Requerimientos edilicios y legales para construir y habilitar un servicio de endoscopía digestiva ¿Es muy difícil habilitar un centro ambulatorio de endoscopía? Lograr que un centro médico (endoscópico) se encuentre habilitado es algo perfectamente asequible. A pesar de ser una práctica realizada fuera de instituciones de internación la vemos cada vez con mayor éxito. Nosotros lo hacemos como práctica regular. Para ello, y para ahorrarse mucho dinero y dolores de cabeza, hay que incorporar desde el inicio elementos clave que se exigen indefectiblemente (por ejemplo; baños para discapacitados, accesibilidad y radios de giro de sillas de ruedas, ventilación, pisos con zócalos rampantes, tabiques, puertas y cielorrasos ignífugos y recintos adecuados para residuos patogénicos). No tener este tipo de cosas en cuenta puede acarrear problemas casi constantes generando gastos permanentes. Actuar cuanto antes y en una única oportunidad, haciendo las cosas bien, siempre es la solución más económica. ¿Existen medidas concretas que resguarden al médico ante conflictos por mala praxis? Replicar la señal de video de ciertos estudios a distancia (incluso visibles desde el celular) y su archivo en servidores representa un reaseguro para el médico en caso de inconvenientes con algún paciente. Hoy día la captura de imágenes y plasmarlo en un protocolo de informe, es un valor requerido y un punto de calidad en endoscopía.Todo esto lo hemos hecho muchísimas veces con excelentes resultados. ¿Es posible “aggiornarse” a un costo razonable? La tecnología avanza rapidísimo, cada vez es menos costoso acceder a elementos que a priori parecen inalcanzables. Un claro ejemplo de esto es el software para gestión de turnos, facturación, historias clínicas, informes, captura de imágenes, etc. Hay mucha variedad y existen una amplia gama de soluciones para cada caso. Estos ítems no son solo como artículos de ¨lujo¨, son necesarios para brindar calidad y como resguardo legal. Por otro lado ya son moneda corriente elementos como acabados sanitarios de primer nivel (pisos sanitarios, guardacamillas, etc.) , iluminación de emergencia, el monitoreo con cámaras no solo para seguridad sino para el control en salas de recuperación como ahorro de personal auxiliar y esto monitoreado desde la sala de endoscopía (enfermería, endoscopista, anestesiólogo), entre otros, y todo a costos más que competitivos. ¿Desde las instalaciones hay elementos que ayuden a aumentar la rentabilidad? El costo de los equipos y su amortización hacen indispensable plantearse incorporar dispositivos de estabilización de señal y provisión autónoma de energía eléctrica a pequeña escala, que entre otras cosas permiten finalizar los estudios (y terapéutica: ej. polipectomía), afectando la rentabilidad / mala praxis. Por otro lado permitir el acceso de camillas incorporando ascensores/elevadores, previendo además sus radios de giro y anchos de paso. Todo ello impacta en la facturación y brinda seguridad en caso de necesitar trasladar y tratar a un paciente a un hospital. ¿Cuantos m2 serían necesarios para construir un centro ambulatorio? Para diseñar un centro médico ambulatorio de endoscopía digestiva hay que partir por fijar la cantidad de salas de procedimientos y consultorios. Todo ello está calculado y puesto en práctica en varios centros ambulatorios y sanatoriales. Por ejemplo: para un centro con 1 sala de estudios se necesitarían 70 m2 aprox. (contemplando recuperaciones, baños, depósitos comunes y depósitos para tubos, residuos patogénicos, recepción, sala de espera, etc.). Los metrajes por supuesto no aumentan linealmente; para 2 salas de estudios se estiman 115 m2 y para 3 salas 190 m2. Respecto a centros exclusivamente de consulta: 2 consultorios insumen 60 m2 aproximadamente, mientras que 4 requieren 95 m2. Los centros que integran estudios y consulta optimizan el uso de espacios comunes (salas de espera, recepción, depósitos, etc.), por ejemplo: para 3 consultorios y 3 salas de estudio se estiman 240 m2, aunque para un centro de este tamaño generalmente son necesarios espacios como vestuarios por sexo, comedor común, sectores gerenciales-administrativos, etc.; éstos pueden llegar a requerir hasta 60 m2 adicionales. ¿Existen valores de referencia en construcción por m2? Hoy se puede manejar un valor de preciso por m2, contemplando instalaciones de gases medicinales, electricidad y datos, sanitarios con todos los artefactos y por supuesto todo lo referido a una obra tradicional. Es importante destacar que aproximadamente el 40% del valor lo componen las instalaciones, que debido a su especificidad, hacen una gran diferencia en cuanto a la calidad a lograr. ¿En cuanto a los tamaños de las salas de estudio; hay medidas establecidas para que sean funcionales y puedan habilitarse? Para todos los espacios existen medidas mínimas funcionales y también reglamentarias, éstas últimas es fundamentales respetarlas para lograr la habilitación (entre otras cosas). A modo de referencia una sala de estudios insume entre 12 y 15 m2, aunque