134 • BOLETÍN D E LA S O C I E D A D IBÉRICA (4) posición, que colocaban en 'cuatro vasos llamados canopes, dedicados a los genios funerarios. Son éstos: Amset, con cara humana; Duanmantef, con cabeza de chacal; Kebsenut, de gavilán, y Hapi, de cinocéfalo. Este último estaba encargado de la conservación de los intestinos. Las representaciones de los genios funerarios son muy frecuentes bajo la forma de figuras de arcilla esmaltada de azul, como las que adornan la vestidura de una momia de la época tolomea, Museo Arqueológico Nacional, la que además los lleva bordados con abalorios. También aparecen en las pinturas de los ataúdes y en el aditamento de las momias. En la sala de Egiptología del mencionado museo pueden verse representaciones de Hapi con cabeza de cinocéfalo en el ataúd de Ankh-f- en Kousou, sacerdote de Amón, entre las numerosas figuras y gerogíficos. En la cubierta aparecen dos clases de representaciones de simios; una pequeña de color verde, y otra mayor, sentada en un sitial. En la parte externa del ataúd hay dos representaciones de monos, entre genios funerarios y divinidades, y en la parte interna hay una de gran tamaño. En el ataúd antropoide de la xxi dinastía, procedente de Tebas, aparece una figura de Hapi con cabeza simia en unión de la de los otros genios funerarios. Procedente del mismo ataúd existe una pieza muy curiosa, pues sus pinturas representan una escena funeraria, esto es un cadáver, con los vasos canopeos; a ambos lados del cual hay dos figuras simiescas. En otros ataúdes y momias aparecen representaciones de Hapi con cabeza de cinocéfalo, pero en algunos, como en el ataúd de la dama Jarot-en-Bast, no aparece ninguna figura zoomorfa. Comprensible es, por este hecho solo, la gran importancia y veneración del Mamadrias por los egipcios, pue-blo excesivamente religioso y extremadamente escrúpulo-