El caos en los estándares de redes de área personal Ignacio Berberana Fernández Murias Tecnologías ¿Qué hay después del Bluetooth? Descubra en este interesante artículo la situación de las tecnologías llamadas a sustituirlo. Descargar archivo de audio (09:09 min / 2,09 Mb) No deja de sorprender ver que en un informe sobre la futura demanda de terminales móviles publicado recientemente se indicara que uno de los principales factores que mueven a los usuarios a cambiar de teléfono es acceder a un modelo que tenga Bluetooth. Un factor que pesa más que el que disponga de cámara integrada, por ejemplo. Pero no es ese el único dato que habla de la popularidad de la que goza en estos momentos esta tecnología. En una encuesta realizada por el Bluetooth SIG, un 50% de los consumidores norteamericanos indicaron saber que existía algo que se llamaba Bluetooth [1]. En el plazo de unos pocos años, Bluetooth ha pasado de ser una tecnología denostada y repetidamente dada por muerta (por ejemplo, cuando Microsoft anunció que no incluiría su soporte en su -entonces, en 2001nuevo sistema operativo Windows XP), a vender millones de dispositivos a la semana. La extensión de la tecnología para todo tipo de aplicaciones es tal que esta misma semana se ha anunciado que el Bluetooth SIG definirá un perfil para aplicaciones médicas. Lo curioso es que, desde un punto de vista puramente técnico, tras la introducción de la versión 2.0 y de EDR, Bluetooth parece que es ya una tecnología agotada. Una tecnología llamada a ser sustituida por otras. En teoría debería ser así a no muy corto plazo. El problema es que las denominadas tecnologías de redes de área personal inalámbricas (o WPAN) sustitutivas están atravesando un momento especialmente confuso. Actualmente, el desarrollo de este tipo de redes se articula en torno a dos líneas que, de alguna forma, divergen de lo que proponía Bluetooth. En un extremo están las redes de alta velocidad, basadas en la utilización de la tecnología Ultra Wide Band (UWB), que permite reutilizar el espectro asignado a otras aplicaciones y que soporta tasas binarias de entre 100 Mbit/s y 1 Gbit/s. En el otro, redes de menor tasa binaria y mayor autonomía, capaces de formar estructuras interconectadas con gran número de nodos y capaz de operar de forma autónoma. En el caso de las WPAN de alta velocidad, el panorama no podía ser más confuso. Después de que IEEE certificará en enero pasado con la disolución del grupo '802.15.3a' su fracaso en el intento de establecer un estándar único para las capas física y de control de acceso al medio (MAC) de estas redes, parecía que se habían formado dos grupos que iban a competir en el mercado. Se trataba de MBOA, que agrupaba a la mayor parte de las principales empresas de microeléctrónica e informática, entre las que están Intel, Nokia , Microsoft o Sony, y del UWB Forum, liderado por Freescale/Motorola, Siemens y Time Domain (una de las empresas pioneras de la tecnología). Unos meses antes, MBOA se había fusionado con el WiMedia Forum, que en un principio pretendía definir una capa de control de acceso al medio que permitiera acomodar ambas capas físicas. WiMedia propone una solución denominada OFDM multibanda (MB-OFDM), que, en principio, parece que tiene menores prestaciones que la del UWB Forum, pero que facilita la adaptación a las distintas máscaras de emisión (que limitan la potencia a la que se puede emitir). Esta versión de UWB ha sido estandarizada por Ecma como ECMA-368 y ECMA-369 en diciembre de 2005, pero de momento solo aplica a los Estados Unidos. Por su parte, el UWB Forum soporta dos capas físicas, UWB de secuencia directa (DS-UWB) y CWave, promovida por una empresa llamada Pulse~Link. No es este el lugar para entrar en los detalles técnicos de cada una de ellas; baste señalar que son incompatibles entre sí [2]. Por otro lado, mientras que en un principio parecía que la principal aplicación de este tipo de redes sería la interconexión inalámbrica entre elementos de una red doméstica (por ejemplo, entre un reproductor de vídeo digital y un televisor), ahora parece que el objetivo básico es convertir esta tecnología en la base de una versión inalámbrica de la interfaz serie USB. Así, dos iniciativas, Certified Wireless USB [3] y Cable-Free USB, asociadas a WiMedia y UWB Forum, pugnan por sacar al mercado los primeros productos (Cable-Free USB ya ha presentado los primeros productos, fabricados por Belkin con tecnología de Freescale). Y en esto, que Motorola y Freescale, los principales