El ININ hoy Tecnología de implantación de iones en materiales inmersos en un PLASMA Por investigadores del Laboratorio de Física de Plasmas * (rlc@nuclear.inin.mx) La implantación de iones basada en el uso de aceleradores lineales, es una tecnología muy desarrollada que se usa para la modificación de las propiedades de los materiales en su parte superficial. Una limitación fundamental al uso más amplio de la implantación de iones mediante esta tecnología la constituyen las grandes áreas requeridas para implementar las aplicaciones industriales y el tiempo prolongado en el que se lleva a cabo el proceso, lo cual origina que esta técnica resulte costosa y compleja. Sin embargo, una nueva tecnología alternativa basada en el tratamiento de materiales mediante la implantación de iones por inmersión en plasma, PIII por sus siglas en inglés (Plasma Immersion Ion Implantation), supera varias de las limitaciones de los aceleradores aplicando una alta densidad de iones de manera simple, rápida, eficiente y económica. Inicialmente las investigaciones en PIII se centraron en la implantación de iones de nitrógeno para mejorar la resistencia al desgaste y corrosión de los metales. La tecnología PIII es esencialmente un proceso pulsado del cual se hará aquí una breve y sencilla descripción; la evolución durante la aplicación de un pulso de voltaje negativo, se describe en la Figura 1. La cubierta o capa de plasma que normalmente existe alrededor de un conductor sin voltaje aplicado y que se caracteriza por un exceso de electrones, se altera drásticamente durante la aplicación del pulso y puede dejar de existir. Inicialmente (t = 0), el plasma se encuentra en condiciones de casi neutralidad (Figura 1.a), no así la cubierta o capa de plasma que, como se dijo, tiene un exceso de carga negativa. Durante de la aplicación de un pulso intenso de voltaje negativo a la pieza de trabajo, con duración de varios microsegundos como es el caso en PIII, la cubierta o capa se altera drásticamente; la pequeña masa de los electrones hace que éstos sean los primeros en responder al pulso en un tiempo muy corto, siendo expulsados de una región de plasma en la vecindad de la superficie de la pieza de trabajo. Durante este proceso, queda descubierta una “matriz” de iones del plasma (Figura 1.b). En esta fase inicial de corta duración los iones permanecen casi inmóviles a causa de su gran masa; entonces, todavía bajo la acción del pulso, un número adicional de electrones más lejanos son rechaza- X Contacto Nuclear 11 dos, de modo que en el límite exterior de la “matriz”, el potencial negativo de la pieza de trabajo está prácticamente bloqueado (“apantallado”) debido al efecto de pantalla que ejercen los iones sobre este potencial. Es decir, a grandes distancias de la pieza de trabajo (varios centímetros dependiendo del tamaño del pulso), el plasma permanece prácticamente inalterado excepto por la generación de ondas de plasma debido a la aplicación del pulso. El efecto producido en la vecindad de la pieza de trabajo por la aplicación del pulso es que aparece una región alrededor de ésta con un gradiente de densidad de carga positiva, un gradiente de potencial y por lo tanto un campo eléctrico que actuará sobre los iones para impulsarlos hacia la muestra. Después de formada la “matriz” de iones, se establece el flujo de la corriente iónica, cuya magnitud es casi constante (Figura 1.c). Cuando los iones son implantados, la muestra emite electrones adicionales en dependencia de la función de trabajo del material y de la energía de los iones. Por ello, (a) Plasma uniforme (b) Pieza de trabajo (c) “Matriz de iones” (d) Figura 1. Tiempo de evolución de la cubierta de plasma durante el pulso PIII: (a) t=0 condiciones iniciales; (b) t»5 ns repulsión de electrones cerca de la pieza de trabajo; (c) t»1 ms efecto de la implantación sobre la matriz de iones a través de la cubierta (d) t>2 ms cubierta expandida por efecto del pulso de alto voltaje. 