hay que cuidar las distancias máximas y mínimas entre los médicos, asistentes y los equipos ya que si las distancias son muy grandes la sala pierde funcionalidad, mientras que si es muy estrecha será engorroso maniobrar con la camilla y el equipamiento móvil. ¿De qué forma se pueden aprovechar mejor los espacios para tener un centro médico más funcional? Existen elementos clave para optimizar el funcionamiento de un centro médico, por ejemplo una doble circulación (pacientes separados del personal: área técnica), independencia de las áreas de consulta y estudios y reducción de metros de recorrido del instrumental, entre otros. También incluir áreas administrativas es cada vez más frecuente: esto permite que se puedan desempeñar tareas administrativas y comerciales. ¿Es posible adaptar instalaciones existentes y lograr estar a la altura de un centro médico nuevo? Acondicionar instalaciones existentes es perfectamente posible. Hay 2 esferas, lo estrictamente normativo (habilitaciones) y lo que apunta a mejorar la calidad del servicio. Cada vez cuenta más eso de “no solo ser el mejor, sino también parecerlo”. En ese sentido el packaging de las empresas de salud son sus espacios. En todos los casos cada vez se valora más que la calidad del servicio brindado concuerde con lo que el usuario percibe. ¿En ese sentido, qué elementos suman “calidad”? Se puede lograr de varias formas: en la actualidad muchas instituciones históricamente relacionadas a la solidez, experiencia y confianza, (valores que a cualquier instituto médico le interesa comunicar) fueron modernizando sus espacios, pasando de clásicos y solemnes a amigables y acogedores. Miremos las instituciones bancarias, donde sus espacios se asemejan cada vez más a un local comercial. Los centros asistenciales, principalmente los ambulatorios, no escapan a esta tendencia, siendo cada vez más frecuentes salas de espera que se parecen al lobby de un hotel, incorporando equipamiento y colores llamativos, que hace 10 años no tenían lugar. ¿Cuál es la demanda del mercado? En nuestra experiencia (por encuesta a pacientes y a prestadores de salud) responde a que los usuarios esperan que los centros médicos puedan proveer elementos muy frecuentes en otro tipo de instituciones; desde cámaras de seguridad e iluminación de emergencia hasta estrategias de cuidado del medio ambiente. Por otro lado; la medicina cada vez más ambulatoria permite que surjan más centros especializados y de menor escala, cambiando la relación de proximidad con el paciente y alentando la idea de proveer espacios más amables. ¿Qué tan viable es tener consultorios que luego se transformen en salas de estudios, o incluso incorporar distintos procedimientos dentro de la misma sala? El avance tecnológico en equipos médicos y la misma evolución del mercado hace que las empresas (principalmente las pymes) tengan que prever la flexibilidad necesaria para poder incorporar futuros usos para sus espacios, minimizando además los costos en estas adaptaciones. Es muy importante tomarlo como dato de partida previendo incluso que en un mismo recinto puedan coexistir estudios diferentes con equipos diferentes. Respecto a la instalación de gases medicinales; ¿es preferible centralizarla o trabajar con tubos? Disponer de una instalación de gases medicinales centralizada (O2, CO2, vacío, aire comprimido) evita el trafico de tubos donde transitan los pacientes (a veces en camilla). Estos tubos, además de traer consigo suciedades propias del modo que son transportados y almacenados, ocupan espacio y, debido a su manipuleo, pueden caerse en caso de no estar bien sujetos ya que son pesados y quienes los accionan son a menudo asistentes mujeres. Además las empresas proveedoras de los tubos son externas al centro médico y quienes se encargan de su recambio (transportistas) por lo general lo hacen lo más rápidamente posible y sin ningún tipo de cuidado respecto a puertas, paredes y cualquier equipamiento que se encuentre en el camino. Ubicar tubos dentro de los espacios de asistencia (espacios a la vista del paciente y/o los colegas externos) sin dudas conlleva un deterioro acelerado de las superficies. ¿En qué momento de la carrera profesional de un médico, es necesario empezar a tener en cuenta todo eso? La mayoría de las pymes en salud se formaron y crecieron gracias al trabajo y la reputación de los médicos que las originaron. Este proceso requirió que éstos tomaran cartas en asuntos de áreas muy distintas. El crecimiento de estos centros, requiere la profesionalización de sus proveedores dotando de seguridad y sustentabilidad al negocio. Trabajar con pymes presenta la gran oportunidad de acompañar a la empresa en su etapa de crecimiento y poder prever elementos que le permitirán crecer ahorrando tiempo y dinero. Arquitecto Nicolás Mannise Responsable Cero Cuadrado (+54) 11 4786 1063 - Buenos Aires (+598) (0) 99 219 554 - Montevideo administracion@cerocuadrado.com.ar www.cerocuadrado.com.ar (Autor de múltiples construcciones en sanidad de la especialidad en Argentina y Uruguay)