRI, el PAN y el PRD no pudo potenciarse electoralmente como política social sino que quedó en los escalones asistencialistas. En este contexto, el avance de la oposición respondió a lógicas coyunturales y no a un cambio estructural en la configuración política e ideológica de las clases sociales: en el 2000 ganó el PAN por la confianza social en que no habría golpe de Estado priísta si perdía el poder y por el pago de las facturas de empobrecimiento por la devaluación de 1994 y el alza en tasas de interés en 1995; el PAN volvió a ganar en el 2006 ante el temor de grupos medios de que la victoria de López Obrador llevara el populismo a los extremos de Venezuela y Cuba; pero en el 2012, con una candidata del PAN ajena a la red de intereses políticos y sus compromisos y un López Obrador que cargaba como fardo su protesta poselectoral de 2006 con todo y el plantón de reforma, el electorado se encontró con un gobernador mexiquense bien calificado en encuestas por su alto grado de exposición mediática. Puestos en la balanza Josefina Vázquez Mota, López Obrador y Peña Nieto, la victoria fue por el entonces menos malo. En este contexto, la clave de la sobrevivencia del PRI —en perspectiva comparada con otras transiciones a la democracia— radicó en el hecho de que la sociedad estaba insatisfecha con el comportamiento de las élites pero no con el sistema, por eso siguió votando por el PRI después de la represión obrera con López Mateos, el Tlatelolco de Díaz Ordaz, el colapso devaluatorio de López Portillo, el asesinato de Colosio con Salinas, y Peña Nieto luego de dos sexenios con el PAN. Esta tesis es la que no se ha indagado ni profundizado: la sociedad parece estar satisfecha con el PRI, aunque vota en contra cuando sus élites no satisfacen las expectativas sociales o cuando la disputa por el poder provoca desajustes en el funcionamiento de las instituciones o disminuye el bienestar social. III IV 10 de Agosto de 2015 IV La llegada de Manlio Fabio Beltrones Rivera a la presidencia del PRI, con una mexiquense familiar del presidente Peña Nieto y aspirante al gobierno del Estado de México como secretaria general, debe leerse en función de varias variables: —La urgencia del PRI de establecer un mecanismo de administración política de la crisis. —El control del PRI para evitar rupturas en la sucesión presidencial de 2018. —La creación de un mecanismo de distensión política al interior y al exterior del PRI. —La consolidación del PRI por la agenda electoral de 2016 y 2017, con miras a la presidencial del 2018. —La ventaja de la oposición en las presidenciales, sobre todo a nivel de aspirantes, frente a la baja calificación de los aspirantes más visibles del PRI. —La posibilidad de que el PAN y el PRD consoliden alianzas en candidaturas a gobernadores, sobre todo en el Estado de México, donde en el 2011 el PRI pactó decisiones favorables al PAN para impedir una alianza con el PRD. —La posibilidad de una alianza PANPRD en la candidatura presidencial del 2018. En este sentido, el ascenso de Beltrones al PRI puede entenderse en varios planos: —La introducción de la variable política al PRI con un representante de la clase política, luego de que el PRI fue subordinado al presidente en turno desde 1987. Torre de Babel —La urgencia de establecer un puente de comunicación política entre la base militante con la élite gubernamental, aunque sin cederle la plaza a los políticos. En todo caso, se prevén algunas concesiones. —La necesidad de conectar a la dirigencia gubernamental neoliberal con la base política militante que se rompió en 1994 con el asesinato de Colosio. El riesgo de que aumente la deserción de priístas hacia el PAN, el PRD y ahora Morena será atendido con la presencia de Beltrones. —La nominación de un político práctico que en los hechos no encabeza un sector ideológico tradicional o histórico del priísmo, sino un eficaz operador. Al final de cuentas Beltrones tuvo a su cargo el control de la bancada priísta en la Cámara de Diputados y asociado a la bancada en el Senado para sacar todas las reformas estructurales del presidente Peña Nieto que formaban parte de la consolidación del proyecto neoliberal. —En este sentido, Beltrones