A seis meses de un derrumbe, una familia sigue a la intemperie

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Información general
Sábado 15 de septiembre de 2007
El conflicto continúa
Metrovías:
hubo menos
demoras en
los subtes
LA NACION/Página 27
Tecnología
La excavación de una obra lindera los había dejado sin vivienda
Programas
para brindar
un show de
diapositivas
Según la empresa,
hay equipo dañado
Sin usar proyector
ni pantalla blanca
Por Nathalie Kantt
Por Ariel Torres
De la Redacción de LA NACION
De la Redacción de LA NACION
Las demoras que los pasajeros volvieron a soportar ayer, en las líneas
A, B y E del subte y en el Premetro
fueron, según aseguraron a LA NACION
voceros de Metrovías, consecuencia
de las acciones que algunos delegados
gremiales llevaron adelante durante
estas últimas semanas y que provocaron la inhabilitación de varias
formaciones que hoy están en los
talleres de mantenimiento.
“Ya recuperamos algunos vagones,
y por eso ayer los retrasos sólo fueron
entre las 8 y las 10, y entre las 18 y las
19. Es que todavía no contamos con
todas las formaciones”, informó a LA
NACION una vocera de Metrovías.
Ayer, la concesionaria del servicio
criticó que el Ente Regulador de Servicios Públicos de la Ciudad de Buenos
Aires “sólo se haya expedido sobre la
calidad del servicio público y no sobre
los aspectos técnicos de los vagones”.
Según el informe del Ente, dado a
conocer anteayer a los medios, entre
otras fallas, se detectaron la falta de
iluminación en andenes y accesos
(27%), la de señalización en los carteles
de los andenes, en los vagones y en los
mapas (23%), la ausencia de medidas de
prevención de incendios –matafuegos
y salidas de emergencia– (17%) y el
incumplimiento de la frecuencia del
servicio (6%). Además, el ente dijo
tener comprobado que las puertas se
abrieron durante un recorrido de la
línea A, el 14 del mes pasado.
Respecto de los dichos de la empresa,
que anteayer afirmó que los controles
del Ente eran poco rigurosos y superficiales y que no reconoce su jurisdicción
en el control del servicio “porque así
lo establece el contrato” de concesión,
el gerente general de este organismo,
César Albornoz, contraatacó: “Las inspecciones se efectúan semanalmente y
se labran actas. Las afirmaciones de
Metrovías se deben a una estrategia defensiva, cuando lo correcto de su parte
sería aceptar esas observaciones para
mejorar la calidad del servicio”.
Albornoz dijo que fue el Ente el que
consiguió que la empresa cumpliera
una resolución de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte
(CNRT), que la obligaba, en caso de
interrumpirse el servicio, a reintegrar
el equivalente en dinero del valor del
boleto o un nuevo Subtepass.
De la cámara digital a la computadora es fácil. De la cámara al papel es fácil.
Pero ¿qué pasa si nos reunimos con
amigos y queremos mostrar nuestras
fotos a una docena de personas? Siempre fue complicado: ésa es la verdad.
Antes había que desplegar una pantalla
(o disponer de una pared libre) y usar
un aparatoso proyector de diapositivas.
Para eso había que sacar diapositivas
–y no negativos convencionales–, por
lo que la impresión en papel se veía
afectada.
Hoy usamos un programa de presentaciones (como el PowerPoint) y
mostramos nuestras fotos en la PC.
Con Windows XP o superior y la mayoría de los programas para editar
imágenes se pueden presentar fotos
a pantalla completa sin necesidad de
crear un PowerPoint.
Como se ve, las ventajas sobre la
fotografía tradicional son varias.
Primero, no tenemos que decidir entre
un formato u otro para tener imágenes en papel, mostrarlas en pantalla o
proyectarlas sobre una pantalla. Así
es. Con un proyector digital, es decir,
uno que toma la señal de video de la
PC, las fotos pueden compartirse con
el mismo impacto que las diapositivas
de antes.
Sin embargo, los proyectores son
equipos bastante costosos, pese a que
han bajado mucho de precio, y, si se
lo piensa un poco, hay una opción
intermedia entre la pantalla de la
computadora y el proyector. La tele,
por supuesto.
Un reproductor más o menos nuevo
de DVD es capaz de leer varios formatos
de imagen, video y audio, aparte de los
discos que alquilamos en el videoclub.
Por ejemplo, se pueden reproducir
compactos de música, archivos MP3
e imágenes JPG, que es el tipo de
documento gráfico que producen las
cámaras fotográficas hogareñas.
