LA FORMACIÓN DE LOS APÓSTOLES DEL FUTURO Modelo del Apostolado del Mar (Gran Bretaña) (Traducción no oficial) P. Colum KELLY Capellán del puerto de Immingham, GB Introducción En esta ponencia les explicaré brevemente la formación y el desarrollo profesional de los capellanes y de los visitadores de barcos, para su ministerio marítimo. Con respecto al modelo de la capellanía del A.M. (GB), soy consciente de que somos una unidad bastante compacta, si la comparamos con la gran mayoría de las capellanías en todo el mundo. El aislamiento que podemos sentir los unos de los otros en Gran Bretaña es relativo, comparado con las enormes distancias que separan a algunos compañeros en otras partes del mundo. Sin embargo, la normalidad es que nuestro ministerio se desarrolle en un contexto en el que las distancias físicas entre los colegas del A.M. son notables. Esta realidad sirve únicamente para evidenciar la necesidad de disponer de normas nacionales de formación, de apoyo y de prestaciones, estructuradas. El A.M. cuenta con 15 capellanes que trabajan en los principales puertos del Reino Unido. Algunos son sacerdotes, otros son laicos, pero todos cuentan con un mandato común, promover la asistencia de nuestra Iglesia al forastero, para que se sienta acogido, para asegurarle nuestra ayuda y apoyarle en sus necesidades, tanto espirituales como de bienestar. Un elemento esencial de la pastoral de los marinos en el Reino Unido es el trabajo que llevan a cabo muchos voluntarios, incluidos unos 100 visitadores de barcos. Un capellán debe estar comprometido con la fe de la Iglesia, y ser un fuerte defensor de sus enseñanzas en la protección de los derechos de los marinos. Él/ella tiene que poseer las habilidades necesarias que le permitan ofrecer un ministerio eficaz; conocimientos que se han construido a lo largo de una vida de experiencia de trabajo y oración, alimentada en la vida familiar y en el ámbito parroquial. En la encíclica Deus Caritas Est, el Papa Benedicto afirma: “La naturaleza íntima de la Iglesia se expresa en una triple tarea: anuncio de la Palabra de Dios (kerygma-martyria), celebración de los Sacramentos (leiturgia) y servicio de la caridad (diakonia). Son tareas que se implican mutuamente y no pueden separarse una de otra. Para la Iglesia, la caridad no es una especie de actividad de asistencia social que también se podría dejar a otros, sino que pertenece a su naturaleza y es manifestación irrenunciable de su propia esencia”. El A.M. tiene la obligación de ayudar a los capellanes y a los visitadores de barcos a desarrollar todas las habilidades necesarias para el cumplimiento de este mandato. Asimismo, debe ayudar a los capellanes a comprender la singularidad de su 1 ministerio, y animarles y apoyarles desde las primeras fases de su compromiso. Al fin de promover este objetivo, un Comité Pastoral de Capellanes se reúne 3 veces al año. Este grupo de trabajo está compuesto por el Director Nacional, tres capellanes, y está presidido por un administrador. Los términos de referencia son: 1 Revisar la eficacia pastoral del ministerio marítimo del A.M., vigilando que se realice en conformidad con el Catecismo de la Iglesia Católica y se ajuste a las mejores prácticas desde la perspectiva de la industria y del sector. 2 Supervisar la inserción laboral, la formación, el desarrollo y la formación permanente en la fe, del capellán y del visitador de barcos. 3 Apoyar al equipo ejecutivo en la aplicación de la estrategia del A.M. 4 Informar al Director Nacional y, a través de él, a los consejeros. La totalidad de dicho proceso es el resultado de la colaboración entre el Director Nacional, los Consejeros y los capellanes, con el objetivo de garantizar una formación permanente adaptada a las necesidades de nuestros capellanes y voluntarios, desde las primeras fases de su ministerio en el A.M. Por lo tanto, ¿qué se ofrece? Capellanes Período de inducción laboral 1. Una vez que el nuevo capellán habrá aceptado su contrato con el Apostolado del Mar y recibido la Carta de Nombramiento, el Director Nacional informará al director del programa de inducción laboral y solicitará el inicio del proceso de inducción. 2. El director del programa asignará a un capellán de puerto la función de mentor del capellán recién nombrado. El director informará de esto al nuevo capellán y de lo que él/ella puede esperar de dicho mentor. 3. El director del programa solicitará a la oficina central del A.M. que organice, para la persona recién nombrada, una visita de familiarización, así como algunas reuniones informativas con el personal. 