podría ser también una carta funcional para la candidatura presidencial priísta del 2018 en tanto que tiene todo el apoyo de la clase política tradicionalista del PRI pero al mismo tiempo está convencido de la viabilidad del modelo neoliberal de desarrollo. Sería bastante la lista de razones que tuvo Salinas de Gortari para seleccionar como candidato a Luis Donaldo Colosio en 1994. —Por sí mismo, por su currículum político y por la agenda noble —para decirlo de algún modo— del PRI, Beltrones se posicionó de inmediato por encima de los precandi- datos visibles: el secretario de Hacienda, Luis, Videgaray, cuestionado por el efecto nocivo de los impuestos y en deterioro por la baja constante del PIB; Miguel Osorio Chong, secretario de Gobernación, atrapado en las redes de los conflictos sociales que no encuentran vía de solución y los efectos negativos de la perdida lucha contra la inseguridad y el crimen organizado. Como ninguna de las dos agendas va a mejorar de aquí al 2018, los dos precandidatos seguirán perdiendo expectativas sucesorias. Y frente al posicionamiento fuerte de López Obrador, Margarita Zavala y hasta Jaime Rodríguez El Bronco, el presidente Peña Nieto necesitaría de una figura política fuerte que pudiera garantizar la victoria presidencial y al mismo tiempo la consolidación de las reformas estructurales: Beltrones. En este amplio contexto, el posicionamiento de Beltrones en el PRI tiene tantas derivaciones como complicado está el escenario político nacional. La realidad actual es diferente a la de 1988 cuando Salinas tomó al PRI por asalto, a la de Zedillo en 1995 cuando se desligó del PRI con el argumento de la sana distancia, a la de Roberto Madrazo cuando utilizó el PRI para catapultar su candidatura fracturando la cohesión interna y a la cómoda de Peña Nieto cuando mantuvo una ventaja electoral de principio a fin de la campaña del 2012. En todo caso, al PRI le faltan prácticamente dos y medio años para abrirse a sus candidaturas, frente a una oposición que acelerará su presencia pública para ganar ventaja. Y ahí tendrá que decidirse si Beltrones será sólo un presidente del PRI sin oportunidad para la candidatura presidencial o si el presidente Peña Nieto entrará al proceso priísta del 2018 con la mente abierta y sin exclusiones. noticiastransicion.mx carlosramirezh@hotmail.com @carlosramirezh Columna Tras la puerta del poder 10 de Agosto de 2015 Descifrando a Peña Nieto Por Roberto Vizcaíno *Con la nominación del sonorense, todos pasan al punto de salida… no hay sucesor designado *Abrirle la puerta a un externo significa que el mexiquense no está conforme con los suyos *Si Manlio recupera posiciones y consolida reformas, será sin duda el elegido Con un fuerte y sentido abrazo para mi amigo José Luis Montañéz Aguilar por la irreparable pérdida de su mamá, señora Dolores Aguilar de Montañéz, descanse en paz E l presidente Enrique Peña Nieto no tiene delfín decidido para su sucesión en 2018. Con la designación de Manlio Fabio Beltrones a la presidencia del PRI, Luis Videgaray y Miguel Ángel Osorio Chong pasaron de nuevo a la línea de salida de la carrera presidencial. Es obvio que si Peña abre la puerta a Beltrones, el político con mayor experiencia y capacidad de manejo de poder y gobierno fuera de su grupo, es porque considera que los suyos no han cumplido. Y no lo han hecho a pesar de que él personalmente les ha dicho y exhortado a completar la aplicación de las reformas. Lo anterior es lo primero que se desprende de la contundente decisión de darle finalmente el paso al sonorense. Es evidente que si el mexiquense hubiera tenido ya a un sucesor designado, entonces habría colocado como dirigente a un político cercano al casi ungido que se dedicaría a cuidarlo y fortalecerlo. Pero no. Está clarísimo que quienes pensábamos que ya había arreglo interno, estábamos equivocados. Una vez más errados frente a un mandatario cuyo perfil indica que no se deja presionar y que toma las grandes decisiones políticas con la cabeza bien fría y fuera de los afectos personales. Pero la decisión de colocar a Beltrones al frente del PRI no termina ahí. La decisión está cargada de otros muchos mensajes: 1.Y si de entrada Peña nos indica que no tiene delfín designado para su propia sucesión, eso quiere decir que tampo- co hay preferidos para otras posiciones. El mensaje es que hay “juego nuevo”. Y que en su sucesión y las demás optará por quien considere el mejor para el México que viene, el del 2018 al 2024. Sólo hay que recordar que a fines de este año se comienzan a decidir las candidaturas de 12 gubernaturas que se renovarán el 2016. Esos son ya los gobernadores que dejará sembrados para el siguiente sexenio. 