¿Qué significa esto? Que si grabamos
nuestras fotos en un CD-R o DVD-R
(la R es por recordable, ‘grabable’)
y lo ponemos en el reproductor de
DVD, podremos ver las imágenes en
una pantalla que usualmente es más
grande que la de la PC –aunque tiene
La seguridad
“Las tareas de fiscalización en
las estaciones de la red subterránea
también dejaron al descubierto las debilidades en materia de seguridad”,
dijo Albornoz.
LA NACION, en tanto, volvió a pedir
ayer el informe de la CNRT que, según
había declarado el martes la viceministra de Trabajo, Noemí Rial, daba fe
de que los subtes están en condiciones
de funcionar y que la seguridad de
los pasajeros está garantizada. Nuevamente, los reiterados pedidos no
tuvieron respuesta.
El director de Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado (Sbase),
la empresa estatal que depende de la
ciudad, reiteró ayer que la CNRT no
realiza los controles necesarios en las
formaciones y que no sanciona a Metrovías. “La CNRT no controla nada. En
varias oportunidades, pedí a las autoridades que me mostraran los informes
sobre el estado del material rodante y
nunca me respondieron”, aseguró a LA
NACION Alejandro Franco.
Breves
PRESUNTA MALA PRAXIS
Investigan dos muertes
en un hospital cordobés
■ CORDOBA.– La muerte de dos
niños de 6 meses y de 16 meses por
presunta mala praxis en el Hospital Regional de la ciudad de Villa
Dolores, en el oeste cordobés, es
investigada por la Justicia a partir
de las denuncias de los padres de
una de las víctimas, que atribuyen
los decesos a la aplicación de un
antibiótico (cefuroxina) utilizado en cuadros de neumonopatías
agudas.
EN EL PARQUE LEZAMA
Roban dos figuras de
bronce de una estatua
■ Dos figuras de bronce que
formaban parte de la estatua Loba Romana, ubicada en el interior
del Parque Lezama, fueron robadas
en las últimas horas. El hecho fue
descubierto por empleados de
limpieza del gobierno porteño
que realizaban tareas en el parque. Las estatuas sustraídas son
dos figuras masculinas de unos
15 centímetros de alto realizadas
en bronce, que representan al Río
de la Plata y al Tíber.
MARIANA ARAUJO
Rubén Girardo denuncia que no recibió soluciones, sino arreglos mal realizados para su casa derrumbada; los constructores lo desacreditan
A seis meses de un derrumbe,
una familia sigue a la intemperie
Las víctimas se enfrentan con los constructores y éstos critican al gobierno porteño
Por Cynthia Palacios
De la Redacción de LA NACION
“Me destruyeron. Mi vida está destruida desde hace 189 días y... –después
de mirar su reloj– 13 horas.” Hace más
de seis meses que para Rubén Girardo
los minutos son eternos. El último 6
de marzo se vino abajo la mitad de su
casa. Pero alcanza con verlo para darse cuenta de que el que se derrumbó
aquella madrugada fue él.
Girardo tiene 49 años y vivía con su
esposa Gladys y sus hijos Sebastián e
Iván en la vivienda situada en Castro
Barros 1645, en Boedo. En el terreno
de al lado se construye un edificio.
Su reloj vuelve una y otra vez a la
madrugada del martes 6 de marzo.
Eran las 3.10. Es zapatero y cosía
unas botas en un cuarto del segundo
piso cuando sintió un temblor. Le
gritó a su mujer, que dormía en una
habitación abajo, y ella le explicó
qué pasaba: ya no tenían cocina
y la escalera que comunicaba con
el primer piso, donde él trabajaba,
estaba desapareciendo.
Dice que ahí comenzó el calvario. Se
había quejado al arquitecto que dirigía la obra, porque encontraba en su
casa más y más rajaduras. “Me puso
la mano en el hombro y me dijo que
no me preocupara, que iba a quedar
mejor que antes... Y mirá.” Se le corta
la voz. Enciende un cigarrillo tras otro.
Se lo ve nervioso, agobiado.
La de su casa fue la primera de una
seguidilla de derrumbes en casas
linderas a obras en construcción que
encendieron la polémica por el boom
de la edificación en la ciudad. Aunque
el profesional matriculado que solicita
el permiso de obra ante la Dirección
General de Fiscalización de Obras y
Catastro porteña es administrativa,
civil y penalmente responsable ante alguna catástrofe de este tipo, el gobierno
porteño puso en marcha dos medidas:
reforzaron los operativos de inspección
en obras ante un alerta meteorológico
y crearon un registro de excavadores
y demoledores (ver aparte).