4. El capellán mentor organizará una visita a un puerto para que el capellán recién nombrado pueda conocer: La ética y la metodología de un capellán del A.M. Entregar una copia de nuestras Directrices. La importancia de contratar, formar y retener trabajadores voluntarios. Normas básicas de seguridad portuaria. El protocolo y la importancia del cumplimiento de las normas de seguridad. Los aspectos prácticos de la visitas de barcos. Lo que se puede esperar a bordo. Un recorrido por el puerto que incluye la ilustración sobre las funciones de todos los que trabajan allí. Tomar el tiempo necesario simplemente para 2 observar las diferentes actividades de los trabajadores portuarios. Visitar el Centro de acogida de marinos (si existe uno). Reunirse con el personal y los voluntarios para comprender sus funciones. En síntesis, ayudar al nuevo capellán a comprender el funcionamiento de un puerto y cómo interactúan los diversos roles al fin de garantizar su buen funcionamiento. 5. El Director Nacional organizará una visita a la oficina central. Ésta incluirá reuniones informativas sobre: Las funciones de todos los que trabajan allí. Información detallada del personal (sueldos, pensiones, planificación de vacaciones, gastos, etc.). Recaudación de fondos y comunicación. Publicaciones del A.M. Asistencia pastoral, incluyendo el suministro de equipos de informática, teléfonos, vehículos y seguros. Recursos pastorales. Conferencias. Ingresos mensuales e instrucciones sobre la presentación de informes. Ropa de seguridad. Supervisión del A.M. por parte del Director Nacional. 6. El nuevo capellán aceptará, en su contrato y en la Carta de Nombramiento, trabajar durante un período inicial de 6 meses. Por lo tanto, después de 5 meses, el director del programa de inducción laboral deberá organizar una reunión de revisión con el capellán recién nombrado, el Director Nacional, el mentor y el manager. Si durante el período de prueba de 6 meses surgen cuestiones laborales que exceden el ámbito de competencia del director del programa y del mentor, éstas deberán ser de competencia del Director Nacional. La necesidad de APOYO PERMANENTE. A través de esto, intentamos abordar las áreas humanas, espirituales, intelectuales y pastorales de la capellanía y del ministerio. Creemos que debemos reflexionar sobre nuestros conocimientos, nuestros dones, y buscar nuevas formas de enriquecerlos. El proceso continuará durante todo el tiempo de nuestro servicio como Capellanes. Por tanto, ¿cómo podemos hacer que todo esto sea posible? Congresos de capellanes Los congresos se celebran dos veces al año. Brindan a los capellanes la oportunidad de reunirse con sus colegas, de socializar y de intercambiar buenas prácticas. El programa se desarrolla durante 48 horas e incluye la estancia de dos noches. Las sedes más utilizadas para dichos congresos son aquellas que se encuentran dentro de una comunidad monástica, dado que nos podemos unir a las celebraciones eucarísticas y a los Oficios divinos comunitarios. Generalmente, durante la primera tarde se tratan cuestiones relativas al A.M., 3 incluyendo un informe del Director de Recaudación de Fondos. El resto de la tarde, los capellanes disponen de tiempo para socializar y escuchar noticias sobre los demás puertos. El tema de la jornada central se basa en un aspecto de la vida espiritual, y es dirigido por un conferenciante con experiencia en ámbitos específicos como la oración o las Escrituras. Por ejemplo, nuestro último congreso fue sobre la Doctrina Social de la Iglesia, y se analizaron temas como: Gaudium et Spes, Deus Caritas Est, Caritas in Veritate. Esos días son una ocasión para reflexionar, para la oración privada y comunitaria, y brindan la ayuda necesaria para que el capellán comprenda la llamada específica de su ministerio. Para ello, los participantes disponen de tiempo libre (¡no existe ninguna presión para rellenar nuestros días!). La última mañana del congreso incluye la aportación de un invitado con conocimientos técnicos en el sector de la industria del transporte marítimo; dicha ponencia nos consentirá mantenernos al día de los cambios que puedan ser importantes para nuestro ministerio. En nuestro último congreso, contamos con la participación de un representante de la Agencia Marítima y del Guarda Costas del Reino Unido. El congreso se clausuró con unas palabras de aliento de nuestro Director Nacional. La respuesta de los capellanes fue muy positiva, y somos conscientes de que el poco tiempo a nuestra disposición, constituye una fuente de apoyo y una ocasión para compartir nuestras historias. Además de estos congresos, está previsto que los capellanes asistan a una reunión anual, de carácter social, con sus colegas. Este proyecto se encuentra todavía en una fase de planificación, pero esperamos que se pueda implementar en un futuro próximo, dado que es otra oportunidad para que los capellanes puedan reunirse con sus colegas únicamente con fines de socialización. Quizás sea posible que los capellanes asistan a cursos que no son específicos del A.M. Dichos cursos están disponibles a través de Organismos nacionales e internacionales (MNWB, ICMA, Lloyds y otros organismos profesionales.) El anuncio de los eventos, normalmente, se envía a través de la Oficina Nacional, y los capellanes puedan comunicar su interés al Director Nacional. APOYO DIRECTO BRINDADO POR EL DIRECTOR NACIONAL Una conferencia telefónica cada 2 semanas Nuestro Director Nacional llama por teléfono a todos los capellanes, y mantiene una conversación con ellos de unos 30 minutos aproximadamente. Durante dicha llamada recibimos noticias de nuestro Director e intercambiamos información con otros capellanes. 