2.Y si Osorio y Videgaray pasan a la línea de salida, eso significa que todos los demás secretarios (quizá a excepción de los de Defensa y Marina) también entran en revisión… en un proceso de evaluación. Es obvio que si Peña abre la puerta a Beltrones, el político con mayor experiencia y capacidad de manejo de poder y gobierno fuera de su grupo, es porque considera que los suyos no han cumplido. Y no lo han hecho a pesar de que él personalmente les ha dicho y exhortado a completar la aplicación de las reformas. No es una casualidad que Beltrones, quien como el mejor jugador de ajedrez del tablero político nacional, ha comenzado su gira de proyección diciendo que desde el PRI acompañará a Peña Nieto a la consolidación de las re- 7 8 10 de Agosto de 2015 Columna Tras la puerta del poder aspirantes blanquiazules a la candidatura por la Presidencia de la República. De todas las otras gubernaturas, existe el riesgo de que el PRI pueda perder por primera vez Veracruz debido al desastroso gobierno realizado por Javier Duarte. formas. Algo que nadie más desde ningún otro espacio o foro ha dicho. 3.Es un reconocimiento de que Peña considera a Beltrones también padre de las reformas. Es decir, que si es Presidente de la República, cuidará que se terminen de aplicar y no las desechará o modificará. Por lo demás es significativo que Beltrones, aún sin llegar, rompa con el expresidente Ernesto Zedillo. Esta ruptura abre la puerta a un ajuste final de cuentas del expresidente Carlos Salinas con su sucesor, con el apoyo de todo lo que significa el poder del tricolor. Pero no sólo eso. No hay que olvidar que Beltrones es economista y que además fue quien “destapó” a Zedillo en aquel evento en que se discutía quien debía ser el sucesor de Luis Donaldo Colosio asesinado días antes. Beltrones, en esos momentos gobernador de Sonora, presentó el video en el que Luis Donaldo hablaba bien de Zedillo y entonces ya no hubo dudas, éste fue designado el candidato sustituto. Una vez Presidente de la República, Zedillo fue el más duro persecutor de Salinas y colocó a Beltrones en el único período que ha vivido fuera de posiciones políticas desde que es priísta. Hoy, al hacer su deslinde, el sonorense muestra que tiene memoria y que no ha olvidado que Zedillo, más que un demócrata, es un traidor mezquino para muchos priistas. Bueno, Beltrones lo dijo: por él se perdió la Presidencia en el 2000. En lo interno este deslinde podría significar un reacomodo de corrientes de ideas, escuelas y conceptos económicos. No hay que olvidar tampoco que Zedillo y su entonces grupo en el poder, representaron a una corriente neoliberalista más cercana al panismo y a los fuertes intereses norteamericanos del TLC que terminó por fracturar al priísmo. Hoy, Manlio, desde la presidencia del PRI, podría estar marcando un freno o reorientación de ciertas tendencias de política económica opuestas al priísmo post-revolucionario. LO ELECTORAL Con el reconocimiento de haber metido las manos y conducido las elecciones a gobernador en Sonora —donde hizo ganar contra todo pronóstico a Claudia Pavlovich—, y en Guerrero, donde apoyó con todo a Héctor Astudillo, Beltrones tiene ahora ante sí el reto de sacar adelante las 12 elecciones a gobernador de 2012. Sobre eso dijo: “Queremos rápidamente empezar después del día 20 (fecha en que será electo formalmente como presidente del PRI), a trabajar para revisar las doce entidades que tienen elecciones de gobernador, más una más muy importante, lo digo así porque si no me van a llamar la atención, muy importante para ese estado que es Baja California, porque en Baja California habrá elección de presidentes municipales, de diputados locales, y