Hace unas pocas semanas que los
Girardo decidieron volver a la casa.
“Vivimos un mes en lo de mi hermano
y otro tiempo en un departamento que
alquilé con una plata que me dieron...
Pero me quedé sin plata”, cuenta.
Girardo señala las rajaduras que
surcan las paredes. “Mirá cómo dejó
la escalera. Era de mármol, hoy sólo
queda uno original. Mirá la separación entre el techo de la cocina y la
pared. ¿Así trabaja un arquitecto?
Sale agua de abajo de la escalera y
la cloaca está tapada. ¡Y él cree que
me dejó la casa en condiciones para
vivir!”, se indigna. “La casa es vieja,
eso no lo voy a discutir, pero eso él
debería saberlo de sobra. El, que es
arquitecto. No yo, que soy zapatero. Esto quedó impune”, dispara
Girardo.
El arquitecto es Humberto Alongi,
pero se separó del proyecto y prefiere
no hablar del tema. La que sí habla
es su esposa, Silvana Acinapura,
propietaria del terreno.
“Creyó [Girardo] que con este
acontecimiento se iba a salvar. Se
manifiesta como víctima y nos
amenaza con parar la obra”, se enoja Acinapura. Y como dice que está
cansada de que se diga cualquier cosa,
muestra, nerviosa, papeles y más papeles, en los que queda asentado que
le entregaron a Girardo 12.000 pesos
y que se comprometían a arreglar los
daños en su casa. Donde se registran
las dos denuncias que hizo en la comisaría por los cascotazos que dice
que Girardo le tiró en su casa y por
los tiros que asegura que el hombre
disparó contra el sereno del predio.
“Les buscamos propiedad, pero
no quería. Sólo quería dinero. Entraron en esa casa como inquilinos,
pero no son los dueños. Que se haya
apropiado de una casa y no haya hecho mantenimiento no es problema
nuestro”, afirma Acinapura.
Mediación
Las acusaciones cruzadas parecen
que van a llegar más lejos. Una mediación tiene que lograr que ambas
partes se pongan de acuerdo en si se
cumplieron los términos que acordaron en la instancia legal después de
que se desplomó la medianera.
Las denuncias de Acinapura no sólo
alcanzan a Girardo. También llegan al
gobierno porteño. “Cada propietario
tiene la obligación de tener su inmueble con un mantenimiento adecuado.
El gobierno me obliga a pagar derecho
de construcción, pero ¿qué pasa con
esta familia? ¿Nadie se ocupa de fiscalizar que no tienen la propiedad en
condiciones?”, se preguntó.
* * *
Gladys toma una pastilla para
dormir. Y dice que su marido casi no
duerme. “Se levanta a las tres y se va
a caminar... No está bien”, confiesa bajito. Cuenta que se espantan cada vez
que truena o que escuchan un ruido
fuerte. “Cada noche, cuando vacían
los volquetes de basura, pegamos un
salto. Es una pesadilla”, agrega.
“Voy a ser abuelo. Iba a tirar la
casa por la ventana. Pero él me la
tiró abajo”, lamenta Girardo. Y esgrime una verificación del gobierno
porteño del 24 de abril, que señala
respecto de la obra en construcción
“la ausencia de taludes superficiales
para contener el empuje del suelo bajo las medianeras vecinas cortando el
terreno en forma vertical restándole,
por lo tanto, la sustentación”.
Los Alongi dicen que tampoco la pasan bien. “Esa casa era nuestro sueño
de la vivienda propia. Un loco no va a
robarnos la ilusión de tener nuestra casa, a fuerza de trabajo y de honestidad.
No podemos dejar de construir, porque
otras dos familias pusieron dinero”,
explica Acinapura. Y asegura que, en
marzo, va a estar levantada la construcción de cinco pisos. “Si [Girardo]
no nos asesina antes”, aclara. Aún no
sabe si irán a vivir ahí.
El gobierno porteño
sancionó a 179
encargados de obra
Por incumplir normas de seguridad
Casi 20 días después de lo que les
sucedió a los Girardo, en la esquina
de Pedro Goyena y Thorne, en Caballito, se desmoronó una casa junto a la
que había un pozo de siete metros de
profundidad porque iban a construir
un edificio de 11 pisos. El derrumbe
dejó a la vista una escena que parecía
salida de una casita de muñecas: una
habitación con las paredes pintadas
de rosa, una escalera, cuadros y un
crucifijo, una vieja cómoda y la cama
matrimonial, que permaneció, literalmente, al borde del abismo.