impulsores del UWB Forum, decide abandonar el mismo. Aparentemente, porque los requisitos de Cable-Free USB no permitían progresar en el desarrollo de productos con la rapidez deseada. La esperanza de Freescale es poder lanzar productos al mercado antes que nadie y convertirse en un estándar de facto. En el caso de las redes de baja velocidad, la tecnología dominante es el estándar conocido como ZigBee (basado en IEEE 802.15.4), cuyos principales puntos fuertes son el reducido consumo de energía (puede operar durante meses sin necesidad de recargar baterías) y la capacidad de formar redes malladas con gran número de nodos. La ZigBee Alliance está intentando evitar los problemas que plagaron el inicio de las operaciones de Bluetooth, donde los conflictos de interoperabilidad entre aplicaciones de distintos fabricantes no permitían un funcionamiento correcto de los servicios. Es cierto que ZigBee está tardando más en llegar a los consumidores de lo que en principio se preveía, pero podría considerarse que bien empleado estaría este retraso si evita problemas como los que padeció Bluetooth en sus inicios. Pero no es así. Sea por impaciencia, sea porque consideran la alternativa una solución mejor desde el punto de vista técnico, lo cierto es que varias empresas han adoptado para algunas de las aplicaciones previstas de ZigBee soluciones propietarias. Es el caso, por ejemplo, de Philips con su tecnología propietaria Ensation (que ha renunciado a estandarizar) o de Intel, que ha decidido apoyar una tecnología semipropietaria denominada Z-Wave de cara a incorporarla a sus plataformas para el soporte de redes domésticas. Z-Wave, desarrollada por una empresa danesa llamada Zensys y apoyada por la Z-Wave Alliance, permite una tasa binaria de solo 10 kbit/s, frente a los 250 kbit/s de Zigbee. Los motivos de Intel son de momento un misterio. Por su parte, el Bluetooth SIG ha optado por adoptar la capa física de la MBOA/WiMedia Alliance, la versión OFDM multibanda de UWB, pero con algunas variantes. Por un lado, ha reducido el ancho de banda de operación respecto de lo que permite la FCC norteamericana, de cara a evitar problemas regulatorios en otros países (esto conlleva una disminución de las prestaciones), y por otro se plantea mantener los mismos protocolos y perfiles en capas superiores que actualmente se están utilizando. Lo cierto es que todo esta controversia viene motivada por tres causas fundamentales. Por un lado, la utilización de WiFi para aplicaciones que hace apenas unos años se consideraban propias de una red de área personal de banda ancha está obligando a reconsiderar cuál puede ser la utilidad de estas. En las últimas semanas se ha anunciado por parte de varios fabricantes la integración de WiFi con tecnología de antenas inteligentes (de Ruckus Wireless) o sistemas multiantena MIMO (de Airgo) en varios descodificadores de TV. WiFi goza de unas economías de escala contra las que, de momento, UWB no puede competir. Por otro lado, sigue sin aclararse la situación regulatoria en lo que se refiere al uso del espectro por parte de esta tecnología, con distintas máscaras de emisión para Estados Unidos, Japón y Europa. Y, por último, como suele ocurrir, en las primeras implementaciones se ha visto que las prestaciones de UWB y su coste han sido inferiores y superior (respectivamente) a lo que en un principio se preveía. Para concluir diremos que en este contexto, USB inalámbrico o (lo que algunos llamarían) Bluetooth 'con esteroides' son opciones casi de emergencia, y que UWB puede encontrar un nuevo nicho de aplicación si consigue alcanzar velocidades binarias, aunque sea a distancias muy reducidas, que permitan soportar las nuevas interfaces de dispositivos electrónicos que requieren capacidades de Gbit/s, como DVI o HDMI. En cuanto a ZigBee, el panorama es, si cabe, todavía más incierto. Ignacio Berberana Fernández Murias. Telefónica I+D para Telefónica Móviles España [1] En Estados Unidos Bluetooth se ha considerado tradicionalmente como un ejemplo de tecnología 'europea', como GSM. [2] En el WiMedia Form también participa una empresa llamada Artimi que emplea modulación por posición del pulso (PPM, que también se emplea, por ejemplo, en las redes WLAN de infrarrojos), distinta a todas las otras propuestas técnicas. [3] Certified Wireless USB es el programa del USB-IF (Implementators Forum, que es el que define la versión cableada de la interfaz) para certificar la versión inalámbrica de USB. Descargar archivo de audio (09:09 min / 2,09 Mb)