nosotros gobernamos a la mayoría aunque el gobierno del estado esté en manos de otro partido político”. Los estados con renovación de gobernadores son: Aguascalientes, Chihuahua, Durango, Hidalgo, Oaxaca. Puebla, Quintana Roo, Sinaloa, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz y Zacatecas. De los 12 estados, 9 son gobernados por priístas, 2 por panistas y 1 por un perredista. El reto del sonorense será al menos mantener a 9 dentro del PRI aunque existen fuertes posibilidades de que el tricolor gane Oaxaca y Sinaloa que están en manos de la oposición. El PAN podría retener Puebla, hoy gobernada por Rafael Moreno Valle, uno de los POR LA TRANSFORMACIÓN El reto electoral es asumido desde ya por el sonorense como un lance del que saldrá victorioso. “Lo vamos a hacer, seguros de que un partido político no es nada más aquel que se propone ganar elecciones, sino aquel que con visión se imagina un México mejor y necesita construirlo con órganos de gobierno, como hoy lo estamos haciendo. “Un partido político como el nuestro, ha permanecido 86 años porque nos hemos sabido modernizar”, precisó. Indicó que durante el siglo pasado los gobiernos del PRI crearon todas las instituciones del México moderno, mientras que durante sus 12 años en el poder, no le sirvieron al PAN para crear una sola institución. Luego recordó que durante su discurso del 25 de julio pasado en el PRI, el presidente Peña Nieto convocó a una renovación de estructuras y oferta política. “Hay coincidencia plena. Eso representa un reto que desde hace tiempo motiva mi aspiración de dirigir el partido. Atenderemos el llamado a asimilar los cambios en nuestra sociedad junto con el resto del mundo, pues resulta imprescindible que el PRI se adapte a estas transformaciones para evitar el rezago y mantener la capacidad de representación y conducción del cambio social. Es una tarea que enfrentaremos con la participación de todos los priistas. “Además de apoyar el proyecto de transformación nacional del Presidente y difundir los resultados de las reformas que se están instrumentando, seguiremos la ruta de la adaptación y actualización de la agenda política del PRI para mantener un partido vigente. El mundo ha cambiado drásticamente y la organización y oferta política priistas deben ponerse al día para incorporar la voz de la diversidad social y ser una opción representativa y confiable para todos quienes anhelan construir un mejor país”, subrayó. Es decir, vemos surgir a líder tricolor más peñista que todos los que rodean al mexiquense desde el inicio de su gobierno. Esa es la virtud de la política. La de Beltrones. Y si Beltrones logra recuperar posiciones y consolidar reformas, acicateando desde el partido a los responsables dentro del Gabinete, Beltrones será el sucesor. Así de sencillo… rvizcaino@gmail.com Columna México y el Mundo Impresiones de la calle: que habla y enseña con el otro A yer, al mediodía, iba andando hacia un almacén donde me esperaba mi esposa. Como el almacén era cercano fui andando, dando un paseo. En la mitad del trayecto, muy respetuosamente, me paró un joven —me dijo que había sido mi alumno en la Facultad de Ciencias Políticas— y me añadió, que tenía un problema. Un poco asombrado le dije que me explicara su problema. Me dijo que no es un problema, sino que tengo que explicar qué es un ghetto (o geto) y aunque sé que significa aislamiento o separación de los demás, del otro, no tengo la menor idea de dónde procede la palabra. 10 de Agosto de 2015 Por Juan María Alponte No sabía si enfadarme o reír. Preferí lo último. Le dije que la palabra procede de una isla mediterránea, frente a Venecia y que se la conoce como ghetto. La gente terminó por entender que la isla, aislada, estaba separada de la península italiana. Su nombre, ghetto, terminó siendo, a escala, una idea o una tesis sobre la separación o, repito, el aislamiento y, en casos, la discriminación. Le añadí que en 1516 los judíos de Venecia, en esas etapas de la historia, atormentada, empleaban la palabra ghetto que podía significar, primero el aislamiento y, también, la expulsión de una comunidad, de un ghetto. Mi joven interrogante me dijo esto 9 10 10 de Agosto de 2015 que