De entre los escombros fueron
retirados el sereno de la obra, con
una pierna fracturada, y el dueño
de casa, con politraumatismos. Su
esposa sufrió un shock y las dos hijas
salieron ilesas.
El que también resultó “herido”
fue el arquitecto responsable de la
obra: la Dirección General de Fiscalización de Obras y Catastro porteña
lo suspendió en el uso de la firma por
diez años. Esto significa que durante
una década, Roberto Alegre no podrá
firmar proyectos ni dirigir o ejecutar
obras en la ciudad.
“El Estado tiene distintas instancias de inspección para verificar
que la obra se desarrolle según las
condiciones de seguridad y que se
ejecute de acuerdo con los planos
presentados”, explicaron fuentes
del gobierno. En lo que va del año,
179 profesionales –arquitectos, inge-
nieros civiles y maestros mayores de
obra– fueron sancionados por incumplir las normas de seguridad en las
obras a su cargo o porque se detectaron irregularidades en ellas.
“Planificamos una serie de operativos en obras que están en estado de
pozo o excavación, ante una alerta
meteorológica, y hemos detectado
obras en situaciones similares a
las de Pedro Goyena, con procedimientos de excavación irregulares.
En esos lugares, si no se adoptaban
medidas y llovía se podría haber
producido un derrumbe”, explica el
subsecretario de Control Comunal,
Federico Peña.
El gobierno también creó un registro de excavadores y demoledores.
“Se les encomendaba una tarea tan
riesgosa como es la excavación y la
ejecución de pozos, pero no existía
el requisito de que esa empresa estuviera especializada en esta técnica”,
agrega Peña.
Al desmoronamiento en Caballito le siguieron otro en Dorrego
1653, donde se cayó parte de una
medianera pegada a una obra en
construcción, y el derrumbre de
una pared lindera a una edificación
que se levantaba en Juan B. Justo
al 2300, en Villa Crespo. Días más
tarde, en Zuviría al 800, la medianera
lindante con una obra en construcción se derrumbó en un PH con seis
departamentos.
MARIANA ARAUJO
Habitaciones todavía sin pared en la vivienda desmoronada en Caballito
ARCHIVO
El día del derrumbe, cuando la intimidad dejó de ser tal
Hay una forma de pasar
una presentación de diapositivas por el televisor
con música y efectos especiales. ¿Cómo? Simple:
creando un video
en rigor menos resolución– y que, por
otro lado, está en un lugar más confortable para reunirse con amigos.
El control remoto del DVD permitirá
avanzar, retroceder y dejar en pantalla
cualquier imagen; la forma de hacerlo
y las opciones dependen del equipo,
pero basta un vistazo al manual para
salir de dudas.
El reproductor de DVD puede conectarse a un proyector digital, con
lo que, en tal caso, obtendremos a la vez
una forma sencilla de pasar nuestras
diapositivas y un área de visualización
sorprendente.
Sin embargo, estos métodos heredan
de la clásica sesión de diapositivas el
hecho de que no hay música ni efectos
de transición demasiado elaborados.
Esto, parece, debe reservarse a la computadora, cuyo programa de presentaciones ofrece un menú mucho mayor
de pirotecnia audiovisual. En realidad,
hay una forma de pasar una presentación de diapositivas por el televisor con
música y efectos especiales. ¿Cómo?
Simple: creando un video.
Una película de cine es una serie de
fotografías que se pasan muy rápidamente (entre 24 y 30 fotogramas por
segundo). Un video digital no es diferente. Está compuesto de un número
de imágenes digitales que hacen las
veces de fotogramas. Así que es perfectamente posible tomar nuestras
fotos y crear una película con títulos,
subtítulos, epígrafes, efectos especiales,
música y comentarios hablados.
Cualquier editor de video, como
el Premiere Elements, de Adobe
(www.adobe.com), y el Studio 10, de Pinnacle (www.pinnacleal.com), permiten
importar fotos y crear muy fácilmente
un video a partir de ellas.
Aun más sencillo y automático es el
Movie Maker, que viene con Windows
XP y Vista (www.microsoft.com). Entre las aplicaciones sin cargo hay una
excelente. Se llama Slide Show Movie
Maker y está diseñada para crear una
película con efectos especiales muy
atractivos, títulos y música de fondo
con unos pocos clics. Se lo baja gratis
de www.joern-thiemann.de.
Creada la película, sólo resta grabarla en un DVD-R en un formato
que nuestro reproductor admita o,
usando los asistentes del Windows
Movie Maker, el Premiere Elements
o el Studio 10, producir un DVD con
todas las de la ley.
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