4 Una llamada telefónica mensual. Ésta es una conversación privada con nuestro Director, en la que se ofrece al capellán la oportunidad de plantear problemas o compartir buenas noticias. Las visitas trimestrales al puerto El Director Nacional visita al capellán en su propio puerto, tres o cuatro veces al año. La evaluación anual Ésta es una visita más formal al capellán, en la que se lleva a cabo un revisión de la labor del A.M. en el puerto. Los capellanes tienen la oportunidad de hablar de su ministerio, y de indicar los ámbitos que necesitan asistencia. A raíz de la visita, el Director escribirá al capellán un informe en el que resumirá dicha conversación. El apoyo de nuestro Director Nacional es muy apreciado por los capellanes, y nos recuerda que, a pesar de que trabajamos en lugares remotos, la ayuda nunca está lejos y el apoyo del equipo de la oficinal central está siempre a nuestro alcance. EL APOYO DE LOS VOLUNTARIOS Nuestros visitadores voluntarios de barcos comparten nuestro ministerio y son parte integrante de la labor que realizamos. También ellos necesitan ayuda, y el Comité Pastoral de Capellanes ya ha elaborado un Manual de Visitadores Voluntarios de Barcos. Los principios de este manual están orientados por el “Manual para Capellanes y Agentes Pastorales” del Pontificio Consejo (2007). El manual establece lo que el A.M. espera de sus voluntarios, y se compromete a ayudarles en su trabajo. Es responsabilidad de un capellán de puerto, contratar, formar y apoyar a aquellos que se consideren adecuados para esta labor. El A.M. se compromete a: 1. La inducción laboral y la formación Proporcionar a través de la inducción al trabajo del A.M., de su personal, su función de voluntario y la inserción y/o la formación necesaria para cumplir con las responsabilidades de dicha función. El Manual del Voluntario ofrece todos los detalles de la organización. 2. Supervisión, Apoyo y Flexibilidad Explicar los estándares que exigimos para nuestros servicios, animar y ayudar a conseguirlos y mantenerlos; Nombrar a una persona que se reunirá regularmente con usted para hablar sobre los problemas y los éxitos de su voluntariado; Hacer todo lo que esté a nuestro alcance para ayudarle a desarrollar su papel de voluntario y proporcionarle información sobre el rendimiento de su prestación. 5 3. Los gastos Pagar los costes de kilometraje de ida y vuelta a su lugar de trabajo y los desplazamientos que realice mientras trabaje: por favor, hable con su capellán de puerto o supervisor si desea reclamar kilometraje. 4. La salud y la seguridad Proporcionar una formación adecuada y observaciones para reforzar nuestra política de seguridad y de salud, cuyos detalles se pueden encontrar en el Manual de Voluntarios. Proporcionar ropa de seguridad y equipos para utilizar en los puertos y en otros ambientes. 5. Los seguros Proporcionar una cobertura de seguro adecuada a los voluntarios que realizan un trabajo voluntario aprobado y autorizado por nosotros. Se le pedirá que nos comunique el nombre de su compañía de seguros si transportase a personas en su propio automóvil. 6. Igualdad de oportunidades Garantizar que todos los voluntarios sean tratados de acuerdo con nuestra política en materia de igualdad de oportunidades. Si lo desea puede solicitar una copia con dicho contenido. El capellán debe mantener contacto regular con sus voluntarios, y se recomienda a los voluntarios que compartan un día juntos para rezar y reflexionar, gracias a las aportaciones de un orador invitado. Conclusión En el transcurso de los años, el A.M. GB ha formulado, experimentado y probado un sistema de formación, de apoyo y de retención de capellanes y voluntarios. A través del Comité Pastoral de Capellanes, supervisamos constantemente nuestra metodología y nuestro modus operandi. Sería absurdo pensar que no se pueden aportar mejoras, así pues, es importante que sigamos reflexionando atentamente mientras crecemos. Es necesario revisar las actividades pasadas, determinar otras nuevas, y asegurarnos de que el trabajo del apostolado marítimo se está llevando a cabo correctamente, de acuerdo con las normas establecidas en la Carta Apostólica Motu Proprio “Stella Maris”. Si esta breve reseña ha sido de su interés y desea saber más acerca de nuestra labor en Gran Bretaña, puede solicitar mayor información a nuestra oficina, ¡aunque está disponible sólo en inglés! 6