tal: “Finalmente entiendo cuál es el origen de esa palabra perdida en las peleas humanas”. No era para tanto. La voz ghetto, ha terminado por representar muchos problemas de discriminación. Han pasado los siglos por la isla y por la mensura de la expulsión de los judíos de Venecia y, sin más, todavía, los seres humanos seguimos asumiendo, inventando o arrojando a un grupo religioso, político o cultural a sus respectivos ghettos. La palabra nos transporta, muchas veces, a situaciones límites, por ejemplo, rechazando a una comunidad o un grupo hablante de manera distinta que queda encerrado, en teoría o realmente en un ghetto. No digamos algo terrible: el ghetto de los expulsados de una comunidad por el color de su piel o, simplemente, por su idioma. La palabra, por tanto, es el sinónimo del racismo y alguien ha señalado, inclusive, que las prisiones son un ghetto, una forma explícita del fenómeno de aislamiento o la condena. Los numerosos grupos de aislamiento racial permiten pensar como en el caso de Israel y Palestina que, infortunadamente, no han salido o superado su “isla”, su aislamiento o su doble vida, en ghettos, porque no se ha tenido la valentía de terminar, para siempre, con los ghettos que nosotros mismos creamos. A veces sobrevivimos o vivimos en ghettos al negarnos a participar en los procesos políticos, sociales o culturales que nos separan y vivimos, por ello, en nuestros respectivos ghettos que son, en el fondo, el entrenamiento para todas las barbaries de la discriminación y la incomunicación. Columna México y el Mundo Infortunadamente vivimos, en nuestro cada día, en un ghetto ideológico o político que nos impide oír o escuchar al otro que, a su vez, tiene la obligación ética de salir de su ghetto particular y escuchar, también, desde el horizonte de la libertad y no de la exclusión, al otro para que, finalmente, los dos salgamos de nuestros respectivos ghettos insulares y discriminatorios. Cada uno, pues, en su propio ghetto. Infortunadamente vivimos, en nuestro cada día, en un ghetto ideológico o político que nos impide oír o escuchar al otro que, a su vez, tiene la obligación ética de salir de su ghetto particular y escuchar, también, desde el horizonte de la libertad y no de la exclusión, al otro para que, finalmente, los dos salgamos de nuestros respectivos ghettos insulares y discriminatorios. Cada uno, pues, en su propio ghetto. Lo grave del modelo del ghetto, es que termina, siempre, en la exclusión, la discriminación y en un racismo escondido que se enreda en las palabras, pero que en el fondo funciona, socialmente, como discriminación o, en muchos casos se explicita, además, en el racismo y la exclusión. En mi casa, como siempre, tenemos un grupo de gatos con pieles y ojos distintos. Lo que nos une es que viven con nosotros, están con nosotros, saben su nombre de pila y llegan, con la cola levantada en actitud interrogatoria: “¿Qué quieres?”. No viven en un ghetto —vivir en una isla de Venecia—, esto es, viven con nosotros. Tienen sus momentos de reacción y, sin duda, viven en su mundo, pero no están perdidos en un ghetto gatuno. Al revés, han aprendido a vivir con el “otro” —de dos patitas— que es un amigo y un aliado. Sólo les falta hablar pero entienden, muy bien, cuando es la hora de dormir. Mi artículo diario lo escribo en la noche. Siempre tengo a “Felipe” a mi lado. Tiene el pelo blanco, sedoso. Pongo mi mano en su columna vertebral y se duerme. Cuando a las doce o una de la madrugada termino mis tareas y obligaciones —entre ellas preparar las clases y comenzar mi libro 38— tenemos un corto diálogo: “¿Te vienes a la cama o te quedas en el sillón donde trabajo?”