1 2 Contacto Nuclear se fuerza la cubierta a extenderse a relativamente mayores distancias de la pieza de trabajo y descubrir más iones (Figura 1.d). El ancho del pulso y la densidad de iones del plasma se ajustan para que los iones de la capa sean introducidos en la pieza de trabajo, permanentemente inmersa en el plasma. Durante esta parte del proceso (Figura 1.c) la corriente está limitada por disponibilidad de iones en la “matriz”. El plasma actúa como una capa resistente a la energía de alimentación pulsada de alto voltaje. Después de varios microsegundos y al final de la duración del pulso, los iones de la “matriz” son acelerados e impelidos por el campo eléctrico mencionado hacia la superficie de la pieza de trabajo, de tal manera que se depositan en ella regresando el sistema a un estado similar al que prevalecía antes del inicio del proceso descrito (t = 0). El proceso experimental de la tecnología PIII se ilustra en la Figura 2. Un pulso negativo de alto voltaje típicamente de entre 5 y 300 kV y una duración de entre 1 y 200 ms a una frecuencia entre 10-2000 Hz se aplica a una pieza de trabajo inmersa en un plasma. Los iones del plasma, acelerados por el potencial eléctrico que se genera como resultado de la acción del pulso, son implantados dentro de la superficie de la pieza de trabajo. Debido a que estos iones son acelerados desde todas direcciones, penetran simultáneamente en toda la superficie de la pieza de trabajo expuesta. Con estas condiciones se logra que la tecnología PIII ofrezca ventajas sobre las técnicas convencionales y que los tiempos de implante sean pequeños comparados con los de las técnicas de haces de iones de altas corrientes. X Los resultados de las investigaciones en los campos tribológicos1 y de corrosión han mostrado que la tecnología PIII es muy prometedora. A partir de las investigaciones en este campo, se han propuesto estrategias para combinar la implantación de iones con depósitos (PIII&D). El avance en esta área es continuo; se investigan nuevos conceptos y se diseñan nuevas fuentes de plasma, por ejemplo, para la nitruración de titanio y carbono. Las principales aplicaciones de la tecnología PIII en las que actualmente se trabaja en el mundo son: a) implantación y depósito de iones metálicos; b) implantación en piezas con cavidades; c) industria de los semiconductores; y d) tratamiento de polímeros. El equipo de trabajo del Laboratorio de Física de Plasmas* está integrado por los investigadores Antonio Mercado Cabrera, Arturo Eduardo Muñoz Castro, Esteban Chávez Alarcón, Óscar Gerardo Godoy Cabrera, Raúl Valencia Alvarado, Régulo López Callejas y Samuel R. Barocio, así como por los técnicos Maria Teresa Torres Martínez e Isaías Contreras Villa. Las actividades del grupo en esta línea de investigación, han aportando un desarrollo tecnológico de innovación por medio del cual se lleva a cabo la implantación de iones en piezas de trabajo de dos y tres dimensiones, diseñando y construyendo la instrumentación faltante, ya que se aprovecha totalmente la infraestructura de la máquina del Tokamak Novillo. El proceso PIII se está realizando en: una cámara toroidal cuyas dimensiones son: radio mayor 23 cm, radio menor 8 cm; y b) Una cámara cilíndrica cuyo volumen es de 30 litros. Las fuentes de plasma utilizadas Cámara de vacío + + + + + Fuente de alto voltaje pulsada + + + Diferentes sistemas de diagnóstico Pieza de trabajo + Aislamiento eléctrico + + + + A la bomba de vacío + + + + Figura 2. Descripción esquemática del proceso de Implantación Iónica por Inmersión en Plasma (PIII) son: a) Un generador de RF de 13.56 MHz y una fuente de corriente directa de 1 kW. Para la polarización de la pieza de trabajo se utiliza un generador de pulsos de hasta 15 kV con ancho variable de 2 a 200 ms y razón de repetición de 50 a 2000 Hz. Los sistemas de diagnóstico del plasma son sondas eléctricas, sondas magnéticas, espectroscopía óptica de emisión y análisis de gases residuales. La caracterización de las piezas de trabajo se realiza principalmente mediante microdureza Vickers y Knoop, perfilometría, microscopía electrónica de barrido, difracción de rayos X y pruebas electroquímicas de corrosión. La palabra tribología proviene del griego tribós = frotamiento y lógos = tratado. Es decir, se refiere al estudio de la fricción: la ciencia y la tecnología de la interacción de superficies con movimientos relativos, que se manifiesta como fricción y que, por lo tanto, está relacionada con el desgaste mecánico. 1 Contacto Nuclear 13