. Felipe, el blanco maravilloso de ojos verdes, entiende. Unas veces le da la gana de dormir en mi almohada y, en los más de los casos, prefiere su vida privada. No vivimos, con nuestros gatitos, en un ghetto de amos y animales, sino en una casa compartida. Los racistas parten de la idea de que son mejores que los “otros”. En muchos casos viven, perdidos para siempre, en su propio idioma como frontera de su aislamiento. La otra noche cenaba en una cafetería con mi esposa y, de pronto, vimos que una pareja mayor nos estaba haciendo fotografías. Después vinieron a saludarnos. Nos dijeron, en inglés, que eran iraníes. Irán me pareció lejano y fascinante. Fue un encuentro repentino, conmocionante y desprendido de todos los ghettos. Era la vida que proporciona la posibilidad de conocer al otro. Aunque fueron unos minutos aprendimos de ellos y, de pronto, el mundo se hizo grande y asombroso: habíamos salido de nuestro ghetto. Llegamos a casa muy contentos. Habíamos conocido al “otro”. alponte@prodigy.net.mx Los Pinos 2018: La silla embrujada 10 de Agosto de 2015 Las reglas: • El ascenso de Manlio Fabio Beltrones a la presidencia nacional del PRI lo colocó en automático como candidato presidencial. Para los que saben leer en clave política, los accesos a la lista de aspirantes se dan por decisión propia, por mandato del Presidente o por la circunstancia. Y diga que no, Beltrones ya fue puesto en la lista de aspirantes por los medios escritos y radiofónicos. • Dicen que el más afectado por el nombramiento de Beltrones fue el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, quien ya se sentía con la candidatura en la bolsa. Y beneficia a Miguel Osorio Chong, secretario de Gobernación, porque ayudará en el trabajo político. • López Obrador también sintió pasos en la azotea porque aumentó su presencia mediática. • En cambio, Margarita Zavala parece estar esperando el resultado de la elección de presidente en el PAN porque pasó a situación de discreción. • Y el jefe Miguel Ángel Mancera también aceleró el paso porque los problemas de la ciudad lo afectan de cualquier forma. • El nombramiento de Beltrones en el PRI colocó las gubernaturas en disputa en 2016 y 2017 como una verdadera aduana política. • El nombramiento de Carolina Monroy del Mazo como secretaria general del PRI dejó la lectura de que es precandidata del PRI al gobierno del Estado de México. Y esa elección mexiquense será clave para la presidencial. • Otro dato importante que hay que anotar: si hay alianza PAN-PRD en algunas gubernaturas, el PRI podría perderlas y llegar herido al 2018. Ahí estará la tarea fundamental de Beltrones. : os s tid Lopar Los suspirantes: • Preocupación en los partidos de oposición por el resultado en el PRI en el nombramiento de su dirigente. Esperaban conflictos, y PAN, PRD y Morena estaban a la caza de priístas descontentos. • Al contrario, es posible que el arribo de Beltrones al PRI traiga a algunos priístas de regreso porque el reparto de posiciones será menos cerrado. • Indicios de fractura en el PAN. Javier Corral sabe que le están haciendo trampa y va a vender muy cara su derrota. Lo malo es que no habrá espacio para cauterizar heridas. Y vienen gubernaturas donde el PAN puede avanzar, pero a condición de estar unido. La silla embrujada: L a importancia de la Presidencia de la República marcó el mecanismo de acceso como la lucha política esencial en México a lo largo de casi doscientos años. Uno de los presidentes cuya presencia en el cargo aún no se ha estudiado a fondo fue Antonio López de Santa Anna: en la parte final del primer ciclo de la república federal, de 1833 a 1836, Santa Anna fue Presidente en cuatro ocasiones. La primera apenas dieciocho días: tomó posesión de la silla y pidió licencia por problemas de salud, retirándose a su hacienda llamada Manga de Clavo. La debilidad de la presidencia estuvo marcada por la ausencia de un poder militar fuerte; la élite política de ese México venía, por lo demás, de los grupos militares. Santa Anna se levantó en armas por el asesinato de Guerrero, puso presidente y esperó hasta ser electo. A partir de entonces, sin mecanismos de regulación electoral, entró y salió del poder sin que nadie objetara nada. En esa parte del México federalista el poder político estaba en el congreso y la pinza que atenazaba a la presidencia era el de los gobernadores que controlaban a sus diputados en el congreso federal. El Presidente de la República, hay que recordarlo, era a propuesta de los gobiernos estatales y electo por el congreso. E CU NTA REGRESIVA : Faltan 2 años, diez meses y 20 días para las elecciones presidenciales. 11 Busca el 15 de cada mes la revista: El Mollete Literario Tercera época noticiastransicion.mx